Resumen del Libro: Los hombres son de Marte y las mujeres de Venus.

El hombre y la mujer son distintos. El hombre elimina su estrés, yendo a su cueva para pensar
en situaciones que hagan olvidar sus problemas. Las mujeres eliminan su estrés, hablando de
sus sentimientos o los problemas que tuvieron en el día. Por lo tanto, el hombre necesita
espacio para si mismo, y la mujer necesita ser escuchada. El hombre es propenso a dar
soluciones a los problemas, pero las mujeres no quieren soluciones, solo quieren ser
escuchadas.

El mayor temor de un hombre, es el miedo al fracaso o la creencia de que es incompetente

para una tarea. Esto se puede implantar en el hombre, desde que es un niño, al cual no le
supieron valorar sus logros desde pequeño. Cada error cometido, enseña una lección, la misma
que ayuda a llegar a su objetivo. No hay que tener miedo al fracaso o a los errores, de ellos
aprendemos.

Cuando las venusianas y los marcianos, se comunicaron, hablaban en diferentes idiomas.

Cuando había un conflicto en la comunicación, ellos se dirigían hacia sus diccionarios para
entenderse el uno al otro, sino lo lograban, iban a un traductor para ayudar a comunicarse.

Ideas que me gustaron del Libro: El sutil arte de que casi todo te importe una mierda

Muchos gurús de la autoayuda también ignoran este nivel (más profundo) de la

autoconciencia. Seleccionan gente que se siente miserable porque quiere ser millonada y
luego le dan toda clase de consejos sobre cómo hacer más dinero, ignorando todo ese tiempo
las preguntas importantes acerca de los valores de dichas personas: para empezar, ¿por qué
sienten esta gran necesidad de ser millonarios? ¿Cómo pretenden medir su nivel de
éxito/fracaso? ¿No será, acaso, que algún valor en particular es el origen de su infelicidad y no
el hecho de que aún no están conduciendo un Bentley?