Talca, noviembre 2023

Mi querida Guiselle:

Nos conocemos hace tanto tiempo, hay tantas vivencias,

conversaciones, confesiones, aprendizaje, pero sobre todo
cariño entre nosotras. Hoy terminas un camino, que, cuando
llegaste a mi salita, se veía muy difícil, pero, luego, tu misma
nos demostraste lo fuerte, inteligente, resiliente y capaz que
eres para afrontar cualquier dificultad que se te ponga por
delante.

Me siento infinitamente orgullosa de haber sido parte de tu

camino, de haber despertado en tí, aunque fuera un poquito,
la inquietud por aprender, de desear un mejor futuro y de
querer ser parte de los valientes que nos dedicamos a la
educación.

Afrontas esta nueva etapa con todas las herramientas que la

vida te pudo entregar y que tu tomaste e hiciste parte de ti.
Que Dios y el universo siempre abran tus caminos, que donde
quiera que vayas, encuentres personas buenas y gentiles y
que nunca dejes de ser parte de ellas.

Espero que esta no sea una despedida y que cada vez que
necesites mi apoyo, sientas que puedes contar conmigo,
porque aquí estaré para acompañarte siempre.

Con mucho cariño,

Tía Paola