Mi 15 de Septiembre

Hernández Cuevas Anette

Grupo:1007

El 15 de septiembre desperté temprano como todos los años, pero no por iniciativa
propia, sino que cada viernes por la mañana mi vecina se encarga de levantarme de la
cama de mal humor con su molesta y ruidosa bocina poniendo “Cruel Summer” de Taylor
Swift a todo volumen, pero lo peculiar de esa mañana es que me despertó la melodiosa
voz de Luis Miguel cantando “México en la piel” y así durante todo el día su playlist estuvo
repleta de cantautores mexicanos.

Al ver a mi familia apurados, bañados y con banderas de México pintadas en las mejillas
supe que debía darme prisa para irnos al desfile de mi delegación. Después de maso
menos hora y media de arreglarme lo mejor que pude con un maquillaje con sombras
verdes que nunca uso mas que en esa época del año, los cuatro fuimos al desfile. Al llegar
las calles ya estaban cerradas a la espera de que comenzara, a pesar de que ya era un
poco tarde había ya muchísimas familias pegadas a las barras de metal emocionadas por
verlo, vestidas de los tres colores de la temporada.

En el desfile (el cual esta bastante bien elaborado) pasan carros alegóricos con temáticas
de la independencia, luchadores, monumentos prehispánicos entre muchas otras cosas.
La gente, particularmente los niños se emocionan con los caballos, la música, las
presentaciones de los diferentes espacios culturales de la zona y muchas cosas más.

De regreso del desfile las calles están llenas de cascarones de huevo rotos o manchas
blancas en el piso hechas por la pólvora de los cuetes que no paran de tronar todo el día.
Durante lo que resta del día no queda otra cosa que ayudar en la tradicional comida
mexicana, este año me toco comer pambazos y pozole y la verdad es que disfruto mucho
de ambos, solo que disfruto más de ver a todas las mujeres de mi casa cocinar a la par, de
verdad disfruto mucho apreciar cómo es que todas a su manera lo hacen tan bien y con un
montón de conocimiento de los platillos de nuestro país.
Al final de día solo nos sentamos todos en familia mientras escuchamos música mexicana
o latinoamericana mientras platicamos y recordamos ese mismo día en años pasados.
Siempre ha sido motivo de celebración y este año no fue la excepción. Así termina mi 15
de septiembre cada año.