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1. INT.

MOTEL (HABITACIÓN) – NOCHE


DANIELA y BRUNO se encuentran en la cama de la habitación luego
de tener sexo. Están semidesnudos y ambos se acaban de conocer
en una fiesta.
BRUNO
Y tú, ¿hay venido muchas veces?
DANIELA
Un par.
BRUNO
¿Dos considerando ésta?
DANIELA
No. Ésta es la tercera.
BRUNO
Cuéntame las otras dos
DANIELA
Ni cagando. ¿Pa’ qué querís saber?
BRUNO
Porque quiero saber quién eres
DANIELA
¿Sabiendo mi comportamiento sexual?
BRUNO
Como querai…
DANIELA
La primera vez vine con un tipo que me gustaba. Yo estaba en la
playa y él me llamó desde Santiago para invitarme al cine. Yo
tomé el auto y me vine. Fuimos al cine. ¿Hai estado inspirado?
Cuando lo que dices es lo correcto, cuando tus diálogos son como
de película, y te sientes bien, y estás en control. Ya, yo me
sentía así. Él me había gustado desde el colegio, años, y me lo
agarré. No fue tan bueno como me lo había imaginado, pero en ese
momento cerré un ítem.
BRUNO
¿Y lo volviste a ver?
DANIELA
Me dijeron que ahora es obstetra y vive en el sur. Tiene como
cinco hijos. El hueón más fome del mundo.
BRUNO
¿Y la segunda vez?
DANIELA
La segunda vez de motel fue con Rodrigo.
BRUNO
¿Tu pololo?
DANIELA
Llegamos peleando. Estuvimos sobre la cama, ni siquiera nos
tocamos. Discutimos, discutimos, terminé llorando. Luego él pagó
y nos fuimos.
BRUNO
¿Y por qué pelearon?
DANIELA
Él me mintió. Se metió con una loca de la empresa del papá. Me
dijo que no había pasado nada, pero tenía su número en el
celular. Cuando estábamos en medio de la pelea, ella lo llamó. Y
empezó a hablar huevás. Él no puede dejar de mentir. Es como una
enfermedad.
BRUNO
¿Y terminaste con él?
DANIELA
No.
Se produce un silencio incómodo. Daniela lo mira con vergüenza.
BRUNO
¿Me prestai el control remoto?
DANIELA
(Pasándoselo)
Deben ser puros canales porno.
BRUNO comienza a hacer zapping. Daniela se queda pensando.
DANIELA
Hubo otra vez.
BRUNO
¿Qué?
(Apagando el televisor)
¿Cómo? Cuéntame.
DANIELA
Era un mochilero. Y no fue aquí, fue en Chillán.
BRUNO
Mira…
BRUNO enciende un cigarro
DANIELA
Con Rodrigo había intentado de terminar, diez… veinte veces. No
podía. Bueno, un día, después de una pelea, una pelea fuerte,
terminamos en serio. Yo creía que era en serio. Pedí todas mis
vacaciones, cambié el celular, lo borré de todas las agendas.
Tenía que alejarme de Santiago. Le dije a mi abuela que me iba
con una amiga a la playa pero era mentira.
DANIELA comienza a bajar su tono de voz.
Tomé un bus al sur. Cuando el bus iba por Chillán, paró, salí a
fumar. Se me acercó un tipo. Me pidió fuego, yo le acerqué el
encendedor y me miró, yo lo miré y apagué el cigarro y me fui
con él.
BRUNO
¿La dura?
DANIELA
Fuimos a un motel. Nos dimos algunos besos. Me tiene que haber
visto tan nerviosa. Me preguntó que tenía. Le conté de Rodrigo.
Hizo lo que él jamás hubiera hecho. Me acostó, me arropó, me
tocó el pelo y me contó un cuento hasta que me quedé dormida.
Era un desconocido. Alguien que no tenía ni un vínculo conmigo.
Y me trató como si fuera lo más importante que le hubiera
pasado.
Ambos se quedan en silencio.
DANIELA
(Con los ojos llorosos e incorporándose)
¿No se puede bajar el aire? Tengo frío.
DANIELA ajusta el aire, se acomoda, mientras BRUNO continúa
haciendo zapping.
BRUNO
¿Viste esa película?
DANIELA
No.

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