Está en la página 1de 20

Pontificia Universidad Católica de Chile

Facultad de Historia, Geografía y Ciencia Política


Instituto de Historia

De zorros bobos a astutos ladrones:


Las representaciones de carnívoros terrestres
realizadas por Juan Ignacio Molina y Claudio Gay
(Chile 1782-1864)

6 de Julio 2020

Consideraciones sobre la ciencia en Iberoamérica, s. XVI-XIX


Ricardo Morales Gonzalez

Profesora: María M. Portuondo


Introducción

El día 5 de junio de 2020 se observa en el periódico Las últimas noticias la foto de

un pequeño felino nativo de Chile llamado Gato Güiña 1 (Leopardus guigna) quien es

acusado de atacar un gallinero en la comuna de Las Cruces, región de Valparaíso. Lo

llamativo de esta noticia puede deberse a múltiples razones: ya sea por el peligro de

extinción que azota a esta especie, por el festín de 13 gallinas que se le adjudica o también

por los constantes encuentros entre este felino y los seres humanos. Pero lo curioso resalta

con la construcción ambivalente del animal. El titular nos presenta a un “tierno gato”

mientras que la foto de este nos indica una imagen transversalmente contraria a algo

“tierno”; es un felino asustado, estresado, ensangrentado y adentro de una celda trampa

acompañado del cadáver de una gallina2.

Esta situación, algo curiosa y llamativa, puede suscitar reflexiones respecto al

conocimiento de la naturaleza y sobre como su representación nos transmite valoraciones

específicas. Al leer la noticia, es posible advertir diferentes apreciaciones sobre esta especie

provenientes de distintos sujetos entrevistados para la reconstrucción de este caso. Por un

lado, la población de las localidades rurales de la región de Valparaíso se ve perjudicada

por estos felinos dado que atacan sus gallineros. Por otro lado, personas ligadas a estudios

biológicos y veterinarios resaltan el rol natural de depredación de estos felinos y observan

con preocupación el creciente número de encuentros entre humanos y animales. Frente a

1
El nombre gato Güiña, según lo investigado por Carolina Villagrán (et al) puede tener sus orígenes de la
palabra winanm del idioma Mapudugún que significa acarrear o cambiar morada. Se interpreta que este
nombre se le dio por sus habitos de cambiar constantemente de madriguera. -Carolina Villagrán (et al).
“Etnozoología Mapuche: un estudio premilimar”. En: Revista Chilena de Historia natural, N°75, 1999. P.612
2
Las últimas noticias. Capturan a tierno gato güiña acusado de matar a 13 gallinas. Viernes 5 de junio de
2020. Link: http://www.lun.com/Pages/NewsDetail.aspx?dt=2020-06-
05&NewsID=451829&BodyID=0&PaginaId=10&fbclid=IwAR2cHIm7OuMYoDV7XbXrjAsda6u7WqEiRj
Fpz3WRvEa4VzfOtehvN4y_kmM Visitado: 27-06-2020 Véase anexo n°1.

2
esto se advierte que el conocimiento y relación que tenemos con ciertas especies animales

configuran sus representaciones. La güiña es vista como un potencial peligro, pero también

ella está en riesgo; es una invasora, pero también ha sido invadida.

Conociendo a los animales. Ciencia y fauna

Considerando el ejemplo narrado anteriormente es posible señalar problematizar

respecto a las apreciaciones que sostienen los seres humanos con las especies animales con

las que habitan. Desde un punto de vista historiográfico, los estudios históricos sobre la

fauna se interesan por abordar como han sido las relaciones que han sostenido los seres

humanos con distintos no-human animals en diversos contextos históricos. Dentro de este

amplio panorama es posible encontrar relaciones ligadas a lo apreciativo y representativo

del animal. Este aspecto representativo de los animales se inserta como un área

especializada de los estudios sobre fauna llamándose historia cultural de los animales la

cual busca comprender el rol e inserción de una determinada especie en una sociedad. Esta

corriente específica se enfoca en “el aspecto cambiante y transformador de las

representaciones que se tiene sobre una especie en específico” 3. De esta manera, el animal

se inserta dentro de un espacio en el cual convive con seres humanos, y estos, por medio de

sus respectivos intereses o problemáticas contextuales, generan y construyen una imagen

respectiva sobre cierta especie. Esta idea queda más clara por medio del ejemplo que

Arturo Morgado hace al reseñar la obra El oso, Historia de un rey destronado del

historiador francés Michel Pastoreau: “desde el punto de vista biológico, el oso (casi)

3
Arturo Morgado. “Una visión cultural de los animales” En Los animales en la historia y en la cultura.
Arturo Morgado y José Joaquín Rodríguez (eds). Ediciones Universidad de Cádiz, Cádiz, 2011. P.13.

3
siempre ha sido el mismo, y ha sido el ser humano el que ha ido cambiando sus

percepciones y representaciones a lo largo del tiempo”4.

Comprendiendo que la visión que se tiene de un animal es un producto asociado a

contextos históricos socioculturales determinados lo cual se puede ver con la especie

señalada en la introducción. Siguiendo con la güiña presentada, se tiene como punto de

inicio –al menos desde lo conocido actualmente- la caracterización realizada por el abate

jesuita Juan Ignacio Molina en 1782 que hizo la siguiente caracterización: “La pequeñez de

estos animales [Güiña y Gato Colocolo 5] es causa de que no atreviéndose a molestar a los

hombre ni a los ganados, vuelvan toda su fuerza contra los topos campestres, contra las

aves, y a un contra los gallineros de las casas de campo” 6. Este fragmento, presente en la

descripción naturalista que Molina hizo de Chile, da cuenta de que ese espacio zoológico

fue un medio en el cual se manifestaron problemáticas en torno a la vida rural chilena.

Respecto a las problemáticas surgentes sobre la formulación de conocimiento, La

historia cultural de la ciencia brinda posibilidades de acercamiento interpretativo. Según

Juan Pintemel esta rama ha procurado por comprender las dimensiones representativas del

quehacer y producción científica comprendiendo este ejercicio representativo como “un

lenguaje científico que hace cosas (interviene sobre la realidad) y está dotado de los

mismos aspectos comunicativos que cualquier otro lenguaje”. 7 A su vez, resulta interesante

integrar, como óptica de estudio, las ideas sobre estudio del conocimiento de Lorraine

Daston quien enfatiza en remarcar las prácticas y necesidades contextuales involucradas en

4
Ibid. p.20.
5
El nombre de este animal puede provenir de la palabra kodkod en el idioma Mapudungun.
6
Ignacio Molina. Compendio de la historia geográfica natural y civil del Reyno de Chile. [1782] Madrid,
1788. P.333
7
Juan Pintemel. “¿Qué es la historia cultural de la ciencia?” En: Arbor, N°743, 2001. P 421.

4
la construcción de conocimiento 8. En este sentido, la visión de un animal y su proyección

científica, son productos históricos que dan cuenta de la relación que los seres humanos del

pasado tuvieron con elementos determinados de la naturaleza.

Este trabajo de investigación histórica se articula contextualmente en torno a

explorar cómo fue la representación zoológica que se realizó a las especies carnívoras

chilenas a finales del siglo XVIII y mediados del siglo XIX por medio del análisis de las

producciones científicas de dos naturalistas: Juan Ignacio Molina y Claudio Gay Dentro de

este marco es posible asegurar, por medio de las fuentes analizadas que existe una

evolución de las apreciaciones zoológicas de los carnívoros chilenos en cuanto a que, para

Molina estas especies son una preocupación menor mientras que para Gay los carnívoros

chilenos son un peligro para el desarrollo de las actividades agrícolas ganaderas. Esta

diferencia sobre la perspectiva que se tiene sobre un grupo específico de animales se debe a

los distintos intereses personales que tuvieron los científicos como también a las respectivas

preocupaciones contextuales de ambos.

Los animales carnívoros terrestres y la relación que han sostenido con los seres

humanos a lo largo de la historia ha sido conflictiva en cuanto a la lucha por el territorio 9.

Esta competencia territorial, puede generar la creación de percepciones negativas en cuanto

a la apreciación de estas especies como un elemento negativo en el paisaje. De esta forma,

concibiendo que en el trabajo científico zoológico también se han manifestado

8
Lorraine Daston. “The history of Science and the history of Knowledge”.En: Know A journal on the
formation of Knowledge, N°1, 2017.
9
Carlos Castaño. “Evidencias históricas del conflicto entre felinos y humanos: una línea larga del tiempo
como dioses y animales”. En: Castaño C. C.A. Lasso R. Hoogesteijn, A. Diaz y E. Payán (eds). II Conflictos
entre felinos y humanos en América Latina. Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander Von
Humboldt, 2016 Bogotá. Pp. 37-48

5
apreciaciones culturales10, la mirada focalizada en este grupo de animales permitirá dar

cuenta de cómo se ha manifestado este conflicto humano-animal en los estudios científicos

chilenos de los siglos XVIII-XIX.

En paralelo la historia cultural de la ciencia y del conocimiento aboga por la

reconfiguración de la práctica científica dentro de marcos contextuales en los que se

consideren factores políticos, sociales, económicos o de diversas índoles que pudiesen

haber condicionado algún área de la construcción de conocimiento 11. El saber zoológico

carnívoro de Chile es un espacio que da cuenta de intereses y problemáticas contextuales.

Molina buscó promover una imagen controlada de los depredadores en Chile enfatizando

en las ventajas territoriales que tiene el país en materia agrícola. Pero Gay construyó una

representación riesgosa de estas especies acentuando el factor de riesgo que estas suponen

para el desarrollo en zonas rurales. Sin embargo, lo que reúne a ambos autores es que sus

métodos para acceder al conocimiento fueron la interacción directa con algunas especies o

lo comunicado por los habitantes de Chile lo que da cuenta de la generación e integración

del saber local al desarrollo científico zoológico.

La inclusión del abate Ignacio Molina se debe a que fue el primer chileno que

desarrolló sus estudios zoológicos siglo XVIII bajo los parámetros científicos europeos. Su

trabajo se configuró dentro de álgidos procesos políticos y religiosos dada la expulsión de

la congregación jesuita de los territorios coloniales en 1767, dictamen político que operó

dentro del creciente interés Imperial por obtener un mayor control y reconocimiento de las

colonias españolas. A su vez, el trabajo de Molina fue un lugar de integración el

10
Morgado. Op.cit. pp.24-30
11
Daston. Op.cit.

6
conocimiento criollo. De esta forma, los estudios realizados por Molina son un espacio de

generación de conocimientos locales y también una práctica de formulación de

sentimientos de identidad y reconocimiento criollo.

Posteriormente el trabajo zoológico de Claudio Gay se desarrolló en un ambiente

político e intelectual completamente diferente. Fue escogido por el naciente Estado de

Chile para que hiciera una exhaustiva descripción sobre los componentes de la naturaleza

del territorio nacional con la finalidad de reconocer los recursos explotables en el país. En

dicha caracterización geográfica de la nación se consideró a la fauna como también a las

actividades económicas. Los animales carnívoros de Chile se entrelazan con la agricultura y

ganadería en cuanto a que estos suponen un riesgo para el progreso de estos rubros y, por

consecuencia, del país.

Juan Ignacio Molina y los carnívoros de Chile

“El amor que naturalmente inspira la patria me indujo a proporcionar una idea sobre

ella”12

Juan Ignacio Molina (1740) nació en la Hacienda Hualarquén ubicada en la actual

comuna de Villa Alegre en la región del Maule 13. En su niñez, como mencionan los

diferentes estudios biográficos del autor, desarrolló un progresivo interés respecto al

estudio de la naturaleza y el estudio de distintas disciplinas. Con 15 años ingresó a la

congregación Jesuita, espacio religioso que le brindó la posibilidad de poder crecer

intelectualmente en distintas áreas llamándole la atención la Historia Natural. Los

problemas llegaron con la política Imperial de expulsar a los jesuitas del territorio colonial

12
Juan Ignacio Molina. Ensayo sobre la historia natural de Chile [1810]. Ediciones Maule, Talca, 1986. P.3.
13
Manuel Tamayo. El abate Juan Ignacio Molina (1740-1829) y su contribución a las ciencias naturales de
Chile. En: Gestión ambiental, N°17, 2009. pp.1-9

7
por lo que Molina fue exiliado del espacio chileno al que nunca pudo volver. No obstante,

en el problemático proceso de exilio en Europa, terminó por recalar en la ciudad de Bolonia

en la que pudo desarrollar, en compañía de otros jesuitas, sus escritos intelectuales ligados a

la naturaleza e historia de Chile14.

La obra de Abate Molina, resulta interesante dado que se enmarca en el proceso

tardío colonial en el cual permeó la ciencia ilustrada en las regiones de Iberoamérica 15. En

este contexto, a raíz de lo investigado por José Stuardo, Molina fue el primero que estudió

de la fauna chilena utilizando el modelo de Linneo que incluye la integración de nombres

científicos para su reconocimiento y descripción16. Esto resulta interesante dado que, como

se observará a continuación, Molina mezcló los conocimientos locales y europeos

generando una obra híbrida en cuanto a la integración de saberes.

Entre las composiciones realizadas por Molina se consideró el Compendio sobre la

historia natural, civil y geográfica del Reyno de Chile de 1782 (traducida en 1788) y la

segunda edición de esta realizada en 1810. Esta decisión se basa en las ambigüedades

presentes en el espectro historiográfico en torno a la obra Compendio de la historia natural,

civil y geográfica del Reyno de Chile de 1776 dada la disputa de la autoría de este escrito

entre Molina, Felipe de Vidaurre o si fue colaboración de ambos 17, por lo que se decidió no

14
Ibidem.
Francisco Orrego González. “Juan Ignacio Molina y la compresión de la naturaleza del finis terraea. Un
acercamiento desde la historia (cultural) de la ciencia”. En: ARBOR Ciencia, Pensamiento y Cultura. N°187-
751, 2011. Pp 961-967.
Reynado Chartier y Francisco Herve. “El abate Juan Ignacio Molina: Una vida dedicada a la historia natural y
civil del reino de Chile. En: Revista de la asociación Geológica Argentina, N °68,2011. Pp 445-463
15
Juan José Saldaña. “Ciencia y felicidad pública en la Ilustración americana”. En Juan José Saldaña
(coordinador: “Historia soial de las ciencias en América Latina.). UNAM, México, 1996.
16
José Stuardo. “Trascendencia del primer Saggio sulla storia naturale del Chili de J.I. Molina, su traducción,
el compendio anónimo y el bicentenario. En Atenea, N°495, 2007. P. 83
17
Stuardo. op.cit. p8 5.
Orrego. op.cit. p.751

8
considerar dicho texto. De esta forma manera, tanto el Compendio como el Ensayo fueron

utilizados como insumo para las interpretaciones históricas, si bien el ensayo fue un trabajo

complementario al compendio, ambos textos presentan algunas informaciones diferentes.

Molina buscó abarcar la naturaleza e historia de país de una manera en la cual se

pudieran percibir las bondades y características singulares y positivas del paisaje chileno.

Siendo así que, para el caso de los animales carnívoros terrestres, se observa una tendencia

a reseñarlos como seres inofensivos, tímidos y raros que no suponen grandes problemas

Sobre el estado de la ganadería en general, Molina realizó un análisis descriptivo en

donde realzó una visión positiva respecto a las actividades de este rubro como también a la

adecuación de los animales usados para el trabajo rural. Por ejemplo, sobre los vacunos

Molina señaló:

“En Chile no se les guarda jamás en establos ni tienen otra alimentación que los accidentales pastos
de los campos y, sin embargo, no se encuentra en ellos la menor degradación respecto a forma ni corpulencia.
Allí los propietarios son tan poderosos, que atendida la extensión de dicho poder y el poco o ningún gasto que
para ellos requiere, mantienen muchos centenares de animales bovinos” 18
Este estado benefactor para la producción ganadera se vio favorecida por la

comparación favorable que estableció Molina sobre los elementos animales perjudiciales en

cuanto a que señaló que en Chile han sido eliminadas las amenazas a la ganadería y que, a

diferencia con otros lugares del mundo, no existen animales venenosos que pongan en

riesgo la vida de la población19. Ambos fragmentos sobre el estado positivo de Chile

respecto a su fauna dan cuenta del interés de Molina de posicionar la naturaleza y paisaje de

la colonia como un territorio fértil y próspero.

18
Molina. op.cit. 1810. p301.
19
Ibid. pp. 40-41.

9
Dentro de esta recreación del estado de los animales de Chile, Molina se refirió a las

especies de Zorro Culpeo, Gato Güiña, Gato Colocolo y Puma caracterizándolos como un

riesgo menor para el asentamiento humano, resaltando aspectos ligados al comportamiento

torpe de los Zorros, lo enigmático de los gatos y el control y caza de los pumas. De esta

forma, la imagen de carnívoros terrestres promulgada científicamente, tiene relación con la

configuración de reseñar el estado natural de Chile como un espacio libre de amenazas.

Sobre el Zorro Culpeo, Molina realizó una caracterización en donde resaltó aspectos

del comportamiento de este que lo hacían inofensivo para los seres humanos. Molina señaló

que al encontrarse el mismo con este animal, observó que era una especie curiosa que se

acercaba a los seres humanos cuando los veía y que luego se retiran sin hacerles daño, lo

cual configura un carácter pacífico sobre este animal 20. Pero, al momento de explicar los

orígenes del nombre Culpeo21, Molina confirma la imagen inofensiva y torpe que le

adjudicó a esta especie.

“Su nombre, que parece derivar de la palabra Culpem, la cual en lengua chilena significa delirio o
locura, tal vez le ha sido impuesto por ese tonto proceder suyo, que día a día lo expone a los tiros de
los cazadores. Pero lo que allí de más singular es que- a despecho del gran numero que se mata- él no
se aparta un punto de su bobo empeño”22

Güiña y gato Colocolo fueron caracterizados como hermosos ejemplares por su

pelaje. A su vez, fueron descritos como un animales pequeños y tímidos que rara ocasiones

se acercan a los seres humanos y que prefieren atacar a ratones o gallinas 23.

Específicamente sobre el segundo felino señalado, Molina hizo hincapié en el origen del

nombre Colocolo señalando que este va en recuerdo de la memoria del gran Colo-Colo,
20
Molina. Op.cit 1782. P.331.
21
La palabra kulpew hace referencia a acciones delirantes y poco comprensibles. Villagrán. Op.cit. p. 612
22
Molina Op.cit. 1810. p.279
23
Molina Op.cit.1782. p.333

10
promotor y sostenedor de la libertad araucana24. De esta manera, el mismo nombre asignado

a una especie puede ser un espacio para resaltar valores y sentimientos de identidad lo cual

se encuentra en relación con el proclive interés criollo de Molina.

Por último, y siendo la caracterización con mayor profundidad sobre los carnívoros,

Molina se detiene en la figura del Pagi (Puma). Sobre este, lo primero que hizo es

compararlo con el león africano del cual señaló similitudes fisiológicas y en el rugido 25.

Este felino por su gran corpulencia es descrito como un posible peligro que enfrentan los

habitantes y animales en zonas rurales, sobre todo equinos y ganado. No obstante, señaló

que éstos tienen una actitud tímida frente a los seres humanos, inclusive hasta con los

niños26. A su vez, recrea como es la caza de estos animales terminando por señalar que esta

especie se encuentra de manera escasa y que los seres humanos han puesto empeño en la

eliminación de esta para conservar al ganado y que muerto el animal se le puede utilizar

como trofeo o para generar utensilios o medicinas. 27 De esta forma, Molina al hablar sobre

los pumas, los representa como una especie tímida, cobarde y escasa la cual en raras

ocasiones supone un riesgo para el ganado.

Claudio Gay. El lugar de los carnívoros para el Estado de Chile

“Esperamos que esta fauna así tratada, satisfará los deseos de la ciencia y la distinguida

protección que el ilustrado gobierno de Chile nos acordó encárganos”28

Claudio Gay (1800) nació en la localidad francesa de Draguignan, luego se formó en París

como botánico lo cual le permitió tener estrecho contacto con estudios y exploradores
24
Molina Op.cit. 1810. p.280.
25
Molina. Op.cit. 1782. p 334.
26
Ibid. p.338.
27
Molina. op.cit. 1810. p.282.
28
Claudio Gay. Historia física y política de Chile. Zoología I [1847]. Biblioteca fundamentos de la
construcción de Chile, Santiago, 2010. p. 36.

11
ligados a esta área del conocimiento. En este proceso de formación es invitado por Pedro

Chaupis para viajar y trabajar en Chile llegando al país en el año 1828 a desempeñar

labores como profesor29. Posteriormente fue contratado por el Estado chileno en 1830 con

el objetivo de construir un gabinete de historia cultural, dar cuenta de la flora y fauna del

territorio nacional y crear un mapa de los límites soberanos de Chile30.

Gay elaboró estudios ligados a la historia, geografía, actividades productivas, flora y

fauna siendo presentando el texto “Zoología ” en 1847 31 en el cual se describen y catalogan

las especies identificadas por Gay y sus colaboradores durante sus viajes de exploración. Se

destacan los mamíferos ya que se hizo una caracterización descriptiva de las costumbres de

estos animales32. Entre las obras científicas realizadas por Claudio Gay se encuentra el texto

“Agricultura” publicado en 1862, en el cual reseñó la características y composición de las

zonas rurales agrícolas chilenas enfatizando en su estado, desarrollo y la población

productiva. En palabras de Rafael Sagredo, este texto da cuenta de un panorama general

respecto al estado agrícola de Chile en la primera mitad del siglo XIX en el cuál se alude al

recorrido histórico de este rubro y las problemáticas y posibilidades de este33.

Como también menciona Sagredo, el conocimiento de Gay tuvo funcionalidades

científicas como también republicanas en el sentido de que es un instrumento capaz de

absorber y transmitir la identidad nacional como también entregar herramientas serviles

29
José Yáñez e Ivette Araya. “Claudio Gay: Historia y legado para Chile”.En: Gestión ambiental, N°11, 2005.
pp. 2-4
30
Zenobio Saldivia. “Claudio gay: de la ordenación de la naturaleza a la organización de la república. En:
Naturalistas. El mapa no es territorio. Revista Patrimonio cultural, N°33,2004. 26-27
31
Luciano campos. “Don Claudio Gay, zoólogo”. En: Boletín Museo Nacional de Historia Nacional, N°35,
Chile, 1977. P.25.
32
Ibid. p28.
33
Rafael Sagredo. “La agricultura de Claudio Gay. Un panorama social de Chile en el siglo XIX”” En:
Claudio Gay. Historia física y política de Chile. Agricultura I [1862]. Biblioteca Fundamentos de la
construcción de Chile. Santiago, 2009. P.36-69

12
para la administración política de Chile. 34 Labores que, bajo interpretación de este

historiador, son sustancia fundamental para entender la construcción inicial del estado

Chileno35.

Sobre la especie zorro culpeo, Gay hizo una descripción con mayores detalles que

los señalados por Molina a quien cita para comentar el origen del nombre Culpeo y su

actitud curiosa. Además, agregó a su descripción atribuciones maliciosas a esta especie

señalando: “no teme aproximarse a las casas de campo parar hurtar aves y embestir a las

cabras y corderos. Cuando así no puede satisfacer su apetito, entra en las viñas y hace gran

consumo de uvas”36. Este hábito ladrón de los zorros fue tratada en los estudios de

agricultura de Gay, en la sección sobre los viñedos de Chile en la cual señala que estos y

otros animales son considerables enemigos de los viñedos 37. Por último, en el recuento de

animales domésticos en espacios rurales, Gay mencionó a perros serviles a la producción

agrícola mencionando la existencia de perros zorreros que, pese a la astucia de los zorros,

logran darles caza y muerte38. En comparativa, la representación los transforma de

animales delirantes y aspiraciones autodestructivas a ser ladrones de gallinas y glotones

destructores de cosecha de uvas. Paralelamente, el zorro y sus hábitos son un factor

fundamental para comprender el desarrollo de las labores agrícolas dado que su dieta

propició la aparición de figuras como los vigilantes y los perros zorreros.

34
Rafael Sagredo. De la historia natural a la historia nacional. La Historia física y política de Claudio Gay y la
nación chilena. En: Claudio Gay. Historia física y política de Chile. Historia I. Biblioteca fundamentos de la
construcción de Chile, Santiago, 2007. p.9
35
Ibid. p.53
36
Gay. Op.cit.1847. p 85.
37
Claudio Gay. Historia física y política de Chile. Agricultura II [1864]. Biblioteca fundamentos de la
construcción de Chile, Santiago, 2009. p. 144.
38
Gay. Op.cit.1862. pp. 334-335.

13
Tanto la güiña como el gato Colocolo fueron especies que no tuvieron una gran

atención descriptiva por parte de Gay más allá de la enumeración de sus características

físicas. Lo que resalta de este caso es la disputa que Gay establece al señalar dos especies

conocidas vulgarmente por el nombre de güiña: felis pajeros y felis guigna39. Sobre el gato

Colocolo solo se menciona que a veces ataca a las aves en las haciendas. 40 El carácter

tímido y desapercibido de estos animales puede ser la explicación por la cual Gay no haya

incluido a estas especies en sus estudios sobre agricultura. No obstante, pese a su escasa

descripción frente a zorros y pumas, la güiña es el único animal de los mencionados en esta

investigación que contó con una ilustración en la cual se le dibujó apoyado en las ramas de

un árbol y con una actitud temeraria y agresiva41.

Gay hizo una extensa descripción morfológica del puma o león y luego señaló

algunos de sus comportamientos en relación con la población. En los principios del relato

no se visibilizan mayores distinciones que las hechas por Molina al mencionar que es un

animal cobarde frente a los seres humanos. No obstante, señaló que le llegó un testimonio

que narra que un puma atacó a dos personas. Para Gay, este ataque se explica por “la

necesidad apremiante del hambre, la que, como se sabe hace perder el uso de toda facultad

a los seres sensibles y los precipita a la más fuerte exaltación de la violencia” 42. A su vez,

este felino ha aprovechado los asentamientos humanos y a los animales de zonas rurales

para satisfacer sus necesidades “llegando muy frecuentemente a ser el terror de una

39
Gay. Op.cit. 1847. Pp. 92-95.
40
Ibid.96.
41
Véase Anexo 2.
42
Ibid p.89.

14
propiedad por los muchos destrozos que causa”43. Además, el constante asecho de pumas

hacia los animales de zonas agrícolas según Gay:

“cada propietario se ha visto obligado a hacerles una guerra a todo trance y a proscribirlo
poniendo en precio su cabeza; así los vaqueros no dejan de perseguir tenazmente a todos los
que han sido señalados como vecinos de sus haciendas”44
En relación a las problemáticas generadas por los pumas en los campos chilenos,

Gay al mencionar la composición de labores rurales menciona a la figura del vaquero como

protector de ganado el cual, como parte de sus funciones, debe enfrentarse a estos felinos

para salvar al ganado45. A su vez, respecto a los bueyes y vacas, Gay vuelve a mencionar

que los pumas son uno de los enemigos más peligrosos para la cría de estos animales sobre

todo cuando estos pastorean en época de nacimiento de terneros.46

Conclusiones.

Este esbozo histórico se presenta como una iniciativa exploratoria con la cual se

buscó indagar en la visión sobre los animales y los conflictos que se han tenido con ellos en

distintos momentos históricos. Estos acercamientos focalizados al pasado pueden

permitirnos darnos cuenta de problemáticas compartidas que aún no han sido resueltas y

que han escalado a fenómenos de extinción para especies como la güiña o el puma. La

visión y relación que se han sostenido con ciertas especies animales tienen correlatos

históricos que atestiguan que el conflicto entre depredadores y ganaderos está lejos de ser

un asunto resuelto en la actualidad.

Al observar los estudios naturalistas hechos por Ignacio Molina y Claudio Gay fue

posible ver cómo, mediante la examinación de las mismas especies de animales, se dio
43
Ibid p.90.
44
Ibid.p 91.
45
Gay op.cit. 1862. pp.133-134.
46
Ibid. p.289 y p.321.

15
cuenta de características y comportamientos distintos. Estas representaciones específicas

sobre la fauna carnívora pueden ser interpretadas como manifestaciones de los intereses y

problemáticas que observan los autores. De esta forma, la figura del animal no es

puramente descriptiva, también está fuertemente cargada de ideas que responden a sus

determinados contextos históricos. Los carnívoros coloniales de Molina son seres

dominados, torpes y tímidos que no significan un peligro considerable para los habitantes

de chile, mientras que para Gay estas bestias, ladronas y sanguinarias son un constante

riesgo para la agricultura chilena. En un lapsus de cincuenta años el saber científico y

conocimiento zoológico sobre los carnívoros mostró considerables cambios apreciativos

explicados por los intereses respectivos de Molina y Gay que, ambos en sus motivaciones

por el surgimiento del país, concibieron a los animales de maneras diametralmente

opuestas.

Por último, un aprendizaje a las relaciones históricas que se han sostenido con

ciertas especies animales puede ser una posibilidad, en palabras de la historiadora Marina

Belozserskaya:

“el modo en el que percibimos y tratamos a los animales aporta una nueva luz sobre
nuestros propios valores, preocupaciones y nuestras aspiraciones. Al reflexionar acerca de
las relaciones que hemos tenido con ellos a través de los siglos, también podemos aprender
algo de nosotros mismos”47

Anexos.

Anexo 1

47
Marina Belozerskaya. La jirafa de los Medici. Y otros relatos sobre los animales exóticos y el poder.
Barcelona Gedisa, 2000. P.28

16
Las últimas noticias. Capturan a tierno gato güiña acusado de matar a 13 gallinas. 5 de
junio de 2020

Anexo n°2

17
Claudio Gay. Atlas de la historia física y política de Chile. Tomo segundo. Imprenta E.
Thunot. París 1854. P.6.
Disponible en: https://www.wdl.org/es/item/3980/view/1/6/
Revisado: 05-07-2020

Bibliografía.
Fuentes primarias

18
- Juan Ignacio Molina. Compendio de la historia geográfica natural y civil del Reyno de
Chile. [1782]. Madrid.
- Juan Ignacio Molina. Ensayo sobre la historia natural de Chile [1810]. Ediciones Maule,
Talca, 1986.
- Claudio Gay. Historia física y política de Chile. Zoología I [1847]. Biblioteca
fundamentos de la construcción de Chile, Santiago, 2010
- Claudio Gay. Atlas de la historia física y política de Chile. Tomo segundo. Imprenta E.
Thunot. París 1854
-Claudio Gay. Historia física y política de Chile. Agricultura I [1862]. Biblioteca
Fundamentos de la construcción de Chile. Santiago, 2009
- Claudio Gay. Historia física y política de Chile. Agricultura II [1864]. Biblioteca
fundamentos de la construcción de Chile, Santiago, 2009

Fuentes secundarias

- Marina Belozerskaya. La jirafa de los Medici. Y otros relatos sobre los animales exóticos
y el poder. Barcelona Gedisa, 2000.
- Luciano campos. “Don Claudio Gay, zoólogo”. En: Boletín Museo Nacional de Historia
Nacional, N°35, 1977. Pp 23-30.
-Carlos Castaño. “Evidencias históricas del conflicto entre felinos y humanos: una línea
larga del tiempo como dioses y animales”. En: Castaño C. C.A. Lasso R. Hoogesteijn, A.
Diaz y E. Payán (eds). II Conflictos entre felinos y humanos en América Latina. Instituto de
Investigación de Recursos Biológicos Alexander Von Humboldt, 2016 Bogotá.
- Reynado Chartier y Francisco Herve. “El abate Juan Ignacio Molina: Una vida dedicada a
la historia natural y civil del reino de Chile. En: Revista de la asociación Geológica
Argentina, N °68, 2011. Pp 445-463.
- Lorraine Daston. “The history of Science and the history of Knowledge”.En: Know A
journal on the formation of Knowledge, N°1, 2017. Pp 131-154
- Arturo Morgado. “Una visión cultural de los animales” En Los animales en la historia y
en la cultura. Arturo Morgado y José Joaquín Rodríguez (eds). Ediciones Universidad de
Cádiz, Cádiz, 2011.
- Francisco Orrego González. “Juan Ignacio Molina y la compresión de la naturaleza del
finis terraea. Un acercamiento desde la historia (cultural) de la ciencia”. En: ARBOR
Ciencia, Pensamiento y Cultura. N°187-751, 2011. Pp 961-967.
- Juan Pintemel. “¿Qué es la historia cultural de la ciencia?” En: Arbor, N°743, 2001. Pp
417-424
- Rafael Sagredo. De la historia natural a la historia nacional. La Historia física y política de
Claudio Gay y la nación Chilena. En: Claudio Gay. Historia física y política de Chile.
Historia I. Biblioteca fundamentos de la construcción de Chile, Santiago, 2007.
- Rafael Sagredo. “La agricultura de Claudio Gay. Un panorama social de Chile en el siglo
XIX”” En: Claudio Gay. Historia física y política de Chile. Agrícultura I [1862].
Biblioteca Fundamentos de la construcción de Chile. Santiago, 2009.

19
- Zenobio Saldivia. “Claudio gay: de la ordenación de la naturaleza a la organización de la
república. En: Naturalistas. El mapa no es territorio. Revista Patrimonio cultural, N°33,
2004. Pp.26-27-
-Juan José Saldaña. “Ciencia y felicidad pública en la Ilustración americana”. En Juan José
Saldaña (coordinador: “Historia soial de las ciencias en América Latina.). UNAM, México,
1996
- José Stuardo. “Trascendencia del primer Saggio sulla storia naturale del Chili de J.I.
Molina, su traducción, el compendio anónimo y el bicentenario. En Atenea, N°495, 2007.
Pp 83-107
-Manuel Tamayo. El abate Juan Ignacio Molina (1740-1829) y su contribución a las
ciencias naturales de Chile. En: Gestión ambiental, N°17, Chile, 2009. Pp1-9
-Carolina Villagran (et al). “Etnozoología Mapuche: un estudio premilimar”. En: Revista
Chilena de Historia natural, N°75, 1999. 595-627.
- José Yáñez e Ivette Araya. “Claudio Gay: Historia y legado para Chile”.En: Gestión
ambiental, N°11, 2005. Pp 1-9

20

También podría gustarte