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Universidad Autónoma de Nuevo León

Facultad de ciencias de la comunicación

EVIDENCIA 1 -
REPORTE
MAESTRA HEIDI ALEJANDRA ROSAS TREVIÑO

Aliz Tobias Guajardo 2057954

11 de febrero del 2024


INTRODUCCION

La violencia doméstica y de género es un problema social de gran


magnitud que afecta a millones de personas en todo el mundo. Se
manifiesta en diversas formas, incluyendo el abuso físico, emocional,
sexual y económico, principalmente contra mujeres y niñas, aunque
también afecta a hombres y personas de otras identidades de
género. Esta problemática está arraigada en poder desiguales,
normas culturales y sociales discriminatorias, y la falta de acceso a
recursos y apoyo para las víctimas.

En este reporte, se analiza la resolución de la problemática de


violencia doméstica y de género desde diferentes áreas del
conocimiento, enmarcadas en la ética y la cultura de la legalidad. Se
examinan las relaciones del caso con los conceptos de la UA (Unidad
de Análisis), se identifican las áreas del conocimiento relevantes para
su solución, y se presentan alternativas de solución que abordan los
aspectos psicológicos, sociológicos, legales, de trabajo social y de
salud pública involucrados en la problemática.

El objetivo de este reporte es proporcionar un análisis integral y


multidisciplinario que contribuya a la comprensión y abordaje efectivo
de la violencia doméstica y de género, promoviendo así la
construcción de sociedades más justas, igualitarias y libres de
violencia.
AREAS DE CONOCIMIENTO

1. Psicología: Comprender los factores psicológicos que contribuyen


tanto a la victimización como a la perpetración de la violencia
doméstica y de género, así como el impacto en la salud mental de las
víctimas.

2. Sociología: Analizar las estructuras sociales, las normas culturales


y los roles de género que perpetúan la violencia doméstica y de
género en la sociedad.

3. Derecho: Examinar las leyes y políticas relacionadas con la


violencia doméstica y de género, así como los mecanismos legales
disponibles para proteger a las víctimas y sancionar a los agresores.

4. Trabajo social: Proporcionar apoyo y recursos a las víctimas de


violencia doméstica y de género, así como intervenir para prevenir
futuros casos de violencia.

5. Salud pública: Abordar el impacto de la violencia doméstica y de


género en la salud pública y desarrollar estrategias de prevención y
respuesta a nivel comunitario.

6. Educación: Promover la educación y la conciencia sobre la


violencia doméstica y de género, así como fomentar relaciones
saludables y respetuosas desde una edad temprana.

7. Trabajo en equipo interdisciplinario: Coordinar esfuerzos entre


diferentes profesionales y sectores para abordar de manera integral
la violencia doméstica y de género.
PUNTOS MAS IMPORTANTES PARA LA TOMA DE
DECISIONES Y ALTER DE SOLUCION

1. Psicología:
- Ofrecer terapia individual y de pareja para ayudar a las víctimas y a
los agresores a abordar las causas subyacentes de la violencia y a
desarrollar habilidades para manejar conflictos de manera saludable.
- Promover programas de intervención temprana para identificar y
apoyar a niños y adolescentes que han sido expuestos a la violencia
doméstica, con el fin de prevenir la perpetuación del ciclo de la
violencia en futuras generaciones.

2. Sociología:
- Realizar campañas de concientización y educación para desafiar
los estereotipos de género y fomentar relaciones basadas en el
respeto mutuo y la igualdad.
- Apoyar iniciativas comunitarias que promuevan la inclusión social y
la solidaridad como formas de prevenir la violencia y apoyar a las
víctimas.

3. Derecho:
- Fortalecer y hacer cumplir las leyes y políticas que protegen a las
víctimas de violencia doméstica, garantizando el acceso a la justicia y
la protección adecuada.
- Brindar capacitación a profesionales del sistema legal y de justicia
en enfoques sensibles al género y a las necesidades de las víctimas
de violencia.

4. Trabajo social:
- Establecer servicios de apoyo integrales, como refugios seguros,
líneas telefónicas de ayuda y asesoramiento psicológico, para ayudar
a las víctimas a salir de situaciones de violencia y reconstruir sus
vidas.
- Implementar programas de intervención familiar que aborden las
dinámicas de poder y control en relaciones abusivas y promuevan la
seguridad y el bienestar de todos los miembros de la familia.
5. Salud pública:
- Desarrollar programas de prevención y detección temprana de
la violencia doméstica en entornos de atención médica, con
capacitación para profesionales de la salud en la identificación de
signos de abuso y en la derivación adecuada de las víctimas a
servicios de apoyo.
- Coordinar esfuerzos intersectoriales para abordar las
determinantes sociales de la salud que contribuyen a la violencia
doméstica, como la pobreza, el desempleo y la falta de acceso a
servicios sociales.

DECISIONES QUE FORTALECEN EL ESTADO DE


DERECHO:
1. Protección de los derechos humanos: Las medidas legales y
sociales propuestas garantizan el respeto y la protección de los
derechos fundamentales de las víctimas, promoviendo así un Estado
de Derecho basado en la igualdad y la justicia.

2. Aplicación efectiva de la ley: El fortalecimiento de leyes y políticas


relacionadas con la violencia doméstica asegura que los agresores
sean responsabilizados por sus acciones y que las víctimas reciban el
apoyo necesario para buscar justicia.

3. Acceso a la justicia: Las acciones propuestas


amplían el acceso de las víctimas a recursos legales y de apoyo,
empoderándolas para buscar ayuda y protección dentro del sistema
legal y de justicia.

4. Prevención del delito: Los programas de prevención y detección


temprana contribuyen a reducir la incidencia de la violencia
doméstica, promoviendo un ambiente de seguridad y bienestar en la
sociedad.

Al fortalecer el Estado de Derecho a través de estas decisiones, se


crea un entorno en el que los derechos de todos los ciudadanos son
respetados y protegidos, promoviendo la paz, la seguridad y el
desarrollo sostenible de la sociedad.
CONCLUSION

La violencia doméstica y de género es una realidad que afecta a


millones de personas en todo el mundo, generando un impacto
devastador en la vida de las víctimas y en la sociedad en su conjunto.
Sin embargo, mediante un enfoque integral y multidisciplinario, es
posible abordar esta problemática y promover sociedades más
justas, igualitarias y libres de violencia.

En este reporte, se han presentado alternativas de solución por áreas


del conocimiento en el marco de la ética y la cultura de la legalidad,
destacando la importancia de acciones coordinadas desde la
psicología, la sociología, el derecho, el trabajo social y la salud
pública. Estas acciones van desde la prevención y detección
temprana de la violencia, hasta la protección y apoyo a las víctimas, y
la sanción de los agresores.

Además, se ha argumentado cómo estas decisiones fortalecen el


Estado de Derecho, al garantizar la protección de los derechos
humanos, la aplicación efectiva de la ley, el acceso a la justicia y la
prevención del delito. Al promover un ambiente de seguridad,
igualdad y respeto, se sientan las bases para la construcción de
sociedades más democráticas y equitativas.

Sin embargo, queda claro que el trabajo no ha concluido. Es


necesario continuar fortaleciendo las medidas de prevención,
protección y respuesta ante la violencia doméstica y de género, así
como promover una cultura de respeto, igualdad y no violencia en
todos los ámbitos de la sociedad. Solo así podremos avanzar hacia
un futuro donde todas las personas puedan vivir libres de miedo,
violencia y discriminación.

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