Visualización para Sintonizar con el Movimiento del Espíritu

Haz varias respiraciones profundas y conscientes

Siente o imagina detrás de tu hombro izquierdo a tu madre biológica, y

detrás de tu hombro derecho a tu padre biológico, si alguien sustituyó a tu
padre o madre lo pones a su lado.

Detrás de tu madre biológica, colocas a la izquierda a su madre, la abuela

materna, y a su derecha a su padre, el abuelo materno.

Detrás de tu padre biológico, colocas a la izquierda a su madre, la abuela

paterna y a su derecha a su padre, el abuelo paterno.

Detrás de cada abuelo, colocas sus padres, los bisabuelos.

Interiormente te giras para mirarlos, son muchos, muchísimos,

generaciones y generaciones e incluso gente que no pertenece a la
familia pero que si tienen algo pendiente con alguno, una deuda, una
culpa, un sufrimiento.

Inclinas la cabeza ante todos ellos.

Miras a lo lejos a algo más grande.

Dices internamente GRACIAS!

Te vuelves de nuevo hacia tu vida, la miras, está delante de ti, te expones

a ella. Mira a lo lejos.

Vuelve a mirar a tu vida, a cada uno de sus momentos y dices SI a cada

uno tal y como fue.

Me abro al movimiento del espíritu, digo si a todos como son, digo si a sus
destinos, honro mis ancestros, a todos y cada uno, reconociendo que soy
imperfect@ y totalmente human@, renunciando a mis anhelos y aceptando
todo tal y como es.
 Sintonizar con el cliente

Lo primero es reconocer que no es una persona que se ha sentado a tu

lado, sino que es todo un sistema, es una consciencia familiar, por lo que
sintonizarás con su madre, su padre, con su destino, y con ella misma.

Hellinger no habla de ser un canal sino de ser membrana, a través de la

cual el espíritu puede vibrar.

Al sintonizar vas a poder percibir informaciones sutiles e importantes:

Invitas al consultante a realizar respiraciones conscientes y mientras tanto,

el constelador internamente dice:

Sintonizo con (nombre completo del consultante), visualizas a su madre

detrás de su hombro izquierdo y dices “honro a su madre” y todo su linaje
materno, luego visualizas a su padre detrás de su hombro derecho y dices
“honro a su padre” y todo su linaje paterno. Posteriormente, visualizas al
consultante y dices “honro su destino”.

Ahora todo está en resonancia con el cliente y su sistema.

Por último, el constelador dice internamente: “Me abro al movimiento del

espíritu, asiendo a todo como es, asiento a lo que haya ocurrido, tomo a
todos en mi corazón, me pongo al servicio de la solución buena para
todos”

Si internamente, no estás en calma y tienes sensaciones molestas en el

estómago, confusión, calor, pesadez, sueño, alteración en la respiración,
pregúntate si tienes permiso para constelar a esta persona.

Las resistencias son protecciones tanto del inconsciente familiar como del
inconsciente individual. Restringen el campo. Esto indica que ni la persona
ni el constelador tienen permiso de tocar a este sistema. La persona tiene
que procesar algo antes de poder representar a su sistema: tiene que
procesar esa misma resistencia.

El trabajo del constelador en esta etapa es llevar al cliente al estado del

Adulto a través de la mutua sintonía.

“El que tiene la frecuencia más alta arrastra al otro”.