Tu amor ha llenado mi ser
Tú me has dado tanto,
Tanto que, ya no podría dudar más nunca de tu
amor
Me estaba hundiendo, pero no me ahogué
Pasé por fuego y no me queme
Porque tú estabas a mi lado mi Señor.
En tu misericordia y tu verdad
Envolviste mi vida,
Cautivando mi existir
Te diste sin reparo por salvarme a mí
Me valoraste tanto
Que siendo tú san santo
Llevaste mi pecado en tí
Dejaste tu trono, dejaste tu reino
Dejaste tu gloria, pa' venir aquí
Renunciaste a todo,
Sin que nada a cambio pudiera
Entregarte por amarme a mí
No te importó nada porque tu mirada
Ya tú la habías puesto en cumplir tu misión
Viviste en la tierra mostrando tu amor.
Hacia los perdidos fue tu compasión
Y al menesteroso diste tu mirar
Durante ese tiempo que estuviste aquí
Enseñaste la bendición de vivir
Agradando a nuestro padre celestial.
Tu amor es algo sin igual, es lo más puro no se
puede comparar
Como tu amor, solamente existe tu amor.
Ni las montañas, ni la inmensidad del mar,
Ni un firmamento de apariencia celestial,
Llegan a ser como tu amor, ¡Ay mi señor!
Y tú lo diste todo en esa cruz,
Desde allí me miraste con ternura y compasión.
Te diste en sacrificio sólo por amor, pagaste con
tu sangre.
Con tu preciosa sangre.
Mis pecados mi Jesús
Dejaste tu trono, dejaste tu reino
Dejaste tu gloria, pa' venir aquí
Renunciaste a todo,
Sin que nada a cambio pudiera
Entregarte por amarme a mí
No te importó nada porque tu mirada
Ya tú la habías puesto en cumplir tu misión
Viviste en la tierra mostrando tu amor.
Hacia los perdidos fue tu compasión
Y al menesteroso diste tu mirar.
Durante ese tiempo que estuviste aquí
Enseñaste la bendición de vivir
Agradando a nuestro padre celestial.
Tu amor ha llenado mi ser
Tú me has dado tanto,
Tanto que, ya no podría dudar más nunca de tu
amor
Me estaba hundiendo, pero no me ahogué
Pasé por fuego y no me queme
Porque tú estabas a mi lado mi Señor.
En tu misericordia y tu verdad
Envolviste mi vida,
Cautivando mi existir
Te diste sin reparo por salvarme a mí
Me valoraste tanto
Que siendo tú san santo
Llevaste mi pecado en tí
Dejaste tu trono, dejaste tu reino
Dejaste tu gloria, pa' venir aquí
Renunciaste a todo,
Sin que nada a cambio pudiera
Entregarte por amarme a mí
No te importó nada porque tu mirada
Ya tú la habías puesto en cumplir tu misión
Viviste en la tierra mostrando tu amor.
Hacia los perdidos fue tu compasión
Y al menesteroso diste tu mirar
Durante ese tiempo que estuviste aquí
Enseñaste la bendición de vivir
Agradando a nuestro padre celestial.
Tu amor es algo sin igual, es lo más puro no se
puede comparar
Como tu amor, solamente existe tu amor.
Ni las montañas, ni la inmensidad del mar,
Ni un firmamento de apariencia celestial,
Llegan a ser como tu amor, ¡Ay mi señor!
Y tú lo diste todo en esa cruz,
Desde allí me miraste con ternura y compasión.
Te diste en sacrificio sólo por amor, pagaste con
tu sangre.
Con tu preciosa sangre.
Mis pecados mi Jesús
Dejaste tu trono, dejaste tu reino
Dejaste tu gloria, pa' venir aquí
Renunciaste a todo,
Sin que nada a cambio pudiera
Entregarte por amarme a mí
No te importó nada porque tu mirada
Ya tú la habías puesto en cumplir tu misión
Viviste en la tierra mostrando tu amor.
Hacia los perdidos fue tu compasión
Y al menesteroso diste tu mirar.
Durante ese tiempo que estuviste aquí
Enseñaste la bendición de vivir
Agradando a nuestro padre celestial.