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Universidad Nacional Autónoma de Honduras

En el Valle de Sula
Telecentro UNAH-VS Puerto Cortés

Tema: Documentación y registro mercantil; la capacidad para ejercer


el comercio y la forma de acreditarla.

Asignatura: Empresa Y Derecho

Catedrático: Elba Ruth Gómez Riera

Nombre: José Daniel Mejía Contreras

Número de cuenta: 20216100005

Fecha de entrega: Sábado, 19 de junio de 2022


INTRODUCCION

Es comerciante la persona que profesionalmente se ocupa en alguna de las actividades que la ley
considera mercantiles. La calidad de comerciante se adquiere aunque la actividad mercantil se
ejerza por medio de apoderado, intermediario o interpuesta persona. Esta es la definición que trae el
artículo 10 del Código de Comercio. Cuando la norma habla de personas hace referencia tanto a las
naturales como a las jurídicas. En este último caso, se les conoce como empresarios. Se trata de
aquellas que voluntariamente, regular y profesionalmente, desarrollan un acto jurídico considerado
como mercantil por la ley. 2.1 Criterios para Determinar la Calidad de Comerciante La circunstancia
que concede la calidad de comerciante a una persona es la realización por parte de ésta de actos de
comercio de manera profesional, habitual y no ocasional. La expresión “profesionalmente” hace
referencia al ejercicio como actividad encaminada a proveer un sustento diario

Capacidad para ejercer del comercio en Honduras.


El art. 9º del código de comercio, no alterado por la reforma, establece que “Es hábil para ejercer el
comercio toda persona que, según las leyes comunes, tiene la libre administración de sus bienes.
Los que según estas mismas leyes no se obligan por sus pactos o contratos, son igualmente
incapaces para celebrar actos de comercio, salvo las modificaciones Conforme a lo establecido en
dicha norma corresponde distinguir: a) la capacidad para realizar actos aislados de comercio, que es
la capacidad civil, b) la capacidad para ejercer actos de comercio en forma habitual, que es la
capacidad comercial propiamente dicha. En general, todas las incapacidades y capacidades
especiales previstas para las mujeres y para los menores de 18 años en el código de comercio
original, han quedado sin efecto como consecuencia de diversas y sucesivas leyes capacítate, como
ya se señaló, dispuso la mayoría de edad a los 18 años con plenos efectos civiles y comerciales.
Subsisten las prohibiciones por “incompatibilidad de estado” de órdenes religiosas, clérigos y
magistrados y funcionarios, pero debe tenerse en cuenta que los actos aislados de ellos valen como
tales, lo que resulta de la aclaración en materia de préstamos y de accionistas, y conforme doctrina
mayoritaria. También deben considerarse incluidos en este artículo los entes con personalidad
jurídica que no tengan objeto comercial sino de bien público, como las asociaciones o fundaciones, y
los profesionales a los que expresamente se les prohíbe comerciar. la incapacidad legal de los
interdictos penales y de los fallidos que no hayan sido rehabilitados. También esta norma se refiere a
la actividad habitual sin afectar la validez de los actos aislados. No obstante, en el caso del fallido,
los actos aislados serán ineficaces respecto de la masa de acreedores hasta tanto esté rehabilitado.
Los efectos de la invalidez del ejercicio del comercio por parte de los incompatibles y de los
incapacitados deben consistir en impedirles matricularse o invocar la calidad de comerciante, en
medidas administrativas o judiciales para el cese compulsivo de la actividad y en la prohibición de
que aquellos invoquen ante terceros la calidad de comerciantes en su propio beneficio.

Las personas que teniendo capacidad legal para ejercer el comercio, hacen de él su ocupación
ordinaria.

Las personas que accidentalmente con o sin establecimiento fijo hagan alguna operación de
comercio, aunque no son derecho comerciantes, quedan sin embargo sujetas por ella a las leyes
mercantiles. Por tanto los labradores y fabricantes y en general todos los que tienen planteados
almacén o tienda en alguna población para el expendio de los frutos de su finca o de los productos y
elaborados de su industria o trabajo sin hacerles alteración al expenderlos, serán considerados
comerciantes en cuanto concierne a sus almacenes o tiendas. Capacidad legal para ejercer el
comercio. Toda persona que según las leyes comunes es hábil para contratar y obligarse y a quien
las mismas leyes no prohíben expresamente la profesión del comercio, tiene capacidad legal para
ejercerlo. Capacidad es la actitud que tiene el individuo para ser sujeto de derechos y obligaciones, o
bien la facultad para ejercer por si mismos estos derechos o cumplir con sus obligaciones.
Incapacidad para ejercer el comercio de acuerdo al derecho común; son los menores de edad,
mayores de edad afectados de locura, idiotez o imbecilidad al igual que los sordomudos que no
sepan leer ni escribir. (el menor de edad no emancipado es incapaz para ejercer por si mismo el
comercio como profesión y también lo es para ejecutar actos aislados de comercio, y por tanto sus
actos carecen de validez con forme a las reglas que establece el derecho común, que es conforme a
los cuales se rige su capacidad.

Requisitos y disposiciones generales

Articulo º 504

Artículo 504.-La letra de cambio deberá contener:

I.-La denominación de letra de cambio, inserta en el texto del documento;

II.-La expresión del lugar y del día, mes y año en que se suscribe;

III.-La orden incondicional al girado de pagar una suma determinada de dinero;

IV.-El nombre del girado;

V.-El lugar y la época del pago;

VI.-El nombre de la persona a quien ha de hacerse el pago; y

VII.-La firma del girador o de la persona que suscribe a su ruego o en su nombre.


CONCLUSION
El Derecho mercantil hoy en día ya no es sólo el Derecho que regula la actividad de los empresarios
de modo que ahora también ordena la actividad económica de la empresa dentro del mercado y
terminará, en mi opinión, siendo el Derecho ordenador de toda la actividad económica. En esa
proyección futura no se invadirá el campo del llamado Derecho económico, siendo éste un Derecho
constitucional de la economía donde el primordial entre los principios constitucionales es el de
economía de mercado. El mercantil será, por tanto, el Derecho privado de ese mercado. Así, la
concepción del Derecho mercantil como Derecho de la empresa es insuficiente para explicar la
realidad actual del mismo. En cierto modo el proceso de comercialización del Derecho civil y de
generalización del Derecho mercantil se ha seguido produciendo de tal forma que habría que hablar
de un único Derecho del mercado, pero no como Derecho de los empresarios. Esta circunstancia
trae consigo que las normas del Derecho mercantil no se aplican únicamente a los empresarios, sino
a todos los sujetos del mercado, sustituyendo el criterio de la actividad del empresario por un criterio
pensado en el régimen jurídico del mercado. Esta situación nos conduce a que el Derecho del
mercado no da razón de su especialidad, hecho que desemboca en dirección a una unificación del
Derecho mercantil. Con lo que la llamada generalización del Derecho mercantil, manifestada
doblemente en la transmisión al Derecho común de instituciones mercantiles y en la aplicación al
Derecho mercantil a quienes no tienen la condición de empresario, permite afirmar que la unificación
sustancial del Derecho privado parece posible.
Bibliografía
(Ordoñez, La ley Del Comercio s.f.)

(1 s.f.)

(Ordoñez, Ley De Concursos Mercantiles s.f.)

(Articulo1341 s.f.)

(1422 s.f.)

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