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LOS TRASTORNOS MENTALES

La salud mental tiene muchas alteraciones que se conocen como enfermedades o


trastornos mentales, que afectan a los procesos afectivos y cognitivos, al estado de
ánimo, el pensamiento y el comportamiento. Muchas personas sufren problemas de
salud mental de tanto en tanto. En cambio, se convierte en enfermedad mental
cuando los síntomas y signos permanecen, provocan estrés en el paciente e impiden
funcionar de forma normal.
Dentro de los trastornos mentales más comunes están:
Trastornos de ansiedad. Partimos del hecho que la ansiedad es normal en situaciones
de estrés. Sin embargo, se considera trastorno de ansiedad cuando los síntomas
provocan demasiada angustia o un deterioro funcional grave en la vida del paciente,
impidiéndole funcionar en su vida. Dentro de los trastornos de ansiedad hay:
 Ataques de pánico. Aparición repentina de temor o terror, asociado a
sentimientos de muerte. Entre los síntomas hay falta de aire, dolor en el pecho,
malestar y palpitaciones.
 Fobias. Muchos pacientes sienten un miedo que no pueden tolerar ni controlar
hacia determinados hechos, objetos o animales. Así, sufren un miedo irracional
hacia ése estímulo, con un comportamiento de evitación. Hay muchas fobias
pero entre las más comunes se encuentran: fobia a algunos animales
(serpientes, arañas, perros…), fobia social (no tiene que ver con la timidez y se
traduce con un miedo ante situaciones de interacción social), agorafobia
(miedo a los espacios abiertos), fobia a volar en avión, a conducir algún
vehículo, a los ascensores, a los payados, a los dentistas, a las tormentas, a la
sangre, entre muchas otras.
 Trastorno por Estrés Postraumático (TEPT). Se da cuando la persona ha sido
sometida a una situación traumática que le provoca una experiencia estresante
psicológicamente. Entre los síntomas hay pesadillas, ira, fatiga emocional,
irritabilidad, etc.
 Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC). Es una condición en la que la persona
tiene pensamientos, imágenes o ideas intrusivas. Se relaciona con la ansiedad y
por asociarse sensaciones de angustia, temor y estrés continuado. Los
pensamientos que causan malestar y obsesiones en el paciente hacen que la
persona haga acciones o compulsiones para minimizar la ansiedad. Entre estos
movimientos obsesivos están comprobar continuamente alguna cosa, contar,
organizar mucho las cosas, lavarse continuamente, repetir palabras…
 Trastorno de ansiedad generalizada. Preocuparse por las cosas es normal, pero
no cuando es algo que ocurre continuamente e interfiere en la vida de la
persona. Las personas con este trastorno suelen preocuparse por todo:
estudios, trabajo, relación de pareja, salir de casa y poder tener un accidente,
etc. Esto, como consecuencia, provoca problemas de sueño, fatiga, tensión
muscular, náuseas…
Trastornos del estado de ánimo. También se les conoce como trastornos afectivos.
Uno de los más comunes es el trastorno bipolar, que puede afectar a cómo actúa una
persona, piensa y se siente. Va más allá de los cambios de humor y afecta a muchos
aspectos de la vida. Es difícil tratarlo sin medicación, ya que es necesario estabilizar al
paciente y su estado de ánimo. En los momentos de manía puede incluso dejar de
trabajar, aumentar sus deudas, sentirse lleno de energía aun durmiendo solo dos
horas, etc. En los momentos depresivos, el paciente puede incluso no querer salir de la
cama. Entre los trastornos del estado de ánimo también está el trastorno depresivo.
Aunque todos podemos sentirnos decaídos o tristes en algún momento, cuando dichos
sentimientos perduran durante meses y años, se considera un trastorno mental que
puede ser muy seria y debilitante para el paciente.
Trastornos de la conducta alimentaria. Los más frecuentes son:
 La anorexia nerviosa. Se caracteriza por una obsesión por controlar la cantidad
de comida ingerida, restringiendo la ingesta haciendo dieta, ayuno y ejercicio
excesivo.
 La bulimia nerviosa. Caracterizada por pautas anómalas de alimentación, con
momentos de ingesta masiva y otros de eliminación de esas calorías con
vómitos, laxantes… Además, este trastorno lleva asociadas alteraciones en el
cerebro (degradación de la materia blanca, por donde pasan muchos conjuntos
de axones naturales).
 Trastorno por atracón. Es grave y se caracteriza porque la persona ingiere
grandes cantidades de comida y siente que pierde el control mientras come.
Tras el atracón aparece una angustia severa por el peso.
Trastornos psicóticos. Son graves y la persona pierde el contacto con la realidad,
teniendo alucinaciones y delirios. Entre ellos están los trastornos delirantes o
paranoias (la persona está 100% convencida de cosas que no son ciertas) y
la esquizofrenia (la persona tiene alucinaciones o pensamientos perturbadores,
aislándole de la vida social).
Trastornos de personalidad. Son trastornos en el comportamiento del paciente que le
generan malestar y dificultades en sus relaciones. El Trastorno Límite de la
Personalidad (TLP) o borderline es uno de los más frecuentes, afectando a personas
con personalidad débil y cambiante, así como dubitativa. En ellos los momentos de
calma pueden convertirse en ira, desesperación o ansiedad. Los síntomas
característicos incluyen ira incapaz de ser controlada, esfuerzos por evitar el abandono
(real o imaginario), alternancia entre extremos de idealización y devaluación en
relaciones interpersonales, autoimagen inestable y sentimientos de vacío. Otro
trastorno común es el Trastorno Antisocial (TASP), psicopatía o sociopatía. Se
caracteriza porque el paciente tiene tendencia a no relacionarse con la sociedad. Entre
los síntomas incluyen: agresividad, tendencia a la soledad, violencia, mentir, etc.
Además, suelen ser personas tímidas, con tendencias depresivas y ansiedad social.
Los trastornos mentales afectan a los procesos afectivos y cognitivos del paciente

Pronóstico de la enfermedad
Los trastornos mentales pueden afectar muy negativamente al paciente. Pueden
hacerle sentir mal y causar problemas en su vida cotidiana: en el trabajo, en el colegio
y en las relaciones interpersonales.
Síntomas de trastornos mentales
Los síntomas de los trastornos mentales serán distintos según el problema que sufra el
paciente, las circunstancias que lo provoquen y demás factores externos.
Normalmente los síntomas pueden afectar a la conducta, pensamientos y emociones
del paciente, siendo los más comunes:
 Sentimientos de desánimo y tristeza
 Incapacidad para concentrarse
 Pensamientos confusos
 Altibajos emocionales
 Cambios repentinos de humor
 Alejamiento de las actividades que solía hacer y de las amistades
 Cansancio y baja energía
 Trastornos del sueño
 Delirio, alucinaciones o paranoias
 Imposibilidad para afrontar los problemas o el estrés de la vida cotidiana
 Abuso de alcohol o drogas (en algunas ocasiones)
 Trastornos alimenticios
 Cambios en el deseo sexual
 Exceso de enfado o violencia
 Pensamientos suicidas
Pruebas médicas para los trastornos mentales
Para evaluar y diagnosticar los trastornos mentales el especialista
en Psicología o Psiquiatría (según la gravedad de los síntomas atenderá al paciente un
especialista u otro), deberá estudiar el historial médico del paciente. A continuación
realizará un examen físico y, posiblemente, pedirá analíticas de sangre, por si hubiera
alguna otra condición estrictamente médica que esté causando los síntomas.
También realizará una evaluación psicológica, donde deberá responder preguntas
sobre sus sentimientos, conductas y pensamientos.
¿Cuáles son las causas de los trastornos mentales?
Los trastornos mentales no tienen una única causa y hay diversos factores que pueden
influir en el riesgo de sufrirlas. Algunas son:
 Los genes y la historia familiar del paciente.
 Antecedentes de ansiedad, estrés o si el paciente ha sufrido abusos durante la
infancia.
 Factores biológicos, como desequilibrios químicos en el cerebro.
 Haber sufrido alguna lesión cerebral traumática.
 Exposición de la madre a virus o productos químicos durante el embarazo.
 Consumo de drogas o alcohol.
 Sufrir alguna enfermedad importante, como algún cáncer.
 Sentirse solo o aislado.
¿Se puede prevenir?
Es difícil prevenir los trastornos mentales. Si el paciente tiene antecedentes por
problemas mentales es importante acudir al especialista en Psicología o Psiquiatría,
para poder establecer un tratamiento lo antes posible, para que el problema no vaya a
más y el paciente no se sienta peor. Sí hay estrategias eficaces para prevenir los
síntomas de algunos trastornos, como la depresión.
Tratamientos para los trastornos mentales
El tratamiento de los trastornos mentales depende del tipo de problema que sufra el
paciente y la gravedad. El tratamiento debe ser 100% personalizado, por lo que es muy
importante que el especialista en Psicología o Psiquiatría tenga una entrevista con el
paciente y establezca el mejor tipo de terapia que, en algunos casos, se combinará con
medicación, apoyo social o educación en algunos aspectos. En casos graves en que el
paciente sufra una enfermedad mental grave o exista riesgo de hacerse daño a sí
mismo o a otras personas, posiblemente deba acudir a un centro psiquiátrico. Allí el
paciente estará ingresado y recibirá consejos, hará discusiones en grupo y y terapia
con profesionales expertos en patologías mentales.

¿Qué especialista lo trata?


Quien se encarga de tratar los trastornos mentales es el especialista en Psicología o el
especialista en Psiquiatría. Según la gravedad de los síntomas será uno u otro quien lo
aborde. Si el caso es grave será atendido por el psiquiatra, quien podrá administrar la
medicación más adecuada al paciente.

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