• En la antropología cristiana el ser humano está hecho a
imagen y semejanza de Dios. De ahí se saca que el hombre está hecho de amor, su esencia es amar y su naturaleza es el amor. Por eso, su felicidad es amar. • Ese amor se puede realizar de muchas formas. Pero una de ellas, la prueba inequívoca de ese amor, será el perdón. Comprender y perdonar. • Por eso en la moral cristiana el perdón no es una opción, sino una necesidad. Y por eso el mismo Jesús “manda” perdonar, ¿cómo? como perdona Dios: siempre. Leemos Mt 18,21-35 • Y por eso se le pide al hombre la misma perfección que a Dios: Leemos Mt 5,38-48, que no es otra que amar al enemigo y perdonar.