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A menudo dejamos sin escuchar la guía

personal más preciada del Espíritu porque no


registramos ni respondemos a las primeras
impresiones que recibimos cuando el Señor
decide dirigirnos.
(RICHARD G. SCOTT, "HELPING OTHERS TO BE SPIRITUALLY LED" "AYUDANDO A OTROS A
SER GUIADOS POR EL ESPÍRITU," SIMPOSIO DEL SEI, 11 DE AGOSTO DE 1998)

Consejos para llevar un diario de las


Escrituras
Aprendí rápidamente que no hay una manera correcta de llevar un diario de las
Escrituras. Diferentes enfoques funcionan para diferentes personas en
diferentes momentos.

El método más sencillo es anotar las cosas que desee recordar de su estudio de
las Escrituras. No tiene que seguir una estructura determinada ni escribir cierta
cantidad. Simplemente, anote sus pensamientos, ideas y reflexiones.

Un enfoque un poco más estructurado, recomendado por DeMoss, implica


escribir dos frases por cada capítulo que lea, una frase que resuma el contenido
del capítulo y otra que resuma cómo el capítulo le habló. ¿Qué leyó que fuera
relevante para su situación y desafíos actuales?

Para un enfoque más comprehensivo, DeMoss recomienda escribir sus


pensamientos en tres áreas:

1. Observación: ¿Qué dice este pasaje?Por ejemplo:

1. ¿Quién lo escribió, cuándo y para quién?


2. ¿Qué estaba sucediendo cuando se escribió?
3. ¿Por qué se escribió?
2. Interpretación: ¿Qué significa?Por ejemplo:

1. ¿Qué me enseña el pasaje acerca de Dios? ¿Acerca de mí mismo?


2. ¿Hay ejemplos a seguir, guía para aceptar, promesas que reclamar o pecados
que evitar?
3. Aplicación: ¿Cómo puedo utilizar lo que estoy aprendiendo en mi vida?Por
ejemplo:

1. ¿Cómo se aplican las verdades de este pasaje a mi situación actual?


2. ¿Qué errores podría necesitar perdonar?
3. ¿Qué cambios debo hacer?
4. ¿Qué pasos prácticos puedo tomar para aplicar las verdades que estoy
aprendiendo?
Hay otra manera en que puede usar su diario de las Escrituras. Tal vez haya
escuchado a personas mencionar los beneficios de memorizar pasajes de las
Escrituras. Después de memorizar un versículo, trate de escribirlo en su diario
para ver lo bien que lo recuerda. Este ejercicio no solo ayuda con la
memorización, sino que es probable que obtenga aún más ideas para escribir
en su diario.
También puede escribir en un diario personal por tema. ¿Qué preguntas le
gustaría explorar sobre un tema determinado? Organice su diario en secciones
alrededor de esos temas y preguntas. En cada sección, puede compilar listas de
pasajes de las Escrituras e incluso buscar otros recursos en la web. Después de
que haya reunido estos pasajes de las Escrituras y estos recursos, estúdielos
con espíritu de oración y capte sus pensamientos. Tal vez le sorprenda el viaje
que este método le lleva a seguir.

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