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VERSIÓN PROVISIONAL.

¿Es la macroeconomia
neutral al género?
MIRANDOO LA
MACROECONOMÍA CON
PERSPECTIVA DE GÉNERO.
NOTAS INTRODUCTORIAS PARA
ESTUDIANTES DE GRADO

Sesión 1: Los indicadores


económicos: PIB y EPA.
Visión crítica

Versión provisional.
M. Teresa Bartual Figueras
Departamento de Economía.
Universidad de Barcelona
VERSIÓN PROVISIONAL.

PARA EMPEZAR:

¿COMO LLEGAMOS A TENER NUESTRA COMIDA A LA MESA? ESTA ES LA PREGUNTA


FUNDAMENTAL DE LA ECONOMIA (…)

PARA ADAM SMITH SI LA COMIDA LLEGABA A LA MESA NO ERA GRACIAS A LA


BENEVOLENCIA DEL CARNICERO, CERVECERO O PANADERO SINO DE SUS MIRAS AL
INTERÉS PROPIO, ES DE QUIEN ESPERAMOS Y DEBERIAMOS ESPERAR EL
ALIMENTO……EL INTERÉS PROPIO ES LA LOCOMOTORA QUE HACE AVANZAR LA
ECONOMIA

PERO (….) EN LA EPOCA EN QUE ADAM SMITH ESCRIBIÓ SUS TEORIAS PARA QUE EL
CARNICERO, CERVERCERO Y PANADERO PUDIERAN TRABAJAR ERA CONDICION SINE
QUAN NOM QUE SUS ESPOSAS, MADRES O HERMANAS DEDICARAN HORA TRAS HORA
AL CUIDADO DEL HOGAR (….).

ADAM SMITH RESPONDIÓ LA PREGUNTA SOLO A MEDIAS (…) SI TENIA ASEGURADA


LA COMIDA NO ERA PORQUE LOS COMERCIANTES SIRVIERAN A SUS INTERESES (…)
LA TENIA ASEGURADA PORQUE SU MADRE SE ENCARGABA DE PONERSELA TODOS
LOS DIAS EN LA MESA. ADAM SMITH OLVIDÓ HABLARNOS DE SU MADRE

LO QUE CONOCEMOS POR ECONOMIA HA ESTADO SIEMPRE SUSTENTADA EN OTRAS


COSAS. LAS CUALES HAN ESTADO SIEMPRE EXCLUIDAS

Extractos del texto de:

Katrine Marça (2016). ¿Quién hacia la cena a Adam Smith? Una Historia de
Mujeres y Economía. Ed. Debate
VERSIÓN PROVISIONAL.

SESION 1: Introducción y elementos de crítica y


reflexión de los principales indicadores
económicos

1.1 ¿Qué implica introducir la mirada de género en la


Macroeconomía?

La macroeconomía estudia el comportamiento de la economía como un conjunto


integrado, es decir, considerando la suma de todas las decisiones de las familias, de las
empresas y del estado. Enfoca su atención en la observación de la evolución y tendencia
de un conjunto variables que denominamos agregados económicos o
macromagnitudes. Estos agregados nos permiten cuantificar, por ejemplo, la
producción nacional (PIB), el desempleo, la inflación, el déficit o superávit público, la
deuda o las relaciones con el exterior.

Los datos utilizados para el análisis macroeconómico se derivan, fundamentalmente, de


las estadísticas de empleo y precios y de la información derivada de las cuentas
nacionales y financieras relativas a cada país o región. En base a ello, se formulan las
políticas macroeconómicas. Estas políticas son las herramientas que tienen los
gobiernos y los Bancos Centrales para influir sobre el comportamiento y evolución de
los agregados económicos y, a través de ellos, sobre las formas de vida y el bienestar de
la población.

Pero ¿dónde está el género en todo lo descrito? ¿Dónde está el género en el PIB, el saldo
exterior, el déficit público o la inflación? ¿Hay sesgo de género en las políticas públicas?
Muchas personas responderían que la macroeconomía es una ciencia neutral al género,
que las variables macroeconómicas son impersonales y, por tanto, no existe sesgo de
género en ningún agregado o política económica. No obstante, piense un momento y
reflexione: ¿En la formulación y análisis de los agregados macroeconómicos, o de las
políticas, se toman en consideración las relaciones de poder, jerarquías o el componente
de género asociado a la distribución de los tiempos y trabajos? ……. Si ello no se
considera, ¿podemos intuir que la composición de gran parte de los indicadores
económicos es ciega al género?, entonces, si esto es así, ¿se pueden observar, por
ejemplo, los sesgos de género cuando se estudia la evolución del PIB o cuando se
analizan los efectos de las políticas económicas sobre la producción y el empleo?

A partir de las preguntas planteadas anteriormente podría deducirse o, cuanto menos,


intuir que las cuestiones macroeconómicas tienen un componente de género, que se
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esconde o queda oculto en la visión convencional. Ello es bastante explícito si


consideramos, por ejemplo, aspectos relacionados con el mercado laboral o las
decisiones de gasto en sanidad o servicios sociales. Si se analizan las estadísticas de
empleo puede observarse que las tasas de desempleo femenino son superiores al
desempleo masculino. También son las mujeres las que acumulan menor proporción de
renta salarial y mayor proporción de contratos temporales y a tiempo parcial (Conde,
2016). Por otro lado, las decisiones sobre los recortes del gasto en sanidad o en servicios
sociales afectan también más a las mujeres que a los hombres, al delegar parte de los
cuidados desde el ámbito público al hogar familiar (donde son asumidos,
mayoritariamente, por mujeres). Las investigaciones muestran también que las brechas
de género en educación, salud, trabajo no remunerado, empleo o salarios tienen efectos
sobre el crecimiento económico (Elson et al., 2000; Seguino, 2020). Los efectos se
transmiten tanto por el lado de la oferta, principalmente a través de la productividad
laboral, como del lado de la demanda, a través del gasto público, la inversión, las
exportaciones o el ahorro. El impacto dependerá de la estructura económica de cada
país o región y de la distribución socialmente establecida del trabajo remunerado y no
remunerado en función del género.

Esta breve nota pretende proporcionar, a un nivel introductorio, elementos de reflexión


sobre algunos de los principales conceptos e indicadores de la economía, mostrando
que el género importa. Su consideración permite una mejor diagnosis de los procesos
socioeconómicos y pone de relieve la importancia del componente social de la
economía. Introducir la perspectiva de género en un curso como éste implica la
importante tarea de abordar y visibilizar los aspectos que olvida o invisibiliza la
enseñanza convencional de esta materia.

1.2 Los indicadores de producción y empleo ¿Qué incluyen?


¿qué muestran? ¿Contabilizan todos los trabajos?

Como ya habrá estudiado en la introducción de la asignatura, aunque la macroeconomía


sigue la evolución de la inflación, el desempleo, los tipos de interés o el déficit y la deuda
pública, su objetivo principal suele especificarse, en términos de estabilidad económica
y crecimiento de PIB y del empleo. De este modo, el crecimiento del PIB se convierte en
un objetivo deseable que, además, se equipara o aproxima con una mejora del
bienestar.

Conceptualmente, el PIB integra el valor monetario de la producción de bienes y


servicios finales de una economía en un intervalo de tiempo determinado, y se formula
como el sumatoria del gasto agregado en Consumo (C), Inversión (I), Gasto Público (G)
y el sector exterior (X-M), formulándose como: PIB=C+I+G+(X-M). Al limitarse a los
aspectos monetarios resulta sorprendente ver cómo, en el cálculo del PIB, se considera
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al mismo nivel la producción de armamento de guerra o de artículos de lujo que, por


ejemplo, la producción de bienes de consumo básico o la provisión de servicios sociales
de educación, salud o cuidados. Desde este punto de vista, lo importante es el valor
monetario de los distintos agregados que componen el PIB. Esta apreciación nos lleva a
preguntarnos: ¿hasta qué punto el crecimiento del PIB puede interpretarse como una
mejora del bienestar de la sociedad? ¿Podemos asegurar que mejoran realmente todos
los estratos de la sociedad cuando mejora el PIB? ¿Son todas las producciones deseables
socialmente? ¿Este crecimiento considera todos los trabajos que han contribuido al
mismo? ¿Considera cómo se han distribuido esos trabajos entre hombres y mujeres?
¿Tiene en cuenta la generación de residuos y los posibles costes ambientales que genera
su obtención?

Desde la visión convencional, podemos partir del diagrama circular de la renta


simplificado1 para interpretar, de forma esquemática, el funcionamiento de la economía
(gráfico 1):

Gráfico 1: Flujo Circular de la Renta simplificado

Mercado de
factores

Familias Empresas

Mercado de
Bienes y servicios

1
A efectos de facilitar la interpretación se prescinde del Sector Público. Su introducción establecería una nueva relación de
transferencias de rentas y venta de bienes del Estado a familias y empresas y de un detracción de impuestos y tasas de éstas al Estado
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El análisis ortodoxo de este gráfico asume que las familias reciben unos ingresos
monetarios como retribución de los factores de producción (tierra, trabajo y capital) que
entregan al sector empresarial. Con dichos ingresos, las familias adquieren los bienes y
servicios producidos por las empresas. Estas, a su vez, utilizan, a cambio de una
remuneración, dichos factores de producción para elaborar bienes y servicios, que
estarán disponibles en el mercado para ser adquiridos. De este modo, se establece un
circuito real entre familias y empresas (las familias entregan factores de producción y
adquieren bienes y servicios) y un circuito monetario (las empresas remuneran los
factores de producción y reciben ingresos monetarios por la venda de los bienes y
servicios que elaboran). La relación solo considera el trabajo realizado en el mercado y
los bienes y servicios adquiridos en el mismo.

Observe, además, que el esquema no considera todos los costes de obtención de los
factores productivos. En este caso, y dado nuestro objeto de estudio, nos centraremos
específicamente en el factor trabajo. El mantenimiento y reproducción de la fuerza de
trabajo se vincula, única y exclusivamente, a la compra de bienes y servicios que realizan
las familias, como si el simple hecho de adquirir estos bienes permitiese el
mantenimiento y reproducción de las personas. Faltarían añadir, en consecuencia, los
flujos de valor que aportan los hogares a través del trabajo de cuidados, realizado
tradicionalmente por las mujeres de forma gratuita. Es ahora un buen momento para
que reflexione: ¿Qué se hace en los hogares con los bienes y servicios adquiridos en el
mercado? ¿Qué se realiza en su casa...? seguramente, usted habrá concluido que los
bienes y servicios adquiridos en el mercado se transforman, mediante trabajo
doméstico, en alimentos elaborados disponibles para ser injeridos… pero su producción
precisa, al menos, limpiar la cocina y los utensilios utilizados.

¿Pero se llevan a cabo más actividades en los hogares? Probablemente, ya se habrá dado
cuenta de que, en los hogares, se realizan también otros trabajos necesarios para la vida,
y que son especialmente intensos en determinados momentos del ciclo vital de las
personas (niñez, vejez, enfermedad y discapacidad). Así pues, cuando nos referimos al
trabajo realizado en los hogares, deberíamos considerar tanto las actividades tangibles
como, por ejemplo, la realización de la compra, la cocina, la limpieza de la casa, la
limpieza de la ropa o la plancha junto con otras actividades (de carácter intangible) que
proporcionan estabilidad emocional y afectiva, nos referimos, por ejemplo, al cuidado
de personas enfermas, dependientes, bebes pero también a la transmisión de valores y
saberes, a escuchar y mitigar tensiones……. actividades, por otra parte, indispensables
para la vida y para el desarrollo de capacidades personales (Carrasco, 2014; Pérez-
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Orozco, 2014; Picchio, 2003; Power, 2008); capacidades que, más adelante, serán
utilizadas también como factores productivos en el mercado laboral.

En consecuencia, se está planteando que los enfoques que se centran exclusivamente


en el mercado ocultan parte de los trabajos y procesos necesarios para que la población
que participa en el mercado laboral pueda acceder a éste pero, además, ignoran que
esos trabajos son también necesarios para la propia reproducción de la fuerza laboral,
el bienestar de la población y la vida. La inclusión de la perspectiva de género en el
análisis económico considera todos estos aspectos.

Así pues frente a la parcialidad del modelo convencional, se plantea el gráfico 2,


denominado circuito ampliado del trabajo, plantea la integración de todos aquellos
trabajos orientados hacia el bienestar de las personas y su reproducción. El gráfico,
incorpora tanto el trabajo mercantil o monetizado (derivado de la participación en el
mercado laboral) como el trabajo de cuidados y asume la interrelación entre ambos.
Esto es, considera todas las contribuciones de tiempo, mercancías y dinero que son
necesarias para mantener y reproducir la vida y, en consecuencia, la fuerza laboral.
Desde este punto de vista, se evidencia como la economía convencional, tal y como es
definida y explicada en los manuales de economía, no considera el efecto del trabajo de
cuidado en la formación de las capacidades y en el desarrollo humano. Desplaza, por
tanto, parte de los trabajos necesarios para renovar la fuerza laboral a la esfera
doméstica, no pagando específicamente por ellos. De hecho, la producción capitalista
se sostiene gracias al trabajo de cuidados realizado desde los hogares de forma gratuita.
Al invisibilizar estos trabajos y procesos, el sistema económico estaría aprovechándose
de un trabajo necesario para que el sistema económico pueda funcionar, eludiendo las
responsabilidades sobre la reproducción de la fuerza de trabajo y, en definitiva, sobre
las condiciones de vida.
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Gráfico 2: Circuito ampliado del trabajo

Espacio
Producción Remuneración factores producción EMPRESAS
Mercantil (salarios) (tiempo de trabajo remunerado)
Objetivo:
BENEFICIO
O
Fuerza de trabajo (oferta laboral)
HOGARES
Espacio
ENTRADAS :
Desarrollo
Humano 1.- SALARIOS (permiten adquirir bienes y
servicios)
Objetivo: Reproducción personas
2.- TRABAJOS DOMÉSTICOS Y DE CUIDADOS
Sostenibilidad
de la vida

Producción de bienes y servicios


Relaciones y afectos
Educación, cuidados, salud y bienestar

Fuente: Carrasco, Cristina (2014).

El gráfico 2, permite también visualizar las desigualdades existentes entre hombres y


mujeres en la asignación de tiempos y trabajos. Ello es consecuencia de nuestro modelo
de socialización, que asigna ideológicamente los trabajos en función del sexo y atribuye,
específicamente, a las mujeres los trabajos de cuidados (se trata de la conocida división
sexual del trabajo). La asunción de esta responsabilidad social implica una mayor carga
de trabajo para las mujeres y las sitúa en una posición menos favorable en cuanto a su
potencial acceso al mercado laboral. De hecho, de ello se infieren gran parte de las
diferencias observadas en el mercado laboral o de las brechas de salarios o en las
pensiones. Todos estos aspectos permiten discutir la generalización de la idea de
igualdad, entendida como la igualdad de participación en el espacio mercantil y público
que, aunque está reconocida desde el punto de vista normativo, no es real cuando se
considera la organización de la vida cotidiana de hombres y mujeres.

En síntesis, el trabajo de cuidados no remunerado es uno de los principales conceptos


que ha aportado la Economía Feminista al análisis económico. Su consideración modifica
los términos del análisis dado que al ser un trabajo que genera valor en el mercado
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(aunque no se intercambie en el mismo) es parte de la economía. No obstante, pese a


ese reconocimiento, actualmente, estos trabajos no se incluyen en la contabilidad
nacional, es decir, en el cálculo del PIB. Los esfuerzos por corregir esta invisibilidad se
han traducido en la construcción de las llamadas “cuentas satélites del trabajo no remu”.

Desde el punto de vista macroeconómico, hay que considerar, también, que parte de
este trabajo puede ser reemplazado por la adquisición de estos servicios en el mercado,
por ejemplo, estaríamos hablando tanto de la contratación de personas para la limpieza
del hogar, para el cuidado de niños o personas dependientes como del acceso a
guarderías, centros de cuidados de larga duración, etc. En estas situaciones, la carga de
trabajo se distribuiría entre trabajos realizados en el hogar de forma no remunerada y
trabajos de mercado, y éstos últimos serían contabilizados en el PIB

Este nuevo marco analítico permite replantear algunos conceptos e indicadores que
utiliza la economía convencional, concretamente el PIB y la EPA (encuesta de población
activa). Este replanteamiento conceptual es importante puesto que las políticas
económicas y los programas sociales toman los indicadores convencionales como
instrumentos de referencia.

1. La conceptualización del PIB.


Revise el video del INE sobre cómo se mide la actividad económica de un país
(4,29 minutos):
https://www.youtube.com/watch?v=cXeh7IoCZlI&list=PLJulBV7cVXicGdSJoFKvj
S0hWfSLycMmh&index=8

Investigue:
a. ¿Qué actividades integra? ¿Cómo se confecciona? ¿Con que periodicidad se
publica?
b. ¿Cómo afectaría al PIB la elaboración de una paella en casa? ¿Y si comemos
la misma paella en un restaurante?

Revise el video Marilyn Waring: The unpaid work that GDP ignores -- and why
it really counts
https://www.youtube.com/watch?v=HTfYv3IEOqM (15 minutos)

I la infografia de España de la siguiente Web: Counting Women's work project


https://www.countingwomenswork.org/news/cww-infographic-spain
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Investigue:
c. ¿La visión del video de Marilyn Waring le ha hecho reflexionar sobre el PIB
como instrumento de medición del bienestar y crecimiento económico?
¿Qué elementos críticos señalaría?
d. ¿Qué instrumento recoge la contribución del trabajo de cuidados no
remunerado (cocinar, cuidar personas dependientes…)? ¿Con que
periodicidad se pública este instrumento? ¿Cuál es la base de cálculo?
e. La revisión de la Infografía les proporcionaría información del peso de estas
actividades en España. ¿Según la misma, cuál es el valor económico
aproximado de estas actividades?

Pista: Encuestas de uso del tiempo. Estas encuestas cuantifican y


proporcionan información sobre la forma en la que distribuyen su tiempo de
mujeres y hombres, aportando evidencias sobre el desigual reparto del
trabajo total (remunerado y no remunerado) entre ambos sexos. Estas
encuestas permiten calcular, a través de las llamadas Cuentas satélite del
trabajo no remunerado, el valor económico que el tiempo de trabajo no
remunerado aporta al PIB de los países.

2. La conceptualización del trabajo. Desde el punto de vista de la economía


convencional, trabajo es sinónimo a empleo, es decir, se considera que el
trabajo es un factor de producción, el recurso humano que interviene en la
producción de mercado y permite la producción de bienes y servicios para la
venta. En esta conceptualización se olvidan, sin embargo, todos aquellos
trabajos que no pasan por los mercados, es decir, los realizados en el ámbito
doméstico y los de carácter voluntario. De este modo, para las estadísticas
laborales, el trabajo no remunerado realizado en la esfera doméstica ni es
productivo, ni es una actividad económica, ni tiene estatus de trabajo.

Las estadísticas oficiales se elaboran tomando como referencia el trabajo


mercantil. ¿Qué implica esto? Las implicaciones son importantes, dado que la
forma en que se recoge y se presenta la información, condicionan los resultados
y su interpretación.

El principal indicador de la situación y evolución del mercado de trabajo es la


EPA. La EPA clasifica a la población en función de su participación en el mercado
laboral, diferenciando entre:
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1.- Población activa, que incluye la población ocupada (personas que


ocupan un puesto en el mercado laboral) y la población parada (personas
que buscan activamente empleo en dicho mercado)
2.- Población inactiva, que recoge las personas no vinculadas con el
mercado laboral, es decir, que no participan en dicho mercado ni buscan
activamente empleo. En este apartado se incluirían las llamadas amas de
casa, las personas que reciben exclusivamente rentas del capital, las
personas pensionistas, etc.

Gráfico 4. Clasificación de la población según la EPA

Resto de población-
Población en edad de Población inactiva
trabajar (población
potencialmente activa) (personas que no tienen
edad legal para trabajar)

Fuerza de trabajo No Fuerza de trabajo


(población activa) Población inactiva

Ocupados (personas con Dessocupados (pesronas


Personass no disponibles
actividad laboral que buscan activamente
para el empleo
remunerada) empleo)

Fuente: Elaboración propia

En síntesis, la medición del trabajo propuesta por la EPA es incompleta, no prevé


la posibilidad de mano de obra gratuita y recoge mal las posibles relaciones
laborales de explotación o situaciones de trabajo a tiempo parcial no voluntarios.
Así, por ejemplo, una mujer que no participa en el mercado laboral pero trabaja
12 horas al día cuidando a su madre, persona dependiente de 88 años y a su hijo,
un desempleado de 30 años, sería clasificada de inactiva mientras que su hijo de
30 sería clasificado de población activa.
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En este punto, se propone que revise la metodología de la Encuesta de Población


Activa y reflexione:
https://www.ine.es/inebaseDYN/epa30308/docs/resumetepa21.pdf

a. ¿Qué trabajos recoge? ¿Qué se considera población ocupada? ¿Y población


activa?
b. ¿Dónde y cómo se integrarían los trabajos de cuidados realizados de forma
gratuita en el espacio doméstico?

Revise este video y esta infografía:


Video: ¿Que es trabajo? Nancy Folbre (3,24 minuts)
https://www.youtube.com/watch?v=I6xNW6K_RG0
Infografía:
https://interactive.unwomen.org/multimedia/infographic/changingworldofwor
k/en/index.html

Ahora reflexione sobre los siguientes aspectos:


a. ¿Cree que la EPA es un buen indicador de trabajo? ¿Por qué?
b. El Gap salarial se reduce en menor proporción que el GAP educacional. ¿Qué
elementos cree que pueden incidir en este hecho?
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REFERENCAS BIBLIOGRAFICAS

-CARRASCO, Cristina (2014): La economía feminista: ruptura teórica y propuesta política, en


Cristina Carrasco, Con voz propia, La Oveja Roja, Madrid, 7-37
-CONDE, Ignacio; MARRA, Ignacio (2016): Gender Gap in the Spanish Labor Market. FEDEA and
UCM.
-DURAN, María Ángeles (2013). El trabajo no remunerado en la economía global . Fundación
bbva.
-ELSON, Diane; CAGATAY, Nilufer (2000). The social content of macroeconomic policies. World
Development, 28 (7), 1347-1364.
-PEREZ-OROZCO, Amaia (2014). Del trabajo doméstico al trabajo de cuidados, en Cristina
Carrasco, Con voz propia, La Oveja Roja, Madrid, 48-73
-PICCHIO, Antonella (2009). Condiciones de vida: Perspectivas, análisis económico y políticas
públicas, Revista de Economía Crítica, 7, 27-54.
-POWER, Marilyn (2008). Social provisioning as a starting point for feminist economics, Feminist
Economics, 10(3), pp. 3-19.

Si desea profundizar:
Se proponen estos videos para ampliar, aprender y reflexionar:
1.- Economía del cuidado, responsabilidades y desigualdad de género:
https://www.youtube.com/watch?v=N2_BAAouTmM
https://www.youtube.com/watch?v=o_F6GO9lO54
2.- El trabajo no remunerado ocupa más horas que el trabajo formal:
https://www.youtube.com/watch?v=Wc_pOFxlTVk
4.- Estudio internacional de usos del tiempo
https://www.timeuse.org/mtus
5.- International Labour Organization
https://ilostat.ilo.org/es/resources/concepts-and-definitions/forms-of-work/
6.- Brecha salarial de género
Institute for Fiscal Studies UK:
https://www.youtube.com/watch?v=tnyIziYZ6bQ
European Union:
https://www.youtube.com/watch?v=Z-1m5NnURTI
https://commission.europa.eu/strategy-and-policy/policies/justice-and-
fundamental-rights/gender-equality/equal-pay/gender-pay-gap-situation-eu_en

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