EL MINISTERIO PROFETICO

Pastor Dario Parish

 INDICE

Capítulo #I ¿Qué es el Ministerio Profético?

Capítulo #II ¿Cuáles son las experiencias proféticas?

Capítulo #III Características del Ministerio Profético

Capítulo #IV Forma en que el Ministerio Profético se comunica

Capítulo #V Características que debe tener un profeta

Capítulo #VI Diversas cosas sobre el profeta

Capítulo #VII Los profetas falsos y las debilidades que pueden

destruir
a todo profeta

Capítulo #VIII El profeta y sus milagros

Capítulo #IX Ministerios Proféticos

Capítulo #X Características individuales de un profeta

Capítulo #XI Bases de protección para el profeta.

Capítulo #XII El Ministerio Profético y la Iglesia Local.

EL MINISTERIO PROFÉTICO

Cuando nos referimos a la iglesia en general y a sus ministerios, el

Ministerio Profético es uno de los ministerios más importantes, y a la
misma vez, uno de los más peligrosos. Muchos de los que son llamados
profetas no entienden este importante ministerio, ni han sido capacitados
para ejercerlo y algunos de ellos tienen intenciones cuestionables,
buscando su propia gloria, reconocimiento, poder y desean que los
oyentes los busquen, dependan de ellos y que los admiren.

Hoy más que nunca, necesitamos ministros que vivan los principios que
fundamentaron la vida y el ministerio de Jesucristo. Es de extrema
importancia que Dios levante a sus profetas, para guiar, desarrollar y
preparar a la Iglesia de los Últimos Tiempos.

CAPITULO #I

I. ¿QUE ES EL MINISTERIO PROFETICO?

I. ENLACE ENTRE EL MUNDO NATURAL Y MUNDO

ESPIRITUAL:

Hemos sido situados dentro de un mundo natural, el cual se encuentra

en un mundo espiritual. El mundo natural con todas sus delineaciones:
las leyes del tiempo, materia, espacio, distancia, gravedad,
aerodinámica e inercia, fueron establecidas singularmente para darle
al ser humano una calidad de vida. Más Dios, juntamente con el resto
de la creación, se encuentran dentro del panorama de lo espiritual, en
donde ninguno de estas limitantes son relevantes. El mundo espiritual
se mueve dentro de la “eternidad”, el eterno presente, en donde todo
ocurre sin el control del tiempo (Eclesiastés 3:15).
El mundo espiritual no es gobernado por leyes naturales, porque los
seres que viven dentro de este marco no están limitados a dichas leyes.

Lo profético tiene el privilegio de poder experimentar ambos mundos,

el natural y el espiritual. Como seres humanos experimentamos el
mundo natural. Como personas que han sido ungidas por Dios, tienen
la capacidad de experimentar con sus sentidos espirituales el mundo
espiritual que nos rodea. Estos son algunas características de este
ministerio:

I. Su vida está abierta al mundo espiritual:

*Ezequiel 1:1 “los cielos se abrieron”.

Un profeta es la persona que desde muy temprana edad ha

comprobado tener una alta sensibilidad al mundo espiritual.
Recordemos que el llamado que Dios le ha dado a los
profetas (como los demás ministerios), fue dado desde antes
de su concepción, impartiéndole ciertos dones espirituales y
naturales, para el cumplimiento de ese llamado.

*Los dones son impartidos desde antes que llegue a ser

profeta, para prepararlo para la obra que Dios tiene por delante
– Ejemplo: El caso de José – Génesis 37:5-11.

II. Es experimentar algo que los demás no tienen la capacidad

de poderlo hacer - Daniel 10:7

Dios le ha dado principalmente a los ministerios proféticos la

capacidad de experimentar un mover sobrenatural continuo en
su vida.

III. Enoc – caminó con Dios y fue llevado. Génesis 5:24 “Y

Enoc anduvo con Dios, y desapareció porque Dios se lo
llevó“

El ministerio profético vive entre dos mundos: el natural y el

espiritual.

IV. Moisés – Éxodo 34:30 “la piel de su rostro era

 resplandeciente”. (II Corintios 3:7)

El mundo espiritual cuando paso los 80 días en comunión con

Dios en el monte, recibiendo la ley, los diseños del
tabernáculo y entendiendo la obra de Dios en medio del
Antiguo Pacto.

V. Sansón – Jueces 13:25 “El Espíritu de Jehová comenzó a

manifestarse en él”.

Cuando el Espíritu de Dios se movía en la vida de Sansón,

producía una fuerza sobrenatural, que lo habilitaba para hacer
hazañas sobrehumanas. Jueces 15:14 “El Espíritu…vino
sobre él”.

Todo esto era en el cumplimiento de su ministerio y de lo que

le había sido dicho por el ángel mensajero.

VI. Elías corrió más rápido que un carro halado por caballos –
I Reyes 18:46.

Este suceso hecho anormal y humanamente sería imposible,

más la unción de Dios lo habilitó para hacer algo mayor.

Después de haber comido una sola comida pudo caminar por

40 días y noches – I Reyes 19:8.

VII. Saulo tuvo la experiencia con Jesucristo en el camino a

Damasco. Sus acompañantes sólo oyeron la voz, más no
vieron a nadie - Hechos 9:7.

Una puerta al mundo espiritual fue abierta, de tal forma que él

pudo ver y escuchar lo que en el mundo espiritual se estaba
manifestando.
II. UNA PERSONA UNGIDA POR DIOS, PARA FUNCIONAR O
DESEMPEÑAR LA LABOR PROFETICA

I. La mano de Dios está sobre él – Ezequiel 1:3.

II. La mano de Dios se “posó” sobre él – Ezequiel 8:1.

Lo que hace al profeta, no son sus habilidades y dones

naturales, sino que la presencia de Dios es la que lo habilita y
capacita para el cumplimiento del llamado de Dios en su vida.
 CAPITULO #II

II. ¿CUÁLES SON LAS EXPERIENCIAS PROFÉTICAS?

*No todas las experiencias proféticas son únicas para los profetas,
sino que los demás ministerios también tienen dones con tendencias
proféticas entre sus diferentes herramientas ministeriales. Es
esencial que los demás ministerios se muevan en lo sobrenatural,
porque por medio de eso encuentran la afirmación y el
enriquecimiento de sus ministerios.

Que tan importante es que el ministerio magisterial se mueva dentro

del don de la revelación, o que el ministerio pastoral goce de los
dones de conocimiento y discernimiento. También que el ministerio
evangelístico se beneficie por el don de sanidades y milagros. Todos
los dones espirituales son para beneficiar o ayudar al pueblo de Dios.

I. EL SIGNIFICADO DE LA PALABRA PROFETA:

I. Proferir o hablar las palabras de otro

*El Griego – “Pro” = Antes – “Feta”= Decir-Luz

*Aplicativamente significa “portavoz o vocero de

otros”

*Aarón: Portavoz (profeta) de Moisés – Éxodo 17:1,2 – Moisés

hablaría a Aarón y él se lo transmitiría al Faraón.

II. Proclamar: Es una forma de predicación.

Todo ministerio que presenta la Palabra de Dios, en una forma
u otra, esta profetizando, porque está declarando la Palabra de
Dios al pueblo que la necesita.

Necesitamos comprender que el ministerio profético es mucho

más que la proclamación (predicación) de la Palabra escrita,
sino que hay que moverse profundamente en los dones
 espirituales.

III. Representar a Dios delante del Pueblo, más el Sacerdote

representa al Pueblo delante de Dios.

*Samuel: Entrenado para el sacerdocio, llamado para ser

profeta - I Samuel 2:11,18.

El Sacerdote se presenta ante Dios a favor del pueblo y de si

mismo, para interceder por ellos y para presentar sacrificios
delante de Dios a favor del pueblo.

Para el profeta, el único y principal propósito es servir y

agradar a Dios, al que él representa delante del pueblo. Él es el
que habla por Dios e instruye al pueblo en las cosas que Dios
desea de ellos.

IV. Recibir un mensaje de parte de Dios para otra persona.

1. Ezequiel 1:3 “vino Palabra”.

2. Ezequiel 2:7 “hablarás, pues, mis palabras”, (Ezequiel 3:4).
3. Ezequiel 3:16 “vino a mi Palabra de Jehová… y los
amonestarás de mi parte”.
4. Dios habla (la Palabra es divina). Ezequiel 14:7 “venga al
profeta para consultarme por medio de él, yo, el SEÑOR, le
responderé por mí mismo”.

a. En todo caso, la palabra recibida debe de ser juzgada,

para ver si es de Dios – I Corintios 14:29.
b. Si viene de Dios, la palabra no se juzga en su
contenido, sino que es aceptada, por ser de Dios.

“He puesto mis palabras en tu boca” – Jeremías 1:9

c. En algunos casos aislados, puede haber una mezcla

de Dios y Satanás. Por esa razón es necesario que la
palabra profética sea juzgada, para asegurarse que es
 genuinamente de Dios.

Pedro – revelación y tentación – Mateo 16:16, 22,23

El apóstol Pedro tuvo una revelación única de parte

de Dios mismo, sobre la persona de Jesucristo. Jesús
mismo reconoció que él no lo había recibido por
impartición humana, sino por revelación directa de
parte de Dios. Minutos más tarde, Pedro empezó a
reprender a Jesucristo, tratando de crear en Él lástima
propia. Jesucristo discernió que Pedro estaba siendo
usado por el enemigo, para tentarle. Vemos que en
instantes una persona puede ser altamente usada por
Dios y después puede actuar en su carne; por medio
del orgullo, la altivez o la independencia, y así darle
cabida al enemigo.

5. El profeta debe de depender de Dios en las palabras que

habla – Ezequiel 14:9

La clave de la permanencia y éxito del ministerio profético

depende de que la persona mantenga una constante relación
y dependencia en la obra de Dios.

a. Puede ser su destrucción – Ezequiel 14:10 “llevará su

maldad”. En cada uno de los ministerios tenemos que
ser responsables, nosotros mismos, por la calidad del
contenido de nuestros mensajes. El profeta, no debe
de usar sus labios para manipular o forzar a otros,
sino debe de guardarlos para ser instrumentos de la
verdad de Dios.

b. Para la destrucción de otros. Nosotros tenemos el

gran privilegio de ser puestos en liderazgo y, en cada
momento, debemos de saber que estamos influyendo
para bien, pero lamentablemente, también con
nuestras palabras podemos estar influyendo para mal.
 V. Es una persona con oídos abiertos – Ezequiel 2:3 ó II
Corintios 12:4 - que fue arrebatado al paraíso, donde oyó
palabras secretas que el hombre no puede decir.

Uno de los dones más importantes que puede desarrollarse en el

ministerio profético es el de escuchar las palabras en el mundo
espiritual. Como en lo natural, tenemos cinco sentidos que
proveen calidad de vida y nos conectan con el mundo
alrededor; en la misma forma, hay sentidos espirituales que nos
ayudan a conectarnos con el mundo espiritual, que nos rodea.

VI. Es de ojos abiertos al mundo espiritual – Daniel 10:7

1. El nombre que comúnmente se le da al profeta en el

Antiguo Testamento es el de “Vidente”, porque también
muchos tienen la habilidad y sensibilidad de ver el mundo
espiritual que está a nuestro alrededor. – I Samuel 9:9.

2. David, como profeta, era hombre de ojos abiertos – II

Samuel 24:17, “vio al ángel que destruía al pueblo”.
Cuando Dios estaba castigando a David, por su pecado,
mandó al ángel de la muerte, para ejecutar su castigo.
Durante ese momento, en la angustia de su corazón, el vio al
ángel que se movía entre el pueblo.

CAPITULO #III

III. LOS PRINCIPIOS SOBRE EL PROFETIZAR – Ezequiel 6:2,

Números 11:27,29; Judas. 1:14

La profecía no hace a un profeta (por ser un don para el Cuerpo de

 Cristo), pero es indispensable que todo Profeta tenga el don
plenamente desarrollado. El don de profecía puede ser usado por
personas que no tienen mucho tiempo en su vida cristiana y no
mucha profundidad en su carácter.

La profecía como un don: Zacarías – Lucas 2:67.

Pablo deseaba que el don de profecía se experimentara en la vida

de todo creyente (I Corintios 14:1), por ser el don más completo
de todos los demás dones espirituales.

El don de profecía, es para edificación, exhortación, consolación

y ánimo I Corintios 14:3.

Profecía ministerial es para instrucción, enseñanza, corrección,

dirección y predicción.

No todo aquel que profetiza sabe o comprende que está

profetizando, ni aun siendo el mismo el profeta – Juan 11:50,51.

I. EL DON DE PROFECÍA. Hay muchas personas que no saben

distinguir entre el don de profecía y el uso de la profecía por el
profeta. Son dos cosas que fundamentalmente parecen lo
mismo, más sus objetivos son totalmente diferentes.

1. Dios siempre deseó tener un pueblo “profético”, que tuviera

la sensibilidad de poder escuchar de parte de Dios. Por esa
razón, Dios le dio al pueblo el don de Profecía, para
escuchar y transmitir de parte de Dios palabras que den
aliento y estimulo a su vida. (Números 11:27,29; Judas
1:14)

2. Como cualquier don, éste no necesita madurez y larga

experiencia en Dios, sino que Dios lo da en abundancia a la
vida de cada creyente.
 a. Dios imparte este don, juntamente con la impartición
de la llenura del Espíritu Santo en la vida de un
creyente.

3. La profecía, como un don ambiental – Saúl profetizó – I

Samuel 10:10; 19:24.

a. En algunos momentos vemos la profecía como un

don circunstancial, dado que es influenciado por el
ambiente cargado proféticamente.

El caso de Moisés y los 70 ancianos de Israel –

Dios descendió para tomar del espíritu que
había en Moisés y ponerlo sobre ellos y
después ellos profetizaron – Números 11:25.

Más Eldad y Medad, dos de los 70, que no

pudieron estar en el tabernáculo, también
profetizaron, en el campo – Números 11:26,27

b. Es siempre a través dado a las personas, porque Dios

quiere moverse directamente en medio de nosotros.
Estos dones son por naturaleza “irrevocables”, no se
pierden con los altibajos de la vida (Romanos 11:29
“porque los dones y el llamamiento de Dios son
irrevocables”).

c. Si la persona desea edificar y engrandecer este don

debe de buscar a Dios más profundamente y debe de
encaminar su vida en la madurez.

4. Tipos del don de profecía:

a. Llamado dado al creyente en el momento de la

salvación – equivalente a la predicación:
 El que predica es un vocero, que transmite la
Palabra de Dios.

Es una palabra preparada, sin espontaneidad.

b. Es el don de la gracia de Dios – Romanos 12:6 “Pero

teniendo dones que difieren, según la gracia que nos
ha sido dada, usémoslos”.
Este don se encuentra en I Corintios 12.

c. El Don de Profecía como oficio ministerial – Efesios

4:11.

Ve la gracia de Dios – Hechos 11:22,23

El llamado ministerial es según Su propósito

y Su Gracia – II Timoteo 1:9.

No es simplemente para edificación, sino

para corrección, dirección, predicción e
instrucción.

II. Para moverse proféticamente en la Profecía debería de haber

madurez de carácter – Oseas 9:7,8 “Un insensato es el
profeta” – Si no hay madurez, sus palabras pueden ser lazo
para el que las oye.

III. La Profecía Ministerial – Declaración de eventos futuros, no

solamente en la vida del oyente, sino también en la vida del que
pronuncia la profecía, en la vida de terceras personas o en
eventos generales:

1. La Segunda Venida de Jesús – Ezequiel 7.

 2. Ira de Dios – Ezequiel 7:19 - Isaías 13:9 “He aquí, el día
del SEÑOR viene, cruel, con furia y ardiente ira, para
convertir en desolación la tierra y exterminar de ella a sus
pecadores”.

El día llamado “ira de Dios”, es el momento cuando Dios

enviará sobre la tierra Su ira destructora, para castigar la
maldad y la soberbia de la tierra.

a. Día de Jehová – Sofonías 1:7, 15, 17.

b. Día grande de Jehová – Sofonías 1:14.

3. Eventos en la vida de otros – Génesis 49:1 “acontecer en

los días venideros”.

4. Es descriptivo del futuro de alguna persona, para prevenirlo,

prepararlo y advertirle – Hechos 21:11.

IV. Es declarar la voluntad de Dios.

1. Dar orden – para ver un milagro – Ezequiel 27:4.

2. Dar una orden en lo natural – lo que Dios ya dijo en lo

Espiritual – Ezequiel 37:9 “di al espíritu: Así dice el Señor
DIOS: ‘Ven de los cuatro vientos, oh espíritu, y sopla sobre
estos muertos, y vivirán.’”

a. Mateo 16:19 – ratifica el principio de atar y desatar,

en la relación que hay entre el mundo espiritual y el
mundo natural.

V. Estas palabras no tienen que ser dadas inmediatamente, más

pueden ser guardadas hasta el momento oportuno – Ezequiel
3:10 “toma en tu corazón todas mis palabras”.
1. El ministerio (acción) del profeta está sujeto al profeta - I
Corintios 14:32. Dios es respetuoso y no infringe sobre la
voluntad de ser humano, deseando el desarrollarnos y
enseñarnos por medio del proceso de nuestras propias
decisiones. Debemos asumir nuestra propia responsabilidad,
la cual edifica cada vez más nuestras vidas y ministerios. Si
otros toman las decisiones por nosotros, nunca creceremos
personal y ministerialmente.

2. El problema con muchas personas proféticas es que están

controladas por el emocionalismo, atribuyéndolo al Espíritu
de Dios. Cuando reaccionamos emotivamente, podemos dar
el mensaje en el momento menos indicado, interrumpiendo
otras cosas que Dios está haciendo en el momento o
inconscientemente hiriendo a las personas que están
escuchando.

3. El profeta tiene la capacidad de guardar el mensaje, hasta el

momento adecuado, esperando horas, días, semanas, o aún,
hasta meses.

a. Cada profecía es para un tiempo definido, no

necesariamente para ese momento específicamente –
Lucas 1:20 “las cuales se cumplirán a su tiempo”.

El profeta, puede estar hablando sobre el

pasado, sobre algo que ocurrió.

La profecía o visión puede ser de algo que es

para ahora, para llamar a la persona a la
acción. Sea para la corrección, el cambio o
motivarlo a hacer algo necesario.

La palabra puede ser para el futuro, hablando

en el presente, para que pueda encaminar su
vida en preparación para lo que Dios desea de
 la persona en el futuro.

b. El problema es cuando el profeta habla lo que oye,

ve o siente inmediatamente o a las personas
equivocadas, esto produce un resultado erróneo –
Génesis 37:5-11

En el caso de José, produjo grande odio,

resentimiento y envidia de parte de sus
hermanos.

La gente no está lista para escuchar lo que

Dios está hablando.

La gente se molesta que Dios está usando a

otra persona o al mismo ministerio profético,
quien a los ojos de los hombres es el menos
indicado.

VI. El profeta debe de pedir “comprender la palabra” y tener

“inteligencia en la visión” – Daniel 10:1.

1. Es de extrema importancia que el profeta tenga el

entendimiento de la Palabra que ha recibido, para poder
ayudar al que escucha a entender, aceptar y aplicar la
palabra recibida.

2. No en todas las ocasiones los profetas entenderán las cosas

– Daniel 12:8.

a. Algunas cosas no son para este tiempo, sino para

otro tiempo. (v:9)

VII. Algunos de los mensajes que el profeta recibe son para otros,
más hay veces que son para él – Génesis 15:1 “la palabra del
SEÑOR vino a Abram en visión”.
 Hay que recordar que Abraham fue profeta – Génesis 20:7
“porque es profeta y orará por ti”.

1. El mensaje puede ser directamente de la voz de Dios –

Génesis 12:1.

2. El mensaje puede ser por visión – Génesis 15:1.

3. El mensaje puede ser para preparar a la persona para algo

en el futuro o una promesa que Dios le quiere dar –
Génesis 15:13 “tu descendencia morará en tierra ajena”.

4. El mensaje puede ser de previsión para proteger la vida del

profeta - Caso de Elías; cuando huye de Acab – I Reyes
17:2-7.

VIII. Dios respalda y cumple la declaración profética – de un

verdadero profeta, aún cuando el profeta no ha buscado la
guianza de Dios en todo lo que hará o dirá:

1. Moisés
Éxodo 8:13 “E hizo Jehová conforme a la palabra de
Moisés”.

2. Elías
I Reyes 17:24 “que la palabra de Jehová es verdad en tu
boca”.
I Reyes 17:1 “dijo a Acab: Vive el SEÑOR, Dios de Israel,
delante de quien estoy, que ciertamente no habrá rocío ni
lluvia en estos años, sino por la palabra de mi boca”.

a. Declaró que no llovería:

Santiago 5:17 “Elías era un hombre de pasiones
semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para
que no lloviera, y no llovió sobre la tierra por tres
años y seis meses”.
 b. Prometió la provisión de la viuda
1 Reyes 17:15 “Entonces ella fue e hizo conforme a
la palabra de Elías, y ella, él y la casa de ella
comieron por muchos días”.

c. Actuó en fe en la resurrección del niño

1 Rey. 17:22 “El SEÑOR escuchó la voz de Elías, y
el alma del niño volvió a él y revivió”.

3. Samuel – I Samuel 3:19 “no dejó caer a tierra ninguna de

sus palabras”.

a. I Samuel 9:6 “todo lo que él dice acontece sin

falta”.

IX. El Acto Profético, no necesariamente viene por buscar la

guianza de Dios, sino que es un acto Rhema en el problema del
momento – Un acto de Fe – II Rey. 4:33 – Como Eliseo
Resucitó al niño muerto.

X. No necesariamente son claros, sino que mucho de esa profecía

depende de los oyentes:

1. Su obediencia.

2. Es una prueba de Dios, para ver si la persona está dispuesta

a someterse a Dios y caminar por fe.

XI. La Profecía no depende si la gente está dispuesta hacer o

desobedecer la profecía – Miqueas 2:6 “no les profeticen,
porque no les alcanzará vergüenza”.

Muchos profetas están tentados en dar la profecía si están

 seguros que los oyentes cumplirán con lo que están recibiendo.
La responsabilidad del profeta está limitada al cumplimiento de
ser un portavoz, Dios se encargará si las personas reciben,
aceptan y creen en la Palabra recibida.

XII. La profecía es una declaración de la fe puesta en acción – II

Reyes 13:18 –

El caso de Eliseo y el rey Joás, quien fue ordenado a golpear la

tierra con la flecha, lo hizo solamente 3 veces. En esa forma,
declaró proféticamente sobre sí mismo.

XIII. Es una forma de Comunicación Angelical - Zacarías 1:9, 13,14

– “me dijo el ángel que hablaba conmigo: Clama diciendo:”

Las lenguas son una forma de comunicación angelical (I

Corintios 13:1), más no es la única forma que se comunican los
ángeles.

XIV. La Profecía es una de las herramientas que serán usadas

efectivamente en los últimos tiempos – Apocalipsis 11:6
“tienen poder…en los días de su profecía: y tienen poder sobre
(la naturaleza)…. Cuantas veces quieran”.

II. Debe de estar lleno de la Presencia de Dios – Daniel 5:11.

I. Por medio de la búsqueda de la presencia de Dios, creamos la

dependencia en Dios y no en otros o en uno mismo.

II. La presencia es la que capacita a la persona para hacer cosas

que normal o naturalmente no puede hacer.

III. La Unción rompe el yugo – en la vida de otros, así como en la

vida del mismo profeta.

III. El ver visiones – Isaías 6:1 “vi yo al Señor sentado sobre un trono
alto y sublime”.
Es ver eventos que han ocurrido, están ocurriendo u ocurrirán. La
visión es ver por medio de los ojos, mente o sueños.

I. Es una persona de Ojos abiertos – Balaam – Números 24:3, 15

“hombre de ojos abiertos”.

1. Llamado en el Antiguo Testamento como el “vidente” – I

Samuel 9:9 “hoy se le llama profeta, antes se le llamaba
vidente”.

II. Ver Visiones de Dios mismo – Isaías 6:1.

III. Ver Visiones de parte de Dios – Cosas que Dios está deseando
mostrarle, que no son del conocimiento aparente del ser
humano.

1. Ezequiel 1:1 “vi visiones de Dios”.

IV. Daniel y las visión del Sueño del Rey – Daniel 2:31-33.

1. La interpretación de los sueños era común entre todos los

“magos y sátrapas”, más ninguna persona había tenido
que revelar el sueño para después interpretarlo.

V. La Visión puede ser recibida despierto– Daniel 7:1.

1. Balaam – Números 24:3,15.

a. “Caído con los ojos abiertos” – Números 24:4,16.

Caídas – es una forma de “trance”, una
condición profética de estar en contacto con lo
que Dios está haciendo en o a través de nuestras
vidas.
 VI. En las visiones, es difícil de discernir el momento en que
ocurren – Apocalipsis 1:19 “las que son y las que han de ser
después de estas”.

Una de las mayores debilidades proféticas es el saber cuándo

ocurrirá lo que está viendo o percibiendo – puede ser que haya
ocurrido en el pasado, este pasando en este momento, o todavía
no ha ocurrido. Si no ha ocurrido, puede ser que sea una
advertencia, para llamar al oyente a un cambio de actitud,
acción o al arrepentimiento.

VII. Visión es un pensamiento – Daniel 7:15 “visiones en mi

cabeza”.

VIII. Es ver los eventos en el mundo espiritual:

1. Es ver la realidad del mundo espiritual – Mateo 17:9 (Caso

de la transfiguración).

2. El Siervo de Eliseo: Pudo ver a los ejércitos de Dios - II

Reyes 2:24. Se llenó de descanso, en vez de estar
controlado por la desesperación y el temor.

3. Juan vio la Santa Ciudad, la Nueva Jerusalén, descender

del cielo – Apocalipsis 21:2.

IV. Tiene diversas formas de Sueños.

I. Sueños de la presencia y las Obra de Dios – Caso de Jacob en

Betel - Génesis 28:12.

1. Poder oír audiblemente la voz de Dios – Génesis 28:13.

2. Un ángel se puede aparecer en un sueño – Génesis 31:11.

V. No está sujeto a las limitaciones humanas, sino que en sus

experiencias puede trascender a ellas:

El ser humano está limitado al tiempo, espacio, materia, distancia,

gravedad, etc. El profeta tienen la habilidad de entrar al mundo
espiritual, donde estas cosas ya no limitan al ser.

I. Transportarse en cuerpo, no solamente con los ojos – Efesios

2:6; Juan 14:10-14.

El transportarse era común para los profetas, primariamente en

cuerpo en este tiempo a otro lugar, pero también en distancia, al
futuro y al Cielo mismo (trono de Dios) – II Reyes 2:16 “quizá
lo ha levantado el Espíritu de Jehová, y lo ha echado en algún
monte o en algún valle”. (I Reyes 18:12).

1. Ezequiel – se encontraba físicamente en Babilonia, junto al

rio Quebar Ezequiel 1:3.

a. Es llevado al Trono, y ve al que está sentado en el

Trono – que tenía el aspecto de un hombre –
Ezequiel 1:26.

Jesucristo tomo su lugar en el Trono, después de

Su resurrección – Juan 20:17, lo que nos
muestras que la experiencia que tuvo Ezequiel
fue un transportación hacia el futuro, a un
momento cuando Jesucristo estaba sentado en el
Trono de Dios.

Llamado a tomar el Trono – Mateo 22:44;

Efesios 1:20; Apocalipsis 4:2; Mateo 25:31.

b. Alzado entre el Cielo y la Tierra (Ezequiel 8:3) –

rompió la ley de la gravedad (Ezequiel 11:1 “me
elevó y me llevó”) (“alzó el Espíritu” – Ezequiel
43:5).
2. Transportado al futuro, pero en la tierra – Ezequiel 37:1
(Armagedón). Para presenciar los eventos que ocurrirán en
el futuro, especialmente en este tiempo trascendental en el
futuro de la tierra.

3. Transporte de Juan el apóstol al día del Señor –

Apocalipsis 1:10 “yo estaba en el Espíritu en el día del
Señor”.

El día del Señor, es el tiempo donde Dios derramará de

su ira, sobre los injustos que están sobre la tierra. Es un
evento consecutivamente con la Venida de Jesucristo.

a. Transportado también al Cielo, a la presencia de

Dios - Apocalipsis 4:1-2 “sube acá; y te mostraré
las cosas que sucederán después de estas….yo
estaba en el Espíritu”.

b. Transportado al Desierto, al lugar donde se cumplirá

muchas de las profecías Bíblicas – Apocalipsis 17:3.

4. Transportado a la Nueva Jerusalén – Ezequiel 40:1,2.

La Nueva Jerusalén es la que Dios está edificando que
descenderá sobre la tierra en los últimos tiempos, después
de la Segunda Venida.

5. Felipe es llevado a otro lugar, para continuar su ministerio

– Hechos 8:39 “el Espíritu del Señor arrebató a Felipe”.

6. Pablo transportado a Corinto para cumplir su labor

ministerial – I Corintios 5:3,4 “yo, como ausente en
cuerpo, pero presente en espíritu… reunidos vosotros y mi
espíritu…”

a. II Corintios 12:2 “si en cuerpo, no lo sé, si fuera del

cuerpo, no lo se… fue arrebatado al tercer cielo”.
Hay veces que el profeta no está totalmente
 entendido de lo que está ocurriendo a su rededor,
más sabe que está teniendo una manifestación
profética.

b. II Corintios 12:4 “arrebatado al paraíso, donde oyó

palabras inefables”.
El paraíso podría ser un lugar de espera para los que
han muerto creyendo, hasta el tiempo de la
resurrección y el juicio.

c. También en la iglesia de Colosas – Colosenses 2:1,5

“ausente en cuerpo, no obstante en espíritu estoy
con vosotros”.

II. Disposición de Movilidad – Daniel 7:16 “acerqué”.

Lo natural y lo espiritual se encuentran en ese momento

cuando lo eternal y lo temporal se trasladan en el momento
profético.

III. Es un Vaso para recibir a los diferentes Espíritus departe de

Dios, sean Dios mismo, los Espíritus de Dios, y los espíritus
creados por Dios y para servir a Dios.

El cuerpo humano fue creado para esto, aún para albergar al

Dios todo poderoso (Efesios 2:22 “edificados para morada de
Dios”; Juan 14:23, 2) – porque somos moradas suya. No
solamente el espíritu del hombre (una creación única de Dios
– II Corintios 5:1, 17), sino que también las demás áreas del
ser humano, incluyendo su cuerpo, alma, mente, voluntad,
emociones y personalidad.

1. Dentro del Ministerio Profético, operan los espíritus de

Dios: como el espíritu de revelación – Efesios 1:17.

a. ¿Cuáles son los espíritus de Dios? Apocalipsis 3:1;

4:5; 5:6.
I Samuel 11:2 “Y reposará sobre El Espíritu del
Señor, espíritu de sabiduría y de inteligencia,
espíritu de consejo y de poder, espíritu de
conocimiento y de temor del Señor”.

Algunos de estos espíritus fluyen en conjunto con el

Espíritu de Dios y con los dones del Espíritu,
dándoles a los creyentes la calidad de vida y
ministerio.

Espíritu de Vida – Génesis 7:22 “todo aquello

en cuya nariz había aliento de espíritu de vida”.
Este es el espíritu de Dios que produce vida en
nosotros, mantiene nuestra vida vibrante, para
que le podamos servir.

Espíritu de Sabiduría – Deuteronomio 34:9 “Y

Josué, hijo de Nun, estaba lleno del espíritu de
sabiduría, porque Moisés había puesto sus manos
sobre él; y los hijos de Israel le escucharon e
hicieron tal como el Señor había mandado a
Moisés”. - Éxodo 35:31; 28:3; 31:3.

Este espíritu viene departe de Dios para llenarnos

de sabiduría en el cumplimiento de nuestra
comisión, como en el caso de Salomón – II
Crónicas 1:7, 10,11.

Espíritu de Inteligencia – Éxodo 35:31 ” Y lo ha

llenado del Espíritu de Dios en sabiduría, en
inteligencia, en conocimiento y en toda clase de
arte”

Hay momentos cuando el ministro necesita ser

impulsado a un nuevo nivel de responsabilidad, y
Dios derrama sobre él una inteligencia para el
cumplimiento de esas responsabilidades.
Espíritu de Conocimiento – Éxodo 35:31.
Aquí vemos lo opuesto – Hechos 16:16 “ Y
sucedió que mientras íbamos al lugar de oración,
nos salió al encuentro una muchacha esclava que
tenía espíritu de adivinación, la cual daba
grandes ganancias a sus amos, adivinando”.

El espíritu de conocimiento, le da al ministro

entendimiento sobrenatural, para comprender y
ver lo que está dentro del corazón, y las
intenciones de la vida.

Espíritu de Poder – II Timoteo 1:7 “Porque no

nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de
poder, de amor y de dominio propio”.

El espíritu de poder es opuesto al espíritu de

temor.

Espíritu de Consejo - Isaías 11:2.

El consejo es una de las responsabilidades
ministeriales que debe de cumplir el profeta, para
poder alumbrar el camino del pueblo,
especialmente en momentos trascendentales en la
vida del individuo.

Espíritu de Temor del Señor - Isaías 11:2

El temor de Dios es el ingrediente que ayuda a
mantener al ministro limpio delante de Dios,
guiando y corrigiendo su vida, para que viva una
vida agradable al que lo llamó.

Espíritu de Justicia – I Samuel 28:6 “espíritu de

justicia para el que se sienta en juicio, y fuerza
para aquellos que rechazan el asalto en la
puerta”.
Espíritu de Gracia y Súplica – Zacarías 12:10
“Y derramaré sobre la casa de David y sobre los
habitantes de Jerusalén, el Espíritu de gracia y
de súplica, y me mirarán a mí, a quien han
traspasado, y se lamentarán por El, como quien
se lamenta por un hijo único, y llorarán por El,
como se llora por un primogénito”.

Hebreos 10:29 “¿Cuánto mayor castigo pensáis

que merecerá el que ha hollado bajo sus pies al
Hijo de Dios, y ha tenido por inmunda la sangre
del pacto por la cual fue santificado, y ha
ultrajado al Espíritu de gracia?”

Espíritu de Verdad (el nombre que también se

le da al Espíritu Santo).

El Espíritu de Dios – su característica es verdad

– I Juan 5:6 “Este es el que vino mediante agua
y sangre, Jesucristo; no sólo con agua, sino con
agua y con sangre. Y el Espíritu es el que da
testimonio, porque el Espíritu es la verdad”.

Nos guía a toda verdad

Opuesto al espíritu (Satánico) de Error – I Juan
4:6 “Nosotros somos de Dios; el que conoce a
Dios, nos oye; el que no es de Dios, no nos oye.
En esto conocemos el espíritu de la verdad y el
espíritu del error”.

Espíritu de Santidad
Declara a Jesucristo – Romanos 1:4 “y que fue
declarado Hijo de Dios con poder, conforme al
Espíritu de santidad, por la resurrección de
entre los muertos: nuestro Señor Jesucristo,”
Opuesto – I Corintios 2:12 Y nosotros hemos
recibido, no el espíritu del mundo, sino el
Espíritu que viene de Dios, para que conozcamos
lo que Dios nos ha dado gratuitamente,

Espíritu de Vida en Cristo Jesús: Es para la

vivificación del creyente en todas las etapas de
su proceso de relación con Dios, capacitándolo
para su servicio.

Romanos 8:2 Porque la ley del Espíritu de vida

en Cristo Jesús te ha libertado de la ley del
pecado y de la muerte.

Es opuesto a la obra Satánica del pecado y de la

muerte en nosotros.

Espíritu de Adopción - (Esto no tienen nada que

ver con la salvación, el ser introducido dentro de
la familia de Dios, sino que somos llevados a un
nuevo nivel de relación con Dios, donde somos
madurados y hechos herederos en Dios).

Romanos 8:15 “Pues no habéis recibido un

espíritu de esclavitud para volver otra vez al
temor, sino que habéis recibido un espíritu de
adopción como hijos, por el cual clamamos:
¡Abba, Padre!”

Espíritu de Fe: Hay momentos en la labor y la

obra que Dios tiene para nosotros, donde la
experiencia y la fe que tenemos dentro de
nosotros no es suficiente y necesitamos una
“dosis” más profunda de fe para el cumplimiento
de nuestro ministerio.

II Corintios 4:13 “Pero teniendo el mismo

espíritu de fe, según lo que está escrito: Creí,
por tanto hablé, nosotros también creemos, por
lo cual también hablamos;”

Espíritu de Revelación
Efesios 1:17 “pidiendo que el Dios de nuestro
Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé
espíritu de sabiduría y de revelación en un mejor
conocimiento de El”.

Espíritu de Su Boca: El término “espíritu” es

soplo, aliento, aire – este espíritu se manifiesta
en el soplo de Dios, cumpliendo los propósito de
Dios en la tierra.

II Tesalonicenses 2:8 “Y entonces será revelado

ese inicuo, a quien el Señor matará con el
espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor
de su venida;”

Espíritu de Gloria: Él es el que le da a Dios la

Gloria en todo, dirigiendo la Gloria
constantemente a Dios.

I Pedro 4:14 “Si sois vituperados por el nombre

de Cristo, dichosos sois, pues el Espíritu de
gloria y de Dios reposa sobre vosotros.
Ciertamente, por ellos Él es blasfemado, pero
por vosotros es glorificado”.

Espíritu de la Profecía
Propósito – Apocalipsis 19:10 “Entonces caí a
sus pies para adorarle. Y me dijo: No hagas eso;
yo soy consiervo tuyo y de tus hermanos que
poseen el testimonio de Jesús; adora a Dios.
Pues el testimonio de Jesús es el espíritu de la
profecía”.
 I Juan 4:3 “y todo espíritu que no confiesa a
Jesús, no es de Dios; y este es el espíritu del
anticristo, del cual habéis oído que viene, y que
ahora ya está en el mundo”.

Nota: En el caso de algunos de estos “espíritus”, debemos de comprender

que hay una íntima interacción entre dichos espíritus y el Espíritu Santo.
Ellos son agentes de Dios, preparados para cumplir el propósito de Dios en
la vida de los creyentes, la Iglesia y la humanidad.

2. Uno de los seres vivientes (Ezequiel 1:5), entró en

Ezequiel – Ezequiel 2:2; 3:24.

a. Es llevado a hacer cosas en su cuerpo - Ezequiel 3:24

(pararse).

b. Aunque no podemos aseverar hasta que punto un

espíritu forza al profeta a hacer cosas que no desea.
Lo que si podemos entender es que el mismo profeta
ha rendido su vida y cuerpo para ser utilizado por
Dios en el cumplimiento de su ministerio y llamado.

3. ¿Podría Dios poner a un espíritu de mentira en un

verdadero profeta? – I Reyes 22:23.

¿Para corrección del oyente?

¿Para cambiarle los planes al pueblo?
¿Para probar los corazones de la gente?

a. Hay que recordar que los demonios, y aún Satanás,

están al servicio y bajo el mandato de Dios.

Dios puede utilizarlos para cumplir su obra en el ser

humano, sea para corrección, disciplina, castigo, o
juicio – I Samuel 16:14 “un espíritu malo de parte
del SEÑOR le atormentaba”. (Proverbios 17:11 “un
 cruel mensajero se enviará contra él”).

4. El caso de Juan el Bautista y Elías – Mateo 11:14 “él es

aquel Elías que había de venir”.

El caso de Juan el Bautista y Elías fue un caso muy

singular y único, pero se puede entender y aceptar el
principio fundamental que el ministerio profético es un
vaso, usado por Dios, en cualquier manera.

a. II Reyes 2:15; Mateo 17:12; Lucas 1:17; Mateo

14:10; Juan 1:21.

b. Lucas 1:17 “con el espíritu y el poder de Elías”.

“para volver el corazón de los padres a los hijos, y
de los rebeldes a la prudencia”.
En los tiempos finales – Malaquías 4:6.

c. Juan el Bautista no sabía que él era el Elías que

había de venir Juan 1:21. Cuando el espíritu de Elías
se aparto de él, en el momento de cumplir su labor
de bautizar, presentar y apuntar a Jesucristo, Juan el
Bautista llegó al punto de dudar del ministerio y
realidad de Jesucristo. Se volvió en un contrapeso
para Jesucristo, confabulando y cuestionando con los
fariseos y escribas, en contra de Jesús y sus
discípulos.

VI. El Don de Revelación – Ezequiel 13:4; Daniel 2:30

El don de revelación se activa cuando Dios desea manifestarle al

profeta cosas que natural y normalmente no lo comprendería, por las
limitaciones personales, falta de conocimiento, aprendizaje o
experiencia. También fluye en áreas que le corresponden solamente a
Dios, como entendimiento de cosas ocultas dentro de las Escrituras,
conociendo las intensiones del corazón humano, etc.
 I. Por medio de Visión – (el sueño del rey) Daniel 2:19.

II. Revelación lleva al entendimiento de la Visión, Profecía o

Sueño – Daniel 10:1

III. Dios revela lo que Él hará a los profetas – Amos 3:7 “no hará
nada Jehová el Señor, sin que revele su secreto a sus siervos
los profetas”.

IV. Revela lo oculto en el corazón – I Corintios 14:24,25 “lo

oculto de su corazón se hace manifiesto”.

I Samuel 9:19 “te declararé todo lo que está en tu corazón”.

En este caso no es simplemente las intensiones del corazón,
sino lo que Dios ha puesto dentro de él, como dones,
habilidades y llamados.

V. La revelación podrá venir en forma de Sueño – Mateo 2:12.

Los magos, un símbolo y tipo de lo profético, fueron guiados

por Dios, para no regresar por el camino que habían venido.

VI. La revelación profética también incluye ser transportado en

espíritu a lugares y conversaciones que otras personas tienen –
II Reyes 5:26 “No estaba también allí mi corazón?” (cuando
Giezi tomó los regalos departe de Naaman, que Eliseo había
rehusado para sí mismo).

Saber los planes del enemigo – II Reyes 6:12 “declara al rey

de Israel las palabras que tú hablas en tu cámara más
secretas”.

VII. El Don de Entendimiento – (Conocimiento) Daniel 1:17.

En la vida, normalmente, el ser humano se desenvuelve en sus

quehaceres habituales, basado en el conocimiento y las experiencias
 adquiridas en el pasado. Probablemente, la mayor de las limitaciones
es la capacidad mental de retención. Este don lleva a la persona a
conocer y entender mucho más de lo que normalmente pudiera.

I. Por medio de visiones - Daniel 1:17

II. Por medio de sueños - Daniel 1:17

III. Ver el futuro de otras personas – II Reyes 8:11-13 “sé el mal

que harás a los hijos de Israel…tú serás rey de Siria”.

VIII. El Don de Interpretación de los sueños, visiones, profecías

No es simplemente dar el mensaje o compartir el sueño o visión, el

profeta es llamado a la instrucción e interpretación de dichos
mensajes. Por ser algunos mensajes alegóricos, tipológicos y en
forma de parábolas, es imperante que el profeta pueda explicar su
significado y darle claridad al oyente.

I. Antes de poder dársela a otro, hay que entenderla – Daniel

8:15.

1. Es indispensable que el profeta entienda la manifestación,

para poder transmitírsela al que la debe de recibir, porque
no solamente debe de transmitir la palabra, más debe de
explicar la interpretación de esa palabra.

a. El profeta debe de ponerse en el lugar del oyente,

para que cuando de la explicación, lo haga en una
forma entendida.

2. Para cuando es el tiempo de la visión – Daniel 8:17

“entiende…porque la visión es para el tiempo del fin”

II. Interpretación de la experiencia de otro – Daniel 2:36. Poder

aclarar que es lo que otros han visto o experimentado en sus
propias vidas.
 III. Interpretar sueños, descifrar enigmas y resolver dudas –
Daniel 5:11.

IX. El Don de Discernimiento de Espíritus

A nivel profético, es importantísimo que se puede aseverar el origen

de los mensajes, sean verbales o visuales. El enemigo se disfraza
como “ángel de luz” para querer engañar, distraer y desviar a los
creyentes. En algunos casos, sus palabras y obras se asemejan a la
verdad, más con un poco de engaño y mentira, haciéndolos
infructíferos.

I. Probar los espíritus, para ver si son de Dios – I Juan 4:1.

1. Todo espíritu que no confiesa que Jesucristo ha venido en

carne, no es de Dios – I Juan 4:2,3.

2. Todo espíritu o ángel que viene de Dios, no busca o recibe

adoración Apocalipsis 22:8; 19:10.

a. Siempre dirige toda adoración, con sus hechos y sus

palabras, a Dios.

II. Discernir entre ángeles y hombres – Daniel 8:15,16.

III. Discernir entre la Obra de Dios y los hombres – Génesis

18:2,3 “alzó los ojos y miró, he aquí, tres hombres estaban
parados frente a él... Y dijo: Señor mío”.

Abraham entendió que no estaba hablando simplemente con

humanos, sino que era la manifestación directa de Dios, una
teofanía.

IV. Discernir que algo está ocurriendo en la vida de otra persona:

1. Esto es muy difícil de analizar y comprender, porque

 muchas cosas del corazón, sólo pueden ser comprobadas
cuando salen a luz. Muchas de estas pueden ser actitudes,
debilidades, tendencias hacia el pecado o intenciones, cada
una difícil de corregir, enfrentar y cambiar. Sin el don
profético, sería tan fácil que el pueblo fuera engañado,
porque no habría el discernimiento para proteger al pueblo
del engaño.

2. El Profeta puede estar sintiendo:

a. Algo que ha ocurrido en el pasado (aunque ha

habido arrepentimiento y cambio) y todavía está
percibiendo la debilidad o tendencia que hay en la
vida del individuo.

b. Algo que está ocurriendo en el presente y necesita

ser tratado en la vida del individuo. El individuo
debe de ser confrontado y llevado al arrepentimiento
y la restauración.

c. Algo que ocurrirá en el futuro, de lo cual lo único

que se puede hacer, es ayudar al individuo a
fortalecer su propia vida, con las decisiones
adecuadas y la disciplina de la vida cristiana.

X. El Don de Milagros

Los milagros, son cualquier cosa sobrenatural, que va más allá de lo

que es normal o natural para el ser humano. Incluye sanidades, más
principalmente es una obra que requiere el respaldo y la ayuda de Dios
para alcanzarla. En la Biblia encontramos muchos casos de milagros:
Jesús y Pedro caminando sobre las aguas, Pablo resucitando al joven
que se cayó de la ventana, la multiplicación de los panes y peces, y
otros similares.

Hay milagros hechos por profetas que son significativos:

 I. Elías

1. Provisión para la viuda de Sarepta – I Reyes 17:8-15

2. La resurrección del hijo de la viuda de Sarepta – I Reyes

17:16-24

XI. Establecer la fundamentación doctrinal de la Iglesia, juntamente

con los Apóstoles – Efesios 2:20

I. No es simplemente revelación espiritual, sino un estudio y

entendimiento profundo de las Escrituras.

1. Comúnmente los ministerios proféticos quieren tener una

interpretación única de los eventos bíblicos, todo debe de
hacerse basado en las reglas de la Hermenéutica
(interpretación Bíblica) – II Pedro 1:20,21.

a. Lamentablemente, muchos ministerios proféticos

son atraídos por lo oculto y lo tipológico. Sin
despreciar dichas aplicaciones Bíblicas, es
importante fundamentar las doctrinas y creencias
sobre bases verídicas y comprobadas.

2. Debemos de estar alertas de aquellos que desean engañar y

manipular a la gente con doctrinas no fundamentadas en la
Palabra de Dios – II Pedro 2:1.

II. Teniendo Revelación en los misterios Bíblicos y de Cristo –

Efesios 3:5.

Hay cosas que Dios ha mantenido escondidas y ocultas,

esperando los últimos tiempos, para revelarlas en esos
momentos, porque serán cosas necesarias en el cumplimiento
de la magna obra que Dios tiene para su pueblo en esos
tiempos.
XII. Consultar al Profeta – Ezequiel 14:7; I Reyes 14:3 (Ahías)

Era la costumbre, dentro del pueblo de Dios, que cuando habían

cuestionamientos y preguntas que no se podían resolver, acudían al
profeta, para inquirir departe de Dios. Esto no solamente era para
asuntos profundos y difíciles, sino también para cosas cotidianas.

I. Samuel y Saúl – I Samuel 9:8 “para que nos declare nuestro

camino”.

II. Caso de Ahías y Jeroboam – I Reyes 14:3 “para que te

declare lo que ha de ser de este niño”.

El problema que enfrenta el profeta, es la presión de tener una

respuesta todo el tiempo y de dar alguna palabra profética,
cuando la gente busca algo de parte de Dios. Cada profeta,
debe de aprender a ser honesto consigo mismo y con los
demás, si no hay una respuesta o no ha recibido nada de parte
de Dios para la persona.

XIII. Ministerio Sobrenatural

Para el pueblo de Dios, no debería de ser extraño experimentar lo

sobrenatural en forma constante. Para el ministerio profético, no sólo
debe de ser normal, sino que debe de tener una expectativa de vivir en
lo sobrenatural.

I. Elías – Tenía la costumbre que el Espíritu de Dios se lo

llevaba y nadie lo sabía – I Reyes 18:12 “el Espíritu de
Jehová te llevará a donde yo no sepa”.

XIV. Tener un encuentro con Dios – encontrarse con Dios “cara a

cara”.

I. Abraham - Génesis 18 – Dios lo visitó y confió en él, en

 cuanto a Sodoma y Gomorra. Génesis 18:17 “¿Ocultaré a
Abraham lo que voy a hacer?”.

II. Jacob en la casa de Labán – Génesis 31:13 “yo soy el Dios de

Betel”.

III. Jacob en Peniel – Génesis 32:22-30.

1. Génesis 32:28 - luchado con Dios.

2. Génesis 32:30 – ”Vi a Dios cara a cara”.

3. Génesis 48:3 “El Dios Omnipotente me apareció en Luz en

la tierra de Canaán”.

IV. Moisés – Éxodo 33:11 “Y acostumbraba hablar el Señor con

Moisés cara a cara, como habla un hombre con su amigo”. –
Números 12:8 “Cara a cara hablo con él, abiertamente y no
en dichos oscuros, y él contempla la imagen del Señor”.

V. Samuel - I Samuel 3:10-14 – Su llamado y el castigo sobre la

casa de Elí.

VI. Salomón – Jehová se le apareció (por segunda vez) en la

culminación del proyecto de la construcción del Templo – I
Reyes 9:2.

XV. Juntamente con los demás ministerios es llamado a cumplir su

obra dentro de la Iglesia - Efesios 4:11-14

I. Perfeccionar a los santos para la obra del ministerio. Edificar

y desarrollar al creyente para que sea un ministro de Dios.

1. El ministerio profético debe de estar involucrado en el

desarrollo cotidiano de los cristianos, desarrollando la vida
de los creyentes en el ámbito profético.
 a. Debe de darle dirección a las personas,
especialmente en las áreas espirituales de sus vidas.

2. Tiene la capacidad de ver el llamado y los dones de Dios

en la vida de los individuos. Es el llamado a manifestar
dichos dones, ponerlos en acción y enseñarle a los
creyentes como usar dichos dones espirituales.

a. Es el ministerio profético, el que vuelve creyentes

dispuestos a servir en líderes capacitados para toda
buena obra.

3. Debe de trabajar constantemente con las áreas y las

personas con tendencias proféticas, desarrollando un
equipo de personas son dones y énfasis proféticos.

II. Edificar al Cuerpo de Cristo, por medio de la Unidad.

III. Encaminar a la Iglesia en la Unidad de la Fe y el conocimiento

del Hijo de Dios – Ezequiel 7:26.

1. Por medio de la fundamentación doctrinal – Efesios 2:20.

IV. Encaminar al pueblo en la dirección de la perfección y

madurez, por medio de la predicación, exhortación,
confrontación y disciplina.

V. Fundamentar a la iglesia en las doctrinas de la fe, para que el

pueblo no sea fluctuante y que puedan pararse
individualmente contra todos los ataques y acechanzas del
enemigo.

XVI. El Pecado personal puede limitar e interferir con la percepción

espiritual II Pedro 2:16 “la locura del profeta”.

I. El profeta debe de luchar por mantener su vida limpia delante

de Dios.
 1. Debe de vivir una vida disciplinada y transparente.

2. Debe de aprender a dar voluntariamente cuenta de su

propia vida, para que no tenga nada de qué avergonzarse.

II. El pecado no sólo cauteriza la conciencia, sino que endurece y

limita su sensibilidad espiritual, de tal forma que ya no puede
percibir y discernir la diferencia entre lo bueno y lo malo, de
que es o no es de Dios.

III. Temprano o tarde, el pecado va a destruir y cancelar el

ministerio que Dios le ha encomendado.
 CAPITULO #IV

IV. CARACTERISTICAS DEL MINISTERIO PROFÉTICO.

I. Es un varón de Espíritu – Oseas 9:7; Números 27:18 “varón en el

cual hay espíritu”.

El “espíritu” es representativo del ministerio: el espíritu de Moisés

transferido a los 70 ancianos (Números 11:17) y el espíritu de Elías
que cayó sobre Eliseo (II Reyes 2:9, 15).

El espíritu representa la unción y la habilidad sobrenatural que hay

sobre la vida del profeta.

II. Llamado a ser Atalaya, de proclamar, advertir e interceder por

la humanidad – Ezequiel 3:17.

Aunque la intercesión, como ministerio, no es para todos, todos son

llamados a proteger y levantar a otros.

I. Uno de los ministerios proféticos dentro de la iglesia local y la

vida cristiana es el de la oración e intercesión.

1. “Ruega por nosotros” – Jeremías 42:2

2. La intercesión profética puede cambiar el rumbo que está

tomando una vida, por causa del pecado o las malas
decisiones – Génesis 20:7 “orará por ti, y vivirás”.

II. Es un don que va con la revelación.

1. Es pedirle a Dios que revele lo oculto, las intenciones y

actitudes del corazón.

2. Dios revela lo que está ocurriendo en el mundo espiritual,

manifestando y aclarando el ataque del enemigo contra el
 pueblo de Dios. Discerniendo las obras del enemigo, para
poder luchar, a favor del pueblo, en contra las obras de
maldad.

III. Llamado a ser Testigo – Ezequiel 40:4, 48; 41:1; 42:1

El ministerio profético es testigo presencial de la obra que Dios ha

hecho, está haciendo y hará en la humanidad.

I. Juan 8:13 – Jesucristo da testimonio de sí mismo y de las

Obras de Dios.

II. El ministerio profético, a través de los siglos, ha sido llamado

a dar testimonio, declarar la voluntad de Dios y proclamar el
mensaje recibido, a pesar del riesgo que esto trae sobre su
vida. El dar testimonio, ser “mártir”, es declarar con nuestras
propias vidas lo que proclamamos.

IV. Llamado a la Corrección – Produce el “temor de Dios” en los

corazones de los oyentes – Hageo 1:12 “y temió el pueblo delante
de Jehová”.

I. Amonestar - Ezequiel 3:17 - advertir de algo que puede

ocurrir si no hay cambio.

II. Revelación y corrección – Ezequiel 14:12-23.

El propósito de la revelación, no es simplemente para tener
conocimiento, sino para hacer un llamado a la corrección.

III. Confrontación – Jeremías 1:18 “te he puesto…como columna

de hierro,…contra toda esta tierra, contra los reyes de Judá,
sus príncipes, sus sacerdotes, y el pueblo de la tierra”.

1. La confrontación es para llamar al arrepentimiento –

Jueces 6:8-10 “pero no habéis obedecido a mi voz” (de
Dios). El arrepentimiento es el objetivo final de la acción
profética confrontadora, sin este ingrediente, no hay una
 verdadera razón para la existencia del ministerio profético.

IV. Natán confronta a David - 2 Samuel 12:7 – el cual estaba

fundamentado sobre la revelación de Dios, de lo que David
había hecho en lo oculto, maquinando por encubrir su propio
pecado. Lucas 12:2 “Porque nada hay encubierto, que no
haya de ser descubierto; ni oculto, que no haya de ser
sabido”.

I Corintios 14:25 “Lo oculto de su corazón se hace

manifiesto: y así, postrándose sobre el rostro, adorará á Dios,
declarando que verdaderamente Dios está en vosotros”.

1. Declaración de Juicio sobre otros – Natán con David – II

Samuel 12:10-14.

El arrepentimiento muda el corazón de Dios, más no

cancela las consecuencias sobre la vida de las personas
involucradas.

a. II Samuel 12:10 “no se apartará jamás de tu casa la

espada”.

b. II Samuel 12:11 – División y deslealtad en su misma

casa (Absalón).

c. II Samuel 12:11 – La violación de sus mujeres – II

Samuel 16:22.

d. II Samuel 12:14 “el hijo que te ha nacido

ciertamente morirá”.

e. Dios declara juicio sobre Acab y toda su casa, en

boca de Su profeta – I Reyes 21:19.

Increíblemente, Acab se humilló y se arrepintió –

 I Reyes 21:27.

Dios cambio su juicio para la próxima

generación – El se arrepintió, cambio de parecer,
por el arrepentimiento en la vida de Acab – I
Reyes 21:29.

Dios cumplió el juicio por medio de Jehu – el

cual obedeció al mandato del profeta Eliseo. Al
leer la historia notamos que Dios es el que
cumplió sus propósitos, dirigiendo los resultados
de la obra de Jehú.

2. La palabra profética produce arrepentimiento y cambio –

Jonás 3:5,10 “creyeron…y proclamaron ayuno y se
vistieron de cilicio”.

3. La acción profética confronta al mismo profeta – Isaías

6:5 “¡Ay de mí! Porque perdido estoy, pues soy hombre de
labios inmundos”.

Podría llegar el momento que el mismo profeta ha

permitido que su corazón se endurezca, por esa razón es
importante guardar el corazón (Proverbios 4:23), no
permitiendo que las actitudes erróneas de otros lo
contaminen. También es importante que lo profético no se
vuelva rutinario.

V. Llamado a establecer las Leyes de Dios – Ezequiel 43:6.

En el Antiguo Testamento, el profeta era un sinónimo de la Ley (la

Ley y los profetas), porque Dios no solamente revelaba las Escrituras
por su medio, sino que el profeta era en ese momento de la historia el
líder espiritual del pueblo de Dios.

I. Moisés, como el escogido de Dios, fue llamado a declarar las

leyes que Dios le había impartido.
 II. En estos tiempos modernos, aunque el Logos ha sido cerrado,
todavía Dios habla y establece Su voluntad por medio de las
autoridades ministeriales que Él ha establecido dentro de la
Iglesia. El ministerio profético, conjuntamente con los demás
ministerios espirituales, está altamente calificado para recibir,
interpretar y declarar la voluntad de Dios a Su pueblo.

VI. Llamado a Identificar y levantar a ministros – una de las

aplicaciones prácticas del ministerio profético en la vida de la Iglesia
y de los mismos creyentes es el de ayudarlos a ellos a desarrollarse
en el llamado que Dios les ha dado.

Los profetas tienen las herramientas para discernir la obra de Dios en

la vida de los individuos y la capacidad de sacarlo a luz, para que sea
activada y cumplida en la vida de los oyentes.

I. Declarar el llamado y la obra que Dios quiere en la vida de

otros - I Samuel 9:19 “te declararé todo lo que está en tu
corazón”.

1. Dios se lo había revelado al oído – I Samuel 9:15 – porque

el ministerio profético se mueve en el ambiente donde
Dios puede escoger hablarles y revelarles lo que Él ha
puesto en la vida, el corazón y el futuro de las personas.

II. Activar los dones de Dios en la vida de la persona – I Timoteo

4:14 “no descuides el don que hay en ti, que te fue dado
mediante profecía”.

Los dones, puestos por Dios, en algunos casos desde el

momento de la concepción y otros por medio de la impartición
de los dones espirituales, no se activan automáticamente.
Estos deben de ser identificados y activados, para que sean de
beneficio para el Cuerpo de Cristo y la vida del individuo.

1. Enseñarle a no tener temor de los dones – II Timoteo 1:7

 “no nos ha dado Dios espíritu de cobardía”.

Muchas personas tienen un temor automático de lo

desconocido, especialmente si tiene que ver con dones que
tienen una manifestación pública.

Lo único que puede libertad a la persona de ese temor, es

el ser sumergido en la práctica y en el uso de ese don.

2. Enseñarle a utilizar y madurar los dones. El profeta es

responsable de caminar con las personas en el uso de sus
dones, enseñándoles a no abusar de estos preciosos regalos
de Dios.

La madurez de los dones, como de la vida del individuo,

viene por la experiencia y el uso constante de dichos
dones. Entre más lo usa, más cómodo se sentirá ejerciendo
ese don.

3. Encaminar a los nuevos hasta que lleguen a ser ministros

desarrollados y maduros.

La diferencia entre un siervo y un líder son los dones que

se han manifestado en la vida del individuo. La diferencia
entre el líder y el ministro es la madurez de dichos dones,
los cuales con el tiempo y la experiencia maduran al
mismo individuo.

III. Como mentor de otros ministerios – I Samuel 16:1 – Samuel,

Saúl y David

I Samuel 16:13 – Samuel fue el instrumento que Dios usó, no

solamente para identificar y ungir a dos reyes de Israel, sino
que camino con ellos a través de su reinado.

Eliseo, mentor del rey Joas – II Reyes 13:14.

1. Abre el camino para que un nuevo ministerio se levante –
Caso de Salomón – I Reyes 1:27.

Salomón, como muchos otros, era el designado por Dios

para el liderazgo, más el enemigo quiso robarle la
oportunidad. Es el ministerio profético el que debe de
velar para que la voluntad de Dios se haga en la
transferencia entre las generaciones.

2. Termina el proceso que comienza – II Reyes 2:9; 3:11.

El profeta debe de estar comprometido en caminar con el

nuevo ministro, especialmente en los momentos más
vulnerables en la vida del ministro, que es su inicio,
donde está más propenso a cometer errores.

a. Transferir de lo que uno tiene a la vida de otro –

Números 11:17.

Hay cosas que uno tiene, que otros necesitan. Los

dones pueden y deben de ser transferidos, para el
desarrollo y el cumplimiento de los propósitos de
Dios en la vida de los individuos.

Transferencia e impartición de los dones,

habilidades y llamados. – “espíritu de Elías
reposó sobre Eliseo” – II Reyes 2:15.

b. Pulir ciertas áreas del ministerio en preparación para

la labor futura.

Si fundamentamos el ministerio singularmente sobre

los dones, estaremos levantando ministerios que
están vulnerables en su vida personal y acortando la
efectividad del ministerio.
 El ministro es más que sus dones, es una persona
madura que sabe manejar su vida, de tal manera que
sabe usar diestramente los dones que Dios le ha
impartido.

3. Proteger a los ministerios – Natán protege a David de la

sublevación de Adonías – I Reyes 1:24

Como ministros, no nos podemos dar el lujo de pensar

que no es nuestra responsabilidad. Somos responsables de
levantar y cuidar a los demás ministerios, para que se
cumpla el propósito de Dios. El éxito o el fracaso de otros
es el nuestro.

4. Mentor de su propio reemplazo – I Reyes 19:16 “sea

profeta en tu lugar”.

Todo ministerio debe de preocuparse por crear una

transición correcta, tener una continuidad, alistar desde
mucho antes a la persona que lo reemplazará.

Como cualquier otro ministerio, el profeta, puede sentirse

tentado a resguardar su posición e influencia, por el deseo
de mantener su propio status y honor. La transferencia de
ministerio, entre las generaciones ministeriales, es la
única forma de crear un legado permanente, donde la vida
y ministerio valdrán algo.

El ministro no debe de esperar hasta el final de su

ministerio, para pensar en esa transición, sino desarrollar
a otros, con el propósito de continuar influyendo en su
desarrollo y madurez, aún después de la transición.

5. El liderazgo ministerial no es una coincidencia o un

resultado de los dones, sino que tiene que haber alguien
que los encamine – II Reyes 12:2.
 6. La razón del porqué muchos pastores no pueden
desarrollar a profetas, es porque ellos mismos no han
aprendido a oír y escuchar la voz de Dios.

a. Deben de aprender a discernir la voz de Dios y la voz

de engaño, mentira y adulación.

b. Samuel fue enseñado por Elí - I Samuel 3:8,9.

c. Gedeón debía comprender que no dependía de su

propio sentimiento, sino que Dios estaba viendo lo
que Él haría de Gedeón – Jueces 6:12 “esforzado y
valiente”.
d. Pablo, el enemigo utilizó a la pitonisa para decir la
verdad, pero con la intención de manipular y
desprestigiar a Pablo y Silas – Hechos 16:18
“desagradando a Pablo”.

e. El Rey Ezequías – Dios vio el corazón de rey y

cambio de parecer, dando una palabra contraría al
profeta Isaías – Reyes 20:5,6.

f. Jonás – Dios cambió su palabra profética – Su

misericordia lo llevo a perdonar al pueblo de Nínive.

VII. Activa eventos con la palabra Profética - Habacuc 2:2 “para que
corra el que leyere en ella”.

I. Activa y prepara a las personas para lo que Dios les está

llamando – Hageo 1:14 “Y despertó Jehová el espíritu de
Zorobabel… y el espíritu de Josué… y el espíritu de todo el
resto del pueblo; y vinieron y trabajaron…”

Muchos ministerios no tienen la idea de cómo comenzar en lo

que Dios ha deseado y puesto dentro de ellos. Necesitan que
alguien active ese llamado, por medio de la confirmación.
 II. Eliseo no puso la idea en el corazón de Hazael, él ya tenía el
deseo de ser Rey y, probablemente, había pensado en la idea
de matar al Rey y tomar su puesto – II Reyes 8:13. Lo que
hizo Eliseo, activó a Hazael, le dio la confianza de saber que
Dios ya lo había visto en él.

III. II Reyes 9:7,8 – la muerte de la casa de Acab, en toda la forma

que Dios lo había mandado, por mano de Jehú.

1. Muchas de las cosas, no sucedieron por mano de Jehú o

por coincidencia, sino porque Dios quiso cumplir con cada
una de las profecías hechas:

a. Muerte de Joram, rey de Israel – II Reyes 9:26.

Se encontraron con Jehú en la heredad de Nabot

– II Reyes 9:21.

El lanzó la flecha y mató a Joram entre la

espalda y le atravesó el corazón – II Reyes 9:24.

b. Muerte de Jezabel – II Reyes 9:30-37.

El ordenó su muerte, más no controló la forma

en que se cumpliría cada detalle de la profecía
dada por Elías – II Reyes 9:36-37.

c. Muerte de la Casa de Acab – II Reyes 10:1-11.

El había permitido que uno de los hijos de Joram
sobreviviera para sentarse en el trono de su
padre, más ninguno quiso levantarlo como rey.

II Reyes 10:10 “nada caerá a tierra y que

Jehová ha hecho lo que dijo” – II Reyes 10:17.

IV. No solamente activa, sino puede desviar el propósito de Dios,

 al hablar inoportunamente sobre el evento profético – Génesis
37:5-11 (caso de los sueños de José).

VIII. El llamado profético no es solamente para hombres, sino para

mujeres – II Reyes 22:14 – Vemos en las Escrituras el caso de la
profetisa Hulda, quien Dios levantó para un momento y una
función específica.

Dios no hace acepción de personas; Dios usa al que está dispuesto a

ser usado, no importando la edad, sexo, ni aún su pasado.

IX. Tiene una mayor responsabilidad que otros ministerios y

personas – Miqueas 3:5-7. “sobre los profetas se pondrá el sol, y el
día se entenebrecerá sobre ellos”.

La Palabra establece que al que más se le es dado, más se le es

requerido, porque con la iluminación viene la responsabilidad de
caminar conforme a la luz que se ha recibido.

El profeta tiene la responsabilidad de guardar permanentemente su

propio corazón, para no terminar mal. Al final no importa los
grandes éxitos que se han alcanzado, si el ministro termina sus días
mal.

X. Todo profeta debe de aprender a escribir las diferentes

manifestaciones y experiencias que vive – Habacuc 2:2 “escribe la
visión, y declárala en tablas, para que corra el que leyere en ella”.
(Apocalipsis 21:5)

Llevar un “diario” de los eventos y experiencia proféticas que ha

tenido. Será de gran aprendizaje para sí mismo y para otros.

Le ayuda a recordar y enfatizar en la vida de otros, las palabras que

ha recibido, tales como correcciones y advertencias.

Le da al oyente la fe para poder continuar, especialmente cuando hay

que recibir y vivir la palabra profética por fe, cuando las
 circunstancias de la vida se manifiestan en total contrariedad a la
acción profética.

XI. Toda acción y palabra del ministerio profético debe de ser

juzgada y comprobada de que es de Dios – I Corintios 14:29. No
importa que tan maduros o experimentados sean los ministerios
proféticos, debe de haber un proceso de corroboración de dichas
acciones proféticas.

I. Debe de ser, primariamente, juzgado por aquellos que tienen

sensibilidad y entendimiento espiritual.

1. Debe de ser juzgada a luz de la Palabra, porque ninguna

palabra o acción debe de contradecir o socavar los
principios y órdenes bíblicos.

2. Debe de ser sometida a la autoridad correspondiente al

caso.

a. Ninguna palabra debe de ser independiente, sino

debe de ser puesta a juicio a las autoridades
superiores, los cuales conocen las circunstancias y
los casos individuales.

II. El enemigo se viste de ángel de luz. El enemigo puede aún

transmitir principios Bíblicos, usados distorcionadamente o
fuera de contexto, con el propósito de engañar y desviar al
oyente. (ejemplo de la pitonisa – Hechos 16:17).

III. El enemigo desea engañar, matar, destruir, descarrilar y

deshonrar a los ministros, de tal manera usará de cualquier
forma para lograr sus objetivos. El profeta debe estar
constantemente vigilante, porque el adversario anda buscando
la manera de hacerlo caer.

XII. Toda acción y palabra del ministerio profético debe de ser hecha
con respeto y en orden.
 I. La nueva revelación toma precedencia (I Corintios 14:30
“Pero si a otro que está sentado le es revelado algo, el
primero calle”).

1. Debe de haber preferencia los unos por los otros, ninguno

debe de sobresalir, a cuestas de los demás.

2. El ministerio profético no es una competencia para brillar,

deseando que su don sea más reconocido que el de otros.

II. I Corintios 14:31 – Todo debe de hacerse en orden.

1. Las experiencias son una forma de aprendizaje para otros

profetas en desarrollo, los cuales aprenden por medio del
análisis y el juicio. Ese sometimiento, es la que prueba la
veracidad de la persona profética y la disposición de su
corazón.

2. De esta forma el mensaje llega a edificar al receptor. Al

comprobarse la veracidad del mensaje, es de total
edificación para el receptor.

3. Somos llamados al orden y no la confusión.

a. Cuando hay competencia, entonces se tendrán

mensajes contradictorios, que desvían y crean
independencia entre los oyentes.

b. La Palabra debe de ser explicada, no dejada a la

ventura.

III. El don y la acción profética esta bajo la dirección del mismo

profeta – I Corintios 14:32 (Oseas 9:7).

1. El profeta mismo es el que tiene la dirección,

determinando el tiempo y el lugar cuando debe de
impartirse el mensaje, discerniendo el momento propicio
para compartirlo.
 CAPITULO #V

V. FORMA EN QUE EL MINISTERIO PROFETICO SE

COMUNICA:

I. Parábolas – Mateo 13:34 “Todo esto habló Jesús en parábolas a

las multitudes, y nada les hablaba sin parábola” – Mateo 13:10,35.

I. Natán y David – Confrontación por el pecado – II Samuel 12:1-

4.

Hay momentos cuando el profeta usa de las parábolas para

llevar al oyente a comprender el punto de lo que está tratando
de transmitirle, sea para enseñar, confrontar o, simplemente
instruir.

II. Metáforas y Analogías – Apocalipsis 10:9,10

Una metáfora es la analogía entre dos objetos o ideas, presentado

por el uso de una palabra usada en vez de otra. Consiste en el uso de
una expresión con un significado distinto o en contexto diferente al
habitual. Establece una relación de identidad total entre dos seres,
reflexiones o conceptos, de tal forma que para referirse a uno de los
elementos de la metáfora se organiza el nombre de otro. Significa
comparar dos elementos sin ocupar nexos”.

Ejemplo: El cadáver de una persona comparado al Estiércol – II

Reyes 9:37 “y el cadáver de Jezabel será como estiércol sobre la
superficie del campo en la parcela de Jezreel, para que no puedan
decir: 'Esta es Jezabel”. (Jeremías 8:2).

Comparando la maldición al estiércol – Malaquías 2:3.

I. El cristiano es comparado con una oveja y la iglesia con un

rebaño.
 II. Jesucristo es comparado con un cordero llevado al matadero.

III. También se muestra el sufrimiento en la vida cristiana, por

medio de un vaso y el bautismo – Mateo 20:22.

IV. La enseñanza de la fe como un grano de mostaza – Mateo

17:20.

III. Tipos

I. Para enfatizar un punto, Jesucristo mostro que los

desobedientes y rebeldes deben de tenerse por “gentil y
publicano” – Mateo 18:17.

II. Israel, su historia y sus experiencias, son una sombra y un tipo

de todo el proceso de la vida cristiana.

1. Egipto siempre ha simbolizado el mundo de donde Dios ha

deseado sacarnos.

2. El faraón ha representado a Satanás, quien desea

mantenernos esclavizados, para que no podamos servir a
Dios con libertad.

3. La Tierra Prometida representa la vida cristiana, la cual

debe de ser conquistada, sacando a todos los enemigos que
la poseen.

IV. Comparaciones

I. La vida cristiana puede ser comparada con un tesoro escondido.

II. Para enfatizar el punto que se está enseñando, Jesucristo

comparó al rico con un camello – Mateo 19:24 “un camello por
el ojo de una aguja”.

III. El cristiano es comparado con un árbol – Mateo 21:43 y Salmo

 1:3.

IV. El juicio es comparado con un piedra – Mateo 21:44.

V. Dramas

I. Agabo, usa de un drama y del cinto de Pablo para darle una

advertencia visual de lo que le ocurrirá si continua en camino
hacia Jerusalén – Hechos 21:10.
 CAPITULO #VI

VI. CARACTERÍSTICAS QUE DEBE DE TENER UN PROFETA:

I. Trabajador – ocupado. En ningún caso en la Biblia, encontramos

que Dios haya llamado y usado a una persona ociosa que no estaba
ocupado haciendo algo productivo. Este siendo el fundamento para
el llamado de Dios, porque los que están ocupados están
demostrando indudablemente que son personas dispuestas a dar más
que lo básico, dispuestas al sacrificio y a “ir la segunda milla”.

La Biblia compara a una persona que hace lo mínimo con una

persona inútil (Lucas 17:10), porque simplemente ha hecho lo que
debía o tenía que hacer. Dios desea que sus ministros sean
emprendedores y dispuestos para “toda buena obra”.

I. Eliseo - “araba”. - I Reyes 19:19

II. David – pastoreaba.

III. Saúl – buscaba las asnas de su padre.

IV. Pedro, Juan y Jacobo – pescaba.

V. Mateo – cobraba impuestos.

VI. Nehemías – servía delante del rey.

VII. Daniel – servía delante de cuatro reyes.

II. Sujeto a la obra del Dios.

I. La labor profética es un acto voluntario – Isaías 6:8 “heme

aquí”; I Samuel 3:9 “habla, Jehová, porque tu siervo oye”.

1. Dios no usa a alguien que no está dispuesto a someter su

 voluntad a la Suya. La grandeza de la obra comienza con
el momento del sometimiento a la guianza y voluntad de
Dios. Especialmente en lo profético esto es determinante,
para el éxito ministerial.

2. La base de la total relación con Dios depende de que

deseemos someter nuestra voluntad, el libre albedrio a
Dios, como ofrenda de agradecimiento y permitirle a Él
tener dominio y control de nuestras vidas.

III. Tiene Sabiduría – Daniel 1:20; 5:14.

Probablemente uno de los ingredientes más importantes en la

vida del siervo profético, es que pueda caminar con una llenura
de Sabiduría dentro de su propia vida. La sabiduría, ya no
siendo simplemente un “don” o impartición de Dios, sino la
marca de una experiencia profunda con Dios, que ha impactado
cada aspecto de su vida: su pensamiento, emociones, acciones y
palabras.

Hay tres manifestaciones de Sabiduría en la vida del ministerio

profético:

1. Impartición de la Sabiduría departe de Dios – Santiago

1:5 “si alguno de Vosotros es falto de sabiduría, que la
pida a Dios, el cual da a todos abundantemente, y sin
reproche”.

2. Palabra de Sabiduría – Este don de Sabiduría se

manifiesta como uno de los dones que vienen por la
impartición de la llenura del Espíritu Santo en la vida de
todo creyente.

3. El Espíritu de Sabiduría – es un espíritu que viene de

parte de Dios, para llevar a sus siervos a un nivel más alto
y permitirles a ellos moverse sabiamente en los asuntos
del ministerio, sea consejo, predicación, exhortación, y
 mediación en conflictos.

La Sabiduría se plasma por medio de:

I. La prudencia, siendo la más importante manifestación de la

sabiduría, sabiendo discernir cuando es oportuno hacer o
decir las cosas.

Oseas 9:7 “necio el profeta. Insensato el varón de

espíritu, á causa de la multitud de tu maldad, y grande
odio. “

1. Prudencia es aprender a guardar ciertas cosas e

información que se ha recibido en el corazón. Saber
controlar la tendencia o el deseo de poder comunicarle las
cosas a otros y de usar la información adquirida
proféticamente para su propio beneficio.

2. Prudencia es saber que lo que se ha recibido no debe de

influir en la forma que tratamos a las personas, no creer
menos de las personas, simplemente porque percibimos
algo negativo de dichas personas.

II. Control y disciplina: Lamentablemente muchas de las

personas con dones proféticos, son personas con problemas
de control propio y disciplina. No es simplemente una falla
de su personalidad, sino una falta de deseo de orden interna
y externa.

En la misma forma, el profeta debe de aprender a controlar

sus emociones y reacciones, para no ser de ofensa para
otros. Ya podríamos decir que el mensaje es
suficientemente controversial, para que el mismo portador
añada con su propia vida más drama.

III. Siendo el ministerio profético fundamentalmente a base de

reconocimiento, son la sabiduría y la prudencia los
 ingredientes que levantan y establecen al profeta. La
percepción de otros crea la manera que ellos determinarán la
forma que se relacionarán con el profeta.

IV. Camina en el Temor de Dios, es la conducta, y la ética moral y

espiritual con que nos conduciremos delante de Dios y de los
hombres. Es la pasión por andar ordenadamente, con una
actitud, sentimientos y acciones sanas dentro de nosotros
mismos, para con Dios y los demás.

I. El temor de Dios no solamente es un deseo de vivir y actuar

justamente, porque amamos y deseamos agradar a Dios,
sino que ese amor lo empezamos a trasmitírselo al prójimo.

II. El temor de Dios es guardarse, no solamente de hacer el

mal, sino de la misma apariencia. El ministro debe de poner
límites y protecciones alrededor de su vida, para no darle
ocasión al enemigo para ponerle piedra de tropiezo en su
propia vida.

Los ministros, son personajes públicos, y su deseo debe de

ser no solamente de vivir una vida pública intachable, sino
que su comportamiento privado sea fundamentalmente
cambiado para que no haya oportunidad para el mal en
todos los pensamientos, caminos y acciones.

III. El temor de Dios, es desear vivir sin reproche, para que

nuestras vidas no sean de piedra de tropiezo para otros.
Habiendo sido de instrumentos para justicia, ahora llegamos
a ser de excusa para el pecado.

V. Debe de ser fiel en el mensaje – no añadir, ni quitar –

Jeremías 42:4 “todo lo que Jehová os respondiere, os
enseñaré, no os reservaré palabra”.

El ministerio profético no es un “interprete” del mensaje, sino

simplemente un portavoz, que transmite fehacientemente lo que
ha recibido departe de Dios, para el pueblo, singular o
colectivamente.

I. Su palabra no es usada para agradar al hombre – I Reyes

22:6-14. El profeta sabe a quién le debe lealtad y fidelidad,
no es el hombre, sino a Dios (Hechos 5:29 “es menester
obedecer á Dios antes que a los hombres”.)

1. Aunque nos crea una mala reputación – Micaías – I Reyes

22:8 “nunca me profetiza bien”.

2. Solamente profetizar a los líderes y grandes, a los que nos

pueden proveer de oportunidades, honores o recompensas.

3. Solamente profetizar el bien y nunca el mal (o vice-versa),

el profeta no escoge su mensaje, sino que es canal de parte
de Dios. Dentro del ministerio hay una variedad de cosas
que Dios envía a hacer, el profeta está dispuesto en todo
tiempo y es capaz de desempeñar las diferentes
responsabilidades ministeriales y proféticas.

4. Solamente profetizar en público para que la gente

reconozca al profeta, sino que debe de comprender que
hay momentos, especialmente cuando tiene que ver con
instrucción, dirección y corrección personal, que debe de
ser hecho en privado, para que pueda haber también la
explicación y la instrucción necesaria.

5. Fidelidad es ser simplemente el portavoz – I Reyes 22:14

a. El profeta es el que tiene la autoridad de determinar

el tiempo y el lugar donde se entregará dicho
mensaje.

6. Puede controlar la presión de cumplir con las expectativas

del pueblo Deuteronomio 18:22 “con presunción la ha
hablado el profeta; no tendrás temor de él”.
 El profeta sabio sabe cuándo es tiempo de parar y de
callarse, de poder reconocer que por el momento no ha
recibido un mensaje para el pueblo o para la persona que
está esperando oír de parte de Dios.

a. Proverbios 10:19 “En las muchas palabras no falta

pecado: más el que refrena sus labios es prudente”. -
Proverbios 17:28 “Aun el necio cuando calla, es
contado por sabio”.

El profeta debe de aprender a hablar lo menos

posible, incluyendo la tentación de dar su propia
opinión, porque le resta al honor y la autoridad que
el ministerio naturalmente conlleva.

Efesios 4:29 “No salga de vuestra boca ninguna

palabra mala”. – La maldad de la palabra, no tiene
que ver tanto con el contenido, sino con la intensión
del corazón. Si se ha utilizado de la influencia o el
don para manipular, coaccionar, o condenar al
oyente.

II. Dios puede usar profetas falsos y mentirosos, para probar el

corazón de su pueblo – I Reyes 22:21-23 “espíritu de
mentira”. No nos debería de extrañar que constantemente
nuestro corazón y nuestras intenciones son puestas a prueba
con los mensajes que recibimos.

Algunos están deseando y buscando palabras de elogio y

adulación y probablemente, Dios permitirá que lo reciban,
para probar su corazón.

1. ¿Podría Dios usar a un espíritu de mentira a través de un

verdadero profeta? – I Reyes 22:23 “ha puesto espíritu de
mentira en la boca de todos estos tus profetas, y Jehová
ha decretado el mal acerca de ti”.
 Aunque no sería común, creo que Dios sí podría
permitir que un espíritu de mentira use a algún
“profeta” (sea verdadero o falso), para probar las
intenciones de Su pueblo.

VI. Es Determinado – Daniel 1:8,9 “propuso en su corazón”. La

determinación es una cualidad en la vida del individuo que no se
rinde, ni permite el ser vencido, conquistado o comprado, hasta
lograr cumplir con los objetivos puestos delante de él.

I. Persistencia – Daniel 1:12 – El profeta sabe que encontrará

constantemente obstáculos en su camino que deberá de
conquistar, para lograr alcanzar el objetivo del
cumplimiento de su llamado y ministerio. Si el enemigo no
puede forzar al profeta a desistir de dar el mensaje, pondrá
muchos obstáculos en su camino, para tratar de desviarlo,
desanimarlo o interrumpirlo.

II. Hay una gran diferencia entre la determinación y la

testarudez, la determinación es una constancia y persistencia
en hacer lo que es correcto y lo que le agrada a Dios. La
otra está buscando insistentemente en hacer su propia
voluntad.

VII. Es Sumiso a las Autoridades Humanas – Daniel 1:13 “según

que vieres, harás con tus siervos”.

No debe haber un ministerio que no entienda o acepte el hecho

que Dios a todos nos ha puesto para estar bajo autoridad. No
está determinado por nuestra propia voluntad, placer o
experiencias pasadas, sino por la imperante soberanía de Dios,
quien desea que el ministerio profético pueda llegar a cumplir
todos Sus propósitos.

I. No podemos pensar en sujetarnos “sencillamente” a Dios,

sin pensar que Dios obra y se manifiesta a través de la vida
 de otras personas. El ministro debe de sujetarse a las
autoridades que Dios ha puesto sobre su vida, en la
sociedad (gobernantes, jefes, supervisores y maestros –
Romanos 13:1), en la familia (padres y esposos), en la
Iglesia (pastores y coberturas).

La sujeción tiene que ver con someter su voluntad a la

voluntad de otra persona, tomar la visión de otra persona
como la de uno y adherirse a otro (Rut – “tu pueblo será
mi pueblo y tu Dios el mío”).

II. La autoridad y sujeción es protección para el profeta,

porque hay alguien que está velando por su bienestar
personal y ministerial.

1. Guía, aconseja y corrige al profeta en cada aspecto de su

vida persona y ministerial.

Cada persona debe de dar cuenta de los aspectos

profundos de la vida, para no darle oportunidad al
enemigo a que tenga cabida en la vida y el ministerio.

2. Debe de someter las manifestaciones y obras proféticas a

que sean juzgadas por otros profetas, pero también por sus
propias autoridades.

Ayuda a mantener el orden y velar por la pureza de la

palabra.

a. Se evita el desorden – El profeta consulta y después

comunica lo que Dios le mostró – II Crónicas 20:1-
4, 14-17, 20, especialmente cuando tiene que ver con
cosas y palabras direccionales y de confrontación.

b. Lo lleva a aprender el proceso del desarrollo de su

propia vida y ministerio – Samuel ante Elí – I
Samuel 3:18. El profeta no puede marcar una
 diferencia entre dos personas, porque las dos se
edifican o se destruyen en el mismo proceso.

3. Es confirmado por sus autoridades – I Samuel 3:20 “Y

todo Israel…supo que Samuel había sido confirmado
como profeta del Señor”.

4. El ministro puede tener muchas influencias, personas que

han dejado marca en su vida y ministerio; sin embargo
“padres” ministeriales, solamente tenemos uno – I
Corintios 4:15 “Porque aunque tengáis diez mil ayos en
Cristo, no tendréis muchos padres; que en Cristo Jesús yo
os engendré por el evangelio”.

a. No importa hasta que nivel de éxito el profeta logre

alcanzar, debe de recordar que Dios utilizó a una
persona para llamarlo, formarlo, sanarlo y lanzarlo.

b. Aunque logre llegar más alto y tener más éxito,

nunca debe de dejar de honrar y respetar al
instrumento que Dios uso para levantarlo.

III. El profeta debe de estar apegado a una Iglesia local, la cual

le provee de comunión, cobertura y la oportunidad para
servir a los demás. Todo ministerio debe de tener un
fundamento local, en donde verdaderamente puede
desarrollar todos los aspectos de su ministerio, pero
también tiene la posibilidad de dar cuenta de su vida
personal y familiar.

Aunque el ministro salga y tenga influencia y oportunidad

de ministrar en otros lugares, debe de tener la costumbre
de retornar al lugar que lo preparo para el ministerio.

Pablo, el gran ministerio profético-apostólico, fue

levantado en la iglesia de Antioquía. Desde allí fue
lanzado hacia su ministerio apostólico y a la conclusión de
 cada viaje él volvió a reincorporarse en sus
responsabilidades locales, pasando un buen tiempo en la
iglesia local, antes de determinar salir para otro viaje
(Hechos 14:27-28; 18:22-23).

1. Algunos de los aspectos ministeriales, no pueden ser

logrados sin el apoyo logístico, financiero y espiritual
que la iglesia local aporta. Nosotros no solamente
somos llamados a ser de bendición para la Iglesia local,
sino que ella también es instituida a ser de bendición
para los ministerios.

2. En la iglesia local es donde el ministerio profético,

como los demás ministerios, pueden encontrar a los
futuros ministerios que deben de ser levantados,
capacitados, discipulados y formados.

La labor del profeta, no es únicamente la de proclamar

la palabra que Dios le ha dado, sino el de desarrollar la
vida de los futuros ministerios. Esta labor no puede ser
hecha, sin la influencia cotidiana de cada ministerio
específicamente, que aunque viaje, está ligado y
comprometido a la vida ministerial de la iglesia local.

El profeta, no sólo es llamado a discernir o declarar el

llamado en la vida de un individuo, sino a caminar con
dicha persona hasta el momento que está listo para ser
lanzado al ministerio.

IV. Debe de estar sujeto al ministerio local y a las autoridades

dentro de esa congregación.

1. No trabaja sólo, sino que comprende que el éxito

ministerial es la suma de diferentes dones y ministerios
que logran influir en la vida de los individuos y de las
congregaciones. Dios nunca hizo a una persona
suficientemente capaz en sí misma, todos nos
 necesitamos mutuamente.

2. No se considera superior a las demás personas, sino que

comprende que necesita de los demás para alcanzar su
potencial completamente.

VIII. Es agraciado con sus Palabras y Hechos – Daniel 1:9.

Solamente porque él sea el portavoz de Dios, no exime a la
persona de aprender a tener gracia en sus palabras, acciones y
gestos.

I. Vivir bajo la gracia y no bajo la ley. Es tan fácil caer ante

la tentación de crear una estructura, altamente legalista,
olvidando que el ministerio es para el servicio de otros y
no para el beneficio propio.

II. La Corrección es directa, pero eso no es el todo profético.

Aunque no se puede disfrazar la confrontación, si se puede
balancear las palabras, subyugando también la actitud
personal ante el problema que se está enfrentado. El
profeta no debe de involucrarse personalmente en el
conflicto, sino se estará descalificando a sí mismo.

IX. Está listo en el tiempo oportuno – Daniel 2:28. Las

oportunidades en la vida, no vienen cuando uno está preparado,
sino que se aparecen cuando hay la necesidad de que uno
responda ante un problema o situación adversa.

I. El profeta sabe responder, no se excusa por no estar

preparado.

1. Se mantiene constantemente en un proceso de

preparación, sea en la búsqueda de Dios o en el estudio
de la Palabra de Dios, para tener algo que dar, cuando
la oportunidad se presenta.
X. Tiene entendimiento de los tiempos – Daniel 5:14. El tener la
capacidad de predicar el conocimiento Bíblico o saber utilizar
los dones no es el total del ministerio profético. Es
indispensable que tenga la capacidad de entender y conocer los
tiempos que vive la humanidad. Saber discernir los tiempos en
el marco de los planes de Dios para la tierra y la humanidad.

Sería apropiado que el profeta este bien informado de los

acontecimientos locales, nacionales, como internacionales, para
poder así guiar y aconsejar al pueblo, que puede sentir ansiedad,
temor o frustración ante los cambios que está viviendo el
mundo.

I. Tiene un entendimiento del Reino de Dios y de los planes

que Dios tiene en la humanidad – Daniel 4:32; 7:18.

Mucho de la comprensión del Reino de Dios, depende de

la revelación de Dios mismo, de recibir el entendimiento
directo y de haber pasado mucho tiempo delante del Señor.

XI. Tiene una mejor actitud que los demás – Daniel 6:3. Dios ha
llamado al ministerio profético a tener influencia, no solamente
sobre el mundo espiritual, más sobre el mundo natural. La
actitud del ministro puede edificar o destruir su influencia.

I. No vive por sus emociones – no es emotivo en su

ministerio.

1. Las emociones, aunque son de Dios, pueden desviar y

controlar al profeta si se deja llevar por ellas.

Oseas 9:7 “un insensato es el profeta, un loco el

hombre inspirado, a causa de la magnitud de tu culpa,
y por tu mucha hostilidad”.

2. La emotividad interfiere con sus dones y sensibilidad

espiritual – I Samuel 16:7 – Samuel al ungir a David –
 “Jehová no mira lo que mira el hombre”.

El ministerio profético no puede darse el lujo de dejarse

llevar por los sentimientos porque interfiere con los
dones y la obra de Dios en su vida.

Las emociones deben de ser sanadas por Dios, para que

las heridas, los rechazos, las inseguridades, y los
déficits emocionales no controlen las decisiones y
acciones del profeta.

3. Puede volver al Profeta negativo y ciego – I Reyes

18:22 “Sólo yo he quedado”

La sobre-emotividad hace que el profeta vea las cosas

“unidireccionalmente”, y pierda la perspectiva general
en el ministerio y en su propia vida.

4. En los libros de los temperamentos, se declara que la

mayoría de los profetas son personas “melancólicas”,
que aunque tienen increíbles cualidades, tienen la
tendencia negativa de:

a. Ser detallistas, críticos, emocionalistas y

negativos.

b. Ser melodramáticos – I Reyes 20:38

“disfrazado”.

Agabo – su mensaje es un drama.

Anda con las partes posteriores descubiertas.

c. Caminar en auto-compasión – Elías – I Reyes

19:10,14 - soy el único y a mí me quieren matar,
¡pobre yo!

d. Pierde la esperanza fácilmente – I Reyes 18:22.

 El profeta, por tener los ojos abiertos al mundo
espiritual, tiende a ver también el reino de las
tinieblas, y al percibir la desesperación en la vida
de otros, lo puede llevar a él a contaminarse de
esa manera.

e. Sufre de depresión – I Reyes 19:4 “pidió

morirse”, tiene ganas de abandonar todo y dejar
todo atrás.

Lleva a la desesperación, deseo de la auto-

destrucción (suicidio), aislamiento.

El cuerpo del profeta sufre una tremenda

crisis, en cada uno de los encuentros
proféticos que tiene. No solamente por el
contra ataque del enemigo, sino porque es
común que cuando alguien ha tenido un
tiempo de “gloria”, después le cueste caminar
entre los hombres. El profeta, debe de luchar
por mantenerse cerca de Dios en oración y
búsqueda del Señor. También los que están
cerca del profeta deben de mantenerlo delante
de Dios en oración, para que no sea tentado
en esta manera.

f. Negatividad – I Reyes 19 – Llevó al profeta en

pensar que esto se está acabando y Dios sólo me
dejo a mí, para que apagara las luces, cuando yo
salga.

Hay una tendencia a ver las cosas desde un

ángulo negativo.

g. Sentido de superioridad espiritual – I Reyes

19:10,14 “…he tenido mucho celo por el Señor,
 …. Porque los hijos de Israel han abandonado tu
pacto…”

h. Temor – I Reyes 19:3 “tuvo miedo” de la

maldición de Jezabel, v:13 “se cubrió la cabeza
con un manto”.

El ministerio profético puede sufrir

profundamente del temor, por ser uno de los
ministerios que es atacado y sufre constantemente
en la lucha ministerial.

Temor al rechazo: Por su sensibilidad personal,

a menudo tienen que luchar contra sentirse
rechazado.

Temor al abuso: Muchos de la gente profética

ha enfrentado grandes dificultades en su vida y
una de ellas es el abuso, sea físico, verbal o
espiritual.

Temor al enemigo: Cuando la lucha en el

pasado ha sido intensa, es tan fácil el desear y
añorar que no haya más lucha; esto produce un
temor del mismo enemigo.

i. Sobre-reacción – I Reyes 19:18 “ya no vale la

pena luchar por cumplir con lo que tenemos que
hacer” (paráfrasis).

Nosotros mismos nos volvemos el problema y la

causa de la derrota, porque sobre reaccionamos
ante los pequeños problemas de la vida.

j. Indecisión – I Reyes 19:21 “dejando de seguirle,

tomó los bueyes…”
 El ministro debe de ser una persona de palabra
caminando estable, en medio de un pueblo
inconstante y desbalanceado. ¿Cómo se puede
influenciar positivamente al pueblo, cuando el
ministro camina con las mismas debilidades y
tendencias?

k. Esto interfiere y obstaculiza con la sensibilidad

espiritual – I Reyes 19:11-13.

Parecería contradictorio que el ser emotivo

cortaría la sensibilidad, pero cuando las
emociones están fuera de control, debilita la
capacidad de sentir lo que Dios está queriendo
hacer a través del ministro.

Manejar mucho lo falso, limita la habilidad de

discernir lo real.

II. El ministro no se deja gobernar por la amargura,

resentimiento, odio, ira o alegría, aunque ha sufrido en
varias formas de rechazo y maltrato.

No deja que las heridas y los problemas del pasado lo

gobiernen.

XII. Es justo en todos sus caminos – Daniel 6:22 “porque fui

hallado inocente ante El; y tampoco ante ti, oh rey, he cometido
crimen alguno”.

La justicia en la vida de un ministro, es la que sustenta y

establece su ministerio, es la que le da credibilidad ante Dios y
los hombres.

XIII. Es Adaptable – Daniel 6:28 (Daniel tuvo la capacidad de

prosperar ministerialmente en el gobierno de cuatro reyes –
Nabucodonosor, Belsasar, Darío y Ciro).
 El ministro profético debe de comprender que en los constantes
cambios de la vida, debe de estar dispuesto a adaptarse a dichas
transiciones. Sería falso en esperar que por la grandeza del
ministerio, otros tengan que acoplarse al ministro.

XIV. No toma lados – Daniel 6:28 - Daniel tuvo la capacidad de

separar cada área y responsabilidad en su vida, sirviendo
sencilla e individualmente a cada uno de los reyes.

I. Como ministros, nosotros estamos singularmente del lado

de Dios, sirviendo a Dios a través de los hombres.

XV. Tiene una gran Convicción – Desea servir a Dios más que a
los hombres, aunque eso cause a que los hombres se pongan en
contra el ministro.

I. Caso de Elías – II Reyes 1:10-15 – no se dejó intimidar o

influenciar por la posición, gloria o fortaleza de otros.

XVI. Es una persona de Fe – Eliseo no se conmovió por el problema

– II Reyes 4:2 “declárame, que tienes en casa”.

I. No es movido por la lástima, sino por el llamado.

II. La fe no depende de nuestras debilidades – Santiago 5:17

“oró fervientemente”.

No hay que dejar que las debilidades intimiden o

interfieran con las responsabilidades y el cumplimiento de
un llamado. Es esta única manera que las debilidades,
limitaciones y los errores del pasado pueden ser
conquistados y vencidos.

III. Fe es la motivación detrás de la acción profética –

Romanos 12:6 “conforme a la medida de la fe”.
XVII. Es Humilde – Números 12:13 - Moisés “era un hombre muy
humilde, más que cualquier otro hombre sobre la faz de la
tierra”.

La falta de humildad es pensar que somos más de lo que

realmente somos.

I. Caso de Abraham – Génesis 20:7 – La autoridad para

cambiar el rumbo de las vidas.

Con humildad hay que enfrentar los problemas de la vida,

porque cada una de ellas, es una maestra que nos está
formando. Algunos están sacando a luz las debilidades
que hay en nosotros, para poder vencerlas.

II. Caso de Moisés – Deuteronomio 34:10 – Ver a Dios cara a

cara.

Hay veces que pudiéramos sentirnos orgullosos o

especiales por las magnas experiencias proféticas que se
han vivido. Hay que recordar que no hay nada en esas
experiencias que tenga que ver con quien nosotros
realmente somos, sino en que Dios se ha placido dárnoslas.

III. La tentación de querer tomar más autoridad de la que

realmente es nuestra

1. Sentido de superioridad espiritual – esperar y demandar

que la gente nos escuche. Ese derecho no es demandado
sino ganado.

2. Querer pretender ser muy “espiritual”. Ceder ante la

tentación de la gloria que hombre desea imponer.

3. Tomarse demasiado en serio. El ministerio profético es

serio, porque está tratando con vidas, más el considerarse
algo que no es, se vuelve el mayor de los problemas.
XVIII. Es Modesto – Caso de Elías – II Reyes 1:8

El ministerio es sustentado y edificado sobre la modestia. Es la

capacidad de hacer todo en medida y no ser exagerado en nada.
La modestia determina la forma que el ministro se viste, gasta
dinero, habla, se comporta con otros y desarrolla su ministerio.
En todo no quiere atraer atención de sí mismo, sino para que la
gente ponga su mirada en Dios.

XIX. Sabe manejar la gloria – Samuel – I Samuel 9:6 “insigne”

(Ilustre, famoso, popular).

El cuerpo del ser humano fue creado por Dios para ser morada
del Altísimo, para aguantar Su presencia. El creyente debe de
aprender a manejar la presencia de Dios, más hay una gran
diferencia entre manejar la presencia de Dios y manejar la gloria
del ministerio.

El ministro debe de ser agraciado cuando es reconocido por la

labor ministerial que desempeña, más nunca debe de llegar a
creer que esa “gloria” es por él mismo.

XX. Tiene Paciencia – Dadas las dificultades, persecuciones y

aflicciones que enfrentará – Santiago 5:10

I. La paciencia es el resultado directo de los problemas y las

tribulaciones – Romanos 5:3,4.

II. Las cosas espirituales no están fundamentadas en lo

temporal o terrenal, sino lo eternal, la paciencia siendo una
de ellas.

III. La paciencia es aprender a aguantar a que las cosas

cambien y esperar en Dios a través de ellas.
 IV. El problema fundamental con muchos ministerios
proféticos es que se vuelven impacientes con otras
personas, esperando que el cambio y la transformación de
sus vidas se manifieste inmediatamente. Es difícil
entender que los cambios ocurren cuando la persona está
convencida de la necesidad y determinada a hacer lo que
tenga que hacer para cambiar.

XXI. No está en competencia con otros ministerios – I Reyes 13:18

- quieren destruir o minimizar su influencia.

I. El ministerio profético se sostiene y edifica mutuamente

con los demás ministerios.

1. Cuando alguien el ministerio fracasa, el problema lo

sufren todos los ministros, la credibilidad y el honor del
ministerio es puesto a prueba.

2. Cuando alguno tiene éxito, todos los ministerios se

benefician corporalmente.

XXII. Se da a respetar – II Reyes 9

Debe de existir un balance entre creerse mucho y el darse a

respetar. El ministerio profético debe de entender que la iglesia y
las personas pueden sufrir las consecuencias de sus malas
acciones y decisiones. Hay que recordar que el profeta es el
portavoz de Dios y sus actitudes pueden trastornar la veracidad
del mensaje.

I. Si uno no valora su ministerio, no se puede dar a respetar.

II. Si uno no se da a respetar nunca lo respetarán.

XXIII. Sabe vencer sobre sus debilidades:

Dios usa las circunstancias y sus mandatos para manifestar las

insuficiencias de cada persona. La debilidad nunca es
sencillamente el problema, sino el no buscar vencer esas
debilidades.

El ministro ha aprendido a controlar su temperamento y los

altibajos de su personalidad, para que no se vuelvan la causa de
los problemas.

I. El racismo, la superioridad, la amargura y el rechazo

de otros personas – Jonás 1:3 “lejos de la presencia de
Dios”. El ministro debe de no hacer acepción de personas,
sino debe de aceptar a los demás como Dios lo ha aceptado
a él.

Hay veces que Dios llama a servir al que nos ha hecho

daño o con el cual hemos tenido problemas en el pasado.

II. El deseo de huir de los problemas y las confrontaciones

– Jonás 1:3 “huir a Tarsis”.

En el ministerio, especialmente en lo profético, la

confrontación es común. Se debe aprender a manejar estos
dilemas y demandas del ministerio.

III. La depresión – las ganas de morir – Jonás 4:3 “mejor me

es la muerte que la vida”.

En muchas oportunidades, las cosas no salen como uno

quería, y el profeta no debe de tomar las cosas a pecho, no
debe de dejarse influenciar por el resultado o la falta de
resultado.

Comúnmente después de una gran victoria, también hay

que enfrentar la soledad y la depresión.

IV. El enojo y la ira – Jonás 4:4 “¿Tienes acaso razón para

 enojarte?”

Si el ministro no puede dominar esta forma de reacción,

entonces destruirá lo que está luchando por edificar. Puede
herir contantemente al pueblo que fue llamado a servir.

V. La desobediencia y la independencia – Jonás 4:5 “salió

Jonás de la ciudad”.

La desobediencia no es solamente el no hacer lo que se nos

ha ordenado, sino el abandonar o dejar sin terminar lo que
se ha comenzado. El ministro espiritual, es el que ha
llegado a comprender que no puede hacer las cosas
independientemente, sino debe de depender
constantemente en Dios, aún en las cosas pequeñas.

Josué 9 – Josué debió de haber dependido de Dios, más se

confió de su habilidad de leer a las personas, la cual llevó
al pueblo a no poder erradicar de la tierra a sus enemigos y
tener que luchar permanentemente con el mismo enemigo.

VI. La venganza – Jonás 4:5 “hasta ver qué sucedería de la

ciudad”.

El juicio que hace un profeta no debe de salir del deseo de

venganza o de la herida recibida en el pasado. Esto haría
más daño, que corregiría el problema.

VII. El egoísmo – Jonás 4:6 “se alegró grandemente”.

Es buscar su propio beneficio o comodidad, sin tener en

consideración el dilema o la necesidad de los demás.

VIII. Sin piedad – Jonás 4:10,11 “te apiadaste de la planta…

¿no he de apiadarme yo de Nínive?”
 La motivación del ministerio profético debe de ser la
misericordia, habiendo conocido a Dios y quien Él es con
los malos.

Moisés defiende al pueblo de la ira de Dios – Números

14:11-14

El profeta, que conoce a Dios, sabe que Dios es un Dios

misericordioso y se mueve dentro de esa misericordia.

IX. Sin arrepentimiento - aún después de haber predicado –

se finaliza el libro de Jonás, con un enigma, sin declarar lo
que sucedió con Jonás.

Es contradictorio que el profeta llame al arrepentimiento y

no tenga él mismo la sensibilidad de poder arrepentirse.
 CAPITULO #VII

VII. DIVERSAS COSAS SOBRE EL PROFETA:

I. PROCESO DEL MINISTERIO PROFETICO: I Reyes 19:19-

21.

I. Como ya hemos mencionado, el profeta debe de ser trabajador

y estar ocupado. El ministerio no cae sobre una persona que
tiene grandes problemas con la haraganería.

II. Dispuesto a dejar atrás cosas que interfieren con su llamado.

Hay que “quemar los puentes” y “quemar los barcos” – Dejar
la carrera anterior, como cosa que ha pasado.

Lucas 9:62 “Pero Jesús le dijo: Nadie, que después de poner

la mano en el arado mira atrás, es apto para el reino de
Dios”.

Dios siempre utilizará todo lo que se ha aprendido, sea por

profesión o experiencia, para el cumplimiento de cada faceta
del ministerio.

III. Debe de cerrar puertas – “Besar a los padres”. Cuando hay

cosas pendientes en la vida, tarde o temprano, en los altibajos
y los problemas del ministerio, el ministro se sentirá tentado a
volver, porque hay un sentido interior de pérdida o de
frustración.

IV. Debe de estar dispuesto a sacrificar – anhelos, carrera,

profesión, negocio, aún familia. El ministerio siempre
requerirá algún nivel de sacrificio. No se puede lograr alcanzar
las cosas que Dios nos da, sin un nivel alto de sacrificio
personal, familiar, empresarial o relacional.

V. Dispuesto a servir por mucho tiempo al que lo aconseja – el

 ministerio se desarrolla, no solamente públicamente en el
púlpito, sino por medio de la experiencia. (Eliseo – II Reyes
3:11 “Eliseo, hijo de Safat, que servía a Elías”).

Los grandes líderes Bíblicos comenzaron sirviendo a los pies

de su “maestro”, haciendo cualquier cosa que fuera necesaria,
aún formando su carácter.

II. Las Señales de un Profeta:

Hay cosas en la vida de un ministro que manifiestan su llamado.

Cuando Dios llama, Él capacita, derramando en la vida de la
persona, no solamente dones naturales (habilidades, talentos y
experiencias), sino de dones espirituales, los cuales denotan el
llamado de Dios.

I. Tiene es su vida los dones “proféticos” necesarios para

el cumplimiento del llamado ministerial e individual
sobre su vida. (Dados en orden de importancia profética)

1. Primordialmente Profecía – Siendo el don que define

generalmente al profeta. Aunque se ha visto a profetas que
no necesariamente fluyen fundamentalmente en la
profecía.

2. Discernimiento de espíritus – Por moverse en lo espiritual

y por ser susceptible al mundo espiritual, el profeta debe
de moverse en el discernimiento espiritual.

3. Don de Revelación – Por ser un llamado de

fundamentación doctrinal (Efesios 2:20), es de gran
beneficio moverse en este don.

4. Don de Conocimiento (Ciencia) – Hay cosas en la vida

que no entendemos o conocemos, es de gran utilidad para
el ministro tener este nivel de conocimiento.
5. Don de Sanidades – Este don es indispensable que se
manifieste en la vida cotidiana de la Iglesia, para ver la
mano sanadora de Dios.

6. Don de Milagros – Así como el de sanidades, el don de

milagros es importante para el desarrollo de la iglesia
local.

7. Don de Interpretación – Se ha tomado el don de

interpretación como singularmente el de interpretar
lenguas, pero en la Biblia encontramos que los profetas
interpretaron sueños, enigmas y visiones también.

8. Don de Sabiduría – Un don que lleva a la persona a un

entendimiento sobrenatural, no necesariamente basado en
sus conocimientos naturales o experimentales.

9. Don de Fe – Fe es la que lleva al individuo a caminar y

hacer cosas que normalmente no haría, porque no está
basado en la lógica o lo que se ve naturalmente.

10. Don de Lenguas – La Biblia menciona que es un

lenguaje humano y angelical desconocido a la persona que
tiene este don.

Estos nueve dones no son exclusivamente proféticos, sino

que cualquier otra persona puede tener dentro de su vida,
liderazgo y ministerio, la manifestación de algunos de
estos dones. Algunos otros ministerios no necesitan
definitivamente estos dones, puede funcionar
eficientemente sobre sus dones naturales y experiencias
adquiridas, más para el ministerio profético es
indispensable la manifestación de varios de estos
ministerios para que definan su llamado y su
individualidad como ministro.

Los dones no necesariamente definen quienes nosotros

 somos, sino quien es Dios en nosotros – estos dones son
sin “arrepentimiento” Romanos 11:29 - Funcionan a
pesar de nosotros. Aún cuando la persona no está bien
espiritualmente, pueden funcionar.

Aún en medio de la debilidad, Dios usa a las personas

grandemente Santiago 5:17; I Corintios 1:26-29.

II. Madurez espiritual – La manifestación de los Frutos del

Espíritu.

La falta significativamente de los frutos pueden producir

un desastre en la vida y ministerio del Profeta. El profeta
debe de estar continuamente confrontando su propia vida y
permitiéndole al Espíritu de Dios limpiar y ordenar su
mundo interior.

Fundamentar el ministerio sobre el don es catastrófico,

porque no hay nada que le balance al don – la Biblia
establece que el fruto es el que balacea y edifica el don
(Éxodo 28:34,35; I Corintios 13:1,2 “metal que resuena, ó
címbalo que retiñe”)

Aunque tuviéramos profecía, entendimiento, ciencia, fe y

poder, y no tenemos el fruto, nada somos.

III. Dios respalda lo que dice

No todas las veces que el profeta habla o pronuncia un

juicio sobre alguna situación o hace una declaración, ha
pasado tiempo con Dios inquiriendo la voluntad de Dios,
sino que ha hablado instintivamente y Dios lo ha
respaldado.

1. Se cumple – I Reyes 20:13 – Dios cumple con lo que el

profeta ha hablado, porque cree en el ministro.
 IV. Hay Milagros y prodigios – El ministerio profético es
sobrenatural, no solamente en las experiencias que ha visto
o escuchado, sino que dentro de su vida se manifiestan
dones sobrenaturales como el de sanidades, milagros y
prodigios. A través de toda la Biblia encontramos que esa
es una de las características más importantes del ministerio
profético.

V. Conoce profundamente la Palabra de Dios. El profeta es

un gran estudiador de la Palabra de Dios. Ama y busca
constantemente ajustarse a lo que Dios ha prescrito dentro
de la Biblia.

La debilidad del ministerio profético es el misticismo,

donde todo tiene algún significado escondido y trata de
buscar en la Palabra todos los tipos y aplicaciones
escondidas.

Si el ministerio profético es fundamentado, debe de estar

firmemente establecido en la simplicidad y en la
profundidad de la Palabra. Debe de creer lo que la Palabra
dice, sabiendo que Dios ha puesto en la Palabra todo lo
que nosotros necesitamos para entender lo que está en el
mundo alrededor nuestro.

III. Es Llamado Hijo de Hombre – Ezequiel 39:1; Jeremías

49:18,33; Ezequiel 2:1,3,6,8; 4:1; 5:1; 6:2; 7:2; 8:5.

A muchos de los profetas del Antiguo Testamento, se les declaro

proféticamente por medio de este título “hijo de hombre”. Su
significado básico es la identificación que el profeta debe de tener
con la humanidad, aunque representa a Dios no puede aislarse de
entender que es humano y debe de buscar identificarse con la
humanidad.

I. Es el nombre que Jesucristo se dio asimismo – Mateo

 8:20; 9:6; 10:23; 11:19; 12:8,32.

1. Hijo de Hombre es el término que Jesucristo uso para

identificar su obra como hombre, su naturaleza
humana. Si notamos, Jesucristo durante su ministerio
no se identifico plenamente como Hijo de Dios
(termino de Su Divinidad), sino que todo lo que hizo
fue como “hombre”. Esto es para mostrarnos que
nosotros podemos caminar en Sus pasos, y que con el
poder de Espíritu de Dios, podemos hacer no solamente
lo que Él hizo, sino que mayores cosas (Juan 14:12).

Podrá ser que Jesucristo estaba actuando proféticamente

en este momento? Cada una de las palabras, acciones y
eventos en la vida de Jesucristo podrían ser
relacionados con alguno de los ministerios, porque
Jesucristo tenía dentro de sí mismo la manifestación de
los cinco ministerios activados plenamente.

En Daniel 7:13, Jesucristo es presentado delante de

Dios, para tomar su posición en el Trono, pero está allí
identificándose con la humanidad, como “Hijo de
Hombre”. Esto demuestra que Jesucristo
permanentemente está uniendo a Dios con los hombres,
siendo Él el puente que trae comunión y relación entre
los dos.

IV. Hay un costo en lo profético – En cada ministerio hay un costo

que hay que pagar para activar y cumplir el ministerio que Dios
ha dado. Mucho más con lo profético que tiene un contacto
profundo con el mundo espiritual.

I. Su cuerpo es afectado.

1. Las experiencias de Dios son duras y profundas, y

pueden producir debilidad al cuerpo, especialmente
cuando son de carácter profundo.
 a. Debilita a la persona – Lo hacen caer en debilidad
corporal

Ezequiel 2:1 “ponte sobre tus pies”.

Necesitaba la ministración de Dios para

continuar su labor profética – 2:2 “me afirmó
sobre mis pies”.
Normalmente, en estos tiempos modernos se le
ha llamado a esta experiencia “Caída”. En el
caso del ministerio profético, la persona debe de
aprender a acostumbrarse a sentir y vivir la
presencia de Dios, de tal forma que en su
experiencia cotidiana, el cuerpo no debe de tener
este tipo de reacción.

b. El transporte profético produce dolor e incomodidad

– Ezequiel 3:14 “fui en la amargura, en la
indignación de mi espíritu”.

Este evento crea este tipo de reacción, porque no es

algo que el profeta debe de hacer por sí mismo, sino
que Dios es el que determina esta experiencia.

2. Enfermedad – Daniel 8:27 “quede quebrantado y estuve

enfermo algunos días”.

La debilidad que el cuerpo siente, puede afectar aún la

propia salud del ministro.

También debemos de considerar que hay un contra ataque

del enemigo, para el vaso que se mueve en el mundo
espiritual.

3. Fatiga – Daniel 10:8 “sin retener yo fuerza alguna”.

 a. Desfallecimiento –“no tuve vigor alguno”.

b. Mucho cansancio – sueño – Daniel 10:9.

c. Es recomendable que después de cualquier

experiencia profunda en el ministerio,
independientemente al tipo de ministerio, debe de
permitirse un tiempo para recuperar las fuerzas,
antes de regresar a la “batalla”.

4. Perdida de aliento – Daniel 10:17 “ni tampoco me queda

aliento”.

II. Turbación por las cosas que está experimentando – Daniel

7:15.

No debemos de pensar que todo lo que Dios hace en el

ámbito espiritual produce paz. La perturbación es uno de
los vehículos que Dios usa para alistar, preparar y agilizar
al ministro.

La perturbación es la forma que nosotros aprendemos a

activarnos y meternos en la oración, intercesión y la
búsqueda de Dios.

1. Aflicción – Daniel 10:2 (por el espacio de 3 semanas).

La manifestación de lo profético, no necesariamente

produce paz en la vida del portavoz, sino lleva sobre si
la carga del mensaje.

Produce carga por la vida del receptor o el simple

conocimiento de los futuros eventos, por ser delicados y
gravosos.
III. Asombro – Adaptable para ver cosas inusuales – Daniel
7:15.

Hay veces que el ministro es llevado por Dios a ver cosas

que nunca o normalmente no vería. Algunas de dichas
cosas, puede ser el presenciar el mundo espiritual
(especialmente el reino de las tinieblas) y ver el corazón
pecaminoso de las personas.

1. Espantado – Daniel 8:27 “a causa de la visión”.

IV. Temor – Daniel 10:11 - Temblando.

1. El profeta debe de acostumbrarse a las cosas que vive –

Daniel 10:12.

a. Especialmente con el hecho que constantemente

tendrá diversas manifestaciones proféticas que nunca
ha tenido – Mateo 17:6.

2. No sólo temor de la manifestación, sino lo difícil del

mensaje – I Samuel 3:15 “Temía descubrir la
visión a Elí”.

3. Temor por lo que sabe que pudiera ocurrirle a otros, por

revelación de Dios.

V. Es atacado en su propio cuerpo – Puede ser por los

espíritus malignos y regionales. Las acciones proféticas
naturalmente están batallando contra las obras del maligno.

VI. En toda obra o experiencia espiritual (con o de parte de

Dios) hay un contraataque del enemigo. Él desea
 castigarnos por buscar las cosas de Dios. Desea desviarnos
o detenernos para no lograr los objetivos en Dios.

1. Ataca más fuerte nuestras propias debilidades.

2. Afecta nuestra vida – salud, honor, y reputación.

3. Ataca la integridad de nuestra propia familia.

4. Ataca nuestro ministerio – en la unidad, fruto,

relaciones y economía.

V. Tiene un entendimiento espiritual y un entendimiento

natural.

Entre más experiencias espirituales tiene, más crece su

conocimiento de Dios y de Su Reino.

I. Conoce a Dios, pero también conoce a la gente.

1. Sabe cuáles son los falsos conceptos de la gente –

Mateo 13:57 “Se escandalizaban a causa de Él, pero
Jesús les dijo: No hay profeta sin honra”.

VI. No todo lo que recibe, lo puede comprender, interpretar o

razonar Ezequiel 3:15 “atónito”.

Hay cosas que no se pueden comprender, por ser espirituales o

desconocidos:

I. Daniel y Juan el amado, viendo los acontecimientos del

futuro, trataban de interpretar los eventos que ocurrirían
con palabras y conceptos entendibles.

VII. Su vida y su mensaje es como una parábola – Ezequiel 24:3.

El profeta, no solamente por ser “melodramático”, sino por lo

 que Dios ha hecho en muchos él, ha llevado a que sus vidas y las
experiencias sean su propio mensaje.

I. Historia de “varón de hijos de los profetas” - I Reyes

20:34-43.

VIII. Entendiendo las Caídas de los Profetas – este evento se ha

hecho popular dentro de la iglesia moderna, más dentro de las
Escrituras lo conocemos como un evento netamente profético.

I. Daniel – “Con los ojos puestos en tierra, enmudecido” –

Daniel 10:15.

II. Balaam – “Caído, más con los ojos abiertos” - Números

24:3, 15.

III. Juan el Apóstol – “Caí como muerto a sus pies” –

Apocalipsis 1:17.

El ser humano, creyente, es llamado a ser portador de la

presencia de Dios (I Corintios 3:16; Efesios 2:22; Juan
14:23, 15:5, 14:2). El ser humano fue creado para recibir a
Dios, Padre, Hijo y Espíritu Santo, en su totalidad, por eso
debe de desarrollar la capacidad de aguantar dicha
presencia.

IX. El profeta que no obedece al mandato de Dios será

quebrantado – Jeremías 1:17.

La rebelión, desobediencia o la independencia son razones

suficientes para que Dios destituya o remueva el llamado de una
persona.

I. Vergüenza – “Delante de ellos” – Jeremías 1:17.

X. Es protegido y guardado por Dios – cuando camina en

obediencia – Jeremías 1:19.
I. Porque es un representante de Dios – “yo estoy contigo…
para librarte”.
 CAPITULO #VIII

VIII. LOS PROFETAS FALSOS Y LAS DEBILIDADES QUE

PUEDEN DESTRUIR A TODO PROFETA:

Cuando se menciona el término “profeta falso”, no es singularmente

indicativo de una persona que totalmente se ha apartado de los
caminos de Dios, sino de aquellas cosas que pueden destruir o
debilitar el mover profético en la vida de un profeta.

a. Profetiza de su propio corazón su propio pensamiento -

Ezequiel 13:2.

I. Movido por sus propios sentimientos, por el pueblo y por

la gente.

1. Sentimiento de empatía, ante los dilemas que la gente

está enfrentado en sus vidas.

2. Sentimiento de odio, amargura o venganza de parte del

mismo ministro, cuando ha sido rechazado,
avergonzado o maltratado por alguna persona.

Lo que se ha notado es que dentro de las demandas

inherentes del ministerio profético, el de cumplir con
las expectativas del pueblo; el profeta se siente tentado
en la carne a “actuar proféticamente” para saciar la
demanda o mantener la imagen de su ministerio.

b. Hace lo que su espíritu le dice – Ezequiel 13:3.

I. No busca la guianza de Dios y de sus autoridades, sino que

actúa independientemente de otros, sus autoridades y de
Dios.
 II. Usa al Espíritu Santo con una excusa para actuar
independientemente – cree ser el único que pueden recibir
guianza de parte de Dios.

III. Es tan común que el profeta se vuelva reactivo ante los

problemas que está enfrentado en su vida y ministerio.
Cree que él y el mensaje son lo mismo y se molesta
cuando la gente rechaza o desobedece el mensaje,
creyendo que lo están haciendo son ellos, volviéndose un
asunto personal.

c. La motivación es su propia gloria – “vanidad” - Ezequiel

13:6.

Este problema no es individualmente profético, sino general para

toda persona que está deseando servir a Dios. El ministro debe
de mantener su mente, voluntad e intenciones balanceadas ante
el llamado de ser canal de la gloria de Dios. Debe de luchar por
no recibir la gloria, sino de canalizar la gloria de los hombres
hacia Dios.

d. Usa la manipulación para hacer que la gente lo siga – “visto

visión vana” - Ezequiel 13:7

Aún usando de los dones espirituales, para forzar o crear

dependencia en la vida de las personas que lo está escuchando.
Luchando por llevar a la gente a que dependa de él y no de Dios.

Caza las almas – Ezequiel 13:18, 20.

I. Usa de la mentira para coaccionar, manipular y forzar – lo

cual es una forma de hechicería – Ezequiel 13:7.

Caso de Simón el mago en Samaria (Hechos 8:9

“Engañando a la gente…haciéndose pasar por algún
grande”.; v:10 Pretensión “este es el gran poder de
Dios”.), los había mantenido enfermos, atados y tristes
 (v:7,8) por medio de la hechicería.

Hay una gran diferencia entre el uso de la autoridad y el

uso del “poder” – el poder es la imitación satánica de la
verdadera autoridad que es de Dios. Cuando se usa de
alguna forma de manipulación, coacción, control o
condenación, para forzar a la gente a responder u
obedecer, se ha empezado a manejar el poder. El poder es
una forma de hechicería, forzando a la gente a hacer lo que
no deberían o no son llamados a hacer.

II. Uso del engaño – Ezequiel 13:10.

1. Para destruir la vida y el ministerio de otros – I Reyes

13:18.

El llamado del verdadero ministro tienen el propósito

de edificar las vidas de los que lo escuchan (2
Corintios 10:8, 13:10).

III. Solamente profetizan el bien y nunca el mal, para ganarse

el corazón del pueblo – Miqueas 2:11 “andando con
espíritu de falsedad….yo te profetizaré de vino y de sidra;
este tal será el profeta de este pueblo”.

e. Uso de hechicería – por medio de sus señales – Ezequiel 13:6.

En las Escrituras vemos como aún los hechiceros y profetas

falsos pueden hacer milagros y prodigios para tratar de trastornar
a la gente. En Egipto los magos del Faraón pudieron copiar lo
que Moisés hizo con su vara – Éxodo 7:11,12, por medio de
encantamientos, solamente pudieron empeorar la condición del
pueblo egipcio – Éxodo 8:7, 18.

I. Usan de toda forma de hechicería – La cual tiene el

fundamento de engañar, controlar, manipular, maldecir y
dar falsa esperanza.
 1. Maldiciones, para matar - Ezequiel 13:19.

Dios no nos ha llamado, en las cosas comunes, a

maldecir. No debemos de utilizar la influencia, la
posición o los dones del Señor para el mal. Nuestra
vida, el cuerpo y nuestra posición son instrumentos
de bendición, tales como la lengua, los labios, las
manos, el pulpito, y otros son dados por Dios para
ser usados con el propósito de bendecir a Su pueblo.

2. Protección, tratando de mantener en vida – Ezequiel

13:19.

Lo que hace la hechicería, es simplemente dar una

falsa expectativa de seguridad, por medio de sus
conjuros y oraciones. Naturalmente, debemos de
entender que la hechicería tiene poder, más sus obras
están supeditadas y limitadas y su final es hacia el
mal.

II. Se venden – Ezequiel 13:19; II Pedro 2:1-3.

Una de las más importantes diferencias que hay entre el

verdadero y el falso profeta, es el deseo, la intención y la
motivación del corazón.

Su motivación es la ganancia – II Pedro 2:3 “por avaricia

harán mercadería de vosotros con palabras fingidas”. (II
Rey. 5:26 – caso de los regalos de parte de Naamán.)

1. Por ganancia – Balaam – II Pedro 2:15 “amó el

premio de la maldad”, el cual fue el punto que lo
traslado de ser un verdadero profeta y lo volvió un
simple hechicero.

Simón el mago en Samaria – Hechos 8:20 – Creía

 que era aceptable la compra y la venta de los dones
espirituales, porque así el vivía y se había
desarrollado.

Sin que ocurra una transacción financiera, en el

ministerio se puede dar el comprar y vender de
dones, para una ganancia personal. Bíblicamente los
dones son para el beneficio y la bendición departe
nosotros para la vida de los demás.

2. Por posición y gloria – Probablemente la situación

más común es la de buscar obtener o mantener una
posición y un reconocimiento humano. Todo ministro
está tentado, en algún momento de su vida
ministerial, a diluir su mensaje o hacer su mensaje
aceptable a los hombres, para poder obtener su
alabanza. En el caso de los profetas, ellos también
pueden sentirse tentados a dar un mensaje que agrade
a los hombres, y de esa forma, conquisten los
corazones del pueblo.

III. Para apresar, esclavizar al pueblo – Ezequiel 13:21 – El

propósito de las artimañas del enemigo es de llevarnos a la
esclavitud, sea por medio de la dependencia o a la fuerza.

La obra de Dios es siempre apelar a la voluntad del

hombre, fortaleciendo su voluntad, creando así libertad de
pensamiento y decisión. El regalo más precioso, aparte de
la salvación, que Dios nos ha dado es el libre albedrio,
llevándonos a amarlo y servirlo por nuestra propia
voluntad.

El enemigo y sus “profetas” siempre tendrán la intensión

de llevar al pueblo a una esclavitud y la destrucción total
de sus vidas, familias, y de la sociedad.

IV. Para entristecer – robarse el gozo de Dios – Ezequiel

 13:21.

El enemigo y sus “profetas” usan de diferentes

instrumentos para llevar al pueblo a la tristeza, las cuales
son contrarías a las Obras de Dios, tales como: la
condenación y la culpabilidad. Cuando encontramos
perdón, entramos a un verdadero gozo libertador.

Los profetas falsos mantienen un ambiente opresor

alrededor de ellos, para así mantener al pueblo
entristecido.

V. Para fortalecer la mano de los Impíos – Ezequiel 13:21.

La obra del enemigo es contraria a la de Dios. Dios

levanta, defiende y recompensa al justo, más los profetas
falsos hacen lo opuesto exaltando la injusticia y honrando
a los hacedores de iniquidad.

1. Darle dinero o poder al injusto – por medio de sus

manipulaciones y por sus propias fuerzas.

2. Dándole falsas esperanzas (animo), haciéndole creer

al injusto que todo va bien y que no hay
consecuencias para las obras de pecado.

a. Dios, al final juzgará las acciones y

pensamientos de cada persona, y traerá justicia y
balance a todos. Cuando pensamos que los
injustos florecen y logran mucho, recordemos
que Dios es el que hace permanentes nuestras
obras y levanta nuestras cabezas.

f. El Profeta falso necesita ser separado – Ezequiel 13:9 – El

único remedio para el falso profeta es que el pueblo de Dios lo
aparte de la congregación de los santos, para erradicar la
influencia y el poder que tenga sobre la vida de personas dentro
de la congregación.
 CAPITULO #IX

IX. PROFETAS Y SUS MILAGROS

Es importante denotar que el profeta, no solamente es conocido por

sus palabras, sino por las señales y los prodigios que hace con su vida
y ministerio.

También es importante notar que no todos los profetas tienen la

habilidad de hacer milagros, prodigios y maravillas, tales como:
Abraham, David, Daniel y otros.

a. Moisés:

I. Su vara se convirtió en serpiente – Éxodo 4:3.

II. Su mano se volvió leprosa – Éxodo 4:6,7.
III. La vara de Aarón se convirtió en serpiente, delante del
Faraón – Éxodo 7:10.
IV. Las diez plagas fueron activadas por la vara:

1. El agua se volvió en sangre – Éxodo 7:20,21.

2. Produjo ranas sobre Egipto – 8:4.
3. Produjo piojos sobre Egipto – Éxodo 8:16,17.
4. Trajo moscas sobre Egipto – Éxodo 8:24.
5. Proclamó plaga sobre el ganado – Éxodo 9:6.
6. Trajo sarpullido de ulceras – Éxodo 9:10.
7. Trajo granizo y fuego – Éxodo 9:23,24.
8. Trajo langostas (saltamontes) – Éxodo 10:12-14.
9. Trajo tinieblas sobre toda la nación por tres días –
Éxodo 10:22,23.
10. Profetizó la muerte de los primogénitos – Éxodo
12:29.

V. El abrir del mar rojo – Éxodo 14:21.

VI. Devolver el mar rojo a su normalidad – Éxodo 14:27.
VII. La destrucción del ejército egipcio – Éxodo 14:28.
 VIII. Endulza las aguas de Mara – Éxodo 15:25.
IX. La provisión del maná – Éxodo 15:25.
X. Le habla a la Peña de Horeb – Éxodo 17:6.
XI. Obra sobrenatural – 80 días sin comer o beber – Éxodo 19.
XII. Trajo las codornices – Números 11:31.
XIII. Establece juicio sobre Coré – Números 16:30-32.
XIV. La vara de Aarón es reverdecida – Números 17:8.
XV. El milagro de la Serpiente de Bronce – Números 21:9.

b. Josué:

I. Partió el Jordán, para dejar pasar al pueblo – Josué 3:16.

II. Paró el sol – Josué 10:13.

c. Elías:

I. Declaró que no llovería – I Reyes 17:1.

II. Multiplicación de la harina y aceite, para la viuda – I Reyes
17:14.
III. Resucitó al hijo de la viuda – I Reyes 17:22.
IV. Hizo descender fuego del cielo – I Reyes 18:38.
V. Oro por lluvia – I Reyes 18:45.
VI. Corrió sobrenaturalmente más rápido que un caballo – I
Reyes 18:46.
VII. Caminó sobrenaturalmente por 40 días sin comer o beber –
I Reyes 19:8.
VIII. Partió el Jordán – 2 Reyes 2:8.

d. Eliseo:
I. Partió las aguas, con el manto de Elías – II Reyes 2:14.
II. Fueron sanadas las aguas – II Reyes 2:22.
III. Maldijo a los muchachos que se burlaban de él – II Reyes
2:24.
IV. La multiplicación del aceite en la casa de la Viuda – II
Reyes 4:7.
V. La profecía del nacimiento del hijo de la Sunamita – II
 Reyes 4:16,17.
VI. La resurrección del niño, hijo de la Sunamita – II Reyes
4:36.
VII. La limpieza del mal en la olla de comida – II Reyes 4:41.
VIII. La multiplicación de la comida – II Reyes 4:44 (Mateo
14:13).
IX. La Sanidad de Naamán – II Reyes 5:14.
X. La Maldición de Giezi y su descendencia – II Reyes 5:27.
XI. Hizo flotar el hacha – II Reyes 6:6.
XII. Hirió con ceguera a los Sirios – II Reyes 6:18.
XIII. Profetizo que la guerra terminaría el próximo día – II
Reyes 7:1, 16.
XIV. Murió el príncipe en la forma que Eliseo había profetizado
– II Reyes 7:17.
XV. La resurrección del soldado, tirado en el sepulcro de Eliseo
– II Reyes 13:21.

e. Ezequías:
I. Retroceder 10 grados el Sol – II Reyes 20:10.
 CAPITULO #X

X. MINISTERIOS PROFETICOS:

Al crear Dios todas las cosas, Dios hizo gran variedad y

multiplicidad, creando una gama increíble de colores, sabores,
texturas, tamaños, y formas. Cada cosa creada se identifica como
única en su esencia y calidad. Al ser humano, Dios puso dentro de él
no solamente estos elementos variables, sino que también le hizo un
“alma” viviente y un “espíritu” regenerado.

La mente, los sentimientos, la voluntad y la personalidad del ser

humano, cada uno, podría ser conocido como un universo, por su
expansión y complejidad. Cada uno en su personalidad es único e
individual.

En la misma manera, el ministro; su llamado, los dones, y las

experiencias, lo hacen único. Indiscutiblemente vemos la grandeza y
la belleza de nuestro gran Dios, quien da a sus hijos cosas tan
grandes que lo hacen claramente singular en su género.

1. Enoc – Caminó con Dios y fue llevado. Vivió una vida cercana
a Dios, caminando a diario con Él.

2. Noé – Proclamador de Dios, su vida era un testimonio de lo que

Dios haría en la humanidad. Como evangelizador de un
mensaje de arrepentimiento, no pudo salvar a nadie, a
excepción de su propia familia.

3. Balaam - De profeta a simple hechicero (un proceso revertido

de transformación).

A pesar de su final negativo, Balaam tenía el potencial de llegar

a ser uno de los más grandes y más experimentados profetas en
su tiempo. El hecho de que Barak lo haya contratado, nos
 demuestra de que en esos tiempos, con grandes faltas en la
comunicación, su fama había llegado a los oídos del rey, en una
nación lejana.

Habló cara a cara con Dios – Números 22:9, 20.

Hombre de los ojos abiertos al mundo espiritual – Números
24:3, 15.
En su condición de caído, perdió esta habilidad, no
pudo ver el ángel de Dios- Números 22:22-31.
Los oídos abiertos para oír la voz de Dios – Números 24:4.
Tuvo visiones de Dios y Su presencia – Números 24:4.
Transes y manifestaciones espirituales – “Caído, pero con
los ojos abiertos” – Números 24:4.
Revelación – “Sabe la ciencia del Altísimo” – Números
24:16.
Revelación de Dios, mismo – Números 23:19 “Dios no es
hombre, para que mienta, ni hijo de hombre, para que se
arrepienta. ¿Lo ha dicho El, y no lo hará?, ¿ha hablado, y
no lo cumplirá?”
Revelación del futuro de Israel – Números 24:16-22.
Revelación de la venida de Jesús – Números 24:17, 19.

4. Abraham - El padre de la fe, que tenía entendimiento

profético.

Discernió que los visitantes eran Dios mismo – Génesis

18:2,3.
Vio el futuro, los tiempos de Jesús – Juan 8:56.

5. Jacob - El usurpador que fue hecho el padre de la nación, por

la transformación que vivió en lo profético.

Tuvo un encuentro con Dios – Génesis 31:11.

Tuvo la visión de la presencia de Dios en Peniel – Génesis
32:30.
Luchó con el ángel y venció – Génesis 32:28.
6. Samuel – Un joven encaminado hacia lo sacerdotal, levantado
en lo profético por Dios, llegando a ser “rey” sobre la nación.
Fue el mentor de los dos primeros reyes de Israel.

Escuchó la voz de Dios – I Samuel 3:8,9.

Revelación de Dios en la vida de personas – I Samuel 9:19.
Tuvo graves problemas de discernimiento – I Samuel 16:7.
Dios hablo constantemente por medio de él a los reyes.

7. Natán – Confidente y consejero del rey David.

Profetizo constantemente en la vida del Rey.

Tuvo revelación de lo que había hecho David - 2 Samuel
12:7-12.

8. Gad - Sirvió a David.

Era el vidente de David – 2 Samuel 24:11.

Le dio dirección al rey David – I Samuel 22:5.
Profetizo juicio sobre David – 2 Samuel 24:13.
Protegió la vida y el reinado de David – I Reyes 1.

9. David – Dualidad de ministerio, rey y profeta.

“Siendo Profeta” – Hechos 2:30 – II Samuel 23:2.

“Me hizo entender todas las obras del diseño” – I Crónicas
28:19.
Un hombre de adoración y alabanza.
Tuvo discernimiento espiritual y sus ojos estaban abiertos –
2 Samuel 24:17.
Sensibilidad espiritual – 2 Samuel 24.

10. Las profetisas Miriam, Débora y Hulda están entre las

mujeres que vivieron el roll de este ministerio.

Miriam como cantora.

Débora como gobernadora de la nación.
 Hulda profetizando sobre otros.

11. Ahías

Profetizo el reinado de Jeroboam – 1 Reyes 14:2.

Profetizo juicio – 1 Reyes 14:10.

12. Isaías – Un ministerio profético que el libro que lleva su

nombre, es una copelación de diferentes mensajes y profecías.

13. Jeremías – Un ministerio profético que el libro que lleva

su nombre, es una copelación de diferentes mensajes y
profecías.

14. Ezequiel – Uno de los ministros con mayores experiencias

proféticas dentro de las Escrituras. Su vida nos abre
profundamente la vista a lo que un profeta pudiera llegar a ser
y tener.

15. Daniel – Probablemente uno de los profetas más versátiles

dentro de las Escrituras, tuvo grandes revelaciones y
tremendas experiencias en el ámbito profético. Pudo servir
eficientemente en cuatro reinados como consejero,.
Gobernador, vidente y profeta.

16. Oseas – Su vida y sus experiencias son el mismo lema del

mensaje que Dios quería darle al pueblo, haciendo una
comparación entre lo que Oseas vivió y lo que Dios ha tenido
que vivir con el pueblo de Israel.

17. Joel – Un profeta con un mensaje escatológico para el

pueblo de Dios.

18. Amós – Un mensajero con profecía difíciles para las

naciones de Israel y las que vivían alrededor.

19. Abdías – Un mensaje sencillo para Edom e Israel.

20. Jonás – Su llamado y respuesta es primordialmente el
mensaje que Dios quiso transmitirnos. Es un tipo de
Jesucristo.

21. Miqueas – El total de su mensaje es una sola profecía.

22. Nahúm – Su libro es una sola profecía completa y

sencilla.

23. Habacuc – Fue un profeta, con un mensaje y oración de

suplica.

24. Hageo – Su libro es dos profecías completas y sencillas.

25. Zacarías – Su vida y su libro son un profecía, tuvo

grandes manifestaciones angelicales.

26. Malaquías – Su mensaje de confrontación ha traspasado

las edades.

27. Juan el Bautista – Principalmente Juan fue proclamador

del mensaje de Dios, llamado a la gente al arrepentimiento. Su
mensaje es confrontador. No hay un solo record de un milagro
que Juan el Bautista hizo.

28. Jesús – Mateo 21:46 “A éste le tenía por profeta”. A

Jesucristo lo conocemos como el “profeta de profetas”, su
ministerio y experiencias son indudablemente vastas.

En Él se manifestaron, no solamente ese ministerio, sino todos

los ministerios y oficios, en una forma corporal y completa.

29. Esteban – Con grandes cualidades proféticas.

Lleno de tremenda sabiduría – Hechos 6:10.

Era vaso de un espíritu que venía de Dios – Hechos 6:10.
 Tenía los ojos abiertos – vio la Gloria de Dios en el cielo y
Jesús sentado a la diestra de Dios – Hechos 7:55.

30. Pablo – Alcanzado por Dios para cumplir un llamado,

primordialmente para los gentiles, se levanta como uno de los
ministros más versátiles dentro de las escrituras. Pudo
experimentar varios de los ministerios, desde el magisterial, el
profético y el apostólico – II Timoteo 1:11.

Considerado uno de los profetas y maestros en Antioquía -

Hechos 13:1.
Su mensaje, no solamente era fundamental el doctrina, sino
renovador y confrontador para la cultura de su tiempo –
Hechos 15; I Timoteo 1:11.
Experimentó proféticamente los transportes en el espíritu a
otros lugares y al mismo tercer cielo - I Corintios 5:3,4.
Tuvo experiencias fuera de su cuerpo - II Corintios 12:2.

31. Agabo

Profetizó sobre una gran hambre que vendría – Hechos

11:28.
Su vida y sus profecías era muy dramáticos - Hechos
21:10.

32. Juan el Amado – Sería casi imposible declarar cada una

de las cosas que vivió este profeta. Aparte de ser el menor de
los apóstoles, fue el que sobrevivió a todos los demás. Su
mensaje en Apocalipsis, nos demuestra sus experiencias:

Transportado al Cielo y al futuro.

Sus ojos estaban abiertos al mundo espiritual.

Bajo ninguna circunstancias consideramos que estos son los únicos

profetas, sino que son los únicos que consideramos y conocemos
dentro de las Escrituras. En los tiempos de Elías y Eliseo existía la
Escuela de los Profetas, un lugar donde se desarrollaron
ministerialmente a los hombres y mujeres que tenían llamado.
 CAPITULO #XI

XI. LAS CARACTERISTICAS INDIVIDUALES DE UN PROFETA

Lucas 7:26 “Mas ¿qué salisteis a ver? ¿A un profeta? Sí, os digo, y

más que profeta”.

Cada ministerio es una combinación de los 5 ministerios, en diferentes

fortalezas y debilidades ministeriales, creando así una individualidad
ministerial. Cada uno de nosotros somos únicos en nuestros llamados,
habilidades y talentos. Vemos que no todos los profetas hicieron
milagros o prodigios, sino hay algunos que sus obra fueron sus
palabras o sus profecías.

LLAMADO

1. Miqueas dio un mensaje profético continuo sobre Israel.

2. Hageo primordialmente se refirió al Templo de Dios y el
llamado a la santidad.
3. Nahúm dirigió su mensaje al pueblo de Nínive.
4. Habacuc fundamentó su ministerio profético en la
intercesión.
5. Sofonías, con 3 capítulos, mencionó la Ira de Dios 24 veces.
6. Amós nos habla de juicio y destrucción.
7. Joel nos habla de tiempos futuros escatológicos.
8. Pablo llamado a los Gentiles – II Timoteo 1:11.

DONES

1. Samuel, no hizo milagros, sino que profetizó, con autoridad

guío al pueblo y aún tuvo grandes problemas con el
discernimiento.
2. Zacarías tuvo una profunda interacción angelical; 21 veces el
ángel del Señor es mencionado. Él tenía una tremenda
sensibilidad al mundo espiritual.
3. Abdías nos habla singularmente por visión.
PERSONALIDAD

Los Patriarcas y otros profetas nos demostraron que el éxito

dependía de la conquista de la debilidad en nuestra vida.

II Corintios 12:7 “para que la grandeza de las revelaciones no me

exaltase desmedidamente…”

1. Jonás era temperamental y su ministerio profético era

evangelístico en carácter. Su vida fue el mensaje.
2. Daniel se muestra fiel, constante y sabio en todo consejo.
3. Jeremías era conocido como el profeta llorón.
4. Ezequiel era cabeza dura y persistente.
5. Malaquías, nos muestra una total confrontación
6. Abraham era cobarde. Creía a Dios, más lamentablemente no
creía en sí mismo.
7. Jacob era usurpador, mentiroso, avaro, codicioso, manipulador
8. Moisés era inseguro, iracundo, reactivo, tímido, tardo para el
habla
9. Balaam amaba el dinero más que cualquier otra cosa.
10. Juan el amado fue conocido como el profeta del amor.
11. Juan el Bautista era inseguro: “voz que clama en el desierto”,
compitió con Jesucristo y dudo al final sobre Jesucristo:
“¿eres el Cristo?”

EXPERIENCIA

1. Oseas, su experiencia es su mensaje.

XI. BASES DE PROTECCIÓN PARA EL PROFETA

¿Cómo proteger a los profetas durante y después de tener experiencias

proféticas? Hay muchas cosas por las cuales como ministros, somos
responsables de proteger. Comúnmente, se nos ha enseñado que
debemos proteger a la congregación, especialmente de los “falsos”
profetas o de aquellos que desean controlar o manipular. Más es
nuestra responsabilidad de crear un cerco de protección sobre la vida y
el ministerio de los profetas, para que su vida y ministerio, sean
guardados de cualquier ataque, contraataque y represalia del enemigo
por la valiosa labor que ellos están desempeñando a favor el Cuerpo de
Cristo.

I. Como Darle Seguimiento y Pastoreo al Profeta:

Es indispensable no solamente que el profeta esté bajo autoridad
y en sujeción, sino que haya alguien que le da cobertura y
pastoreo, porque la lucha y el ataque en contra del ministerio
profético es feroz. Una de las razones por la que los profetas
comienzan bien, tienen grandes obras, pero terminan mal, es
porque no están en una relación que tenga la posibilidad de
encaminarlos, corregirlos e instruirlos.

Todo Profeta debe de estar bajo sujeción. La sujeción ministerial

es una base, no solamente para la guianza, sino para la
protección del ministro. El es protegido de cualquier cosa que
pudiera dañar su vida, familia y ministerio, porque tiene a
alguien que está velando por su bienestar.

1. Debe de ser confirmado por sus autoridades – I Samuel 3:20

“Y todo Israel, desde Dan hasta Beerseba, supo que Samuel
había sido confirmado como profeta del Señor”.

El reconocimiento, la confirmación y la ordenación de todo

ministerio deben venir directamente de sus autoridades
superiores, no de las personas que están bajo su autoridad o
 de amigos o personas que no tienen nada que ver con la
persona ministerialmente.

a. El reconocimiento crea respeto y transfiere honor que hay

en la vida de la persona que está impartiendo dicho
reconocimiento – Números 11:17 “tomaré del espíritu
que está en ti, y pondré en ellos…” (2 Reyes 2:15).

b. Crea y mantiene balance en la vida ministerial del profeta,

por medio de que hay alguien en su vida con la cual
puede contar, no solamente para defenderlo, sino para
aconsejarlo en cualquiera de los momentos o situaciones
que está enfrentando.

2. Aislamiento crea vulnerabilidad, porque está sólo y propenso

para el ataque del enemigo. El enemigo desea aislarnos,
porque así somos presa fácil.

a. Las relaciones – no todas las relaciones del profeta son

fáciles, especialmente cuando se ven desde los diferentes
puntos. Los mismos profetas son por naturaleza difíciles
en carácter. Muchas veces son gobernados por su
indisciplina, emotividad, y el orgullo, los cuales dificultan
sus relaciones interpersonales.

Pulen al Profeta – porque desarrolla en ellos

humildad y disposición de confrontarse a sí mismo
en las áreas de sus propias debilidades.

1. Crea en el profeta gracia y sabiduría

2. Es extremadamente difícil, confrontar

constantemente y a la misma vez mantener una
 vida y actitud llena de gracia. Para mantener
relaciones con otros, es indispensable ser
agraciado.

Crea interdependencia entre los ministerios,

reconociendo la necesidad que hay del uno con el
otro. Sabiendo que no somos autosuficientes y que
necesitamos a otros.

Crea humildad y quebranta el orgullo en la vida del

profeta

1. Porque hay la tentación de empezar a tomar más

autoridad de la que realmente es nuestra. (Poder
de representación, naturalmente conlleva
influencia)
2. Hay la tendencia a sentirse superior
espiritualmente, por los dones que se manifiestan
en la vida.
3. Hay la tendencia a querer ser muy “espiritual”,
porque vemos que Dios lo usa y al ver que se
cumple lo que ha profetizado.
4. Hay la tendencia a tomarse muy en serio,
creyéndose mayor a lo que es. Hay que recordar
que el desarrollo del ministerio y la rapidez con
que se crece, no depende enteramente del
individuo, sino de Dios mismo.

3. No es responsabilidad de nadie y no es responsable a nadie –

Eclesiastés 4:12.

Todo ministerio profético no debe de pensar en sí mismo

como un ministerio “ambulante”, sino que debe de luchar
por tener una responsabilidad local y de tener algo bajo su
responsabilidad. Esto puede ser un programa, actividad o
ministerio, el cual debe de desarrollar, mantener y edificar.
 Cada ministro que tiene la responsabilidad de manejar,
administrar, coordinar y edificar un ministerio sabe lo difícil
que es ese trabajo. Todo profeta debe de tener dicho honor,
para comprender que cuando llega a una iglesia como
invitado, debe de luchar por manifestar prudencia y gracia
porque sabe y honra el dedicado trabajo que el siervo de Dios
está desempeñando dentro de ese ministerio.

1. Los ministerios proféticos deben de desarrollarse

dentro de la Iglesia Local.

Deuteronomio 18:15 “un profeta de en medio de ti,

de tus hermanos, como yo”.

Deuteronomio 18:18 “un profeta como tu levantaré

de entre sus hermanos”.

No se debe de creer que un profeta pueda

desarrollarse afuera del contexto local del Cuerpo de
Cristo, porque es allí donde tiene la capacidad de
desarrollar sus dones, formar su carácter y madurar
su ministerio.

Todo profeta debe de estar dispuesto al consejo y la

confrontación.

Ningún ministro puede pensar que está totalmente

formado y que no necesita que alguien pueda
corregirlo. Todo buen ministro sabe que Dios puede
usar a muchos para confrontarlo de sus actitudes y
acciones (2 Samuel 16:11-13 “dejadlo, que siga
maldiciendo, porque el Señor se lo ha dicho” )

II. Hay que cerrar puertas que pudieran estar abiertas.

En el proceso cotidiano de la vida, todo ministro está en contacto

con el “polvo” (suciedad, maldad) y puede ser contaminado.
 Constantemente, el ministro debe de evaluar su vida, ministerios,
acciones, pensamientos e intensiones para ver si hay alguna
puerta que está abierta y estamos propensos al ataque del
enemigo.

1. Los profetas, siendo vasos, son receptores de una

obra espiritual, porque están en un contacto constante
con el mundo espiritual.

a. Son vulnerables a un ataque demoníaco, no

solamente por su sentido de sensibilidad
espiritual, sino por la labor que están
desempeñando para Dios.

2. Ministerialmente, el momento más peligroso para

una persona, es después de haber tenido un gran
éxito. En ese momento es cuando el enemigo
contraatacará y si no está preparado, puede hacerse
mucho daño.

1. Balaam – Después de haber tenido tremendas experiencias con

Dios, fue atacado en las áreas de su debilidad, sin que nadie
pudiera responder por él.

a. Amor al Dinero – Números 22:7 “el precio de la

adivinación en la mano”.

b. Honor, Gloria, Reconocimiento y Posición. – Números

22:17 – “…te honraré en gran manera, y haré
cualquier cosa que me digas…”.

c. ¿Qué perdió?

Sensibilidad Espiritual - Números 22:22-31.

Su Conciencia – Aún después de que el ángel lo
corrigió, no cambio de dirección y decisión –
Números 22:34.
 Vendió su don, como una prostituta. Le quitó el
valor a lo que Dios le había dado.
Traicionó - Le compartió a Barak la clave de la
derrota de Israel La contaminación y la mezcla con
las naciones.
Terminó siendo un simple brujo - Números
24:25;25:1.

2. Elías, después de haber matado a los 450 profetas de Baal y de

haber hecho que descendiera fuego del cielo, tuvo un declive
ministerial, terminando en una cueva.

a. El temor lo controlo, creyendo lo que Jezabel le iba a

hacer – I Reyes 19:3.

b. Depresión, muchas veces después de un gran éxito,

viene la depresión – I Reyes19:4.

c. Tentado al suicidio – Se rindió – I Reyes 19:5.

d. Negativismo, común resultado de la depresión

(Fatalismo).

e. Lástima propia - I Reyes 19:10 “…He quedado yo

solo…”

f. Orgullo Ministerial y Espiritual – I Reyes 19:14 “…He

quedado yo solo…”

g. Soledad, aún en medio de multitudes o por el

aislamiento. Una de las mejores tácticas del enemigo
es aislarnos, porque solos, somos presa fácil de
conquistar.

h. Resultados del Ataque:

 Hizo que Elías perdiera su sensibilidad espiritual – I
Reyes 10:11,12 - Quería discernir la presencia de Dios
con sus sentidos naturales.

Él personalmente descarriló su ministerio, por las

actitudes que tuvo – I Reyes 19:15.

1. Dios le digo que fuera a ungir a su reemplazo.

Se volvió incapaz de destruir al espíritu jezabélico,

que lo había controlado por muchos años. Su
incapacidad hizo que la próxima generación profética
tuviera que tratar y solucionar el problema.

3. Josué – Después de la gran victoria de Jericó y Hai, fue

engañado por los Gabaonitas – Josué 9:14.

a. Produjo división dentro del campamento de Israel –

Josué 9:18.

b. Limitó la Obra completa de Dios, de limpiar por

completo a Canaán, de toda nación que no debería de
haber permanecido allí.

c. Hizo que Israel llevará una carga, un yugo, vergüenza

y angustia permanentemente – Josué 9:27.

4. Judas, después del bocado, entro Satanás.

a. Después de haber caminado con Jesucristo por tres

años y medio, de haber liberado y sanado a enfermos,
permitió que el enemigo lo utilizara como instrumento
de traición.

III. ¿Quién corrige al profeta para su propia protección?

 Otros profetas, tienen la capacidad de corregirlo y volverlo al
lugar que le corresponde – Caso de David y Gad – II Samuel
24:11-15.

1. En el caso de la profecía – I Corintios 14:29.

a. Sus autoridades, no solamente tienen el derecho, sino

el deber de guiar, confrontar y corregir la vida y el
ministerio de los profetas. Esto es para su propia
protección.

IV. Dios es el que lo Defiende – Números 11:6,8.

El profeta debe de mantener su vida y corazón puro delante de

Dios y delante de los hombres para que sea intachable y Dios así
pueda protegerlo y defenderlo - Números 12:3.

Como Jesús, el profeta debe de aprender a no defenderse, sino

en quietud y silencio, dejar que Dios sea el que lo defienda.

1. Dios mandó juicio sobre Miriam, por haberse levantado contra

Moisés. Moisés mantuvo su compostura y no perdió su
autoridad – Números 11:10.

2. Hay momentos que por tratar de defenderse y justificar sus

acciones o palabras, el ministro puede ensuciarse,
contaminarse y perder el honor que tiene.
 CAPITULO #XII

XII. EL MINISTERIO PROFETICO Y LA IGLESIA LOCAL

Dentro de toda la Iglesia, Dios ha deseado moverse proféticamente.

Lamentablemente, en muchas Iglesias, no hay ministerio profético,
por su tamaño o porque no ha habido la oportunidad o el ambiente
correcto para levantar a hombres y mujeres que lleven la antorcha
profética dentro de la Iglesia. No obstante, debemos de saber que hay
áreas y departamentos de la Iglesia que deben de fluir con el don o
“espíritu” ministerial, en ese mismo sentir es el caso de la alabanza y
el de oración, siendo ambos de “espíritu” profético en la Iglesia.

Hay una gran diferencia entre ser profeta y ser proféticos. Una
depende de la otra, porque hay que ser primero profético para que
poco a poco se pueda llegar a ser profeta. Es en el ambiente profético
donde se pueden desarrollar fácilmente a los profetas.

I. El Ministerio de Alabanza y Adoración, un brazo Profético.

I. Durante el tiempo de alabanza, el ministerio de alabanza

conjuga y une lo natural y lo espiritual. Es el momento
cuando el mundo natural y el mundo espiritual se unen para
cumplir los propósitos de Dios en la tierra en la iglesia local
y en la vida de los individuos.

II. Une a Dios y el pueblo, por medio de la adoración. Lleva a

abrir las puertas del cielo para que Dios se pueda manifestar
a su pueblo.

1. Abriendo el camino para que otros puedan entrar

fácilmente. El ministro de alabanza, debe de preparar
su vida, corazón y tiempo, para que cuando esté
delante del pueblo el ambiente está listo para entrar a
la presencia de Dios.
 2. Prepara el camino para que el pueblo toque a Dios.

III. Los ángeles son un tipo de la relación entre la alabanza y lo

profético, siendo que ellos se mueven constantemente dentro
de los dos ámbitos.

1. Dios le dio a ellos el primer llamado de adoración

musical delante de Su presencia.

IV. Un lugar para preparar a los futuros Profetas. Dentro de la

iglesia debe de haber un lugar donde los ministerios son
preparados, formados y habilitados.

Es lógico pensar que la gente buscará (gravitará) hacia lo

que es su genuino llamado. La gente con tendencia
magisterial, buscará dentro de la iglesia las áreas que tienen
que ver con la enseñanza, tales como: área infantil,
pequeños grupos de estudios, clases doctrinales, etc. En la
misma forma los demás ministerios, tales como el pastoral,
evangelístico, y apostólico, igualmente como el profético.

La diferencia entre el éxito y el fracaso esta en el cumplir lo

que Dios ha llamado a hacer dentro de Su cuerpo. Es en ese
lugar donde el individuo está fluyendo dentro de su llamado
y sus habilidades, donde él encontrará éxito y satisfacción
en su obediencia.

1. En el área de alabanza es donde encontraremos

algunos profetas en potencia, porque el ministerio se
alabanza se mueve en un ámbito espiritual, donde la
sensibilidad al Espíritu es imprescindible.

2. La base del fluir profético en este ministerio es el

profundo anhelo de la presencia de Dios, en la vida del
individuo.

V. La adoración prepara el ambiente para el mover profético –

 II Reyes 3:15 “mientras el tañedor tocaba, la mano de
Jehová vino sobre Eliseo”.

1. Lo profético se mueve más eficazmente cuando hay un

ambiente propicio, el cual la adoración y alabanza
tienen la capacidad de formar ese momento.

VI. El éxito de la alabanza y adoración está fundamentada sobre

los mismos principios del ministerio profético:

1. No hace las cosas, en representación y por guianza de

Dios.

2. Es sumiso y obediente a Dios y a los que están sobre

su vida – Hebreos 5:8

3. Es sensible al mover de Dios, para que Dios tenga el

control de todo lo que ocurrirá dentro del momento de
alabanza y adoración.

a. El ministro se prepara de antemano, no actúa

impulsivamente, sino que busca que Dios le guie
en cuanto a lo que debe de hacerse en el servicio.

4. No busca la gloria del hombre, sino que su único

deseo es buscar ser canal para darle a Dios la gloria en
su vida.

5. Está lleno de amor por el pueblo y las almas, porque

sabe que con lo que hace puede tocar el corazón de las
personas y Dios puede producir cambios en las vidas
de los individuos.

VII. Dones que se necesitan en la Alabanza Profética:

1. Don de Lengua e Interpretación de Lenguas – I

Corintios 12:10; 14:3-5,26.
 a. Hay un tiempo cuando el canto puede ser en
lengua no entendida.

2. Don de Profecía - Romanos 12:6; I Corintios 12:10;

14:3-4,6.

a. Dios quiere llevar al ministerio de alabanza a

fluir dentro del canto profético.

3. Don de Discernimiento - Lucas 7:39 – Juan 4:19.

Para estar sensible a lo que está ocurriendo alrededor

del santuario y del pueblo. Es común que el enemigo
traiga una ofensiva en contra de la congregación, para
interferir en el fluir de la manifestación de Dios entre
Su pueblo. El ministro debe de ser sensible a lo que
está ocurriendo y tomar las medidas pertinentes en el
asunto.

4. Don de Visiones – Sus ojos tienden a estar abiertos al

mundo espiritual.

VIII. Debe de luchar por vencer las debilidades que pueden

limitar el fluir de la Obra de Dios dentro de la congregación.
El ministro puede ser de vehículo para la presencia de Dios,
o puede ser de obstáculo.

1. Autosuficiencia, arrogancia, rebelión, depresión,

inseguridad, sentimentalismo.

2. Críticos – perfeccionistas, dramáticos y exagerados.

3. El profeta es altamente sensible a la música que

escucha, debe de tener mucho cuidado con lo que pone
dentro de su mente y corazón, para que pueda
mantener esa sensibilidad al mover de Dios.
 a. Puede ser influenciado y afectado fácilmente por
escuchar música equivocada.

II. El Ministerio de oración, otro brazo profético.

II. Una de los departamentos más importantes a nivel de la

Iglesia local es el ministerio de intercesión, el cual es
llamado a preparar y mantener un ambiente propicio, no
solamente para el servicio, sino permanentemente dentro
de la iglesia.

1. No solamente es un brazo profético, sino son los

llamados a presentar delante de Dios las necesidades
del mismo pueblo, el de llevar la carga del pueblo
constantemente delante de Dios.

III. La labor profética del ministerio de oración es la guerra

espiritual, entrar en batalla contra las huestes de maldad
que quieren corromper la obra de Dios dentro de la iglesia
local.

Es discernir la obra satánica y pelear en contra de sus

obras.

Es derribar el reino de Satanás para que ya no tenga la

fuerza para venir en contra de los hijos de Dios.

IV. El ministerio de oración se mueve con varios dones

proféticos:

1. Para que haya efectividad en la oración es importante

que haya alguien dentro del ministerio que se mueve
en el don de revelación. Este don revela lo oculto y
las maquinaciones del enemigo. Le da una necesaria
ventaja al pueblo de Dios sobre el reino de las
 tinieblas.

2. Es imprescindible que haya discernimiento de

espíritus, porque muchas veces el enemigo se
presenta delante del pueblo como ángel de luz,
distorsionando la realidad y la verdad, queriendo
esclavizar al pueblo.

3. En el mover de la oración, Dios ha llamado a este

ministerio a que sea el que ministre y ore por
personas que están necesitadas de Dios, sea por
sanidad, milagros o liberación. Por esa razón deben
de moverse en los dones de milagros, sanidades,
teniendo autoridad sobre los espíritus inmundos.

I Corintios 14:37 “Si alguno á su parecer, es profeta, ó espiritual,

reconozca lo que os escribo, porque son mandamientos del Señor”.

NOTA:
Los pasajes Bíblicos usados son tomados de “La Biblia de las Américas”
(LBLA).
La única fuente bibliográfica que fue usada es la Biblia.