Madre con Sabiduría y Elegancia

La mujer es alguien que Dios ha formado de la costilla del hombre, por ello al
¡transcurrir los años va creciendo formándose en pensamientos y elegancia hacia la
voluntad de Dios! No de la carne si no conforme a la voluntad de Dios. Pero ahora esa
mujer bella y hermosa que Dios termino de transformar… es esa madre que está ahora
sentada, como dice el Rey Lemuel en Proverbios 4:10 “Mujer virtuosa, ¿Quién la
hallará?... largamente a la de las piedras preciosas.” No hay nadie como esa madre que
Dios nos ha dado esta bella noche.
Ahora bien, podemos preguntarnos ¿Qué es una madre trabajadora? Es la que cumple
varios roles al mismo tiempo puede ser oficinista, la obrera, la profesional, la madre que
transmite cariño, ternura, que da una palabra de aliento, que guía, que orienta, ella educa
y nos orienta al buen camino. Proverbios 1:8-9 recalca “ Oye, hijo mío, la instrucción de
tu padre, y no desprecies la dirección de tu madre…” Tenemos esa dicha de tener una
madre con tantas cualidades que a veces "no apreciamos los hijos” lo que hacen en
nuestras vidas comenzamos en una edad de trece años cuando, te interrumpe mamá y
respondes ¡¿Qué quieres mamá?! Ya a los dieciséis, comenzamos en una etapa donde
somos rebeldes, de esta manera le decimos a mamá ¡No me molestes mamá! Seguimos
creciendo hasta llegar en una edad donde expresamos ¡aquí mando yo mi vida! Que es
la edad de dieciocho años, por supuesto llega un punto donde nos decimos ¡Quiero irme
de esta casa! Como el hijo Prodigo le dijo a su padre: “padre, dame la parte de los
bienes que me corresponde; se los repartió y él se fue en una provincia donde malgasto
todo… llego un punto donde tuvo que trabajar dándole de comer a cerdos (Luc 15:12-
15) …” visto de esta forma nosotros a la edad de veinticinco años decimos “Tenía razón
mamá.” Al creernos capaces de desafiar que podemos hacer todo, hay un punto que
decimos al ya no aguantar más “Quiero volver a casa de mi madre…” Pasando tiempo
al estar de nuevo en sus brazos viéndola día a día, estar feliz con ella, teniendo nosotros
cincuenta años nos decimos “No quiero Perderte mamá…” ¡quisiéramos que estuviera
más a nuestro lado! pero ahora que sabemos que es importante valorar el tiempo junto a
ella, el tiempo ya no es suficiente para nosotros, se va más allá con Dios y nosotros los
hijos nos quedamos sucede que al tener setenta años decimos: “Mi mamá haría todo por
mí si ella estuviera aquí…” hay que valorar el tiempo con Dios y con mamá porque la
felicidad no viene de nosotros. Salmos 4:7-8 recalca: “Hay muchos que son felices
comiendo y bebiendo de más, pero yo soy muy feliz porque mi alegría viene de ti.
Cuando me acuesto me duermo enseguida porque sólo tú, mi Dios, me das tranquilidad.
(Sal 4:7-8TLA).”
Antes que nada, preguntémonos ¿Quién es él, el que está confiado en nuestra madre? Se
levanta por las mañanas a trabajar, luchando para seguir manteniendo a la familia, al
venir cansado mentalmente, físicamente y estar feliz junto a la mesa sin decir lo que le
sucedió durante el día, él solo quiere vernos feliz. Proverbios 4:11 dice “el corazón de
su marido está en ella confiado, y no carecerá de ganancias.” Esta confiado en ella
porque es temerosa de Dios, ¡Sé que piensan ahora que dependen de una mujer es
evidente que al pesar en tener negocio y trabajar, piensan que el trabajo es en vano! Por
lo tanto ven que están lejos de obtener lo que sueñan, pero no es así. Proverbios 4:18
recalca “ ve que va bien en sus negocios; su lámpara no se apaga de noche” Porque esa
lampará que arde simboliza larga vida y prosperidad porque hay un camino donde
siempre esta Dios dándonos fuerzas para no decaer en la oscuridad, esperamos siempre
que anochezca para descansar -pero ni eso hacemos- sino que no dormimos por seguir
pensando teniendo abundancia que hasta nosotros los jóvenes, no dormimos por pensar
en abundancia en señoritas y las señoritas en señoritos a pesar de ser feos y feas aun así
pensamos.
Es conveniente pensar ¿Cómo han superado las madres las pruebas de la vida? Hay
tiempos donde ellas ya no saben dónde encontrar dinero para darnos de comer ¡no
sabemos su estado de ánimo porque siempre vemos que realizan la misma rutina de
todos los días! pero no sabemos lo que piensan solo Dios. “Trabajan en silencio para
vernos felices” esa bella madre que esta ahora sentada, no ve los daños que se causa ella
misma al tenernos a nosotros como hijos lo que le importa es que estemos bien de salud.
Proverbios 4:12-13 recalca “ Le da ella bien y no mal todos los días de su vida. Busca
lana y lino, y con voluntad trabaja con sus manos.” ¡Madre que está escuchando esta
carta que aún no sabemos si nos volveremos a ver de repente al terminar esta carta y
bajar de este pulpito, caminar hacia un lugar que no se si llegare, ni estaré en ese
amanecer donde yo te vea seguir luchando en esta adversidad lleno de obstáculos que
gracias a Dios ahora estas aquí escuchándome como un desconocido que me imagino
que ahora está pensando “ está loco como siempre” pero loco por ti mamá, y no por la
novia, igual no tengo!
Debemos decir: que nuestras madres siempre viajan en lugres de pensamientos que aún
no sabemos, “tienen sentimientos tan profundos” que solo Dios ve a través de ellas,
siempre tienen un propósito en sus vidas que extienden amor a quien no es su hijo que
tan sorprendente es una bella madre, Proverbios 4:20 nos dice: “Alarga su mano al
pobre, y extiende sus manos al menesteroso.”
Por supuesto cada madre sabe lo que ha hecho y ha pasado en el transcurso de los años,
no fue nada fácil hasta donde están ahora… Son madres que no se rinden, saben que
Dios está con ustedes en cualquier circunstancia, sé que hay muchas madres que han
pasado momentos de ya no poder más ¡pero aun así han tenido sabiduría para seguir en
un sendero de vida y muerte! por eso su marido las quiere y es por eso que las eligieron
sobre todas las mujeres. Proverbios 4:29 recalca “Muchas mujeres hicieron el bien; Más
tu sobrepasas a todas.”
Es conveniente aclarar que “cada madre es especial en todos los sentidos en elegancia y
sabiduría” porque a pesar de todo el trabajo del hogar aun así nos presta una parte de su
tiempo ¡mientras nosotros no apreciamos ese valioso tiempo! Gracias madre por ser
alguien de valor y no abandonarnos a tus hijos ni a mi padre, Proverbios 4:30 recalca
“engañosa es la gracia, y vana la hermosura; la mujer que teme a Jehová, esa será
alabada.” Porque la gracia es el encanto, y la hermosura es la apariencia externa. ambas
son pasajeras.