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TAREA 11 MODULO 2

Primeros aparatos para medir la radiación solar y radiómetros.


Aparatos antiguos:
Los primeros aparatos para medir la radiación solar
fueron los llamados "pirheliómetros", que se inventaron
en el siglo XIX. Estos dispositivos consistían en una
esfera de vidrio que concentraba los rayos del sol en un
termómetro sensible al calor, lo que permitía medir la
cantidad de energía radiante que llegaba a la superficie
terrestre en un determinado momento.

Otro dispositivo utilizado para medir la radiación solar


fue el "actinómetro", que también se desarrolló en el
siglo XIX. Este instrumento se basaba en la medición del
tiempo que tardaba la radiación solar en producir un
cambio químico en un papel fotosensible. A partir de este
tiempo se podía calcular la cantidad de energía radiante
que llegaba a la superficie terrestre.

"heliógrafos", se usaban para medir la intensidad de la radiación solar mediante la


observación del brillo producido en un espejo que reflejaba la luz del sol. Se compone de
una bola maciza de cristal pulimentada conforme a un calibrador, con índice de refracción
determinado, con un diámetro de
aprox. 96mm, así como de un casquete
metálico dispuesto concéntricamente a
esta bola a su distancia focal. En las
ranuras del lado interior del casquete
se introduce cada día una tira nueva de
cartulina con división horaria. El sol
quema en la tira huellas más o menos
fuertes, según la intensidad de sus
rayos y de acuerdo con su curso
aparente. Después de haber retirado la
tira de cartulina del casquete metálico,
se puede determinar retroactivamente
cuántas y durante qué horas de cada
día ha habido sol.
"actinómetro de Bunsen", que se inventó en la década de 1860
y se basaba en la medición de la intensidad de la luz solar por su
capacidad para producir una reacción química específica.
consiste en un termómetro de mercurio y un tubo de vidrio
cilíndrico que contiene una solución de dicromato de potasio. La
solución de dicromato de potasio es sensible a la radiación solar,
y su color cambia cuando se expone a la luz. La cantidad de
cambio de color está relacionada con la intensidad de la
radiación solar.

los "piranómetros" son dispositivos que miden la


radiación solar total recibida por una superficie,
incluyendo la radiación directa y difusa. Estos
aparatos tienen una cúpula transparente que
recubre un sensor sensible al calor, que detecta la
cantidad de energía radiante que llega a la
superficie terrestre en un rango de longitudes de
onda.

Otro instrumento utilizado para medir la radiación solar es el


"heliómetro", que se utiliza para medir el ángulo de elevación del sol.
Este dispositivo consta de dos telescopios montados en un mismo eje,
que se utilizan para medir el ángulo entre la posición del sol y la línea
del horizonte.

También existen los "péndulos de Foucault", que


se utilizan para medir la rotación de la Tierra.
Estos dispositivos miden el desplazamiento angular
de un péndulo debido a la rotación de la Tierra, lo
que permite determinar la longitud del día solar
medio y la hora local verdadera.

En general, la elección del instrumento para medir la radiación solar dependerá del tipo de
medición que se desee realizar y de las características específicas del lugar y las
condiciones ambientales donde se realizará la medición.
A lo largo del tiempo se han desarrollado diversos tipos de instrumentos para medir la
radiación solar, cada uno con sus propias características y limitaciones. Hoy en día, se
utilizan principalmente radiómetros y espectro radiómetros, que ofrecen mediciones más
precisas y completas de la radiación solar.
Aparato actual: Radiómetro
Un Radiómetro es un equipo usado para medir la intensidad de energía radiante. La
mayoría de los radiómetros utilizan simplemente fotocélulas como sensores. Para poder
medir la radiación emitida de un espectro específico o para incorporar el radiómetro dentro
de cierta respuesta espectral, se utiliza normalmente un filtro óptico. Este filtro óptico
ofrece una solución simple y de bajo costo.
Las aplicaciones industriales del radiómetro principalmente son para medir irradiación y
radiación. Para poder cuantificar la emisión de radiación de una fuente, se realizan
normalmente mediciones de radiación. Por otro lado, cuando el nivel de exposición es el
problema, se puede medir la irradiación o irradiación integrada.

Fuentes: guemisa | Konica minolta


https://www.guemisa.com/meteo/docus/radiacion%20solar-2.pdf
https://sensing.konicaminolta.us/mx/learning-center/light-measurement/radiometers-
photometers/
TAREA 13 MODULO 2
¿Hay algún océano que tenga diferente composición al resto?
No hay un océano que tenga una composición química significativamente diferente a la de
otros océanos. Si bien hay algunas variaciones menores en la composición química del agua
en diferentes partes de los océanos, en general, los océanos comparten características
similares en términos de su composición química. La composición química del agua de los
océanos es en gran medida el resultado de la mezcla de agua de lluvia dulce y agua salada
de los océanos.
En resumen, aunque hay algunas variaciones menores en la composición química del agua
de los océanos, no hay un océano que tenga una composición química significativamente
diferente a la de otros océanos. Sin embargo, hay uno en particular:
El Mar Muerto es el único mar del mundo que tiene una composición química
significativamente diferente a la de otros mares. El Mar Muerto está ubicado en la frontera
entre Israel, Jordania y Cisjordania y es conocido por ser uno de los cuerpos de agua más
salados del mundo. Su alta concentración de
sal y minerales se debe a su ubicación en una
depresión profunda en la tierra, lo que
significa que no tiene ríos o corrientes que lo
alimenten y solo recibe agua de lluvia y
algunos pequeños arroyos. Esta falta de salida
de agua significa que los minerales y sales se
acumulan en el agua a lo largo del tiempo, lo
que resulta en una composición química única
y diferente a la de otros mares.
El Mar Muerto es considerado un mar, aunque en realidad se trata de un lago salado.
Aunque comúnmente se le llama "mar", técnicamente cumple con las características de un
lago porque está rodeado por tierra y no se conecta con ningún océano. Sin embargo,
debido a su tamaño (tiene una superficie de aproximadamente 1.000 km²), su profundidad
(hasta 304 metros) y su alta salinidad, se le denomina a menudo como un mar.
Este lago se compone de aguas ricas en minerales, como el calcio, magnesio, potasio,
bromo, potasas, bromuro, yesos y sal, a la vez que bajos niveles de sodio, sulfatos y
carbonatos, lo cual la distingue radicalmente del agua salada del mar. Es al menos 9 veces
más salada que el agua de los océanos (3,1 a 3,8%), variando según la profundidad entre
unos 235 kg/m3 en aguas profundas (28%) y de 238-240 kg/m3 en las superficiales.
Esta salinidad extrema le confiere al agua una densidad fuera de lo ordinario, que impide a
una persona hundirse en sus aguas, característica sumamente atractiva para el turismo.
Fuente: Equipo editorial, Etecé
https://humanidades.com/mar-muerto/#ixzz7x7jm4KdX

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Graficas de la precipitación:

Pluviograma: registro obtenido de un pluviógrafo, que en el eje horizontal gradúa el


tiempo, y en el vertical la altura de agua acumulada. grama presenta descensos debidos a
que cuando el nivel llega a 10 mm de precipitación, se desaloja el agua.

Curva masa: es un pluviograma al que se le han quitado los descensos, obteniéndose


una curva que masa siempre es creciente, y que su pendiente en cualquier punto representa
la intensidad de la lluvia (altura de precipitación acumulada por unidad de tiempo) en ese
instante.
Hietogramas: a partir de una curva masa, es posible dibujar diagramas de barras
verticales que representen las variaciones de la altura de precipitación o de su intensidad en
lapsos o intervalos de tiempo.

Fuentes:
https://es.slideshare.net/ivan645162/ejemplo-pluviograma
https://es.scribd.com/document/377412511/Curva-de-Masa
https://www.researchgate.net/figure/Figura-1-Hietograma-sintetico-del-evento-de-lluvia-a-
modelar-Se-muestra-la_fig1_320845189

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Aparatos para medir el nivel de un río.
Limnímetros: Los limnímetros son dispositivos utilizados para medir el nivel de agua en
cuerpos de agua como ríos, lagos, embalses y pozos. Estos instrumentos son especialmente
útiles para monitorear los cambios en el nivel del agua a lo largo del tiempo.
Existen diferentes tipos de limnímetros, pero el más común es
el limnímetro de varilla. Consiste en una varilla graduada que
se introduce verticalmente en el agua hasta alcanzar el fondo.
La graduación en la varilla permite leer la altura del agua con
precisión.
El limnímetro también puede incluir una escala vertical
adicional, generalmente en metros o centímetros, que permite
determinar la profundidad del agua en un lugar específico.
Esto es útil para el estudio de la hidrología, la gestión de
recursos hídricos y el monitoreo de inundaciones.
Además de los limnímetros de varilla, también existen otros
tipos de instrumentos para medir el nivel del agua, como los
limnímetros ultrasónicos que utilizan ondas sonoras para
determinar la distancia entre el sensor y la superficie del agua.
Miras seccionadas: Las miras seccionadas, también conocidas como miras graduadas, son
herramientas utilizadas para medir distancias verticales o alturas. Consisten en una vara o barra
larga que se divide en secciones, generalmente de un metro de longitud cada una.
Cada sección de la mira seccionada está marcada con graduaciones, generalmente en centímetros o
milímetros, que permiten una medición precisa de la altura. Estas graduaciones se utilizan para
determinar la diferencia de altura entre dos puntos en un terreno o estructura.
Las miras seccionadas se utilizan comúnmente en topografía, cartografía, construcción y otras
disciplinas relacionadas con la medición de terrenos. Los topógrafos y otros profesionales las
emplean para medir la elevación de puntos de
referencia, como el suelo, la altura de edificios,
el nivel del agua y otros elementos verticales.
Para utilizar una mira seccionada, se coloca
verticalmente en el lugar que se va a medir y se
lee la altura correspondiente en la graduación
que está a la altura de los ojos del observador.
Estas mediciones se pueden registrar y utilizar
posteriormente para realizar cálculos y
representaciones gráficas.

Limnígrafo: El limnígrafo consta de varios componentes principales. En primer lugar, hay


un sensor de nivel de agua que está sumergido en el cuerpo de agua y detecta el nivel del
agua en un punto específico. Este sensor puede ser una boya flotante, una sonda o un
sistema de presión que mide la altura de la columna de agua.
Incluye un registrador, que es el encargado de recibir las
lecturas del sensor y registrar los datos correspondientes al
nivel del agua en intervalos de tiempo predefinidos. Estos
datos se almacenan en una memoria interna o se transmiten a
un sistema central de adquisición y almacenamiento de datos.
Suelen contar con una fuente de alimentación, que puede ser
una batería recargable o un panel solar, para garantizar el
funcionamiento continuo del instrumento.
La información recopilada por los limnígrafos es utilizada
para el análisis de los regímenes fluviales, el estudio de las
variaciones en el nivel del agua, la predicción de
inundaciones, la gestión de recursos hídricos y la
investigación científica en áreas relacionadas con el agua.
Maxímetro: Es un instrumento asociado al limnímetro que
permite conocer el máximo nivel alcanzado posterior a la
ocurrencia del evento. Uno de los más económicos y usados es el
consistente en una serie de vasos colocados entre un tubo con
perforaciones que permite la entrada y el registro del nivel. De
lectura directa.

Aparatos para medir la velocidad de un río.


Correntómetros: Los correntómetros, también conocidos como medidores de velocidad
del agua, son instrumentos utilizados en hidrología para medir la velocidad y dirección del
flujo del agua en ríos, arroyos, canales u otros cuerpos de agua en movimiento.
Un correntómetro típico consta de una hélice o una paleta que se sumerge en el agua y es
arrastrada por la corriente. La rotación de la hélice o paleta está vinculada a un mecanismo
que registra la velocidad del agua en unidades como metros por segundo o pies por
segundo.

Correntómetros de eje horizontal: El eje horizontal del correntómetro se coloca


perpendicularmente al flujo del agua y está equipado con una o varias hélices. Estas hélices
giran debido a la acción de la corriente, y la velocidad de rotación está relacionada con la
velocidad del agua.
Para medir la velocidad del agua, se registra la
velocidad angular de la hélice o se mide el tiempo
necesario para que la hélice complete un número
determinado de vueltas. A partir de estas mediciones,
se puede calcular la velocidad lineal del agua en
metros por segundo o cualquier otra unidad de medida.
Este tipo de correntómetro es utilizado en aplicaciones
hidrológicas y de investigación para medir la
velocidad del agua en ríos, estuarios y otras corrientes.

Correntómetros de eje vertical: A diferencia del correntómetro de eje horizontal, el


correntómetro de eje vertical tiene su sistema de medición montado en un eje vertical.
El correntómetro de eje vertical generalmente consta de
una sonda que contiene sensores de velocidad y dirección
del agua. Esta sonda se sumerge en el agua y registra la
velocidad del flujo y la dirección en un punto específico.
Los sensores en el correntómetro de eje vertical pueden
variar, pero suelen incluir un sensor de velocidad acústico
o magnético para medir la velocidad del agua y un sensor
de brújula o giroscopio para determinar la dirección del
flujo. Algunos correntómetros de eje vertical también
pueden tener sensores adicionales para medir la
temperatura y la conductividad del agua.

Fuentes:
https://sisbib.unmsm.edu.pe/bibvirtualdata/tesis/ingenie/vera_h_l/cap3.pdf
https://www.miteco.gob.es/es/parques-nacionales-oapn/proyectos-de-cooperacion/
hidrologia-yariguies_tcm30-289194.pdf

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Aparatos para medir la evaporación
Evaporímetros: Los evaporímetros son instrumentos utilizados para medir la tasa de
evaporación del agua en la superficie de un cuerpo de agua o suelo. Estos dispositivos se
utilizan comúnmente en estudios hidrológicos y en
la gestión de los recursos hídricos para comprender
los procesos de evaporación y estimar la cantidad
de agua que se pierde debido a este fenómeno. La
tasa de evaporación se determina midiendo la
diferencia en el nivel del agua en el tanque durante
un período específico y dividiéndola por el área de
superficie del tanque y el tiempo transcurrido. Esto
proporciona una estimación de la cantidad de agua
evaporada por unidad de tiempo y superficie.
Evaporímetros superficiales: son instrumentos
utilizados para medir la tasa de evaporación en la
superficie del suelo o en cuerpos de agua poco
profundos, como estanques o lagos pequeños.
Estos dispositivos son especialmente útiles para
estimar la cantidad de agua que se pierde debido a
la evaporación en áreas donde la disponibilidad
de agua es un factor crítico, como la agricultura,
la gestión de recursos hídricos y la meteorología.
Existen diferentes tipos de evaporímetros
superficiales, pero uno de los más comunes es el evaporímetro de bandeja. Este tipo de
evaporímetro consiste en una bandeja poco profunda llena de agua que se coloca en la
superficie del suelo o del cuerpo de agua que se está estudiando. La bandeja se mantiene
nivelada y se registra el nivel del agua inicial y se realiza un seguimiento regular de los
cambios en el nivel del agua debido a la evaporación.
Evaporímetros enterrados: también conocidos como evaporímetros de suelo o lisímetros
de evaporación, son instrumentos utilizados para medir la tasa de evaporación directamente
desde el suelo. A diferencia de los evaporímetros
superficiales que miden la evaporación en la
superficie del agua o del suelo, los evaporímetros
enterrados miden la evaporación desde una columna
de suelo enterrada.
Un evaporímetro enterrado generalmente consta de
una caja o cilindro enterrado en el suelo, con una
abertura en la parte superior a nivel del suelo.
Dentro de la caja se coloca una muestra
representativa del suelo que se va a estudiar. Esta muestra de suelo está protegida de la
precipitación y otros factores externos para medir la evaporación directa del suelo.
Estos evaporímetros enterrados permiten obtener mediciones precisas y directas de la
evaporación desde el suelo, lo que es especialmente útil en estudios de hidrología,
agricultura y manejo de recursos hídricos. Proporcionan información valiosa sobre las tasas
de evaporación específicas del suelo, que pueden variar según las características del suelo,
la vegetación y las condiciones climáticas.
Evaporímetros flotantes: flotantes son instrumentos utilizados para medir la tasa de
evaporación en cuerpos de agua, como estanques, lagos y embalses. Estos dispositivos se
denominan "flotantes" porque consisten en una plataforma flotante que se coloca en la
superficie del agua.
El evaporímetro flotante generalmente tiene una estructura flotante, como una balsa o una
plataforma con una superficie expuesta al aire y sensores de medición. La superficie
expuesta puede estar hecha de materiales como plástico, metal o cerámica, y está diseñada
para simular la superficie del agua y capturar la evaporación.
Los evaporímetros flotantes son útiles para medir la evaporación en cuerpos de agua más
grandes y proporcionar estimaciones precisas y representativas de la evaporación en esos
entornos. Estos datos son importantes para el monitoreo de recursos hídricos, la gestión de
embalses, el riego y la evaluación de la disponibilidad de agua.
Aparatos para medir la transpiración
En hidrología, los "fitómetros" son dispositivos utilizados para medir el consumo de agua
de las plantas, es decir, la cantidad de agua que las plantas extraen del suelo a través de la
transpiración y la evaporación de las hojas. Los fitómetros son instrumentos especialmente
diseñados que permiten medir de manera precisa y controlada la cantidad de agua utilizada
por las plantas en condiciones controladas.
Un fitómetro típico consiste en un recipiente o caja que contiene una planta o un cultivo en
crecimiento, junto con el suelo o sustrato necesario para el desarrollo de las raíces. El
fitómetro está equipado con sensores y sistemas de medición que permiten monitorear y
registrar la cantidad de agua utilizada por las plantas a lo largo del tiempo.
Los fitómetros se utilizan en estudios hidrológicos y agrícolas para comprender mejor los
requerimientos hídricos de las plantas y cómo afectan los factores ambientales, como la
disponibilidad de agua y el clima, en su crecimiento y desarrollo. También son útiles para
evaluar la eficiencia del uso del agua en los cultivos y para optimizar las prácticas de riego.
Aparatos para medir la evapotranspiración
La evapotranspiración es el proceso mediante el cual el agua se evapora desde la superficie
del suelo y se transpira por las plantas hacia la atmósfera como vapor de agua. Es una
combinación de dos procesos: la evaporación del agua del suelo y la transpiración de las
plantas.
La evaporación ocurre cuando el agua en la superficie del suelo, cuerpos de agua o
vegetación se convierte en vapor y se libera a la atmósfera. La transpiración, por otro lado,
es la pérdida de agua por parte de las plantas a través de las estomas de las hojas, que se
abre y cierra para regular la entrada y salida de agua y gases.
La evapotranspiración es un componente clave del ciclo hidrológico y juega un papel
importante en el balance hídrico de una región. Es influenciada por varios factores, como la
temperatura, la radiación solar, la humedad del aire, el viento, la disponibilidad de agua en
el suelo y la cobertura vegetal.
Por medio de balance hídrico: es un enfoque común utilizado para estimar la cantidad de
agua que se pierde debido a la evaporación y la transpiración en una determinada área o
cuenca hidrográfica. El balance hídrico se basa en la conservación del agua, considerando
las entradas y salidas de agua en el sistema. El balance hídrico se puede realizar en
diferentes escalas, desde un área pequeña hasta una cuenca hidrográfica más grande. A
continuación se describen los pasos básicos para realizar una estimación de la
evapotranspiración mediante el balance hídrico:
1. Entradas de agua: Se consideran las fuentes de agua que ingresan al sistema, como
la precipitación (lluvia y nieve) y el agua superficial proveniente de ríos o afluentes.
2. Salidas de agua: Se tienen en cuenta las diferentes formas en que el agua sale del
sistema, como el escurrimiento superficial, la infiltración en el suelo, el drenaje
subterráneo y la extracción de agua para uso humano o agrícola.
3. Cambio en el almacenamiento de agua: Se evalúa cualquier cambio en la cantidad
de agua almacenada en el sistema, como la variación en los niveles de agua en
embalses, lagos o acuíferos.
4. Balance hídrico: El balance hídrico se obtiene al calcular la diferencia entre las
entradas y las salidas de agua, considerando también el cambio en el
almacenamiento. La diferencia se atribuye a la evapotranspiración.
Por medio de tanques:
Evapotranspirometros: son instrumentos utilizados para medir la evapotranspiración de
las plantas de manera más directa y precisa. Combina la medición de la evaporación del
agua y la transpiración de las plantas en un solo dispositivo.
Un evapotranspirometro típico consiste en una cámara
cerrada que contiene una planta o un cultivo en
crecimiento, junto con el suelo o sustrato necesario para el
desarrollo de las raíces. La cámara está equipada con
sensores de temperatura, humedad y flujo de aire que
permiten medir y controlar las condiciones ambientales
dentro de la cámara.
El evapotranspirometro mide la tasa de evaporación del
agua de la superficie del suelo y la transpiración de las
plantas a través de sensores y sistemas de medición precisos.
Lisímetros: Los lisímetros son instrumentos utilizados en
estudios hidrológicos para medir y monitorear el
movimiento del agua en el suelo. Son estructuras
especiales diseñadas para permitir la recolección y
medición precisa del drenaje y la percolación del agua a
través del perfil del suelo.
Un lisímetro típico consiste en un recipiente o caja de
tamaño y forma conocidos que se entierra en el suelo hasta
cierta profundidad. El lisímetro se llena con una cierta cantidad de suelo representativo de
la zona de estudio, junto con una planta o cultivo en crecimiento si el objetivo es medir la
evapotranspiración.
Los lisímetros se utilizan para diversos fines, como estudiar el balance hídrico en una
cuenca hidrográfica, evaluar la eficiencia del riego en agricultura, investigar la lixiviación
de nutrientes y contaminantes en el suelo, y estimar la evapotranspiración real de las
plantas.
Por medio de datos meteorológicos: La medición de la evapotranspiración a partir de
datos meteorológicos se basa en la relación entre los
factores climáticos y la evaporación/transpiración
de agua. Existen varios métodos y fórmulas que
utilizan variables meteorológicas para estimar la
evapotranspiración de manera indirecta. Dos de los
métodos más utilizados son el método de Penman-
Monteith y el método de Hargreaves-Samani.
1. Método de Penman-Monteith: Este método se
considera uno de los enfoques más precisos para estimar la evapotranspiración. Se basa
en la ecuación de Penman, que relaciona la evaporación potencial con variables
meteorológicas como la radiación solar, la temperatura del aire, la humedad relativa y la
velocidad del viento. Este método requiere datos meteorológicos detallados y precisos,
incluyendo la radiación solar, la temperatura del aire, la humedad relativa, la velocidad
del viento y la presión atmosférica.
2. Método de Hargreaves-Samani: Este método es más simple y utiliza la temperatura del
aire y la duración diaria de la luz solar para estimar la evapotranspiración. Se basa en
una relación empírica entre la temperatura y la evapotranspiración potencial. Es más
adecuado para áreas donde no se disponen de datos meteorológicos completos y
detallados.
Fuentes:
https://hidrologia.usal.es/temas/Evapotransp.pdf
https://www.mapa.gob.es/es/desarrollo-rural/temas/gestion-sostenible-regadios/
Evapotranspiraci%C3%B3n_tcm30-82951.pdf
https://www.ecured.cu/Lis%C3%ADmetro
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Aparatos para medir la infiltración:
Infiltrometros: Los infiltrometros son instrumentos utilizados para medir la velocidad de
infiltración del agua en el suelo. Se utilizan para evaluar la capacidad del suelo para
absorber y retener el agua, lo que es importante para comprender la disponibilidad de agua
para las plantas, la recarga de acuíferos y el diseño de sistemas de drenaje.
Un infiltrometro típico consta de un cilindro o anillo metálico que se coloca en la superficie
del suelo. El anillo se inserta en el suelo a una profundidad conocida, creando así una
cámara cerrada. Luego se agrega agua al infiltrometro y se mide el tiempo que tarda el agua
en infiltrarse completamente en el suelo.
Existen diferentes tipos de infiltrometros, que pueden variar en tamaño, diseño y método de
medición. Algunos infiltrometros utilizan un cilindro con una altura fija de agua y miden el
tiempo que tarda en disminuir a medida que se infiltra en el suelo. Otros infiltrometros
tienen sensores de presión o caudal para medir la tasa de infiltración directamente.
La medición de la infiltración del agua con infiltrometros proporciona información sobre la
conductividad hidráulica del suelo, es decir, la capacidad del suelo para transmitir el agua.
Esto puede variar según la textura del suelo, la estructura, la compactación y otros factores.
Los infiltrometros se utilizan en estudios
hidrológicos, agrícolas y de ingeniería civil
para evaluar la capacidad de infiltración del
suelo y determinar parámetros importantes
para el diseño de sistemas de drenaje, riego y
conservación del agua. También se utilizan
en investigaciones científicas para
comprender mejor los procesos de
infiltración y la interacción entre el agua y el
suelo.

Fuente:
https://www.tiloom.com/producto/infiltrometro-de-doble-anillo/

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