Caracterizando la contaminación atmosférica

El aire nunca es “limpio”, además de sus gases constituyentes, tiene humedad, polvo,
polen, esporas de hongos y gases que la naturaleza aporta a través de las erupciones
volcánicas, la descomposición de seres vivos, de los incendios forestales, etc. Muchas de
estas sustancias no son inocuas pero tienen la gran ventaja de estar dispersas, diluidas.
En cambio, la contaminación antropogénica suele concentrarse en las ciudades y
aéreas industriales y sus constituyentes pueden ser mucho más tóxicos que los naturales.
El hombre suma a la atmosfera todo tipo de sustancias químicas en estado sólido, líquido
o gaseoso desde distintas fuentes móviles o fijas: los transportes automotores, los
aviones y los buques son fuentes móviles, y se caracterizan por ser pequeñas y difíciles
de controlar. Las fuentes fijas pueden ser las industrias, las plantas generadoras de
electricidad, los hogares, etc.

• Actividad: Buscar información de distintas fuentes y completar el siguiente cuadro

de los contaminantes atmosféricos más importantes.

Tipo de contamínate Fuentes de emisión Problema ambiental

(estado físico) que generan
Antrópicas:

Óxidos de azufre
(gas)
Naturales:

Óxidos de Antrópicas:
Nitrógeno (gas)

Naturales:

Antrópicas:
Dióxido de carbono
(gas)

Naturales:

Antrópicas:
Metano (gas)

Naturales:
Compuestos orgánicos
volátiles (COV): Antrópicas:
formaldehido,
hidrocarburos,
benceno, xileno, etc.
(gas) Naturales:
Compuestos Antrópicas:
halogenados:
Clorofluoro-carbonados
o CFC, bromados, etc.
(gas)

Antrópicas:
Material particulado
(PM):
Partículas sólidas o
líquidas como polvo,
cenizas, hollín
Naturales:

Energía: ruido / calor