MEDIO AMBIENTE
NADIE LA PARA
DEFORESTACIÓN
DE LA AMAZONÍA
Fue el 11 de abril del año 2022 cuando el Ministerio de Agricultura
emitió la RM 0141-2022 en la que pre publicaba el proyecto del nuevo
reglamento ambiental agrario cuando se encendieron las alarmas en el
> POR: ANDRÉS
ESCUDERO agro y sobre todo en la Amazonía.
E
ste documento dispone la realización de es-
tudios de suelos para determinar el llamado
“uso mayor de suelos” que, para el caso de
la Amazonía, es forestal por lo general. Y al
determinar que es forestal, debería abandonarse
toda actividad agrícola. Además, dispone que el
administrado debe realizar estudios de impacto
ambiental y hasta planes de cierre.
Hay 12 millones de hectáreas deforestadas en
la Amazonía peruana, de las cuales se explotan
2 millones, y de ella 700 mil son cultivos indus-
triales como el café, el cacao o la palma aceitera
y lo más probable es que esos dos millones de
hectáreas terminen clasificadas como de voca-
ción forestal, es decir estarían impedidas de hacer
agricultura.
ANTECEDENTES:
1. El 22 de julio del 2011 se publica la ley Fo-
restal y de Fauna Silvestre, la misma que dis-
pone en su artículo 37 que está prohibido el
cambio de uso para tierras cuyo “uso mayor
sea de vocación forestal”, y así también en su
artículo 38 dispone que las tierras de vocación
agrícola que tengas cobertura boscosa deben
conservar un 30% de esta.
2. El 25 de septiembre del 2015 se publica el
Decreto Legislativo 1237 que entre otras co-
sas modifica el artículo 310 del código penal
disponiendo la prisión efectiva para quien sin
los permisos correspondientes queme o tale el
bosque, sea natural o de plantación, incluso
así sea su propia plantación.
3. El 24 de abril del 2022 se publica el Decreto
Supremo Nº 005-2022-MIDAGRI que aprueba
el Reglamento de Clasificación de Tierras por su
Capacidad de Uso Mayor.
Esta metodología es cuestionable, porque asigna
un uso mayor de los suelos por sus características
edáficas, como si estas no se pudieran modificar
para darle uso agrícola o ganadero al suelo.
El uso de los suelos debería estar asociado a una
estrategia de desarrollo, que contemple la seguridad
alimentaria y la agricultura como medio de vida de
la población rural.
EL PROBLEMA:
De esta forma, cuando se publica el proyecto de
reglamento ambiental agrario, los productores de la
Amazonía peruana, se dan cuenta que los suelos en
los que cultivan son de aptitud forestal y por tanto
deben ser abandonados por la agricultura y ellos son Bosque Amazónico…
en la práctica delincuentes al haberlos talado y se-
guir cultivándolos.
Se suponía que el Estado peruano debió clasifi-
car los suelos amazónicos, y no titularlos si eran de
aptitud forestal. Sin embargo, solo se ha clasificado
el 20% y ya se han titulado 11 millones de hectáreas
en la Amazonía peruana. Ahora bien, hay 12 millo-
nes de hectáreas deforestadas de las cuales solo se
cultivan 2 millones, y, sin embargo, se sigue defores-
tando para hacer agricultura.
Con estas cuatro normas vigentes; la Ley Fores-
tal, Los delitos ambientales, el Reglamento de Uso
Mayor de Suelo, y el Reglamento Ambiental Agrario
los agricultores de la selva peruana tendrían que ser
sancionados, incluso penalmente.
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MEDIO AMBIENTE
No podrán hacer cambio de uso ya que esto no
está permitido, no podrían proponer un instrumento
ambiental para formalizar sus operaciones, y final-
mente las cosechas de café, cacao y otros productos
no podrán exportarse.
Hay más de 459 mil productores en los 2 mi-
llones de hectáreas cultivadas, que producen pan
llevar en alrededor de 1.3 millones de hectáreas y
cultivos industriales en las otras 700 mil hectáreas.
Sembríos de café… Al reprimirlos lo más probable es que unos se su-
merjan en la selva para poder sobrevivir, otros se so-
metan a alguna forma de corrupción o mafia como
pasa con el oro o la madera que sigue fluyendo por
más normas que se han puesto.
Y finalmente, la inversión en café, palma, sacha
inchi o cacao como la del resto de cultivos industria-
les se retirará al no poder hacer uso de estos insumos,
dejando sin empleo a millones de familias en el Perú.
...Hay más
de 459 mil ¿ESTAS MEDIDAS DETENDRÁN LA DEFORESTACIÓN?
productores en No, la respuesta es no. Decirle a un poblador,
los 2 millones con título de propiedad sobre la tierra, que el uso que
de hectáreas hace está prohibido genera una enorme inseguridad
cultivadas, jurídica, que, en lugar de apuntar al uso eficiente de
que producen la tierra, impulsa el abandono, y espanta la inversión.
pan llevar en A partir de estas medidas se van a generar con-
alrededor de flictos en las principales cuencas agrarias de la selva
peruana, promoviendo desgobierno.
1.3 millones
No me imagino que los agricultores del VRAEM,
de hectáreas de la Selva Central, de Pucallpa o San Martín se
y cultivos van a someter tan fácilmente a estas ampulosas re-
industriales en gulaciones, por el contrario, el efecto puede ser de-
las otras 700 mil vastador para lo que ya se ha avanzado en materia
hectáreas... ambiental en el Perú.
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Tala ilegal de madera…
¿QUÉ HACER?
1. Simplificación administrativa:
Los agricultores necesitan normas simples y
claras. Pretender que enormes “mamotretos” sean
aplicados al agro no tiene sentido. Las normas no
pueden estar para cumplir los sueños de poder de
la burocracia que quiere regularlo todo, sino para
facilitar la vida al administrado.
2. Modificación del modelo represor:
Disponer castigos cada vez más viles como
multas y prisiones sobre personas que muchas
veces no tiene que comer, es un acto despia-
dado, que solo genera odio, y promueve así la
conflictividad. El Estado debe actuar como pro-
motor.
3. Formalización:
Tomando lo dicho últimamente por Marc J.
Dourojeanni, hay que dar títulos sobre las tierras
deforestadas a todos, así sean invasores. Y auto-
rizar el uso agrícola y pecuario de la tierra defo-
restada, para que sean usadas eficientemente, eso
creará un mercado de tierra amplio y sano en la
Amazonía Peruana, reduciendo la necesidad de
nuevas deforestaciones.
4. Apoyo, tecnología y asistencia técnica:
El crecimiento demográfico en la selva perua-
na ha dado al traste con una reducción de los ani-
males y frutos que se pueden obtener del bosque,
lo que ha puesto en riesgo la subsistencia de las
comunidades nativas y centros poblados. De esta
forma resultan presa fácil del narcotráfico y otras
actividades ilegales. Sin embargo, pequeños hatos
ganaderos o plantaciones puede dar alimentación
y empleo a buena parte de la población.