A UTOINFORME DE NOVICIADO

Novicia: Yeliannys Durán

Edad: 22 años

Fecha de entrega: 03 de diciembre 2023

Si supieras Observar el interior de las vidas, nos sorprendería encontrar tanta bondad, entrega ,
sacrificio generosidad y amor verdadero “libro un proyecto de vida: Teresa titos Garzón” con esta
frase quiero iniciar el desarrollo de este auto informe, hoy me detengo a observar el interior de lo
que soy y lo que ha pasado en todo este tiempo de noviciado y todo comienza desde dentro lo que
pienso a diario, lo que soy cuando estoy sola, cuando estoy en la calle, con amigos, familia,
comunidad y con Jesús, es fácil asimilar lo que la gente observa de mí, como me porto, hablo y me
comporto pero más allá de eso es que pienso de mí, como me veo y como me trato. Puedo decir
que he trabajado arduamente para conseguir la autoestima, personalidad y pensamiento que
tengo ahora sobre la vida, especialmente de mi vida y de lo que soy, lo que quiero y lo que estoy
dispuesta a recibir de Dios.

Puedo decir que soy alguien fuerte, independiente, agradecida, arriesgada, hermosa, capaz de
crecer, alegre, con talentos, pero también digo que me equivoco, reconozco que tengo defectos,
sin embargo eso no me detiene a hacer lo que me propongo, siempre y cuando sea la voluntad de
Dios, me encontré descubriendo mis virtudes y defectos, encontré lo que ahora me hace feliz, soy
una mujer decidida y capaz de asumir responsabilidades y también las consecuencias de mis actos
(buenos o malos), me considero paciente, prudente, y abierta a recibir lo que las hnas. consideren
una corrección fraterna, siempre y cuando esta no afecte del todo lo que soy, no puedo cambiar al
gusto de las personas sino lo que Dios quiere para mí.

Esto me ayuda a saber reaccionar a las diferentes cosas que se me presentan en la vida diaria, lo
asumo viviendo mis emociones, mis éxitos los asumo con alegría y agradecimiento, compartiendo
con las personas que estén implicadas en el logro y si es un éxito personal lo celebro con Dios
porque estoy segura que nada consigo sin Él y la Virgen; sin embargo no todo son éxitos sino
también están las frustraciones que si no se saben manejar pueden llevar al fracaso, no sabes
cómo manejar una situación hasta que la enfrentas y aprendes de ella, me puedo llegar a hundir
por un problema, porque no se resolver todo, y mucho menos yo sola, sin embargo lo que si se es
que hago todo lo posible por dejarme ayudar de Dios principalmente y también de las personas,
amigos y hnas. que Él deja en el camino que están dispuestas ayudar, a acompañar el proceso y a
pesar del mal rato, del llanto y el dolor todo es gracia y bendición de Dios logrando que al final se
pueda celebrar como un logro, un aprendizaje que sirve para ayudar.

Como todo en la vida es un proceso de crecimiento, este tiempo de noviciado he tenido la

oportunidad de trabajar en varios aspectos personales que a su vez también influyen los aspectos
espirituales; entre los aspectos trabajados se encuentran: La comunicación asertiva, expresar
tanto lo que me agrada como lo que no, afrontar nuevos retos sin compañera, la soledad física,
vivencia de mis emociones y sentimientos, descubrir nuevos dones, talentos, defectos y
capacidades, la oración, la paciencia, confianza en Dios. En todos estos aspectos he visto un
crecimiento, sin dejar a un lado que todo es gracia, bondad y amor de Dios, sin eso no habría
podido superar las dificultades y asumiendo que cada día, mes y año es un constante crecimiento
personal, seguir reforzando estos aspectos y mejorar otros, sabiendo que todo es por la gracia de
Dios, la compañía de la Virgen y la disposición que tenga para que ellos actúen. Entre los aspectos
a mejorar quiero seguir reforzando algunos como lo es la disciplina personal, comunicación
asertiva y la concentración y seguir descubriendo cosas que puedan ser obstáculo para hacer
crecer en amor hacia Dios.

A lo largo de este tiempo en la medida de lo posible pude poner al servicio varias virtudes que ya
había descubierto y otras que fui desarrollando pese a las circunstancias que se me fueron
presentando entre ellas puedo mencionar: la alegría, la paciencia, la responsabilidad, el respeto, el
servicio en lo que me pedían, prudencia, ingenio y espero seguir descubriendo mas con el paso del
tiempo.

En la dimensión espiritual he vivido la experiencia de Jesús en la congregación, desde el amor y la

misericordia de Él tiene conmigo, es descubrir día a día su voluntad en mi vida, desde la
cotidianidad, el estudio, la oración, personal y comunitaria, la predicación, el trabajo y el descanso;
son para mi experimentar a Dios, no se trata de solo quedarse en las manifestaciones espirituales
extraordinarias, que son buenas pero en lo personal Dios se da tanto que vive en lo más pequeño
en lo cotidiano, en una sonrisa de un niño, un abrazo, el compartir con el personal del lugar donde
esté prestando servicio, en la oración, en ese o esa que miro cuando voy en el bus o caminando
por la calle, en el que sufre y Dios está en lo que doy, los buenos días, un detalle y también en lo
que recibo, dándome la oportunidad de recibir lo bueno que me da la gente, se muestra en las
correcciones, la naturaleza, en aquello que hace que mi vida tenga sentido, que pueda definir lo
que soy, lo que siento y lo que pienso.

Para poder vivir esta experiencia de Jesús en mi vida tengo varias cosas y momentos en específico
que fortalecen mi vocación, entre ellos están la oración, la eucaristía son la base, pero también
está la pastoral, el poder predicar lo que estudio, la música, el ejemplo de las hnas. que han
entregado su vida a Dios, son características que marcan la experiencia de vida.

Toda esta experiencia de fe expresada en la vivencia de Jesús en mi vida diaria, también es

comprender la voluntad de Dios en mi vida según lo que él vea conveniente en el día a día, que
necesito y lo que quiero y aquello que él permite y lo que no, en los momentos difíciles me
sostiene y me guía, me da la libertad de escoger todos los días y a su vez sabiendo que cada
decisión que tomo, sea buena o no trae una enseñanza y si al final del día me siento en paz
entonces es la voluntad de Dios, entendiendo que la paz no es ausencia de problemas, al
contrario es sabiendo que así haya problemas en el fondo sé que las cosas se arreglan, que en una
noche oscura hay una lámpara encendida y esa es la paz de Cristo. Esta experiencia de asumir la
voluntad de Dios en mi vida va de la mano con una experiencia como parte de la iglesia, siento que
soy una gota de agua en el inmenso mar, pero sin embargo cumplo mi misión que algún día Cristo
nos dejó de anunciar el evangelio hasta los confines del mundo, sobre todo en el estilo de vida que
estoy eligiendo.
Como todo no solo se trata de recibir la gracia y el amor de Dios, sino también hacer lo posible por
mantenerlos, es como decir un abono que alimenta mi vida espiritual, y para mí la vida de algunos
santos son referentes que hacen anhelar ese encuentro con el Dios vivo, teniendo como base de
que si ellos en algún momento lo vivieron porque yo no, entre ellos San Martin de Porres, San Juan
Pablo II, Santa Catalina de Siena, San Juan María Vianney, la madre Teresa y la vida de algunas
hnas. que conozco, que en su humanidad lograron divinizar su amor hacia Dios, y llevarlo a
plenitud; otro referente que me ayuda al seguimiento del Señor es la música y la naturaleza es
increíble como el Señor desde una canción, así no sea católica puede llegar a conectarme con Él, y
la naturaleza, los animales, la nobleza que hay en Dios de regalarme la dicha de poder contemplar
las maravillas de su creación.

En la dimensión dominicana congregacional he logrado enraizar en mi vida y vocación varios

aspectos que hacen que siga escogiendo este carisma, entre ellos están la predicación multiforme
del evangelio en las que desarrollamos nuestro carisma, la vida de los santos dominicos que he
conocido, el amor al carisma dominicano, la libertad de escoger este carisma, el servicio que
puedo ofrecer en la comunidad y a su vez en lo que me pide el Señor a diario, y la realidad de la
vida, la entrega a los colegios y el desgastar la vida por el proyecto fundacional de la Madre
Teresa.

Cada vivencia de la experiencia religiosa me hace comprometerme cada día a asumir el

compromiso de serle fiel a Dios por medio de los votos de pobreza, obediencia y castidad según
nuestras constituciones, pero para mí esto va más allá; es asumirlo frente al pueblo como dice el
salmo, pero también es asumirlo en mi soledad, en mis noches oscuras y días duros, que esta la
teoría pero practicarlo va más allá de solo un compromiso es vivir a diario, amando a todos,
obedeciendo, y dándose en pobreza material y pobreza de espíritu, creo que el compromiso se
asume cuando soy capaz de renunciar a mis propios deseos y eso me hace libre para recibir la
gracia de Dios considerando que influye grandemente la vida de Nuestro padre Domingo y Madre
Teresa en mi para continuar con este camino de amor a Dios. Los rasgos que realmente impactan
en mi de Nuestro Padre Domingo es su entrega, y la capacidad de ser tan humano que eso fue lo
que lo llevo a la Santidad, el hecho de sufrir tanto por el otro y que eso aún se mantenga vigente.

Me tocó nacer en una etapa de la historia donde la sociedad es poco sensible a las realidades
espirituales y de empatía con el sufrimiento de los demás porque somos individualistas,
consumistas y hedonistas, donde la economía, la guerra, la incredulidad, el dejar de sentir
emociones, la depresión, la lucha mental que tienen muchas personas, el maltrato físico y mental
que se sufre; sin embargo en medio de este caos se es capaz de admirar la capacidad que se
puede llegar a desarrollar por la sensibilización del dolor del otro, en su momento nuestro Padre
vivió su experiencia de vida con las dificultades que tenía y alcanzó el amor a Dios.

De igual forma Madre Teresa en este tiempo ha marcado en mi ciertas cosas que me motivan a
fortalecer mi vocación, una de sus pensamientos que me marcó es “quiero ser santa siendo yo
misma”. A lo largo de mi vida me ha costado mucho descubrir quién soy, siendo una constante
lucha puesto que cada día suceden cosas que hacen que uno, cambie de mentalidad, asuma otros
compromisos, renuncie a cosas; si Dios me ama como soy sabiendo que tengo virtudes y defectos,
entonces yo también le puedo amar con lo que soy; es allí cuando entra el verdadero sacrifico,
porque cuando uno realmente ama a alguien hace todo lo posible por hacerle feliz y si yo amo a
Dios yo quiero hacerlo feliz, esto implica no que deje a un lado lo que soy al contrario, sino ir
ganando terreno en unificar fragmentos que pueda tener dispersos y recomponerlos haciendo de
ese rompecabezas interno una hermosa figura, vas a ir colocando cada pieza en su lugar logrando
armonizar colores, formas, siluetas y mensajes que quizás en algunos momentos estuvieron
dispersos y sin sentido pero que Dios tiene su tiempo para arreglarlos. Desde mi punto de vista
Madre Teresa no dejo ser ella misma, al contrario vivió en tal plenitud que pudo cumplir su sueño
haciendo la voluntad de Dios.

Puedo ver que Dios con el pasar el tiempo me va mostrando que es lo que quiere para mí, y yo soy
capaz de entregar lo que tengo mis dones y talentos donde las hnas. consideren necesitarlo,
sabiendo que el camino no es fácil, pero a su vez estoy dispuesta a aceptar los retos que se
presenten para así enriquecer mi vida y vocación y sumar puntos de vida y anécdotas a la historia
que Dios está escribiendo conmigo.

Todo este tiempo de noviciado a traído consigo altos y bajos que realmente son válidos, y puedo
decir que agradezco a Dios y a las hnas. por esta experiencia, tal y como fue agradezco el cariño, el
respeto, y las cosas que me enseñaron, aprendí que debo tomar las cosas que enriquezcan mi
alma y mi corazón y que debo dejarle las cosas que no hacen bien a mi vida a las personas que las
tienen consigo, sin dejar a un lado la compasión de la historia de vida que cada una lleva en su
interior, agradezco todo porque un alma agradecida reciba más que aquella que anhela que las
cosas fueran diferentes, él hubiera no existe y Dios obra para que las cosas sucedan.

Para concluir este autoinforme me permito desde la experiencia vivida en estos dos años acotar
algunas sugerencias para futuros grupos de formación:

Estudiar la posibilidad de que la comunidad formativa asignada como casa de noviciado tenga
hnas. con edades diversas en las cuales la novicia pueda observar varios escenarios.

Cuidar que la comunidad asignada como casa de formación sea la más idónea en cuanto a
fraternidad, oración, predicación y estudio.

Velar que la formanda que se encuentre sola en su etapa de formación al menos coincida con
alguna contemporánea de edad

Poner especial atención al qué, cuándo, cómo, quién, dónde y por qué de lo que se dice delante de
una formanda; somos jóvenes con mucho espíritu de observación, y nos enseñan más con la vida y
el ejemplo que con las palabras.

Finalmente es importante recordar que todos cometemos errores y es parte de nuestro

crecimiento personal aprender de ellos. Como congregación debemos reflexionar sobre nuestras
acciones y asegurarnos que la toma de decisiones debe tener en cuenta la experiencia del pasado
para de esta manera trabajar para crear un ambiente respetuoso y no repetir los errores del
pasado.