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Historia de la profesión
actuarial
Introducción
Una profesión sirve a un propósito público. En
consecuencia, un esbozo de la historia de la profesión
actuarial debe seguir los fines públicos a los que sirven
los actuarios al aplicar su ciencia básica.
La constitución en Londres, en 1762, de la Society
for Equitable Assurances on Lives and Survivorships
(Sociedad de Seguros Equitativos de Vida y
Supervivencia) como mutua, inició un proceso que
creó un fin público para los actuarios. Una mutua de
seguros es propiedad de sus asegurados y opera en su
beneficio. Los asegurados participan en los beneficios
de la empresa a través de los dividendos de sus
pólizas. Ogborn [1] ha escrito una historia exhaustiva
de Equitable.
Debido a la naturaleza a largo plazo de la mayoría
de las pólizas de seguros de vida, la estimación del
beneficio del ejercicio de una mutua de seguros de
vida implica algo más que contar el efectivo en caja.
La estimación requiere una valoración de los pasivos
contingentes que implican futuros pagos de
prestaciones menos futuros pagos de primas, que
pueden no realizarse como pagos en efectivo durante
muchos años. La estimación resultante del valor de los
pasivos futuros debe restarse de una estimación del
valor de los activos. La existencia de valores de
mercado puede ayudar a la valoración de los activos,
pero ésta también implica asignar una cifra al valor de
los futuros pagos inciertos. La diferencia entre los
valores estimados del activo y del pasivo es una
estimación del superávit. El aumento del excedente
estimado puede considerarse como una estimación
inicial del beneficio periódico y como punto de partida
en la determinación de los dividendos de las pólizas.
Sin embargo, los flujos de caja futuros derivados de
los activos poseídos y de los pasivos de seguro
adeudados son aleatorios. Para proporcionar una
probabilidad adecuadamente alta de que las promesas
incluidas en los contratos de seguro puedan cumplirse,
la estimación inicial del beneficio que podría pagarse
como dividendos puede reducirse a lo que se
denomina superávit divisible. De este modo se crea la
garantía necesaria del cumplimiento final de los
contratos.
enero de 1843
Reproducido de la Encyclopedia of Actuarial Science.
© John Wiley & Sons, Ltd, 2004.
Las hipótesis utilizadas en el proceso de valoración
de los activos y pasivos deben seleccionarse
combinando el análisis de la experiencia pasada y un
juicio fundado sobre las tendencias futuras. En los
primeros años de Equitable, hubo que crear el modelo
básico, establecer el sistema de información de apoyo
a la valoración y confirmar las aproximaciones
adecuadas.
El cumplimiento de los contratos es un objetivo
público legítimo. La realización de este objetivo es
una de las justificaciones de la profesión jurídica y del
sistema judicial. En este caso, está en juego el
cumplimiento de los contratos de seguros mutuos.
Estaba claro que la determinación de los dividendos de
las pólizas requería conocimientos técnicos, criterio
empresarial y un compromiso con el cumplimiento
equitativo de los contratos. Estos factores se
combinaron para crear un fundamento de finalidad
pública para la profesión actuarial. Bolnick [2] recoge
parte de esta historia.
La profesión de contable, al igual que la de
actuario, nació a mediados del siglo XIX en Gran
Bretaña. Al principio, sus miembros desempeñaban la
función pública de supervisar las quiebras con el
objetivo de garantizar a los acreedores un trato justo.
Las misiones públicas iniciales de contables y
actuarios estaban relacionadas. Ambas profesiones
buscaban un trato justo para los acreedores o
propietarios parciales de una empresa. Porter [3]
aborda la historia, en cierto modo paralela, de las
profesiones contable y actuarial.
La profesión contable creció para desempeñar
funciones públicas adicionales, como la auditoría de
las cuentas de las empresas públicas. El papel público
de los actuarios también se amplió. En el siglo XIX, la
principal responsabilidad pública pasó a ser la
promoción de la organización de las compañías de
seguros sobre la base de principios científicos.
El segundo cuarto del siglo XIX fue un periodo de
agitación en el sector de los seguros de vida de Gran
Bretaña. Por ejemplo, en 1845, no menos de 47
compañías estaban registradas provisionalmente para
trans- actuar en el negocio de los seguros de vida y, de
éstas, ninguna existía en 1887. La colección de
historias sobre operaciones turbias de seguros reunida
por un Comité Selecto del Parlamento sobre
Sociedades Anónimas tuvo incluso un impacto en la
literatura. Al parecer, estos acontecimientos influyeron
en el novelista Charles Dickens, que estaba
escribiendo "Vida y aventuras de Martin Chuzzle-
ingenio '. La novela se publicó por entregas a partir de
a julio de 1844. Cuando Dickens necesitó una empresa
fraudulenta que sirviera de vehículo para el villano de
2 Historia de la profesión
actuarial
la novela, creó la Anglo-Bengalee Disinter- ested Loan
and Life Assurance Company. En esta situación
caótica, algunos actuarios, como ciudadanos de
espíritu público, presionaron persistentemente en favor
de una base científica para la organización y gestión
de las compañías de seguros de vida. Cox y Storr- Best
[4] proporcionan estadísticas sobre la confusión en los
seguros de vida durante este periodo del siglo XIX.
Bu¨hlmann [5], en una llamada a una misión más
amplia para la profesión actuarial, también cubre este
periodo.
La determinación del excedente divisible y el
fomento de los seguros de vida basados en la ciencia
no pusieron fin al desarrollo profesional de los
actuarios. A medida que se ampliaba el ámbito de la
práctica actuarial, también cambiaba la opinión de la
sociedad sobre los atributos de una profesión. Bellis
[6] estudia las definiciones de profesión y su
relevancia para los actuarios.
Definición de profesión
Gordon y Howell [7] enumeran los criterios de una
profesión, que utilizaremos inicialmente para orientar
nuestra revisión. En primer lugar, el ejercicio de una
profesión debe basarse en un conjunto sistemático de
conocimientos de contenido intelectual sustancial y en
el desarrollo de la habilidad personal en la aplicación
de estos conocimientos a casos concretos. En segundo
lugar, deben existir normas de conducta profesional,
que prevalezcan sobre el objetivo del beneficio
personal, y que rijan las relaciones del profesional con
sus clientes y sus colegas. Estos dos criterios
principales han dado lugar en la práctica a otros dos.
Una profesión tiene su propia asociación de miembros,
entre cuyas funciones se encuentran el cumplimiento
de las normas, el avance y la difusión del
conocimiento y, en cierta medida, el control del acceso
a la profesión. Por último, existe una forma prescrita
de acceder a la profesión mediante el cumplimiento de
unas normas mínimas de formación y competencia.
Por lo general, el camino que conduce al ejercicio
profesional pasa por la escuela profesional y está
vigilado por un examen de cualificación".
La profesión actuarial satisface la primera de las
Criterios Gordon y Howell. Este criterio establece la
diferencia fundamental entre la ciencia básica en la
que se basa una profesión y la necesaria aplicación
profesional de esta ciencia. Existe, por ejemplo, una
diferencia entre la profesión médica y la ciencia de la
biología humana.
Sin embargo, el conjunto sistemático de
conocimientos no es invariable a lo largo del tiempo.
Para los actuarios, ha
han cambiado a medida que lo ha hecho el alcance de
los sistemas de seguridad financiera que diseñan y
gestionan. El cuerpo de conocimientos siempre ha
contenido elementos de las ciencias matemáticas, la
economía, el derecho y la gestión empresarial. Cuando
se desarrolló un papel actuarial en el diseño y la
gestión de los sistemas de seguridad social de los
ingresos de vejez, la demografía y la macroeconomía
pasaron a formar parte de este cuerpo sistemático de
conocimientos actuariales. Es evidente que estas
materias desempeñan un papel menor en el diseño y la
gestión de un sistema de seguro de automóvil
individual.
Las normas de conducta profesional de los
actuarios que exigen los segundos criterios de Gordon
y Howell han sido implícitas más que explícitas
durante la mayor parte de la historia de la profesión
actuarial. Por ejemplo, en 1853, en respuesta a una
pregunta del Comité Parlamentario Selecto sobre
Asociaciones de Seguros acerca de la exactitud de los
informes financieros, Samuel Ingall respondió: "Creo
que la mejor seguridad es la honradez de las partes que
los presentan". Ante el mismo Comité, William Farr
aseguró que "los actuarios son caballeros". Porter [3]
describe estas audiencias.
A principios del siglo XXI, la expansión del
alcance y la complejidad de la práctica actuarial, así
como el aumento del número de actuarios, crearon una
situación diferente. Esta expansión hizo difícil
depender únicamente del buen carácter de los
actuarios individuales para definir y promover el
interés público en el diseño y gestión de los sistemas
de seguridad financiera. El desarrollo de códigos de
conducta profesional y normas de práctica actuarial no
ha sido uniforme en todo el mundo. Por ejemplo, en
Estados Unidos, la profesión actuarial cuenta con un
Código Conjunto de Conducta Profesional, Normas de
Cualificación y Normas de Práctica Actuarial. La
situación en Australia, Canadá, Gran Bretaña e Irlanda
es similar.
En general, la profesión actuarial cumple los dos
criterios derivados de una profesión según Gordon y
Howell. Existen organizaciones actuariales en muchas
partes del mundo y, casi de manera uniforme, se
dedican al avance y la difusión del conocimiento e
influyen en el método de acceso a la profesión. Como
se ha indicado anteriormente, la articulación y
aplicación de normas no es una función de todas estas
organizaciones.
El proceso de acceso a la profesión de actuario se
realiza a través de un portal educativo que es objeto de
continuo debate en el seno de la industria actuarial
mundial.

organizaciones actuariales nacionales. La primera de
estas organizaciones, el Instituto de Actuarios, inició
un sistema de exámenes en 1850, sólo dos años
después de la fundación del Instituto. La Actuarial
Society of America se organizó en 1889 y siguió los
pasos del Instituto al iniciar un programa de exámenes
en 1897. La Casualty Actuarial Society se fundó en
Estados Unidos en 1914 y en pocos meses puso en
marcha un sistema de exámenes. En otros países,
especialmente en Europa continental occidental y
América Latina, la realización de un programa
universitario se convirtió en la vía de acceso a la
profesión actuarial. El plan de estudios de estos
programas universitarios estaba, en mayor o menor
medida, influido por la profesión. Cole [8] ofrece una
revisión crítica de estos sistemas educativos y de
exámenes.
Una definición alternativa
La definición detallada y restrictiva de profesión de
Gordon y Howell no se corresponde con la realidad de
la organización de la profesión actuarial en gran parte
del mundo. Sin embargo, el primer elemento de su
definición, la confianza en un cuerpo sistemático de
conocimientos, es casi universal entre las
organizaciones actuariales.
Este hecho, que también es cierto para algunas
otras profesiones, lleva a una definición alternativa y
simplificada. Una profesión es una ocupación o
vocación que requiere estudios avanzados en un
campo especializado.
Bajo la definición alternativa, la existencia de
normas actuariales profesionales puede ser implícita
en lugar de implicar declaraciones formales de normas
y una agencia de aplicación profesional. La entrada en
la práctica actuarial profesional, según la definición
alternativa, puede estar controlada por universidades y
reguladores en lugar de por organizaciones actuariales
profesionales. Sería innecesariamente restrictivo
ignorar la historia de las organizaciones actuariales
profesionales que se ajustan a la definición alternativa
más general.
La profesión actuarial en el Reino Unido, y en los
países con estrechos vínculos culturales con el Reino
Unido, satisface en gran medida la definición de
Gordon y Howell. El desarrollo de la profesión en la
India es un ejemplo de ello. En 1945 se fundó la
Sociedad Actuarial de la India. Los objetivos
declarados de la nueva organización se centraban en el
primer elemento de la definición de Gordon y Howell.
El crecimiento de la Sociedad se vio inhibido por la
nacionalización de
Historia de la profesión actuarial 3
El seguro de vida indio se cerró en 1956. No fue hasta
el año 2000 cuando se autorizó a las empresas
privadas a entrar de nuevo en el negocio de los
seguros de vida. La normativa del nuevo sector exigía
que cada compañía designara a un actuario. Las
responsabilidades del actuario designado consistían en
salvaguardar los intereses públicos definidos en las
operaciones de seguros. Se seguía el modelo de un
dispositivo reglamentario introducido anteriormente
en el Reino Unido.
En Europa continental occidental, en cambio, la
profesión actuarial tiende a satisfacer la definición
alternativa. La práctica de la ciencia actuarial tiende a
estar más regulada por los gobiernos centrales que por
las organizaciones profesionales privadas. El acceso a
la profesión tiende a estar supervisado por
universidades y reguladores con influencia indirecta de
la profesión. Bellis [6] reúne referencias basadas en la
historia política del Reino Unido y de Europa
continental occidental para explicar estas diferencias.
El núcleo de la explicación propuesta es que, tras la
Revolución Francesa, los gobiernos centralizados de
Europa continental occidental tendieron a barrer las
instituciones privadas no sujetas a la soberanía del
pueblo. El Reino Unido no experimentó el cataclismo
revolucionario, y las instituciones privadas no estaban
sujetas a la soberanía del pueblo.
tuciones evolucionaron por caminos diversos.
Un breve estudio de caso sobre la historia de la
profesión actuarial organizada en un país europeo
occidental-continental puede ilustrar estas diferencias.
Examinaremos la historia de Suiza. La estabilidad
política y económica ha contribuido a hacer de Suiza
un centro internacional de banca y seguros. Además,
las contribuciones intelectuales de académicos con
conexiones suizas ayudaron a crear la ciencia
actuarial. La extensa familia Bernoulli es un buen
ejemplo. Jacob Bernoulli contribuyó a la ley de los
grandes números y Daniel Bernoulli sentó las bases de
la teoría de la utilidad.
La Asociación Suiza de Actuarios se fundó en
1905. En 1989, las palabras se permutaron por
Asociación Suiza de Actuarios. A diferencia de lo
que ocurre en el Reino Unido, no se accede a ella
aprobando exámenes. La mayoría de los nuevos
miembros son licenciados en matemáticas con
experiencia práctica.
En Suiza, la función oficial de los actuarios está
relacionada con las pensiones. Una ley de regulación
de los fondos de pensiones, promulgada en 1974,
preveía la formación y cualificación de expertos en
fondos de pensiones. Estos expertos fueron
4 Historia de la profesión
actuarial
encargada de velar por el cumplimiento de los
requisitos legales en materia de pensiones y de
garantizar la seguridad de las prestaciones prometidas.
Desde 1977, la Asociación organiza cursos de
formación y exámenes para la obtención de un
diploma de experto en fondos de pensiones. Esta
a c t i v i d a d es independiente de las
actividades tradicionales de la Asociación.
La historia de la profesión actuarial en el Reino
Unido y en Europa Continental Occidental son
diferentes. Estados Unidos, como ocurre en muchas
cuestiones que implican diferencias culturales, tomó
elementos de ambas tradiciones.
Las profesiones clásicas
Las profesiones clásicas son el derecho, la medicina y
la teología. Las raíces de estas profesiones se
remontan a la Edad Media. Las primeras universidades
europeas tenían facultades separadas dedicadas a cada
una de estas profesiones. La trinidad de estas primeras
profesiones satisface claramente el criterio de Gordon
y Howell. De hecho, los atributos de esta trinidad han
servido para dar forma a la definición de profesión.
Han servido de modelo para otros grupos que se unen
en torno a un cuerpo de conocimientos, útiles para la
sociedad, y que buscan organizar una profesión. La
contabilidad, las ciencias actuariales, la arquitectura, la
odontología, la enfermería y la farmacia son ejemplos
de este proceso. Los objetivos del proceso
organizativo suelen ser servir al público y, tal vez,
promover el interés propio de los miembros de la
profesión.
El desarrollo de las profesiones no fue
independiente de los gremios anteriores. Los gremios
existían en Inglaterra desde el siglo VII. Eran
asociaciones de personas dedicadas a actividades
afines. Su objetivo era regular el acceso a la profesión
mediante un programa de aprendizaje, luchar por un
alto nivel de calidad en el producto o servicio del
gremio y controlar los precios. Se hizo difícil
mantener los gremios cuando, en la era industrial, la
producción se automatizó y dejó de depender de las
habilidades ancestrales. Con el triunfo del libre
mercado, el control privado de la entrada en un gremio
y la gestión de los precios parecieron ser
impedimentos para la eficacia derivada del libre
mercado.
Los siglos XX y XXI han sido poco propicios para
los gremios, y los acontecimientos han alterado, y
probablemente debilitado, la nitidez de la definición
de las profesiones clásicas. Por ejemplo, los
estudiantes de teología se dedican ahora al
asesoramiento, y
gestionar programas de bienestar social y educación,
además de sus deberes eclesiásticos. Los estudiosos
del derecho se han dado cuenta de que, en una época
de regulación empresarial y compleja legislación
fiscal, se ha hecho más difícil identificar la corriente
principal del derecho. Además, multitud de
especialistas en fiscalidad y regulación prestan
servicios estrechamente relacionados con los jurídicos.
Incluso los médicos se encuentran con que sus
actuaciones, antes independientes, se ven limitadas por
los gestores gubernamentales o corporativos de los
planes de salud. Otros especialistas, dedicados a una
enfermedad o a un dispositivo tecnológico concreto,
también forman parte de los equipos sanitarios.
Historia de las organizaciones actuariales
El nacimiento de la profesión actuarial puede fijarse
conve- nientemente en 1848. Ese año se creó en
Londres el Instituto de Actuarios. La Facultad de
Actuarios de Edimburgo le siguió en 1856. La Gran
Bretaña victoriana ofrecía un entorno favorable para el
desarrollo de las profesiones. La idea de agrupaciones
profesionales para proteger el interés público estaba en
el aire. En 1853, Gran Bretaña empezó a utilizar
oposiciones para acceder a la función pública. El
objetivo, tanto en la función pública como en las
profesiones privadas, era establecer normas objetivas
para el ingreso y mejorar y estandarizar la calidad de
los ingresados.
El desarrollo de la profesión actuarial en Canadá y
Estados Unidos siguió el camino trazado por el
Instituto y la Facultad. No obstante, hubo desviaciones
relacionadas con la adopción de elementos tanto del
Reino Unido como de las tradiciones de Europa
continental occidental. Esta evolución se describirá en
parte por el gran tamaño de las organizaciones
profesionales de Canadá y Estados Unidos, así como
por la interesante mezcla de t r a d i c i o n e s . En 1889
se fundó la American Society of Actuaries, con
miembros tanto en Canadá como en Estados Unidos.
En 1909 se creó el Instituto Americano de Actuarios.
Sus miembros iniciales procedían en su mayoría del
oeste de los Apalaches. La motivación de la nueva
organización fue en parte regional y en parte un
conflicto sobre la idoneidad de los métodos
preliminares de valoración a plazo en los seguros de
vida. La Sociedad y el Instituto Americano se
fusionaron en 1949 para formar la Sociedad de
Actuarios. Moorhead
[9] ha escrito extensamente sobre la historia de las
organizaciones actuariales en Estados Unidos y
Canadá.

La tercera organización actuarial profesional que
surgió en Estados Unidos tuvo raíces diferentes. La
respuesta pública al creciente coste humano de los
accidentes laborales fue la promulgación, por parte de
muchos estados y provincias, de leyes de
compensación a los trabajadores. Estas leyes
responsabilizaban a los empresarios de los accidentes
laborales. Estas leyes se promulgaron alrededor de
1910. La nueva responsabilidad de los empresarios se
gestionó mediante un seguro de indemnización de
los trabajadores. Este seguro se convirtió,
dependiendo del estado o provincia, en un requisito
legal o al menos práctico para los empresarios. Tenía
características tanto de seguro colectivo como de
seguro social, y sus fundamentos jurídicos y sociales
eran diferentes de los del seguro de vida individual. En
1914 se creó la Casualty Actuarial and Statistical
Society of America. Surgió del Comité Estadístico de
la Oficina de Servicios de Indemnización de los
Trabajadores. El primer presidente fue Isaac
Rubinov, pionero de los seguros sociales. El nombre
de la organización se acortó a Casu- alty Actuarial
Society en 1921.
En 1965 se crearon la Academia Americana de
Actuarios (AAA) y el Instituto Canadiense de
Actuarios (CIA). El CIA se creó en virtud de una ley
del Parlamento canadiense. Los miembros del CIA
pronto se reorganizaron en la legislación federal y
provincial sobre seguros y pensiones. Chambers [10]
describe la historia del CIA y su reconocimiento en la
legislación.
La AAA tuvo una génesis algo diferente. Se
organizó como una corporación sin ánimo de lucro,
una organización paraguas para los actuarios de
Estados Unidos. Su misión era la interfaz pública, las
normas profesionales y la disciplina.
El modelo británico influyó en la organización de
la profesión actuarial en toda la Commonwealth.
Como se ha indicado anteriormente, el camino seguido
en Europa Occidental Conti- nental fue algo diferente.
Por ejemplo, en Alemania, desde 1860, un grupo de
matemáticos se reunía regularmente para discutir
problemas relacionados con los seguros. Bu¨hlmann
[5] resume parte de esta historia.
La fundación de organizaciones actuariales
nacionales suele estar asociada a grandes
acontecimientos políticos y económicos. La apertura
de Japón al comercio mundial en el siglo XIX está
relacionada con la fundación del Instituto de
Actuarios de Japón en 1899. El final de la fase del
Pacífico de la Segunda Guerra Mundial ayuda a crear
los cimientos de la Asociación Actuarial Coreana en
1963 y de la Sociedad Actuarial de Filipinas en
1953.
Historia de la profesión actuarial 5
El final de la Guerra Fría, hacia 1990, fue un
acontecimiento político de importancia cósmica.
También provocó una onda expansiva en las
organizaciones actuariales de todo el mundo. Se
crearon nuevas organizaciones actuariales nacionales
en respuesta a la necesidad práctica de personas con
conocimientos técnicos para organizar y gestionar
compañías de seguros privadas. Algunos ejemplos de
países de Europa del Este y las fechas de organización
de su nuevo grupo actuarial son: Bielorrusia (1995),
Croacia (1996) (véase Asociación Actuarial Croata),
Letonia (1997) (véase Asociación Actuarial Letona),
Lituania (1996), Polonia (1991) (véase Polskie
Stowarzyszenie Aktuariuszy), Rusia (1994) (véase
Rusia) y República Eslovaca (1995) (véase Sociedad
Eslovaca de Actuarios). Greb [11] escribió sobre los
primeros 50 años de la Sociedad de Actuarios, pero en
las páginas 258 y 259 se enumeran las organizaciones
actuariales nacionales del mundo por orden de
creación.
Los actuarios como instrumentos de
regulación
En la última mitad del siglo XX crecieron el tamaño,
la complejidad y la importancia económica de los
sistemas de seguridad financiera diseñados y
gestionados por actuarios. Muchos de estos sistemas,
como las compañías de seguros y los planes de
pensiones, eran empresas reguladas. El aumento de
tamaño y complejidad dejó un vacío en la estructura
reguladora existente. Resultaba difícil recoger en una
ley o reglamento todos los aspectos de interés público
de estos sistemas de seguridad financiera.
Una alternativa a una r e g u l a c i ó n aún más
detallada, con el consiguiente retraso en las
innovaciones, era recurrir a la profesión actuarial para
controlar el cumplimiento de los objetivos generales.
Esta alternativa parecía estar en consonancia con el
estatus profesional de los actuarios. En muchos
sentidos, la alternativa era paralela a la asignación (en
Estados Unidos y algunos otros países) de la
formulación de normas de información financiera y la
supervisión de su cumplimiento a la profesión
contable privada. Este movimiento no estuvo exento
de problemas, pero elevó el propósito público de la
profesión actuarial de ser un eslogan a ser una
realidad.
En la siguiente lista figuran ejemplos de funciones
más directas de los actuarios que trabajan en el sector
privado en el ámbito de la regulación. La lista no es
exhaustiva.
• Canadá, Actuario de Valoración. En 1977, una
modificación de la legislación federal sobre seguros
obligó a las compañías de seguros de vida a designar
un actuario tasador.
6 Historia de la profesión
actuarial
al que se le concedió un mayor margen de juicio
profesional que en el pasado a la hora de seleccionar
las hipótesis de valoración. Chambers [10] analiza esta
evolución.
• Noruega, Actuario autorizado. En 1911 se
promulgó una ley que obligaba a designar un actuario
autorizado para cada compañía de seguros de vida. En
1990,
este requisito se amplió a las compañías de seguros no
de vida. Estos requisitos son independientes de la
Sociedad Actuarial Noruega.
• Reino Unido, nombrado actuario. Este
nombramiento fue aprobado por ley en 1973. El
Actuario designado debe supervisar continuamente la
posicio
de la compañía de seguros asignada. Gemmell y Kaye
[12] analizan algunos aspectos de las
responsabilidades de los actuarios designados. Los
deberes y las cualificaciones derivadas para los
Actuarios Designados fueron desarrollados en gran
parte por las dos organizaciones actuariales
profesionales del Reino Unido.
• Estados Unidos, Enrolled Actuary. La Employee
Retirement Income Security Act (ERISA) de 1974
creó el cargo de Enrolled Actuary. La de- signación es
conferida por el Joint Board for
el Enrollment of Actuaries, una agencia del gobierno
federal, en lugar de una organización actuarial privada.
Los Enrolled Actuaries se encargan de informar sobre
el cumplimiento de los planes de pensiones de
prestación definida con el requisito de financiación de
ERISA y de certificar la razonabilidad de la valoración
actuarial. Grubbs [13] analiza el papel público de los
actuarios en las pensiones en Estados Unidos.
• Actuario designado. Este cargo fue creado por las
enmiendas de 1990 de la Asociación Nacional de
Comisarios de Seguros (NAIC) a la ley de valoración
estándar. El Actuario designado es responsable de
garantizar que las valoraciones de las pólizas se realicen
de acuerdo con las normas de la NAIC.
que todas las prestaciones proporcionadas por los
contratos de seguros cuenten con las reservas
adecuadas.
• Actuario de ilustración. Este puesto dentro de cada
compañía de seguros de vida fue creado por el
Reglamento de Ilustración de Seguros de Vida de la
NAIC de 1995. La regulación fue en respuesta al uso
de las ventas de seguros de vida
ilustraciones que parecían divorciadas de la realidad.
La normativa aportó disciplina a la ilustración de
ventas de seguros de vida. Se asignó al Actuario de
Ilustración la tarea de mantener las ilustraciones
ancladas en la realidad. Lautzenheiser, en una
entrevista con Hickman y Heacox [14], describe estas
funciones actuariales de los profesionales del seguro
de vida.
Estas delegaciones de responsabilidades reguladoras a
los actuarios en el empleo privado han creado
cuestiones éticas complejas y una necesidad de
orientación en el desempeño de los nuevos deberes. En
muchos casos, las organizaciones actuariales
nacionales han publicado normas o guías para llevar a
cabo las nuevas responsabilidades.
Factores que influyen en el futuro
La profesión actuarial ha superado su
sesquicentenario. No es posible predecir con certeza el
curso futuro de la profesión. Se pueden identificar las
fuerzas que afectarán a ese curso.
• Globalización de los negocios. Algunas barreras
culturales y políticas pueden impedir esta tendencia.
No obstante, poderosas fuerzas económicas están
atacando los muros que han compartimentado la
actividad empresarial y
están cayendo. La profesión actuarial se ha
beneficiado de un mecanismo para crear una profesión
mundial al servicio de las empresas de todo el mundo.
El primer Congreso Internacional de Actuarios (ICA)
se celebró en Bruselas en 1895. Desde entonces se han
venido celebrando periódicamente, salvo
cancelaciones por motivos bélicos. El ICA de 2002 se
celebró en Cancún, México. Estos Congresos están
organizados por la Asociación Internacional de
Actuarios (IAA). Originalmente, la AIA tenía
miembros individuales y realizaba actividades para
promover la profesión actuarial, pero la actividad
principal era la promoción de las ACI. En 1998, la
AIA cambió. Se convirtió en una organización
internacional de organizaciones actuariales nacionales.
Las ACIs periÓdicas siguen siendo una función de la
I A A , pero proporcionar una plataforma para que los
actuarios sean una fuerza en la nueva economía global
también se convirtió en algo importante. La
plataforma podría permitir a los actuarios estar
representados en actividades de organizaciones
económicas internacionales como el Fondo Monetario
Internacional o el Banco Mundial. La creación de una
norma internacional para la formación básica de
actuarios es otro proyecto de la IAA.
Una excelente ilustración de la dimensión
internacional de la práctica empresarial es la
Declaración de principios - Contratos de seguros
emitida por el Consejo Inter- nacional de Normas de
Contabilidad. La declaración existía en forma de
borrador en 2002. El impacto de la Norma
Internacional de Contabilidad (NIC) 39 asociada
será directo en la Unión Europea en 2005. La NIC 39
se refiere a los instrumentos financieros y la medición.
Los contratos de seguros están excluidos de su ámbito
de aplicación, pero sus disposiciones cubren la
contabilidad de los mismos.

tratamiento de los activos invertidos de las empresas
de seguros. Las ondas resultantes se dejarán sentir en
todo el mundo. Es obvio que los actuarios tienen un
interés profesional en la información financiera de los
contratos de seguros y deben organizarse para influir
en esta evolución. Gutterman [15] describe los
movimientos internacionales en la información
financiera.
• Ampliación de los conocimientos. El notable
crecimiento de la teoría de la economía financiera
desde el artículo de Markowitz de 1952 [16] sobre la
teoría de la cartera, y la aplicación igualmente rápida
de la teoría a los mercados financieros, han contribuido a
la expansión del conocimiento.
La gestión del riesgo financiero ha tenido un profundo
impacto en la práctica actuarial. Los desarrollos
originales vinieron de fuera de la ciencia actuarial.
Como resultado, los actuarios tuvieron que ponerse al
día para incorporar estas nuevas ideas a sus prácticas.
El entusiasmo de estas nuevas ideas también atrajo a
un gran número de jóvenes brillantes al campo de la
gestión del riesgo financiero. Estos jóvenes no
subieron por la escalera actuarial. Captar y retener el
liderazgo intelectual es el paso más importante para
promover la prosperidad de la profesión actuarial.
• Formación continua. Las organizaciones
actuariales de todo el mundo han invertido una energía
considerable en el desarrollo de un portal educativo
para acceder a la profesión. Debido al rápido ritmo de
los negocios y
A pesar de los cambios tecnológicos, también es un
reto desarrollar programas de formación continua. Un
actuario ya no puede pasar toda su vida laboral
aplicando los conocimientos adquiridos en el proceso
de acceso a la profesión.
• Resolución de conflictos entre responsabilidades
privadas y públicas. La asignación a los actuarios con
empleo pri- vado de la responsabilidad de vigilar el
cumplimiento de los objetivos normativos es una
compli-
a la profesión. No obstante, hay que hacer frente a los
inevitables conflictos que surgen al servir a dos
señores. Las normas, la orientación y los
procedimientos disciplinarios, construidos sobre una
base ética, serán necesarios si una profesión privada
sirve a un propósito regulador. La crisis de la
profesión contable en Estados Unidos en 2002, como
consecuencia de los informes financieros engañosos
de algunas grandes empresas, ilustra la cuestión. Es
probable que la supervivencia y prosperidad de la
profesión actuarial dependa de su credibilidad a la
hora de proporcionar i n f o r m a c i ó n sobre los
sistemas de seguridad financiera a sus miembros,
directivos y reguladores.
Historia de la profesión actuarial 7
Referencias
[1] Ogborn, M.E. (1962). Equitable Assurances: The Story of
Life Assurance in the Experience of the Equi- table Life
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(Véase también Actuario; Historia de la formación
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Profesionalismo; Historia de la ciencia actuarial)
JAMES HICKMAN