4) AGUA PARA RIEGO

En muchas áreas donde se cultivan cultivos, la falta de agua de lluvia requiere tecnologías costosas de
irrigación. en Argentina, el 50% del agua destinada a la agricultura se utiliza en zonas áridas con escasez
de precipitaciones, mientras que el 20% se usa en zonas húmedas para complementar la lluvia. se riegan
más de 2 millones de hectáreas, principalmente con agua superficial en lugar de agua subterránea. se
han desarrollado métodos de riego artificial que varían según el costo, el terreno, el tipo de cultivo y el
caudal de agua disponible. Los sistemas por gravedad y el riego por inundación son menos eficientes,
mientras que los sistemas autopropulsados, el riego por goteo y el riego por aspersión son más
eficientes pero costosos de instalar. Estos últimos permiten un mejor uso del agua.

AGUA PARA CONSUMO DOMÉSTICO

El agua tiene múltiples usos en nuestros hogares, como beber, cocinar, bañarse, lavar, etc, llega a
nuestras casas a través de suministro público o suministro privado, siendo provista por la empresa AySA
desde el Río de la Plata.

AGUA EN LA PRODUCCIÓN INDUSTRIAL Y ENERGÉTICA

La industria utiliza agua en diversas etapas de producción, como refrigerante, materia prima, disolvente
y para limpieza e higiene. Grandes consumidores industriales de agua incluyen pasteras, fábricas de
acero, ingenios azucareros, industria minera, centrales térmicas y plantas nucleares, obteniendo agua de
fuentes superficiales como ríos. La producción hidroeléctrica también utiliza agua pero con impactos
ambientales, como la inundación de tierras y la pérdida de biodiversidad. Movimientos ambientalistas
buscan alternativas y la cancelación de proyectos hidroeléctricos. En Argentina, se conmemora el Día
Mundial de Acción contra las Grandes Represas con protestas y oposición a proyectos como el de Garabí
en el río Uruguay.