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Traqueo bronquitis infecciosa canina o «Tos de las Perreras»

El traqueo bronquitis infecciosa canina, denominada también complejo


respiratorio canino o más comúnmente, tos de las perreras, es una
enfermedad muy contagiosa del sistema respiratorio superior que
aparece con más frecuencia en lugares donde conviven grupos de perros
de diferentes edades y vulnerabilidad.
Es una enfermedad altamente contagiosa diseminada a través de la
tos y el estornudo y por contacto indirecto (utensilios, ropa o personal).
Esta dolencia se puede equiparar en personas a un catarro o una gripe,
aunque no es del todo igual.
ETIOLOGÍA

La tos de las perreras es provocada por un complejo de agentes que


producen en los perros afectados una tráqueobronquitis, es decir,
afección de tráquea y bronquios por lo que se puede presentar como una
tos seca y complicarse hasta una neumonía. La bacteria de Bordetella
bronchiséptica por lo general está presente, junto a uno o varios virus
La combinación de la bacteria Bordetella bronchiséptica con el virus de la
parainfluenza canina es la causa más frecuente
SIGNOS CLÍNICOS

Los signos clínicos aparecen de 3 a 10 días post – infección.


El síntoma clínico más notable son los paroxismos de una tos áspera, seca,
que puede ser seguida de arcadas y ahogo. La tos es inducida fácilmente por
palpación suave de la laringe o tráquea.
El desarrollo de síntomas más graves, incluida fiebre, descarga nasal
purulenta, depresión, anorexia y tos productiva, especialmente en cachorros
En casos leves, el perro sigue comiendo, tomando agua y con su actividad
normal, pero en los casos más severos, el perro realmente se ve enfermo.
Presenta letargia, fiebre, inapetencia, disnea, intolerancia al ejercicio,
puede llegar a la neumonía e inclusive llegar a la muerte. La Mayoría de los
casos muy severos, se presentan en animales inmunodeprimidos y
cachorros sin vacunas.
TRATAMIENTO

Aunque en muchos casos es una es una enfermedad


autolimitante, ante cualquier síntoma hay que acudir al
veterinario.
El tratamiento de esta enfermedad es de carácter sintomático.
Es decir, cada perro que padece esta patología presenta unas
señales distintas y, por lo tanto, precisa una medicación
diferente. Hay perros que precisan, además, antibióticos,
antiinflamatorios o antitusígenos. En cualquier caso, si el perro
enfermo convive con otros canes, hay que procurar aislarle
del resto, porque se trata de una enfermedad contagiosa.
PREVENCIÓN

La mejor forma de prevenirla, es la vacunación del perro a los seis meses de


edad. Además, la revacunación anual es fundamental para mantener a raya la
tos de las perreras, sobre todo, en perros que acuden a residencias caninas o
están en contacto con muchos perros de manera habitual.
ARTÍCULO DE PATRICIA MELINI LIC. MEDICINA VETERINARIA

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