Introducción

La filosofía, el arte de darle respuesta a una, o en su defecto a varias incógnitas por medio del
pensamiento, ha sido fundamentada como una de las ramas más importantes si de la vida
misma se habla, pues, es inevitable que, a lo largo de nuestras vidas nos surjan preguntas
como por ejemplo: el método de realización de algo, el porqué de los hechos que ocurrirán a lo
largo de nuestras vidas, o preguntas que se disfrazan ante una respuesta simple, pero que, al
analizar bien, terminan siendo incógnitas difíciles de resolver, tanto que, pasamos el mayor
tiempo de nuestras vidas intentando encontrar una respuesta a aquella pregunta que suena
fácil de responder, pero que, por alguna razón que desconocemos, no sabemos su respuesta,
incluso, llegando al punto en que el alma se marcha de su prisión con dicha duda, pues,
aunque haya respuestas científicas a estas preguntas, no hay nada como la opinión y respuesta
propia, o de nuestra autoría.

Un ejemplo de estás preguntas catalogadas como “engañosas” a la hora de encontrarles una

respuesta es: “¿Cuál es el sentido de mi vida?.

Hasta antes del siglo XXI, este tipo de preguntas eran las que crecían alrededor de las personas,
cuya cura, era encontrarles una respuesta con el único parámetro que sigue un filósofo a la
hora de crear una respuesta, que esta tenga lógica y sea coherente.

Anteriormente, en la época filosófica enfocada en el Cristianismo, las personas que tenían este
tipo de incógnitas que no eran capaces de responder enfocaban sus respuestas al Ente divino
del cristianismo que predominaba en dicha época, “Dios”, quien, de manera coherente e
indirecta fue dando respuesta a cada una de esas preguntas que surgían en dichas personas, y
aunque algunos se negaban a creer en dichas respuestas ofrecidas por el omnipotente Ser, se
veían obligados a hacerlo, pues, aquellos resignados a no creer, al ver que cada una de las
respuestas que brindaba la Biblia cuadraba a la perfección con aquellas preguntas que por años
fueron una incógnita para la filosofía, no tenían otra opción que no fuera servir a Dios, dándole
como ofrenda la participación de los mismos en su religión, el cristianismo.

A medida de que transcurría el tiempo, el hombre empezó a darse cuenta de que este era un
signo de pregunta andante, pero uno sin solución hasta ese momento, pues, los filósofos de la
época empezaron a darse cuenta de que las dudas e incógnitas que surgían a medida que
pasaba el tiempo y que, además tenían un alto grado de resolución giraban entorno al hombre.
Así, este también se percató de que todo lo que ocurría no estaba escrito en ningún lado, ni lo
elegía nadie, cabe agregar también que estos percibieron que todo dependía de él mismo,
tanto todo lo bueno, como todo lo malo que ocurriera en sus vidas sería culpa de él mismo.

Al llegar a dicha conclusión, se creó un nuevo periodo dentro de la filosofía, y este es “La
antropología filosófica”. La antropología se creó con el único fin de estudiar al hombre, sin
embargo, la antropología filosófica fue más allá, y se encargó de estudiar a detalle el tratado
del hombre, para que, de esta manera se pueda encontrar una respuesta lógica a cada una de
las preguntas denominadas “difíciles de responder”.

El hecho de que el hombre sea un ser lleno de una infinidad de preguntas crea una gran
cantidad de distintas respuestas y perspectivas, buscando cada acercarse cada vez mas a la
respuesta de su vida. Es por esto que muchos pensadores han destacado por aportar una
visión que permite construir poco a poco una respuesta.

Algunos de estos autores fueron:

- Immanuel Kant (1724-1804) fue un filósofo alemán influyente en la Ilustración. En su obra

"Fundamentación de la metafísica de las costumbres", Kant se centró en la moralidad y la
dignidad humana. Argumentó que los seres humanos tienen un valor intrínseco debido a su
capacidad de razonar y actuar moralmente.

- Jean-Jacques Rousseau (1712-1778) fue un filósofo, escritor y pensador político francés. En

su obra "El contrato social", Rousseau argumentó que la sociedad civil a menudo corrompe la
libertad natural del individuo y abogó por un contrato social en el que las personas acuerdan
vivir bajo leyes que reflejen la voluntad general. Sus ideas influyeron en la teoría política y
contribuyeron al pensamiento sobre la democracia y la justicia.

- Søren Kierkegaard (1813-1855) fue un filósofo danés considerado uno de los precursores del
existencialismo. Exploró cuestiones de la existencia individual y la angustia existencial en obras
como "El concepto de la angustia". Kierkegaard enfatizó la importancia de la elección individual
y la autenticidad en la vida de una persona. Su filosofía ha influido en la ética y la filosofía de la
religión, y su enfoque en la experiencia subjetiva ha tenido un impacto duradero en la filosofía
existencialista.

- Jean-Paul Sartre (1905-1980) fue un influyente filósofo existencialista francés. En su obra "El
ser y la nada", Sartre exploró temas de libertad, responsabilidad y autenticidad. Argumentó
que los individuos son condenados a ser libres y deben tomar decisiones que definen su
existencia. Su enfoque en la existencia individual y la creación de significado en un mundo
aparentemente absurdo ha tenido un impacto significativo en la ética y la filosofía de la mente.

- Martin Heidegger (1889-1976) fue un filósofo alemán conocido por su obra "Ser y Tiempo",
en la que exploró la pregunta fundamental del ser. Heidegger argumentó que la comprensión
del ser humano es fundamental para comprender el mundo en su totalidad. Su filosofía ha
influido en la fenomenología y la hermenéutica, y su enfoque en la ontología y la existencia ha
tenido un impacto profundo en la filosofía continental.

La filosofía antropológica se beneficia enormemente de las contribuciones de filósofos que han

hecho aportes significativos, en la búsqueda de las respuestas que tanto los inquietan. Estos
filósofos han planteado cuestiones fundamentales sobre la moralidad, la libertad, la angustia
existencial, la responsabilidad, la existencia, el poder y el conocimiento, que tienen
implicaciones profundas en la investigación de la filosofía antropológica, permitiendo cada vez
mas, ampliar el conocimiento que se tiene del ser humano, creando así mas dudas,
persiguiendo esa meta interminable de conocer al ser humano.