Un sultán que quería suprimir la mendicidad, hizo anunciar a sus súbditos que cortaría las manos al que diera limosna.
Todos ellos, temerosos, dejaron de darle y los mendigos se marcharon
de aquel país.
Después de algún tiempo se presentó en la ciudad un pobre
desconocido, recorrió sus calles y se paró a la puerta de la casa de una mujer joven.
- ¡Dame algo de comer! – suplicó - el hambre me devora.
- Es que.... murmuró la mujer.
- ¡No me rechaces, como hace todo el mundo! ¡Te lo pido en
nombre de Dios!
Al oír que pedía limosna en nombre de Dios, la mujer se compadeció y
le dio dos panes.
Llegó la noticia a oídos del sultán, que hizo llevar a la culpable a su
presencia y, sin mirarla siquiera, ordenó que le cortaran las manos.
Pasó el tiempo, y el sultán encargó a su madre.
- ¡Búscame una esposa que sea bella de rostro!
- Precisamente conozco a una mujer de incomparable hermosura,
pero tiene un gran defecto.
- ¡No tiene manos!
- ¡No importa! Quiero verla… tráemela.
Y apenas el sultán vio el rostro de la mujer se enamoró de ella y la
hizo su esposa. Esta mujer era la misma a quien él había mandado cortar las manos por haber dado limosna a un pobre.
La sultana tuvo un hijo y vivió feliz durante algún tiempo, pero las esclavas cobraron celos y se pusieron de acuerdo para perderla. El
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sultán creyó cuanto le decían contra su esposa y ordenó que llevasen
a la madre y al hijo al desierto y los abandonaran en la inmensidad de la arenas.
Cuando la mujer se vio sola empezó a llorar sin consuelo. Estaba
acurrucada en la tierra; levantando la cabeza vio cerca un río. Rápidamente, para calmar la sed que la devoraba, se arrodilló, y en el movimiento que hizo al bajar la cabeza, cayó al agua el niño que llevaba cargado en las espaldas. La infortunada madre, loca de pena, quiso arrojarse al río para coger a su niño. En ese momento aparecieron dos hombres a su lado y uno le dijo:
- ¿Qué vas hacer, infeliz? ¿Por qué tanto desconsuelo?
- ¡MI hijo, el que tenía sobre la espalda ha caído al río!
- ¡No podré vivir si él!
- ¿Quieres que te lo traiga?
- ¡Sí … Sí! – contestó sollozando la madre.
El desconocido se puso a hacer oración y el niño salió del agua sano y
salvo.
- ¿Quieres – preguntó el otro hombre – que Dios te devuelva las
manos?
¡Oh, Sí! – contestó emocionada. El hombre hizo oración con el otro y
la mujer se vio con las manos, todavía más hermosas que las primeras.
- ¿Quiénes sois? – preguntó agradecida. Somos los dos panes que
diste al mendigo, – contestaron.
Dichas estas palabras le entregaron otros dos panes y le mostraron a
lo lejos, otra ciudad rodeada de verdes prados y corpulentos árboles.
Luego desaparecieron. Los panes estaban llenos de oro y piedras
preciosas.
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LAS MANOS CORTADAS
NIVEL LITERAL Relaciona cada palabra con su significado escribiendo el número correcto dentro de los paréntesis. 1. SULTÁN ( ) Persona que pide limosna. 2. SÚBDITOS ( ) Sentir lástima por alguien. 3. MENDIGO ( ) Lo que se da por caridad. 4. LIMOSNA ( ) Príncipe o gobernador 5. MURMURAR ( ) Llorar suspirando. 6. COMPADECER ( ) Acusaciones falsas 7. CONSUELO ( ) Alivio de la pena 8. INFORTUNADA ( ) Quien sufre una desgracia. 9. SOLLOZAR ( ) Que está sujeto a la autoridad de un superior. 10. CALUMNIAS ( ) Hablar en voz baja. Subraya la respuesta correcta. 1. ¿Cuál es el acontecimiento que da inicio a la historia? a) El sultán ordena que le corten las manos a la mujer. b) El sultán prohibió a sus súbditos dar limosna. c) El pueblo rechaza a los mendigos. d) El sultán se enamora. 2. ¿Por qué el sultán abandonó a su esposa y a su hijo en el desierto? a) Porque era perverso. b) Porque la sultana no tenía manos. c) Porque creyó en las calumnias contra su esposa. d) Porque se volvió loca. 3. ¿Qué otro título sería el más adecuado para este relato? a) Un sultán genial b) Los mendigos contra el sultán c) La sultana generosa d) El desierto y los sultanes 4. El texto trata sobre: a) La generosidad recompensada b) El capricho de un sultán c) El milagro de un mendigo d) La mala suerte de una madre
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5. ¿Qué otro título sería el más adecuado para este relato?
a) Un sultán genial b) Los mendigos contra el sultán c) La sultana generosa d) El desierto y los sultanes 4. El texto trata sobre: a) La generosidad recompensada b) El capricho de un sultán c) El milagro de un mendigo d) La mala suerte de una madre 5. ¿Cuál es el nudo o problema del relato? a) Las calumnias de las esclavas b) El intento de la sultana por salvar a su hijo. c) El desconocido le devuelve milagrosamente las manos a la sultana. d) Cuando los dos desconocidos le muestran una bella ciudad. 6. ¿Por qué la mujer se compadeció del mendigo? a) Porque le pidió comida en nombre de Dios. b) Porque era desobediente. c) Porque lo vio muy enfermo. d) Porque le recordó a su hijo. 7. ¿Cómo fue salvado el hijo de la sultana? a) El sultán se arrepintió y lo sacó del río. b) La mujer recuperó sus manos y lo salvó. c) Los desconocidos nadaron y lo sacaron. d) El desconocido hizo una oración y el niño salió del agua sano y salvo.
Indica si el enunciado es verdadero (V) o falso (F).
( ) La sultana soltó a su hijo a propósito. ( ) El sultán se enamoró de una esclava. ( ) La madre del sultán le buscó una bella esposa. ( ) La sultana vivió feliz durante algún tiempo. ( ) Madre e hijo volvieron con el sultán. ( ) Madre e hijo fueron abandonados en la inmensidad del desierto.
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