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El miedo: uno de los pilares de la Terapia Floral1

Por Ricardo Orozco©


1. Territorio compartido

Al adentrarnos en los principios filosóficos del Dr. Bach podemos constatar cómo su sistema
floral se estructura alrededor de varios conceptos básicos. Quizá el más importante sea el
aprendizaje “en este día de colegio”, bella metáfora con la que designa la vida… La tierra como
escuela al servicio de las tareas del alma.

Otro pilar importante que da sentido a su obra es la lucha contra el sufrimiento. En este
sentido Bach se refiere al miedo como “ese gran carcelero”, tanto como obstáculo al
aprendizaje trascendente, como importante generador de sufrimiento.

Por eso todo el sistema floral parece girar en torno al miedo; de hecho son pocas las esencias
que no guardan una relación estricta con él. Estamos por tanto ante un inmenso territorio
compartido que no se agota, ni mucho menos, con el primer grupo.

2. Aspectos diferenciales

2.1. Como tipología o como rasgo de personalidad

A continuación se presenta el miedo como una tipología o como rasgo de la personalidad y,


por lo tanto, como una forma de reacción habitual integrada en el temperamento o el carácter
de cada individuo. Se entiende también que un patrón no es excluyente de otros. Por ejemplo,
una persona tipológicamente Mimulus, es decir con un estilo evitador de personalidad, puede
muy bien presentar rasgos Red Chestnut, Aspen, etcétera.

Rock Rose. Sujetos que se sobresaltan desproporcionadamente ante estímulos como por
ejemplo un ruido, alguien que los toca mientras están distraídos, etc.

Mimulus. Miedo a la evaluación negativa, al rechazo, al ridículo. Se trata de personas tímidas y


ansiosas que recurren a una conducta de evitación, de no afrontamiento.

Aspen. Personas que padecen miedos sobrenaturales o paranormales. Comparados con


sismógrafos, son en general demasiado sensibles a energías negativas de otros planos sutiles
de la realidad.

Cherry Plum. Gente con temperamento explosivo y poca capacidad de autocontrol. También
presente en muchos reprimidos, como los obsesivos, que presentan mucho miedo a perder el
control y hacer cosas “monstruosas y repugnantes”.

Red Chestnut. Todos aquellos que proyectan el miedo a la seguridad y bienestar de sus seres
queridos, sean estos personas o animales.

Scleranthus. Existe un temor palpable a cometer errores o a tomar decisiones equivocadas.

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Tomado del Nuevo Manual del Diagnóstico Diferencial de las Flores de Bach. Ricardo Orozco.
El Grano de Mostaza. Barcelona, 2011.

© Copyright, Ricardo Orozco, 2014


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Heather, Chicory y Centaury. Presentan un acusado miedo a la soledad, abandono, rechazo y
sustitución. También a la percepción de su vacío interior y de la consiguiente angustia
existencial (Sweet Chestnut).

Agrimony. Comparte algunos aspectos con los anteriores, como por ejemplo el miedo a la
soledad y a su propio Sweet Chestnut interior. Sin embargo, la dependencia afectiva no es
determinante en él. Presenta un miedo considerable a todo lo que signifique un conflicto, del
cual huye sistemáticamente, tanto si se trata de dinámicas interiores como de problemas con
otras personas. En realidad podría decirse que tiene miedo de su propia sombra.

Holly y Willow. Las personas con rasgos de uno u otro temen confabulaciones, traiciones y
viven en general instalados en la sospecha y la desconfianza. Muchos de ellos poseen una
personalidad paranoide y pueden sentirse perseguidos e incluso, en el peor de los casos, creer
que los demás quieren asesinarlos.

Elm, Oak y Rock Water.Como obsesivos que son, el miedo es a cometer errores y a que sus
supuestas imperfecciones puedan ser percibidas como actos negligentes, delictivos o de malas
personas. Existe temor a no ser impecables en lo que hacen y a perder su buena reputación.
Miedo en suma a no estar a la altura de lo que se espera de ellos o, mejor dicho, de lo que
ellos esperan de sí mismos. Por eso, este temor suele provenir de un residuo Larch muy íntimo
e infantil. Al ser muy reprimidos mental y emocionalmente, existe miedo a afrontar los
aspectos internos censurables y a mostrarse vulnerables. La culpabilidad que todos los
obsesivos acusan (Pine), los hace sentirse casi en una permanente infracción que puede ser
descubierta en cualquier momento. Se sienten como si tuvieran que comparecer
permanentemente ante un implacable juez exterior, que en realidad está en su interior. Esto
es suficiente para comprender el temor permanente a equivocarse que suelen padecer.

Larch. Puede considerarse que el miedo es al fracaso o, en la mayoría de casos, a que se


descubran una serie de miserias y deficiencias condenables. En realidad casi todos los
obsesivos citados anteriormente tienen una parte Larch, esto es un sentimiento de inferioridad
subyacente, que intentan superar con un personaje moral, eficiente y responsable. Pero
también resulta imposible pensar en los miedos de Mimulus y Centaury sin considerar que
buena parte de ellos vienen patrocinados por su sentimiento de inferioridad y en consecuencia
por sus altos contenidos de Larch.2 Sin embargo ¡menuda paradoja! se debe considerar que en
Mimulus y Centaury puede existir miedo al éxito. En el primero, a menudo se cree que el
destacar en algo va a situarlo en una posición en la que los demás se darán cuenta de que en
realidad es un “impostor” y por tanto lo censurarán y evaluarán negativamente. En el segundo,
el salir airoso de alguna situación puede llevar a que lo perciban como alguien autosuficiente y
preparado para asumir responsabilidades, cosa que le aterra.

Pine. La culpabilidad como rasgo genera una sensación de infracción permanente. Uno puede
ser “descubierto” y castigado en cualquier momento, lo que ocasiona un temor semi
permanente, traducible en ansiedad, tristeza o preocupación. Este mecanismo resulta muy
comprobable en los obsesivos descritos más arriba.

Crab Apple. Las personas con estos rasgos tienen miedo a contraer enfermedades
infectocontagiosas o a desarrollar patologías consideradas como “sucias” o vergonzosas.

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De hecho, resulta imposible ser Mimulus o Centaury sin sentirse inferior a los demás. Esto está tan presente en su
sistema de creencias que sitúa a Larch en el núcleo de la personalidad de ambos. Se entiende también que los
Mimulus y Centaury algo positivados puedan no sentirse inferiores a otros.

© Copyright, Ricardo Orozco, 2014


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También existe por lo general un miedo a la contaminación moral o a tener conductas
pecaminosas, como es el caso de los obsesivos.

Vine. En los Vine secundarios3 existe un miedo palpable a ser agredido o humillado. Por eso
deben funcionar con una armadura compensatoria desde la cual se sienten más seguros.

Beech. Si lo consideramos como un narcisista, podemos destacar algunos temores básicos,


como por ejemplo el no ser reconocido como una persona brillante y destinada a ocupar un
lugar glorioso en el mundo. Cuando los que tienen una tendencia más paranoica fracasan en
sus pretensiones, pueden sentirse perseguidos y creer que los demás se confabulan para
perjudicarlos o incluso destruirlos. Si se toma la crítica como punto de partida definitorio de
Beech se ve que, en algunos casos, ésta se expresa como una herramienta de defensa, por lo
que el temor a ser lastimado puede ser la base que la sustente.

2.2. Como estado

Como ya anticipé, mi impresión es que todo el sistema floral parece girar en torno al miedo.
Inicialmente puede hacerse un reparto muy grosero y arbitrario entre dos esencias: Mimulus y
Aspen (miedos conocidos y desconocidos respectivamente). Más adelante, muchas flores
querrán participar en la subasta y, dada su mayor especialización, serán de elección en el
tratamiento. Un claro ejemplo de ello es Red Chestnut que, como se verá en seguida, se hace
cargo de todos los temores, sean estos concretos o inconcretos, siempre y cuando se
proyecten en la seguridad y bienestar de los seres queridos.

Mimulus. Abarca cualquier temor de causa conocida, o que siga una relación causa-efecto
objetivable. Debe ser claramente definible, como por ejemplo el miedo a hablar en público,
sufrir un atraco, ir al dentista, las cucarachas, etcétera. Tal vez el término miedo sea
demasiado tajante para definir el patrón de actuación de la esencia. Seguramente lo más
ajustado sería hablar de un temor anticipatorio. Cuando este temor aumenta de intensidad se
se transforma en una emoción: el pánico (Rock Rose). Mimulus equivale más bien a un
sentimiento ya que, pese a tratarse de una vivencia básicamente emocional, existe un claro
componente mental.

Rock Rose. Representa un escalón más alto que el anterior, ya que se trata del pánico. Sin
embargo comparte un mismo territorio al ser una respuesta a algo concreto, objetivo, sea un
objeto o una situación física. Es en general una reacción instintiva de supervivencia, de
sobresalto, que no pasa inicialmente por la mente. Una emoción normal cuando se ajusta a un
peligro real. La esencia es igualmente operativa en los casos en que la reacción es
desproporcionada a la amenaza.

Aspen. Aborda cualquier miedo inconcreto, que no siga una relación causa efecto objetivable:
por ejemplo el miedo a lo desconocido. El hecho de que exista una palabra específica para
definir algo, no significa que ese “algo” sea una cosa concreta. Por ejemplo, el miedo a la
oscuridad es Aspen ya que en general representa un temor a algo desconocido. Lo mismo pasa
con el miedo al futuro, que engloba una serie de incógnitas. Ahora bien, si el miedo fuera al
sufrimiento de la muerte, o a la oscuridad porque en el piso de arriba entraron a robar una

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En su momento dividí a los Vine en primarios y secundarios. Los primarios tienen que ver con los psicópatas o
sociópatas y, por tanto, el miedo no tiene cabida en ellos. Los secundarios surgen como compensación a
sentimientos de indefensión, vergüenza, minusvalía, etc. El miedo a la vulnerabilidad y a ser agredidos juega aquí un
importante papel.

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noche, ya debería pensarse en algo más concreto y, por tanto, en Mimulus. No obstante,
existen territorios demasiado fusionados donde este diagnóstico diferencial entre Mimulus y
Aspen no es posible. Esto no debería representar un problema, ya que lo más práctico (y
cómodo) es prescribir ambas esencias y que se repartan el trabajo entre ellas.4 Pero a quienes
tienen conocimientos de psicología les ayudará situar a Mimulus y Rock Rose en el miedo y el
pánico respectivamente. Aspen se asemeja más al concepto de ansiedad e incluso al de
angustia. Mientras el miedo y el pánico tienen activadores concretos, los orígenes de la
ansiedad y de la angustia aparecen como más inespecíficos y difíciles de precisar.

Cherry Plum. Miedo a conflictos interiores, a perder el control y hacer cosas horribles que no
se desean contra uno o los demás. Miedo a volverse loco. Puede ser la consecuencia de
situaciones muy estresantes.

Red Chestnut. Como ya se comentó un poco más arriba esta esencia rompe el reparto inicial
entre Mimulus y Aspen, para especializarse en el tratamiento de los temores proyectados a la
seguridad, salud y bienestar de los seres queridos.

Scleranthus. Miedo a cometer errores y tomar la decisión equivocada.

Chestnut Bud. Temor a cometer nuevamente un mismo error.

Heather, Chicory y Centaury:. Miedo a la soledad, al silencio, al abandono o a la sustitución.

Agrimony. Miedo a experimentar vivencias, pensamientos o sentimientos desagradables,


tanto internos (angustia, soledad, tristeza, dolor emocional, etcétera), como externos
(discusiones, agresiones, restricciones económicas, etcétera.). Temor a conflictos de cualquier
naturaleza. Miedo a la intimidad.

Walnut. Temor a la inestabilidad inherente a los cambios.

Holly y Willow. Miedo a la traición, al engaño, a la “maldad” de la gente.

Larch. Miedo al fracaso, a no estar a la altura, al ridículo, a defraudar las expectativas propias y
ajenas.

Pine. Aunque esta esencia sea monográfica de la culpa, no cabe duda que conlleva un miedo al
castigo dado por el temor a ser descubierto. Muchas veces se anhela, consciente o
inconscientemente el castigo como una forma de redención, de liberación.

Sweet Chestnut. Si bien el término correcto para definir este estado es angustia (no miedo),
no se puede dejar de pensar en la máxima expresión del cuadro: el ataque de pánico, donde la
sensación de muerte inminente es muy clara. Esta percepción, que generalmente lleva a
urgencias hospitalarias, es superponible a Rock Rose. Al menos el cuerpo y la mente
reaccionan de la misma forma que ante una situación real de peligro. La diferencia con Rock
Rose, descrito anteriormente, es que en Sweet Chestnut no suele haber un activador
deducible. Estos ataques pueden sobrevenir por ejemplo en la cola del supermercado, al
despertar por la mañana, etc., excepción hecha del estrés postraumático. Al mismo tiempo, el

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Hace algunos años propuse a Aspen como “la madre de todos los miedos”, bajo la hipótesis de que los temores más
concretos fueran la expresión de otros más inconcretos no resueltos. Esta estrategia inconsciente resulta más
manejable para la mente ya que, por ejemplo, es más fácil tener miedo a los perros que al vacío existencial.

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estado Sweet Chestnut de máxima intensidad representa una clara pérdida de control,
compartiendo territorio con Cherry Plum.

Crab Apple. Miedo al contagio o a contraer enfermedades “repugnantes o denigrantes”.


También temor anticipatorio a procesos que puedan deteriorar la imagen, como la obesidad,
la pubertad, vejez, etc. Miedo también a la suciedad e indignidad moral, a pecar, al sexo como
algo sucio, etc. A contaminarse en cualquier sentido del término. Es evidente que muchos de
estos temores también pueden interpretarse como un miedo a perder el control (Cherry Plum)
en el contexto de la represión.

Star of Bethlehem. El trauma puede estar vinculado al miedo, como por ejemplo el trauma del
abandono en niños que plantea un Rock Rose de supervivencia. También se debe consignar el
miedo presente en el estrés postraumático, el subsiguiente a un accidente de tráfico o al
quedarse súbitamente sin empleo y una infinidad de situaciones.

© Copyright, Ricardo Orozco, 2014


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Bibliografía del seminario

BACH, Edward. Bach por Bach. Escritos florales. Continente, Buenos Aires, 1993/2006

MILLON, Theodore. Trastornos de la personalidad en la vida moderna. Elsevier. Masson. Barcelona,


2006.

OROZCO, Ricardo. Flores de Bach. 38 Descripciones Dinámicas. El Grano de Mostaza, Barcelona,


2010/2012

OROZCO, Ricardo. El Nuevo Manual del Diagnóstico Diferencial de las Flores de Bach. El Grano de
Mostaza, Barcelona, 2011

© Copyright, Ricardo Orozco, 2014


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