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LOS ANIMALES INVERTEBRADOS

INTRODUCCIÓN

Los animales invertebrados (en latín, invertebrata) son aquel conjunto de especies
del reino animal (reino Animalia) que no tienen columna vertebral, espina dorsal o
un esqueleto interno articulado. Generalmente, los invertebrados suelen ser de
menor tamaño si los comparamos con los grandes vertebrados terrestres y
acuáticos. Sin embargo, existen invertebrados de todas las formas y tamaños:
algunos son microscópicos mientras que otros, como el calamar gigante, pueden
verse a simple vista.

Aunque los animales invertebrados carecen de un esqueleto interno, muchos de


ellos tienen exoesqueleto (como los insectos) o cáscaras y caparazones de lo más
resistentes como en el caso de los moluscos. Como estos esqueletos externos no
crecen, muchos animales invertebrados tienen que mudar su exoesqueleto cada
cierto tiempos.

CLASIFICACIÓN DE LOS INVERTEBRADOS:


LOS CELENTERADOS:

¿Qué son los celenterados?

Llamados también celentéreos, son un grupo de animales invertebrados (no tienen


columna vertebral), de consistencia gelatinosa y tamaño variable, que presentan
simetría radial, es decir, a partir de un eje central (la boca), el cuerpo se puede
dividir en partes iguales.

Su nombre surge de dos vocablos griegos: «koilos» que significa hueco, y


«énteron», intestino; dando lugar a la palabra «celentéreo» o «intestino hueco»,
llamado así, por tener un solo orificio que funciona como boca y ano al mismo
tiempo.

Dicho grupo incluye pólipos, medusas, anémonas de mar, corales, e hidras.

Dónde viven?

Los celenterados son acuáticos y casi todas las especies viven en el mar, desde las
aguas cálidas hasta las árticas (polo norte), en las zonas de marea poco profundas
o en las oscuras profundidades; solo algunos habitan en aguas dulces, como ríos o
lagos (género Hydra).

Pueden vivir en colonias (comunidades numerosas), como los arrecifes de coral, o


ser solitarios, anclados en el fondo oceánico o moviéndose con la corriente de las
aguas.

Características de los celentéreos

No tienen esqueleto, ni cabeza, ni cerebro.

Están compuestos por agua (95%), y comúnmente tienen forma de columna


(corales), bolsa (pólipos) o sombrilla (medusas).

Poseen simetría circular o radial (parecida a los rayos de un rin de bicicleta) que
parte de un punto central (la boca) y distribuye al cuerpo simétricamente.

Su tamaño varía desde unos pocos milímetros hasta varios metros (en el caso de
las medusas gigantes).
Su cuerpo está formado por dos capas: una exterior (epidermis) encargada de su
protección e interacción con el medio; y otra interior (gastrodermis), cuya función
principal es digestiva, separadas por un tejido gelatinoso (mesoglea).

Tienen receptores luminosos (manchas oculares, ocelos), formados por un grupo de


células que le permiten distinguir luces y sombras. ¡La medusa, posee una
estructura sensorial (ropalio) con ojos complejos que pueden contener córnea,
lentes y retina!
Cuentan con una única abertura, llamada estomodio, que cumple la función tanto
de boca como de ano; y conecta el exterior con una cavidad interna que funciona
como aparato digestivo (celenterón).

Su boca está rodeada de tentáculos (en múltiplos de seis u ocho) cuyo tamaño varía
según la especie, desde pocos milímetros hasta varios metros.

En sus tentáculos, se encuentran unas células urticantes (que producen picor y


ardor intenso) llamadas nematoblastos, usadas para retener a la presa y como
mecanismo de defensa, y que al mínimo roce, se activan para expulsar veneno.

No poseen órganos, sino tejidos.

Sistema nervioso

No disponen de sistema nervioso central, pero sí de ciertas células nerviosas,


ubicadas en los tentáculos y el cuerpo, que funcionan como sensores (redes de
neuronas), capaces de detectar estímulos externos (táctiles, químicos, luminosos).

Sistema digestivo
El sistema digestivo de los celenterados es un modelo simple, formado por una
cavidad gástrica (digestiva) localizada en el centro del cuerpo, que se comunica al
exterior por un solo orificio (boca y ano a la vez).

¿Cómo es el sistema circulatorio de los celentéreos?

No tienen sistema circulatorio; en la cavidad gástrica (llamada también


gastrovascular) se realiza la función de circulación, mediante un proceso llamado
difusión, a través del cual sus células captan el oxígeno del agua que entra a la
cavidad para bañar a los tejidos.

Sistema muscular

Su sistema muscular es sencillo, formado por células que cubren su cuerpo


(llamadas epiteliales), y le permiten realizar contracciones musculares.

¿Cómo es su reproducción?

Su reproducción es sexual (los espermatozoides nadan para alcanzar al ovario,


penetran y fecundan al óvulo), asexual (se fragmenta una parte del adulto para
originar un nuevo ser) o alternando ambas. Algunas especies son hermafroditas
(producen óvulos y espermatozoides a la vez).

¿Cómo es la respiración de los celenterados?

Ocurre a través de la capas de su cuerpo (respiración cutánea o directa), mediante


células que contienen diminutos hilos (flagelos) encargados de captar oxígeno a
través de las paredes externas, y por la circulación del agua dentro de la cavidad
digestiva.

¿Cómo se nutren?

Los celenterados son principalmente carnívoros, incluyendo en su dieta animales


acuáticos pequeños (peces, camarones, plancton, gusanos…) además de residuos
orgánicos, y practican la depredación (caza a otros organismos).

Las medusas usan los tentáculos para inmovilizar a su presa y llevarla hasta su
boca para tragarla, las anémonas atrapan peces empleando su boca como una red,
y los corales absorben nutrientes suspendidos en el agua, actuando como una
aspiradora.

Su digestión es mixta; una vez dentro de la cavidad digestiva, se liberan sustancias


(enzimas) que disuelven el alimento (digestión extracelular). Por último, lo que no se
puede descomponer, es absorbido por las moléculas de las paredes internas
(digestión intracelular).

Tipos de celentéreos

Anteriormente, los Celentéreos (Celenterados) o «Coelenterata», se dividían en dos


grupos: cnidarios y ctenóforos.

Estudios genéticos y moleculares recientes asumen que los cnidarios y los


ctenóforos hoy día pueden separarse en grupos o filos diferentes.

Por ello, se emplea el nombre de cnidarios como denominación actualizada para los
celenterados y los ctenóforos son incluidos en un filo distinto, conocido como
«ctenophora»

Cnidarios

Se caracterizan por presentar cnidocitos (células urticantes o irritadoras), de allí su


nombre; las especies pueden adoptar dos formas o morfologías clásicas: pólipos
(sésiles o fijos) y medusas (forma de vida libre).
Pólipos

Los pólipos tienen forma de columna o bolsa, sujeto al fondo del mar o a las rocas
(hidra, la anémona, los corales), y tentáculos pequeños, orientados hacia arriba.

Variedades de pólipos son Anémona alfombra, anémona fresa, coral rojo, coral
cerebro, hydra viridissima…

Medusas

Las medusas son organismos móviles, con forma de sombrilla y tentáculos de


variado tamaño, orientados hacia abajo.

Variedades de medusas son Medusa inmortal, avispa de mar o medusa caja,


medusa sombrilla tropical, medusa bala, medusa luna, medusa moteada…

Los cnidarios también suelen clasificarse en cinco subgrupos:

● Antozoos (anémonas de mar y los corales).


● Hidrozoos (Hidras y algunos tipos de medusas).
● Escifozoos (medusas con forma de sombrilla).
● Cubozoos (o cubomedusas) llamadas comúnmente «avispas de mar» por su
mortal veneno.
● Y más recientemente, Mixozoos (parásitos microscópicos).

Importancia de los celenterados

Mantienen el equilibrio ecológico marino y son refugios (arrecifes de coral) para


muchas especies. También tienen interés económico, pues sus concentraciones
suponen pérdidas pesqueras y peligro para los nadadores que entren en contacto
con ciertas especies (medusas).

Además son usadas para crear joyas (como el coral rojo, por ejemplo).
LOS PORÍFEROS:

Los poríferos son un grupo o filo de animales


invertebrados más conocidos como
esponjas. El nombre del filo hace referencia
al cuerpo de estos animales, que está
perforado por pequeños poros a través de
los que pasa el agua y las partículas de
alimento en suspensión. Es por eso que las
esponjas se consideran filtros de agua.

Antiguamente se clasificaba a los poríferos dentro del reino vegetal por ser sésiles.
Recién en 1765 se observaron las corrientes de agua que se producían en el interior
de las esponjas, lo que llevó a reconocerlas como animales.

Dentro del reino animal, los poríferos se agrupan en el subreino de los parazoos
para diferenciarlos del resto de los animales o eumetazoos. Si bien las esponjas son
animales pluricelulares, su organización, su desarrollo embrionario y el origen de
sus capas celulares son completamente diferentes al de los eumetazoos.

Características de los poríferos

Los poríferos presentan las siguientes características principales:

● Son los animales pluricelulares más simples y primitivos.


● Son sésiles y viven adheridos a rocas, conchas, maderas
sumergidas o corales.
● Viven principalmente en el mar, en aguas poco profundas, aunque
existen 150 especies que son de agua dulce.
● Tienen un nivel de organización celular, donde cada célula funciona
con gran independencia y, por lo tanto, no se considera que formen
tejidos verdaderos.
● Generalmente tienen un cuerpo irregular y un tamaño variable
que va desde unos pocos centímetros hasta un metro de altura y
de diámetro.

Estructura y partes de los poríferos

Los poríferos tienen una estructura corporal


única construida en torno a un sistema de
canales de agua. La superficie de las
esponjas está perforada por pequeños poros,
llamados ostiolos, que desembocan en la
cavidad interior o atrio. El atrio se abre al
exterior por el ósculo, que está ubicado en el
extremo superior de esa cavidad. El agua
ingresa constantemente a través de los
ostiolos, llega al atrio y sale por el ósculo.

En el cuerpo de las esponjas se reconocen tres sectores: el pinacodermo, que


conforma la superficie externa de la esponja; el mesohilo, que es la capa
intermedia; y el coanodermo, que tapiza el atrio:

● El pinacodermo está formado por células aplanadas denominadas


pinacocitos, que son capaces de segregar el material que fija la
esponja al sustrato. A lo largo del pinacodermo se encuentran los
ostiolos. Cada uno está formado por una célula con forma de anillo
llamada porocito, que se extiende desde la superficie hasta el atrio
y, al relajarse y contraerse, permite la apertura y el cierre del poro.
● El mesohilo es una matriz gelatinosa formada por proteínas y
amebocitos que cumplen diferentes funciones, como la digestión. El
mesohilo también contiene al esqueleto de la esponja, cuya función
es dar soporte a las células vivas. Este consta de espículas de
distintas formas y composición, que pueden atravesar el
pinacodermo.
● El coanodermo está formado por una capa de células, llamadas
coanocitos, que se encargan de obtener el alimento. Cada
coanocito tiene un flagelo que se proyecta dentro del atrio y cuyo
movimiento genera una corriente de agua a través de la esponja.
Esta estructura es más compleja en muchos poríferos de gran
tamaño que tienen la pared corporal plegada. En ellos el atrio se
reduce y se forman canales o cámaras flageladas (tapizadas por
los coanocitos), lo cual implica una mayor superficie de obtención
de las partículas alimenticias.

Tipos de poríferos

Existen alrededor de 9.000 especies de poríferos, que se clasifican en tres clases


según su estructura esquelética:

Clase Calcárea o Calcispongiae: conocidas como esponjas calcáreas. Su


esqueleto está formado por espículas individuales de carbonato de calcio.

Clase Hexactinellida o Hyalospongiae: conocidas como esponjas vítreas.


Su esqueleto está formado por espículas de sílice fusionadas en un retículo
continuo.

Clase Demospongiae: comprende al 90 % de las esponjas. Su esqueleto


está formado por espículas no fusionadas que pueden ser de sílice o de
espongina, una proteína semejante al colágeno.

Reproducción de los poríferos

Los poríferos se reproducen tanto de manera sexual como asexual. La reproducción


asexual puede ocurrir por fragmentación, donde una parte del cuerpo se separa y
da origen a un nuevo individuo, o por gemulación. En este proceso, parecido a la
gemación, se forma un agregado de células llamado gémula que está protegida por
una cápsula protectora. De esta manera soporta condiciones ambientales adversas
y, cuando las condiciones son óptimas, da lugar a un nuevo individuo.

La mayoría de las esponjas son hermafroditas, lo cual es ventajoso en animales


sésiles donde no es posible la búsqueda de la pareja. Los coanocitos producen
espermatozoides, que son transportados al exterior por las corrientes de agua.
Asimismo, las corrientes inhalantes de otras esponjas hacen que ingresen los
espermatozoides y lleguen al atrio. Allí, los coanocitos engloban a estas gametas y
las transportan hasta los óvulos que, generalmente, se forman en el mesohilo.

La fecundación se produce de manera interna y, generalmente, el embrión se


desarrolla dentro de la esponja progenitora hasta que llega a la fase larvaria. La
larva flagelada es capaz de nadar libremente hasta fijarse a un sitio apropiado. A
partir de ese momento, comienza a desarrollarse como esponja adulta.

Alimentación de los poríferos

Los poríferos son animales heterótrofos, aunque algunos establecen una relación
simbiótica con organismos fotosintéticos. Se alimentan de las partículas orgánicas
en suspensión y organismos planctónicos (como bacterias y dinoflagelados)
presentes en el agua que bombean. Los coanocitos son los encargados de capturar
el alimento y fagocitarlo. Una vez dentro, los coanocitos transfieren el alimento a los
amebocitos, que realizan una digestión intracelular.

Importancia de los poríferos:

stos animales filtradores desempeñan muchas funciones en su entorno, entre ellas


la de proporcionar una estructura que sustenta una asombrosa diversidad de formas
de vida. Otra función importante de las esponjas marinas es servir de alimento para
peces, tortugas, gusanos, estrellas de mar, entre otros.
IMPORTANCIA DE LOS INVERTEBRADOS:

Este gran grupo de animales es fuente de alimento para otros muchos animales
más grandes, como los vertebrados, incluidos los humanos. Pulpos, calamares,
ostras, cangrejos, mejillones, langostas y muchos invertebrados más forman parte
de nuestra dieta. Además, los invertebrados ayudan en el control biológico de
plagas y equilibran los ecosistemas. Otra de las funciones que algunos de los
invertebrados pueden realizar es la de polinizar, transportando el polen de unas
plantas a otras, fertilizándolas y, por lo tanto, haciendo que se reproduzcan. Gracias
a los invertebrados podemos disfrutar de frutas y semillas, ya que realizan una labor
esencial en la naturaleza.

Muchas especies de invertebrados son utilizados como fuente de materias primas.


De las abejas obtenemos miel, jalea real o cera; gracias a los gusanos y sus
capullos logramos seda con la que confeccionar prendas de vestir y de las ostras
podemos obtener perlas, entre muchos otros ejemplos.

Los invertebrados se ven en peligro debido a la destrucción de sus hábitats


mediante la deforestación, la agricultura intensiva o la urbanización de diferentes
áreas. Todas estas acciones reducen el espacio donde pueden vivir y les obligan a
desplazarse a otras zonas. La contaminación y el cambio climático también afectan
a la supervivencia de los invertebrados dado que son especialmente sensibles a los
cambios en el medio ambiente. Es importante cuidar y mantener la naturaleza y
nuestro entorno para evitar la disminución de las colonias de invertebrados, así
como la extinción de algunas de sus especies.

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