Byung-Chul Han
No-cosas
Quiebras del mundo de hoy
‘Traduccion de Joaguin Chamorre Mielke
taurus
T
DE LA COSA A LA NO-COSA
london terrenoyel orden dela tiers, se compone de
‘cosas que adquiezen wna forma duradera ycrean un
‘entorno estable donde habitar. Son esas «cosas del
mundo», enel sentido de Hannah Arendt, las que
corresponde la misign de eestabilizar la vida huma-
na».! Ellas le dan un sostén. Bl orden terreno esté
siendo hoy sustituido por el orden digital. Este des-
naturaliza las cosas del mundo informatizndolas.
Hace décadas, el tebrico de los medios de comuni-
cacién Vilém Flusser ya observ6 que «las no-cosas
ppenetran actualmente por todos los lados en nuestro
‘entomo,y desplazan a las cosas. A estas se las llama
informaciones».? Hoy nos encontramos en la transi~
cidn dela era de as cosas la era de las no-cosas. Es
Iainformacién, no las cosas, la que determina el mun
doen que vivimos. Yano habitamosla terra yel ciel,
no Google Eat lane Emando rac
‘vermis intangible, nublado y espectral. Nada es si-
doy tangible
‘Las cosas estabilizan la vida humana, xy su objeti-
vidad radica en el hecho de que [...] los hombres,
pesar de su siempre cambiante naturaleza, puedenrecuperarsu unicidad, es deci su identdad, al relacio-
narla con la misma silla y con la misma mesa».? Las
‘cosas son polos de reposo de la vida. En la actualidad,
‘estén completamente recubiertas de informacién. Los
impulsos de informacién son todo menos polos de
reposo de la vida. No es posible detenerseen la infor-
macién, Tiene un intervalo de actualidad muy redu-
ido, Vive del estimulo que es la sorpresa. Ya por su
fugacidad, desestabiliza la vida. Reclama hoy perma-
nentemente nuestra atencién. El tsunami de infor-
‘macin arrastra al propio sistema cognitivo en suagi-
‘acién. Las informaciones no son unidades-estables.
Carecen de a imeza del ser Niklas Lubmann cara
teriza asi la informacin: Su cosmologia no es una
cosmologia del sex, sino de la contingenciaw.*
Las cosas retroceden cada ver ms aun segundo
plano de atencién. La actual hiperinflacién de las
cosas, que eva a su mltiplicacin explosiva, delata
precisimentelacrecienteindiferencia hacia as cosas.
‘Nuestra obsesién no son ya las cosas, sino la informa~
cidn y los datos. Ahora producimos y consumimos
mis informacién que cosas. Nos intoxicamoslite-
ralmente con{a comunicacién, Las energis libidina~
Tes se apartan de as cosa y ocupan ls no-eosas. La
consecuencia es la infomanta. Ya nos hemos vuelto
todos infbmanos. El fetichismo de as cosas se ha aca
bado. Nos volvemos fetichistas de la informacién y
Jos datos. Hasta se habla ya de «datasexuales»,
‘La Revolusién Industral efora6 yexpandié la es-
{era de las cosas. Solo nos alejaba de la naturaleza y la
artesania, La digitalizacion acaba con el paradigms
de las cosas. Supedita estas ala informacién, El hard-
ware es soporte de software. Es secundario a infor-
‘macién, Su miniaturizaciOn lo hace contraerse cada
‘vez mis. La internet de ls cosa lo convierte en ter~
‘minal de informacién. Las impresoras 3D invalidan
cl rerde las cosas. Las degradan a derivados materia
Jes de la informacion
{Bat ut se convicrten las cosas cuando prevalece
1a informacin? La informatizacin del mundo con-
verte las cosas en infématas es decir en actores que
rocesan informacin, Elautomévil del futuro dejar
deer una cosa ala que puedan asociarsefantasmas de
poder y potesién para ser una ered informative»
movil, es decir, un infémata que se comunica con
nosotros: «[El coche] os habla, os informa “esponti-
neamente” sobre su estado general,y sobre el vestro
(negindose eventualmente a funcionar,si no funcio-
nis bien) el coche consultantey deliberante, pareja,
cn una negociacién general del modo de vida [Jo
Elandlisis heideggeriano del Daseinen Sery tiem
_porequiere una revision que tenga en cuenta a infor~
‘matizacién del mundo. El «ser-en-el-mundo» de
Heidegger consiste en emanejar» cosas que estén
svorbander» 0