NOVENA AL NIÑO DIOS

DÍA PRIMERO

Entrada

Canto

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo

Acto penitencial

Señor mío y Dios mío,

reconozco que soy pecador
he pecado contra ti y contra mi prójimo.
Me arrepiento del mal que he hecho
porque me hice indigno de tu amor
Y merecedor del castigo
Confió en tu misericordia
porque tu Hijo murió por mí en la cruz.
Te pido que me perdones
e imploro tu gracia
para cumplir mi propósito
de no ofenderte más. Amén
Oración
Dios y Salvador nuestro,
que naciste entre nosotros
para salvarnos,
con tu venida,
ayúdanos a que en estos días
vivamos de acuerdo por tu voluntad,
para que venga a nosotros
tu reino de santidad y justicia,
de amor y de paz. Amén.

Liturgia de la Palabra

Escuchemos la Palabra de nuestro Dios.

Lectura del Libro del Profeta (Isaías 9 1-5)

El pueblo que caminaba en las tinieblas ha visto una gran luz,

sobre los que habitaban en el país de la oscuridad ha brillado una
luz.
Tú has multiplicado la alegría, has acrecentado el gozo, ellos se
regocijan en tu presencia, como se goza en la cosecha, como
cuando reina la alegría por el reparto del botín.
Porque el yugo que pesaba sobre él, la barra sobre su espalda y el
palo de su carcelero, todo eso lo has destrozado como en el día
de Madian
Porque todas las botas usadas en la refriega y las túnicas
manchadas de sangre, serán presa de las llamas, pasto del fuego.
Porque un niño nos ha nacido, un hijo se nos ha dado. La
soberanía reposa sobre sus hombres y se le da por nombre:
“Consejero maravilloso. Dios fuerte. Padre para siempre.
Príncipe de la Paz”

Palabra de Dios
Te alabamos, Señor.
Reflexion
La palabra de Dios nos llama a la esperanza, anuncia la venida
del futuro Rey, el Emmanuel (Dios-con-nosotros), como un niño.
Este Niño traerá la luz, la vida, la dicha, la justicia de Dios Padre
que nos hará hijos suyos y hermanos con todos, para construir la
paz, donde Dios Padre y, al mismo tiempo, tarea de los
cristianos.
Cristo es esa luz para el mundo; nos saca de las tinieblas del
pecado y de la muerte, y nos de la libertad

Pensemos

- ¿De qué esclavitud debemos ser liberados?

- ¿Qué pecados y pasiones nos tienen encadenados?
Lo meditamos en silencio

Preces

A cada intención respondemos: ¡Ven, Señor Jesús, ven!

-Señor Jesús, necesitamos tu paz y tu justicia

-Señor Jesús, necesitamos tu luz y tu gracia
-Señor Jesús, te necesitamos para que nuestras familias crezcan
en santidad y unidad.
Señor Jesús, te necesitamos para que en nuestra patria se busque
la generosidad, la justicia y la paz
Se pueden añadir otras intenciones
Padrenuestro Ave María Gloria

Oración final (para todos los días)

Te rogamos, Señor
que escuches nuestras suplicas
y que, por la gracia de tu venida,
ilumines nuestras mentes y corazones,
perdones nuestros pecados
y reines en nuestros corazones
y en nuestra patria
asi como reinas en la gloria
por los siglos de los siglos. Amén

Canto

DÍA SEGUNDO

Entrada
Todo como el día primero de novena

Liturgia de la Palabra

Escuchemos la Palabra de maestro Dios

Lectura del Libro del Profeta Isaías (11,1-5)

Saldrá una rama del tronco de Jesé (padre de David) y un retoño

brotará de sus raíces Sobre el reposará el espíritu del Señor:
espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de
fortaleza, espíritu de ciencia y de temor del Señor -y lo inspirará
el temor del Señor.
El no juzgará según las apariencias ni decidirá por la que oiga
decir: juzgará con justicia los débiles y decidirá con rectitud para
los pobres del país, herira al violento con la vara de su boca y
con el soplo de sus labios hará morir al malvado. La justicia
ceñira su cintura y la fidelidad ceñira sus caderas.

Palabra de Dios
Te alabamos, Señor

Reflexión

Cristo, el Mesias anunciado, viene como Rey, ya que juzgara el

corazón del hombre y no las apariencias. Viene a establecer la
justicia, por eso tiene en si el
Espíritu de Dios. Ese mismo Espíritu, Cristo lo comunica a la
Iglesia, a cada cristiano

Pensemos
- ¿Me dejo llevar por las apariencias?
- ¿Busco la justicia?
- ¿Respeto a los débiles, a los pobres?
- ¿Los defiendo?
Lo meditamos en silencio

Preces

A cada intención respondemos: ¡Ven, Señor Jesús, ven!

-necesitamos el Espíritu de sabiduría e inteligencia.
-Necesitamos el Espíritu de prudencia y fortaleza.
-Necesitamos el Espíritu de temor y conocimiento de Dios.
Se pueden añadir otras intenciones.
Padrenuestro, Ave María y Gloria
Oración final (como el día primero)
Canto
DÍA TERCERO
Entrada
Todo como el día primero de la novena

Liturgia de la Palabra
Escuchemos la Palabra de nuestro Dios

Lectura del Libro del Profeta Miqueas (5 1-4)

Y tú, Belén Efratá, tan pequeña entre los clanes de Judá, de ti me

nacerá el que debe gobernar a Israel: sus orígenes se remontan al
pasado, a un tiempo inmemorial. Por eso, el Señor los
abandonara hasta el momento en que dé a luz la que debe ser
madre, entonces el resto de sus hermanos volverá junto a los
israelitas. El se mantendrá de pie y los apacentara con la fuerza
del Señor, con la majestad del nombre del Señor, su Dios. Ellos
habitaran tranquilos, porque el será grande hasta los confines de
la tierra. ¡Y el mismo será, la paz!

Palabra de Dios
Tea alabamos, Señor

Reflexion
El Pueblo elegido por Dios esta humillado por los enemigos,
pero de uno de sus clanes mas modesto de Juda – aquel de donde
era David- surgirá Cristo Salvador.
En efecto, Cristo nacera en Belne, un pueblito sin Importancia.
Para Dios Padre no es iportante un titulo o lo se tiene, sino lo que
uno es
Para reunirnos en un solo pueblo, una familia de hermanos en la
fe, Dios Padre nos envía a su Hijo Jesus con todo su poder, para
que llene al mundo de su Paz y de su Amor.
Pensemos
-María dio a luz a Jesús, el Hijo de Dios Padre. ¿Cómo es mi
cariño hacia la Madre del Señor?
-Si la Iglesia es la familia de Jesús y de María, ¿de qué manera
vivimos la fe?
- ¿Es Cristo realmente mi paz?
Lo meditamos en silencio.

Preces
A cada intención respondemos: ¡Ven, Señor Jesús, ven!

-Para que todos los cristianos vivamos en la unidad.

-Para que Cristo nos una a un mismo Espíritu.
-Para que construyamos juntos la unidad.
Se pueden añadir otras intenciones.

Padrenuestro, Ave María y Gloria

Oración Final (como el día primero)

Cantó
DÍA CUARTO
Entrada
Todo como el día primero de la novena

Liturgia de la Palabra
Escuchemos la Palabra de nuestro Dios

Lectura del Libro del Profeta Isaías (40, 3-4)

Una voz proclama ¡Preparen en el desierto el camino del Señor,

tracen en la estepa un sendero para nuestro Dios! ¡Que se
rellenen todos los valles y se aplanen todas las montañas y
colinas, que las quebradas se conviertan en llanura y los terrenos
escarpados en planicies!.. Entonces se revelará la gloria del
Señor y todos los hombres la verán juntamente, porque ha
hablado la boca del Señor.

Palabra de Dios
Te alabamos, Señor.

Reflexión
Dios quiere que sus hijos sean libres, para eso envía a su Hijo,
nacido de la Virgen María; para eso convoca al Pueblo elegido a
trabajar por construir la libertad con esfuerzo y con fe.
Dios Padre siempre cumple su palabra: Jesús viene a nosotros
para reunirnos en una familia de hermanos y asi trabajar juntos
por la liberación de los que estan esclavizados por el pecado y
por la muerte.

Pensemos
- ¿Cómo trabajamos por ser libres como los hijos de Dios? ¿Qué
importancia le damos a la Palabra del Señor para lograrlo?
- ¿De qué manera preparamos nuestro corazón a la venida del
Hijo de Dios a nuestras vidas?
- ¿Qué hacemos para que la Palabra de nuestro Dios llegue a
nuestros hermanos?
Lo meditamos en silencio
Preces
A cada intención respondemos: ¡Ven Señor Jesús, ven!
-Para que sepamos recibirte de corazón
-Para que sepamos acercar a nuestros hermanos a Ti.
-Para que estemos siempre preparados a tu venida.
Se pueden añadir otras intenciones.
Padrenuestro, Ave María y Gloria
Oración final (como el día primero)
Canto

DÍA QUINTO
Entrada
Todo como el día primero de la novena

Liturgia de la Palabra
Escuchemos la Palabra de nuestro Dios

Lectura del Libro del Profeta (36, 23-28)

Yo los tomaré de entre las naciones, los reuniré de entre todos

los países y los llevare a su propio suelo. Los rociare con agua
pura, y ustedes quedaran purificados. Los purificare de todas sus
impurezas y de todos sus ídolos. Les daré un corazón nuevo y
pondré en ustedes un espíritu nuevo: les arrancare de su cuerpo
el corazón de piedra y les daré un corazón de carne. Infundiré mi
espíritu en ustedes y hare que sigan mis preceptos y que
observen y practiquen mis leyes. Ustedes habitaran en la tierra
que yo he dado a sus padres. Ustedes serán mi pueblo y yo seré
su Dios.
Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
Reflexión
Dios Padre quiere renovar a su Pueblo elegido, a la Iglesia, y por
su intermedio a todas las naciones y pueblos. ¿Cómo lo piensa
hacer? Dios Padre va a reunir a todos los hijos que estan
dispersos por culpa del pecado; transformara sus corazones
llenándolos del Espíritu Santo que es amor.
Al nacer Jesús de la Virgen María, se cumplirá todo lo que Dios
Padre había prometido.
Pensemos
- ¿Cómo vivo mi bautismo? Por medio de él, fuimos hechos
hijos de Dios Padre y hermanos con Cristo de todos los hombres.
- ¿Soy para mí mismo y para los demás el hombre nuevo?
- ¿Vivo según los mandatos de Dios, nuestro Padre?
Lo meditamos en silencio
Preces
A cada intención respondemos: ¿Ven, Señor Jesús, ven!
-Para que tu palabra nos reúna.
-Para que tengamos un corazón misericordioso.
-Para que seamos hombres nuevos como Tú.
-Para que vivamos de acuerdo a tus mandatos.
Se pueden añadir otras intenciones
Padrenuestro, Ave María y Gloria
Oración final (como el día primero)
Canto

DÍA SEXTO
Entrada
Todo como el día primero de la novena

Liturgia de la Palabra
Escuchemos la Palabra de nuestro Dios

Lectura de la Carta del apóstol San Pablo a Tito (3,4-7)

Cuando se manifestó la bondad de Dios, nuestro Salvador, y su

amor a los hombres, no por las obras de justicia que habíamos
realizado, sino solamente por su misericordia. Él nos salvó,
haciéndonos renacer por el bautismo y renovándonos por el
Espíritu Santo y derramo abundantemente ese Espíritu (Santo)
sobre nosotros por medio de Jesucristo, nuestro Salvador, a fin
de que, justificados por su gracia, seamos en esperanza herederos
de la vida eterna.

Palabra de Dios
Te alabamos, Señor

Reflexión
Por el bautismo tenemos la vida nueva de hijos de Dios. Vivir la
vida cristiana significa vivir como un hijo de Dios Padre, al
estilo de Jesús. Por lo tanto, recibimos el espíritu santo, que no
solo hace posible la vida cristiana, sino que nos impulsa a ser
herederos de la vida para siempre.

Pensemos

- ¿En qué cosas se nota que somos bautizados?

- ¿Cómo hemos respondido en nuestras relaciones familiares, en
el trabajo o estudio, con los amigos y vecinos, al amor de nuestro
Padre?
Lo meditamos en silenció.
Preces
A cada intención respondemos: ¡Ven, Señor Jesús, ven!
-Para que seamos testigos de tu amor y de tu bondad.
-Para que, en nuestras familias, en nuestros trabajos y con todos
los que nos rodean demos testimonios de nuestro bautismo.
-Para que nuestra vida sea un anticipo de la herencia eterna.
Se pueden añadir otras intenciones
Padrenuestro, Ave María y Gloria
Oración final (como el día primero)
Canto

DÍA SÉPTIMO
Entrada
Todo como el día primero de la novena

Liturgia de la Palabra
Escuchemos la Palabra de nuestro Dios

Lectura del Evangelio de San Lucas (1,26-38)

En el sexto mes, el Ángel Gabriel, fue enviado por Dios a una

ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen que estaba
comprometida con un hombre perteneciente a la familia de
David, llamado José. El nombre de la virgen era María.
El Ángel entró en su casa y la saludo diciendo, “¡Alégrate!, llena
de gracia, el Señor está contigo” Al oír estas palabras, ella quedo
desconcertada y se preguntaba que podía significar ese saludo.
Pero el Ángel le dijo: “No temas, María, porque Dios te ha
favorecido. Concebirás y darás a luz un hijo, y le podrás por
nombre Jesús, el será grande y se lo llamará Hijo del Altísimo.
El Señor Dios le dará el trono de David, su padre, reinará sobre
la casa de Jacob para siempre y su reino no tendrá fin”
María dijo al Ángel “¿Cómo puede ser eso, si yo no tengo
relaciones con ningún hombre? El Ángel le respondió: “El
Espíritu Santo descenderá sobre ti y el poder del Altísimo te
cubrirá con su sombra. Por eso el niño será Santo y se lo llamará
Hijo de Dios. Tambien tu parienta Isabel concibió un hijo a pesar
de su vejez, y la que era considerada estéril, ya se encuentra en
su sexto mes, porque no hay nada imposible para Dios”
María dijo entonces: “'Yo soy la servidora del Señor. Que se
cumpla en mi lo que has dicho”. Y el Ángel se alejó.

Palabra del Señor

Gloria a ti. Señor Jesús

Reflexión
María está dispuesta a cumplir la voluntad de Dios.
Reconoce que lo que Dios le pida será para bien de ella y de su
pueblo.
De esta manera, su si hace posible que la Palabra de Dios se haga
uno de nosotros: Dios se hace hombre. El ministerio de Dios se
realiza y encierra en la sencillez de María; se concreta el misterio
de la Encarnación.

Pensemos
- ¿Cómo es nuestra disponibilidad a la voluntad de Dios?
-El ejemplo de María debe guiamos a aceptar la voluntad de
Dios Padre ya reconocer la responsabilidad que tenemos para la
salvación de los demás. ¿Cómo vivimos este cariño por la
Santísima Virgen María?
Lo meditamos en silenció.

Preces

A cada intención, respondemos: ¿Ven, Señor Jesús, ven!

-Para que, como María, sepamos estar disponible a tu Palabra.

-Para que, como María sepamos qué quieres lo mejor que
nosotros.
-Para que, como María, sepamos decir si a lo que nos pidas.
Se pueden añadir otras intenciones
Padrenuestro, Ave María y Gloria
Oración final (como el día primero)
Canto

DÍA OCTAVO
Entrada
Todo como el día primero de la novena

Liturgia de la Palabra
Escuchemos la Palabra de nuestro Dios

Lectura del Evangelio de San Lucas (1,39-45)

En aquellos días, María patio y fue sin demora a un pueblo de la

montaña de Judá. Entro en la casa de Zacarías y salude a Isabel
Apenas ésta oyó el saludo de María, el niño saltó de alegría en su
seno, e Isabel, llena del Espíritu Santo, exclamo: "¡Tú eres
bendita entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre!
¿Quién soy yo, para que la madre de mi Señor venga a
visitarme? Apenas oí tu saludo, el niño salto de alegría en mi
seno. Feliz de ti por haber creído que se cumplirá lo que te fue
anunciado de parte del Señor”

Palabra del Señor

Gloria a ti, Señor Jesús

Reflexión
María va a servir a Isabel, que está embarazada. Es su prójimo,
que necesita de su ayuda. De este modo María, que lleva al Hijo
de Dios consigo, es una figura de la Iglesia que debe ir hacia
todos, entregando a Jesús, el Hijo de Dios e hijo de María

Pensemos
-La Palabra de Dios siempre nos pone al servicio de los demás
¿Hacemos caso a esta Palabra? ¿Cómo?
- ¿Somos verdaderamente felices por creer en Dios y en sus
promesas? ¿Cómo lo expresamos a los que viven junto a
nosotros?
-El Espíritu Santo ha sido derramado en nuestros corazones.
¿Cómo respondemos a lo que nos sugiere?
Lo meditamos en silencio.

Preces
A cada intención respondemos: ¡Ven, Señor Jesús, ven!

-Para que, como María, sepamos ser los servidores tuyos y de

nuestros hermanos
-Para que, como Isabel, sepamos reconocer tu presencia y ser
fieles al Espíritu Santo
-Para que sepamos compartir la alegría de nuestra fe y esperanza.
Se pueden añadir otras intenciones
Padrenuestro, Ave María y Gloria
Oración final (como el día primero)
Canto

DÍA NOVENO
Entrada
Todo como el día primero de la novena

Liturgia de la Palabra
Escuchemos la Palabra de nuestro Dios

Lectura del Evangelio de San Lucas (2, 1-14)

En aquella época apareció un decreto del emperador Augusto,

ordenando que se realizara un censo en todo el mundo. Este
primer censo tuvo lugar cuando Quirino gobernaba Siria, y cada
uno iba a inscribirse a tu ciudad de origen. José, que pertenecía a
la familia de David, salió de Nazaret, ciudad de Galilea, y se
dirigió a Belén de Judea, la ciudad de David, para inscribirse con
María, su esposa, que estaba embarazada

Mientras se encontraban en Belén, le llegó el tiempo de ser

madre, y María dio a luz a su Hijo primogénito, lo envolvió en
pañales y lo recostó en un pesebre, porque no había lugar para
ellos en el albergue

En esa región acampaban unos pastores, que vigilaban por turno

sus rebaños durante la noche. De pronto, se les apareció el Ángel
del Señor y la gloria del Señor los envolvió con su luz. Ellos
sintieron un gran temor, pero el Ángel les dijo: «No teman,
porque les traigo una buena noticia, una gran alegría para todo el
pueblo: hoy, en la ciudad de David, les ha nacido un Salvador,
que es el Mesías, el Señor, y esto les servirá de señal:
encontrarán a un niño recién nacido envuelto en pañales y
acostado en un pesebres” y junto con el Ángel apareció de
pronto una multitud del ejército celestial, que ala- baba a Dios,
diciendo: «Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra, paz a los
hombres amados por el”

Palabra del Señor

Gloria a ti, Señor Jesús.

Toda la fuerza y el poder de Dios se encierra en la debilidad de

un niño recién nacido. Por ese acto se nos muestra como Dios
amor El nacimiento de Cristo es una Buena Noticia (Evangelio)
para todos porque en él se cumplen todas las promesas del Padre.
Reflexionemos haciendo un momento de silencio.

Himno

Y ahora, llenos de alegría, tambien nosotros digamos:

Gloria a Dios en el cielo.

y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor.
Por tu inmensa gloria
te alabamos,
te bendecimos,
te glorificamos
te damos gracias,
Señor Dios, Rey celestial.
Dios Padre todopoderoso
Señor. Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios.
Hijo del Padre.
tu que quitas el pecado del mundo.
ten piedad de nosotros,
tu que quitas el pecado del mundo,
atiende nuestra súplica,
tu que estás sentado a la derecha del Padre,
ten piedad de nosotros,
porque solo tú eres Santo,
solo tu Señor,
solo tu Altísimo, Jesucristo,
con el Espíritu Santo
en la gloria de Dios Padre.
Amen.

Oración final (como el día primero)

Canto
Oración ante el pesebre
-Dulcísimo Niño Jesús,
que por voluntad de Dios
nuestro Padre
te hiciste igual a nosotros
para compartir
nuestra naturaleza humana
en todo menos en el pecado,
ayúdanos a prepararnos en tu
fiesta
con un corazón generoso
y reconciliado con Dios y
nuestros hermanos.
Te lo pedimos a ti que vives
y reinas con el Padre
y el Espíritu Santo,
por los siglos de los siglos.
Amén.