Está en la página 1de 2

www-vatican-va.translate.goog /content/paul-vi/it/motu_proprio/documents/hf_p-vi_motu-proprio_19710627_sedula-cura.

html

CARTA APOSTÓLICA EN FORMA DE MOTU PROPRIO DEL SUPREMO PONTÍFICE

SEDULA CURA

PABLO VI EN EL QUE SE ESTABLECEN NUEVAS LEYES PARA REORDENAR LA PONTIFICIA COMISIÓN


BÍBLICA

Resulta evidente arriba el diligente cuidado con el que la Iglesia ha trabajado continuamente para alcanzar un
conocimiento cada vez más profundo de la Sagrada Escritura, con el fin de ofrecer incesantemente a sus hijos el
alimento de la palabra divina (cf. Constitución dogmática Dei Verbum , n. 23). todo en nuestro tiempo, desde que el
Concilio Vaticano II estableció que, para promover más intensamente la vida cristiana, es necesario abrir más
abundante y ampliamente a los fieles las riquezas inconmensurables de la palabra de Dios.

La exaltada grandeza e importancia de esta tarea, a la que hoy se dedica con renovado fervor la Esposa de Cristo,
exige sin duda promover con todo esfuerzo el estudio de la Sagrada Escritura. Por esta razón el mismo Concilio
Ecuménico recomendó acertadamente: Los exegetas católicos y otros estudiosos de la Sagrada Teología,
colaborando con celo, se comprometen, bajo la supervisión del Sagrado Magisterio, a estudiar y explicar con los
medios apropiados, las Letras divinas, de modo que el mayor número posible de ministros de la palabra divina
puedan ofrecer fructíferamente el alimento de las Escrituras al pueblo de Dios ( ib ., n. 23).

Sin embargo, como el moderno progreso cultural plantea cada día nuevos problemas de difícil solución en este
campo de estudio, la tarea de quien se dedica a la Sagrada Escritura es muy difícil. Aunque deben cultivar estos
estudios con métodos que se ajusten a las recientes investigaciones científicas, saben que Dios ha confiado la
Sagrada Escritura a su Iglesia, y no al juicio privado de los eruditos, y por tanto debe ser interpretada según las
normas de la tradición y de la hermenéutica cristiana, bajo la dirección y custodia del Magisterio eclesiástico? (Cf.
VAT. CONC. I, ses. III, cap. II: De revelatione ; VAT. CONC. II, Constitución dogmática Dei Verbum , n. 12)

Impulsado, por el de desprotegido de promover mas el sano progreso de los estudios b?blicos y de interpretigác?n
de las Escriturasre libre de opiniones temerarias, como? como de coordinar de forma medida mía se entiende por la
colaboración la congénidad de los exégetas. (Cf. Constituci?n Dogm?tica del Verbum , no. 12 y 23), hemos cre?do
oportun dirigir Nuestras preocupaciones y Nuestra atenci?n de manera especial a la Pontificia Comisi?n B?blica ,
que fue en establecerlo por Nuestro Predecesor León XIII con el papel apost-lica Vigilantiae studiique. , , , el 30 de
octubre de 1902, precisamente para promover el correcto incremento de los estudios b?blicos. De hecho, las
ventajas que ha resultado del aumento saludable de los estudios b?blicos por parte de parte Comisi?n, desde su
instituci?n hasta hoy, confirman Nuestra convicci?n de su utilidad e importanciad e importanciad. Para que la Iglesia
pueda entos entos cosechar frutos cada vez que mus abundantes, par nos mins bien y v?lido que reorganizar esta
Pontificia Comisi?n B?blica con leyes nuevas y mas adecuadas, de modo que, en la quea a su funcionamiento, las
cuestiones quea a funcioento, las cuestion que de la decualo, la distribución de las tareas de los diversis y, el n?
mero y elecci?n de sus miembros, continuar m?s r?

Por tanto, después de una madura reflexi?n, con Motu proprio y con Nuestra autoridad Apost?lica, establecemos y
decretamos las nuevas nuevas normas familiares a la reorganización de la Pontificia Comisi?n B?blica . .

1. El Comisi?n B?blica , que, cumpliendo con el mandato, contin?a promoviamente los estudios b?blicos y ofrecindo
su v?lida contribuci?n al Magisterio de la Iglesia en interpretación de la Sagrada Escritura, si reorganizar seg?n
nuevas normas y se vincula a la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe . .

2. El Presidente de la Comisi?n B?blica el Cardeno Prefecto de la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe ,


que podro ser asistido por un vicepresidente, que ser elegido entra en los miembros de la Comisi?n.

3. El Comisi?n B?blica se introdú por estudiosos de las ciencias b?blicas, proceedntes de diversis escuelas y
naciones, que se de la caencia su ciencia, prudencia y sentimiento cat?lico hacia el Magisterio ecleistico.

4. Los miembros de la Comisi?n B?blica Son nombrados a perodo de cinco a?o??


por????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????????
a la final del perodo de cinco a?os podr?n ser reconfirmados. Los miembros no deben exceder de veinte.

5. El Secretario de la Comisi?n B?blica es nombrado por el Santo Padre por un perodo de cinco a?os, una propuesta
del propio presidente de la Comisi?n, y se cuenta entre los Consultores de la Sagrada Congregación para la Doctrina
de la Fe . . En la final del perode de cinco aos podrío ser reconfirmado. Vale la pena este cardenal presidente, en la

1/2
medida de lo posible, de antes de presentar en el Sumo Pont?fice los nombres de los nombres de los que se
considera aptos para este cargo, consultar los miembros de la Comisi?n.

6. El Reuni?n Plenaria de la Comisi?n B?blica si convoca a menos a vez a a'o.

7. Sí el estudio de problemas particulares requerido, el Cardenal Presidente puede estcerer Subcomisiones


especiales entre los Miembros y especialmente expertos en ese tema, los ya que, a la vez que se ha medido el
estudio, cesan en su tarea. Las Subcomisiones, con el consentido de la Comisión, también se necesita para solicitar
la opini?n de otros expertos y, también de no cat?licos. Cualquiera que mareado a participar en esta consulta no si
se convierte en Miembro en.

8. Los Miembros de la Comisi?n B?blica también podrer ser consultados por escrito.

9. Las cuestiones y temas que senen a un hijo designados por el Sumo Pont?fice o por el Presidente de la Comisi?n
una propuesta de la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe , o de la Sonodo de los Obispos , o de las
Conferencias Episcopales, o de la propia Comisi?n B?blica sugerencia de sus Miembros, o también de las
Universidades Cat?licas y Sociedades B?blicas, sin perjuicio de lo en el n. 136 de la Constituci?n Apost?lica
Regimini ecclesiae universae . .

10. Las Conclusiones alcanzadas por la Comisi?n B?blica en Sesi'n Plenaria, precedida, e.m., fue necesario, por
Comisiones especiales, Seronti algunas de las saldas al juicio del Sumo Pont?fice y puestas en la disposición de la
Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe . .

11. Corresponde a la Comisi?n B?blica Estudios, aso preparar instrucciones y Decretos, que pueden ser publicados
por la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe , haciendo especial mencion a la Comisi?n B?blica , con la
parte de la Consejeción del Santo Padre, a menos de este mysmo Sumo Pont?fice, en casos particulares, sin
despojo ni una cosa.

2/2

También podría gustarte