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ELASTICIDAD

CONSIDERACIONES INICIALES

Antes de empezar es importante que tengamos en cuenta


algunas consideraciones. En primera instancia a qué hace
referencia el término técnico económico de “elasticidad”.
En el lenguaje cotidiano le podemos dar el sinónimo de
sensibilidad. Lo que vamos a tratar de hacer es medir qué
tan sensibles (o poco sensibles) son algunas variables
económicas frente a variaciones en otras variables que se
relacionen con la primera. Vamos a caracterizar de
inelástico a aquellas variables poco sensibles y de elásticas
a aquellas que tengan una alta sensibilidad al cambio en la
otra variable.
CONSIDERACIONES INICIALES

Además hay que tener en cuenta otras tres cuestiones importantes:


- Estaremos realizando un análisis ceteris paribus, es decir, dejando todas
las variables que no sean las de análisis, constantes. Por ejemplo, cuando
analicemos qué tan sensibles son las cantidades demandadas frente a un
cambio en precio, el resto de las variables que determinan la demanda del
bien (por ejemplo los ingresos de la población, los impuestos, la moda,
etc.) quedarán fijas. Así también, se asume que el nivel de precios del
resto de los bienes se mantiene constante en términos relativos, es decir,
que se trata de una economía sin inflación o, en el caso de ser una
economía inflacionaria como la actual Argentina, se mantiene el nivel de
precios relativos de los bienes y servicios de toda la economía. Les hago
hincapié en que los cálculos de elasticidad presuponen que sólo hay
cambios en las dos variables bajo análisis, mientras que el resto de las
variables permanecen constantes.
CONSIDERACIONES INICIALES

- Otra cosa que hay que tener en cuenta, que se relaciona con la
anterior, es que estaremos realizando un análisis de estática
comparativa, es decir contrastaremos dos momentos distintos. Es como
ver dos fotos de dos momentos diferentes sin descomponer qué pasó en
el medio de esos momentos. Por ejemplo, cuando queramos calcular
qué tan sensibles son las cantidades demandas de un bien cuando su
precio sube de $10 a $15, no estaremos analizando todos los infinitos
puntos intermedios que hay entre los números 10 y 15. Cuando vayan
avanzando en carreras de las ciencias económicas, verán que, si tienen
una función de demanda definida, podrán calcular la elasticidad punto
por punto de dicha demanda. Dado que aún nos faltan herramientas
matemáticas para esto, nos centraremos en el curso en el análisis de
estática comparativa.
CONSIDERACIONES INICIALES

- Por último, hay que tener en cuenta que los análisis serán en términos
porcentuales y no en términos absolutos. Por ejemplo, cuando hablemos
de una suba de precio, nos interesará cuánto subió en términos
porcentuales. Poco nos sirve saber que el bien sufrió un incremento de
$100 si no sabemos el precio original del mismo. Si un alfajor sube de $50
a $150, eso representará un incremento de 200%. Mientras que la misma
suba de $100 en un automóvil de $1.000.000 significará un magro aumento
de 0,01%.
Lo mismo ocurrirá cuando trabajemos con cantidades o ingresos. De poco
nos sirve saber que las ventas aumentaron en mil unidades, si no sabemos
cuántas unidades se estaban vendiendo. Por ejemplo, a Arcor un aumento
de mil unidades vendidas de caramelos le sería insignificante, mientras
que a Ferrari la venta de mil unidades puede ser muy significativa.
ELASTICIDAD-PRECIO DE LA DEMANDA

Lo que trataremos de hacer en este apartado es medir qué tan sensibles son las
cantidades demandadas de un bien o servicio, frente a un cambio en el precio del
mismo. Si el precio varía en 1% (ó x%) y las cantidades demandas varían en un
porcentaje mayor al 1% (ó mayor a x%), entonces diremos que dicha demanda es
muy sensible al cambio en el precio, y le daremos el nombre de “demanda
elástica”. Hay que recalcar que frente a un cambio porcentual en el precio, las
cantidades demandas en este caso varían en un porcentaje mayor.
Por el otro lado, si el precio varía en 1% (ó x%) y las cantidades demandas varían
en un porcentaje menor al 1% (ó menor a x%), entonces diremos que dicha
demanda es poco sensible al cambio en el precio, y le daremos el nombre de
“demanda inelástica”.
Por último, si el precio varía en 1% (ó x%) y las cantidades demandas varían en un
porcentaje igual, entonces diremos que dicha demanda es de elasticidad unitaria.
ELASTICIDAD-PRECIO DE LA DEMANDA

Además sabemos de antemano que, por ley de


demanda, frente a una suba del precio (variación
positiva) habrá una caída de las cantidades
demandadas (variación negativa) y viceversa, por lo
que el numerador y denominador siempre tendrán
signos diferentes y el resultado será siempre un
número negativo. Por convención, tomaremos el
módulo de dicho resultado, es decir, el valor positivo.
ELASTICIDAD-PRECIO DE LA DEMANDA
Cuando el cálculo de elasticidad-precio nos dé un resultado mayor a 1, diremos que se trata de una
demanda elástica. Cuando sea menor a 1 será inelástica; y cuando el resultado sea igual a 1, se tratará
de una demanda con elasticidad unitaria.
Son varios los factores que pueden incidir en la elasticidad-precio de la demanda. Para enumerar a los
más relevantes, tenemos:
- Tipo de bien o necesidad que cubren: las demandas de bienes muy necesarios como el alimento, los
medicamentos, la vestimenta, tienden a ser inelásticas, porque no es fácil renunciar a ellos, incluso
cuando el precio sube. Los bienes y servicios más lujosos, como viajes al exterior, las bebidas
importadas, la ropa de diseñador, son más fáciles de sustituir y tienden a tener una demanda más
elástica.
- Existencia de bienes sustitutos: los bienes que satisfacen una necesidad que puede ser fácilmente
satisfecha por otro bien, es decir que existe un bien que puede sustituirlo, tienden a tener una
demanda más elástica. Aquellos que son más difíciles de sustituir en su consumo por otro, tienden a
tener una demanda más elástica. Las campañas publicitarias en general afectan la elasticidad de la
demanda de un bien al tratar de convencernos de que dicho producto no tiene sustituto, haciéndonos
consumidores menos sensibles al cambio en el precio y aprovechando así a cobrar un mayor precio
perdiendo pocos clientes. Un ejemplo excelente de esto es la campaña de Fernet Branca en el país, ya
que lograron instaurar la concepción de que “Branca es único”.
ELASTICIDAD-PRECIO DE LA DEMANDA
(Continuación)

- Porcentaje de la renta que representa el bien: cuanto mayor sea la proporción del
ingreso gastada en un bien, mayor será la elasticidad. Por ejemplo, un pasaje de avión,
que puede representar un proporción grande de nuestros ingresos, tendrá una alta
sensibilidad a una suba del precio. Si sube un 50%, es probable que mucha gente deje de
comprarlos. Por el otro lado, si hablamos de caramelos en el kiosco, si estos suben su
precio un 50%, al representar poco de nuestros ingresos, es probable que la demanda
caiga poco, haciéndolos un bien con baja elasticidad.
- El tiempo al que se ajusta el análisis: algunos bienes pueden tener una elasticidad
precio de la demanda baja en el corto plazo, pero alta en el largo plazo; y viceversa.
Puede ser el caso de la nafta. Si sube su precio, en el corto plazo no dejaré de usar el
auto y mi demanda de combustible seguirá siendo similar . Pero en el largo plazo puede
ser que decida vender el auto por el alto precio de la nafta y me pase a opciones menos
caras, como una motocicleta o el transporte público.
ELASTICIDAD-PRECIO DE LA DEMANDA (PUNTO)


ELASTICIDAD-PRECIO DE LA DEMANDA (PUNTO)


ELASTICIDAD-PRECIO DE LA DEMANDA (ARCO)


ELASTICIDAD-PRECIO DE LA DEMANDA (ARCO)


ELASTICIDAD-PRECIO DE LA DEMANDA
Si bien la pendiente de la función y la elasticidad son conceptos diferentes, los mismos
guardan cierta relación. A mayor pendiente (en términos absolutos) de la función, más
inelástica tenderá a ser la demanda, llegando al caso extremo de una demanda
perfectamente inelástica cuando ésta es vertical. Por el otro lado, cuando menor sea la
pendiente (en términos absolutos), más elástica tenderá a ser la demanda, llegando al caso
extremo de una demanda perfectamente elástica cuando la misma es horizontal.
ELASTICIDAD CRUZADA DE LA DEMANDA
Hay veces en las cuales nos puede resultar útil medir la sensibilidad que tienen las
cantidades demandadas de un bien, no cuando cambia su precio, sino cuando varía el
precio de un bien que tiene su consumo relacionado con el primero. Por ejemplo hay
bienes que se complementan en su consumo. Puede ser el caso del pan y el dulce de leche,
si es que tenemos el hábito de desayunar o merendar tostadas con dulce de leche. En el
caso de que suba el precio del dulce de leche, lo más probable es que no solamente caigan
las cantidades demandas de este bien, sino que además si dejemos de comprar dulce de
leche, también dejemos de comprar buena parte del pan al que le estaba destinado dicho
dulce de leche. Es decir que dichos bien son complementarios. En estos casos veremos que
hay una relación inversa entre el precio de un bien y las cantidades demandadas de otro
bien (ceteris paribus). Es importante recalcar que en nuestro ejemplo el precio del pan
debe permanecer constante para poder llevar a cabo el cálculo de elasticidad cruzada de
la demanda. Como dijimos, cuando el precio del dulce de leche suba, las cantidades
demandadas de pan disminuirán y cuando el precio del dulce de leche baje, las cantidades
demandadas de pan aumentarán. Frente a la variación positiva del precio del bien A, habrá
una variación negativa de las cantidades del bien B, y viceversa, lo que nos llevará a un
resultado negativo en el cálculo de esta elasticidad cruzada.
ELASTICIDAD CRUZADA DE LA DEMANDA
(Continuación)

Por el otro lado, puede ser que los bienes sean sustitutivos en su consumo, que ambos
satisfagan la misma necesidad y el consumidor deba elegir entre uno u otro. Puede ser el
caso de la carne de pollo y de cerdo. En el caso de que suba el precio del pollo, es
probable que el público deje de comprar unidades de este bien (ley de demanda) y que
deba sustituir su consumo por otro bien que sirva para alimentarse, como puede ser la
carne de cerdo. Entonces cuando suba el precio del pollo, será esperable que aumenten las
cantidades demandas de la carne de cerdo (ceteris paribus, es decir que el precio del
cerdo debe permanecer constante para poder realizar un correcto análisis). Y cuando el
precio del pollo baje, también es esperable que las cantidades demandadas de cerdo
también disminuyan. En este caso tenemos que existe una relación directa entre el precio
del bien A y las cantidades demandadas del bien B: cuando sube el precio del bien A,
aumentan las cantidades demandadas del bien B; y cuando baja el precio del bien A, caen
las cantidades demandas del bien B. Tenemos que ambas variaciones son o positivas o
negativas, llevándonos a que el resultado del cálculo de elasticidad nos dé un resultado
positivo.
ELASTICIDAD CRUZADA DE LA DEMANDA
(Continuación)

Por último tenemos el caso en el cual las demandas de ambos bienes son independientes,
es decir que no están relacionadas. Puede ser el caso del pan y los escritorios. Si me
pregunto cómo influye una suba del precio de los escritorios en la demanda de pan, lo más
probable es no influya en absoluto. Es decir que frente a una variación en el precio de los
escritorios, las cantidades demandadas de pan permanezcan iguales (no habrá variación, la
misma será cero). Esto se verá reflejado en el cálculo de elasticidad con un resultado nulo.
Cuando el resultado del cálculo de elasticidad sea cero, diremos que los bien son
independientes en su consumo.
También hay que notar, para los primeros dos casos, que mientras mayor sea el cálculo
elasticidad (en valor absoluto), mayor será la relación de los bienes, más sustitutivos o
complementarios serán entre sí. Y mientras más cercano a cero sea el resultado, más débil
será la relación entre ambos. Un cálculo de por ejemplo -3 nos dirá que dichos bienes son
más complementarios en su consumo que en el caso que el cálculo dé -0,5.
ELASTICIDAD CRUZADA DE LA DEMANDA

ELASTICIDAD CRUZADA DE LA DEMANDA (PUNTO)


ELASTICIDAD CRUZADA DE LA DEMANDA
(ARCO)

ELASTICIDAD CRUZADA DE LA DEMANDA
(ARCO)

ELASTICIDAD RENTA (O INGRESO) DE LA
DEMANDA
El último caso de elasticidad de la demanda que queremos analizar es el de qué
tan sensibles son las cantidades demandadas de un bien o servicio frente a las
variaciones en los ingresos de los consumidores.
El caso “normal” sería que ambas variables tengan una relación directa, es decir
que cuando aumentan los ingresos de los demandantes, también lo hagan las
cantidades demandadas de la mayoría de los bienes; y cuando la renta caiga,
también bajen las cantidades demandadas de los productos. Por eso, cuando el
cálculo de elasticidad renta de la demanda nos dé un número positivo, querrá
decir que estaremos analizando un bien normal.
Además, podemos dividir a estos bienes normales en dos categorías. En primer
lugar tenemos a aquellos bienes necesarios, cuya demanda será poco sensible al
cambio en los ingresos. Si en el calculo de esta elasticidad llegamos a un valor
entre cero y uno, diremos que se trata de un bien normal y necesario. Ejemplos
de estos pueden ser los medicamentos o la leche.
ELASTICIDAD RENTA (O INGRESO) DE LA
DEMANDA
(Continuación)

Por el otro lado tenemos a los bienes normales cuya demanda presentará una gran
sensibilidad a una variación en los ingresos. Es el caso de los bienes normales de
lujo. Cuando el cálculo de la elasticidad renta de la demanda de un bien dé un
resultado mayor a la unidad, se estará tratando de un bien de lujo. Ejemplos de
esto pueden ser unas vacaciones en el exterior o las joyas.
Por último tenemos el caso de los bienes cuya demanda cae cuando aumenta la
renta y disminuye cuando la renta aumenta. Es decir que existe una relación
negativa entre las variables. Suelen ser bienes que satisfacen la misma necesidad
de otros bienes, pero que poseen menor calidad. A estos bienes y servicios se los
llama inferiores. Cuando el cálculo la elasticidad renta dé un valor negativo se
estará tratando de un bien inferior.

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