Estimado hermano Egberto,

He recibido tu carta con mucha intriga y gozo. Primero te quiero decir

que por ningún motivo deberías avergonzar por tener estas dudas e
interrogantes, es más, alégrate, ya que data de tu capacidad de cuestionar y
analizar la fe y los sucesos que te rodean. Es fundamental que como seres
humanos tengamos dudas e interrogantes, estas nos llevan a un constante
crecimiento personal y espiritual. Ahora si procederé a responder tus valiosas
dudas con la mayor honestidad y claridad posible.
En primer lugar, el motivo por el que yo, Celestino V debo interceder
ante reyes, solucionar temas políticos, territoriales y hasta económicos, se
debe al poder que me ha entregado Dios nuestro Señor en esta tierra. Desde
los tiempos de Jesucristo, el papa fue nombrado para ser el representante
terrenal del Señor. Esto quiere decir que tengo el poder divino de velar por la
justicia y la paz aquí en la tierra. Es por esto por lo que me veo involucrado en
distintas disyuntivas ya sea del reinado en si, como de la conquista de nuevos
territorios y el combate contra la herejía. Mira querido hermano Egberto,
déjame explicártelo con un ejemplo para que te quede más claro. Si un rey,
cualquiera sea este, desea explorar y anexar territorios, el resto de los
imperios no va a reconocer lo que haga. Esto dado que el rey tiene el imperio
de la ley y el derecho en su territorio, es decir dentro de sus fronteras, pero
de ninguna manera fuera de este. Para esto es que se ha determinado que la
única institución que tiene la potestad jurídica mundial es la Iglesia Católica.
Esto quiere decir que yo soy el jure en el arbitraje internacional. Aunque no lo
creas, me ha costado bastante asimilar este rol, muchas veces no se como
debo proceder o que decisión debo tomar, pero es ahí donde mas me pongo
a orar y a pedirle al Señor que me de las respuestas. ¡Y vaya que funciona!
A la hora de hablar de recursos, me gustaría antes aclarar que mi mayor
preocupación siempre ha sido la administración correcta de estos. Como tu
ya sabes, la Iglesia Católica muchas veces no destina bien sus recursos y estos
son usados para fines muy distintos a combatir la herejía y velar por la paz y
bienestar de los cristianos. Concretamente, los recursos vienen
principalmente de las tierras. La iglesia católica tiene dominio legal sobre
numerosos territorios gracias a grandes donaciones que nos han hecho los
fieles. Es más, la donación mas potente que nos han hecho ha sido la llamada
Donación de Constantino, la cual consolidaba el dominio de la institución
sobre numerosos territorios. Gracias a estas tierras se pueden obtener
valiosos recursos y grandes rentas la cuales luego me permiten disponerlas
para combatir la herejía y para otros asuntos. Hermano Egberto, quiero que
sepas que mi valor mas fundamental en esta vida es la humildad y sencillez,
por lo que día a día intento destinar los recursos de la manera más sabia,
responsable y a la vez eficiente posible.
Continuando con tu siguiente interrogante sobre como la iglesia logra
tener tanto dominio sobre extensos territorios, te digo querido Egberto que
esto ha sido un trabajo acumulado de varios años ya. La Iglesia Católica logra
tener influencia en una gran cantidad de personas gracias a distintos factores.
La educación es uno clave para comprender esto, debes pensar que la iglesia
ha sido fundadora de miles de escuelas y universidades a lo largo de Europa y
del mundo, esto genera que la religión se enseñe y se comunique a miles de
personas y al mismo tiempo permite a la Iglesia estar al tanto de lo que se
enseña y de como se esta educando. Luego está la conversión de los reyes
hacia el cristianismo. Cuando un rey proclama la religión católica en su
territorio, le atribuye un gran poder a la institución, dando potestades sobre
decisiones muy importantes en el reinado como la que te mencione
anteriormente sobre la conquista de nuevos territorios. Es así como la Iglesia
ha logrado llegar a los lugares mas recónditos que te puedas imaginar y Dios
ha hecho lo suyo.
Hermano Egberto, entiendo que pienses que los reyes y emperadores
me teman, pero aquí debo decirte que estas muy equivocado. Podría parecer
que hay temor sobre esta gran institución, poderosa e imponente, pero lo
que realmente hay, no es temor sobre mi o sobre Dios, sino que es temor
meramente al poder y a asuntos políticos y terrenales. Los reyes y
emperadores que nos temen, es porque se han centrado en lo terrenal y lo
monetario de la institución y no en el valor espiritual que esta tiene. No
logran entender que la Iglesia si bien ha logrado obtener mucho poder con el
tiempo, su función principal es ser una herramienta entre lo terrenal y lo
divino. De todas formas, no los culpo, hay que hacer una gran critica a como
se ha llevado a cabo el uso del poder de la Iglesia, el cual muchas veces lleva
a que se malentienda su función y desata temor a su alrededor. Es por eso
que uno de mis propósitos durante mi papado es lograr transmitir el
verdadero mensaje y la función de la Iglesia, lograr la paz y de ninguna forma
implantar temor.
Como te decía, querido Egberto, por ningún motivo el temor es el
cometido de la Iglesia, si es así es porque se ha malentendido. El verdadero
cometido es interceder por ustedes ante el padre para que Él nos cubra con
su luz y el Espíritu Santo nos inunde de su gracia. El resto son errores que los
papas han cometido, ya que al final del día son seres humanos como tu y
como yo.
Con esto espero haber aclarado y solucionado todas tus interrogantes y
las de tu monasterio en Northumbria. Insisto en que por favor nunca te
avergüences de tener dudas o cuestionar temas de la religión, ya que gracias
a esto logramos solidificar nuestra fe. Te deseo todo lo mejor a ti hermano
Egberto y a todo el monasterio que tanto bien hacen. Que el Espíritu Santo
los ilumine en todos sus quehaceres y Dios y la santísima Virgen María los
acompañen siempre.
Se despide con mucha alegría y fraternidad,
Celestino V