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Una Noche en Un Laberinto de Maiz
Una Noche en Un Laberinto de Maiz
“Si, me llamaron Victor y Benja, decidimos que nos vamos a reunir para
pedir dulces y tal vez ir a alguna atracción de terror”- le respondió Mark
“Hunter ya tiene edad para estar solo por una horas, ¿no?”- se quejo.
Mark estaba a punto de abrir su boca para seguir discutiendo pero cuando
vio su cara de su supo que era mejor que no dijera nada y solo se llevara a
su hermano con el.
“YA ESTOY LISTO”– grito Hunter. Bajando las escaleras vio que Mark
estaba viendo los Backyardigans, Mark no escucho lo que dijo Hunter y
este aprovechó para asustarlo
“Bueno, ¿ya estas listo para salir?”–le pregunto Mark. Hunter asintió y se
fue por su saco para los dulces, Mark fue a la puerta para esperarlo, cuando
Hunter tomo su saco salio corriendo por la puerta. Mark, que vio a su her-
mano corriendo por el pasillo le abrió la puerta para que saliera de la casa
corriendo, después de que Hunter saliera Mark salio y cerró la puerta.
“Bueno bueno, que tenemos aquí”– empezó a decir Benja “te estábamos
esperando Mark y ademas ¿por que tu hermano viene contigo?”
Después de unas horas todos estaban felices porque sus sacos estaban casi
llenos gracias a Hunter por ser chiquito pero empezaron a pesar bastante
de lo llenas que estaban.
“Bueno, ¿que tal si volvemos a nuestras casas para poner los dulces allá y
luego nos reunimos de nuevo y decidimos que hacer?– propuso Benja.
Todos estaban de acuerdo porque iba a ser bastante agotador cargar con los
sacos por todas partes.
Se apuraron a sus casas para dejar sus bolsas de caramelos, pero cuando
Mark y Hunter llegaron a su casa, Hunter necesitaba ir al baño, Mark se
irritó un poco pero no podía decirle que no.
Después de 10 minutos Mark estaba impaciente.
“YA VOY PESAO”– le respondió Hunter saliendo del baño, bajando las
escaleras vio que Mark lo estaba esperando en la puerta
“Bueno, bueno ya estoy aquí, que pesao”– dijo Hunter entre pequeñas car-
cajadas.
“Uff, ¿que pasó esta vez?”– preguntó Benja con un suspiro "Hunter que se
tardo mil años en el baño" - respondió Mark.
“Si, pero la mayoría son para niños pequeños o no son tan buenos y escu-
che que el laberinto es bueno”– le respondió Victor a Hunter.
“No te preocupes Hunter esto se supone que tiene que dar miedo, proba-
blemente solo era un animal salvaje o un actor, ¿vedad caballero?”– pre-
gunto Mark al señor al que le compraron los tikets.
“No me gusta este lugar, por favor vayámonos Mark”– le rogó a su herma-
no.
Victor que estaba muerto del susto se quedo paralizado y Benja intentaba
hacer que espabilara mientras también gritaba llamando a Hunter.
“¡AYUDA MARK POR FAVOR, ALGUIEN RESCATENME! POR FAVOR!” escucharon vaga-
mente y corrieron mas hrápido aun, Hunter seguía gritando por ayuda has-
ta que, de un momento a otro todo se silenció, se detuvieron por un segun-
do todo estaba tan callado que hasta podían escuchar sus corazones latir.
“Vamos, no podemos parar tenemos que ver que le pasó” dijo Mark entre
lagrimas.
Siguieron corriendo por donde se escuchaba antes.
Cuando encontraron a Hunter, Mark callo de rodillas a su lado, mojado en
lagrimas.
Hunter estaba bañado en sangre, con marcas de rasguños que iban muy
profundo en su cuerpo y faltaba un pie parecía haber sido arrancado de un
mordisco.
Mark se apuró a recoger a su hermanito, ya casi no tenia vida dentro de si
y cuando vio a Mark se alegro un poco pero una cara de miedo y tristeza
invadió su rostro aunque estaba con mucho dolor y desangrándose le habló
a Mark
“Ya no quiero estar aquí, vamos a casa porfavor” dijo Hunter antes de caer
muerto. Mark, Victor y Benja empezaron a llorar pero Mark lloraba desga-
rradoramente.
“Hay que irnos de aquí, rápido” dijo Mark mientras recogía el cuerpo de su
hermano, cuando de repente, el monstruo salto hacia Mark, que estaba car-
gando a su hermano justo detrás de sus amigos.
“Ya casi llegamos Victor, estamos a punto de escapar, solo no mires atrás”
dijo Benja con alivio, pero cuando estaban a la mitad Victor miro atrás vio
que el monstruo estaba corriendo a toda velocidad hacia ellos
“CORRE BENJA ESTA DETRÁS DE NOSOTROS” grito Victor lleno de
terror.
Victor logro escapar de laberinto, con sangre por todas partes mientras de
pronto se dio cuenta de que afuera del laberinto estaba lloviendo tormento-
samente y vio, como el monstruo se detuvo justo a la salida, lo miró direc-
to a los ojos y el monstruo se echo a reír.
Victor, sin entender porque se reia el monstruo e igualmente aterrado solo
siguió corriendo, llego a la casa de Mark y Hunter entro empapado y llo-
rando. Los padres de Mark y Hunter, los suyos y los del Benja, todos esta-
ban en la mesa hablando y tomando té, Victor se apresuró a decirles lo que
paso pero ninguno le creyó, no podían creerlo o probablemente solo pensa-
ban que era una broma de mal gusto. Victor, lleno de furia, tiro el casco de
Mark al suelo y salio corriendo de la casa, lleno de lagrimas, no podía
creer que pensaran que todo era una broma. Fue corriendo a la estación de
policía a reportar lo que pasó.
Al final nunca se descubrió que paso por la falta de evidencia y por algún
motivo desconocido todo el laberinto de maíz desapareció, solo quedaba
una extensa colina no muy alta de pasto sin rastro de alguno de que algo
jamas hubiense esta ahí.
El Fin.