Está en la página 1de 10

II. GEODINÁMICA INTERNA.

Sismicidad básica

La geodinámica interna se refiere al estudio de los procesos y fenómenos que


ocurren dentro de la Tierra. Dentro de este campo, la sismicidad básica se
centra en el estudio de los terremotos y la actividad sísmica en el planeta.

Los terremotos son el resultado de la liberación repentina de energía en la


corteza terrestre debido al movimiento de las placas tectónicas. La sismicidad
básica busca comprender la distribución, frecuencia, magnitud y causas de estos
eventos sísmicos.

Para estudiar la sismicidad, los sismólogos utilizan instrumentos llamados


sismógrafos para registrar y medir las ondas sísmicas generadas por los
terremotos. Esta información es fundamental para comprender mejor la
actividad sísmica y tomar medidas para mitigar los riesgos asociados a los
terremotos.

En resumen, la geodinámica interna y la sismicidad básica son áreas de estudio


que se enfocan en comprender los procesos internos de la Tierra, especialmente
en lo que respecta a los terremotos y la actividad sísmica.

1. Movimientos de la corteza terrestre.


Los movimientos de la corteza terrestre son fenómenos geológicos que ocurren
constantemente y pueden clasificarse en varios tipos principales:

1. Tectonismo: Este incluye movimientos lentos y constantes de las placas tectónicas


que forman la superficie de la Tierra. Los desplazamientos de estas placas pueden
resultar en terremotos, formación de montañas, fosas oceánicas, y otros cambios en
la topografía terrestre.
2. Sismicidad: Los terremotos son la manifestación más evidente de la actividad
sísmica. Estos ocurren debido a la liberación de energía acumulada en fallas
geológicas cuando las rocas se desplazan.
3. Volcanismo: Los volcanes son aberturas en la corteza terrestre a través de las
cuales el magma, gases y materiales volcánicos emergen desde el interior de la
Tierra. Este fenómeno puede resultar en erupciones, formación de nuevas tierras y
modificación del relieve.
4. Erosión y sedimentación: Aunque no son movimientos directos de la corteza
terrestre, la erosión y sedimentación son procesos que modifican continuamente la
superficie terrestre a través del transporte y deposición de materiales erosionados.

Estos movimientos son parte de la dinámica natural de la Tierra y tienen un impacto


significativo en la forma en que se configura su superficie.

GEODINÁMICA INTERNA: Fuerzas que determinan la geodinámica


interna
La geodinámica interna se refiere a los procesos y fuerzas que afectan la estructura y
movimiento de la Tierra desde adentro. Algunas de las fuerzas principales que determinan
la geodinámica interna son:

1. Fuerzas tectónicas: Son las fuerzas que causan movimientos en las placas
tectónicas de la Tierra, lo que resulta en la formación de montañas, volcanes,
terremotos y la creación de diferentes paisajes geográficos.
2. Convección del manto: El calor interno de la Tierra produce corrientes de
convección en el manto terrestre, lo que causa movimientos en las placas tectónicas
y contribuye a la deriva continental.
3. Fuerzas de compresión y tensión: Estas fuerzas se generan por la colisión y
separación de las placas tectónicas, lo que puede dar lugar a la formación de fallas
geológicas, pliegues y fracturas en la corteza terrestre.
4. Actividad volcánica: La actividad volcánica es el resultado de la liberación de
presión desde el interior de la Tierra, donde el magma puede ascender a la
superficie, creando nuevos suelos y formas de relieve.

Estas fuerzas y procesos interactúan entre sí para moldear continuamente la superficie


terrestre y son responsables de la dinámica interna de nuestro planeta.

Movimientos sísmicos: sus causas.


Los movimientos sísmicos, o terremotos, son fenómenos naturales que ocurren debido a la
liberación de energía en la corteza terrestre. Esta liberación de energía se produce
principalmente por dos razones:

1. Tectónica de placas: La corteza terrestre está dividida en placas tectónicas que


están en constante movimiento. Cuando estas placas se desplazan, ya sea
separándose, colisionando o deslizándose una contra otra, se acumula tensión en
las fallas geológicas. Cuando la tensión supera la resistencia de las rocas, se libera
en forma de terremoto.
2. Actividad volcánica: Los terremotos también pueden ser causados por la actividad
volcánica. El movimiento del magma debajo de la superficie terrestre puede generar
presión y deformar las rocas circundantes, lo que a su vez puede provocar
terremotos.

Estos son los factores principales, pero hay otras causas menos comunes, como los
deslizamientos de tierra o la actividad humana, como la extracción de petróleo y gas
mediante fracturación hidráulica (fracking) que pueden desencadenar movimientos
sísmicos.

Actividad volcánica
La actividad volcánica se refiere a cualquier proceso o evento que involucre la actividad de
un volcán. Esto puede incluir erupciones volcánicas, emisión de gases, flujos de lava,
actividad sísmica y otros fenómenos relacionados con la actividad interna de la Tierra.
Las erupciones volcánicas pueden variar en su naturaleza y nivel de peligrosidad. Algunos
volcanes pueden tener erupciones explosivas que expulsan grandes cantidades de ceniza,
lava y gases, mientras que otros pueden presentar erupciones más moderadas o incluso
erupciones constantes de lava.

La actividad volcánica es monitoreada por científicos y organizaciones especializadas para


predecir y mitigar posibles riesgos para las comunidades cercanas. Se utilizan diversos
métodos, como la medición de la actividad sísmica, la observación visual y el monitoreo de
emisiones de gases, para evaluar el estado de un volcán y tomar medidas de seguridad si es
necesario.

diastrofismo.
El diastrofismo es un término que se refiere a los movimientos lentos y graduales de la
corteza terrestre que causan deformaciones en la superficie de la Tierra. Estos movimientos
pueden incluir la formación de montañas, fallas, pliegues y otras características geológicas
debido a fuerzas tectónicas.

Existen dos tipos principales de diastrofismo: epirogénico y orogénico. El diastrofismo


epirogénico se refiere a los movimientos verticales a gran escala que afectan extensas áreas
de la corteza terrestre, como el ascenso o descenso de grandes bloques de tierra. Mientras
tanto, el diastrofismo orogénico se relaciona con los movimientos que dan lugar a la
formación de montañas y cordilleras.

Estos procesos pueden ser el resultado de la actividad tectónica, como la convergencia de


placas tectónicas, o pueden ser intrínsecos a la propia naturaleza de la corteza terrestre.

Hipocentro
El hipocentro se refiere al punto en el interior de la Tierra donde se origina un terremoto. Es
el punto exacto donde se produce la ruptura de las fallas geológicas, liberando energía que
genera las ondas sísmicas. El hipocentro se encuentra a diferentes profundidades bajo la
superficie terrestre y su localización es crucial para comprender la magnitud y la
propagación de un terremoto. La distancia del hipocentro a la superficie determina la
intensidad con la que se siente el temblor en la superficie.

Epicentro
"epicentro" se utiliza comúnmente en geología para referirse al punto en la
superficie de la Tierra que se encuentra directamente sobre el foco o centro de
un terremoto. Es el lugar donde se origina la liberación de energía sísmica y
desde donde se propaga la onda sísmica. El epicentro suele ser identificado
mediante la medición de las ondas sísmicas que llegan a diferentes estaciones
de monitoreo después de un terremoto.

También, en un sentido más figurado, se puede usar el término "epicentro" para


referirse al punto focal o centro de un evento o situación, indicando el lugar
donde algo tiene su origen o impacto principal.
Hipocentro y epicentro. Métodos de su
localización

os métodos para localizar el hipocentro y el epicentro incluyen:

1. Método de triangulación: Se basa en registrar las ondas sísmicas en


al menos tres estaciones sísmicas diferentes. Al medir la diferencia en
el tiempo que tardan las ondas sísmicas en llegar a cada estación, los
científicos pueden determinar la distancia al epicentro desde cada
una. Al trazar círculos con radios iguales desde cada estación, el
punto donde se intersecan los círculos es el epicentro. Combinando
esta información con la profundidad del hipocentro, se puede
calcular su ubicación exacta.

2. Redes de estaciones sísmicas: Utilizan una red de estaciones


sísmicas bien distribuidas para registrar y analizar los datos sísmicos.
Cuantas más estaciones estén disponibles para recopilar datos,
mayor será la precisión para determinar la ubicación del hipocentro y
el epicentro.

3. Modelado por computadora: Se utilizan algoritmos y modelos


matemáticos avanzados para analizar los datos sísmicos y calcular la
ubicación probable del hipocentro y el epicentro. Estos modelos
consideran la velocidad de propagación de las ondas sísmicas a
través de diferentes materiales terrestres y otros factores geológicos.

La combinación de estos métodos permite a los sismólogos determinar con


precisión la ubicación de un terremoto, lo que es crucial para comprender la
actividad sísmica y tomar medidas para mitigar los riesgos asociados con los
temblores.

Ondas sísmicas: tipos

Las ondas sísmicas se dividen principalmente en dos tipos: ondas primarias (P) y ondas
secundarias (S). Estas ondas son generadas por los terremotos y se propagan a través de la
Tierra.

 Ondas Primarias (P): Son las ondas más rápidas y pueden viajar a través de sólidos,
líquidos y gases. Se mueven comprimiendo y expandiendo el material en la misma
dirección en la que se propagan, similar a cómo se propaga el sonido en el aire.
 Ondas Secundarias (S): Estas ondas son más lentas que las ondas P y solo pueden
viajar a través de sólidos. Se mueven de manera perpendicular a la dirección en la
que se propagan, causando movimientos de balanceo.
Estas dos categorías principales de ondas sísmicas tienen distintas propiedades y
comportamientos al viajar a través de la estructura interna de la Tierra, lo que es
fundamental para entender cómo se estudian los terremotos y cómo se utilizan para
determinar la composición y la estructura del planeta.

Ondas sísmicas: propagación.


Las ondas sísmicas son vibraciones que se propagan a través de la Tierra como resultado de
la liberación de energía en forma de un terremoto u otro evento sísmico. Hay dos tipos
principales de ondas sísmicas: las ondas primarias (P) y las ondas secundarias (S). Las ondas
P son ondas longitudinales que se mueven a través de sólidos, líquidos y gases, mientras
que las ondas S son ondas transversales que solo se propagan a través de materiales
sólidos.

La propagación de estas ondas sigue ciertas características. Las ondas P, al ser


longitudinales, pueden viajar a través de diferentes tipos de materiales y se mueven más
rápido que las ondas S. Por otro lado, las ondas S, al ser transversales, no pueden
propagarse a través de líquidos o gases y tienden a moverse más lentamente que las ondas
P.

La velocidad y la dirección de las ondas sísmicas pueden variar dependiendo de las


propiedades del material a través del cual se propagan, lo que ha permitido a los científicos
y geólogos estudiar la estructura interna de la Tierra mediante el análisis de cómo estas
ondas se comportan y se transmiten a través de diferentes capas de nuestro planeta.

Ondas sísmicas: Instrumentos de registro:


Los instrumentos de registro de ondas sísmicas son dispositivos utilizados para detectar y
registrar terremotos y otras actividades sísmicas. Algunos de los instrumentos más
comunes son:

1. Sismógrafos: Son dispositivos clásicos que registran la actividad sísmica. Consisten


en un peso suspendido que se mantiene estacionario mientras la tierra se mueve,
registrando las vibraciones en un tambor con un lápiz que dibuja las ondas sísmicas
en un papel.
2. Acelerómetros: Estos dispositivos miden la aceleración del suelo durante un
terremoto. Son más modernos y sensibles, utilizando tecnología electrónica para
detectar y registrar movimientos.
3. Redes de sensores sísmicos: Estas redes consisten en una serie de sensores
distribuidos en una región geográfica. Registran y transmiten datos sísmicos a
centros de monitoreo en tiempo real.
4. Geófonos: Son dispositivos que detectan movimientos del suelo y se utilizan
comúnmente en la exploración sísmica para buscar recursos naturales bajo la tierra.

Estos instrumentos son fundamentales para comprender la actividad sísmica, ayudar en la


predicción de terremotos y tomar medidas preventivas para minimizar los daños causados
por estos eventos naturales.
GEODINÁMICA INTERNA: Mediciones de magnitud
La geodinámica interna es una rama de la geología que se enfoca en el estudio
de los procesos y fenómenos que ocurren dentro de la Tierra, como la actividad
sísmica, la tectónica de placas y la deformación de la corteza terrestre. Las
mediciones de magnitud son fundamentales para entender y cuantificar la
energía liberada durante los eventos geodinámicos.

En el contexto de la sismología, se utilizan diferentes escalas para medir la


magnitud de un terremoto. La escala de Richter, desarrollada en la década de
1930, mide la amplitud de las ondas sísmicas registradas en los sismógrafos. Sin
embargo, esta escala tiene limitaciones para terremotos de gran magnitud.

La escala de magnitud de momento (Mw) es más precisa y se utiliza


actualmente para medir terremotos de mayor magnitud. Esta escala tiene en
cuenta la cantidad de energía liberada durante un terremoto, considerando la
magnitud de las fallas y la cantidad de desplazamiento.

Otras mediciones de magnitud en geodinámica interna incluyen la evaluación


de la actividad volcánica, la deformación de la corteza terrestre mediante
técnicas como la interferometría de radar de apertura (InSAR) y el monitoreo de
cambios en la topografía para comprender los movimientos tectónicos.

En resumen, las mediciones de magnitud son esenciales para comprender la


actividad geodinámica interna de la Tierra, permitiendo la evaluación de riesgos,
el monitoreo de la actividad sísmica y volcánica, y la comprensión de los
procesos que moldean nuestro planeta.

GEODINÁMICA INTERNA: intensidad de los sismos


La intensidad de los sismos está directamente relacionada con la geodinámica
interna de la Tierra. La actividad sísmica se debe principalmente a la liberación
de energía acumulada en las placas tectónicas debido al movimiento de estas
placas.

La escala más comúnmente utilizada para medir la intensidad de los sismos es la


Escala de Magnitud de Momento (también conocida como Escala de Richter).
Esta escala mide la energía liberada por un terremoto. Sin embargo, hay otras
escalas que evalúan los efectos en la superficie, como la Escala de Mercalli
Modificada, que considera los efectos observados y percibidos en un lugar
determinado.

La intensidad de los sismos puede variar enormemente, desde temblores


apenas perceptibles hasta terremotos devastadores con consecuencias
catastróficas. La geodinámica interna, incluyendo la convergencia, divergencia o
deslizamiento de placas tectónicas, la actividad volcánica y la deformación de la
corteza terrestre, influye en la frecuencia y la magnitud de los sismos en
diferentes regiones del mundo.

GEODINÁMICA INTERNA: escalas valorativas. Ritcher


La geodinámica interna se refiere al estudio de los procesos y fuerzas que actúan dentro de
la Tierra, incluyendo las escalas valorativas utilizadas para medir fenómenos como los
terremotos.

La escala de Richter es una de las escalas más conocidas para medir la magnitud de un
terremoto. Desarrollada por Charles F. Richter en 1935, esta escala asigna un número único
a la magnitud de un terremoto en función de la amplitud de las ondas sísmicas registradas
por los sismógrafos. La escala Richter es logarítmica, lo que significa que cada incremento
de un número en la escala representa aproximadamente un aumento de diez veces en la
amplitud de las ondas sísmicas y aproximadamente 31.6 veces más energía liberada.

Para tener una idea de cómo se percibe la escala de Richter, aquí hay una guía general:

 Menos de 2.0: Terremotos generalmente imperceptibles.


 2.0 - 3.9: Terremotos menores, generalmente no causan daños significativos.
 4.0 - 4.9: Terremotos ligeros, pueden causar vibraciones notables pero rara vez
causan daños.
 5.0 - 5.9: Terremotos moderados, capaces de causar daños significativos en áreas
densamente pobladas.
 6.0 - 6.9: Terremotos fuertes, pueden causar daños graves en áreas más amplias.
 7.0 - 7.9: Terremotos mayores, causan daños graves en áreas extensas.
 8.0 o más: Terremotos de gran magnitud, pueden provocar devastación en zonas
extensas.
Es importante tener en cuenta que la escala de Richter se utiliza principalmente para medir
la magnitud de los terremotos, pero no tiene en cuenta otros factores importantes como la
profundidad, la geología local y la distancia desde el epicentro, que pueden influir en la
percepción y los daños causados por un terremoto.

GEODINÁMICA INTERNA: escalas valorativas de Mercalli


modificada
La escala de Mercalli modificada es una forma de medir la intensidad de un terremoto en
función de sus efectos observados en las personas, edificios y el entorno. Esta escala se
utiliza para evaluar la intensidad sísmica en diferentes lugares afectados por un terremoto.

La escala de Mercalli modificada consta de varios niveles, generalmente del I al XII, que
describen los efectos del terremoto en una escala ascendente de menor a mayor
intensidad. Cada nivel tiene una descripción específica de los efectos observados, que van
desde la ausencia de daños hasta la destrucción total.

Es importante mencionar que la escala de Mercalli se centra en los efectos del terremoto en
lugar de la energía liberada, que se mide mediante la escala de magnitud de Richter o la
escala de magnitud de momento.

La geodinámica interna estudia los procesos que ocurren en el interior de la Tierra, como la
actividad sísmica y volcánica, que están directamente relacionados con la escala de Mercalli
modificada al evaluar y describir los efectos de los terremotos en diferentes áreas
geográficas.

GEODINÁMICA INTERNA: Tabla de comparación.


La geodinámica interna se refiere al estudio de los procesos y fenómenos que ocurren
dentro de la Tierra, como la tectónica de placas, vulcanismo, sismicidad y deformación de la
corteza terrestre. Desafortunadamente, no tengo acceso directo a tablas específicas o
imágenes en tiempo real, pero puedo proporcionarte una descripción general de los
elementos que suelen compararse en tablas sobre geodinámica interna:

1. Tipos de límites de placas: Los diferentes tipos, como bordes convergentes,


divergentes y transformantes, y sus características.
2. Procesos tectónicos: Subducción, rifts, formación de montañas, y su relación con la
dinámica de las placas.
3. Manifestaciones superficiales: Volcanes, terremotos, formación de cadenas
montañosas y su relación con la actividad tectónica.
4. Composición de la corteza terrestre: Diferencias en la composición química y
mineralógica entre la corteza continental y oceánica.

Para obtener una tabla específica de comparación, te recomendaría buscar en bases de


datos científicas, libros especializados en geología o recursos académicos en línea que
puedan tener tablas detalladas sobre geodinámica interna.

GEODINÁMICA INTERNA: silencio sísmico.


El "silencio sísmico" se relaciona con áreas geográficas donde no se han registrado
terremotos significativos durante largos períodos de tiempo, a pesar de que se esperaría
cierta actividad sísmica según la historia geológica y la ubicación tectónica de la región.
Este fenómeno puede ser motivo de interés para los sismólogos, ya que podría indicar una
acumulación de tensión en las placas tectónicas, lo que eventualmente podría
desencadenar terremotos de gran magnitud. El estudio del silencio sísmico implica
monitoreo continuo de la actividad sísmica y el análisis de datos geodinámicos para
comprender mejor los riesgos sísmicos en una determinada región.

Predicción Zonas sísmicas del mundo:


Las zonas sísmicas del mundo se encuentran principalmente en los límites de las placas
tectónicas, donde la actividad geológica es más intensa. Algunas de las regiones más
sísmicamente activas incluyen:

1. El Cinturón de Fuego del Pacífico: Esta zona abarca los bordes del Océano Pacífico y
es conocida por su alta actividad sísmica y volcánica. Países como Japón, Chile,
Estados Unidos (especialmente Alaska y California) y Filipinas se encuentran en esta
región.
2. La falla de San Andrés en California, Estados Unidos: Esta falla es famosa por su
actividad sísmica y su potencial para causar terremotos significativos en la región de
California.
3. Región del Mediterráneo: Países como Grecia, Italia y Turquía experimentan
actividad sísmica debido a la interacción entre las placas tectónicas africanas y
euroasiáticas.
4. Región del Himalaya: Aquí, la colisión entre las placas tectónicas india y euroasiática
da lugar a terremotos significativos en países como Nepal, India y Pakistán.

Estas zonas son solo algunas de las áreas con mayor actividad sísmica en el mundo, pero es
esencial tener en cuenta que los terremotos pueden ocurrir en otras áreas debido a la
compleja dinámica de las placas tectónicas. Es crucial estar preparado y tener medidas de
mitigación de riesgos en estas regiones para reducir el impacto de los terremotos.

GEODINÁMICA INTERNA: Predicción Zonas sísmicas del mundo:


circumpacífica y mediterránea
En cuanto a la predicción de zonas sísmicas en el mundo, dos regiones
importantes y activas en términos de actividad sísmica son la región
circumpacífica y la mediterránea.

1. Región Circumpacífica: Esta área es conocida por su alta actividad


sísmica debido a la interacción de placas tectónicas. El llamado
"Cinturón de Fuego del Pacífico" es una zona de intensa actividad
sísmica y volcánica que rodea el borde del Océano Pacífico. Países
como Japón, Indonesia, Chile y Estados Unidos (especialmente la
región de California) están entre los más propensos a terremotos en
esta región.

2. Región Mediterránea: Esta área también experimenta una


significativa actividad sísmica debido a la interacción entre las placas
tectónicas africana y euroasiática. Países como Italia, Grecia, Turquía
y otros alrededor del mar Mediterráneo están sujetos a terremotos
debido a esta actividad.

En cuanto a la predicción específica de terremotos, es importante mencionar


que la predicción exacta de cuándo ocurrirá un terremoto sigue siendo un
desafío considerable para la ciencia. Aunque se han realizado avances en la
comprensión de las fallas geológicas y los patrones de actividad sísmica,
predecir con precisión cuándo y dónde ocurrirá un terremoto sigue siendo un
área de investigación activa y en desarrollo.

Los científicos utilizan modelos geodinámicos, datos históricos, análisis de fallas


y tecnologías como la monitorización sísmica para comprender mejor estas
zonas y reducir los riesgos, pero la predicción exacta sigue siendo un objetivo
difícil de lograr.

También podría gustarte