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Y EL DON
PROFÉTICO EN
LA IGLESIA
M I S I Ó N PA R A L A E D U C A C I Ó N
CRISTIANA
DON DE PROFECÍA
• No se manifiesta en todas las personas.
• Se “activa” por el Espíritu Santo que mora dentro de nosotros, y
se puede manifestar de muchas formas.
• Percibe lo que Dios está diciendo sobre las personas de una
manera intencional, al principio cuesta comenzar a distinguir si lo
que siente es la voz de Dios, o la suya o la de un espíritu
contrario, por eso debe ser algo guiado cuidadosamente a través
del liderazgo de la Iglesia.
DON DE PROFECÍA
19 Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos
como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la
mañana salga en vuestros corazones; 20 entendiendo primero esto, que ninguna profecía de
la Escritura es de interpretación privada, 21 porque nunca la profecía fue traída por
voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el
Espíritu Santo. (2 Pedro 1:19-21)
Yo me postré a sus pies para adorarle. Y él me dijo: Mira, no lo hagas; yo soy consiervo tuyo, y
de tus hermanos que retienen el testimonio de Jesús. Adora a Dios; porque el testimonio de
Jesús es el espíritu de la profecía. (Apocalipsis 19:10)
OFICIO DE PROFETA
• El oficio del Profeta en el Nuevo Testamento maneja el Don profético con exactitud,
prepara y enseña a la Iglesia a conocer y usar el Don de Profecía guiado por el Espíritu
Santo. Tiene una vida de testimonio y ha sido confirmado por las autoridades de la Iglesia
como un Profeta de oficio.
• El profeta de oficio tiene un evidente respaldo de Dios y una madurez espiritual concreta.
Como todos los demás ministerios (Apóstoles, Profetas, Evangelistas, Pastor y Maestros)
son entregados por Jesús para servir y capacitar a la Iglesia (la congregación) para que
puedan llevar el Reino de los cielos a todo lugar.
OFICIO DE PROFETA