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Genograma

Reflexión del genograma:


Para mi el primer valor que tiene el genograma es el impacto visual. Con la visualización del mismo pude evidenciar
claramente la estructura y la funcionalidad de mi familia. Tanto en el patrimonio, como en el genograma percibí cómo
se ampliaba mi conocimiento familiar.
Fue una forma de recoger, registrar, relacionar y exponer esa información y poder ver en el momento en que lo
realizaba como iban apareciendo roles, sistemas de interacción de las generaciones que conforman mi familia.
Verlo así plasmado en un papel ayudó a valorar esa historia familiar que a lo largo del tiempo fue teniendo similitudes
entre sus integrantes, contradicciones, diferentes valores y constructos que hoy son parte de lo que soy, de lo que me
constituye.
Poder ver quien es quien por separado, sin juzgar, analizando la época en la que cada uno vivió, la familia que lo
conformó. Esto fue más fácil que decir que hizo esa persona y lo que afectó su comportamiento.
Apareció un patrón funcional que siempre fue importante en mi vida, el trabajo. Lo considere así por la educación
que recibí y por lo que visualice en algunos adultos significativos de mi familia. Este valor aparece en la rama
femenina de mi familia, las mujeres que me antecedieron fueron grandes luchadoras y trabajadoras, por la necesidad
de una situación que vivieron en ese momento.
Este valor se transforma en mi, en parte, en un disvalor, en un patrón disfuncional, porque pude ver que se convirtió
en un exceso, que sin medir las consecuencias produjo enfermedades en mi abuela, mi madre y en mi.
Pusimos el trabajo por encima de nuestra salud, ellas por necesidades básicas no resueltas y yo por considerar que
era lo que debía hacer sin balancear el daño que producía.
Por otro lado, pude advertir que al pensar que el trabajo era lo más importante, juzgue automáticamente al resto de
mis ancestros hombres, que no lo tenían como prioridad a ese extremo.
Hoy pienso que mi abuelo como mi padre, mi tío e incluso mi hermano, tenían otras necesidades, distintas
ambiciones y otras formas de ver la vida, todas válidas. Sus necesidades no eran las mismas, pero el constructo “el
que no trabaja duro, es vago” fue un estandarte en la parte femenina de mi familia.
Otro valor que enarbolo mi vida es el “no debemos abandonar” ¿Qué considero yo que es abandonar? O no sentir
que me abandonó, me acompañó gran parte de mi vida.
Vi en el genograma el recorrido de ese patrón familiar.
Mi abuela fue abandonada por su marido, trabajó duro para poder alimentar a tres hijos sola.
Mi madre tuvo que ser criada por su madrina, ya que su mamá no podía alimentarla. Este es un nuevo abandono que
marcó a mi madre,ya que siempre creyó que su mamá también la abandonó.
Aprendió lo que es la supervivencia y puso también el trabajo como prioridad.
Cargue con el abandono de ambos inconscientemente no pudiendo soltar nada que yo consideraba que debía ser
cuidado, hasta que mediante años de proceso pude ver que yo no fui una niña abandonada, tuve una infancia feliz,
cuidada, querida. Cargue por años con un abandono que no era mío.
Hoy cuando lo veo en el genograma puedo identificarlo e integrarlo, ver el recorrido que hicieron hasta llegar a mi,
entenderlas, aceptarlas y comprender el comportamiento de ambas.
Lo que también pude ver es la falta de comunicación que hubo entre las parejas que me precedieron.
Fueron todas relaciones conflictivas, con mucha violencia verbal y sin validación de la mujer.
En la rama paterna hasta mi padre, hubo hombres que consideran a la mujer inferior, sometida a las consideraciones
masculinas.
Tuve la idealización de un matrimonio distinto, pero repetí patrones. Hombre machista, celoso, no valorador de su
mujer, pero trabajador.
El genograma me ayudó a ver el recorrido y comprender por qué.
Puede integrar a mi vida esta nueva realidad, porque es necesario integrar para no rechazar en el afuera, para poder
aceptar en otro sus diferencias.

Registro experiencial de las clases

● Primer trabajo en clase:

Le doy la bienvenida a todas las versiones, que me hacen ser yo.


Desde esta experiencia desde el yo soy/yo no soy, es de donde comprendí que soy todo lo que creo que soy más lo
que no creo que soy.
Fui descubriendo a mis convivientes, los que están muy presentes y los más ocultos. Yo soy la que se permite, la que
se juzga, la que suelta, la que todo lo puede, la envidiosa, la caprichosa, la que tiene ira, odio, amor.
Voy tratando de verme en mi unicidad, actualizando día a día, regenerándome desde lo que soy y asociándose con la
parte de mi que me gusta.
¿Qué tipo de relación establezco conmigo?
¿Cómo me acompañó en esos momentos?
Son preguntas que van apareciendo, mientras mi tendencia a la actualización se va desplegando y mi noción de yo
resignificando, aceptando a todos los convivientes que me constituyen y acompañan cada día.
Son parte de mi ser persona y me ayudan a comprender desde donde me relaciono con los demás.
Aprendí que no soy responsable de mis heridas, pero si de mi sanación.
● Segundo trabajo en clase:

Me dibujo en el centro, luego a personas, palabras, cosas.


En este trabajo experience, cómo me relaciono con mi entorno y a partir de dibujarnos en el centro, dibujar a otras
personas.
Me repliqué, hubo otra Lili a mi lado que simbolizaba a mis convivientes y a partir de ahí dibujé a otras personas.
Observe que las personas mas cercanas eran las que estaban a mi alrededor, las más afines, las que amo, quiero,
respeto y con las que comparto creencias y valores.
Luego fui incorporando a otras personas diferentes, diversas, que están en mi realidad, que comencé a aceptar, a
comprender y a empatizar.
Leí algo que me pareció que lo explica: “Las personas diversas sostienen los espejos para que pueda verme, gracias a
que lo sostienen puedo ver la otra parte de mi que sino no podría ver. En cada uno de esos espejos veo algo que me
gusta y alo que me disgusta, y puedo ver que estos espejos me están enseñando aquello que sin ese espejo yo no
sabía que yo también tengo”
El juicio y la opinión que tengo de alguien siempre va a recaer en mí, por ello es tan importante no hacer juicios.
Cuando debíamos poner nombre a personas con las que no puedo tener aceptación, empatía, no pude visualizar
rostros, pero sí actitudes y conductas humanas que no puedo aceptar. La indiferencia ante el sufrimiento del otro, el
hambre, las necesidades básicas no resueltas, la crueldad y el fanatismo cueste lo que cueste, etc.
Trato de entender que detrás de cada persona con estas conductas que lastima y perjudica a tantos, hay un ser
humano dañado que sufre, pero a pesar de comprender su marco de referencia no puedo aceptar aun a ese ser.
● Tercer ejercicio en clase:

Otro ejercicio que tuvimos tuvo que ver con la escucha. El primero de conciencia corporal. La consigna de uno a diez
donde se repite el diez. Pude escucharlo, pero sin decirlo.
El siguiente ejercicio fue también de escucha sobre las palabras dibujar y hacer.
Al tener ejercitado el hacer en mi vida cotidiana, por el tipo de trabajo que desarrolló diariamente, puede
diferenciar “dibujar una casa de hacer una casa”. La escucha activa estuvo en mi presente en ese momento y me
encontré haciendo un avioncito con lo que tenía a mano.

● Entrevista con Rogers:

En un principio me identifique con la problemática del consultante, por situaciones similares de salud y su manera de
percibir ese dolor de discriminación. Lo registré y pude correr, salir del problema y enfocarme en la persona. Pude
identificar como Rogers iba encontrando distintos caminos para acompañar a la persona.
Como es necesario un clima de confianza donde el consultante pueda expresar todas sus emociones, donde sienta
que es valorado y respetado, para no levantar las defensas y poder explorar libremente. Rogers dice algo tan simple y
a la vez tan complejo “Ser el compañero comprensivo en este viaje peligroso”.
Lo que me sucedió después de haber registrado la identificación, es estar cada vez más metida en la entrevista, sin
notar el entorno y de las tres actitudes comenzar a comprender al consultante.
Aceptar a la persona que allí estaba, validando a ese ser humano, que sufre y pude acompañar teniendo en cuenta su
marco de referencia, para lograr así una comprensión empática en esta interrelación de ayuda desinteresada.
Comentar entre todos los compañeros la entrevista en clase, me ayudó para entender los distintos puntos de vista de
cada uno, formas de pensar, percibir, comprender, que muchas veces aclaran lo que no teníamos tan claro.
● Entrevista (consultor-consultante) Dany:

Como reflexión de la entrevista percibí que pude observar, aislarme y escucharlas a ambas, corriendo a Dany como
compañera y viéndola como una consultante.
No me molestaron los momentos de silencio entre ambas. Percibí su ansiedad sin involucrarme.
Cuando aparecieron momentos de identificación los pude correr, percibí lo que era mío, y fui despejando el camino
para aceptar y comprender. Estar presente en las tres actitudes básicas era mi meta.
Como aprendizaje de la entrevista percibí que tengo que darme tiempo para aprender, porque en un momento sentí
una gran exigencia, por no saber si llegaría a ser una counselor capacitada.

● Clase de escucha del soliloquio:

Cuando terminó la entrevista una semana antes de esta escucha, tuve que realizar el soliloquio inmediatamente,
porque sentí muchas dudas y gran incertidumbre. Me preguntaba si yo podría hacer esto, si tenía el conocimiento y la
capacidad.
Fue pasando la semana y al reflexionarlo comprendí que esta formación como otras necesita de la experiencia, y que
existe la supervisión que me dará más experiencia para poder desarrollarme en esta tarea.
Cuando volví a escuchar el soliloquio una semana después, note hasta cierto grado de angustia en mi que me generó
la pregunta que me hice. Más tranquila luego al reflexionarlo.
En cuanto a la entrevista pude percibir que por un momento me identifique, pero pude salir rápidamente.
Note también lo maravilloso que es cuando dos personas pueden relacionarse en un clima de amabilidad y respeto.
También fue muy interesante el compartir en grupo, notar las diferencias de opiniones y aprender con el otro.
● Explicación de mi genograma:

excelente esta clase, que gran aprendizaje. Haber compartido mi experiencia del genograma con el grupo. Poder
decirlo frente a todos, animarme, sostenerme emocionalmente, porque todavía estoy conmovida. Cada vez que
puedo abrirme al otro es un paso más en mi aprendizaje.
Sentirme escuchada, no juzgada, en un clima de mucho amor y comprensión me alienta a seguir en este camino que
me he propuesto.
Entendí que en la relación con mi madre no era necesario decidir por una línea que nos una, que son infinitas las
emociones, los sentimientos que fueron uniéndonos a lo largo de nuestra vida. Cantidad de líneas desde mi hacia ella,
desde ella hacia mi.
Fue un vínculo fuerte que me marcó, del que aprendí muchísimo. De lo que yo considere bueno o malo y que hoy
logré ver que hizo lo que pudo, que ella también tuvo su historia.
parte de esta historia está en mí, el resto es el camino que yo decido tomar. Aprendo con el otro y desde el otro, es lo
que me quedo de esta clase y que el respeto es fundamental en toda relación, porque si sufrimos nosotros también
los otros sufren, aman, lloran, padecen, ríen etc.
Escucharme a mí misma me ayudó a volver a resignificarme y a comprenderme.
Gracias por la escucha!!!

● Aprendizaje significativo del cuatrimestre:

En mi aprendizaje significativo del cuatrimestre pude desarrollar la escucha activa, hacer, observar sin interferencias.
Sentimientos y emociones fueron experimentados sin sentirme juzgada por mis compañeros y profesores.
Pude compartir, y al escucharme, fui ganando en sensibilidad humana, responsabilidad y humildad. Pude discernir
dónde están mis puntos dolorosos y cuál es la razón por la que lo siento.
También pude escuchar a otros, liberándome de mis prejuicios, e identificarlos para poder integrarlos. Estoy
aprendiendo a escuchar a los que piensan y creen distinto, sin juzgarlos y ver porque resuena esto en mi.
Creo que las diferencias me enriquecen y me dan la oportunidad de aprender, crecer y conectar con los otros desde
su mundo de significados. Las diferencias no son obstáculos, son crecimiento.
Otro aprendizaje tiene que ver con el registro de mi noción de yo, de mi marco de referencia interno.
Puede registrar que hubo cambios en mi forma de percibirse, fui ganando en seguridad y descubriéndome.
Vi algo acerca de mí que no estaba incluido en lo que creía de mí y se activo mi tendencia a la actualización del yo.
Por momentos me costó verme desde otro lado, era peligroso, mucho por reconocer, muchos constructos que soltar
y muchas historias que aceptar.
Ser amorosa conmigo me cuesta. Un valor familiar que no estuvo presente, que voy tratando de incorporar dia a dia,
que puedo entender que no es mio y que vino a lo largo de mi historia familiar.

● Autoevaluación:

En mi autoevaluación del cuatrimestre puedo decir que: me involucre con la materia y que voy incorporando lo
aprendido a mi vida diaria, a mi entorno y a mi vida de relación.
Tuve como premisa comenzar por los que me rodean para que el círculo se vaya abriendo cada dia mas.
Mantengo siempre la frase que me guía: “lo personal es lo universal” y desde aquí me voy desarrollando.
Estoy dispuesta para esta formación, tengo disponibilidad para aprender y dejarme atravesar.
Cómo ser, persona quiero aportar al mundo, es mi meta, ser un grano de arena que sume.
Tengo mucho que aprender, sigo trabajando en el proceso de ser persona que se que no termina nunca, y que influirá
en mi forma de ser como profesional.
Agradezco la oportunidad de compartir con todas las personas que se cruzan en mi camino, en este camino de
aprendizaje sin fin.

Nota numérica: 9

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