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desprecio, después de esta vida merezcamos conseguir los ORACIÓN
premios que tienes prometidos a los humildes en la gloria. Dios omnipotente y eterno, que por admirable disposición
Amén. eliges lo débil del mundo para confundir a los fuertes, con-
cede propicio a nuestra humildad, que por las pías súplicas
Al fin de esta oración, y la de cada día, rezarás tres Credos de tu Confesor el bienaventurado San Diego, merezcamos
por las Almas del Purgatorio, y por los que están en peca- ser sublimados a la gloria perenne en los cielos. Por Jesu-
do mortal. cristo Nuestro Señor. Amén.
En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo.
℣. Ruega por nosotros, bienaventurado San Diego. Amén.
℟. Para que seamos dignos de las promesas de Cristo.
ORACIÓN
Dios omnipotente y eterno, que por admirable disposición
eliges lo débil del mundo para confundir a los fuertes, con-
cede propicio a nuestra humildad, que por las pías súplicas
de tu Confesor el bienaventurado San Diego, merezcamos
ser sublimados a la gloria perenne en los cielos. Por Jesu-
cristo Nuestro Señor. Amén.
En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo.
Amén.
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DÍA SEGUNDO - 5 DE NOVIEMBRE
la Pobreza, para despreciar los bienes caducos de la tierra; Por la señal
la Obediencia, para vivir rendidos y sujetos a tu santa Vo- Acto de contrición y Oración preparatoria.
luntad; la Castidad, para conservar pureza en el cuerpo y
en el espíritu; la Observancia de la Santa Ley, para ajustar- REFLEXIÓN
nos a las obligaciones de nuestro estado; la Mortificación DE LA POBREZA DE SAN DIEGO
interior y exterior, para guarda y defensa de nuestras al- La voluntaria renuncia y desprecio de las cosas del mundo
mas; la Oración y contemplación para conocerte y servirte; es el centro de la Pobreza Evangélica, y tan estrechamente
el Amor divino tuyo, para no amar ni querer otra cosa fue- se abrazó con ella el Bienaventurado San Diego, que mi-
ra de Ti; y por último haznos participantes de los favores rando todas las cosas del mundo como estiércol y basura,
que ejercita nuestro Patrón y en sus devotos, para que to- todos lo veneraban como norma y dechado de la altísima
dos los que nos valemos de su patrocinio, experimentemos pobreza, que inviolable guardó hasta la muerte, pidiendo
con humildes súplicas que lo enterrasen con el saco más
el remedio de todas nuestras necesidades espirituales y
vil y despreciado que hubiera en el Convento: Aprendan
temporales, y en particular lo que deseamos y pedimos en aquí las almas religiosas a desnudarse de todo lo superfluo,
esta Novena: Mira también, Señor, con ojos de misericor- ciñéndose a solo lo necesario, que lo que no lo es, sobra en
dia a tu amada Esposa la Iglesia Santa; quebranta la perfi- la vida y daña en la hora de la muerte; y los que viven en
dia de los herejes, convierte a los infieles al conocimiento el mundo, no peguen el corazón a los bienes terrenos que
de nuestra Santa Fe; dales paz y concordia a los Príncipes se consiguen con trabajo, se poseen con temor, y se pier-
Cristianos, y a todos los pecadores redúcelos a verdadera den con sentimiento.
penitencia, para que sirviéndote y amándote todos en esta Ofrecimiento del día: Repetirás durante el día este punto:
vida, merezcamos gozarte en compañía de San Diego, por «Vestidos pobres de trecho en trecho, son encomiendas de
toda la eternidad de la gloria. Amén. Cristo en un Religioso pecho».
Al fin de esta oración, rezarás tres Credos por las Almas Rezarás tres veces el Padre Nuestro y Ave María gloria-
del Purgatorio, y por los que están en pecado mortal. La dos, y dirás la siguiente Oración:
Oración la dirás todos los días. Oración
Amorosísimo Jesús, Dulce Esposo de nuestras almas, que
siendo poderoso y rico te hiciste pobre por nosotros, na-
℣. Ruega por nosotros, bienaventurado San Diego.
ciendo pobre, viviendo pobre y muriendo pobre, y tan po-
℟. Para que seamos dignos de las promesas de Cristo. bre, que vistiendo al Cielo con nubes, a la tierra con flores
y a los animales con pieles, quisiste morir desnudo en una
Cruz, y teniendo necesidad de un poco de agua, no tuviste
ni una gota de agua para suplir tu necesidad: Por esta su-
ma pobreza y desamparo, y por los méritos del humilde,
pobre y grande imitador tuyo San Diego, te pedimos y su-
plicamos que infundas en nosotros el amor,
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a la Santa Pobreza, el desprecio de las cosas del mundo y DÍA NOVENO - 12 DE NOVIEMBRE
la desnudez de todo afecto terreno, para que renunciándolo Por la señal
todo por tu amor, nos llenemos de las Santas Virtudes, y Acto de contrición y Oración preparatoria.
de las copiosas abundancias de tu gracia. Amén. REFLEXIÓN
DE LOS MILAGROS Y FAVORES QUE HA HECHO
Al fin de esta oración, rezarás tres Credos por las Almas SAN DIEGO
del Purgatorio, y por los que están en pecado mortal. La En su vida fue San Diego un milagro y un prodigio, y des-
Oración la dirás todos los días. pués de su muerte, continuó los prodigios y los milagros.
℣. Ruega por nosotros, bienaventurado San Diego. El príncipe Carlos, hijo del Católico Rey Felipe II, estando
℟. Para que seamos dignos de las promesas de Cristo. casi muerto, con tocar el cuerpo de San Diego recuperó la
salud; tres difuntos consiguieron la vida: los ciegos, los
ORACIÓN enfermos, los paralíticos y otros muchos molestados de
Dios omnipotente y eterno, que por admirable disposición varias enfermedades lograron el remedio. Y son, y han si-
eliges lo débil del mundo para confundir a los fuertes, con- do tantos los favores y milagros que ha hecho San Diego a
cede propicio a nuestra humildad, que por las pías súplicas sus devotos, que la Sata Iglesia afirma que son innumera-
de tu Confesor el bienaventurado San Diego, merezcamos bles. A vista de esta general magnificencia, elige a San
ser sublimados a la gloria perenne en los cielos. Por Jesu- Diego por tu Patrón, y en todas tus necesidades, válete de
cristo Nuestro Señor. Amén. su intercesión poderosa.
En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo. Ofrecimiento del día: Para que te alientes a implorar la pie-
Amén. dad milagrosa de San Diego, te convida la máxima si-
guiente: «Los favores divinos no quiebran la Caridad, an-
tes conservan la unión, devoción y paz».
Rezarás el Rosario de cinco misterios y la Letanía de
Nuestra Señora, y dirás la siguiente Oración:
Oración
Dios, admirable en tus Santos, y particularmente prodigio-
so en el Bienaventurado San Diego, por cuya intercesión
has concedido a los que se valen de su patrocinio las mise-
ricordias a diluvios, y los favores a manos llenas: con todo
rendimiento, postrados ante tu divina Majestad te pedimos
y suplicamos, interponiendo los méritos de nuestro Aboga-
do y Patrón San Diego, que apliques los oídos de tu piedad
hacia nuestros ruegos, y a todos los que hemos ejercitado
esta Novena, concédenos las Virtudes que hemos implora-
do en estos días: la Humildad, para vencer la soberbia; la
Pobreza, para despreciar los bienes caducos de la tierra;
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por cuyos méritos esperamos conseguir el Amor que DÍA TERCERO - 6 DE NOVIEMBRE
deseamos tenerte en esta vida, mientras nos trasladas a Por la señal
nuestra deseada patria, donde te amemos y te gocemos por Acto de contrición y Oración preparatoria.
toda la eternidad. Amén.
REFLEXIÓN
Al fin de esta oración, rezarás tres Credos por las Almas DE LA OBEDIENCIA DE SAN DIEGO
del Purgatorio, y por los que están en pecado mortal. La La Obediencia, como dice San Ambrosio, es el fundamen-
Oración la dirás todos los días. to de las otras virtudes, y en este particular resplandeció
℣. Ruega por nosotros, bienaventurado San Diego. tan admirable nuestro amado San Diego, que reconociendo
℟. Para que seamos dignos de las promesas de Cristo. la suavísima paz que infunde en el alma la Obediencia, con
mucho gusto y amor obedecía en todo porque miraba en
ORACIÓN las voces de los Superiores la voluntad y gusto de Dios:
Dios omnipotente y eterno, que por admirable disposición Saquen de aquí las Almas espirituales una total abnegación
eliges lo débil del mundo para confundir a los fuertes, con- de la propia voluntad, para ir seguras en el camino de la
cede propicio a nuestra humildad, que por las pías súplicas Virtud, y acuérdense de lo que dice el padre Miguel Godí-
de tu Confesor el bienaventurado San Diego, merezcamos nez: «Religioso que de la Obediencia no tiene estimación,
ser sublimados a la gloria perenne en los cielos. Por Jesu- muestra que es falsa, o flaca, su perfección».
cristo Nuestro Señor. Amén.
En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo. Ofrecimiento del día: Ten presente hoy esta sentencia:
Amén. «Espíritu voluntarioso trabaja mucho y merece poco».
Rezarás tres veces el Padre Nuestro y Ave María gloria-
dos, y dirás la siguiente Oración:
Oración
Señor y Dios Omnipotente, que para nuestro ejemplo y
para nuestra imitación empleaste toda tu vida en el mundo
a vivir sujeto y obediente hasta la muerte, haciendo en to-
do la voluntad de tu Eterno Padre: por esta santa y humil-
dísima resignación, y por la rendida sujeción con que te
agradó tanto el glorioso San Diego, imploramos y pedimos
a tu piedad que nos hagas en todo muy obedientes, que nos
asistas para quebrantar en todo nuestra propia voluntad,
para que mirando en los Superiores que nos mandan tu
Santísima voluntad, gusto y agrado, caminemos seguros
por las sendas de la Virtud, hasta verte y gozarte para
siempre en el Cielo. Amén.
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Al fin de esta oración, rezarás tres Credos por las Almas DÍA OCTAVO - 11 DE NOVIEMBRE
del Purgatorio, y por los que están en pecado mortal. La Por la señal
Oración la dirás todos los días. Acto de contrición y Oración preparatoria.
℣. Ruega por nosotros, bienaventurado San Diego. REFLEXIÓN
℟. Para que seamos dignos de las promesas de Cristo. DEL AMOR DE SAN DIEGO
El Amor a Dios no sólo es el fin de la Oración, sino el de
ORACIÓN toda la vida: por la Oración y contemplación logró el Bie-
Dios omnipotente y eterno, que por admirable disposición naventurado San Diego el encenderse en el Amor de Dios
eliges lo débil del mundo para confundir a los fuertes, con- y del prójimo; y es indecible uno y otro amor, lean su vida,
cede propicio a nuestra humildad, que por las pías súplicas y hallarán que en honra y gloria de Dios, y en bien y utili-
de tu Confesor el bienaventurado San Diego, merezcamos dad de los prójimos, se ejercitó nuestro Santo en todas las
ser sublimados a la gloria perenne en los cielos. Por Jesu- obras de caridad, llorando por los pecadores, socorriendo a
cristo Nuestro Señor. Amén. los pobres, curando los enfermos, corroborando y solici-
En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo. tando a los recién convertidos, que por eso se fue a las Is-
Amén. las Canarias, y en fin, fue todo para Dios y sin perder a
Dios de vista, fue todo para todos. Aprende de nuestro
Santo a ejercitarte en el Amor de Dios y del prójimo, pro-
curando la paciencia y la benignidad, venciendo la emula-
ción, y no buscando lo propio tuyo, sino lo que es de la
honra y gloria de Dios, que esos son los principales efectos
de la Caridad.
Las veces que pudieres, repetirás esta Máxima: «Quien
tuviere mucha luz, amará mucho a Jesús, y no huirá de su
Cruz».
Rezarás tres veces el Padre Nuestro y Ave María gloria-
dos, y dirás la siguiente Oración:
Oración
Amantísimo Dios y Señor nuestro, cuya ardiente Caridad
se manifiesta en los beneficios de la Creación, Redención
y Conservación, y en los demás particulares y universales
que cada día recibimos de tu divino amor, nunca pagado ni
correspondido de nuestra proterva ingratitud; porque te
amemos como debemos amarte, infunde en nuestros cora-
zones una centella de tu fervoroso incendio, para que infla-
mado nuestro espíritu, todas nuestras operaciones sean en
tu amor y para tu amor, como lo practicó tu Amantísimo y
devoto San Diego.
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DÍA CUARTO - 7 DE NOVIEMBRE
Jesús, Maestro y director de nuestras almas, que piadoso Por la señal
nos enseñaste el Santo Ejercicio de la Oración, encargán- Acto de contrición y Oración preparatoria.
donos la perseverancia cuando dijiste: «Conviene siempre REFLEXIÓN
orar y no desfallecer», humildemente pedimos por las te- DE LA CASTIDAD DE SAN DIEGO
rribles agonías que padeciste en el Huerto, y por la Ora- La preciosísima Joya de las Virtudes es la Castidad, que
ción prolija que en él ejercitaste, que nos concedas el Don asemeja las almas con los Ángeles, como sucedió con
de la Santa Oración, el trato y comunicación con las cosas nuestro purísimo San Diego, que, mirando la Castidad y
celestiales, como se lo concediste a tu amado Siervo el pureza del corazón como singular ornato de su espíritu, la
Glorioso San Diego, para que apartando el corazón de las conservó de manera que no se le daba otro nombre a su
cosas inferiores y terrenas, nuestra vida sea toda celestial, vida que vida de Ángel, y vida en quien vivía como en su
pensando siempre y meditando en Ti, hasta que merezca- templo el Espíritu Santo. Esta altísima Pureza de cuerpo y
mos contemplar tu belleza y hermosura en la gloria. Amén. espíritu convida y exhorta a las almas para que conserven
intacta la Castidad dedicada y consagrada a Dios, mortifi-
Al fin de esta oración, rezarás tres Credos por las Almas cando los sentidos y huyendo de aquellas ocasiones y con-
del Purgatorio, y por los que están en pecado mortal. La currencias que saben por experiencia les sirven de inquie-
Oración la dirás todos los días. tud y perturbación.
℣. Ruega por nosotros, bienaventurado San Diego. Ofrecimiento del día: «Regalar mucho el cuerpo y guardar
℟. Para que seamos dignos de las promesas de Cristo. Castidad, es juntar las tinieblas con la claridad».
Rezarás tres veces el Padre Nuestro y Ave María gloria-
ORACIÓN dos, y dirás la siguiente Oración:
Dios omnipotente y eterno, que por admirable disposición Oración
eliges lo débil del mundo para confundir a los fuertes, con- Dios Omnipotente, amador de la Castidad, que quisiste ser
cede propicio a nuestra humildad, que por las pías súplicas el Autor de la Escuela de la Pureza, facilitando el uso de
de tu Confesor el bienaventurado San Diego, merezcamos esta virtud cuando bajaste al purísimo vientre de María
ser sublimados a la gloria perenne en los cielos. Por Jesu- Santísima Nuestra Señora, eligiéndola para tu Madre, por
cristo Nuestro Señor. Amén. Virgen; con todo rendimiento te pedimos, interponiendo la
En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo. Inmaculada Pureza de nuestra Patrona María, y los ruegos
Amén. de nuestro purísimo Abogado San Diego, que nos conce-
das los auxilios de tu gracia para que conservemos la vir-
tud de la Castidad en el cuerpo y en el espíritu; aparta de
nosotros todos los vanos e inmundos pensamientos, líbra-
nos de las diabólicas perturbaciones, desnúdanos de todo
afecto terreno;
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Nombre del trabajo
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Para pedidos llame al
que con tanto amor padeciste por nosotros, te pedimos ren- DÍA QUINTO - 8 DE NOVIEMBRE
didamente que nos infundas el espíritu de la mortificación, Por la señal
como se lo concediste al Penitente San Diego, para que Acto de contrición y Oración preparatoria.
lloremos nuestras culpas, castiguemos nuestros pecados, REFLEXIÓN
sintamos nuestra suma ingratitud, y para que imprimamos DE LA OBSERVANCIA RELIGIOSA DE SAN DIEGO
en nuestras almas tu dolorosa Pasión, que nos traiga conti- La vida de un alma Religiosa sin observar los votos y la
nuamente crucificados al mundo, negados a nuestro amor Regla, ni es religiosa ni secular, sino una quimera, o una
propio, y solo vivos para padecer mucho por ti, pues Tú vida monstruosa, como dice San Bernardo, porque quien
quisiste morir por amor nuestro: así sea mediante tu divina así vive, ni es Eclesiástico ni es Lego. El Lego humilde, y
asistencia, y mediante la poderosa actividad de tu gracia. uno de los Religiosos más estrechos y observantes fue San
Amén. Diego, pues en la Religión de la Observancia más estrecha,
Al fin de esta oración, rezarás tres Credos por las Almas olvidado del mundo y embebido sólo en el fin de su Santa
del Purgatorio, y por los que están en pecado mortal. La Vocación, de suerte se aplicó a la guarda de las Constitu-
Oración la dirás todos los días. ciones y Reglas, que, en toda su vida religiosa, ni en un
punto ni en un ápice faltó a ellas. Ápices de la perfección
℣. Ruega por nosotros, bienaventurado San Diego. son los puntos de la Regla, y a quien profesa estado de as-
℟. Para que seamos dignos de las promesas de Cristo. pirar a la perfección, es muy obligatoria de la Regla la Ob-
ORACIÓN servancia. Procure el alma religiosa en todo lo posible de
Dios omnipotente y eterno, que por admirable disposición sus fuerzas, ceñirse a lo que profesó para tener vida verda-
eliges lo débil del mundo para confundir a los fuertes, con- deramente Religiosa; y los que viven en el siglo acaben de
cede propicio a nuestra humildad, que por las pías súplicas entender que sin Observancia de la divina ley no hay sal-
de tu Confesor el bienaventurado San Diego, merezcamos vación.
ser sublimados a la gloria perenne en los cielos. Por Jesu- Ofrecimiento del día: Imprime en tu corazón este versito:
cristo Nuestro Señor. Amén. «El cumplir cada uno con su obligación, es caminar dere-
cho a la perfección».
En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo. Rezarás tres veces el Padre Nuestro y Ave María gloria-
Amén. dos, y dirás la siguiente Oración:
Oración
Jesús Inmenso, que siendo Supremo Legislador, dijiste que
no habías venido a derogar la Ley sino a cumplirla, y qui-
siste para nuestra enseñanza vivir en la tierra sujeto a la
voluntad, preceptos y mandatos de tu Eterno Padre, siendo
la Observancia de sus divinas leyes y la continua medita-
ción de tu Corazón dulcísimo, concédenos, pues eres
Maestro, Regla y guía para la dirección de nuestras con-
ciencias, que siguiendo tus santos consejos, y abrazando la
imitación del Observantísimo San Diego,
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Para pedidos llame al Nombre del trabajo
no nos apartemos un punto de tu Divina Ley, de tus San- DÍA SEXTO - 9 DE NOVIEMBRE
tos Mandamientos, ni del cumplimiento de las Obligacio- Por la señal
nes de nuestro estado, para que de esta suerte guardando Acto de contrición y Oración preparatoria.
en nuestros corazones tus celestiales mandatos, la misma REFLEXIÓN
Santa Observancia nos guíe y dirija al seguro puerto de la DE LA MORTIFICACIÓN DE SAN DIEGO
Eterna Salvación. Amén. La mortificación es escudo con que se defiende y guarda la
vida devota, que como dice el Padre Miguel Godínez en
Al fin de esta oración, rezarás tres Credos por las Almas los Aforismos para los principiantes: «Disciplinas, cilicios
del Purgatorio, y por los que están en pecado mortal. La y aspereza corporal son las primeras alhajas para la vida
Oración la dirás todos los días. espiritual», y en los Aforismos acerca del desamparo aña-
de: «El penitente que se descuida en sus mortificaciones,
℣. Ruega por nosotros, bienaventurado San Diego. aunque tenga muerta la carne tiene vivas las pasiones»; la
℟. Para que seamos dignos de las promesas de Cristo. práctica de estas y otras espirituales Sentencias puede ver
copiada la devoción en el penitente y austerísimo San Die-
ORACIÓN go con ayunos continuos, con continuos cilicios, con áspe-
Dios omnipotente y eterno, que por admirable disposición ras y rigurosas disciplinas, castigaba su cuerpo siendo in-
eliges lo débil del mundo para confundir a los fuertes, con- culpable su vida; y hasta por las culpas ajenas hacía terri-
cede propicio a nuestra humildad, que por las pías súplicas bles penitencias: las que debe ejecutar quien ha ofendido a
de tu Confesor el bienaventurado San Diego, merezcamos Dios mucho, y le ha desagraviado nada o poco, considére-
ser sublimados a la gloria perenne en los cielos. Por Jesu- se despacio, y medítese con atención.
cristo Nuestro Señor. Amén. Ofrecimiento del día: Hoy se tomará disciplina, se usará el
cilicio, y se podrá hacer el ayuno voluntario, no habiendo
En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo. inconveniente, y se tendrá particular cuidado en mortificar
Amén. los sentidos, y en llevar con paciencia cuanto se ofreciere
de tribulaciones.
Mira lo que te dice la Sentencia siguiente: «Sin la escoba
de la Penitencia, raras veces se trae pura y limpia la con-
ciencia».
Rezarás tres veces el Padre Nuestro y Ave María gloria-
dos, y dirás la siguiente Oración:
Oh Pacientísimo Jesús, cuya vida fue un continuado marti-
rio, un perpetuo trabajo y una continua mortificación, des-
de el vientre de María al Pesebre, del Pesebre huyendo a
Egipto, de Egipto a la Peregrinación, de la Peregrinación a
la Pasión, de la Pasión a la Cruz, de la Cruz a la Muerte, y
de la Muerte a la Sepultura. Por esta tu preciosa vida mor-
tificada por los dolores, afrentas, azotes, injurias, oprobios
y martirios
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