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La carrera de la vida

Ensayo: La vida en la Ciudad

Samantha Marín Ramírez

Instituto Paulo Freire, Skolmi

Tutora 6. Gina Alejandra Gómez

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La carrera de la vida

3 de noviembre de 2023

La carrera de la Vida

Es verdad que en cada paso que damos en la vida, todo indica que intentamos correr

detrás del tiempo, y cada cosa sigue su rumbo independientemente de lo que hagamos o

intentemos hacer, independientemente de las decisiones que tomemos el tiempo corre sin parar y

la vida continúa. Sin embargo, se puede ver que en la ciudad el tiempo corre más rápido, los

afanes de cada día nos agobian y dejan menos tiempo para pensar sobre nuestras acciones,

encontrarnos a nosotros mismos y mejorar aquellas cosas que no van muy bien. El temor del

peligro que acecha en cada rincón de la ciudad nos impide salir a disfrutar del sol, de la luna y de

los paisajes y salud urbanos. Puede incluso llegar a ser una buena opción vivir en ambientes

rurales más que en los urbanos debido a la salud y el tiempo que se puede dedicar a aprender más

de la vida, pero, es realmente esto cierto, ¿que la vida en la ciudad resta más tiempo y es cada

vez menos saludable?

Podemos evaluar los hechos de la vida en cada ambiente, empezando por el Urbano. En

el ambiente urbano podemos observar un día a día en el que hay muchas cosas por realizar, los

días comienzan desde muy temprano, tal vez con un café para despertar las neuronas y una rutina

de limpieza tal vez para el trabajo o para el colegio. En general alrededor las actividades nunca

pararon, pues aún en la noche los carros pasaban y los comerciantes salían en sus camiones para

entregar la mercancía a otras ciudades, otros salían de viaje y algunos incluso solo vagaban sin

rumbo tal vez con una botella de alcohol en la mano o en discotecas bailando como si no hubiera

un mañana. Pero continuando con el día a día, seguimos con un día de trabajo que para algunos

dura mucho tiempo y les da apenas para comprar cualquier almuerzo o si te levantaste lo

suficientemente temprano comer lo hecho en la mañana, para los estudiantes una comida rápida
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o tal vez regresar a casa esperar lo que ha hecho su madre o padre, e incluso tal vez él mismo, y

las madres que han estado arreglando la casa y enseñando a los más chiquitos, otras sin embargo

trabajan y el día para ellas es mucho más pesado que para cualquiera más, pues les toca trabajar

tanto en casa como por fuera. Los días para todos son diferentes, pero al mismo tiempo son igual

de ajetreados sin importar quién sea, se trabaja sin cansancio sin poder seguir el curso de la vida

en la ciudad. Con esto en mente, podemos comparar la vida en el campo, que sí, tiene sus

esfuerzos, pero también sus ventajas, como lo es que a pesar que el día empieza temprano el

desayuno es adquirido proveniente de cultivos más naturales y propios. Puede que haya

contaminación, pero al ser menos comunes lo vehículos, la contaminación con gases tóxicos es

menor y eso ayuda a que se pueda respirar un aire más puro y sano para todos, parte del día a día.

Podemos ver igualmente que la contaminación que habita a diario en el mundo y que

además se encuentra más fuertemente almacenada en los territorios urbanos, afecta a nuestra

salud en más medida si vivimos en la ciudad. Es verdad que el calentamiento global se puede

encontrar alrededor del mundo, pero la contaminación del aire y el agua se ve más penetrante en

la vida urbana y las cifras respaldan el que en las zonas urbanas se producen más enfermedades

por contaminación, cerca del 80% de enfermedades respiratorias producidas por contaminación

son adquiridas en territorio urbano, mientras que cabe aclarar que la tasa de mortalidad aumenta

en territorios rurales debido a la mala atención médica. Por encima de esto, la vida rural es más

tranquila y pacífica, en armonía con el campo para meditación y aprender de la naturaleza, por

ende, la vida urbana al ser comparada con la vida rural, tiende a parecer como si corriera a mayor

velocidad con los afanes y el deterioro debido a las enfermedades que se adquieren.

Como conclusión, debemos recopilar los datos que hemos ido exponiendo, tales como la

contaminación, los afanes por el éxito, las enfermedades y el poco tiempo para disfrutar
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sanamente. Seguramente haya muchas razones para que una vida urbana sea menos elegible que

una vida en el campo, pero aun así hay que resaltar que ambas tienen tanto ventajas como

desventajas. Podemos decir que en realidad el tiempo no corre más rápido en los territorios

urbanos, porque el tiempo es el mismo sin importar en dónde se viva, pero da la impresión de

que corre más rápido debido a los afanes del día a día que viviendo en las ciudades tiende a

duplicarse, ¿y es verdad que la salud es mejor en los sitios rurales?, sí, la salud mejora

notablemente debido a la alimentación con productos sacados del campo, el aire que es un poco

más puro que en las grandes ciudades y la vida que baja un poco las revoluciones porque solo se

busca el sustento diario más no se busca la riqueza en extremo ni se compran productos con

intereses; pero debemos aclarar que también hay enfermedades en las zonas rurales, que debido a

la baja salubridad golpean con fuerza causando hasta la muerte en algunos casos. Podemos

finalizar nuestro texto diciendo que la vida en las zonas rurales, en grandes ciudades, es rápida,

casi fugaz, pero eso no significa que haya personas que la disfruten, así como hay otras que

prefieren una vida más tranquila en los espacios campestres, pero cada quién escoge cómo será la

carrera de su vida ¿cómo será la tuya?

Bibliografía:

 María Teresa Benítez de Lugo (mayo, 13 de 2016). El 80% de los habitantes de

las zonas urbanas viven expuestos a niveles elevados de contaminación. ABC

Sociedad. https://www.abc.es/sociedad/abci-80-por-ciento-habitantes-zonas-urbanas-

viven-expuestos-niveles-elevados-contaminacion-201605120646_noticia.html
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 Antonio Ortega (1997). Tablas de Mortalidad. Naciones Unidas, Centro

Latinoamericano de Demografía (CELADE). San José. Costa Rica (1948) Serie E,

N° 1004.