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MANIFIESTO MUJERES MIGRANTES Y REFUGIADAS FORO FEMINISTA DE LA XV CONFERENCIA

REGIONAL SOBRE LA MUJER EN AMERICA LATINA Y EL CARIBE, CEPAL

Las mujeres migrantes y refugiadas expresamos nuestra disconformidad a la forma, contenidos

y tanto así a la metodología del evento. Hemos concluído que no nos sentimos representadas

por quienes hablaron por nosotras, sin nosotras porque somos parte de la región de

Latinoamérica y el Caribe y los feminismos varían de un lugar a otro.

Sostenemos, además, que los feminismos abordan una complejidad y desigualdad en los temas

abordados en este Foro Feminista de la sociedad civil, llevado a cabo el día 7 de noviembre de

2022, que no manifiestan la verdadera realidad de las mujeres migrantes y refugiades, desde la

perspectiva de derechos humanos en el ámbito regional. Así mismo manifestamos que la

migración y refugio no solo se puede tratar desde lo transversal sino desde lo interseccional y

multicultural.

De este modo, cuestionamos: ¿Cómo se puede hablar de cuidados, cuando nosotras como

género migrante hemos sido y somos abandonadas por este sistema heteropatriarcal

comenzando desde los núcleos sociales más pequeños, hasta los más grandes, como lo son los

Estados Nacionales?

En un Foro Regional sobre la mujer en América Latina y el Caribe, se esperaría encontrar mayor

sororidad destinada a las mujeres con mayor vulneración de derechos, como aquellas

pertenecientes a los pueblos indígenas, afrodescendientes, trans/travestis y migrantes, porque

no somos una sociedad uniforme ni armónica en donde lo que resulta para las unas, resulta

para las otras, en este caso: NOSOTRES.

Así, expresamos a continuación las siguientes violencias no resueltas en la Región

conjuntamente con sus posibles soluciones:


1. Regularización con perspectiva de género sin restricciones.

2. Las mujeres migrantes de Latinoamérica y el Caribe sufren violencia doméstica. La

cultura patriarcal y la hetero-cis-normatividad son incluso mucho más fuertes en estos

sectores de la población. Es sabido que necesitamos apoyo integral, legal y psicológico,

pero muchas veces, éste está ausente. No existe una política social de hogares para

mujeres víctimas de violencia de género que las sostenga en este tipo de

circunstancias, en ausencia de redes de contención. Para hablar de una mujer

migrante en situación de violencia doméstica, hay que pensar que se necesitará ganar

la cantidad de dos sueldos mínimos básicos para lograr su independencia, cubrir sus

gastos y no caer en situaciones deshumanizantes como ocurre cuando una se ve

obligada a tener que vivir en la calle.

3. Los convenios nacionales e internacionales para personas en búsqueda de refugio no

son meramente respetados porque dependen de los gobiernos de turno. Son miles las

mujeres adultas, niñas y adolescentes refugiadas por diferentes motivos como la

persecución política, Lgtbiqa-fobias, crimen organizado, trata, etc. traducidas en

distintas y extremas formas de violencias; por lo que se necesita que la aplicación de la

normativa de refugio sea cumplida y respetada.

4. Violencias en ámbitos como la salud, educación y jurídica. Muchas migrantes somos

víctmias de discriminación y como consecuencia de ello, nos enfrentamos a barreras

geográficas, económicas, administrativas y simbólicas para el acceso a estos derechos y

nos encontramos en estado de peregrinación de derechos, incluso en países en los

cuales las constituciones nacionales sostienen que es obligación que los Estados

otorguen el acceso a los mismos. De este modo, solicitamos que se articulen áreas de

trabajo , de bienestar y desarrollo social, jurídico y cultural para que se expandan las

oportunidades de derechos.
5. No somos ajenas a las violencias dentro del trabajo formal1, muchas encuentran una

salida de supervivencia en condiciones con mayor desprotección y precarización del

trabajo en los modelos más informales de la economía, como la clandestinidad, las

changas, la prostitución y el cuentapropismo. Tampoco encontramos acompañamiento

para sostener nuestros roles como trabajadoras y cuidadoras de nuestros hogares y

familias en el ambiente migrante.2 Estos problemas afectan nuestras vidas, nuestras

familias, nuestras comunidades y además de tener efectos en los países de residencia,

también enferman nuestros cuerpos tanto física como espiritual y mentalmente.

6. Trámites burocráticos, convalidaciones y validaciones de títulos y documentación

requerida para poder acceder a los derechos de educación y trabajo. Privilegios vs.

Derechos.3 Necesidad de un registro de títulos a nivel regional, un cambio de

paradigma.

7. Hay una política segmentada, beneficiando una política, una sobre otra, rompiendo el

orden de los DDHH. Existe un sesgo en cuanto al apoyo destinado a las organizaciones

migrantes: no es equitativa, no se ayuda a todas las nacionalidades migrantes por igual.

8. No se está cumpliendo con los derechos de niños, niñas y adolescentes, apoyada por la

Convención de Costa Rica, no se están respetando las infancias migrantes en su

regularización migratoria y tampoco se las acompaña para sus vivencias en el nuevo

lugar de residencia sea más sano y contenedor.4

9. Discriminación y sus diferentes caras. El discurso de los medios hegemónicos a la

construcción de los estereotipos, prejuicios, discriminaciones, estigmatización y

monopolización hacia la población migrante Latinoamericana, llegando a casos

1
Durante el 2002, la OIT y la ONU expresaron en un documento la necesidad de generar estrategias para
la protección social de la salud.
2
Muchos niños quedan al abandono porque las madres y los padres salen a trabajar, y estos quedan en
casa, al riesgo de caer en redes de venta de drogas.
3
Es fundamental destacar que este abandono ocurre con los gobiernos de los países donde residimos y
también en las Embajadas y Consulados.
4
Un ejemplo de ello es la alimentación en las escuelas y los horarios de la siesta. Hay niñeces que sufren
el impacto migratorio en cuestiones sencillas pero para ellos, éste cambio es significativo.
extremos a partir de la repetición de producciones periodísticas con tendencia

sensacionalista y negativa.5 En este sentido, se deberían reforzar las metodologías para

que se desmitifiquen accionares en torno a la migración y se desarrollen leyes de

medios que protejan las niñeces y adolescencias migrantes.

10. La necesidad de una sola ciudadanía Latinoamericana y el Caribe, que no represente

una barrera al acceso a los DDHH. Una frontera no debería ser motivo para que se

respete a una mujer migrante, ni para que ésta sea víctima de barreras xenofóbicas y/o

pensamientos marginalistas, mucho menos desde personas de nuestra propia región

que históricamente ha sufrido las violencias más extremas y deshumanizantes desde

otros Estados Nacionales de otras regiones. “Somos todes hijes de Toussaint y llevamos

su legado”.

11. Las economías feministas son distintas en cada país y deberían ser trabajadas de modo

tal, que los diferentes roles de las mujeres sean tomados en cuenta6 y no sigan

pasando desapercibidas bajo la excusa de que estamos destinadas a ello porque

nacimos con útero. Esto va muy de la mano con las estadísticas que demuestran que

existe una feminización de la pobreza.7

12. La existencia de aporofobia en los trámites migratorios, destacando además que

muchas embajadas cobran los aranceles consulares en dólares en países donde

conseguir dólares es difícil y se hacen de la vista gorda y discriminan a quienes no

tienen dinero para pagar el trámite.

13. Paridad de género en cuanto a violencias, en casos de países que hay y no se cumple.

La necesidad de que las leyes nacionales e internacionales que apoyan a las mujeres, y

que se cumplan.

5
Aún las personas destacan la nacionalidad cuando se trata de hablar de situaciones negativas. Por
ejemplo, el ladrón peruano, venezolano.
6
Muchas mujeres desconocen aún términos de la economía feminista, que la pobreza es femenina, por
ejemplo.
7
Las mujeres migrantes también queremos ser parte de los objetivos del milenio manifestados por la
ONU en el 2000: Erradicar la pobreza en el mundo y respetar la dignidad humana.
14. Políticas estatales para combatir las diversas violencias contra las mujeres migrantes y

refugiadas.

15. La salud mental de las migrantes no se toma en consideración, que sufre un desarraigo

y problemas en su adaptación en ambientes de alta discriminación e incertidumbre. Al

no poseer un lugar seguro, o trabajo tienden a sufrir mayores niveles de ansiedad.

16. Los allanamientos irregulares son una práctica utilizada en algunos países por sesgos

discriminatorios, sumando muchas veces inocentes a las cárceles.

Para concluir, son urgentes: equidad, empoderamiento, acceso a una vida digna, participación,

trabajo socio-comunitario y políticas públicas enfocadas en la población migrante y de

refugiadas. Además, deben ser trabajadas estratégicamente para que nos involucren a todas

las nacionalidades de América Latina y el Caribe, para así poder afirmar que se trata de un

trabajo enfocado en principios éticos feministas de integridad corporal, autonomía, igualdad,

respeto por la diversidad y en el eslogan del Foro: con los feminismos, los cuidados y la vida en

el centro.

Adherimos a este manifiesto, las siguientes organizaciones:

● AMUMRA

● MIGRANTES Y REFUGIADOS DE LA CASA PATRIA GRANDE

● BARRIOS DE A PIE

● SECRETARIA DE TRABAJADORES MIGRANTES

● MUJERES EN DESARROLLO

● APEA

● Central de organizaciones sociales Bolivianas Córdoba Argentina COSBCA

● COVEA

● Asociación indígena de la República Argentina

● Mujeres Migrantes Maltratadas Perú

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