Está en la página 1de 2

Coronilla a la Madre de la Misericordia

Se comienza diciendo:

"Dios te Salve Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza


nuestra, Dios te salve. A ti llamamos los desterrados hijos de Eva; a ti
suspiramos, gimiendo y llorando, en este valle de lágrimas. Ea, pues,
Señora, abogada nuestra, vuelve a nosotros, esos tus ojos
misericordiosos. Y, después de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto
bendito de tu vientre. ¡Oh clementísima, OH piadosa, ¡OH dulce Virgen
María! Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios, para que seamos
dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo. Amén.

Al comienzo de cada decena (Lo que sería en el Santo Rosario el


Padre Nuestro)

María, Madre de la gracia y Madre de la Misericordia, protégenos de los


enemigos y acógenos en la hora de la muerte.

En cada cuenta de la decena (Lo que sería en el Santo Rosario el


ave maría 10 veces):

"María, Madre de la Misericordia,


R/ alcánzanos la misericordia de tu hijo."

Al final:

Madre misericordiosa, nos abres tus brazos y tiendes las manos llenas
de toda clase de gracias y dones. Tu corazón de Madre desea colmarnos
de todo lo que necesitamos. Y, Ante todo, haz con tu poderosa
intercesión, que guardemos la pureza y la inocencia, que cuidemos con
fidelidad y perseverancia el amor de niños hacia ti y que llevemos en
nuestros corazones la imagen del Corazón de tu Hijo. Que este Corazón
nos proteja, nos guie y nos lleve a la luz eterna. Amén.

Oremos
Señor Dios nuestro, permite a tus siervos gozar de la duradera salud del
alma y del cuerpo, y por la intersección de nuestra señora siempre
virgen, líbranos de las aflicciones temporales, y concédenos la
bienaventuranza eterna, por Jesucristo nuestro Señor. Amen.
Bajo tu amparo nos acogemos santa madre de Dios, no desprecies las
oraciones que te dirigimos, en nuestras necesidades, antes bien líbranos
de todo peligro oh virgen, gloriosa y bendita.

Presentación de los hijos a la Madre de la Misericordia.


Santísima Virgen María, en este día traigo ante tu altar a mi hijo (a), lo
presento y lo consagro a la ternura y cuidado de la Madre de la
Misericordia.
Madre de la Misericordia tu que protegiste a tu hijo Jesús contra los
peligros y lo educaste con amor, preserva a mi hijo (a) de todos los
males.
Madre de la Misericordia ayúdame a cumplir la misión de madre, para
que con mi esfuerzo y sacrificio le puede enseñar a mi hijo (a), a crecer
y practicar las verdades de la fe, amar al prójimo, y a vivir según las
exigencias del evangelio.
Y si algún día pierde la gracia, enséñale, Madre de la Misericordia el
camino para que regrese a la casa del padre. AMEN.

También podría gustarte