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Predicación Obedece, no preguntes y avanza

Alcanzar la meta todos los días es reproducir la imagen de Jesucristo, por eso, necesitamos tanto
de la presencia divina del Espíritu Santo que es lo que hace posible la vida en Cristo. Entonces,
obedece no preguntes y avanza en la vida en Cristo, que es permanecer en Él, por eso, cada vez
que queramos avanzar debemos: obedecer, no preguntar y avanzar (porque nunca vamos a
entender) porque al Señor se le vive por fe y no por razonamiento. Eso lo dice la palabra en:

Filipenses 3:12 No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si
logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús. 13 Hermanos, yo mismo no
pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás,
y extendiéndome a lo que está delante, 14 prosigo a la meta, al premio del supremo
llamamiento de Dios en Cristo Jesús.

El Señor de una orden y ellos sin preguntar obedecieron, aunque querían otra cosa, pero
obedecieron lo que el Maestro les dijo. Asido significa agarrado, tomado y asir significa tomar o
coger con la mano, y, en general, tomar, coger, prender.

En el mismo sentido, en:

Marcos 6:45 En seguida hizo a sus discípulos entrar en la barca e ir delante de él a Betsaida, en la
otra ribera, entre tanto que él despedía a la multitud. 46 Y después que los hubo despedido, se
fue al monte a orar; 47 y al venir la noche, la barca estaba en medio del mar, y él solo en tierra.
48 Y viéndoles remar con gran fatiga, porque el viento les era contrario, cerca de la cuarta vigilia
de la noche vino a ellos andando sobre el mar, y quería adelantárseles. 49 viéndole ellos andar
sobre el mar, pensaron que era un fantasma, y gritaron; 50 porque todos le veían, y se turbaron.
Pero en seguida habló con ellos, y les dijo: ¡Tened ánimo; yo soy, ¡no temáis! 51 Y subió a ellos
en la barca, y se calmó el viento; y ellos se asombraron en gran manera, y se maravillaban. 52
porque aún no habían entendido lo de los panes, por cuanto estaban endurecidos sus corazones.

En el caso de la obediencia, cuenta también como ellos obedecieron aun queriendo tener otra
acción en su vida, pero simplemente obedecieron, hizo a sus discípulos entrar en la barca e ir
delante de Él.

Para complementar, también dice el apóstol Pablo que muchas veces nosotros no vamos a
entender muchas cosas, porque hay cosas que son reservadas para Él. Lo dice en:

Deuteronomio 29:29 Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios; más las reveladas son
para nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que cumplamos todas las palabras de
esta ley.

Porque al Señor no se entiende; al Señor solo se le conoce y se le vive por la fe de lo que ya está
escrito en su palabra. Porque a veces y con frecuencia decimos que amamos a Dios, es como una
costumbre, pero amar a Dios va más allá de lo que nuestras palabras pueden decir. Amar tiene
que ser una cosa tan intrínseca y realmente a tener una sujeción a su perfecta buena y agradable
voluntad. Porque en esta generación que estamos viviendo, ya nadie obedece.
Estamos en un momento donde el relativismo gobierna

El relativismo dice que nada es bueno, ni nada es mentira, ni nada es verdad, o sea cada cual cree
lo que le parece. Es lo que está gobernando sobre la faz de la tierra. Lo relativo, ni es mentira, ni es
verdad. O sea: “ni fu, ni fa”. Si no estoy de acuerdo contigo, no me sigas, yo no te sigo, o sea, “de
malas”. (Isaías 5: 20 RVR). “Este mundo no nos enseña la sujeción”. Por eso, debemos aprender a
escuchar y a recibir consejo, eso ya se acabó. Se acabó la sujeción de lo que es realmente el
sujetarnos a la ley divina y a la ley de los hombres.

Solo queremos aprender basados en conceptos propios

Solo queremos aprender basados en conceptos propios y por eso, terminamos golpeados y
maltratados. Porque uno se empecina es que así es y así lo creo. Si le gusta bien y si no le gustan
de malas, pero eso es lo que yo opino y así; uno termina golpeado y maltratado. La verdad es
Cristo y Él es la luz del mundo y el que le sigue no andará en tinieblas. (Juan 8: 32 RVR). Mi palabra
es lámpara a tus pies y lumbrera en mi camino, lo dice la palabra. (Salmo 119: 105). Porque una
persona que se somete a la voluntad de Cristo y le obedece, Él le va a librar de cantidad de
problemas. Porque pensamos que la autoridad en todo lugar es lo mismo y que al estar bajo
autoridad estamos en esclavitud. Eso no es así, porque lo que nos enseña la palabra de Dios es que
todo está tergiversado y hoy estamos creyendo las mentiras de satanás. Porque una cosa es lo que
queremos y otra cosa es lo que debemos. Si tu no te sujetas al diseño establecido por Dios, y solo
tú lo decides, no esperes avanzar integralmente nada y menos vivir bajo cielos abiertos. Pero la
palabra es tan clara que dice que “aunque el mundo esté sujeto a satanás nosotros los hijos de
Dios no pecamos y el enemigo no puede tocarnos”. 1 Juan (capítulo 5 del 18 RVR). Nosotros, los
hijos de Dios creemos que Él es el bien y la libertad, porque Él nos guardará. Eso está en:

Deuteronomio 30:19 A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he
puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que
vivas tú y tu descendencia.

Yo no puedo decir que amo a Dios y seguir viviendo mi vida a mi manera, y luego reclamarle a Dios
por esto y aquello, porque no es congruente. Porque el que me ama, mi palabra guardará. Si me
amas obedece lo que yo te mando y punto. Porque eso es doblegar la altivez, el orgullo, la
soberbia, los deseos y realmente no es un verdadero amor hacia mi Padre. Eso lo dice en:

Juan 14:23 Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y
vendremos a él, y haremos morada con él.

Guardar su palabra es procurar estar cerca de ella, en la intimidad, comunión, revelación,


convencimiento y testimonio de lo que Él está haciendo en mi vida. Es meditarla y aplicarla. No es
aprenderla de memoria. Porque te puedes saber todos los versículos de la Biblia, pero si no los
aplicas, simplemente es conocimiento y la ley sin el espíritu mata.

Por eso, en:

Marcos 6: 45 En seguida hizo a sus discípulos entrar en la barca e ir delante de él a Betsaida, en


la otra ribera, entre tanto que él despedía a la multitud. 46 Y después que los hubo despedido,
se fue al monte a orar; 47 y al venir la noche, la barca estaba en medio del mar, y él solo en
tierra. 48 Y viéndoles remar con gran fatiga, porque el viento les era contrario, cerca de la cuarta
vigilia de la noche vino a ellos andando sobre el mar, y quería adelantárseles. 49 Viéndole ellos
andar sobre el mar, pensaron que era un fantasma, y gritaron; 50 porque todos le veían, y se
turbaron. Pero en seguida habló con ellos, y les dijo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis! 51 Y subió
a ellos en la barca, y se calmó el viento; y ellos se asombraron en gran manera, y se
maravillaban. 52 Porque aún no habían entendido lo de los panes, por cuanto estaban
endurecidos sus corazones.

Señor que mi alma te bendiga alma mía. Bendice al Señor porque son incontables sus beneficios,
no puedo olvidar ninguno de ellos, eso es una vida que vive totalmente en el poder del espíritu,
por eso, obedece no preguntes y avanza. (Salmos 103: 2 RVR). Porque cuando el Señor insiste en
algo, es mejor obedecer. Porque nosotros queremos explicaciones y mientras no me contesta y
mientras no me confirme pues no lo hago. Eso se debe a la intimidad que uno tenga con el Señor,
entonces por eso no lo recibes, hasta que no me conteste, porque cuántos años llevo diciéndome,
porque debemos tener muy claro que Dios es soberano. Dios ama la obediencia y la obediencia
total requiere una sumisión total y absoluta y la sumisión total y es simplemente creer que Dios
nunca se equivoca y lo que Él dice así es y amén.

La sumisión total a la voluntad de Dios no va ni con preguntas, ni con cuestionamientos

La sumisión total no va ni con preguntas, ni cuestionamientos, porque cuestionar es dudar de lo


que Dios me está haciendo y me está mandando. Cuando tú obedeces, es porque realmente le
crees, confías y amas al Señor. Es una sumisión absoluta y total: obedece, no preguntes y avanza.
Por eso: ¿Qué te ha dicho Dios que todavía estás demorado en hacerlo? ¿Por qué consideras que
es mejor esperar? Qué mal estamos al tomar nuestras propias decisiones lejos de Dios, pensamos
que nos las sabemos todas, pero no es así, no sabemos lo que va a pasar ni siquiera en 10 minutos.
¿Acaso no es mejor confiar y obedecer cuando nos habla, sabiendo que Él es el dador de la vida?
Porque no todo el que sigue al Señor es discípulo. El Señor no le insiste a aquél que no quiere
avanzar. Dios te da el consejo, pero Él insiste solo a los que entienden que tienen un propósito a
los que entienden que tienen un propósito y están dispuestos a ser guiados por el Señor. Porque
hay gente que solo va detrás de los milagros, porque solo le interesa eso, pero no está dispuesto a
seguir al Señor y a ser discípulo. Pero cuando Dios habla, ninguna excusa, ni opinión, son
valederas, por eso, obedece, no pregunte y avanza. Con el Señor no entiende, solo obedece sí o sí.

REFLEXIÓN….

¿Tú obedeces incondicionalmente?

¿Crees tu que obedeces siempre al Señor?

¿Crees estar sujeto, aprende a escuchar y recibes consejo?

¿Crees tener una sumisión total, voluntariamente a los mandamientos del Señor?

¿Te insiste el Señor en algo que tienes que hacer y que hace mucho tiempo te lo dijo?

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