La página del Libro

Había una vez una página perdida en el vasto libro del cosmos, dedicada exclusivamente a la luna y
las estrellas. Esta página mágica se encontraba en algún rincón olvidado del universo, donde los
destellos de la luna y las constelaciones danzaban en un juego eterno de luz.

En esta página, vivía un ratón intrépido llamado Estelarito. Estelarito soñaba con explorar el espacio
y descubrir los secretos ocultos entre las estrellas. Un día, encontró un antiguo cohete abandonado
que yacía en una esquina de la página lunar.

Movido por su deseo de aventura, Estelarito decidió convertir el viejo cohete en su nave espacial.
Con ingenio y determinación, construyó un pequeño asiento de piloto y ajustó los controles para
adaptarlos a sus diminutas patas. Su cohete, ahora listo para el despegue, brillaba con destellos de
plata reflejando la luz de la luna.

El ratón aventurero subió a bordo, ajustó su casco espacial y se preparó para el viaje estelar. Con un
rugido suave, el cohete despegó de la página lunar, atravesando el cielo estrellado hacia lo
desconocido.

A medida que Estelarito exploraba el espacio, descubría constelaciones que nunca antes había visto.
Cada estrella contaba historias antiguas, y la luna compartía sus secretos más profundos. El ratón,
con ojos curiosos, absorbía cada detalle con asombro.

En su travesía, Estelarito se encontró con criaturas celestiales amigables que le enseñaron lecciones
valiosas sobre la importancia de la exploración y el descubrimiento. Con cada encuentro, su deseo
de volar más allá de los límites del cielo se fortalecía.

Finalmente, Estelarito se convirtió en un capitán estelar respetado entre las criaturas cósmicas. Su
historia se inscribió en la página celestial, recordando a todos que incluso el ratón más pequeño
puede alcanzar las estrellas si sigue sus sueños con determinación y coraje.