CRIMI 💀👣👴🏻🎩

victima como objeto de estudio

(como 3 cuadraditos pienso yo) con fotos

. El enfoque de estudio previo se centraba exclusivamente en el victimario, dejando de lado

la consideración detallada de las víctimas. Sin embargo, en este giro histórico, se reconoce
la necesidad de expandir la perspectiva para abordar de manera integral el impacto del
nuevo sistema procesal penal acusatorio en las víctimas. La atención ya no se limita solo a
la personalidad y características de la víctima, sino que se amplía para incluir su relación
con el proceso judicial y el fenómeno de victimización.

Este cambio implica una revisión a varios niveles. En primer lugar, a nivel individual, se
examina la víctima en sí misma. En segundo lugar, a nivel conductual, se analiza el proceso
de victimización y su interacción con la conducta criminal, si la
hubiera. Finalmente, a nivel de reparación del daño, se considera la necesidad de abordar
las consecuencias y buscar maneras efectivas de compensación.

Este giro histórico reconoce que comprender el sistema penal acusatorio implica no solo
estudiar al victimario, sino también entender a fondo la experiencia de las víctimas y las
complejidades que rodean el fenómeno victimal en su conjunto. De esta manera, se busca
lograr un análisis más completo y equilibrado de la dinámica judicial y sus efectos en todas
las partes involucradas.

interés criminológico por la victima

(another)

La Victimología surge como respuesta al creciente interés de la Criminología por la víctima

del delito, buscando establecerse como una ciencia autónoma. Inicialmente, desarrolla
tipologías de víctimas, abordando cuestiones como la propensión a convertirse en víctimas
y las relaciones entre delincuente y víctima. En una fase más avanzada, se centra en los
procesos de victimización, analizando por qué algunos individuos son más propensos a ser
víctimas. También explora la "victimización secundaria" causada por la Administración de
Justicia en su respuesta a las víctimas. La Victimología se posiciona como un instrumento
esencial para comprender la interacción delincuente-víctima y la reacción social frente al
delito, destacando las "encuestas de victimización" como una herramienta fundamental en
la moderna Criminología.

encuestas de victimización

Las encuestas de victimización tienen sus antecedentes en Aarhus, 1730, donde se

investigaron quejas de robos. En 1972, EE. UU. realizó una Encuesta Nacional sobre
Victimización Delictiva, extendida posteriormente. Estas encuestas, aunque divergentes,
revelan aspectos como la falta de denuncias, motivadas por desconfianza en la justicia o
para reclamar indemnizaciones del seguro. Factores como el estilo de vida, relaciones
conocidas con el agresor y condiciones socioeconómicas influyen en la victimización. Las
encuestas proporcionan percepciones, pero su interpretación varía según contextos
socioculturales. Aunque revelan la cifra negra de la criminalidad, también pueden exagerar
la inseguridad, desencadenando respuestas represivas y generando un círculo vicioso de
medidas defensivas.

ALGUNAS VICTIMAS:

menores de edad (a)

El maltrato infantil, estrechamente vinculado al de la mujer, merece un estudio victimológico

específico. Se da en el ámbito familiar, a menudo delante de los propios hijos. Los menores
pueden ser víctimas directas de maltratos, como abusos sexuales, violación o prácticas
culturales dañinas. Los abusos sexuales también ocurren en instituciones educativas, como
internados, donde la falta de intimidad contribuye a la vulnerabilidad del menor. El estudio
criminológico aborda los trastornos de personalidad de los perpetradores. La cifra negra de
esta criminalidad, hasta hace poco encubierta, refleja la complicidad y encubrimiento de
quienes deberían prevenir y denunciar estos hechos, generando escándalos recientes que
involucran a instituciones religiosas en diversos países.

MUJERES (b)

LAS MUJERES

La violencia doméstica, especialmente hacia las mujeres, se analiza desde perspectivas

criminológicas y victimológicas. Factores individuales, psicológicos y sociales, como la
personalidad violenta del maltratador, educación machista y problemas económicos, inciden
en esta problemática. La mujer maltratada puede haber sido influenciada por creencias
culturales que normalizan el maltrato. La ineficacia de los servicios sociales y judiciales,
junto con la falta de denuncias, contribuye al problema. Además, la sociedad a menudo ha
silenciado o tolerado estos hechos, considerándolos asuntos privados. La violencia contra la
mujer no se limita a la pareja, extendiéndose a grupos específicos en diversas situaciones,
como prostitutas o mujeres en contextos de guerra. Estos casos extremos requieren un
enfoque criminológico específico.

C (VICTIMAS DE VIOLENCIA POLÍTICA )

yVICTIMAS DE VIOLENCIA POLÍTICA

Las víctimas de violencia política, ya sea en regímenes autoritarios o en períodos de guerra
civil, presentan un desafío particular en victimología. Los procesos legales para condenar a
los responsables de violaciones de derechos humanos, como ocurrió en Chile o Argentina,
a menudo ocurren muchos años después de los hechos, siendo simbólicos y careciendo de
valor práctico. Las víctimas buscan satisfacción de la justicia y solidaridad, pero algunos
consideran la condena como una función preventiva dudosa. El tratamiento de crímenes
masivos en guerras civiles es complejo, y la justicia internacional ha perseguido a líderes,
pero las leyes de punto final o amnistías generales han prevalecido en algunos casos. El
modelo de "Justicia de Transición" se ha ensayado, variando desde castigos hasta perdón y
olvido. El enjuiciamiento de graves delitos, como el genocidio, debería reservarse para un
Tribunal Penal Internacional. Además, las víctimas de violencia policial, ya sea en represión
de la delincuencia común o en la lucha antiterrorista, deben tener reconocidos sus derechos
y recibir indemnizaciones, evitando la impunidad de los responsables.

NEUTRALIZACIÓN DE LA VICTIMA (aparte)

El Derecho penal, parte del Derecho público, no puede ser modificado por las personas
afectadas. A lo largo de la historia, la concepción de la justicia penal ha evolucionado desde
permitir a la víctima aplicar la sanción hasta la actual neutralización de la víctima en el
proceso penal moderno. Aunque algunas prácticas, como el duelo o ajustes de cuentas, han
perdurado, el Derecho penal contemporáneo se distancia de la venganza privada. La pena
actual busca la neutralización del delincuente más que la satisfacción de la víctima. La
transición hacia este enfoque fue gradual, reemplazando la venganza con imposición de
multas y prestaciones expiatorias. Aunque en casos excepcionales como la legítima
defensa, la víctima aún puede tomar medidas, la ley limita estas acciones. Recientemente,
ha surgido un movimiento para dar más protagonismo a las víctimas, pero esta tendencia
plantea riesgos de decisiones simbólicas desconectadas del objetivo de justicia. A pesar de
estos cambios, el Derecho penal sigue orientado principalmente hacia el delincuente,
buscando la reinserción social y la humanización del sistema penal.

Tendencia Político-Criminal: Enfoque en la Protección de la Víctima

cambios clave:

Ampliación Protectora: Busca extender la defensa a las víctimas, a veces a costa de limitar
garantías y derechos de los imputados.
Medios de Comunicación: Campañas "ley y orden" abogan por una actuación policial más
rigurosa, mostrando tolerancia cero incluso para delitos menores.
Expansión Delictiva: Penalización de conductas previas al delito, ampliando límites
tradicionales del Derecho penal.
Participación de la Víctima: Mayor protagonismo en el proceso penal, con precauciones
para no comprometer la esencia del mismo.
Equilibrio Crucial: Buscamos proteger a la víctima sin sacrificar derechos fundamentales del
acusado. Encuentra el justo equilibrio en la ley y la justicia.
aparte DELITOS SIN VICTIMA

La evolución del papel de la víctima en los delitos sin víctima sugiere una política de
criminalización en sectores como medio ambiente, salud pública y responsabilidad del
producto. Se destaca la tendencia a diluir la figura de la víctima en la sociedad, generando
una victimización difusa. Delitos fiscales, económicos y ambientales muestran una
generalización de la victimización, influyendo en la imagen y actitud hacia estos casos. La
Criminología busca adaptarse a estos cambios, reconociendo la falta de suficiencia en la
criminalización de infracciones con víctima difusa, evidenciando un cambio de actitud hacia
nuevos tipos de delitos.

VICTIMODOGMATICA

La "Victimodogmática" en la Dogmática jurídico-penal busca una interpretación restrictiva de

los tipos penales, excluyendo o atenuando la responsabilidad del autor cuando la víctima
contribuye al desencadenamiento del delito con su conducta. Se ejemplifica con casos
como el "timo de la estampita", donde la ambición de la víctima puede limitar la
consideración de estafa. Además, se aborda la interpretación en casos de legítima defensa,
destacando la complejidad cuando la víctima contribuye al hecho de manera provocativa o
en situaciones de pareja. Estas restricciones en la protección jurídica de la víctima no deben
generalizarse, generando desafíos dogmáticos en la interpretación del consentimiento y la
función protectora del Derecho penal.