Está en la página 1de 161

Asignatura

Psicología General
TEMA 1
Conceptos y Teorías

GRADO EN CRIMINOLOGÍA

TEMA 1
Conceptos y Teorías

Autor: Ricardo Zúñiga

1
TEMA 1
Conceptos y Teorías

Unidad didáctica.

Tema 1: Concepto y Teorías


INDICE

I. PRESENTACIÓN ................................................................................................... 3
II. OBJETIVOS. ....................................................................................................... 4
III. ESQUEMA ......................................................................................................... 5
IV. CONTENIDO ...................................................................................................... 6
1. Qué es la psicología .................................................................................... 6
2. Historia de la psicología ............................................................................... 7
3. Principales corrientes psicológicas ............................................................... 11
3.1. Conductismo ........................................................................................ 11
3.2. Psicoanálisis ........................................................................................ 15
3.3. Gestalt ............................................................................................... 20
3.3.1. Terapia gestáltica ................................................................................. 21
3.4. Cognitivismo ........................................................................................ 21
3.5. Enfoques humanistas ............................................................................. 22
3.6. Otros enfoques ..................................................................................... 23
4. Conceptos generales ................................................................................. 24
4.1. Personalidad ........................................................................................ 24
4.2. Psicoterapia ........................................................................................ 27
4.3. Trastorno mental .................................................................................. 29
V. RESUMEN ........................................................................................................ 31
VI. GLOSARIO ...................................................................................................... 35
VII. BIBLIOGRAFIA................................................................................................. 39
VIII. ACTIVIDADES ................................................................................................. 41
IX. ANEXOS ......................................................................................................... 42

2
TEMA 1
Conceptos y Teorías

I. PRESENTACIÓN

Este primer apartado se revisan las bases de la disciplina científica de la psicología


general, sus supuestos básicos, conceptos y principales teorías.

3
TEMA 1
Conceptos y Teorías

II. OBJETIVOS.

 Conocer el origen de la psicología y de su campo de estudio

 Conocer los principales conceptos de la psicología

 Conocer las principales teorías de la psicología

4
TEMA 1
Conceptos y Teorías

III. ESQUEMA

Conductismo

Historia Psicoanálisis

Enfoques Terapia
Gestalt
teóricos gestaltica

Cognitivismo
Qué es
Fenomenología
Psicología
Otros

Sistemico

Personalidad

Conceptos
Psicoterapia
generales

Trastorno
mental

5
TEMA 1
Conceptos y Teorías

IV. CONTENIDO

1. Qué es la psicología

La palabra psicología viene de psique (alma) y logos (saber o estudio). Literalmente


significa la ciencia de la mente. Se utiliza el término psicología para denominar a
la ciencia que estudia la conducta y los procesos mentales (Finchan y Hewstone,
2005). La psicología es una ciencia porque, para obtener conocimientos, se basa en
el método científico.

Su objeto de estudio son los procesos mentales y el comportamiento humano. La


conducta hace referencia a las acciones y respuestas observables del ser humano y,
por tanto, se pueden medir y verificar. El término procesos mentales, en tanto,
incluye actividades internas que no pueden ser directamente observadas, entre las
principales están las cognitivas y las afectivas. Estas actividades mentales son las
fundamentales para entender todas las demás que están subdivididas entre estos
dos tipos de procesamiento de información. Aunque distintas, estos dos tipos de
procesos están muy entrelazados entre sí, pudiendo generar influencias unos en
otros. En la psicología actual se acepta que los afectos influyen sobre las
cogniciones y que estas, a su vez, influyen sobre los afectos.

Las cogniciones son aquellas actividades mentales como las percepciones, las
creencias, recuerdos e ideas, que están estructuradas como premisas de
conocimiento consciente, es decir están racionalizadas de forma que se puede
enunciar y describir. Los afectos son los procesos mentales que incluyen los
sentimientos o estados emocionales de las personas (Delgado Losada, 2015), no
están estructurados como premisas enunciables, sino como sensaciones corporales,
salvo cuando se intenta racionalizarlos conscientemente.

Como toda ciencia, la psicología tiene por objetivo: describir, explicar, predecir y
controlar su objeto de estudio, es decir, estos procesos mentales y conductas.

6
TEMA 1
Conceptos y Teorías

La descripción de un objeto de estudio es lo que denominamos conocimiento


empírico, el conocer estructura, características y composición de un fenómeno
determinado. La explicación es más profunda, implica comprender el fenómeno,
propone una secuencia de hechos generativos y sus consecuencias. La predicción es
el resultado de una teoría que explica el proceso, que permite adelantarse a las
consecuencias de los hechos generativos. Finalmente, el control es el objetivo
último de toda ciencia, por ello la psicología busca controlar los procesos mentales
y las conductas de las personas.

Es así como se fundamenta los distintos modos de influir sobre las personas que ha
desarrollado la psicología, como es la psicoterapia, la intervención comunitaria, la
comunicación persuasiva, la rehabilitación, el neuromarketing y muchas otras áreas
que buscan influir sobre las personas a partir de los conocimientos desarrollados
por esta disciplina.

2. Historia de la psicología

La psicología en su origen era filosófica. Los griegos nos legaron mucho del
pensamiento antiguo sobre el ser humano desde la perspectiva del estudio del alma
o lo que hoy en día podríamos llamar el sentido de lo humano. Esta perspectiva
filosófica o metafísica, se dividió en una perspectiva naturalista, liderada por
Aristóteles (384-322 a.C.), y una perspectiva espiritualista, liderada por Platón
(427-347 a.C.). De la visión de Aristóteles surgió la postura del empirismo, que
niega la existencia en la pisque humana de cualquier idea previa a la experiencia
del sujeto (aborda el análisis psicológico centrado en los datos y no en el uso de la
razón); mientras que de la visión de Platón surgió la postura del racionalismo,
apostando por el poder de la razón humana, que procede del mundo de las ideas,
como fuente principal de conocimiento, presentes en la entidad espiritual (alma), y
que es distinguible de la entidad física humana (cuerpo).

Tras Platón y Aristóteles, múltiples pensadores de la Antigüedad, la Edad Media y el


Renacimiento han ayudado a profundizar en la mente de los seres humanos. Santo
Tomás de Aquino (1225-1274) inició una reinterpretación de la psique humana

7
TEMA 1
Conceptos y Teorías

basándose en el modelo de Aristóteles, lo que dio lugar a un movimiento filosófico


y teológico conocido como la escolástica, que fue la antesala de los grandes
descubrimientos del Renacimiento, que hicieron posible después un mayor
conocimiento del ser humano y el universo.

En el siglo XVII, cuando René Descartes (1596-1650) concibe una nueva visión del
ser humano en donde lo divide en mente y cuerpo. Según Descartes, el cuerpo se
regía por un mecanismo físico que permitía la interacción del individuo con el
medio ambiente en forma de arco reflejo, mientras que el alma pensante era la
puerta de la conciencia que, a diferencia de los animales, albergaba el lenguaje y
el pensamiento.

Hasta el siglo XVII, la psicología estuvo centrada en el estudio del alma. Sin
embargo, con los descubrimientos ocurridos dentro del período de las revoluciones
científicas, la mente y su funcionamiento ganaron protagonismo frente a los
enfoques centrados en el estudio del alma. En este contexto, el empirismo inglés
cobró relevancia. Thomas Hobbes (1588-1679) describió la mente como un registro
de movimientos internos del cerebro, activados por el movimiento de objetos
externos presentes en la realidad física, mientras que John Locke (1632-1704)
anunció que la mente de los/as niños/as era una tabula rasa, un papel en blanco,
en la que se grababan las experiencias del ambiente en la memoria y que darán
paso a las ideas. Esas ideas eran manejadas por unas capacidades mentales innatas,
dando lugar así a la distinción entre lo innato y lo adquirido desde el ambiente, es
decir, lo heredado y lo aprendido. La tabula rasa da cuenta de lo aprendido, es
decir, de que los seres humanos no tienen una naturaleza (buena o mala)
preconcebida, sino que lo que prima es el aprendizaje a partir del ambiente. Por
otro lado, está la visión innatista, vinculada a la herencia genética, o una supuesta
naturaleza humana como tendencia habitual hacia algunas conductas. (Este debate
ha sido parcialmente ganado por la visión del aprendizaje, sin embargo, con la
aparición de las neurociencias y la genética el debate ha emergido nuevamente, ya
que se estudian nuevamente datos biológicos que expliquen la conducta, más allá
de las condiciones del ambiente.)

8
TEMA 1
Conceptos y Teorías

Con el surgimiento del método científico a partir del siglo XVII, es decir, de la
observación rigurosa y sistemática, sin prejuicios, y un registro fiable y detallado
de los procedimientos realizados, las técnicas empleadas y de los datos obtenidos,
comienza la modernidad en la cual ya es posible hablar de ciencia en el sentido
actual.

En el siglo XVIII, David Hartley (1705-1757) propuso la sistematización de la


organización de las ideas en la conciencia a través de los principios asociativos de
semejanza, contraste y contigüidad, principios que procedían de la filosofía
asociacionista de Aristóteles. A estos autores británicos, posteriores al empirismo,
se les conoció con el nombre de asociacionistas. Para ellos, la asociación de ideas
era la forma en que se organizaba la mente humana y, por tanto, señalaban que la
tarea principal de la psicología debía ser tanto el estudio de las ideas, así como las
sensaciones de las que emanan y las formas asociativas que unen ambos elementos
en la mente del ser humano.

Los principios del asociacionismo se comenzaron a cuestionar a comienzos del siglo


XIX, a la vez que se producía un impulso de la fisiología experimental tanto en
Francia como en Alemania. La cartografía precisa de las áreas de control del
lenguaje y la memoria, junto con el estudio de los nervios motores y sensoriales,
contribuyeron a reforzar la opinión de que el cerebro era la sede de la mente. A
ello ayudaron los descubrimientos acerca de la naturaleza eléctrica del impulso
nervioso. Todo esto contribuyó a desplazar definitivamente la creencia de que el
alma era la responsable de toda la actividad orgánica.

La psicología experimental se puede decir que nace con Wilhem Wundt (1832-
1920), quien en 1879 fundó el primer laboratorio de psicología experimental en
Leipzig, Alemania, con el objetivo de estudiar la experiencia inmediata y
observable a través del método experimental. La psicología experimental de Wundt
es el eje sobre el que surge la psicología como nueva ciencia independiente.

9
TEMA 1
Conceptos y Teorías

Wundt señala en su obra Principios de psicología fisiológica (Wundt, 1873) que los
procesos más simples de la conciencia podían analizarse a través de lo que
denominó psicología individual, es decir, a través de la auto-observación
experimental (introspección). En cuanto a los procesos mentales complejos, en su
libro Elementos de la psicología de los pueblos (Wundt, 1912), señala que estos
tienen su origen en factores sociales y culturales como las tradiciones, el folclore,
las costumbres, etc. Estos factores de la psicología de los pueblos, base de la
psicología colectiva, son elementos mentales o procesos psíquicos que no estaban
al alcance de la experimentación en laboratorio ni mediante la psicología
individual. La psicología experimental de Wundt no tuvo mucho éxitos, sin
embargo, sus alumnos y su planteamiento de experimentación con individuos
utilizando el método científico sí fue muy exitoso y representa hasta la actualidad
el principal enfoque académico de la psicología.

Poco después de que Wundt fundó su laboratorio, en París en 1885, el neurólogo


austriaco, Sigmund Freud llega al hospital Salpetrière a trabajar con Jean Martin
Charcot, donde comenzará sus reflexiones sobre el inconsciente humano a partir de
los estudios de pacientes con histeria. Freud descubre una relación entre los
síntomas de los pacientes y situaciones críticas de sus vidas, descubriendo,
además, que hablar de dichas situaciones traumáticas les ayudaba a recuperarse.
El psicoanálisis aportará tres conceptos fundamentales para la historia de la
psicología: el inconsciente, la personalidad y la psicoterapia.

Estas dos tendencias en psicología, la empirista o experimental y el psicoanálisis,


forman las bases de los distintos enfoques que se desarrollarán en la psicología
durante el siglo XX.

10
TEMA 1
Conceptos y Teorías

3. Principales corrientes psicológicas

3.1. Conductismo

Los estudios de Wundt abrieron el camino para la psicología empírica, centrada en


los hechos observables, factibles de analizar, contabilizar y someter a
experimentación. A comienzos del siglo XX John Watson (1978 – 1958), inaugura el
conductismo en 1913, con su primer artículo, en el que expone los principios de lo
que se llamará luego el Conductismo Clásico, basado en el asociacionismo de
estímulo y respuesta.

A partir de los estudios del fisiólogo ruso, Iván Pavlov (1849 – 1936), sobre el
reflejo condicionado, ya se había consolidado la idea de la asociación entre dos
estímulos distintos, pero asociados, para lograr la misma respuesta. El experimento
más conocido de Pavlov consistía asociar la alimentación de unos perros
hambrientos con otro estímulo neutro (no relacionado con la alimentación) para lo
cual empleó una campana, llega un momento en que la respuesta de salivación de
los perros frente a la inminente alimentación se producía con ausencia de
alimento, solo con tocar la campana, demostrando que se pueden producir
respuestas por asociación y por tanto controlar la conducta de los sujetos con una
adecuado programa conductista.

Este sencillo principio es el que desarrolla en específico Watson para mostrar que
el aprendizaje de conductas en los seres humanos es por asociación, y si se lograr
asociar las respuestas específicas a los estímulos adecuados, todo el
comportamiento de una persona podría programarse. Este hallazgo experimental,
comprobable y aplicable a distintos estímulos probó dos cosas, primero, que se
puede hacer una psicología experimental con un objeto de estudio completamente
objetivo, como es la conducta observable. Y, segundo, demostró que este principio
de asociación es totalmente insuficiente para comprender la mayor parte del
comportamiento complejo humano.

En este punto del conductismo aparece en escena Burrhus Frederic Skinner (1904 –
1990), que realizó en 1948 el famoso experimento de la caja de Skinner que

11
TEMA 1
Conceptos y Teorías

convertiría al conductismo en una de las principales corrientes de la psicología,


especialmente en la psicología de la educación y el aprendizaje. Skinner descubrió
que unas palomas hambrientas dentro de una caja que daba alimentación a
intervalos regulares aprendían cualquier conducta que realizaran antes del
suministro de comida. Posteriormente demostró que suministrando esta
recompensa después de cada conducta esta se reforzaba, con lo que se podía
enseñar a las palomas un comportamiento nada natural, como jugar al ping pong o
dirigir proyectiles contra blancos móviles.

Este fenómeno, el aprendizaje de una conducta asociada a la recompensa es lo que


se denomina condicionamiento operante, en contraposición al condicionamiento
clásico de Watson significó un gran avance en la psicología del comportamiento,
pudiendo aplicarse a casi cualquier situación humana. De este enfoque surgirán
todas o la mayoría de las explicaciones de la conducta humana basada en el
ambiente directo, o más bien, en la historia de los refuerzos ambientales. Un
ejemplo de esto sería un niño que soluciona un problema como la burla de sus
pares con un golpe a uno de ellos, las burlas se detienen y algunos de sus pares le
brindan respeto y admiración, por lo que el niño aprende que cada vez que se
enfrenta a ese tipo de problemas los puede solucionar de ese modo.

La clave de la recompensa para que actúe como refuerzo conductual sería la


inmediatez, mientras más claramente estén asociados la conducta y su recompensa
más claramente ésta será reforzada y se convertirá en un comportamiento
aprendido que luego no requerirá de recompensa para reproducirse. A este
comportamiento se le denomina conducta instrumental u operante, ya que se
adquiere con el fin de obtener una recompensa, es decir, como instrumento para
un fin, opera sobre la realidad para producir una consecuencia. Otra consecuencia
de la conducta es el castigo, en cuyo caso no hay recompensa y lo que se pretende
es extinguir la conducta, lo que obtiene resultados más bajos que el de reforzar
conductas con premios, según todos los experimentos realizados en la época.

12
TEMA 1
Conceptos y Teorías

Así surgen algunas denominaciones relevantes para los cambios conductuales


basados en teoría conductista utilizando dos parámetros, la existencia (positiva) o
evitación (negativa) de la consecuencia y si esta es un premio o un castigo:

Consecuencia Premiación Aversión

Presencia (otorgar algo) Refuerzo positivo Castigo positivo

Evitación (quitar algo) Refuerzo negativo Castigo Negativo

El refuerzo positivo es el premio después de realizar la acción esperada (conducta


operante): la comida en el entrenamiento de un perro o las alabanzas de los padres
a un niño que ha hecho algo bien. El refuerzo negativo es la finalización o evitación
de un estímulo aversivo realizando la conducta operante esperada: padres que
levantan restricciones de horario de salida a su hija si saca buenas notas.

Los castigos son para extinguir conducta, por lo que son consecuencias
desagradables. El castigo positivo será la inmediata consecuencia de un estímulo
aversivo o desagradable, como el caso de un golpe después de una conducta a
extinguir. El castigo negativo será quitar consecuencias positivas cuando se deja de
realiza la conducta a extinguir, por ejemplo, en el caso de los padres que quitan
derechos a los hijos cuando sacan malas notas (quitar internet).

Las consecuencias de estas definiciones son importantes para la educación y para la


psicología en general. Por ejemplo, si cada vez que estoy triste (conducta
operante) toda la familia se preocupa de mí, me dan mimos y cosas agradables,
puede que estén reforzando positivamente mi tristeza. Por otro lado, si cada vez
que soy bueno con mi hermano termino perdiendo o estropeando mis juguetes y
mis padres no intervienen aprenderé, por castigo negativo, a no ser buen hermano.

En el caso de conductas agresivas o delictivas, evidentemente se aplican las


mismas leyes del refuerzo. Por ejemplo, la delincuencia de jóvenes en situación de
calle o de pobreza extrema, podría estar siendo estimulada porque los
adolescentes logran mejores condiciones de vida en un lugar de reclusión que ene l
acalle o incluso en sus viviendas pobres, mal acondicionadas, hacinadas y sin

13
TEMA 1
Conceptos y Teorías

alimentación regular, con violencia, drogas o abusos, con lo cual se refuerza la


conducta delictiva mediante el refuerzo negativo, al dejar de vivir tan mal, pasan a
un lugar malo, pero menos malo que el que vivían. Por ello acabar con la
delincuencia no es solo cosa de castigar positivamente, mediante las penas, los
delitos.

Igualmente, la postergación del castigo por muchos meses y hasta varios años, hace
perder toda capacidad de remisión al castigo positivo de la pena, ya que si el
castigo sobreviene tres o cuatro años después de cometer el delito pierde su
capacidad de estar asociado a la conducta delictiva.

Aprendizaje vicario

El poder de la recompensa para el refuerzo de la conducta resulta tan potente que


incluso funciona virtualmente. El psicólogo canadiense Albert Bandura, planteó en
1977 sus propuestas de aprendizaje vicario u observacional, que es el refuerzo que
se produce en una persona que observa la conducta de otros y las consecuencias de
sus conductas (sus recompensas), debido a lo cual aprende que conducta realizar
para obtener similares recompensas. Este aprendizaje social es el que daría cuenta
de gran parte del comportamiento humano en sociedad. Un ejemplo: si una
persona ve desde la niñez que los hombres que maltratan mujeres no reciben
ningún castigo e incluso reciben premios, como ser considerado un hombre fuerte,
un macho, o se le ve con admiración por su virilidad, lo que aprende ese niño es
que si desea ese tipo de premio o recompensa deberá comportarse como aquellos
hombres. Esto es aplicable a los chistes machistas, homófobos, racistas, etc., que
refuerzan, con la recompensa de las risas de los que escuchan, las conductas que
humillan, inferiorizan, ridiculizan o, incluso, lastiman, a personas con esas
características, pero que al estar premiados con la risa y la admiración del público
se convierten en conductas aprendidas por todos quienes las observan, no solo por
quien recibe las risas y aplausos.

El conductismo radical comienza su declive en los años 70’, cuando el propio


Skinner tuvo que reconocer que la conducta era insuficiente para entender los

14
TEMA 1
Conceptos y Teorías

problemas humanos y admitió el valor del cognitivismo, que se basa en las mismas
premisas que el conductismo: empirismo científico y refuerzo instrumental, pero
que considera también los procesos mentales como objeto de la psicología.

3.2. Psicoanálisis

El psicoanálisis es el nombre que Sigmund Freud (1856-1939) dio al método


mediante el cual se realiza un análisis de la dinámica psíquica de una persona,
mediante el habla o relato de hechos relevantes de la vida que podrían provocar
problemas y traumas inconscientes que deben volverse conscientes mediante la
introspección guiada por un analista. Posteriormente el psicoanálisis se ha
convertido en una teoría del ser humano y de la sociedad, así como una perspectiva
analítica además de un método terapéutico.

La influencia del psicoanálisis se extiende a muchos ámbitos tales como la filosofía,


la antropología, la política e incluso el arte, por lo que es difícil clasificar el
psicoanálisis como una escuela exclusivamente psicológica. Parte importante de su
influencia se basan es que es la primera propuesta coherente y global del
funcionamiento de la psiquis humana que no está basada en presupuestos
teológicos o premisas morales, y que permite explicar una importante cantidad de
comportamientos complejos que hasta entonces eran difíciles de comprender. Por
otro lado, además de ser internamente coherente y profundamente bien
estructurada, es estéticamente muy atractiva, ya que desafiaba de forma muy
sólida los preceptos sociales, políticos y morales de la época.

Freud comienza sus estudios de la psiquis en 1885, bajo la guía de Charcot, como
se ha dicho antes. Pero su perspectiva original es neurológica, no psíquica, pensaba
que los problemas psiquiátricos se debían a problemas en el cerebro o en el resto
del cuerpo, de hecho, sus estudios iniciales fueron con mujeres histéricas, es decir
diagnosticadas con un síndrome que supone propio de los efectos del útero sobre el
cerebro. Sin embargo, pronto se dio cuenta de lo contrario, a partir del
tratamiento y mejoría de la paciente más famosa del comienzo del psicoanálisis,
Ana O, quien sufría de una parálisis parcial de un brazo sin razones biológicas para

15
TEMA 1
Conceptos y Teorías

que lo explicaran (por ello recibía el diagnóstico de histérica, muy habitual en la


época victoriana). A partir de este caso, tratada con hipnosis por su mentor Josep
Breuer, descubre que hablar de los problemas de su vida producía mejoras
importantes y descubre que el brazo paralizado de Ana O, era con el que sostuvo a
su padre en el lecho de muerte, a quien estaba muy unida. Este caso es altamente
relevante en la historia de la psicología y del psicoanálisis, pues contiene el germen
de los elementos que harán potente (a la vez que controvertido) al psicoanálisis. Se
aprecia ya en este caso la fuerza de los procesos inconscientes en los trastornos
humanos y en su dinámica psíquica normal. También se aprecia la relevancia de los
padres en la vida psíquica, así como la capacidad curativa del habla como método
terapéutico.

El propio psicoanálisis es posible de explicarse, como fenómeno histórico, por los


principios del psicoanálisis, como método analítico, ya que las vivencias de Freud
en su familia y su tiempo (el fin de la época victoriana y el período entre las dos
guerras mundiales) permiten entender los principios de sus propuestas teóricas y el
énfasis que pone en algunos de sus conceptos, especialmente en los relacionados
con el sexo y el centralismo del padre como símbolo de poder y norma.

Freud sistematizó un método de exploración del inconsciente y de su


funcionamiento, cuyas bases se sitúan en la fisiología alemana, la biología
evolucionista de Darwin, la psicofísica alemana y la psiquiatría francesa, así como
en la formación recibida durante su estancia en el Hospital de la Salpetriere (París)
junto al Charcot.

La primera gran obra del psicoanálisis, La interpretación de los sueños (Freud,


1900), sintetiza su primera teoría del aparato psíquico, también conocida como la
primera teoría tópica. Esta obra plantea lo que se ha denominado la primera
tópica, es decir, la primera propuesta de estructura psíquica del psicoanálisis:
consciencia, preconciencia e inconsciencia. Las relaciones y tenciones entre estas
tres fuerzas internas de la psiquis es la razón por la cual se denominará “dinámico”
a este enfoque.

16
TEMA 1
Conceptos y Teorías

• Conducta y pensamiento voluntario


Consciente • Memoria continua y temporal
• Regido por la lógica y el principio de realidad

• Conducta y pensamiento subconsciente que puede


hacerse consciente en el momento deseado
Preconsciente • Memoria a voluntad o mediante hipnosis
• Regido por la lógica y el principio de realidad

•Procesos de pensamiento y conduta de los cuales el


sujeto no se da cuenta
Inconsciente •Discontinuidad espacial y temporal, mezcla tiempos y
situaciones
•Regido pro el principio del placer y la irracionalidad

Esta relación de tensión entre cosas que la dinámica psíquica oculta en el


inconsciente para preservar la integridad de la mente consciente o porque esta no
acepta los preceptos de la razón o la moral que exige la mente consciente. Así es
como el análisis de sueños cobra relevancia en el enfoque, como también la
hipnosis, que son medios de acceder a estos contenidos que han sido censurados,
por mecanismos de defensa como la represión selectiva.

Insatisfecho con la capacidad analítica de la primera tópica, en 1920, plantea la


segunda tópica, también conocida como teoría estructural de la personalidad,
dando luz a tres estructuras o espacios psíquicos que mantiene la dinámica de la
personalidad. Esta tópica plantea la existencia del yo, el ello y el superyó,
publicada en el libro El yo y el ello (Freud, 1923) delimita una nueva división entre
el inconsciente y el consciente, con una relación más dinámica que primera tópica,
en la que cobran importancia el principio del placer y de la realidad, así como las
relaciones con los padres o cuidadores, cuyo resultado final en el superyó será
fundamental en el desarrollo psicosexual del sujeto, que puede ser fuente de
superación y guía social y moral o fuente de trastornos y traumas en el adulto.

17
TEMA 1
Conceptos y Teorías

La estructura dinámica de la personalidad se establece como una compleja y


conflictiva relación de fuerzas inconscientes y conscientes que proviene de estas
tres estructuras. En esta teoría el yo es la parte más visible y consciente de la
personalidad, y también la más superficial (en el sentido psíquico), donde está
nuestra voluntad y memoria consciente. El superyó es la estructura relacionada con
el deber y la norma, son los padres al interior de la psiquis, los límites sociales de
la acción y las motivaciones deseables de nuestras obligaciones, solo parcialmente
consciente, el resto es preconsciente e inconsciente. El Ello es completamente
insconsicente, la estructura más profunda de la personalidad, donde están los
deseos y fantasías menos aceptadas por nuestra parte consciente, además de
pulsiones muy básicas, que no necesariamente tiene forma verbal accesible.

1: Estructura dinámica de la personalidad

CONSCIENTE
Super yo
PRECONSCIENTE
(Super Yo (Ego)
ego)

INCONSCIENTE

Ello

El énfasis en lo sexual como parte vital de los contenidos inconscientes y dinámicos


de la psiquis es una de las fuentes constantes de debates y la razón por la cual se
ha denominado, peyorativamente, a esta teoría como pansexual, en el sentido de
que todo lo que causa la dinámica fundamental de la psiquis humana sería de
origen o interpretación sexual. Esto es, en parte, fruto de la mala interpretación
de los procesos simbólicos que se describen en el psicoanálisis, fundados en el

18
TEMA 1
Conceptos y Teorías

constante conflicto entre los principios del placer y de la realidad (eros y tánatos),
que se han cosificado en cuestiones concretas del sexo real, cuando se refieren
más bien a dinámicas intrapsíquicas, donde el sexo es uno de los placeres
fundamentales.

Su última teoría de las pulsiones quedó sintetizada en las obras, Más allá del
principio del placer (Freud, 1920) y El malestar en la cultura (Freud, 1930), donde
describe la forma en que se producen los trastornos mentales del sujeto, residente
en las relaciones del amor y odio, fruto de las dinámicas de los impulsos de Eros y
Thanatos. El eros representa la búsqueda del placer en todos sus sentidos, sin
límites ni normas, el thanatos es la tendencia la pulsión de muerte, la tendencia al
orden y la norma.

Freud tuvo muchos discípulos connotados en el desarrollo del psicoanálisis y la


psicología, como Alfred Adler (1870-1937), que desarrolló teoría de la psicología
individual y sobre el complejo de inferioridad; Carl Gustav Jung (1875-1961),
investigador del inconsciente colectivo, la extroversión frente a introversión, los
arquetipos, etc.; Anna Freud (1895-1982), autora de El yo y los mecanismos de
defensa (1936) o Melanie Klein (1882-1960), que desarrolla una de las teorías más
polémicas sobre la dinámica de la mente de neonatos, llevando el psicoanálisis al
desarrollo psicológico infantil.

Muchas de las propuestas de Freud y del resto de los teóricos del psicoanálisis han
sido relevantes para generar un marco comprensivo de cómo funcionan los
trastornos mentales, aunque para muchos investigadores el psicoanálisis no es un
enfoque científico (y de ahí que algunos no lo consideren parte de la psicología
como ciencia). En cuanto a su aporte a la comprensión de la delincuencia, hay
muchas subteorías planteadas por el propio Freud o por sus discípulos que han
tenido cierta relevancia en la forma de entender los delitos. Lacan, Milner y Zuleta
y otros autores han planteado distintas aproximaciones psicoanalíticas a la
delincuencia, con distintos grados de éxito. Todas ellas aportaron desde un
comienzo la visión de que una persona que comete un delito no es distinta a una
persona que no lo comete, perspectiva muy aceptada antes del psicoanálisis.

19
TEMA 1
Conceptos y Teorías

3.3. Gestalt

La psicología de la gestalt recibe su nombre un término alemán que significa


aproximadamente forma, en el sentido de configuración global de algo. Es una
escuela alemana de principios del siglo XX que continuó los estudios de Wundt,
pero centrados en la percepción y la memoria más que en las ideas y la
introspección. Algunos de los máximos representantes de este enfoque son: Max
Wertheimer, Wolfgang Köhler, Kurt Koffka y Kurt Lewin.

Esta perspectiva psicológica plantea que la mente funciona con percepciones


globales de las cosas y no con partes de ellas, por lo cual acuñan la premisa del
principio de totalidad, en coincidencia con el dicho de “el todo es más que la suma
de las partes”, en directa crítica al conductismo y el asociacionismo.

El planteamiento base es que la mente concibe las ideas como totalidades y


tenderá a completar una idea en una globalidad, independiente de sus partes, he
incluso tenderá a ignorar elementos para mantener la idea de totalidad. La que
puede cambiar según donde se centren las percepciones.

Experimentos importantes para la historia de la piscología, como las percepciones


de totalidad, conocida como ley de cierre: tendencia de la experiencia perceptiva
a generar una forma simple a los estímulos recibidos según su cercanía a una forma
conocida. Por ejemplo, en la figura vemos círculos o triángulos, aunque estos no
están verdaderamente dibujados.

Otro principio es el de la semejanza, la tendencia a agrupar estímulos que se


parecen entre sí. O el principio de figura fondo, que implica que no podemos

20
TEMA 1
Conceptos y Teorías

percibir a la vez como figura y como fondo una


misma totalidad, por lo que podemos percibirlo de
una u otra forma, según donde pongamos la
atención perceptiva, lo que popularizo la imagen
de la copa y las caras.

El gran aporte de este enfoque, además de muchos


de los principios perceptivos de la mente humana
válidos hasta la actualidad, es que estos principios
se descubren mediante experimentación,
sometiendo a muchas personas de muy distintas características a idénticas
estímulos, con lo cual sientan las bases de la experimentación futura en psicología.

3.3.1. Terapia gestáltica

Muy posteriormente, en los años 50, el matrimonio compuesto por el Fritz Perls y
Laura Posner, plantean en Johannesburgo su Terapia Gestáltica, basada en la idea
de totalidad como principio de que rige las necesidades de comprensión de la vida
y de sus momentos. Este enfoque, sin embargo, tiene mucha más influencia del
psicoanálisis que de la Escuela de la Gestalt, de donde coge el nombre, aunque
muy distinta a ambas tendencias, como enfoque psicológico y como terapia, tanto
en sus métodos como en sus orientaciones teóricas, es mucho más cercana a las
escueles humanistas de los sesenta. (De hecho, Fritz Perls enseña en Berkley
cuando se traslada a California, y para algunos es uno de los padres del movimiento
hippie).

3.4. Cognitivismo

A partir de los años 50 del siglo XX comienza a expandirse la insatisfacción con el


conductismo extremo, que negaba ningún papel a la mente en el comportamiento
humano, dejándola como una caja negra de la que no se podía ocupar la ciencia,
pues no se podía observar. Se acumula una necesidad de explicar mejor algunos
procesos humanos como el rol del pensamiento en la conducta, los principios
perceptivos de la gestalt o el cómo se convierte algo en una consecuencia valorada
por el sujeto, más allá de las necesidades básicas, como para que sea considerada

21
TEMA 1
Conceptos y Teorías

un refuerzo. Estas tendencias dan origen a un enfoque que se podría considerar una
evolución del conductismo, ya que conserva muchos de sus principios
epistemológicos y metodológicos, así como parte importante de la teoría del
refuerzo como base teórica. Pero, a diferencia del conductismo, plantea la mente
como un mediador activo entre el mundo circundante y las conductas humanas, con
lo cual se abre a estudiar los procesos mentales de forma científica experimental.

Este enfoque ha sido muy fructífero y heterogéneo en su producción teórica y sus


hallazgos experimentales. Se relacionan con este enfoque a teóricos de la
psicología como el estadounidense Edward Tolman, que siguiendo el ejemplo de la
Gestalt experimenta a partir de 1932 con los procesos mentales en el aprendizaje
en con ratas. Por otro lado, y sin ningún nexo concreto, se considera dentro de los
precursores de este enfoque a los neuropsicólogos rusos, discípulos de Vygotzki.
Alexandr Luria y Aleksei Leontiev, y sus aportes a la psicología del desarrollo y el
aprendizaje relacionados con el desarrollo neurológico.

En la actualidad, gran parte de la psicología experimental se basa en este enfoque,


que considera el objeto de estudio la conducta y los procesos mentales,
especialmente los procesos básicos como la percepción, la memoria, la
inteligencia, el lenguaje, etc.

3.5. Enfoques humanistas

A partir de la segunda guerra mundial la insatisfacción con la modernidad el


progreso, así como con sus preceptos de positivismo científico y racionalidad
afectan a toda la vida social y con ello al desarrollo de la psicología. Desde la
década de 1950 surgen propuestas diversas que permiten comprender al ser
humano desde perspectivas más holísticas, que buscan integrar las emociones
dentro de la ecuación de comprensión de la persona y su mundo interior, que el
racionalismo tanto del psicoanálisis como del conductismo tendían a ignorar en su
valor vivencial. Entre las propuestas más destacadas de esta corriente que se
denominó genéricamente como humanismo se puede citar al ya mencionado Fritz
Perls y su terapia gestáltica, a Abraham Maslow, con las propuestas de las

22
TEMA 1
Conceptos y Teorías

motivaciones humanas y la autorrealización como centro de las preocupaciones de


la psicología, Carl Rogers y su terapia centrada en el cliente (no en el paciente), y
Viktor Frankl, que a partir de su experiencia en campos de concentración plantea
la Logoterapia o terapia del sentido, planteando que la búsqueda del sentido es el
principal motivador de la conducta y la felicidad humana.

Se podrían citar muchos autores, pero estos son los más representativos de un
movimiento muy heterogéneo que coincide en abandonar las líneas racionalistas de
la experimentación y el análisis, que solo llevan a una visión negativa del mundo y
del ser humano, para centrarse en los aspectos positivos de la experiencia de la
vida y la búsqueda del bienestar y la felicidad.

3.6. Otros enfoques

Existen algunos enfoques más que los descritos, se ha hecho énfasis en los
históricamente más relevantes para la psicología y que pueden tener relevancia al
momento de comprender la conducta humana desde la criminología, sin embargo,
hay enfoques relevantes desde el punto de vista de la psicoterapia actual que no
sean desarrollado debido a su poca relación con la criminología. Algunos de estos
enfoques son:

Enfoque fenomenológico, principalmente utilizado en psiquiatría para el


diagnóstico de trastornos y síndromes, es la base del Manual of Mental Disorders o
DSM, actualmente en su 5ª versión, publicado por la APA (American Psychiatric
Association) y utilizado en todo el mundo como manual diagnóstico en salud
mental. La base del manual es la fenomenología en el sentido de que se diagnostica
según la vivencia del fenómeno de parte del sujeto, es decir, según como vive su
trastorno el paciente, se hace un inventario de síntomas que agrupados de cierta
forma son un diagnóstico u otro.

Enfoque sistémico, con base en las ideas de Von Bertalanffy (1901 – 1972) que
planteó la existencia de totalidades autocontroladas en los sistemas biológicos,
como las células o el sistema endocrino. Desde el Mental Research Institute, de la

23
TEMA 1
Conceptos y Teorías

Universidad de Berkley, se ha desarrollado este enfoque desde los años 80’ por
autores como Bateson y Watzlawick, como algunos de los más mencionados. Esta
visión, llevada al ámbito de la psicología, ha permitido una aproximación diferente
a las familias, los grupos y las organizaciones, tratando el síntoma como parte
necesaria del funcionamiento del sistema, que orienta en la búsqueda de una
reorganización sistémica para superar el problema. Es un enfoque no
patologizante, es decir, no acepta la existencia de la enfermedad mental como tal,
sino que plantea que esta aparece como parte de la estabilidad en que un sistema
realiza su operación de forma que busca un equilibrio interno. La intervención es
una reorganización para que la operación conserve sus objetivos cambiando sus
procesos nocivos para los sujetos. Este enfoque se centra en las relaciones,
especialmente comunicacionales, y no en los procesos individuales.

A partir de este enfoque general se han desarrollado muchas subáreas de la


psicología actual, como la programación neurolingüística (PNL), el Coaching, o la
terapia familiar estructural.

4. Conceptos generales

Como ya se ha mencionado antes, existen algunos conceptos relevantes para


entender la psicología y especialmente para entender la relación de esta con la
criminología. Se hará una revisión primaria de algunos de estos conceptos a
continuación.

4.1. Personalidad

La idea de personalidad proviene del psicoanálisis, y por ello muchas veces no


encontramos esta palabra en algunos libros de psicología. La palabra es una
derivada de los personajes de las obras teatrales griegas, que hacía referencia a las
máscaras que estos utilizaban en la representación. La idea de Freud es que los
sujetos son personas en la medida de que son actores tras una máscara que la
sociedad y la moral les obliga a utilizar y que solo haciendo consciente lo

24
TEMA 1
Conceptos y Teorías

inconsciente se supera esa situación, cosa imposible de realizar sin un psicoanálisis


profundo.

Sin embargo, el concepto ha trascendido el psicoanálisis, por lo que en la


actualidad se utiliza este término para hablar de un conjunto de características
específicas, algunas compartidas (rasgos) y otras idiosincráticas que establecen una
tendencia a actuar y procesar información de un modo habitual en un individuo.
Por su puesto, como con otros conceptos de las ciencias sociales, existen muchas
definiciones de personalidad, según el autor y su enfoque teórico, pero todas las
definiciones comparten la idea de características relativamente permanentes y de
la relación entre identidad del sujeto y su personalidad, ambas cosas permiten
relacionar esto con una tendencia a actuar y pensar de una manera determinada.
Sin embargo, la importancia de esta estructura para predecir conducta varía mucho
de enfoque a enfoque, e incluso hay enfoques donde esta estructura no existe
(conductismo, sistémico, por ejemplo). Además de la relación entre conducta y
personalidad, se ha puesto en entredicho el grado de cambio que esta estructura
permite. Mientras algunas teorías predicen que la personalidad es prácticamente
imposible de cambiar (psicoanálisis, por ej.), otros plantean que es solo cuestión
de cambiar el ambiente.

Esto tiene consecuencias diferentes para las pautas penales. Por ejemplo, según los
partidarios de las estructuras invariables, cambiar el modo de proceder de un
depredador sexual será imposible, lo que hace absurda la pretensión de
rehabilitación y reinserción social. Otros enfoques, en cambio, platean que todos
pueden cambiar si las condiciones son las idóneas. El problema es que en ambos
casos existe evidencia que permite apoyar sus posturas teóricas y la solución aun
no parece cercana a su fin.

La personalidad es un constructo teórico para explicar la percepción de que


los individuos tienden a comportarse de formas relativamente estables en el
tiempo y medianamente coherentes en sí mismos. Como constructo es un
concepto abstracto, sin embargo, la potencia de este concepto es que puede

25
TEMA 1
Conceptos y Teorías

observarse la personalidad a través de ciertos entrenamientos o utilizando


mecanismos de evaluación y análisis, los llamados test de personalidad.

Los test de personalidad o inventarios, son un resumen de conductas y formas de


pensar que supuestamente dan cuenta de ciertos rasgos o disposiciones de
personalidad que en conjunto pueden permitir esbozar una estructura de la
personalidad de quien responde al test. Normalmente los ámbitos que mayor
atención reciben en un test son la capacidad de procesamiento racional (que no se
relaciona con la inteligencia, sino con la capacidad de dominar las emociones), el
manejo de la angustia y la ansiedad (lo que incluye las distintas formas de manjeo
de la expresión emocional) y el juicio de realidad (la capacidad de separar deseos y
fantasías de las condiciones sociales del entorno).

Los test se utilizan de diversas formas en la actualidad, trascendiendo su uso


original en diagnóstico. Los recursos humanos y la selección de personal, el
liderazgo político, la criminología, e incluso el ingreso a algunos centros de
estudios superiores e infantiles. Por ello se han tornado en un sistema de control
social que afecta la vida de las personas, por lo cual, quienes están mejor
informados han desarrollado estrategias de enfrentamiento a estos test y con la
popularización de internet estas estrategias se han popularizado y difundido en
extremo, lo que reduce la efectividad de ciertos testo, al menos, vuelva más
compleja su interpretación, pues hay que eliminar de la información aquella que ha
sido controlada por el examinado, tarea que no siempre es fácil. Por poner un
ejemplo, es test proyectivo de Rorschach fue muy útil durante mucho tiempo,
debido a que su acumulación de información fenomenológica, asociada a su gran
aporte al diagnóstico diferencial lo hacía muy interesante. Sin embargo,
prácticamente ha desaparecido del uso clínico y laboral debido a que sus láminas
estandarizadas se han difundido profusamente en internet y se recomiendan
respuestas preelaboradas, cuestión que no anula del todo el test, peor lo hace
menos preciso. Por ello los test que aún se utilizan son aquellos de autorreporte,
de fácil aplicación pero lo suficientemente desestructurados o largos y complejos

26
TEMA 1
Conceptos y Teorías

de leer, para evitar la posibilidad de que se difundan unas supuestas respuestas


correctas.

Es importante destacar, como conclusión, que desde cualquier perspectiva teórica


que se utilice, la evaluación de la personalidad es un proceso complejo, que no
puede estar basado en uno o unos pocos conjuntos de rasgos, ni cada rasgo estar
basado en la observación de una sola situación o una conducta particular, por ello,
aun apoyado en test, debe ser realizado por personal cualificado para ello (en
España esta evaluación está legalmente en manos de psicólogos y psiquiatras, en
otros países el espectro de quienes pueden realizar esta evaluación es más amplio,
incluyendo a psicopedagogos o criminólogos, por ejemplo, y esta situación puede
cambiar en el futuro, ya que la Unión Europea ha criticado la protección gremial de
algunas leyes de prácticas profesionales en España).

4.2. Psicoterapia

La psicoterapia es el principal método de apoyo que ofrece la psicología a las


personas, las parejas y las familias, para buscar el bienestar y superar el dolor. Es
un procedimiento sistemático y ordenado de cambio conductual o cognitivo que
tiene como objetivo el suprimir o cambiar comportamientos, emociones o ideas
considerados negativos por quien las padece.

Como se parecía en la definición, la expresión no es “sanar”, puesto que esto


dependerá mucho de cada orientación teórica y técnica, pero, sobre todo, porque
el principio básico de una terapia es que ésta ha sido solicitada por el interesado
para abordar un problema que este tiene en su vida y que le causa molestia o
dolor, debido a esto es que no se puede hablar de terapia obligatoria, ni se puede
realizar cambios terapéuticos en personas que no lo han solicitado. Si esto es así,
el método empleado no es psicoterapia, sino algún otro sistema de cambio.

La terapia requiere de la motivación del sujeto (o sujetos) que se someten a ella,


de lo contrario no se podrá realizar, ya que esta utiliza como material de trabajo la
información entregada por el sujeto. En segundo lugar, la psicoterapia requiere de
motivación y compromiso, ya que puede requerir un trabajo sistemático de parte
del sujeto sometido a ella, ya sea en recuperación de recuerdos dolorosos, en

27
TEMA 1
Conceptos y Teorías

repetición de actividades, en memorización de tareas o en realización de cambios


conductuales en su vida, todo ello puede generar malestar antes de provocar una
mejora en la percepción de bienestar. Sin voluntariedad y compromiso
motivacional estas cosas no son posible. Pese a la difundida creencia de que
existen programas que pueden obligar a las personas a cambiar (lavado de cerebro,
programación mental, hipnosis, etc.), estos no son reales, en la mayoría de los
casos, y cuando lo son, como la hipnosis, lo son solo parcialmente y con cambios
superficiales y poco duraderos, además de ilegales.

Esto es muy relevante al momento de considerar la psicoterapia como alternativa a


los medios penales, puesto que sin voluntariedad de parte del afectado no hay
ningún efecto, ni tampoco la posibilidad de obligar a alguien a someterse a un
procedimiento de este tipo.

La psicoterapia es una importante y exitosa metodología de cambio conductual y


de superación personal. La mayoría de las personas que se someten a una declaran
algún grado de bienestar en el proceso.

Es importante destacar que la psicoterapia es completamente eficiente y útil en


situaciones de cierta normalidad del sujeto involucrado, y solo es parcialmente útil
cuando hay trastornos con base biológica, que solo pueden tratarse con éxito con el
adecuado acompañamiento farmacológico. Esto no es solo válido para los
trastornos mentales con base orgánica, como la mayoría de las psicosis, sino para
muchos síndromes que se relacionan con enfermedades físicas no mentales, como
los problemas de control de la ira en la diabetes o la depresión en el desorden
disfórico premenstrual.

Finalmente, hay que dejar claro que la psicoterapia no es un remedio universal ni


es un cambio instantáneo. Los tratamientos, cortos a largos, pueden tener éxitos
parciales y, lo más habitual, retrocesos. Esto sucede porque una persona que
comienza a sentirse mejor se siente capaz de enfrentar sus problemas y muchas
veces se somete a situaciones de alto estrés o para su caso o abandona
prematuramente el tratamiento al sentirse mejor. En la siguiente imagen podemos

28
TEMA 1
Conceptos y Teorías

apreciar la curva de mejora en pacientes de esquizofrenia con un tratamiento


psicoterapéutico tipo.

Fuente: Kupler, 1991.

4.3. Trastorno mental

En términos generales el DSM II, III y IV entienden el trastorno mental como:

“…un síndrome o un patrón comportamental o psicológico de significación


clínica, que aparece asociado a un malestar (p. ej., dolor), a una
discapacidad (p. ej., deterioro en una o más áreas de funcionamiento) o a
un riesgo significativamente aumentado de morir o de sufrir dolor,
discapacidad o pérdida de libertad. Además, este síndrome o patrón no debe
ser meramente una respuesta culturalmente aceptada a un acontecimiento
particular (p. ej., la muerte de un ser querido). Cualquiera que sea su
causa, debe considerarse como la manifestación individual de una disfunción
comportamental, psicológica o biológica. Ni el comportamiento desviado (p.

29
TEMA 1
Conceptos y Teorías

ej., político, religioso o sexual) ni los conflictos entre el individuo y la


sociedad son trastornos mentales, a no ser que la desviación o el conflicto
sean síntomas de una disfunción.” (DSM-IV)

Queda claro que un trastorno mental no es en si mismo una desviación social o


normativa. Estas existen totalmente ajenas a estos trastornos y sus prevalencias en
la población son totalmente distintas.

Por otro lado, un trastorno mental se define desde el padecimiento de quien lo


padece o de la evaluación de significación clínica, en ningún caso desde la
evaluación de la conveniencia social de que la persona cambie de actitud o
comportamiento.

30
TEMA 1
Conceptos y Teorías

V. RESUMEN

La palabra psicología viene de psique (alma) y logos (saber o estudio). Literalmente


significa la ciencia de la mente. Se utiliza el término psicología para denominar a
la ciencia que estudia la conducta y los procesos mentales (Finchan y Hewstone,
2005). La psicología es una ciencia porque, para obtener conocimientos, se basa en
el método científico.

La descripción de un objeto de estudio es lo que denominamos conocimiento


empírico, el conocer estructura, características y composición de un fenómeno
determinado. La explicación es más profunda, implica comprender el fenómeno,
propone una secuencia de hechos generativos y sus consecuencias. La predicción es
el resultado de una teoría que explica el proceso, que permite adelantarse a las
consecuencias de los hechos generativos.

Con el surgimiento del método científico a partir del siglo XVII, es decir, de la
observación rigurosa y sistemática, sin prejuicios, y un registro fiable y detallado
de los procedimientos realizados, las técnicas empleadas y de los datos obtenidos,
comienza la modernidad en la cual ya es posible hablar de ciencia en el sentido
actual.

La psicología experimental se puede decir que nace con Wilhem Wundt (1832-
1920), quien en 1879 fundó el primer laboratorio de psicología experimental en
Leipzig, Alemania, con el objetivo de estudiar la experiencia inmediata y
observable a través del método experimental.

Freud descubre una relación entre los síntomas de los pacientes y situaciones
críticas de sus vidas, descubriendo además, que hablar de dichas situaciones
traumáticas les ayudaba a recuperarse. El psicoanálisis aportará tres conceptos
fundamentales para la historia de la psicología: el inconsciente, la personalidad y
la psicoterapia.

31
TEMA 1
Conceptos y Teorías

A comienzos del siglo XX John Watson (1978 – 1958), inaugura el conductismo en


1913, con su primer artículo, en el que expone los principios de lo que se llamará
luego el Conductismo Clásico, basado en el asociacionismo de estímulo y respuesta.

Skinner (1904 – 1990), realizó en 1948 el famoso experimento de la caja de Skinner


que convertiría al conductismo en una de las principales corrientes de la psicología,
especialmente en la psicología de la educación y el aprendizaje. Este fenómeno, el
aprendizaje de una conducta asociada a la recompensa es lo que se denomina
condicionamiento operante, en contraposición al condicionamiento clásico de
Watson significó un gran avance en la psicología del comportamiento, pudiendo
aplicarse a casi cualquier situación humana. De este enfoque surgirán todas o la
mayoría de las explicaciones de la conducta humana basada en el ambiente
directo, o más bien, en la historia de los refuerzos ambientales.

El poder de la recompensa para el refuerzo de la conducta resulta tan potente que


incluso funciona virtualmente. El psicólogo canadiense Albert Bandura, planteó en
1977 sus propuestas de aprendizaje vicario u observacional, que es el refuerzo que
se produce en una persona que observa la conducta de otros y las consecuencias de
sus conductas (sus recompensas), debido a lo cual aprende que conducta realizar
para obtener similares recompensas.

El psicoanálisis es el nombre que Sigmund Freud (1856-1939) dio al método


mediante el cual se realiza un análisis de la dinámica psíquica de una persona,
mediante el habla o relato de hechos relevantes de la vida que podrían provocar
problemas y traumas inconscientes que deben volverse conscientes mediante la
introspección guiada por un analista.

La primera gran obra del psicoanálisis, La interpretación de los sueños (Freud,


1900), sintetiza su primera teoría del aparato psíquico, también conocida como la
primera teoría tópica. Esta obra plantea lo que se ha denominado la primera
tópica, es decir, la primera propuesta de estructura psíquica del psicoanálisis:
consciencia, preconciencia e inconsciencia. Las relaciones y tenciones entre estas
tres fuerzas internas de la psiquis es la razón por la cual se denominará “dinámico”
a este enfoque.

32
TEMA 1
Conceptos y Teorías

La estructura dinámica de la personalidad se establece como una compleja y


conflictiva relación de fuerzas inconscientes y conscientes que proviene de estas
tres estructuras. En esta teoría el yo es la parte más visible y consciente de la
personalidad, y también la más superficial (en el sentido psíquico), donde está
nuestra voluntad y memoria consciente. El superyó es la estructura relacionada con
el deber y la norma, son los padres al interior de la psiquis, los límites sociales de
la acción y las motivaciones deseables de nuestras obligaciones, solo parcialmente
consciente, el resto es preconsciente e inconsciente. El Ello es completamente
insconsicente, la estructura más profunda de la personalidad, donde están los
deseos y fantasías menos aceptadas por nuestra parte consciente, además de
pulsiones muy básicas, que no necesariamente tiene forma verbal accesible.

La psicología de la gestalt recibe su nombre un término alemán que significa


aproximadamente forma, en el sentido de configuración global de algo. Esta
perspectiva psicológica plantea que la mente funciona con percepciones globales
de las cosas y no con partes de ellas, por lo cual acuñan la premisa del principio de
totalidad, en coincidencia con el dicho de “el todo es más que la suma de las
partes”, en directa crítica al conductismo y el asociacionismo.

Muy posteriormente, en los años 50, el matrimonio compuesto por el Fritz Perls y
Laura Posner, plantean en Johannesburgo su Terapia Gestáltica, basada en la idea
de totalidad como principio de que rige las necesidades de comprensión de la vida
y de sus momentos. Este enfoque, sin embargo, tiene mucha más influencia del
psicoanálisis que de la Escuela de la Gestalt, de donde coge el nombre, aunque
muy distinta a ambas tendencias, como enfoque psicológico y como terapia, tanto
en sus métodos como en sus orientaciones teóricas, es mucho más cercana a las
escueles humanistas de los sesenta. (De hecho, Fritz Perls enseña en Berkley
cuando se traslada a California, y para algunos es uno de los padres del movimiento
hippie).

En la actualidad, gran parte de la psicología experimental se basa en el enfoque


Congnitivista, que considera el objeto de estudio la conducta y los procesos

33
TEMA 1
Conceptos y Teorías

mentales, especialmente los procesos básicos como la percepción, la memoria, la


inteligencia, el lenguaje, etc.

Los enfoques humanistas surgen a partir de la segunda guerra mundial la


insatisfacción con la modernidad el progreso, así como con sus preceptos de
positivismo científico y racionalidad afectan a toda la vida social y con ello al
desarrollo de la psicología. Desde la década de 1950 surgen propuestas diversas que
permiten comprender al ser humano desde perspectivas más holísticas, que buscan
integrar las emociones dentro de la ecuación de comprensión de la persona y su
mundo interior, que el racionalismo tanto del psicoanálisis como del conductismo
tendían a ignorar en su valor vivencial.

La idea de personalidad proviene del psicoanálisis, y por ello muchas veces no


encontramos esta palabra en algunos libros de psicología. En la actualidad se utiliza
este término para hablar de un conjunto de características específicas, algunas
compartidas (rasgos) y otras idiosincráticas que establecen una tendencia a actuar
y procesar información de un modo habitual en un individuo.

La psicoterapia es el principal método de apoyo que ofrece la psicología a las


personas, las parejas y las familias, para buscar el bienestar y superar el dolor. Es
un procedimiento sistemático y ordenado de cambio conductual o cognitivo que
tiene como objetivo el suprimir o cambiar comportamientos, emociones o ideas
considerados negativos por quien las padece.

Se entiende el trastorno mental como “…un síndrome o un patrón comportamental


o psicológico de significación clínica, que aparece asociado a un malestar (p. ej.,
dolor), a una discapacidad (p. ej., deterioro en una o más áreas de
funcionamiento) o a un riesgo significativamente aumentado de morir o de sufrir
dolor, discapacidad o pérdida de libertad”.

34
TEMA 1
Conceptos y Teorías

VI. GLOSARIO

Psicología Ciencia que estudia la conducta y los procesos mentales

Hace referencia a las acciones y respuestas observables del


Conducta
ser humano

Se denomina así a las actividades internas que no pueden


Procesos ser directamente observadas, entre las que se encuentran
mentales las cogniciones, los afectos, las motivaciones, o los procesos
sensitivos.

Son aquellas actividades mentales como las percepciones,


las creencias, recuerdos e ideas, que están estructuradas
Cognición
como premisas de conocimiento consciente, es decir, están
racionalizadas de forma que se pueden enunciar y describir.

Son procesos mentales que incluyen los sentimientos o


estados emocionales y que no están estructurados como
Afectos
premisas enunciables, sino como sensaciones corporales,
salvo cuando se intenta racionalizarlos conscientemente.

Es la idea propuesta por John Locke de que la mente


humana nace como un papel en blanco, en el que se
Tábula rasa
grababan las experiencias del ambiente en la memoria que
formarán las ideas.

Es la observación rigurosa y sistemática, sin prejuicios ni


ideas preconcebidas, y un registro fiable y detallado de los
Método científico
procedimientos realizados, las técnicas empleadas y de los
datos obtenidos

35
TEMA 1
Conceptos y Teorías

Enfoque de comienzos de la psicología impulsado por


Psicología Wundt, y que plantea que los procesos mentales simples
experimental pueden analizarse ene le laboratorio estudiando individuos
concretos

Método de análisis y tratamiento de la dinámica psíquica


basado en el habla como reflejo de la mente y como medio
Psicoanálisis de curación, buscando hacer consciente lo inconsciente en
el sujeto para superar sus traumas que le provocan
sufrimiento.

Enfoque psicológico que plantea la conducta como único


objeto de la psicología empírica, ya que es la única
Conductismo
consecuencia observable de la mente a al cual no se puede
acceder objetivamente.

Asociación de un estímulo neutro a un estímulo que genera


Condicionamiento una respuesta refleja que finamente produce que el
clásico estímulo neutro sea capaz de provocar por sí solo la
respuesta que queda así condicionada

Condicionamiento Estimular o reforzar un tipo de conducta otorgando premios


operante o o recompensas cada vez que la respuesta se ejecuta, hasta
instrumental que la conducta se aprende.

Aprendizaje Aprendizaje de una conducta operante al observar las


vicario u recompensas que otras personas reciben por su
observacional comportamiento.

Es el premio después de realizar la acción esperada


Refuerzo positivo
(conducta operante)

Refuerzo Es la finalización o evitación de un estímulo aversivo

36
TEMA 1
Conceptos y Teorías

negativo realizando la conducta operante esperada

Será la inmediata consecuencia de un estímulo aversivo o


Castigo positivo desagradable, como el caso de un golpe después de una
conducta a extinguir.

será quitar consecuencias positivas cuando se deja de


Castigo negativo
realiza la conducta a extinguir

Conductas y pensamiento voluntarios, con pleno


Consciente conocimiento del sujeto, regidos por la lógica y el principio
de realidad.

Procesos mentales y conductas que, no siendo conscientes,


Preconsciente pueden accederse desde la consciencia con facilidad,
prestando atención a ellos.

Procesos mentales y conductas no voluntarias, de los que el


sujeto no se da cuenta y a los cuales no se puede acceder
Inconsciente
más que a través de los sueños o la hipnosis, o a través de
un psicoanálisis.

Teoría Es la teoría de la personalidad derivada de la segunda


estructural de la tópica, que estructura la dinámica de la personalidad en yo,
personalidad ello y superyó.

Conjunto de características específicas, algunas


compartidas (rasgos) y otras idiosincráticas, que establecen
Personalidad
una tendencia a actuar y procesar información de un modo
habitual en un individuo

Es el principal método de apoyo que ofrece la psicología a


Psicoterapia las personas, las parejas y las familias, para buscar el
bienestar y superar el dolor. Es un procedimiento

37
TEMA 1
Conceptos y Teorías

sistemático y ordenado de cambio conductual o cognitivo


que tiene como objetivo el suprimir o cambiar
comportamientos, emociones o ideas considerados
negativos por quien las padece.

un síndrome o un patrón comportamental o psicológico de


significación clínica, que aparece asociado a un malestar (p.
ej., dolor), a una discapacidad (p. ej., deterioro en una o
Trastorno mental
más áreas de funcionamiento) o a un riesgo
significativamente aumentado de morir o de sufrir dolor,
discapacidad o pérdida de libertad.

38
TEMA 1
Conceptos y Teorías

VII. BIBLIOGRAFIA

 Bibliografía básica.

Delgado Losada, M.L.(2014) Fundamentos de Psicología para ciencias sociales y de


la salud. Editorial Panamericana, Madrid.

Liebert, R. y Langenbach Liebert, L. (2000) Personalidad: Estrategias y temas.


International Thomson Editores, Madrid.

 COMPLEMENTARIA

Aronson, E. (2002). El animal social. Madrid: Alianza Editorial.

Bandura, A. (1973). Aggression: A Social Learning Analysis. New Jersey: Prentice


Hall.

Barker, R., Dembo, T., & Lewin, K. (1941). Frustration and aggression: an
experiment with young children. Studies in Child Welfare, 18, 1-314.

Barker, R., Dembo, T., Y LEWIN, K. (1941). Frustration and aggression: an


experiment with young children. Studies in Child Welfare, 18, 1–314.

Baron, R. A., y Byrne, D. (2005). Psicología Social. Buenos Aires.

Barraca, J (2008) Bases sociales de la conducta. Madrid : CCS.

Fernández Villanueva, M.C. (2015) Psicología social de la violencia. Madrid,


Síntesis.

Milgram, S. (2016). Obediencia a la Autoridad: El experimento de Milgram. Bilbao:


Editorial Desclee de Brouwer.

Moscovici, S. (1981) Psicología de las Minorías Activas. Madrid: Ediciones Morata

Molinet, E., Velásquez, D., & Estrada, C. (2007). Teorías implícitas sobre la
estabilidad de la naturaleza humana y del entorno social, y su relación con la

39
TEMA 1
Conceptos y Teorías

reincidencia delictiva en internos recluidos en el centro de cumplimiento


penitenciario. Magallania (Punta Arenas), 35(2), 151-157.

Pascale, P. (2010). Nuevas Formas De Racismo: Estado de la cuestión en la


psicología social del Prejuicio. Revista Ciencias Psicológicas, (1), 57–69.

Potter, J. (1998) La representación de la realidad. Buenos Aires: Paidós

Seligman, M. E. P. (1983). Indefensión: en la depresión, el desarrollo y la muerte.


Madrid: Editorial Debate.

TAJFEL, H. (1975). “La categorización social”. En S. Moscovici, Introducción a la


Psicología Social. Barcelona: Planeta.

Tajfel, H. (1984). Grupos Humanos y Categorías sociales. Barcelona: Herder.

Turner, J. (1985). Una teoría de la categorización del yo. Redescubrir El Mundo


Social.

Turner, J. C. (1990). Redescubrir el grupo social: una teoría de la categorización


del yo. Ediciones Morata.

Zimbardo, P. (2011). El efecto lucifer: el porqué de la maldad. Paidós.Webs de


referencia.

 Otras fuentes de consulta

40
TEMA 1
Conceptos y Teorías

VIII. ACTIVIDADES

41
TEMA 1
Conceptos y Teorías

IX. ANEXOS

42
Asignatura

Psicología general TEMA 2


Psicología de la normalización

GRADO EN CRIMINOLOGIA

TEMA 2
Psicología de la
Normalización

Autor: Ricardo Zúñiga

1
TEMA 2
Psicología de la normalización

Unidad didáctica.

Tema 2: Psicología de la normalización


INDICE

I. PRESENTACIÓN ................................................................................................... 3
II. OBJETIVOS. ....................................................................................................... 4
III. ESQUEMA ......................................................................................................... 5
IV. CONTENIDO ...................................................................................................... 6
1. Normalización ........................................................................................... 6
El experimento de Sherif.................................................................................. 6
2. La Influencia social ..................................................................................... 9
2.1. Respuesta a la influencia social ................................................................ 10
3. Conformismo o el poder de la mayoría .......................................................... 13
3.1. Factores que inciden en el conformismo ..................................................... 14
4. Obediencia a la autoridad .......................................................................... 15
4.1. Experimento de Milgram ......................................................................... 16
4.2. Experimento de Zimbardo ....................................................................... 19
5. La influencia de la minoría ......................................................................... 22
5.1. Factores o elementos de la influencia social según Cialdini ............................. 26
VI. GLOSARIO ...................................................................................................... 30
V. RESUMEN ........................................................................................................ 33
VII. BIBLIOGRAFIA................................................................................................. 35

2
TEMA 2
Psicología de la normalización

I. PRESENTACIÓN

Este primer apartado ofrece los conceptos básicos para comprender la tendencia
humana del formar parte de grupos sociales y respetar las normas como proceso de
construcción de sociedad.

3
TEMA 2
Psicología de la normalización

II. OBJETIVOS.

 Conocer los conceptos que ofrece la psicología para entender la tendencia


de las personas a seguir las normas sociales.

 Comprender los aportes de la psicología a la comprensión del


comportamiento social

4
TEMA 2
Psicología de la normalización

III. ESQUEMA

Sumisión

Factores Identificación
Conformismo
(Sehrif) Conformismo
Interiorización
Normalización (Asch)
innovación
roles
Influencia social Obediencia
desindividuación
minorías

Factores de
inlfi¡euncia

5
TEMA 2
Psicología de la normalización

IV. CONTENIDO

1. Normalización

La normalización es el nombre que recibe en psicología cognitiva la tendencia de


las personas a crear normas implícitas, por influencia recíproca, cuando se
enfrentan a situaciones para las cuales no tienen un repertorio conductual habitual
de respuesta. Ante las situaciones indefinidas o de incertidumbre las personas
buscan reducir la ansiedad a través de la construcción de formas de actuar
mutuamente aceptables o válidas.

A partir de 1935, Muzafer Sherif, estudia experimentalmente este fenómeno,


mediante la observación de situaciones controladas de novedad a individuos
experimentales. El experimento sobre la influencia del grupo, crea una situación
donde es necesario emitir un juicio sobre estímulos concretos de la realidad, pero
con la influencia del grupo mediando en la expresión del juicio.

El experimento de Sherif

La situación experimenta se basaba en una habitación oscura, en la cual se


introducía al sujeto experimental para emitiera un juicio sobre el movimiento de
un punto de luz. En situaciones de oscuridad, un punto de luz es visto con
movimiento por el ojo humano, un error de percepción o “ilusión óptica”, que
recibe el nombre de Efecto autocinético. Aprovechando este fenómeno neutro y
estándar de la percepción, que es desconocido por lo sujetos a los que se somete a
la situación experimental, se solicita que hagan un juicio sobre la distancia que
alcanza el movimiento del punto de luz.

Primero el juicio es individual, con lo que se establece un patrón de comparación


para varios individuos, entre los cuales hay gran variación de datos (altas
desviaciones estándar).

6
TEMA 2
Psicología de la normalización

En segundo lugar, somete a los sujetos agrupados al mismo estímulo, obteniendo


unos resultados muy distintos. La tendencia de los grupos de a dar información
convergente (es decir, con baja desviación estándar), tendiendo a ser poco más o
poco menos de lo que el primer individuo que daba su juicio. Es decir, que el grupo
tendía a moverse en torno al patrón que el primer individuo estimaba.

En tercer lugar, se somete otra vez a cada individuo a las pruebas individuales. Los
resultados ahora tienden a agruparse en torno a los patrones adquiridos en la fase
grupal, dejando de lado las variaciones de la primera experiencia y manteniendo
los patrones convergentes de adquiridos en la segunda etapa.

La primera conclusión es que entre la primera medición y la tercera se produce un


cambio importante. La segunda conclusión es que ese cambio es convergente en
todos los individuos.

La inducción posible de extraer de este experimento es que las personas adquieren


un “norma” basada en la experiencia grupal, que luego aplican a su experiencia
individual. Este es el proceso de normalización.

Este fenómeno, en una habitación oscura, sin un punto de referencia para evaluar
el movimiento, actúa como un símil o paralelismo de situaciones sociales en las que
no tenemos puntos de referencia para saber cómo actuar y emitir un juicio de la
realidad. Ante estas situaciones de incertidumbre, la tendencia es a buscar una
norma de evaluación en el grupo para adquirir una norma, la que permite realizar
juicios con mayor seguridad en el futuro.

Por otro lado, sugiere Sherif, una vez que la norma ya está establecida y el grupo
tiende a seguirla sin cuestionamiento, es una situación conformidad. Como cuando
seguimos las normas de convivencia (saludar al ver a una persona conocida), y lo
hacemos como “el-deber-ser”, una norma que se asume como cierta porque todo
el grupo la realiza. Más aun, tanto poder logran estas normas asumidas como parte
de la realidad grupal, que si alguien no la realiza (no saludamos a alguien que
conocemos) se produce una atribución de malas intenciones (¡me quiere ofender!)
o de no pertenencia al grupo (¡este de donde viene!).

7
TEMA 2
Psicología de la normalización

Pero en algunos casos, siempre siguiendo a Sherif, se introduce una modificación


normativa desde uno o pocos individuos del grupo, que por su persistencia y
cuestionamiento a los modos habituales del grupo, termina siendo aceptada como
una variación aceptada. Esta situación se denomina innovación.

Hay que destacar que en el caso de los grupos arbitrarios creados por Sherif en el
laboratorio, no existía estructura ni relación previa (con lo que en rigor no son un
grupo), ni tampoco diferencias de estatus o algún liderazgo. Este punto es
importante, para todos los tipos de respuestas (conformismo, innovación y
normalización) descritos por el autor, ya que significa que en estos casos no
intervienen otras variables, como el poder, la autoridad, la deseabilidad social u
otras formas de influencia. En este caso se está hablando de personas de similar
estatus-rol en el grupo, de modo que el significado de la información que entregan
para que otro la utilice de aproximación a un patrón en el juicio, no depende del
prestigio o de la capacidad de premiar o castigar de quien emite la información, es
únicamente una información de retroalimentación que las personas usan como dato
para estimar su propio juicio.

Estos experimentos fueron precursores de otras propuestas sobre la influencia


social, la conformidad y, en general, sobre los mecanismos por los cuales las
personas siguen las normas sociales o las rompen y crean otras nuevas. También
ponen de relieve el hecho de que las personas tienden a buscar información en el
entorno inmediato (el grupo) más que en la sociedad en su conjunto.

La importancia del entorno es contraria las teorías de los rasgos, la personalidad, la


tendencia biológicamente determinada u otras formas de determinismo. También
significará que si una persona pertenece a un grupo que tiene sus propias normas
(como delinquir, por ejemplo) es muy probable que todos sus miembros sigan
dichas normas, más que adopten normas abstractas y distantes que no forman
parte de los juicios constantes de las personas de si entorno.

Recientemente en España, hemos presenciado distintas declaraciones de personas


procesadas por corrupción que pretenden explicar su conducta a partir de la idea
“todos lo hacían”. Desde el punto de vista psicosocial eso es relativamente cierto,

8
TEMA 2
Psicología de la normalización

ya que el entorno inmediato fija la norma. Sin embargo, al explorar con más
detalle, se escucha también que el sistema era oculto a otros miembros de los
partidos de quienes ejecutaban los hechos delictuales, con lo cual se comprueba
que tenían perfecta conciencia de lo inadecuado del comportamiento. Distinto es
el caso de personas criadas en ambientes delictuales desde la infancia, que no
tiene otras normas de referencia, donde la explicación de la influencia del grupo
cobra más relevancia. Sin embargo, el que un hecho pueda ser explicado
psicosocialmente no significa que esté justificado, solo significa que puede ser
explicado, en el sentido de que no es una locura o una situación inexplicable.

2. La Influencia social

Como se pareció en el experimento de Sherif, y a pesar de que la mayoría de las


personas cree y siente que ejerce una autonomía sobre su vida, lo cierto es que
estamos permanentemente guiándonos por las influencias que nuestro entorno
ejerce sobre nosotros, ajustando nuestras premisas, modificando nuestra
percepción, juicios, actitudes y comportamientos con el fin de complacer a una
autoridad, ganarnos el afecto de una persona o para sentirnos parte de un grupo
social o una institución. Los psicólogos sociales han estado siempre fascinados por
los cambios que sufren los individuos por el solo hecho de entrar en contacto con
otras personas. Por ello, la influencia social, que es definida como cualquier
cambio de la conducta producida por el influjo de otros (López-Sáez, 2007), es uno
de los tres temas más estudiados en el campo de la psicología social, junto con el
de las actitudes y los grupos.

En esta línea, Moscovici (1981), sostiene que el cómo, el por qué y el para qué de
la influencia social forma parte del núcleo central de la psicología social y que
constituye su principal enigma. En esto concuerdan otros autores, quienes han
llegado incluso a identificar toda la psicología social con la influencia social. En
efecto, mientras Germaine de Montmollin (1977) define la influencia social como el
cambio en los juicios, opiniones o actitudes de un individuo como resultado de su
exposición a los juicios, opiniones y actitudes de otros individuos, Gordon Allport

9
TEMA 2
Psicología de la normalización

(citado por Francisco Morales & Moya, 2007) afirma que la psicología social es un
intento de entender y explicar cómo el pensamiento, el sentimiento y la conducta
de los individuos son influidos por la presencia real, imaginada o implícita de otras
personas. Si se aprecian ambas definiciones, la de psicología social y la de
influencia social, se observa que son prácticamente iguales.

2.1. Respuesta a la influencia social

La sociedad es un sistema de control. Para que funcione, cualquier sociedad,


requiere que sus miembros realicen una serie de tareas, en consenso entre muchas
personas que no necesariamente tienen contacto entre sí, y se espera de ellas que
realicen estas tareas, aunque sean desagradables (ya sea construir pirámides o
votar en democracias representativas). Esto supone que las personas deben
compartir, lo sepan o no, una serie de metas e intereses, más allá de sus
diferencias individuales, familiares, grupales o de clase. Todos debemos compartir
algunas creencias y realizar algunas acciones para que una sociedad funcione. Los
medios y procesos utilizados por las sociedades humanas para hacer que las
personas compartan metas, intereses creencias y conductas es lo que llamamos, en
términos generales, influencia social.

Esto es así para todas las personas, la mayor parte del tiempo. Incluso un gran
rebelde, un delincuente o un loco comparten fines y metas sociales. Un loco como
Vincent Van Gogh rompió con todos los cánones establecidos en la estética
pictórica del siglo XIX. Como no hay nada parecido a sus pinturas antes que él, se
podría decir que no tuvo influencias. Sin embargo, esta afirmación es falsa, puesto
que su entorno le influyó, entre otras cosas, en pintar con los mismos oleos que
pintaban todos los demás, en los mismos lienzos que los demás, y sobre muchos
temas que los demás también pintaron (como flores y autorretratos). Vestía ropas y
usaba sobrero, escribía cartas y las leía, usaba dinero y compartía el idioma con sus
vecinos y otros pintores. Es decir, Van Gogh, un gran rupturista en lo estético y en
algunas cosas más, era, en muchos aspectos, un ciudadano como cualquier otro.
Eso es lo que nos sucede a la mayoría, compartimos las metas sociales, muchos de

10
TEMA 2
Psicología de la normalización

sus fines y la mayoría de los medios. Y cuando no lo hacemos, discrepamos en


líneas preestablecidas de discrepancia, por ejemplo, a través de un grupo político
(movimiento, partido, asociación, sindicato, comuna, etc.), un grupo religioso, un
movimiento social o cultural. Por lo general discrepamos en los medios, rara vez en
los fines.

Todo lo anterior es lo que permite que la sociedad funcione y se prolongue a sí


misma. La influencia es el mecanismo por el cual podemos vivir juntos, podemos
sentir confluencia y coincidencia con otros seres humanos, podemos cooperar y
acompañarnos. Sin la influencia, cada ser humano tendría una vida interior única,
no compartida, totalmente independiente de otros seres humanos o, dicho de otro
modo, totalmente solo.

Ante esta influencia social, sin embargo, no nos comportamos pasivamente. A


veces buscamos la influencia, buscamos a que otros nos ayuden a comprender el
mundo de nuestro alrededor; otras veces huimos de la influencia y la rechazamos,
y otras veces también no sabemos que nos influencian y creemos que nuestros
juicios son autónomos. Esas son las situaciones y fenómenos que se han planteado
numerosos psicólogos sociales, algunos de los cuales veremos a continuación.

Para Kelman (1974) las personas que asumen una influencia pueden hacerlo desde
tres posibles respuestas: sumisión, identificación e internalización.

 Sumisión: es la respuesta de aceptación a la influencia de una fuente capaz


de recompensar o castigar a un sujeto. El inconveniente de esta forma de
influir en otros es que cuando la fuente pierde la capacidad de reforzar al
sujeto la influencia cesa. Esto no quiere decir que no sea una forma potente
de influencia, de hecho, es muy usada en la crianza de los hijos, la
prevención del crimen y la educación, pero tiene límites. Otro inconveniente
es que si la fuente no está presente o el sujeto puede prever que no recibirá
información de su conducta, ésta puede cambiar. Pensemos en todo lo que
hacemos cuando nadie nos mira y comprenderemos este último punto.

11
TEMA 2
Psicología de la normalización

 Identificación: este tipo de respuesta a la influencia social proviene de la


fuerza de los referentes sociales, es decir, el deseo de parecerse a una
persona relevante del entorno simbólico del sujeto. La influencia en este
caso proviene de las recompensas sociales vicarias que el sujeto espera
recibir cuando logre parecerse a su referente. En este tipo de respuesta, la
influencia no depende de la voluntad del referente externo (puede incluso
ignorar que está influyendo a un sujeto específico), sino que está centrada
en la voluntad (o inconsciencia) de la persona influida. El cambio de
conducta o creencias se produce sin refuerzo directo, pero también sin que
la persona esté necesariamente convencida del todo. Ya que solo está
copiando, el cambio pude ser algo externo o superficial. No obstante, en
algunas ocasiones la influencia por identificación puede llegar a ser muy
potente, tanto que muchas grandes empresas del mundo están dispuesta a
pagar millones de euros a figuras socialmente reconocidas y aceptadas,
como deportistas, artistas, políticos, escritores o modelos, que por ser
referentes para el público, pueden influir en la adquisición de determinados
productos y servicios por parte de este.

 Internalización: es la respuesta a la influencia social que se produce porque


el sujeto influido cree verdaderamente en la certeza de la idea o conducta.
Kelman plantea que el sujeto que interioriza está impulsado por el deseo de
estar en lo cierto, una tendencia innata y necesaria en nuestro equilibrio
mental. La posibilidad de creer en una determinada influencia está regida
por los principios de la persuasión y de las creencias anteriores de la
persona. Esta es la más poderosa de las formas de influencia, pues una vez
que alguien está convencido de estar en lo cierto es muy difícil que cambie
de opinión, por lo que es una influencia de efectos a largo plazo y muy
resistente a intentos de cambio.

Se ha planteado que es posible que estos tres tipos de respuestas a la influencia se


conviertan en un proceso, independientemente de que cada respuesta puede tener
consecuencias por sí misma y de forma aislada en cualquier momento del ciclo vital

12
TEMA 2
Psicología de la normalización

de la persona. Desde el punto de vista del desarrollo individual u otros procesos de


largo plazo como la educación formal, se puede apreciar que algunas influencias
comienzan con procesos de sumisión, como obedecer a los padres o profesores,
siguen con un proceso de identificación, cuando los padres o cuidadores son buenos
referentes, y luego, cuando la persona reflexiona sobre algunas de estas
enseñanzas, puede llegar a sentirse plenamente de acuerdo con ellas e
interiorizarlas como propias.

3. Conformismo o el poder de la mayoría

Mediante el estudio de la psicología social se intenta analizar de forma rigurosa


cómo ocurre el proceso de influencia y cambio en las personas. Los estudios sobre
conformismo realizados por Solomon Asch entre 1951 y 1955, siguiendo algunas
premisas de Sherif, aportaron importantes datos sobre el comportamiento de los
seres humanos ante la presión social y cómo esta presión fuerza a los sujetos a
modificar sus propios juicios. Es decir, cómo se tiende a actuar o pensar siguiendo
el ejemplo de cómo piensan y actúan los otros miembros de un grupo.

Para estudiar este fenómeno, Asch ideó un diseño experimental que consistía en
pedir a los participantes del experimento que respondiesen a unos problemas de
percepción. Para ello, solicitaba a los sujetos que indicasen en un conjunto de tres
líneas de diferente tamaño (dibujadas sobre una cartulina) cuál de ellas se
asemejaba en mayor media a otra línea estándar (dibujada sobre otra cartulina).

En realidad, el experimento no consistía en una prueba de percepción, sino que se


trataba de observar cómo la presión del grupo forzaba a cambiar las respuestas y
variar los juicios de los participantes. Las pruebas del experimento se realizaban en
grupos que podían ser desde dos a quince personas, donde solo una de ellas era
verdaderamente el sujeto experimental. Las demás personas (sin saberlo el sujeto
experimental) eran cómplices del investigador. En algunas de las pruebas los
cómplices elegían de forma unánime una línea incorrecta. Ante esa situación,
mucho de los sujetos experimentales optaban por responder lo mismo que los
cómplices del experimentador (en algunas pruebas llegó a ser del 76%), a pesar de

13
TEMA 2
Psicología de la normalización

que las respuestas de éstos eran claramente erróneas. Otro dato interesante es
que al menos un 25% de los sujetos no cedió nunca ante la presión del grupo,
manteniendo su respuesta con independencia de cómo respondía este. Por otro
lado, cuando el consenso se rompía, aunque fuera por una sola persona, y aunque
esta persona respondiera otra opción claramente equivocada, la tendencia a
conformarse disminuía ostensiblemente comparada con el grupo de la unanimidad.

3.1. Factores que inciden en el conformismo

La presión del grupo puede producir un intenso conflicto entre la confianza que
tiene la persona respecto de su propio juicio y las respuestas y comportamientos
que adopta el grupo. La forma en que se resuelve este conflicto varía según la
persona y según la situación. Algunos de los factores que actúan en este proceso
son: el tamaño del grupo, la unanimidad del grupo y la implicación.

 El tamaño del grupo: Asch varió el tamaño del grupo en uno, dos, tres, ocho
o quince cómplices, encontrando que la conformidad se incrementaba a
medida que crecía el tamaño del grupo hasta llegar a los tres/cuatro
cómplices. A partir de ese número, al aumentar el tamaño del grupo no se
incrementaba el conformismo. En otras ocasiones, cuanto más aumenta el
tamaño del grupo, más aumenta su influencia. Así lo demostró Mann (1977)
cuando formó grupos de dos, cuatro, seis u ocho personas que hacían cola en
una parada de autobús en Jerusalén. Los resultados de Mann indicaron que
cuanto mayor era el grupo (el de ocho personas) mayor era la influencia.
Wilder (1977) ha sugerido, por su parte, que lo que importa no es el tamaño
del grupo, sino el grado de independencia que se perciba entre ellos.
Cuando las personas se categorizan como miembros de un grupo, los otros
actúan hacia ellas como si se tratase de una sola entidad, lo que hace que
pierdan su capacidad de influencia. Por este motivo, Wilder pone de relieve
la presión que hacen los subgrupos y afirma que, por ejemplo, tres grupos de
dos personas cada uno ejercen más influencia que dos grupos de tres
personas.

14
TEMA 2
Psicología de la normalización

 La unanimidad del grupo: Asch demostró que bastaba que un cómplice se


desviara del juicio del general del grupo para que se redujera la tasa de
conformismo. ¿Por qué una sola persona que cambia su opinión respecto del
resto del grupo reduce el conformismo? Wilder (1980) sostiene que una
mayoría unánime fuerza al individuo a reinterpretar la situación. Una sola
respuesta diferente es capaz de hacerle ver al sujeto que resultan posibles
otros puntos de vistas sobre una misma situación, lo cual parece aliviar el
miedo al rechazo por parte del grupo. Otros estudios (Allen y Vleine; 1968,
1969) sugieren que el efecto del grupo va a depender en parte de si se trata
de una tarea en la que se espera un alto grado de consenso (juicios
objetivos), donde la opinión disidente por parte de un miembro del grupo sí
ejerce influencia; o poco consenso (temas de opinión), en donde la opinión
de un disidente no ejerce tanta influencia.

 La implicación: este factor hace referencia a la implicación de la persona en


su respuesta o actitud, es decir, cuanto más se compromete una persona en
una posición, más tiende a mantener esa opinión. La resistencia al cambio
de una persona que se ha implicado públicamente se debe, en parte, a su
autopercepción, la que se deriva de esos comportamientos públicos (Bem,
1965). Si se produce un cambio de comportamiento que no va acompañado
de un cambio de autoconcepto, suele bajar la autoestima (Aronson, 1966),
por ello a veces para cambiar una conducta mantenida en público se
requiere también un cambio en la autoimagen de la persona (Freedman y
Fraser, 1966). Por otra parte, todo cambio obliga a reconocer que antes se
estaba equivocado y eso puede provocar sentimientos de incoherencia y
contradicción, lo cual se traduce en una resistencia a la influencia y el
cambio en general (Katz, 1960; Pratkanis y cols., 1989).

4. Obediencia a la autoridad

La obediencia tiene lugar cuando un individuo modifica su comportamiento a fin de


someterse a las órdenes directas de una autoridad legítima (Moscovici, 1985). La

15
TEMA 2
Psicología de la normalización

semejanza entre el conformismo y la obediencia a la autoridad es que ambos


procesos constituyen formas de influencia social, sin embargo, difieren en algunos
aspectos tales como el estatus entre la fuente de influencia y el receptor de esta,
ya que en la autoridad hay una jerarquía explícita o implícita respecto del
receptor; el deseo de la fuente de ejercer influencia, y de vigilar la sumisión del
receptor, ambas cosas en la autoridad son explícitas y voluntarias, no así en la
influencia; y, por último, el grado de semejanza entre el comportamiento de la
fuente y el receptor, que difiere mucho en la autoridad, ya que uno ordena y otro
obedece, mientras que en la influencia ambas partes pueden tener la misma
conducta.

Estos estudios de autoridad y obediencia cobraron mucha importancia a fines de los


años 60 del siglo XX, cuando dos situaciones mundiales estremecieron la sociedad
internacional. Primero, el juicio de Adolf Eichman y el libro posterior sobre este
caso escrito por Hannah Arendt, “Eichman en Jerusalén: un estudio sobre la
banalidad del mal” (1963), donde Arendt analiza la banalidad con que los
funcionarios alemanes siguieron las instrucciones de los nazis durante la Segunda
Guerra Mundial, sin cuestionar sus fines. En segundo lugar, la aparición a comienzos
de los 60 de los primeros casos de tortura en distintas dictaduras latinoamericanas
apoyadas por EEUU, donde nuevamente se vio cómo los torturadores insistían en
que ellos solo cumplían órdenes.

Estos casos de personas que se declaran inocentes después de haber cometido


actos atroces despiertan un gran interés en la psicología social por la obediencia a
la autoridad y sus factores de influencia. Dentro de los estudios más conocidos de
obediencia destaca claramente el del Stanley Milgram, en la Universidad de Yale,
quien publica en 1973 un estudio que demostraba los efectos de la obediencia y
cómo manipularla.

4.1. Experimento de Milgram

Stanley Milgram (1973) publicó los resultados de una serie de experimentos sobre la
obediencia que, al igual que los de Asch sobre la conformidad, son considerados

16
TEMA 2
Psicología de la normalización

como una de las contribuciones clásicas a la psicología social. Milgram concibió un


procedimiento experimental con el objetivo de determinar en qué condiciones un
sujeto aplicaría dolorosas descargas eléctricas a otro individuo tras recibir la orden
de una autoridad. El experimento contaba con un cómplice que se hacía pasar por
otro participante del estudio. Milgram asigna al sujeto experimental el papel del
profesor y al cómplice el papel del alumno, señalando al primero que la
investigación trata sobre la influencia del castigo sobre el aprendizaje.

El “alumno”, que en realidad es cómplice de Milgram, es atado con correas a un


asiento y se le fija un electrodo al brazo. Se le dice al “profesor”, el sujeto
experimental, que debe leer parejas de palabras al alumno y verificar que éste es
capaz de repetirlas e infligirle una descarga eléctrica cada vez que se equivoque.
Para infligir estas descargas el profesor utilizará un generador provisto de 30
botones etiquetados desde 15 hasta 450 voltios. Los botones llevan colocados
letreros que dicen “descarga ligera” para los 15 voltios, “peligro: descarga
potente” para los 375 voltios, “XXX” para los 435 voltios.

Durante el desarrollo de la experiencia, el alumno comete numerosos errores y tras


cada error el profesor recibe instrucciones de aumentar el voltaje de la descarga.
Cuando el profesor manifiesta deseos de detenerse, el experimentador le da una
orden para que continúe. Estas órdenes forman una serie de cuatro que van desde
“le suplico que continúe”, hasta “no le queda más remedio, tiene que continuar”.

Es importante destacar que, para escoger a los sujetos experimentales, se realizó


una selección que dejó fuera a todas las personas con antecedentes de problemas
psicológicos o psiquiátricos, al igual que a toda persona que se dedicara a trabajos
donde se usara la violencia, como policías, militares, guardias, etc. Esto significa
que la muestra no tenía sujetos con una predisposición especial hacia la violencia.

Milgram midió tres variables en este experimento: la proximidad física de la


víctima, las fuentes del poder de la autoridad y los efectos del grupo.

 La proximidad física de la víctima: la proximidad de la víctima (el alumno)


puede constituir un factor importante de la obediencia. Para manipular esta

17
TEMA 2
Psicología de la normalización

variable, Milgram elaboró cuatro condiciones de distanciamiento (desde


situar al profesor y al alumno en habitaciones separadas, hasta la proximidad
táctil), concluyendo que la obediencia disminuye a media que la víctima se
aproxima al sujeto.

 Las fuentes del poder de la autoridad: Para intentar determinar qué


características debe tener una autoridad para obtener obediencia, Milgram
puso a prueba diferentes variables. Por ejemplo, descubrió que una
autoridad con presencia física produce una obediencia mucho mayor (65%)
que una autoridad ausente que daba sus órdenes por teléfono (21%).
También quiso determinar si el prestigio influye al momento de obedecer a
una autoridad. Para ello, el mismo estudio que había realizado en las
instalaciones de la Universidad de Yale lo repitió en un edificio en ruinas de
Connecticut, bajo el supuesto patrocinio de un organismo de investigación.
El 48% de los sujetos manifestaron una obediencia total en este nuevo sitio,
lo que demostró que no necesariamente una autoridad debe representar a
una institución prestigiosa para obtener obediencia, aunque claramente el
prestigio de una organización legítima, aumenta significativamente la
obediencia, como es el caso de los resultados dentro de las dependencias de
la universidad.

 Los efectos del grupo: en otro estudio Milgram intentó descubrir cómo actúa
la relación de un sujeto con sus iguales sobre la obediencia, utilizando a dos
cómplices más en el experimento. Cuando estos cómplices, que se hacían
pasar por otros dos sujetos experimentales, se negaban a seguir provocando
descargas sobre el alumno, solo el 10% de los sujetos se mostraron
plenamente obedientes ante esta rebelión. En otro experimento, Milgram
contó solo con un cómplice que era el encargado de realizar las descargas
eléctricas, mientras que al sujeto experimental se le asignaban tareas
secundarias. En este caso, la obediencia fue extremadamente alta: un 93%
de los sujetos ayudaron al cómplice a llegar hasta la última de descarga de
450 voltios.

18
TEMA 2
Psicología de la normalización

Este experimento ha marcado la evolución de la psicología social, tanto por sus


repercusiones éticas, como por la idea que tenemos del ser humano como persona
autónoma y libre, cuando en realidad una gran parte de las decisiones que
tomamos dependen de las condiciones en que se tomen esas decisiones. Este
experimento se replicó en muchos países de Europa y América, con similares
resultados, lo que implica que la obediencia tiene muy poco que ver con las
características culturales.

4.2. Experimento de Zimbardo

En 1971, el psicólogo Phillip Zimbardo realizó su famoso experimento de la prisión


de Stanford. Zimbardo quiso estudiar experimentalmente la conducta de las
personas sometidas a roles y normas preestablecidos. Específicamente le
interesaban los roles de presos y carceleros, y para estudiarlos simuló una cárcel en
el sótano de la Universidad de Stanford, preseleccionando para tal fin a setenta
estudiantes, a los que sometió a una serie pruebas psicológicas. De éstos, escogió a
los 21 estudiantes más equilibrados y maduros, destinando al azar a once de ellos
para hacer de carceleros y a los otros diez para hacer de presos. El director de la
cárcel simulada en el sótano sería el propio Zimbardo.

El experimento estaba diseñado para que durase dos semanas, sin embargo, los
acontecimientos hicieron que éste acabase apenas seis días después de comenzar.
Lo que ocurrió fue que a partir del segundo día tanto los voluntarios que hacían de
carceleros como los que desempeñaban el rol de presos (y hasta el propio Zimbardo
en su rol de director de la prisión), asumieron de tal manera los papeles que se les
habían asignado, que los primeros poco a poco se fueron convirtiendo en auténticos
sádicos, mientras que los segundos comenzaron a sufrir graves trastornos
psicológicos, desarrollando un patrón comportamental claramente pasivo y sumiso.
La mitad de los presos tuvieron que ser liberados antes de tiempo tras sufrir
humillaciones físicas y psicológicas. Ni los carceleros ni los reclusos se podían
calificar de “manzanas podridas” antes de comenzar el experimento pues todos
ellos habían pasado unas pruebas psicológicas. En palabras de Zimbardo (2008), lo

19
TEMA 2
Psicología de la normalización

que ocurrió es que los 21 sujetos del experimento cayeron en un “cesto podrido”, y
que las características de este cesto fueron las fuerzas situacionales que actuaron
en aquel contexto conductual: las normas, las reglas, el anonimato de las personas
y del lugar, los procesos deshumanizantes, las presiones para obtener conformidad,
la identidad colectiva, etc.

El experimento confirmó que “la mayoría de nosotros podemos sufrir unas


transformaciones inimaginables cuando estamos atrapados en una red de fuerzas
sociales. Algunas situaciones pueden ejercer sobre nosotros una influencia tan
poderosa que podemos acabar actuando de una manera que nunca habríamos
imaginado” (Ross y Nisbett, 1991).

Zimbardo determinó concretamente siete factores que influyeron en los resultados


del experimento: el poder de las normas para conformar la realidad, la influencia
de la adopción de roles, la técnica del pie en la puerta, difusión de la
responsabilidad, anonimato y desindividualización, los mecanismos de
racionalización y la necesidad de pertenencia y el poder del apoyo social.

a) El poder de las normas para conformar la realidad: las normas son un


poderoso instrumento para controlar conductas complejas e informales, ya
que establecen lo que es aceptable y lo que no, y por tanto terminan
adquiriendo la fuerza de una autoridad legal.

b) La influencia de la adopción de roles: uno de los carceleros de Zimbardo lo


explicó perfectamente: “cuando te pones un uniforme y te dan un papel, o
sea, un trabajo, y te dicen ‘tu trabajo es mantener a esas personas a raya’,
es evidente que no eres la misma persona que si llevaras ropa de calle y
tuvieras un papel diferente” (Zimbardo, 2011). Esto confirma que muchas
veces los roles terminan por adueñarse de quienes los desempeñan.

c) Técnica del pie en la puerta: en el experimento de Zimbardo los carceleros


pasaron de disculparse los primeros días con los presos al empujarlos sin
querer, a humillarlos sin cesar en el cuarto día. Esta técnica hace referencia
al hecho de que las personas, poco a poco, se van involucrando en una
acción o conducta, pasando de acciones fáciles a otras más difíciles en la

20
TEMA 2
Psicología de la normalización

medida que ya han realizado las primeras. Esto se relaciona, otra vez, con la
disonancia cognitiva, puesto que una vez que realizamos una pequeña acción
comprometedora en una dirección, debemos justificar esta acción para
hacerla coherente con nuestras creencias y afectos, por lo que buscamos
formas de justificar esta pequeña acción. Estas mismas premisas que
justifican esta acción pequeña facilitarán la realización de acciones más
comprometedores en la misma dirección que ya ha sido justificada.

d) Difusión de la responsabilidad: es la posibilidad de desplazar la


responsabilidad de las acciones propias a la situación o a otros actores de la
situación con mayor jerarquía. En el experimento de Zimbardo, los
carceleros podían echarle la culpa de su conducta al experimentador o
incluso a los propios presos. Es una variante de la excusa de los nazis en el
juicio de Nuremberg, quienes afirmaron que sólo se limitaban a “cumplir
órdenes”.

e) Anonimato y desindividualización: fue definida por Festinger (1952) como la


pérdida de sentido de individualidad que los sujetos sufren al encontrarse
sumergidos en el grupo, resultado de lo cual cambia su conducta. En el
experimento de Zimbardo, los uniformes y las gafas oscuras fomentaban el
anonimato y reducían la responsabilidad personal. Cuando una persona se
siente anónima en una situación, como si nadie se diera cuenta de cuál es su
verdadera identidad, es más fácil inducirle a actuar de una manera
antisocial, sobre todo si el contexto le “da permiso” para liberar sus
impulsos (Zimbardo, 2011).

f) Mecanismos de racionalización: los carceleros de Zimbardo probablemente


experimentaron disonancia cognitiva al estar comportándose de una manera
violenta con sus compañeros que interpretaban a los presos. Esta situación
les habría llevado a interiorizar las conductas que mantenían en público
debido al rol que desempeñaban, racionalizándolas con el objetivo de
encontrarle sentido a lo que estaban haciendo (Ovejero, 2015).

21
TEMA 2
Psicología de la normalización

g) Necesidad de pertenencia y el poder del apoyo social: nuestra principal


necesidad psicosocial es la necesidad de pertenencia, que no es otra cosa
que la necesidad de ser aceptados, de gustar, y también de ser respetados.
Así, “la presión colectiva de los otros carceleros daba mucha importancia al
hecho ser ‘uno más’ del equipo” (Zimbardo, 2008).

Todos estos factores influyeron para que en el experimento de la cárcel de


Stanford un grupo de jóvenes normales y sanos comenzaran a desarrollar un
comportamiento patológico y que el cambio tuviera lugar en muy poco tiempo. En
resumen, el poder de la situación, del contexto, es tan fuerte que puede llegar
incluso a modificar profundamente la conducta y las creencias de la persona,
llegando incluso a modificar la propia personalidad.

En 2007 Zimbardo publicó “El efecto Lucifer: el porqué de la maldad”, libro donde
analiza sus resultados experimentales detalladamente a la luz de los hechos
ocurridos en 2003 en la cárcel de Abu Ghraib, en Irak, donde los cuidadores de la
prisión llegaron a extremos inhumanos torturando psicológicamente a los reos solo
por entretenerse. Zimbardo participó en el juicio a estos soldados en calidad de
experto.

5. La influencia de la minoría

Hasta aquí se han revisado los principales supuestos por los cuales las personas no
adherimos a las normas y exigencias sociales de las mayorías y cómo logra la
sociedad que sus miembros sigan sus normas sin desviarse demasiado de los fines
que la sociedad ha trazado. Sin embargo, estos supuestos no toman en cuenta el
papel de las minorías, a los innovadores y las transformaciones sociales. Por ello, a
principios de los años 80 del siglo XX, Serge Moscovici (1981), propone una
relectura de los resultados de Asch y plantea cómo ocurre la influencia en el
sentido inverso, es decir, desde las minorías, carentes del poder institucional,
haciendo que la mayoría social cambie de ideas y conductas.

22
TEMA 2
Psicología de la normalización

Contrario a la idea funcionalista de que es el grupo o la sociedad quien ejerce la


fuerza de la influencia hacia el conformismo, Moscivici plantea que cada miembro
de un grupo o una sociedad es potencialmente una fuente de influencia social. Su
planteamiento se basa en que, tal como concluyó Asch, el consenso es la fuente del
poder de la mayoría, sin embargo, las minorías, o las personas individuales, pueden
romper ese consenso, lo que genera incertidumbre en el grupo (o sociedad). Debido
a que la necesidad de certidumbre es el origen del consenso, aparecerá una
tendencia de la mayoría a buscar ese consenso que las minorías han roto y a
conseguir un nuevo equilibrio, admitiendo para ello en el paradigma mayoritario
elementos de los juicios de la minoría.

Pensemos en nuestro grupo de amigos, o en nuestra familia, y cómo se toman las


decisiones (siempre que sean por consenso y no por orden de un patriarca o líder).
Si se quiere salir el fin de semana, el destino lo elige la mayoría, si dos personas no
están de acuerdo en un grupo de diez, por lo general se tenderá a buscar un
acuerdo con esas personas, no se rompe de inmediato con ellas obligándoles a
acatar el planteamiento de la mayoría, sino que se trata de convencerles o
negociar, e independientemente de que la mayoría se salga con la suya y el destino
del viaje sea el que la mayoría planteó desde el inicio, lo más probable es que en
la siguiente salida esa minoría que accede a ir después de un proceso de
negociación, tendrá más poder para decidir el destino la próxima vez. De este
modo, que tarde o temprano, la minoría logra afectar las decisiones de la mayoría.
Esto ocurre constantemente en la realidad, de hecho, lo que llamamos progreso, no
es otra cosa que un proceso en que propuestas de minorías que son lentamente
aceptadas por las mayorías.

La pregunta de Moscovici fue, ¿cuáles son las condiciones para que esto suceda?
Finalmente estableció que existe un conjunto de factores que deben considerarse
para que las minorías tengan esa influencia sobre las mayorías.

 El primer elemento es que no todas las minorías son iguales. Moscovici


denomina a las minorías innovadores o alternativas como “minorías activas”,
es decir, una minoría que es capaz de sustentar opiniones diferentes a las de

23
TEMA 2
Psicología de la normalización

la mayoría y soportar las presiones sociales hacia el consenso, aportando una


alternativa a la solución de un problema, o el análisis de una situación, lo
que produce una ruptura del equilibrio social. Esta minoría no es
simplemente un conjunto de personas que piensan distinto, sino que es un
conjunto de personas que piensa distinto y se lo hace saber a la mayoría de
la forma más ruidosa y visible que pueda. En España, los colectivos LGTBIQ
son un buen ejemplo de lo que es una minoría activa.

 Segundo, usar las legitimidades morales de la mayoría. Las minorías activas


disienten de la mayoría en algún punto crucial de la visión de mundo, sin
embargo, deben buscar elementos de concordancia con el esquema general
de valores de la mayoría para que esta no los descarte, sino que generen un
verdadero desequilibrio en el consenso social. El caso de los movimientos
LGTBIQ es igualmente interesante en este punto, puesto que, a pesar de
disentir en un punto crucial de la moral hegemónica, como es la sexualidad,
comparten con la moral general la visión sobre la libertad, la justicia y el
derecho a la felicidad, que han usado muy eficientemente para lograr que la
sociedad general no pueda ignorarlos sin generar en su interior grandes
desequilibrios. La mayoría, al intentar recuperar este equilibrio, debe
admitir dentro de su moral general muchos aspectos de las reivindicaciones
de estos movimientos. Estos movimientos no han logrado todo lo que se han
propuesto, pero los logros obtenidos han sido extraordinarios para una
sociedad que antes los despreciaba y encarcelaba.

 Consistencia de la minoría. Una minoría debe mostrarse consistente en sus


juicios, es decir, todos sus miembros deben plantear ideas semejantes y
coherentes. Esta fuerza de la coherencia no es sorpresiva, puesto que lo que
busca la mayoría es recuperar el consenso y el consenso proviene de la
necesidad de certidumbre, un grupo que presenta certezas aparece como un
aporte al consenso general.

 Minoría nómica: otro factor a considerar es el que la propuesta de la


minoría debe implicar una alternativa normativa (nómica) innovadora y

24
TEMA 2
Psicología de la normalización

diferente de las que se ha realizado hasta el momento. La crítica de la


minoría debe llevar a proponer una alternativa al orden del momento,
puesto que solo sembrar la incertidumbre no provocará un giro de la
mayoría. La propuesta de otro orden (manteniendo la consistencia) novedoso
es lo que permitirá que la mayoría desarrolle respeto y admiración por la
minoría, a quien la innovación vuelve atrevida y atractiva, cuestión que hace
aumentar su capacidad de influencia sobre la sociedad en su conjunto.

Estas formas de comportamiento de las minorías son las que le permitirán


convertirse en una fuente de influencia legítima sobre la mayoría, y ser un motor
de cambio e innovación en las sociedades democráticas modernas1.

1 Estas dos denominaciones no son excluyentes, pero si necesarias para este proceso. En primer lugar, solo en las sociedades democráticas hay libertad para
que las minorías expresen abiertamente sus disensos con la sociedad general sin represalias físicas. Por otro lado, la modernidad es la que permite que la
sociedad no esté basada en la costumbre y el hábito, sino que se premie y admire la innovación y la creatividad, por lo que sin estas dos condiciones,
democracia y modernidad, difícilmente las condiciones para las minorías activas serán apropiadas.

25
TEMA 2
Psicología de la normalización

5.1. Factores o elementos de la influencia social según Cialdini

Cialdini (1994) sostiene que existen seis elementos que intervienen en el proceso
de influencia social, y que estos comparten una serie de características como el
hecho de ser normas muy valoradas socialmente, que se aprenden y aplican desde
la infancia, que sirven para convencer en situaciones muy diferentes y que sirven
también para interpretar y actuar rápidamente en una situación social. Estos
elementos son: reciprocidad, simpatía, validación social, escasez,
compromiso/coherencia, autoridad (Cialdini, 2009). El planteamiento de Cialdini es
que controlando algunos de estos factores, o todos ellos, podemos aumentar la
probabilidad de que las personas hagan o piensen lo que nosotros deseamos.

 Reciprocidad: tratamos a los demás como ellos nos tratan. La importancia de


esta norma en la evolución se debe a su carácter funcional y adaptativo,
pues beneficia a los individuos y al grupo en su conjunto, garantizando la
supervivencia. Es la tendencia a buscar el equilibrio interno, como en la
disonancia cognitiva, pues debemos ser buenos con quienes son buenos con
nosotros o experimentaremos un desequilibrio y un malestar interno. Desde
pequeños aprendemos que hay que corresponder a los beneficios de los
otros, ya sea que se trate de un regalo o un favor, y que quien no la cumple
es tachado de desagradecido. Por esta razón las personas tienden a decir
que sí cuando se sienten obligados ante un solicitante que previamente les
ha hecho un regalo, una concesión o un favor. Esta norma también valida el
“castigo” a aquellas personas que nos perjudican. Ejemplos de este
elemento son las muestras gratuitas, los regalos de merchandising, etc. Por
otra parte, si alguien nos trata mal, se ríe de nosotros u otras muestras de
rechazo, lo más probable es que desate en nosotros un rechazo igualmente
potente y no estemos dispuestos ceder a sus deseos de cambio. Pero, con
este último ejemplo hay que tener algo más de suspicacia, ya que si la
intención de la persona que nos maltrata es, justamente, despertar la
violencia y el odio en nosotros y lo logra, entonces su influencia es
igualmente potente que la del que actúa positivamente.

26
TEMA 2
Psicología de la normalización

 Simpatía: aquí actúan los principios de identificación (semejanza), atractivo


(armonía de formas, belleza), familiaridad (conocidos, permanencia) y los
halagos. Es más fácil que accedamos a una petición si se trata de una
persona familiar, simpática y/o o agradable. Esto se debe al hecho de que,
por medio de un proceso de asociación (parecido al del condicionamiento
clásico) solemos atribuir a las características que nos agradan, otro conjunto
de características positivas. Ejemplos: sonrisas, interesarse por el cliente,
dar la razón, establecer un vínculo.

 Validación social: actuamos por aprendizaje vicario (por observación).


Solemos determinar cuál es la conducta correcta averiguando qué es lo que
los demás piensan que es correcto. Es decir, nos fijamos cómo piensan o se
comportan la mayoría de las personas, o aquellas que nos parecen modelos
adecuados, para fijar nuestro propio juicio o conducta. La validación social
actúa para evitar el rechazo o el castigo, o también en contextos de
incertidumbre. Esto último quiere decir que en aquellas situaciones donde
no contamos con datos objetivos, evaluamos lo adecuado de nuestro
comportamiento comparando nuestra conducta con lo que hacen las
personas semejantes a nosotros en esa misma situación. Ejemplos: ranking,
premios, estadísticas, testimonios.

 Escasez: se relaciona con la idea de la autopercepción de eficiencia


(aprovechar la oportunidad). Independientemente de la necesidad o
atracción que sintamos por un objeto, tendemos a valorarlo más cuanto más
raro o escaso sea. Consideramos como más valioso lo menos accesible por
dos motivos: en primer lugar, porque existe la idea de que las cosas que son
difíciles de conseguir son mejores que las de fácil acceso. En segundo lugar,
porque cuando algo no nos es accesible nuestra libertad se ve coartada y ese
sentimiento de pérdida de autonomía provoca como respuesta un deseo de
recuperar dicha autonomía. Ejemplos de escasez son el deseo de ver una
película que ha sido censurada o querer comprar algo que ha sido puesto a la

27
TEMA 2
Psicología de la normalización

venta dentro de un tiempo límite, como las ofertas de internet o el conocido


como Black Friday.

 Compromiso/coherencia: este principio se basa en el deseo de ser y parecer


coherente. Esto se debe a que la coherencia es un rasgo de la personalidad
que es muy valorado socialmente, pues se considera más respetables y más
inteligentes a las personas que se comportan y piensan dentro de una misma
línea, asignándoseles otros rasgos como el ser racional, estable y honrado.
Por el contrario, una persona poco coherente es considerada superficial,
poco inteligente, débil e indecisa. Además, la coherencia permite evitar la
disonancia cognitiva, esto es, evitar el malestar psicológico cuando no
actuamos según lo que pensamos y viceversa. Por otra parte, la coherencia
también tiene un carácter adaptativo y funcional, ya que permite llevar a
cabo de forma eficaz una línea de acción de forma sencilla y sin demasiado
esfuerzo cognitivo. Esto se debe al hecho de que las actitudes y conductas
previas nos sirven para actuar de forma similar en situaciones parecidas.
Ejemplos de este principio serían los programas de fidelización o
comprometerse a algo en público. En muchas ocasiones la posibilidad de
votar en un grupo (sea político o de cualquier otra clase) cambia el resultado
de la votación, ya que en público no puedo votar contra mis amigos o a favor
de personas que he criticado, por ejemplo.

 Autoridad: se basa en los conceptos de credibilidad, conocimiento y


jerarquía. Cualquier persona que tenga una autoridad legítima resulta
enormemente influyente. Solemos seguir las instrucciones o demandas de la
autoridad por un proceso adaptativo que obedece a dos razones. Primero,
porque las personas que tienen una posición de poder (económica, política,
social) a la que han llegado de manera legítima, son poseedoras de un
reconocimiento social que les ha sido otorgado por los mismos sujetos que
les han puesto en esa posición de poder. Y segundo, porque esas personas
que tienen poder son capaces de controlar recursos, es decir, de distribuir

28
TEMA 2
Psicología de la normalización

premios y castigos, y porque desde pequeños se nos enseña que obedecer a


la autoridad (padres, maestros) es la conducta correcta.

29
TEMA 2
Psicología de la normalización

VI. GLOSARIO

Nombre que recibe en psicología cognitiva la tendencia


de las personas a crear normas implícitas, por influencia
recíproca, cuando se enfrentan a situaciones para las
cuales no tienen un repertorio conductual habitual de
Normalización
respuesta. Ante las situaciones indefinidas o de
incertidumbre las personas buscan reducir la ansiedad a
través de la construcción de formas de actuar
mutuamente aceptables o válidas.

Nombre que recibe un fenómeno de visual, un error de


percepción o “ilusión óptica”, que sucede en situaciones
Efecto autocinético
de oscuridad, donde un punto de luz es visto con
movimiento por el ojo humano

Conformismo Una norma ya está establecida y reconocida por el grupo


(según Sherif) tiende a seguirla sin cuestionamiento

Introducción de una modificación normativa desde uno o


pocos individuos del grupo que por su persistencia y
Innovación
cuestionamiento a los modos habituales del grupo,
termina siendo aceptada como una variación aceptada

Cualquier cambio de la conducta producida por el influjo


Influencia social
de otros (López Sáez, 2007).

Es la respuesta de aceptación a la influencia de una


Sumisión
fuente capaz de recompensar o castigar a un sujeto.

Es un tipo de respuesta a la influencia social que


Identificación
proviene de la fuerza de los referentes sociales, es decir,

30
TEMA 2
Psicología de la normalización

del deseo de parecerse a una persona relevante del


entorno simbólico del sujeto.

Es la respuesta a la influencia social que se produce


Interiorización porque el sujeto influido cree verdaderamente en la
certeza de la idea o conducta.

Reciprocidad Tratar a los demás como ellos nos tratan.

Determinamos cuál es la conducta correcta averiguando


Validación social
qué es lo que los demás piensan que es lo correcto.

Independientemente de la necesidad o atracción que


Escasez sintamos por un objeto, tendemos a valorarlo más cuanto
más raro o escaso sea.

Es el principio de influencia que se basa en el deseo de


Compromiso/coherencia
ser y parecer coherente.

Es el principio de influencia social que se basa en la


capacidad de las personas con credibilidad, conocimiento
Autoridad
y jerarquía para hacer cambiar de idea o conducta a los
demás.

Tipo de influencia social en la que los sujetos cambian


Conformismo sus actitudes y comportamientos para cumplir las normas
grupales, es decir, para adaptarse al grupo.

Fenómeno que tiene lugar cuando un individuo modifica


Obediencia su comportamiento a fin de someterse a las órdenes
directas de una autoridad legítima

Esta técnica hace referencia al hecho de que las


Técnica del pie en la personas poco a poco se van involucrando en una acción
puerta o conducta, pasando de acciones fáciles a otras más
difíciles en la medida que ya han realizado las primeras.

Difusión de la Es la posibilidad de desplazar la responsabilidad de las

31
TEMA 2
Psicología de la normalización

responsabilidad acciones propias a la situación o a otros actores de la


situación con mayor jerarquía.

Definida por Festinger (1952) como la pérdida de sentido


de individualidad que los sujetos sufren al encontrarse
Desindividuación
sumergidos en el grupo, resultado de lo cual cambia su
conducta.

32
TEMA 2
Psicología de la normalización

V. RESUMEN

La influencia social se considera como cualquier cambio de conducta o creencias


producida por el influjo o la interacción con otros. Para algunos psicólogos
sociales, el fin de la disciplina es justamente estudiar cómo el pensamiento, el
sentimiento y la conducta de los individuos, son influidos por la presencia, real,
imaginada o implícita de otras personas.

Las respuestas habituales a la influencia social son tres, según Kelman: sumisión,
identificación e interiorización.

Los factores más relevantes para la influencia social, según Cialdini, son:
reciprocidad, simpatía, validación social, escasez, compromiso y autoridad.

El conformismo es la influencia social que la mayoría ejerce sobre la minoría en


forma de normas o presión social, lo que permite a las personas adaptarse al
grupo o sociedad. Asch demostró que las personas tienden a conformarse con las
ideas del grupo aun sabiendo que estas son objetivamente erróneas. Esta
tendencia se relaciona con algunas variables que planteó Ash: el tamaño del
grupo, la unanimidad del grupo y la implicación.

La obediencia se define como la modificación de la conducta de un individuo con


el objetivo expreso de satisfacer las órdenes de una autoridad legítima.

Los experimentos de Milgram demuestran que la mayoría de las personas


obedecen a la autoridad, aun sabiendo que hace daño a otra persona, si se
controlan algunas variables como: la proximidad a la víctima, la fuente de
autoridad legítima y los efectos del grupo.

Por su parte, Zimbardo realizó un experimento en el que simulaba una cárcel,


donde los roles, la institucionalidad y la legitimidad convirtieron a estudiantes
modelo en sádicos guardias en apenas tres días. Este experimento arroja siete
factores que influyeron en los resultados de la influencia de la situación: el poder
de las normas para conformar la realidad, la influencia de la adopción de roles, la
técnica del pie en la puerta, difusión de la responsabilidad, anonimato y
desindividualización, los mecanismos de racionalización y la necesidad de
pertenencia y el poder del apoyo social.

33
TEMA 2
Psicología de la normalización

Una perspectiva diferente de la influencia social la presenta Moscovici a través de


su planteamiento de las “minorías activas”. Estos son grupos minoritarios que
logran influir sobre el consenso de la mayoría mostrándose activa y
explícitamente disconformes y negándose a conformarse. Suman a eso una
propuesta alternativa de solución a un problema, mostrándose innovadores y
críticos y, sobre todo, consistentes en el tiempo en algunos ámbitos donde radica
su diferencia, pero compartiendo otros valores de la mayoría.

34
TEMA 2
Psicología de la normalización

VII. BIBLIOGRAFIA

 Bibliografía básica.

Delgado Losada, M.L.(2014) Fundamentos de Psicología para ciencias sociales y de


la salud. Editorial Panamericana, Madrid.

Liebert, R. y Langenbach Liebert, L. (2000) Personalidad: Estrategias y temas.


International Thomson Editores, Madrid.

 COMPLEMENTARIA

Aronson, E. (2002). El animal social. Madrid: Alianza Editorial.

Bandura, A. (1973). Aggression: A Social Learning Analysis. New Jersey: Prentice


Hall.

Barker, R., Dembo, T., & Lewin, K. (1941). Frustration and aggression: an
experiment with young children. Studies in Child Welfare, 18, 1-314.

Barker, R., Dembo, T., Y LEWIN, K. (1941). Frustration and aggression: an


experiment with young children. Studies in Child Welfare, 18, 1–314.

Baron, R. A., y Byrne, D. (2005). Psicología Social. Buenos Aires.

Barraca, J (2008) Bases sociales de la conducta. Madrid : CCS.

Fernández Villanueva, M.C. (2015) Psicología social de la violencia. Madrid,


Síntesis.

Milgram, S. (2016). Obediencia a la Autoridad: El experimento de Milgram. Bilbao:


Editorial Desclee de Brouwer.

Moscovici, S. (1981) Psicología de las Minorías Activas. Madrid: Ediciones Morata

Molinet, E., Velásquez, D., & Estrada, C. (2007). Teorías implícitas sobre la
estabilidad de la naturaleza humana y del entorno social, y su relación con la

35
TEMA 2
Psicología de la normalización

reincidencia delictiva en internos recluidos en el centro de cumplimiento


penitenciario. Magallania (Punta Arenas), 35(2), 151-157.

Pascale, P. (2010). Nuevas Formas De Racismo: Estado de la cuestión en la


psicología social del Prejuicio. Revista Ciencias Psicológicas, (1), 57–69.

Potter, J. (1998) La representación de la realidad. Buenos Aires: Paidós

Seligman, M. E. P. (1983). Indefensión: en la depresión, el desarrollo y la muerte.


Madrid: Editorial Debate.

TAJFEL, H. (1975). “La categorización social”. En S. Moscovici, Introducción a la


Psicología Social. Barcelona: Planeta.

Tajfel, H. (1984). Grupos Humanos y Categorías sociales. Barcelona: Herder.

Turner, J. (1985). Una teoría de la categorización del yo. Redescubrir El Mundo


Social.

Turner, J. C. (1990). Redescubrir el grupo social: una teoría de la categorización


del yo. Ediciones Morata.

Zimbardo, P. (2011). El efecto lucifer: el porqué de la maldad. Paidós.Webs de


referencia.

 Otras fuentes de consulta

36
Asignatura

Psicología general TEMA 3


Psicología de las representaciones sociales

GRADO EN CRIMINOLOGIA

TEMA 3
Psicología de las
representaciones sociales

Autor: Ricardo Zúñiga

1
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

Unidad didáctica.

Tema 3: Psicología de las


representaciones sociales
INDICE

I. PRESENTACIÓN ................................................................................................... 3
II. OBJETIVOS. ....................................................................................................... 4
III. ESQUEMA ......................................................................................................... 5
IV. CONTENIDO ...................................................................................................... 6
1. Representación social: orígenes ..................................................................... 6
1.1. Características ..................................................................................... 10
2. Formación de las representaciones sociales .................................................... 12
2.1. La objetivación: concreción de significados materializándolos ......................... 13
2.2. El anclaje: fijación en el repertorio social ................................................... 16
3. Funciones de las representaciones sociales .................................................... 17
4. La relación con lo antiguo .......................................................................... 17
5. Aporte de las Representaciones sociales ........................................................ 18
V. RESUMEN ........................................................................................................ 19
VI. GLOSARIO ...................................................................................................... 21
VII. BIBLIOGRAFIA................................................................................................. 23

2
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

I. PRESENTACIÓN

Este capítulo está dedicado a la teoría de las representaciones sociales (RS),


planteada por Serge Moscovici en los años 60. Esta teoría expresa una forma de
entender las formas de pensar e influir sobre otros desde un punto del conjunto de
la sociedad. Es decir, es una forma distinta de entender el por qué la personas de
una determinada sociedad o grupo comparten formas de ver el mundo, conceptos
de justicia, igualdad o jerarquía, de aceptación de normas o de formas de ser que
juegan un determinado rol en los esquemas de pensamiento de una época o de un
colectivo.

Las representaciones sociales son un aporte teórico a la teoría cognitiva, peor no


desde el esquema conductista experimental, sino más bien de la tradición
lingüística y fenomenológica europea.

Desde este enfoque es posible entender mejor la coherencia interna de formas de


pensar que pueden llegar a ser violentas o delictivas, como el machismo, el
racismo, el nacionalismo, o el fanatismo religioso o deportivo. Todas estas formas
de pensar comparten el hecho que se viven como formas de ver el mundo en su
conjunto y como una expresión coherente de pensamiento en diversos aspectos de
la vida. Además comparten la características de que se pueden representar con una
palabra, un símbolo, un objeto o un signo específico, que trae tras de sí todo ese
mundo de significado que se denomina representación social.

A continuación, se revisará su historia como concepto, para entender su aporte


teórico, su definición y alcances, así como su estructura y generación.

3
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

II. OBJETIVOS.

 Conocer la definición y alcances teóricos de las representaciones sociales

 Comprender la aplicación a la comprensión de la realidad y las metodologías


que dan cuenta de las representaciones sociales.

4
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

III. ESQUEMA

Representación
social

Formación Características Funciones

Objetivación Anclaje

5
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

IV. CONTENIDO

1. Representación social: orígenes

La primera vez que se usa el termino representación en ciencias sociales es en


1898, por el insigne sociólogo francés Emile Durkheim (1898), quien llama
“representaciones colectivas”, a los conceptos o categorías abstractas que son
producidas colectivamente y que forman el bagaje cultural de una sociedad. En una
época de nacionalismo casi fanático, Durkheim quería explicar como una sociedad
(o una nación) llega a producir un pensamiento compartido y más o menos
representativo, pero escapando de las explicaciones biologicistas de tipo racista.

Este término es recuperado por el psicólogo social Serge Moscovici (1961), como
forma de explicar bajo una sola expresión la tendencia a percibir mundos
coherentes en torno a una idea, objeto o imagen. La representación social es más
abarcadora que la idea de Durkheim de representaciones colectivas. Una primera
definición dada por Moscovici (2013) es: “la elaboración de un objeto social por
parte de una colectividad”.

La clave de esta definición es la idea de “objeto social”, que sitúa a este concepto
justo en la intersección entre lo psicológico y los social. Ya que una imagen, una
palabra o un objeto percibidos individualmente, procesado psicológica mente,
utiliza una construcción socialmente significativa para dar sentido a esa
percepción. Un ejemplo de esto en la España actual seria la lucha por las banderas.
Si una persona exhibe una bandera española constitucional en la ventana de su
apartamento en la actualidad, evidentemente no quiere expresar que es español o
que está celebrando el 12 de octubre, sino que está posicionándose políticamente
ante unos hechos que dividen al país. Así es como un objeto concreto (la bandera

6
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

constitucional) representa mucho más que unos colores o un territorio estatal,


representa una forma de pensar sobre el futuro de la sociedad. Entonces es cuando
un simple trapo coloreado pasa de ser un objeto concreto a ser un objeto social,
que trae consigo un mundo de significado y una relación con muchos otros
conceptos y posiciones frente a la realidad social, pasada, presente y futura.

Evidentemente, lo que es válido para la bandera constitucional española lo es para


cualquier bandera, sin embargo, en España se da la peculiaridad que no representa
por igual a todos los españoles, por lo menos fuera de los días en torno al 12 de
octubre, mientras que una bandera mexicana o francesa, probablemente
representan por igual a la mayoría de las personas pertenecientes a esos estados.
Esas banderas no dejan de ser un objeto social, puesto que representan mundos de
sentido, frente a los cuales uno puede desarrollar actitudes, afinidades,
distanciamientos, afectos, etc., pero el hecho de que representen cosas distintas
en cada país es, justamente, lo que lo convierte en un objeto social que conlleva
una representación social, ya que dichos contenidos no están en los objetos
concretos, sino en la representación que hacen de un cierto mundo de ideas.

Pero ahí no acaba todo. Es un objeto construido socialmente, pero frente al cual
puedo reaccionar psicológicamente, es decir, individualmente, con aprecio, o
desprecio, con enfado o alegría, con comprensión o con distanciamiento, es decir
con respuestas individuales que tampoco están predeterminadas por el objeto en sí
(la bandera o cualquier otro) sino que son parte de lo que significa para cada
individuo la representación social que está detrás del objeto.

Una definición más acabada específica de la representación social sería:

“designa una forma de conocimiento específico, el saber de sentido


común, cuyos contenidos manifiestan la operación de procesos
generativos y funcionales socialmente caracterizados” (Jodelet, 2013).

7
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

De esta definición se desprende entonces que las representaciones sociales son un


conjunto de saberes designados por el conjunto del grupo y que los miembros de
ese grupo, que comparte esas representaciones, utilizan como conocimiento
fidedigno de comprensión de la realidad, y reaccionan (generativamente) frente a
estas representaciones como si lo que representan fuera una realidad concreta.

Este elemento de relación entre psicología individual y construcción sociológica es


esencial para entender el rol de las representaciones en las sociedades actuales.
Ya que en primer lugar la aparición de una representación es en pequeños grupos
que luego o incluso a nivel individual, pero el significado se va extendiendo, y
modificando con cada individuo que la acepta, la internaliza y luego la expresa,
siempre con leves cambios y enriquecimiento, en un proceso que consolida ideas
como realidades y lleva a la acción individual como si esa realidad creada
socialmente fuera una realidad concreta. A esto es a lo que se refiere a la
definición con “sentido común”, ya que la representación generará respuestas
habituales en las personas que comparten esa representación.

Sin embargo, a pesar de lo sólido que puede parecer este significado creado
socialmente, una sociedad puede compartir fuertemente una representación
respecto a algo y otra sociedad tener una representación completamente diferente
de los mismos objetos sociales.

Un ejemplo de esta situación es la barba masculina en los años sesenta y setenta


del siglo XX. Mientras en América Latina, y en América en general, usar barba
significaba algo específico, una realidad social aceptada, en Europa y
especialmente en la URSS, podía significar exactamente lo contrario. En América.
La barba representaba una ruptura con lo establecido y la búsqueda de la libertad,
ruptura con un sistema de control social, era casi sinónimo de una persona de
izquierda, libertario o anarquista, probablemente a favor de la revolución armada

8
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

de las clases oprimidas, enemigo, o al menos desconfiado, de la figura de EE.UU.,


probablemente ateo y marxista, sexualmente liberado del matrimonio y, muy
posiblemente, militante de partidos políticos o movimientos sociales que
representaban esas ideas. Al punto de que las policías secretas de las dictaduras de
derecha en el continente arrestaban preventivamente a la gente que usaba barba y
cuando se declaraba una de estas dictaduras muchas personas se afeitaban para
evitar los riesgos.

En el mismo período, usar barba en Rusia era sinónimo de estar contra el Estado,
ya que la barba representaba los valores tradicionales de la religión ortodoxa y de
la Rusia clásica. Los disidentes rusos, siguiendo el ejemplo de Alexander
Solschenitzin, famoso físico, escritor y disidente ruso. También en la URSS usar
barba era un riesgo, ya que podía interpretarse como disidencia y la KGB podía
incluir a quien la usaba en las listas negras, con riesgo real para la integridad de las
personas.

Estas representaciones sociales difieren en estas dos sociedades, en el mismo


momento histórico, debido a que cada una tiene una evolución propia relacionada
con los significados de la sociedad a la que pertenece y de los significados creados
por los individuos que son portadores de dicha representación.

Este permanente proceso de expansión social y expresión individual de las


representaciones las hace muy dinámicas y factibles de cambiar y evolucionar. Este
proceso es el que se denomina “negociación social”, en el sentido de que la
representación va adquiriendo significados y legitimando estos socialmente, pero
también va rechazando algunos significados o acciones y objetos para que no se
vinculen a estas representaciones.

9
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

1.1. Características

Como se aprecia, el concepto de representación social busca expresar un fenómeno


complejo de convergencia de significados en grupos y sociedades, que permiten a
las personas comprender con más facilidad y rapidez las ideas de otros, sin
necesidad de realizar grandes y detalladas explicaciones cada vez que se quiere
decir algo. Muchas veces podemos expresar nuestra idea del mundo, nuestra
posición política, nuestros valores morales o religiosos, etc., tan solo con usar una
prenda de vestir, una insignia o logo, un lazo u otro objeto social que porta un
mundo de significado y expresa que la persona que muestra tal objeto social tiene
esas ideas y comparte un mundo de significado específico. Nótese que en estos
casos no es necesario que la persona que percibe al portador del objeto social
comparta esas representaciones sociales, pero las identifica claramente debido a
que comparte los códigos de la sociedad o colectivo al que se pertenece. Un
nacionalista español y un nacionalista catalán pueden identificarse mutuamente
por sus objetos sociales (banderas, colores, etc.) sin que compartan las ideas del
otro, pero si comparten la sociedad en que esos objetos sociales han cobrado tales
significados.

Todo lo anterior implica que las representaciones sólo pueden existir en grupos
estables o comunidades sociales con procesos de comunicación activos, con puntos
de vista convergentes y divergentes y abiertas al cambio. Este proceso no puede
darse en sociedades tradicionales donde no hay negociación del discurso, o
discursos opuestos, ya que en una sociedad tradicional los significados fueron
impuestos o construidos en un momento histórico lejano (a veces mítico) y solo
esas interpretaciones son válidas, no se aceptan cambios ni nuevos objetos
sociales. Hay un rechazo a los nuevos objetos sociales porque la tradición hace muy
difícil introducir estos nuevos objetos en la tradición, ya que no hay significados
previos para estos y, habitualmente, se teme que estos nuevos significados que

10
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

abre el debate de negociación de significados de los nuevos elementos afecte las


creencias monolíticas sobre la tradición.

Pero este mundo de significado que porta la representación es conocimiento para


la acción, no es solo significado virtual, sino que conlleva acciones, en palabras de
Jodelet (2013), “Es el producto y el proceso de una elaboración psicológica y social
de lo real”. Son modalidades de pensamiento práctico, que indican como actuar
frente a una situación en la que pone en juego una representación determinada.
Por ello, cuando un grupo de hinchas de un equipo van camino al estadio y ven a
una persona con la camiseta de otro equipo reaccionan, establecen una relación
entre una prenda de vestir y un mundo de significado que implica un solo camino
de acción coherente; mostrar su desagrado con esa persona portadora de ese
significado (independiente de si esta filiación con ese significado sea real o no)

En resumen, las representaciones sociales están orientadas hacia la


comunicación, la comprensión y el dominio del entorno social, material e ideal.

Lo dicho anteriormente implica que las representaciones sociales necesitan,


además de un objeto social al cual anclarse, un contenido de orientación
cognitiva, conductual y afectiva para existir como representación, requieren
informaciones, imágenes, actitudes, opiniones, etc. Esta característica a hecho que
algunos autores equiparen la idea de representación social a la idea de actitud,
cuestión totalmente errónea, ya que las representaciones son mucho más
complejas y comprenden un ámbito social mucho más amplio, de hecho, una
representación puede contener una serie de actitudes, y también de prejuicios,
estereotipos, heurísticos y otras estructuras psicosociales, como parte de su
contenido.

11
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

El principal aporte de esta conceptualización es pasar de la cognición individual y


relativamente pasiva respecto a la realidad, a una cognición rica, compleja,
creativa frente a la realidad y compartida socialmente.

Finalmente se pude decir que la representación social debe contar con las
siguientes 5 característica para ser considerada de esta forma:

• Siempre representa un objeto social


objeto

• existe una imagen o elemnto perceptible


Imagen • este elemento se puede intercambiar por el objeto

• tiene un carácter simbólico (no concreto)


símbolo • Asociado a un significante

• Es producto de la interacción social, no una realidad


Constructivo preestablecida

• Es independiente de la realidad concreta


Autónomo • Por ello es ssuceptible de ser recreado, además de reproducido

2. Formación de las representaciones sociales

Ya se ha mencionado que las representaciones sociales tienen una función de


integración de lo nuevo en el mundo simbólico compartido de una sociedad o
colectivo. Esto lleva implícito que las representaciones sociales tienen un inicio (y
probablemente un fin) en un momento evolutivo de una sociedad determinada.
Esto implica la formación de las estructuras que crean la representación y también

12
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

implica un proceso de desarrollo, evolución y cambio constante de la


representación.

Es decir, las representaciones tienen una “vida” vinculada a los procesos sociales
del contexto histórico y social de cada colectivo.

Los elementos principales para la formación de representaciones sociales son la


objetivación y el anclaje.

2.1. La objetivación: concreción de significados materializándolos

La objetivación es un conjunto de procesos que da imagen y estructura a la


representación. Sirve para materializar ideas y significados, hace corresponder
cosas/ideas con las palabras. Este es el proceso mediante el cual un nuevo objeto
concreto (o uno antiguo resignificado) cobre existencia como objeto social. Este
último término es relevante, pues es el objetivo final de la objetivación, convertir
un objeto cualquier en un mundo de sentido compartido para una comunidad o
colectivo.

Por ejemplo, una “runa” cualquiera, para cultura occidental actual no tiene
ninguna connotación especial y solo se representa a sí misma y, como mucho, a una
cultura desaparecida. Pero si aparece un movimiento político que reivindica algo
que, según ellos, puede representar esa runa, entonces aparece un significado
representativo, como lo que ocurrió con la esvástica levógira y el nazismo. El
proceso de pasar de ser un símbolo antiguo del sol y la buena fortuna a representar
la más obtusa ideología de los fanatismos inhumanos, es un proceso de
objetivación, en el sentido de que un objeto (en este caso un símbolo) se torna en
un objeto social, que con solo verlo algunas personas pueden sentir miedo, terror

13
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

incluso, o tristeza, así como otros sentirán ira y odio. Es decir, se reacciona ante el
símbolo no por lo que es (unas pocas líneas en un papel) sino por todo lo que
significa.

Este proceso de convertir un objeto concreto en un objeto abstracto se conforma


de tres partes:

• Separación de las imagenes y


Selección y contenidos de su contexto
descontextualización concreto

Formación de un
núcleo figurativo • da imagen y estructura

Naturalización • sentido común

a) Selección y descontextualización;

En esta etapa primaria se busca y selecciona el o los objetos que serán la


principal figura de la representación social para el colectivo en que se produce,
dándole un sentido distinto del que tiene como objeto físico. Por ejemplo: una
bandera, un símbolo, una persona, una palabra, o un conjunto de estas cosas.

Una vez que estos objetos están seleccionados, es decir, que un grupo de
personas que comparten una realidad, han consensuado que ese objeto (u
objetos) son elementos relevantes de su mundo de significados, entonces estos

14
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

son descontextualizados. Esto quiere decir que dejan de significar lo que


significan por sí mismos y comienzan a transformarse en objetos sociales.

Un ejemplo de esta selección y descontextualización es la que hacen los


movimientos sociales con algunas fechas, en el caso español, el 15M. Este es un
claro ejemplo de descontextualización, es decir que un elemento que
significaba únicamente una fecha, un momento de coordinación y expresión,
muy concreto, deja de significar 15 de mayo para adquirir otro significado,
siendo aislado de la idea de tiempo (descontextualizado), para pasar a ser un
referente de ideología y acción política, independiente de si se expresa el 12 de
diciembre o el 3 de abril, sigue siendo el 15M.

b) Formación de un núcleo figurativo (Esquematización)

Una vez seleccionado y descontextualizado, el símbolo adquiere cuerpo, o más


bien solidifica y estructura los rasgos iniciales, obteniendo en este proceso una
imagen consensuada y una estructura compleja, dotada de contenidos y
relaciones. Esto es lo que se denomina la formación de un núcleo figurativo.
Esta esquematización permite a los sujetos adquirir estos conocimientos de
forma simple y rápida, sin los detalles sutiles del conocimiento original.

Así es como podemos establecer relaciones entre 15M y conceptos como


indignados, jóvenes (“perroflautas”), rechazo a la corrupción, rechazo a los
partidos tradicionales, rechazo a la política representada por la transición
española. Podríamos seguir con ideas asociadas, pero lo relevante es la
capacidad que tiene un símbolo de transmitir un significante complejo y
estructurado como estas ideas. Por otro lado, hay que entender que en sociedad
de alta densidad demográfica como las actuales, probablemente no existe
ninguna representación que sea equivalente para toda la sociedad. En el

15
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

ejemplo del 15M, mientras para unos será una presentación positiva y de
despertar social, para otros representa un populismo detestable. En todas las
representaciones encontramos esta posibilidad de dualismo, sin embargo, la
representación que suele interesar es la positiva (no en el sentido de la buena,
sino de la creada por el grupo interesado), ya que la visión contraria suele ser
desarrollada posteriormente por grupos competidores u opuestos al colectivo
que la desarrolla como parte de su proceso de identificación y generación de
conocimiento.

c) Naturalización

En esta etapa el conocimiento concretado en el esquema simbólico se integra en el


sentido común del grupo o colectivo. Es decir, pasa de ser un conocimiento
novedoso o abstracto, a formar parte de una realidad inmediata y concreta, de
fácil acceso y de obvia utilización.

La objetivación, como proceso global, lleva a percibir un esquema conceptual como


real, concreto, y logra introducir un conocimiento nuevo o difícil en la vida social
del grupo.

2.2. El anclaje: fijación en el repertorio social

En el anclaje, el conocimiento relativos a la representación social objetivada pasa


a estar inserto en la jerarquía de los valores del grupo. Esto básicamente
significa que el conocimiento es utilizado para evaluar la realidad, categorizar
personas e ideas, reacción frente a objetos actitudinales vinculados a la
representación, obtener información del ambiente basada en los símbolos de la

16
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

representación. Es decir, es el cambio del objeto concreto por el instrumento


social.

Esto significa que el objeto social de la representación pasa por la integración


cognitiva del objeto en un sistema de pensamiento preexistente. Entre otras
economías cognitivas, esto implica que genera conclusiones rápidas sobre la
conformidad y la desviación. En este nivel las representaciones sociales
“rápidamente trasuntan explicaciones acerca de los eventos de la vida cotidiana,
explicaciones fuertemente arraigadas al minuto de contactarse con la realidad
social” (Zambrano y Pérez-Luco, 2004).

3. Funciones de las representaciones sociales

Desde el punto de vista operativo, las representaciones sociales tienen un lugar en


el ordenamiento social y en la relación entre el individuo y la sociedad. Es así como
las funciones principales de este fenómeno son:

 Integración de lo nuevo  Los objetos sociales son dotados de


sentido coherente con el resto de
creencias del grupo o la sociedad

 Interpretación de la realidad  La RS aporta una orientación de


interpretación de la realidad
preconsensuada

 Orientación de las conductas  La RS permite saber cómo actuar en la


y las relaciones sociales realidad social

4. La relación con lo antiguo

17
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

Las representaciones sociales son integradoras de nuevos objetos sociales


otorgándoles sentido. Pero ¿de dónde sale ese sentido? Ese sentido adjudicado al
objeto social de la representación es una mezcla entre nuevas formas de
interacción, propias del contexto social nuevo, y sentidos (RS) preexistentes, de
modo que las nuevas representaciones tienen un aporte de contenido novedoso,
pero este contenido a sido “traducido” a lo semejante, para ser comprendido y
asimilado de forma simple y rápida. Por ejemplo, a los sistemas de envío de
mensajes digitales personalizados, inventado en los años 80 del siglo XX, se le
denominó “email” o “correo electrónico”. En realidad, un email no se parece
mucho a un correo postal, la prueba es que casi 40 años después aun no desaparece
el correo postal y queda mucho para que eso suceda. Salvo por el hecho
representado de que es un texto enviado de una persona a otra, pero no interviene
ningún sistema de correo, no hay papel, no hay sellos, no se envía anda
físicamente. El parecido es lejano, pero fue una forma de asimilar una nueva
tecnología y darle un lugar en nuestra cotidianeidad, y ha funcionado.

Entonces, se aprecia que una representación social integra lo nuevo a lo antiguo y


por ello debe usar códigos de interpretación que ya existen en el grupo de acogida.

5. Aporte de las Representaciones sociales

El concepto de representación social, recuperado por Moscovici, ha permitido darle


mayor capacidad interpretativa a las teorías cognitivas, expandiendo las teorías de
la cognición de la psicología individual a los procesos sociales.

Este aporte a permitido entender, desde un punto psicológico y psicosocial como es


que una sociedad o un grupo comparten sentido rápidamente y evolucionan en
estos sentidos de forma relativamente homogénea.

18
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

V. RESUMEN

El término “representación social” es recuperado por el psicólogo social Serge


Moscovici (1961), como forma de explicar bajo una sola expresión la tendencia a
percibir mundos coherentes en torno a una idea, objeto o imagen. La
representación social es más abarcadora que la idea de Durkheim de
representaciones colectivas. Una primera definición dada por Moscovici (2013) es:
“la elaboración de un objeto social por parte de una colectividad”.

Una definición más acabada específica de la representación social sería:


“designa una forma de conocimiento específico, el saber de sentido común, cuyos
contenidos manifiestan la operación de procesos generativos y funcionales
socialmente caracterizados” (Jodelet, 2013).La representación social es más
abarcadora que la idea de Durkheim de representaciones colectivas. Una primera
definición dada por Moscovici (2013) es: “la elaboración de un objeto social por
parte de una colectividad”.

Este elemento de relación entre psicología individual y construcción sociológica


es esencial para entender el rol de las representaciones en las sociedades
actuales. Ya que en primer lugar la aparición de una representación es en
pequeños grupos que luego o incluso a nivel individual, pero el significado se va
extendiendo, y modificando con cada individuo que la acepta, la internaliza y
luego la expresa, siempre con leves cambios y enriquecimiento, en un proceso
que consolida ideas como realidades y lleva a la acción individual como si esa
realidad creada socialmente fuera una realidad concreta.

En resumen, las representaciones sociales están orientadas hacia la


comunicación, la comprensión y el dominio del entorno social, material e ideal.

Los elementos principales para la formación de representaciones sociales son la


objetivación y el anclaje. La objetivación es un conjunto de procesos que da
imagen y estructura a la representación. Sirve para materializar ideas y
significados, hace corresponder cosas/ideas con las palabras.

19
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

La naturalización es el conocimiento relativos a la representación social


objetivada pasa a estar inserto en la jerarquía de los valores del grupo. Esto
básicamente significa que el conocimiento es utilizado para evaluar la realidad,
categorizar personas e ideas, reacción frente a objetos actitudinales vinculados a
la representación, obtener información del ambiente basada en los símbolos de la
representación

20
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

VI. GLOSARIO

conceptos o categorías abstractas que son producidas


representaciones
colectivamente y que forman el bagaje cultural de una
colectivas
sociedad

designa una forma de conocimiento específico, el saber de


Representaciones
sentido común, cuyos contenidos manifiestan la operación
sociales
de procesos generativos y funcionales socialmente
caracterizados

Objeto dotado de un sentido consensuado por un grupo


Objeto social
social

es un conjunto de procesos que da imagen y estructura a


la representación. Sirve para materializar ideas y
significados, hace corresponder cosas/ideas con las
Objetivación
palabras. Este es el proceso mediante el cual un nuevo
objeto concreto (o uno antiguo resignificado) cobre
existencia como objeto social.

etapa primaria se busca y selecciona el o los objetos que


serán la principal figura de la representación social para
Descontextualización
el colectivo en que se produce, dándole un sentido
distinto del que tiene como objeto físico

El o los símbolos adquieren cuerpo y estructura,


obteniendo en este proceso una imagen consensuada y
Núcleo figurativo
una estructura compleja, dotada de contenidos y
relaciones.

etapa el conocimiento concretado en el esquema


Naturalización
simbólico se integra en el sentido común del grupo o

21
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

colectivo. Es decir, pasa de ser un conocimiento novedoso


o abstracto, a formar parte de una realidad inmediata y
concreta

el conocimiento relativos a la representación social


objetivada pasa a estar inserto en la jerarquía de los
valores del grupo. Esto básicamente significa que el
conocimiento es utilizado para evaluar la realidad,
Anclaje
categorizar personas e ideas, reacción frente a objetos
actitudinales vinculados a la representación, obtener
información del ambiente basada en los símbolos de la
representación

22
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

VII. BIBLIOGRAFIA

 Bibliografía básica.

Jodelet, D. (2013). La representación social: fenómenos, concepto y teoría. In


Moscovici, Psicología social II. Pensamiento y vida social (pp. 469–494).
Barcelona: Paidós.

Moscovici, S. (2013). Psicología social II. Pensamiento y vida social. Barcelona:


Paidós.

Zambrano, A., & Pérez-Luco, R. (2004). Construcción de Identidad en Jóvenes


Infractores de Ley, una Mirada desde la Psicología Cultural. Revista de
Psicología, XIII(1), 115–132. Retrieved from
http://www.redalyc.org/html/264/26413109/

 COMPLEMENTARIA

Aronson, E. (2002). El animal social. Madrid: Alianza Editorial.

Bandura, A. (1973). Aggression: A Social Learning Analysis. New Jersey: Prentice


Hall.

Barker, R., Dembo, T., & Lewin, K. (1941). Frustration and aggression: an
experiment with young children. Studies in Child Welfare, 18, 1-314.

Barker, R., Dembo, T., Y LEWIN, K. (1941). Frustration and aggression: an


experiment with young children. Studies in Child Welfare, 18, 1–314.

Baron, R. A., y Byrne, D. (2005). Psicología Social. Buenos Aires.

Barraca, J (2008) Bases sociales de la conducta. Madrid : CCS.

Fernández Villanueva, M.C. (2015) Psicología social de la violencia. Madrid,


Síntesis.

23
TEMA 3
Psicología de las representaciones sociales

Milgram, S. (2016). Obediencia a la Autoridad: El experimento de Milgram. Bilbao:


Editorial Desclee de Brouwer.

Moscovici, S. (1981) Psicología de las Minorías Activas. Madrid: Ediciones Morata

Molinet, E., Velásquez, D., & Estrada, C. (2007). Teorías implícitas sobre la
estabilidad de la naturaleza humana y del entorno social, y su relación con la
reincidencia delictiva en internos recluidos en el centro de cumplimiento
penitenciario. Magallania (Punta Arenas), 35(2), 151-157.

Pascale, P. (2010). Nuevas Formas De Racismo: Estado de la cuestión en la


psicología social del Prejuicio. Revista Ciencias Psicológicas, (1), 57–69.

Potter, J. (1998) La representación de la realidad. Buenos Aires: Paidós

Seligman, M. E. P. (1983). Indefensión: en la depresión, el desarrollo y la muerte.


Madrid: Editorial Debate.

TAJFEL, H. (1975). “La categorización social”. En S. Moscovici, Introducción a la


Psicología Social. Barcelona: Planeta.

Tajfel, H. (1984). Grupos Humanos y Categorías sociales. Barcelona: Herder.

Turner, J. (1985). Una teoría de la categorización del yo. Redescubrir El Mundo


Social.

Turner, J. C. (1990). Redescubrir el grupo social: una teoría de la categorización


del yo. Ediciones Morata.

Zimbardo, P. (2011). El efecto lucifer: el porqué de la maldad. Paidós.Webs de


referencia.

24
Asignatura
Psicología General
TEMA 4
Psicología de los grupos

TEMA 4
Psicología de los grupos

Autor: Ricardo Zúñiga

1
TEMA 4
Psicología de los grupos

Unidad didáctica.

Tema 4: Psicología de los grupos

INDICE

I. PRESENTACIÓN ................................................................................................... 3
II. OBJETIVOS. ....................................................................................................... 4
III. ESQUEMA ......................................................................................................... 5
IV. CONTENIDO ...................................................................................................... 6
1. Teoría de la categorización social .................................................................. 6
2. La identidad social ..................................................................................... 7
2.1. Etapas de formación de la identidad ......................................................... 11
2.2. Identidad y autoimagen .......................................................................... 11
3. El grupo ................................................................................................. 12
3.1. Definirse como miembros de un grupo: la categorización ................................ 13
3.2. El continuo interpersonal-intergrupal ........................................................ 14
3.3. Cohesión............................................................................................. 15
3.4. La actividad grupal coordinada ................................................................. 15
3.5. Normas............................................................................................... 16
3.6. Estructura ........................................................................................... 17
4. Liderazgo ............................................................................................... 17
4.1. El poder del líder .................................................................................. 18
4.2. Tipos de liderazgo ................................................................................. 19
V. RESUMEN ........................................................................................................ 22
VI. GLOSARIO ...................................................................................................... 25
VII. BIBLIOGRAFIA................................................................................................. 29
VIII. ACTIVIDADES ................................................................. ¡Error! Marcador no definido.
IX. ANEXOS ......................................................................... ¡Error! Marcador no definido.

2
TEMA 4
Psicología de los grupos

I. PRESENTACIÓN

Este capítulo explica las características de la formación de grupos y la fuerza de estos como
elementos de contexto social para las conductas individuales.

Desde el punto de vista de la formación se revisará el poder de la categorización y la pertenencia en


la creación de grupos y en la interpretación de la realidad.

Veremos la estructura de los grupos y como afecta a la conducta de sus miembros, así como uno de
sus principales fenómenos de influencia social, el liderazgo.

3
TEMA 4
Psicología de los grupos

II. OBJETIVOS.

 Conocer los fenómenos asociados a la creación de grupos

 Revisar los conocimientos relativos a la conducta de las personas en grupo

 Conocer los fenómenos asociados a las estructura y mantención de los grupos

 Conocer las teorías relativas al liderazgo grupal

4
TEMA 4
Psicología de los grupos

III. ESQUEMA

Etapas de formación
de identidad
identidad social
Autoimagen
pertenencia grupal
mebresía
Categorización social

cohesión

Grupo normas

estructura
poder
liderazgo
tipologías

5
TEMA 4
Psicología de los grupos

IV. CONTENIDO

1. Teoría de la categorización social

Las teorías cognitivas han hecho énfasis en la necesidad de la mente humana de ordenar nuestro
entorno, de disminuir la complejidad de la realidad a través de distintos “trucos” que economizan
tiempo y capacidad. Una de las teorías que aborda este problema desde los resultados empíricos de
la experimentación es la Teoría de la Categorización Social de Henry Tajfel (1984), que plantea que
nuestro sistema de cognición de la realidad tiende a comparar los estímulos entre ellos y a buscar
similitudes para hacer grupo de categorías, de modo que la diferencia media entre los estímulos de
una categoría son menores que las diferencias intercategoriales. Es decir, que nuestro sistema de
percepción tiende a ignorar grandes cantidades de información para mantener la información
relevante organizada, y así disminuir la complejidad de la realidad.

Por ejemplo, si veo una manzana en una verdulería la comparo con las manzanas de su entorno y
puedo separarlas en dos categorías, las manzanas buenas y las malas. Probablemente realizaré una
rápida operación, en base a conocimiento adquiridos, de dos o tres características que me importan
(rasgo emergente o saliente), que pueden ser el color, el tamaño y la piel sana. En base a esta
agrupación tenderé a ignorar muchas diferencias entre las manzanas “buenas”, como que unas
están más maduras que otras, más blandas, que tienen formas distintivas y algún pequeño defecto
en la piel, etc. Probablemente, no hay dos manzanas “buenas” ni “malas” que sean idénticas entre
sí, sino que hay mucha diferenciación, pero esa diferenciación pasa a ser irrelevante una vez que se
ha realizado la categorización de “buena” o “mala”.

Un resultado necesario de la categorización es que se produce una acentuación ilusoria de


semejanza entre los estímulos que forman parte de una misma categoría, es decir, la tendencia a
sobreestimar el nivel de semejanza entre todos los miembros de la categoría.

A su vez, hay una tendencia a exagerar las diferencias entre los estímulos pertenecientes a
categorías diferentes, es decir, una sobreestimación de la diferencia intercategorial.

La categorización es un proceso de diferenciación-homogenización. Primero, se establece una


característica, o pequeño conjunto de características, que establecen la diferenciación entre dos
categorías (o más), para luego, una vez realizada la diferenciación, homogenizar cada categoría
hacia el interior. Esto es lo que sucede con las personas que consideran el lugar de nacimiento como
característica emergente, que asignan un nombre a una categoría diferenciada claramente de los
nacidos en otro lugar y llaman “catalanes” o “españoles” o “armenios” a las personas según una
sola característica.

6
TEMA 4
Psicología de los grupos

La fuerza cognitiva de esta operación mental es tal, que las personas suelen olvidar que la
diferenciación se establece arbitrariamente por un conjunto de elementos de contexto (sociales,
culturales, ideológicos) y actúan frente a la categoría como si esta fuera dada por la realidad y no
por lo que realmente es: una operación de la cognición.

En función de estos “datos de la realidad” las personas realizan operaciones de diferenciación y


homogenización de su entorno social, categorizando a las personas según ciertas características
socialmente aceptadas e interiorizadas en la socialización, como por ejemplo: hombre-mujer,
joven- mayor, español-extranjero, buenos-malos, amigos-enemigos, etc.

Este es el origen, según autores como Tajfel (1984) y Turner (1990), de otros fenómenos relevantes
en la interacción social, y especialmente en la interacción de grupos, como la identidad social y los
estereotipos.

2. La identidad social

Para Tajfel (1984) identidad social es: aquella parte del autoconcepto de un individuo que deriva
de su conocimiento de la pertenencia a un grupo (o grupos) social junto con el significado
valorativo y emocional asociado a dicha pertenencia1.

La identidad social es, entonces, una de las consecuencias de la pertenencia a un grupo (o


categoría), y esa pertenencia estará definida por el proceso de categorización social aplicado al
entorno del individuo, y a sí mismo (autocategorización), el que se define como “un proceso de
unificación de objetos y acontecimientos sociales en grupos que resultan equivalentes con respecto
a las acciones, intenciones y sistema de creencias de un individuo” (Tajfel, 1984).

La teoría de la identidad social parte de un supuesto compartido y aceptado que el propio Tajfel
comprobó experimentalmente sobre la diferenciación grupal. Sin embargo, en la propia definición
aparece la “valoración” del grupo, lo que implica un contexto para esa evaluación, una
comparación con valores, normas y legitimidad, entre otros elementos creados socialmente.

En palabras de Huici y Ros, la diferenciación intergrupal, entendida como tendencia a establecer


diferencias entre el propio grupo y otros grupos en dimensiones valoradas, obedece en primer lugar
a los efectos de la categorización social, de aumento de las diferencias intercategoriales y de las
semejanzas intracategoriales y en segundo lugar de la distintividad positiva para el propio grupo
(Huici & Ros, 1993).

1 Nótese que acá se habla de identidad social, no individual ni colectiva, ni cultural, acepciones que no serían sinónimos para este autor y en general no lo son
para la psicología social.

7
TEMA 4
Psicología de los grupos

Es decir, que la identidad social genera un sesgo de pertenencia, donde los miembros del propio
grupo siempre salen favorecidos en sus evaluaciones frente a miembros del otro grupo.

Se suele hacer poco énfasis en que, primero fue el nombre, ya que no hay otra forma de establecer
diferencias entre categorías más que nombrándolas. Poner nombres distintos a dos tipologías es la
forma cognitiva de establecer una diferencia, aún si esta no existe objetivamente. Por ello, el
nombre es el comienzo de las diferenciaciones, y por tanto, de la identidad (Zúñiga, 2014). La
categorización de los demás y la autocategorización se efectuarán previo establecimiento de los
nombres de esas categorías.

Esta necesidad de establecer diferencias se deriva de una capacidad cognitiva que se procesa a
nivel individual, pero que no la convierte en menos social, respecto a la necesidad social (y política)
de establecer y reforzar las diferencias entre categorías sociales muy próximas que requieren
mejorar su competitividad frente al logro de espacios de poder.

Por otro lado, si establecemos una diferencia entre las personas, estas tenderán a sentirse parte de
un grupo debido a tres efectos de la diferenciación. Los dos primeros integran la categorización
social, mientras que el tercero es propio de la identidad:

a) Aumento de las diferencias externas, es decir, las diferencias con otros grupos se
sobrevaloran en un eje dimensional que el grupo considera importante como distinción o
diferenciación.

b) Aumento de las semejanzas internas al grupo o proceso de homogenización, desvalorizando


las diferencias individuales.

c) Construcción de un significado positivo para el grupo a partir de estas diferencias.

Un resumen de los hallazgos de Turner puede esquematizarse como sigue:

8
TEMA 4
Psicología de los grupos

Exogrupo Endogrupo
percepciones y
Caracterizaciones
caracterizaciones
concretas, particulares y
globales, abstractas y
positivas
negativas

conductas defensivas,
Conductas cooperadoras,
competitivas, explotadoras
de alianza y pacíficas
o agresivas

Tajfel señala la identidad social como un proceso ligado a la necesidad de satisfacción propia. La
pertenencia a un grupo tenderá a mantenerse en la medida en que el grupo satisfaga cierto nivel de
necesidades. Si esta satisfacción cesa o se transforma, el individuo buscará nuevos grupos que
satisfagan aspectos positivos de su identidad social. Cuando la relación entre identidad y
satisfacción individual no se cumple, existen las siguientes posibles consecuencias:

a) Si el grupo no suple esta necesidad, el individuo tenderá a abandonarlo, a no ser que:

 Sea objetivamente imposible.

 Entre en contradicciones de valoración con mayor importancia para su autoimagen.

b) Si el abandono del grupo resulta difícil o imposible puede que se resuelva de dos maneras
alternativas:

 Cambiar la interpretación de las desventajas de su pertenencia al grupo.

 Asumir un compromiso social para cambiar al grupo desde dentro.

La reinterpretación, la acción social o la satisfacción con la pertenencia a un grupo sólo son posibles
en comparación con, o en relación a, otros grupos dentro del mismo contexto social.

Es importante recordar que Tajfel, desde su interés por la acentuación o sobreestimación


perceptiva, concluye, luego de varias experiencias de laboratorio, que “las variables de
‘motivación’ y ’valor’ tiene un efecto sobre los juicios perceptivos de magnitud de los sujetos”

9
TEMA 4
Psicología de los grupos

(Tajfel, 1984). En esta preocupación de Tajfel, que Turner heredará, se puede establecer la
diferencia entre una mirada psicológica y una psicosocial, puesto que ambos autores reconocen que
la situación previa de los sujetos (estado de ánimo, aprendizaje social, cultura, etc.) modifica los
procesos cognitivos que ocurren anterior o simultáneamente a los procesos perceptivos y que tenían
efectos sobre la percepción y sobre las categorizaciones que esas percepciones permiten. Sin
embargo, guardan silencio sobre el poder que este fenómeno le otorga al contexto social que puede
influir de manera determinante en los procesos que conllevan la categorización.

Poco o nada se discute sobre el paso anterior a la percepción de esos experimentos. Es decir, sobre
quién toma las decisiones sobre el valor asignado y la motivación generada para lograr la
categorización de los estímulos. En este sentido, se ignora, o al menos se evita hablar, del poder de
introducir categorizaciones en el mundo perceptivo de las personas, una posición muy habitual
dentro de la psicología cognitiva, la que tiende a ignorar la trascendencia política de los elementos
psicosociales. Sin embargo, no se puede negar el rol social de las elites en la conformación de la
identidad, que es la capacidad de privilegiar o connotar ciertas distinciones en detrimento de otras,
de acuerdo a la situación social del contexto. Por ejemplo, solo las elites tienen poder suficiente
como para separar una parte del territorio, ponerle nombre y luego separar a las personas nacidas
en ese territorio de las nacidas en otros.

Esta diferenciación (en la que se basan todas las identidades territoriales, como la identidad local y
la identidad nacional) no está al alcance de cualquier ciudadano, puesto que solo pueden ejercer
ese poder diferenciador los políticos y otras autoridades. Sin embargo, las consecuencias de dichas
diferenciaciones pueden llegar a ser muy extensas en la vida cotidiana de las personas, aunque
tiene, muy bajo control sobre ellas. Es el caso de la relación entre España y sus comunidades
autónomas, especialmente las que, como Madrid, solo nacen de una acuerdo de élites y no de
ninguna vivencia diferencial de las personas.

Queda poco claro en este tipo de definiciones quién es el sujeto que establece la primera
diferenciación que genera o construye el proceso de categorización, si este sujeto debe tener un
poder determinado, si es externo o interno al grupo, y si esta introducción simbólica es consciente,
inconsciente o accidental, racional o afectiva, instrumental o teleológica. Incluso queda poco claro
el hecho de si estas diferenciaciones (interno/externo, consiente/inconsciente) tienen o no un valor
concreto en el proceso de categorización.

10
TEMA 4
Psicología de los grupos

2.1. Etapas de formación de la identidad

Como toda construcción social, una identidad pasa por etapas desde su formación hasta su
consolidación, este es el proceso de construcción y consolidación de la identidad. Estas etapas son:
distinción – categorización, alteridad, sentido de pertenencia y contenido caracterológico.

 Distinción – categorización: generación de una diferencia en el discurso y su correlato


estructurado con la realidad. Permite denominar con dos categorías lo que antes era una
sola. Por ejemplo: buenos alumnos, malos alumnos, ambos son diferenciaciones de un
conjunto antes indiferenciado llamado alumnos.

 Alteridad: la diferencia se realiza en función de algo o alguien, y de una dimensión


particular de la realidad del otro. Desde esa dimensión se extiende a otras dimensiones para
construir un imaginario volumétrico.

 Sentido de pertenencia: la distinción cobra relevancia frente a otros, nominando a los


miembros del grupo con esa distinción. La distinción otorga un imaginario de destino
compartido a quienes componen el grupo.

 Contenido caracterológico: se dota a la categoría de un contenido que generaliza entre sus


miembros ciertas características de formas de ser y estar en el mundo.

2.2. Identidad y autoimagen

Es posible establecer algunas relaciones entre la identidad social y las necesidades internas de
autoprotección y autoestima.

La identidad está relacionada con la percepción del nivel de prestigio del grupo dentro de los
valores de la persona, y que toma en cuenta los elementos amenazantes del entorno. A mayor
amenaza percibida (real, potencial o imaginada), mayor será la necesidad de agruparse para la
autodefensa. Y este agrupamiento será en función de la categoría que nos hace sentir amenazados.
Es decir, si soy judío y percibo antisemitismo en un ambiente social, no me agruparé con abogadas o
con médicos, sino que me agruparé con los judíos y las judías, o con las abogadas y los médicos
judíos, es decir, con los miembros que forman parte de mi grupo.

A mayor necesidad de autodefensa, menor cuestionamiento a los límites del grupo, para centrar el
cuestionamiento en la lealtad de los miembros. A menor necesidad de autodefensa, mayor
ambivalencia a los límites del grupo. El discurso está centrado en el derecho de sus miembros, y
ello tiene como resultado el que los cuestionamientos son abiertos y permitidos.

11
TEMA 4
Psicología de los grupos

Estos efectos del proceso de categorización impulsado por el entorno es también un efecto
importante en el autoconcepto. Por ejemplo, en el caso de una identidad de la que eres portador
pero que no es relevante para el autoconcepto que tienes de ti mismo, como podría ser el caso de
la profesión que desempeñas (pongamos cerrajero), si de pronto las condiciones sociales hacen que
muchas personas comiencen a odiar a los cerrajeros, los golpean en las calles, asaltan sus locales,
etc., entonces lo más probable es que tu autoconcepto comience a poner esa identidad (la de
cerrajero) en un lugar preponderante de la propia imagen y de la autoestima derivada de esta.

Erving Goffman (1970) investigó este fenómeno, al que denominó “estigma”, y a la que definió
como una característica visible o cognoscible por el observador, que adjudica al portador una
identidad deteriorada que termina afectando la autoestima de este. En este estudio Goffman
muestra que la identidad que se forman los observadores termina siendo interiorizada por el
portador del estigma, sea o no real el deterioro que los otros aprecian en él.

El autoconcepto se entiende como una estructura cognitiva hipotética que engloba los elementos
que una persona piensa de sí misma, pero este concepto no puede observarse. Por otro lado, la
autoimagen es un producto perceptivo, un experiencia subjetiva del yo producido por el
funcionamiento de alguna parte de esa estructura autoconceptual (Turner, 1990), y es observable
en la medida que puede ser descrito por el portador.

3. El grupo

Según Krench y Crutchfield (1962), un grupo son dos o más personas que se hallan en relación
psicológica entre sí. Tajfel (1978), en tanto, señala que un grupo son dos o más personas que
comparten una categoría social.

En la línea de Tajfel, Bar-Tal (1990), afirma que existen tres condiciones necesarias para que un
colectivo se convierta en grupo:

 Que los componentes de ese colectivo se definan como miembros del grupo:
autocategorización

 Que compartan las creencias grupales: continuo interpersonal e intergrupal

 Que exista algún grado de actividad coordinada.

La primera y tercera condición se subsumen en la segunda, puesto que la creencia “somos un grupo”
es crucial para la conformación de este. Como creencias grupales se entienden aquellas
convicciones que los miembros del grupo son conscientes de compartir, que consideran definitorias
de su grupalidad y que, aunque sea de contenido variado, son compartidas por todas y todos.

12
TEMA 4
Psicología de los grupos

La creencia fundamental “somos un grupo” es la que implanta la existencia del grupo en las mentes
individuales. Una vez que esta creencia está implantada, ella misma sirve para la adquisición de
creencias grupales adicionales que varían de unos grupos a otros, pero cuya función es idéntica:
definir el carácter único del colectivo de sujetos que se consideran a sí mismos un grupo.

3.1. Definirse como miembros de un grupo: la categorización

Bar-Tal llegó a la conclusión de que el proceso psicológico básico que subyace a la formación de un
grupo es la categorización. Existe tal riqueza y complejidad de estímulos provenientes del mundo
perceptivo, que los seres humanos generalmente tendemos a la simplificación de estos estímulos
mediante el proceso de la categorización.

La categorización es uno de los procesos simplificadores más importantes y opera de forma


inductiva y deductiva. Por ejemplo, en un experimento que realizaron Tajfel y Wilkes (1963), los
sujetos tenían que determinar el tamaño de ocho líneas, cada una de las cuales era más larga que la
anterior según una razón constante. Cuando las líneas se presentaban sin ningún tipo de etiquetas,
los sujetos no cometían errores, pero cuando estaban categorizadas, entonces se veían acentuadas
las diferencias de interclase. La categorización consistía en asignar la letra A a las cuatro líneas más
cortas y la letra B a las cuatro líneas más largas. Esto llevaba a que los sujetos exagerasen
erróneamente las diferencias entra la línea más larga de la categoría inferior y la línea más corta de
la categoría superior. Estudios posteriores realizados por Tajfel y sus colaboradores (Tajfel,
Flament, Billing y Bundy, 1971; Tajfel y Billing, 1974) constituyen una clara demostración de que la
categorización es el proceso psicológico que subyace a la formación del grupo.

Si esto ocurre con los estímulos físicos, ¿qué ocurre entonces con los sociales? En 1979, Doise y
Weinberger estudiaron aspectos complementarios del proceso de categorización en el ámbito de los
estímulos sociales, encontrando una acentuación de las diferencias interclase, y una acentuación de
la similaridad intraclase. En el estudio de Doise y Weinberger personas de diferente sexo tenían que
competir en algunos casos y cooperar en otros en la realización de una tarea. La cooperación o
competición podría ser entre dos personas (un chico y una chica) o entre cuatro personas (dos
chicos y dos chicas). Después de competir, lo sujetos experimentales tenían que evaluarse a sí
mismos y a los demás de acuerdo a una serie de adjetivos que variaban en cuanto a su deseabilidad
social. Cuando se debía evaluar la prueba donde solo participaba un chico y una chica, los sujetos
experimentales no discriminaban a favor del propio grupo, es decir, no respondían desde el punto
de vista de la categoría hombre/mujer. Sin embargo, cuando debían evaluar la prueba donde
participaban cuatro personas (dos chicos y dos chicas), ahí sí se observaban diferencias interclase en

13
TEMA 4
Psicología de los grupos

los adjetivos utilizados en sus evaluaciones. Por ejemplo, los chicos atribuían más rasgos femeninos
a las chicas que así mismos, algo que no ocurría en las evaluaciones de las pruebas individuales.

Este proceso de autocategorización genera pertenencia, es decir la autopercepción como portador


de la categoría que genera el grupo, tal como predice la teoría de la categorización de Tajfel
(1981). Sin embargo, para pertenecer realmente al grupo hay que contar con la precepción del
resto del grupo como un portador de la categoría, es decir que los otros me categoricen como un
miembro de la categoría. A esta percepción de los miembros del grupo como perteneciente a él, se
le denomina “membresía”. En cada grupo existen formas de lograr que un externo sea considerado
miembro de un grupo, habitualmente estas exigencias de categorización, pero también de algún
otro mérito, están presentes en las normas implícitas o explícitas del grupo.

Ser miembro pleno de un grupo implica que no solo cumples una categoría, sino que también
compartes con el resto del grupo la realidad psicológica que este grupo crea en su funcionamiento,
lo que abarca más que la suma de individuos, puesto que es una totalidad sistémica nueva y
diferente de la suma de individuos, donde se experimenta una vivencia compartida. Por ello, la
pertenencia no es solo un proceso de categorización en el sentido cognitivo y racional. Una vez que
se experimenta esta “realidad grupal” compartida, la pertenencia se experimenta como
sentimiento.

3.2. El continuo interpersonal-intergrupal

Una situación fuertemente grupal producirá una conducta intergrupal, y al contrario, una situación
en la que la influencia del grupo no exista, producirá una conducta puramente interpersonal. En
medio de estos dos extremos se encuentran conductas intermedias en las que tienen cabida, en
proporciones diferentes, consideraciones grupales e interpersonales (Morales & Moya, 2007).

La conducta puramente interpersonal es aquella que se origina en la consideración del otro como
persona individual. En este plano, las acciones de una persona se basan en una apreciación de las
características individuales del sujeto al que se dirigen: su idiosincrasia, sus hábitos, sus historias,
etc. Por el contrario, la conducta intergrupal surge cuando se percibe a la persona con la que se
interactúa como miembro de un grupo. En este plano no se toman en cuenta sus características
personales, sino el hecho de que pertenece al endogrupo (nuestro grupo) o exogrupo (los otros
grupos).

De este modo, la principal diferencia entre la conducta interpersonal e intergrupal, es que esta
última se basa en la categorización nosotros/ellos, lo cual produce una alta homogeneidad en la
conducta de los sujetos del grupo, así como una alta percepción de los diferentes miembros del
exogrupo.

14
TEMA 4
Psicología de los grupos

La tendencia a considerar a otra persona en su dimensión grupal (categorial) o en su dimensión


individual dependerá de la situación, por ejemplo, si me encuentro con un amigo en el
supermercado me detendré a conversar con él sobre nuestros puntos en común, como lo hacemos
todo el tiempo; sin embargo, si mi amigo es seguidor de un equipo de fútbol distinto al mío, y
nuestros equipos se enfrentan ese mismo día y ambos estamos en compañía de nuestros compañeros
de afición y además llevamos nuestras camisetas, es probable que nos saludemos más fríamente,
nos ignoremos o nos hablemos de forma más agresiva (aun cuando sea en tono de broma o
sarcasmo). Si las condiciones del entorno presionan hacia la identificación con el grupo, la conducta
será intergrupal.

3.3. Cohesión

El grupo mantiene una serie de procesos, como se ha visto, y sus miembros permanecen en él, aun
cuando esta permanencia pueda generar costes. A esta tendencia a mantenerse en el tiempo se le
denomina cohesión, la que se define como un campo de fuerzas que actúan sobre los miembros para
permanecer en el grupo (Festinger, 1950).

Este proceso dinámico se refleja en la tendencia del grupo a mantenerse y permanecer unido en la
búsqueda de sus objetivos instrumentales y/o para la satisfacción de las necesidades afectivas de
los miembros (Carron, Brawley y Widmeyer, 1998).

La cohesión aumenta con el logro de éxitos, pero también con la atracción interpersonal entre los
miembros. Si en un grupo ocurren ambos factores, este será altamente cohesionado, pero si solo se
da uno de ellos las personas mantendrán la cohesión en la medida que el grupo cumpla con la
función de satisfacer a los miembros.

La cohesión la viven los miembros como una necesitad interna, como un sentimiento de
satisfacción. Esta tiene efectos positivos sobre otros procesos grupales como la identidad, la
eficiencia en tareas y la actividad coordinada.

3.4. La actividad grupal coordinada

Según Bar-Tal, esta es la tercera característica definitoria del grupo. Quiere decir que si un grupo
de personas se categoriza a sí misma como similares hasta el punto de sentir que conforman “un
grupo”, es lógico suponer que actuarán de manera similar. Algunos autores incluso llegaron a
afirmar que la esencia de la grupalidad es la interdependencia de sus miembros (Horwitz y Rabbie,
1989).

15
TEMA 4
Psicología de los grupos

No obstante, los estudios de Tajfel demostraron que se puede crear un grupo sin que exista una
experiencia previa de interdependencia grupal. Por ejemplo, en la vida cotidiana ocurre con mucha
frecuencia que una o varias personas formulan creencias que, al ser aceptadas por otras personas,
constituyen una realidad sobre la que se asienta un grupo, es decir, que primero se forman las
creencias y luego el grupo (grupos religiosos, políticos, etc.)

Entre las funciones a desarrollar por el grupo, se pueden resumir tres, las que se corresponden con
los tres tipos de integración social que promueven (Moreland, 1987):

 Integración ambiental: se manifiesta en la formación de grupos allí donde el ambiente


proporciona los recursos necesarios. Son grupos que se forman por razones de vecindad, de
convivencia en el trabajo, etc.

 Integración conductual: los miembros del grupo dependen mutuamente entre sí para
alcanzar sus objetivos o para satisfacer sus necesidades.

 La integración afectiva: al formar un grupo las personas desarrollan sentimientos


compartidos. De esta forma, la atracción mutua que sienten dos o más personas puede ser
el comienzo para la formación de un grupo.

La entrada a un grupo ya formado supone al nuevo integrante un problema de adaptación, pues se


debe enfrentar a una serie de normas, objetivos y relaciones ya establecidas. Por otro lado, el
grupo debe integrar al nuevo miembro sin desatender las actividades grupales que se realizan
habitualmente. A eso se le llama la socialización grupal.

El proceso es complejo e incluye una serie de cambios en la relación individuo-grupo que ocurre a lo
largo del tiempo, y que depende de los compromisos que hayan adquirido ambas partes.

3.5. Normas

El grupo es una unidad ordenada en función de las premisas, identidad o el tipo de actividad que
tiene como objetivo desde su formación. Para mantener ese orden existen normas internas de
convivencia. Las normas establecen la membresía, los roles y la expulsión de un miembro en caso de
no cumplirlas. Dan forma a las comunicaciones e interacciones internas, así como la forma de
acceder al liderazgo del grupo.

Las normas se forman a partir de que el grupo pasa por una etapa de conflicto interno. Luego de la
etapa de negociación hay un ajuste de relaciones y poder que se expresa en forma de normas de
conducta e interacción del grupo que, además de dar pautas conductuales a los miembros, resuelve
el conflicto y asegura la permanencia del grupo.

16
TEMA 4
Psicología de los grupos

El cumplimiento de las normas dependerá del grado de cohesión interna del grupo, ya que mientras
más fuerte es esta, más desean los miembros permanecer en él, por lo que harán lo que sea por
mantenerse, cumpliendo estas normas (Ovejero, 2015).

3.6. Estructura

La estructura es la forma de relaciones e interacciones que son aceptables en el grupo. Esta


estructura es parte de la identidad y fortaleza interna del grupo. Esta estructura define roles. Estos
roles se definen por un conjunto de conductas que se espera de quien ocupa una determinada
posición en la estructura (Ovejero, 2015). Cada rol tiene un estatus, una valoración del resto de los
miembros sobre ese rol en el grupo. Como se aprecia en las figuras siguientes, la estructura moldea
las relaciones con el endogrupo y el exogrupo, y define los procesos de comunicación.

Miembro
Lider
Miembro

Miembro Miembro

Miembro Lider Miembro


Miembro Líder Miembro

Miembro Miembro

Miembro Miembro
Miembro

Un punto crucial de la estructura del grupo es el miembro que cumplirá las funciones de líder.

4. Liderazgo

Debido a que la mayor parte de los primeros estudios sobre liderazgo se realizaron en contextos
militares, industriales o de agencias gubernamentales, la mayoría de ellos utilizaba como figura de
líderes a directivos, supervisores y ejecutivos, definiendo el liderazgo en términos de aquella
persona que ocupa un rol directivo. Sin embargo, investigaciones posteriores (Clark y Clark, 1990),
enfatizaron en la importancia de distinguir entre managers/dirección y líder/liderazgo. De hecho,
existen innumerables ejemplos de presidentes, alcaldesas, reyes, generales, etc., elegidos o
designados, que exhiben pocas conductas que puedan asociarse con el liderazgo propiamente tal.

Existen diversas definiciones de liderazgo: Brown (1988) afirmaba que “lo que realmente
caracteriza a los líderes es que ellos pueden influir a otros más de lo que ellos mismos son

17
TEMA 4
Psicología de los grupos

influidos”. Este punto de vista es compartido tanto por Homans (1961), para quien el líder de un
grupo es el individuo que tiene la capacidad de influir a los miembros de un grupo de forma regular,
como para Hollander, para quien el líder es el miembro cuyo rol constituye un recurso para el grupo
en la medida que su influencia está encaminada a facilitar el logro de metas comunes. (Hollander y
Julian, 1969, 1970). Hollander consideraba que el liderazgo implica una relación de influencia
particular entre los componentes de un grupo, en donde el líder otorga a los miembros del grupo
recursos valiosos para lograr los fines comunes. En este caso, la influencia del líder depende de dos
factores: su competencia, la que tiene que ser percibida por los seguidores para lograr las metas
grupales; y su conformidad inicial a las normas del grupo. El líder es uno de los roles más relevantes
y con mayor estatus del grupo.

En algunas definiciones de liderazgo se utiliza el término poder como sinónimo de influencia, pero
es preciso hacer la distinción entre ambos conceptos porque el primero implica coerción y control,
mientras que la influencia da cuenta de una relación de persuasión entre el líder y los seguidores.
Un líder puede ejercer poder, pero el poder por sí solo no crea líderes.

4.1. El poder del líder

Según French y Raven (1974) el poder del líder viene de distintos tipos de recursos que caracterizan
distintos tipos de liderazgos, los que se definen según las siguientes categorías:

•Capacidad de adminstrar recursos que sirven como premisos e


Poder de recompensa incentivos a los miembros dle grupo.

•Capacidad de administrar los castigos apropiados según las normas del


Poder de coersión grupo.

•Es el atractivo o admiración que ejerce el líder sobre los miembros del
Poder referente grupo, que se torna en identificación y referente de conducta.

•Es el que emana de las propias normas y estructura dle grupo, es el


Poder legítimo poder formal.

•Se concede a quien tiene la experiencia necesaria para promover el


Poder experto éxito en las tareas del grupo.

•Es información proveniente del exterior o del interior del grupo que se
Poder de información requiere para el adecuado desarrollo de las metas del grupo.

18
TEMA 4
Psicología de los grupos

Como toda posición de poder, el liderazgo es un proceso relacional, basado en la influencia del líder
sobre los miembros, pero también en la eficacia del líder de proveer al grupo del logro de las metas
del grupo. En este último sentido, se identifican dos tipos de comportamiento más habituales en el
líder:

a) Comportamiento orientado a la tarea: define los roles y conductas que se realizarán para el
logro de una meta concreta. Este comportamiento identifica al líder, pero también al
grupo, en cuanto a que la eficiencia de esta dirección organizacional será parte importante
de la imagen que el grupo tenga de sí mismo.

b) Comportamiento orientado a las relaciones: son las conductas que aportan apoyo emocional
y satisfacción a los miembros del grupo, y a las relaciones entre sus miembros.

4.2. Tipos de liderazgo

Según utilicen las distintas formas de poder, y privilegien determinados comportamientos, los
liderazgos resultarán muy distintos unos de otros y serán más o menos útiles según el tipo de grupo
que lideran. Esto ha llevado a diferentes teóricos a establecer una tipología del liderazgo, de las
cuales se exponen a continuación algunas de las más utilizadas:

Para Lewin, Lippit y White (1939) las tres formas de liderazgos son:

a) Autoritario: centraliza el control interno del grupo y centraliza las comunicaciones entre los
miembros de esté, como también entre estos y el exogrupo. Mantiene el orden
especialmente a través del poder coercitivo. Las decisiones las toma el líder y solo se las
comunica a los miembros, sin consulta. A corto plazo puede ser una líder eficiente ante
tareas simples, pero a largo plazo y ante tareas complejas suele fracasar o ser poco
eficiente. Además, la coerción termina por minar la cohesión grupal si se mantiene.

b) Democrático: delega parte de su poder en los miembros del grupo, pero mantiene la
dirección. Implica a todos en la toma de decisiones, lo que tiende a aumentar el
compromiso y la cohesión. Su tipo de poder más utilizado es el de referente y el legítimo.
Este tipo de líderes son más eficaces en llevar al grupo al éxito, ya que, al no centralizar la
información y las decisiones, el grupo resulta más eficiente. La alta cohesión y el logro de
metas compartidas hace que los miembros se mantengan satisfechos.

c) Laissez-faire: es un líder permisivo que no aplica casi ningún estilo de poder. Deja a los
miembros en libertad total de acción, sin aplicar normas. Normalmente ostenta una
autoridad formal, probablemente nombrada desde fuera del grupo. Este tipo de liderazgo

19
TEMA 4
Psicología de los grupos

genera mucha frustración, ya que el grupo deja de cumplir con todas sus funciones de apoyo
social y no logra metas compartidas.

Otra clasificación habitual es la derivada de los planteamientos del sociólogo Max Weber (1964), que
plantea los tipos de autoridad que se ejercen en los distintos tipos de legitimidad social. Estas ideas
se han derivado luego hacia el estudio del concepto de liderazgo, aunque es un término que Weber
no utilizó. Para Weber existen tres tipos de autoridad:

a) Tradicional: este es el líder formal, normalmente porque hereda el liderazgo de una forma
de tradición. Hace cumplir las normas utilizando los poderes de coerción y recompensa que
vienen de su legitimidad tradicional. Este tipo de líder está más preocupado de mantener
el grupo que de lograr metas compartidas.

b) Carismático: este tipo de liderazgo está basado en la capacidad de atracción del líder,
generalmente relacionado con alguna atribución especial o excepcional, que le otorga una
legitimidad dada únicamente por sus seguidores. Este tipo de liderazgo suele romper con
todo lo anterior y refundar el grupo en cuanto a normas, membresía, e incluso en cuanto a
los objetivos del grupo. Aquí se utilizan distintos tipos de poder, como el coercitivo, de
recompensa, pero especialmente el de referente y el de información. La atracción del líder
se basa en valores que transfiere a las metas del grupo, por lo que las personas que
comparten la meta se sienten pertenecientes a una misión relevante para el grupo, lo que
da sentido a toda la acción del grupo y mucha satisfacción a los miembros individuamente.
Se caracteriza por dedicar mucho tiempo al logro de metas, pero nunca deja de lado las
relaciones grupales, especialmente las relaciones de él con los miembros, lo que mantiene
su carisma. La eficiencia del grupo suele estar supeditada a la experiencia del líder en los
temas relativos al logro de la meta o a su capacidad de asesorarse, lo que no siempre es
fácil, ya que estos líderes suelen estar rodeados por una “camarilla” o miembros
seleccionados del grupo que cumplen disantos roles, pero que no suelen dejar pasar
información ni personas hacia el líder si no lo consideran necesario.

c) Burocrático o legal: es el líder formal, que llega al rol del líder como parte de un proceso
con normas y exigencias que él ha cumplido. Es más un administrador que un líder en el
sentido habitual. Su reocupación es hacer cumplir las normas y lograr las metas del grupo,
y no dedica demasiado tiempo a las relaciones grupales. Su poder emana de la legitimidad
y de la experiencia, que son las fuerzas que lo han puesto como líder. Su eficiencia es
relativa a metas concretas y normativas, por lo que otras funciones del grupo, como el

20
TEMA 4
Psicología de los grupos

apoyo emocional, no son prioridades. La satisfacción del grupo dependerá de éxito en el


logro de tareas.

También McGregor (1960), plantea dos estilos de liderazgo que han tenido mucha influencia en las
ciencias sociales, especialmente en el ámbito organizacional. Estos son el liderazgo transaccional y
el liderazgo transformacional:

a) Transaccional: es un liderazgo basado en los intercambios de intereses (o transacciones)


entre el líder y los seguidores. Utiliza el poder de recompensas y castigos, con una lógica de
reciprocidad e intercambios (económico, emocional, físico). Son la base de su legitimidad.
Es un líder eficiente, ya que su poder se basa en conocer los intereses de cada uno de los
miembros del grupo y su preocupación fundamental es lograr esos intereses con el fin de
mantener la cohesión y lealtad del grupo. Como su poder depende de la información que
controle, suele centralizar la información interna para conocer los intereses de los
miembros. Puede ser un líder muy eficiente cumpliendo el logro de metas y tareas, ya que
sabe cómo motivar a los miembros del grupo.

b) Transformacional: es un líder con una visión del mundo futuro que puede lograrse si se
siguen sus planteamientos. Le promete a los miembros del grupo cumplir con valores y
necesidades que hasta entonces parecían difíciles de obtener, lo que pueden lograr los
seguidores siempre que compartan su visión y se transformen como él lo ha hecho. Su
promesa no es ser más eficiente en el logro de las metas, sino cambiar el mundo para que
esas metas sean superadas por otras más relevantes. Su poder se basa en su atractivo para
los miembros y en el manejo de información.

El liderazgo es un tema de especial relevancia para las sociedades modernas, que eligen a personas
para cumplir tareas en empresas, política, deporte, investigación científica, y muchos otros
aspectos de la vida, lo que implica la organización de individuos con el fin de conseguir objetivos. El
liderazgo es, por tanto, un factor crucial para la eficiencia. Por ello existen múltiples estudios y
propuestas de tipologías para comprender mejor este fenómeno. Incluso se han desarrollado
instrumentos para detectar los distintos tipos de liderazgo, con el objetivo de seleccionar al que
más se ajuste a las necesidades de la organización.

Por todo lo mencionado anteriormente, en el futuro el liderazgo seguirá siendo un tema de interés.
No obstante, en la actualidad algunas líneas de investigación han derivado sus estudios hacia las
habilidades que requiere un líder, determinando que estas pueden ser potenciadas en todas las
personas. Desde esta perspectiva podemos sostener que un líder no nace, sino que se construye.

21
TEMA 4
Psicología de los grupos

V. RESUMEN

La categorización social de Henry Tajfel (1984), plantea que nuestro sistema de


cognición de la realidad tiende a comparar los estímulos entre ellos y a buscar
similitudes para hacer grupo de categorías, de modo que la diferencia media entre
los estímulos de una categoría son menores que las diferencias intercategoriales.

Un resultado necesario de la categorización es que se produce una acentuación


ilusoria de semejanza entre los estímulos que forman parte de una misma
categoría, es decir, la tendencia a sobreestimar el nivel de semejanza entre todos
los miembros de la categoría. Este es el origen, según autores como Tajfel (1984)
y Turner (1990), de otros fenómenos relevantes en la interacción social y
especialmente en la interacción de grupos como la identidad social y los
estereotipos.

La identidad social es aquella parte del autoconcepto de un individuo que deriva


de su conocimiento de la pertenencia a un grupo (o grupos) social junto con el
significado valorativo y emocional asociado a dicha pertenencia.

La categorización de los demás y la autocategorización se efectuarán previo


establecimiento de los nombres de esas categorías.

La pertenencia a un grupo tenderá a mantenerse en la medida en que el grupo


satisfaga cierto nivel de necesidades. Si esta satisfacción cesa o se transforma, el
individuo buscará nuevos grupos que satisfagan aspectos positivos de su
identidad social.

Toda construcción social pasa por etapas desde su formación hasta su


consolidación, este es el proceso de construcción y consolidación de la identidad:
Distinción – categorización, alteridad, sentido de pertenencia y contenido
caracterológico.

Los efectos del proceso de categorización, impulsado por el entorno, es también


un efecto importante en el autoconcepto. La necesidad de autodefensa y

22
TEMA 4
Psicología de los grupos

autoimagen, según la fortaleza y la percepción de amenaza, afectan la relevancia


identitaria del grupo.

Un grupo puede definirse como dos o más personas que comparten una categoría
social. Según Tajfel y Bar-tal, a esta definición habría que agregar otras tres
condiciones para poder hablar de “grupo”: que se definan así mismos como
grupo, que compartan las creencias grupales y que exista algún grado de
actividad compartida.

El proceso de autocategorización genera pertenencia. Cuando esta pertenencia es


reconocida por el resto del grupo se denomina membresía.

Hay un continuo entre la conducta puramente interpersonal y la conducta


puramente grupal que dependerá de la situación.

Cohesión es el nombre que recibe la tendencia de los miembros del grupo a


mantenerse unidos en el tiempo, también definida como un campo de fuerzas que
actúa sobre los miembros para permanecer en el grupo.

Los miembros del grupo tienden a desarrollar alguna actividad coordinada, en el


sentido de comportarse de forma similar. Estas acciones se pueden dividir en tres,
de acuerdo a las funciones que el grupo desarrollará (que se corresponden con
los tres tipos de integración social que promueven): integración ambiental,
integración conductual y la integración afectiva.

El grupo es una unidad ordenada en función de las premisas, identidad o el tipo


de actividad que tiene como objetivo el grupo desde su formación. Para mantener
ese orden existen normas internas de convivencia. Las normas establecen la
membresía, los roles y la expulsión de un miembro en caso de no cumplirlas.

La estructura es la forma de relaciones e interacciones que son aceptables en el


grupo. Esta estructura es parte de la identidad y fortaleza interna del grupo. Esta
estructura define roles. Estos roles se definen por un conjunto de conductas que
se espera de quien ocupa una determinada posición en la estructura. Cada rol
tiene un estatus y una valoración del resto de los miembros sobre ese rol en el
grupo.

23
TEMA 4
Psicología de los grupos

El líder es el miembro cuyo rol constituye un recurso para el grupo en la medida


que su influencia está encaminada a facilitar el logro de metas comunes, por ello
es uno de los roles más relevantes y con mayor estatus del grupo.

El líder es el miembro con más influencia del grupo, y basa su capacidad de influir
en varios tipos de poder: de recompensa, de coerción, de referente, legítimo,
experto y de información.

El tipo de poder del líder puede depender de si su comportamiento es


principalmente destinado a la tarea (logro de metas) o la relación (apoyo
emocional de los miembros).

De acuerdo con los tipos de poder y el estilo orientado a la tarea o a la relación,


los líderes pueden ser clasificados según distintas tipologías propuestas por
diferentes autores. Lewin, Lippit y White proponen tres tipos de líderes:
autoritario, democrático y laissez-fair. De las teorías de Weber se desprenden
otras tres tipologías: tradicional, carismático y burocrático. Finalmente, Mcgregor
postula dos tipos de líderes: el transaccional y el transformacional.

Los distintos tipos de liderazgo pueden ser útiles a distintos tipos de grupos y de
situaciones en las que hay que obtener logros.

No debe confundirse estilos de liderazgo con estilos de personalidad, ya que las


características de un líder pueden desarrollarse en cualquier persona, en el
momento adecuado. Un líder no nace, sino que se construye.

24
TEMA 4
Psicología de los grupos

VI. GLOSARIO

La realidad tiende a comparar los estímulos entre ellos y a buscar

Categorización similitudes para hacer grupo de categorías, de modo que la diferencia


social media entre los estímulos de una categoría son menores que las
diferencias intercategoriales.

Acentuación La tendencia a sobreestimar el nivel de semejanza entre todos los


ilusoria de la miembros de la categoría.
semejanza

Es aquella parte del autoconcepto de un individuo que deriva de su


Identidad social conocimiento de la pertenencia a un grupo (o grupos) social, junto con
el significado valorativo y emocional asociado a dicha pertenencia.

Es una característica visible o cognoscible por el observador que


Estigma adjudica al portador una identidad deteriorada, la que termina
afectando la autoestima de este.

Es una estructura cognitiva hipotética que engloba los elementos que


Autoconcepto
una persona piensa de sí misma y que no pueden observarse.

Es un producto perceptivo, una experiencia subjetiva del yo producido


por el funcionamiento de alguna parte de esa estructura
Autoimagen
autoconceptual, y que es observable en la medida que puede ser
descrito por el portador.

Grupo Son dos o más personas que se hallan en relación psicológica entre sí.

Que los componentes de ese colectivo se definan como miembros del


Autocategorización
grupo.

25
TEMA 4
Psicología de los grupos

Es la conducta que se origina en la consideración del otro como persona

Conducta individual. En este plano las acciones de una persona se basan en una
interpersonal apreciación de las características individuales del sujeto al que se
dirigen: su idiosincrasia, sus hábitos, sus historias, etc.

Es la conducta que surge cuando se percibe a la persona con la que se

Conducta interactúa como miembro de un grupo. En este plano no se toman en


intergrupal cuenta sus características personales, sino el hecho de que pertenece al
endogrupo o exogrupo.

Campo de fuerzas que actúan sobre los miembros para permanecer en


Cohesión
el grupo.

Autopercepción como portador de la categoría que genera el grupo, que


Pertenencia
a su vez genera una autocategorización.

Percepción de los miembros de un grupo, de que una determinada


Membresía
persona pertenece a este.

Actividad Tendencia de los miembros de un grupo a realizar actividades similares.


coordinada

Es la forma de relaciones e interacciones que son aceptables en el


Estructura
grupo.

Se define por un conjunto de conductas que se espera de quien ocupa


Rol
una determinada posición en la estructura.

Pautas de conducta para los miembros del grupo que se forman a partir
Normas
de que el grupo pasa por una etapa de conflicto interno.

Es el miembro cuyo rol constituye un recurso para el grupo en la medida


Liderazgo que su influencia está encaminada a facilitar el logro de metas
comunes.

26
TEMA 4
Psicología de los grupos

Comportamiento Conjunto de prioridades del líder o del grupo que define los roles y
orientado a la tarea conductas que se realizarán para el logro de una meta concreta.

Conjunto de prioridades que establecen las conductas que aportan


Comportamiento
orientado a las apoyo emocional y satisfacción a los miembros del grupo, y a las
relaciones relaciones entre sus miembros.

Liderazgo Basado en el control de castigos y refuerzos, centralizando las


autoritario decisiones y las comunicaciones.

Basado en la participación de los miembros, delega parte de su poder


Liderazgo en los miembros del grupo, pero mantiene la dirección. Implica a todos
democrático
y todas en la toma de decisiones.

Basado en la permisividad, no aplica casi ningún estilo de poder. Deja a

Liderazgo Laissez- los miembros en libertad total de acción, sin aplicar normas.
fair Normalmente ostenta una autoridad formal, probablemente nombrada
desde fuera del grupo.

Líder formal, normalmente porque hereda el liderazgo de una forma de


Liderazgo tradición. Hace cumplir las normas utilizando los poderes de coerción y
tradicional
recompensa que vienen de su legitimidad tradicional.

Basado en la capacidad de atracción del líder, generalmente


Liderazgo carisma relacionado con alguna atribución especial o excepcional, que le otorga
una legitimidad dada únicamente por sus seguidores.

Liderazgo Líder formal que llega al rol del líder como parte de un proceso con
burocrático normas y exigencias que él ha cumplido.

Liderazgo Basado en los intercambios de intereses (o transacciones) entre el líder


transaccional y los seguidores.

Liderazgo Es un líder con una visión del mundo que puede llegar a ser real siempre

27
TEMA 4
Psicología de los grupos

transformacional y cuando se sigan sus planteamientos, y sus seguidores se transformen


como él lo ha hecho.

28
TEMA 4
Psicología de los grupos

VII. BIBLIOGRAFIA

Aronson, E. (2002). El animal social. Madrid: Alianza Editorial.

Goffman, E. (1970). Estigma. La identidad deteriorada.

Habermas, J. (1981). Relaciones con el mundo y aspectos de la racionalidad de la acción en cuatro


conceptos sociológicos de acción. Teoría de La Acción Comunicativa, I.

Habermas, J. (1992). Teoría de la acción comunicativa II. Crítica de la razón funcionalista. Madrid:
Taurus Ediciones.

Huici, C., & Ros, M. (1993). Identidad comparativa y diferenciación intergrupal. Psicothema, 5(1),
225–236. https://doi.org/10.1016/j.cali.2009.03.003

Maturana, H. (1997). Emociones y lenguaje en educación y política. Santiago: Dolmen.

Mead, G. H. (1973). Espíritu, persona y sociedad. Barcelona: Paidós.

Morales, F., & Moya, M. (2007). Psicología Social. Madrid: McGraw Hill.

Moscovici, S. (2008). Psicología social I. Influencia y cambio de actitudes. Individuos y grupos.


Barcelona: Paido?s.

Ovejero Bernal, A. (2015). Psicología social. Algunas claves para entender la conducta humana.
Madrid: Editorial Biblioteca Nueva.

Tajfel, H. (1984). Grupos Humanos y Categorias sociales. Barcelona: Herder.

Turner, J. C. (1990). Redescubrir el grupo social : una teoría de la categorización del yo. Ediciones
Morata.

Watzlawick, P., Beavin, J. H., & Jackson, D. D. (2013). Teoría de la comunicación humana :

Zamudio, G. J. B., & Parra, R. M. R. (2010). Lineamientos teóricos de la comunicación persuasiva y


su relación en la mediación de conflictos organizacionales en universidades nacionales
experimentales del estado Zulia. Revista de Ciencias Sociales, 16(1).

Zúñiga, R. (2014). Discurso identitario supranacional en élites políticas e intelectuales de América


Latina. Complutense de Madrid.

29
Asignatura
Psicología General
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

TEMA 5
Psicología de la delincuencia

Autor: Ricardo Zúñiga

1
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

Unidad didáctica.

Tema 5: Psicología de la delincuencia

INDICE

I. PRESENTACIÓN .................................................................................................. 3
II. OBJETIVOS. ..................................................................................................... 4
III. ESQUEMA ........................................................................................................ 5
IV. CONTENIDO ..................................................................................................... 6
Aporte de la psicología ....................................................................................... 6
1. Nota metodológica .................................................................................... 6
2. Conocimiento de la conducta delictiva ........................................................... 8
2.1. La explicación del delito: ......................................................................... 9
2.1.1. Aprendizaje social ................................................................................. 9
2.1.2. Predisposición y sustrato biológico ........................................................... 11
2.1.3. Conducta reactiva ................................................................................ 13
2.1.4. Ruptura de vínculos sociales ................................................................... 15
2.1.5. Elección racional ................................................................................. 16
2.2. La carrera delictiva .............................................................................. 17
2.3. Prevención y tratamiento ....................................................................... 19
2.4. Predicción del riesgo de conducta antisocial ............................................... 22
3. Disciplinas psicológicas que apoyan la investigación criminal .............................. 24
3.1. Psicología criminológica ......................................................................... 25
3.2. Psicología forense ................................................................................ 25
3.3. Psicología Jurídica ............................................................................... 25
VI. GLOSARIO ..................................................................................................... 27
VII. BIBLIOGRAFIA ............................................................................................... 29

2
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

I. PRESENTACIÓN

Este apartado está dedicado a los aportes que puede realizar la psicología a la
comprensión y prevención de las conductas delictivas y su proceso de judialización.

Se revisarán las teorías específicas sobre las conductas delictivas, así como las
especialidades de la psicología que aportan más directamente a esta realidad.

Por ser una introducción el tema está tratado en sus generalidades, de manera de
aportar una visión de conjunto que será profundizada en asignaturas de especialidad.

3
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

II. OBJETIVOS.

• Conocer los distintos aportes de la psicología al estudio de la delincuencia

• Conocer los conceptos y teorías sobre la delincuencia desde la psicología

4
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

III. ESQUEMA

Aprendizaje
social

Predisposición

Explicación del Conducta


delito reactiva

Conducta Carrera Ruptura de


delictiva delictiva vínculos

Prevencion y Elección
Tratamiento racional

Criminológica

Disciplinas
Forense
psicológicas

Jurídica

5
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

IV. CONTENIDO

Aporte de la psicología

1. Nota metodológica

La criminalidad y la delincuencia han sido objeto de estudio por parte de


diferentes ramas de las ciencias sociales; desde el punto de vista socio lógico
se ha podido establecer que el comportamiento humano a lo largo de la historia
tiende a manifestarse de diversas maneras, siendo la violencia una forma de
conducta por parte de los individuos, los cuales por medio del crimen y el delito
subsisten o satisfacen instintos criminales formados a través del tiempo.

Lo que denominamos conducta desviada, antisocial, antinormativa o conducta


delictiva, es en realidad solo conducta, ya que el adjetivo que se le adjudica a cada
conducta es una cuestión de contexto social, histórico y cultural, que se sintetiza en
las normas de un grupo o sociedad determinada. Por ello, el estudio de estas
conductas no se diferencia en cuestiones relevantes teóricamente, con la diferencia
de que es más complejo, éticamente, realizar experimentación con este tipo de
conductas, debido a lo cual su estudio es principalmente ex post facto.

A diferencia de la mayoría de las investigaciones experimentales, que cuentan con


una medición previa de variables (ex ante), un control sobre las variables
intervinientes, un grupo de control y una medición posterior al proceso (ex post), en
el estudio de la delincuencia solo podemos contar con la medición posterior, lo que
limita el aporte de la metodología experimental en este campo.

Es así como muchos estudios de delincuencia basados en el perfil del delincuente


llegan a conclusiones poco aplicables a la prevención, ya que el hecho de que muchos
delincuentes de cierto tipo cumplan un cierto patrón, no significa que todas las
personas que tengan ese perfil sean delincuentes o lo vayan a ser en el futuro, debido

6
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

a ello, es que, las conclusiones de la psicología (y otras disciplinas) hay que


considerarlas con precaución y sin entusiasmos excesivos.

Por otra parte, es importante recordar que, cuando se dice que la conducta delictiva
es solo una conducta, también se hace referencia al marco normativo, que convierte
en delito, o le quita esta etiqueta, a conductas determinadas según las condiciones
sociales, culturales e históricas. Por ejemplo, lo que hoy denominamos “depredador
sexual”, entendiéndolo como una persona que persistentemente comete delitos
sexuales, como acoso o violación, no ha sido siempre considerado igual, ni hoy es
considerado igual en todos los países del mundo. Por ejemplo, los países europeos
son mucho menos estrictos que otros con el estupro (muy habitual entre
depredadores sexuales) y no siempre se penaliza la relación con menores si esta es
consentida. En la mayoría de los países europeos este consentimiento es entre los 14
y los 15 años, y en algunos estados de Estados Unidos llega hasta los 19 años. Lo que
significa que un hombre de 40 años que “caza” chicas o chicos de 16 o 17 años en
discotecas, en España o Alemania, es un “casanova”, en cambio en California sería
un delincuente sexual censado. Por otra parte, en otros países más conservadores
esta práctica no está aceptada como legal, pero penalizan más a la víctima que al
victimario.

A esta ambigüedad de la realidad social se le suele prestar poca atención en la


literatura criminológica, sin embargo, desde el punto de vista psicosocial es de vital
relevancia. Ya se ha hablado en esta asignatura de los experimentos de Asch y el
efecto del disenso, los estudios de Sherif y la normalización, el rol de las minorías
activas, y la formación de representaciones sociales, todos estos procesos se ven
afectados por estas diferencias de definición de lo que es un delito.

Hasta hace 30 o 40 años, las diferencias interculturales solo tenían relevancia en los
procesos migratorios, y por lo general se resolvían en la segunda generación. Pero
hoy en día, con los sistemas globales de comunicación y transporte altamente
desarrollados y de relativamente fácil acceso, la influencia mutua de estas
diferencias aumenta, y disminuye el poder de las tendencias conformistas, tanto en

7
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

lo positivo (como la exigencia de los derechos humanos), como en lo negativo (que


los delitos se difunden y aprenden globalmente).

2. Conocimiento de la conducta delictiva

Una primera definición de conducta delictual es que es una conducta que transgrede
las normas de una sociedad. Sin embargo, esta definición es algo simple, ya que
evidentemente no es lo mismo aparcar en un sitio para personas con problemas de
movilidad que atropellar a alguien a propósito. Normalmente el estudio de las
conductas delictivas ha estado centrado en delitos de gran impacto social, como los
delitos sexuales, el asesinato, o la conducta antisocial sistemática. En este sentido,
se vuelve más compleja una definición de lo estudiado dentro de este ámbito.

En el campo de la psicología se pueden encontrar varios tipos de enfoque en el


estudio de las conductas delictivas. Y se pueden organizar, según han propuesto
algunos autores (Redondo y Andrés-Pueyo, 2007), en cuatro grandes ámbitos:

Explicación La carrera
del delito delictiva

Predicción
Prevención
del riesgo
y
de conducta
tratamiento
antisocial

8
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

2.1. La explicación del delito:

Existen varias vías por la cual la psicología aborda la explicación del delito, las
principales son las siguientes:

2.1.1. Aprendizaje social

En este enfoque, basado en el aprendizaje vicario u observacional, la primera


conclusión aceptada, y vigente en la actualidad, es que la conducta delictiva
siempre es aprendida. Pese a los rasgos de personalidad que facilitan cierto tipo de
comportamientos, o los fundamentos biológicos, que potencian la expresión de la
agresión, o los factores ambientales, que aumentan las probabilidades de algunas
conductas, todas estas condiciones solo afectan a la tendencia, pero sin el
aprendizaje previo de que ciertas conductas son posibles y que se puede obtener de
ellas ciertos refuerzos, estas conductas no se llevarían a cabo.

En este sentido, una de las teorías vigentes más aceptada para explicar el delito es
el aprendizaje social, planteado por Bandura (1977), pero en el planteamiento de
Akers (2009), basada en la perspectiva de “refuerzo de asociación diferencial”, que
“adopta factores sociales, no sociales y culturales que intervienen tanto para
motivar y controlar la conducta delictiva, como para fomentar y socavar la
conformidad” (Akers, 2007), y que en este sentido, al enfatizar el factor social
aporta una visión de posibles medidas para disminuir el delito. Esta teorización
plantea un énfasis en cuatro factores del aprendizaje del delito:

i. La asociación diferencial con personas que muestran hábitos y actitudes


delictivas. Referida a la comunicación y a la frecuencia de interacción e
identificación con grupos primarios (familia y pares, principalmente) o de
referencia (modas, grupos organizados, etc.) que controlan las fuentes de
refuerzo que las personas valoran en su vida cotidiana. Esto no es otra cosa
que “las malas juntas”, tanto la familia como los amigos cercanos son una
fuente importante de influencia para las personas y si estas presentan hábitos

9
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

delictivos o antinormativos es probable que la persona imite estos


comportamientos para ser aceptada por sus grupos primarios o para sentirse
semejante a sus grupos de referencia.

ii. La adquisición simbólica de definiciones favorables al delito, como es el


caso de subculturas de la violencia o el delito, donde este no es mal visto, o
incluso puede ser admirado. Un ejemplo de esto es el de aquellas sociedades
donde algunos tipos de delitos son aceptados, tolerados o incluso estimulados,
como la participación en grupos organizados delictivos (mafia, camorra,
maras, cárteles) en el sur de Italia o el norte de México.

iii. El reforzamiento diferencial de los comportamientos delictivos, estas


conductas pueden tener refuerzos claros, concretos e inmediatos, frente a los
compartamientos conformistas, que pueden tener un refuerzo más vago,
abstracto y que obtiene una recompensa placentera a más largo plazo. Por
ejemplo, un adolescente que se va a beber con amigos en vez de ir a clases,
obtiene inmediatamente refuerzos del grupo primario como admiración,
respeto, placer, identificación con el grupo, aceptación, etc.. En cambio, si
va a clases, deberá esperar varios años hasta que por fin los estudios le
permitan tener una vida de mayor calidad y le proporcionen admiración y
respeto de su entorno primario como la familia y los amigos.

iv. La imitación de modelos pro-delictivos, los referentes identitarios pueden


ser modelos prodelictivos en el sentido de ser fuertemente atractivos, tener
comportamientos abiertamente antinormativos y aun así obtener importantes
refuerzos sociales que el sujeto incluye en sus modelos valóricos y
actitudinales. Este es el caso de “famosos” (cantantes, deportistas, políticos,
millonarios, etc.) que tienen conocidos casos de delitos o faltas relevantes o
sistemáticas a la ley, y que aun así, o incluso por eso mismo, tienen gran
prestigio social. Casos como el de O.J. Simpson, Al Capone, Pablo Escobar,
Jesús Gil o Mario Conde, pueden considerarse dentro de este tipo de
referentes.

10
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

Este enfoque teórico ha reunido gran cantidad de estudios y resultados positivos en


programas de disminución de delitos que apoyan su planteamiento y su efectividad.

2.1.2. Predisposición y sustrato biológico

Existe una asociación, en una parte de la delincuencia, entre conductas antisociales


y sustrato biológico que podrían inducir a conductas violentas, o en otros casos a no
ser capaces de controlar expresiones de violencia, lo que se ha demostrado en
numerosos estudios (Moya Albiol, 2015). Los principales factores descubiertos hasta
ahora son lesiones craneales, baja actividad del lóbulo frontal, baja activación del
sistema nervioso autónomo, inteligencia reducida, trastorno de atención con
hiperactividad (TAH), baja empatía, gusto por el riesgo y las sensaciones fuertes
(Redondo y Andrés-Pueyo, 2007).

Esta relación se presenta como tendencia, no como predicción. En España se ha


encontrado un 63% de trastornos mentales en encarcelados por delitos sexuales
(Becerra-García y García-León, 2013), entre estos trastornos priman la esquizofrenia,
el trastorno bipolar y la dependencia de drogas. Esta cifra demuestra la relación
entre las dos variables, pero a su vez demuestra que un 37% son personas
completamente normales.

Una de las teorías más usadas para explicar la relación entre los trastornos mentales
y conducta es el Modelo Psicobiológico de Personalidad de Hans Eysenck (Schmidt et
al., 2010). Se le llama modelo y no teoría debido a que está fundamentado en análisis
factoriales de lesiones cerebrales y rasgos de personalidad, análisis de varianzas y
otras correlaciones que permitieron al autor obtener relaciones entre rasgos y
tendencias conductuales.

Este modelo plantea una interacción de factores psicosociales y biológicos para la


tendencia a la conducta de las personas. El modelo plantea la existencia de tres
continuos temperamentales en interacción (P-E-N):

11
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

Ilustración 1.
Significado de las dimensiones del Modelo Pen de Eysenck, en su expresión más alta.

Psicoticismo (P) Extraversión (E) Neuroticismo (N)


•Equilibrio de dopamina y •Menor activación reticular •Cerebro emocional
serotonina •Gratificación externa •Ansioso, deprimido, tenso,
•Agresivo, hostil, frío, •Sociable, vivaz, activo, irracional, tímido, triste,
egocéntrico, impersonal asertivo, buscador de emotivo, con baja autoestima
•Impulsivo, antisocial, •Sensaciones socializadas, y sentimientos de culpa.
creativo, rígido y poco despreocupado,
empático. dominante, espontáneo y
aventurero.

Estos tres continuos interactúan entre sí, con base biológica y ambiental, y cada
individuo tiene un “perfil” específico de todos sus componentes. Esta especial
combinación, específica en cada individuo, proporciona sus características
personales en estas dimensiones y de sus propias experiencias ambientales.
Condicionaría los diversos grados de adaptación individual y, también, de una posible
conducta antisocial o antinormativa1, por un marcado retraso en los procesos de
socialización.

1 Utilizo con frecuencia la expresión antinormativa, ya que la opción “antisocial” me parece ambigua, ya que está
ligada a interpretación moral. Lo antinormativo, en cambio, solo apunta a traspasar normas establecidas,
independiente del valor moral de estas.

12
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

La teoría de Eysenck incluye una cuarta dimensión de personalidad: la inteligencia


general o factor g, que implica una dimensión de las habilidades cognitivas, que tiene
características especiales y distintivas con respecto a las tres dimensiones P, E y N.

Eysenck afirmaba que las variables de personalidad tienen una clara determinación
genética, incluyen estructuras fisiológicas y hormonales concretas, y son
contrastables por medio de procedimientos experimentales (Eysenck y Eysenck,
1985).

Los individuos con elevada extraversión, bajo neuroticismo y alto psicoticismo


tendrían mayores dificultades para una adquisición eficaz de la conciencia moral
como inhibidora del comportamiento antisocial (Milan, 2007). Aun no es claro el rol
del factor g (inteligencia) en las conductas delictuales, aunque existen algunas
asociaciones con baja inteligencia y conducta delictual, lo que podría ser coherente
con la capacidad de abstracción que otorga la inteligencia, tanto para obtener metas
sorteando obstáculos (como las normas), como por el hecho de que permite tener
más claro el análisis de coste beneficio de los refuerzos y castigos asociados a la
acción. Sin embargo, esto no es del todo claro, ya que la inteligencia incide en la
eficiencia de la aplicación conductual, lo que puede afectar la probabilidad de que
un delincuente con alta inteligencia sea capturado y encarcelado, y es justamente
con la población carcelaria con la que se realizan todos estos estudios.

2.1.3. Conducta reactiva

Una tercera forma de explicar los comportamientos delictivos es verlos como


conductas de adaptación posteriores a traumas, estrés extremo o vivencias límites.
Esta relación entre máxima tensión y respuestas violentas están muy vinculados a los
delitos contra las personas, especialmente contra personas cercanas, como familia,
amigos, compañeros de trabajo, etc. Estas explosiones violentas están relacionadas,
en su mayor parte, con incapacidad de controlar la ira, la rabia, la tristeza, la
ambición, la envidia y otras emociones fuertes.

13
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

Esta relación entre emociones y violencia tiene muchos intentos de explicación


teórica, entre ellas, la teoría que mejor podría ser explicada por la teoría de la
Frustración / Agresión. En su versión más actual esta teoría cobra la forma de la
Teoría general de la tensión propuesta por Robert Agnew en 1992 (Cullen, Wright, y
Blevins, 2006).

Imposibilidad de

Supresión de la fuente
Ira, miedo, Contra una Alivia la tensión
Fuentes de tensión

Emociones negativas

lograr objetivos rabia, odio, Acción correctora fuente de El mecanismo


sociales positivos verguenza tensión conductual
Ser privado de Energizan su Uso de la utilizado para
gratificaciones conducta en agresión o resolver la
que posee o
espera,
dirección a conducta tensión se
corregir la delictiva. consolida para
Ser sometido a situación. siguientes
situaciones situaciones de
aversivas
tensión.
ineludibles.

Diversos estudios muestran que el aumento de estresores ambientales, como la


imposibilidad de alcanzar metas socialmente estimulantes (p.ej., el éxito
económico, una carrera universitaria, la fama, etc.) o logros que ya se tenían (p.ej.,
la muerte de pareja o hijos, la pérdida del empleo, o de la vivienda, etc.) cuando se
juntan, pueden llegar a un nivel tan alto que requieren una acción compensatoria.
Si esta no es posible (normalmente, debido a la propia situación de tensión
provocada, entonces se buscará la supresión de las fuentes de estrés (como la pareja,
la falta de dinero, o las normas que impiden los logros) aumentan la tensión y la
tendencia al delito. La ira destaca como una emoción relevante en la teoría general
de la tensión. Agnew (1992) la considera una emoción propicia para la delincuencia
y la violencia. Indudablemente, no es la única emoción negativa que induce al crimen
y a la delincuencia, pero desde el punto de vista criminológico, la ira es primordial

14
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

ya que confiere energía a la acción produciendo en la persona deseos de represalia


y venganza (Agnew et al., 2002).

Esta situación puede ser más compleja cuando se mira socialmente. Diversos
indicadores muestran esta relación, aunque es más compleja de lo que parece. Es
decir, durante esta crisis económica, en algunos países y para algunos delitos, se
verifica la hipótesis de “a mayor estrés, mayores delitos”, pero el índice general de
delitos en España ha bajado durante la crisis, a pesar de que la hipótesis se verifica
en algunos territorios como País Vasco y Cataluña, donde los delitos de robo y otros
delitos contra la propiedad aumentaron en 2011 y 2013.

2.1.4. Ruptura de vínculos sociales

La constatación de que cuanto menores son los lazos emocionales con personas
socialmente integradas (como sucede en muchas situaciones de marginación) mayor
es la implicación de un sujeto en actividades delictivas, ha llevado a teorizar sobre
este particular en las denominadas teorías del control social.

La más conocida es la teoría de los vínculos sociales de Hirschi (1969), quien postuló
que existe una serie de contextos principales en los que los jóvenes se unen a la
sociedad: la familia, la escuela, el grupo de amigos y las pautas de acción
convencionales, tales como las actividades recreativas o deportivas.

El enraizamiento a estos ámbitos se produce mediante cuatro mecanismos


complementarios: 1) el apego o lazos emocionales de admiración e identificación
con otras personas, 2) el compromiso o grado de asunción de los objetivos sociales,
3) la participación o amplitud de la implicación del individuo en actividades sociales
positivas (escolares, familiares, laborales...), y 4) las creencias o conjunto de
convicciones favorables a los valores establecidos, y contrarias al delito.

Por ello, desde esta perspectiva, la conducta antinormativa radicaría en la ruptura


o inexistencia de los mecanismos de vinculación en uno o más de los contextos
sociales aludidos.

15
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

En esta teoría lo importante para prevenir el delito sería la capacidad de la


comunidad de establecer y mantener lazos con todos sus miembros, incluyendo la
policía, de ahí el concepto muy expandido en los años 90 y 2000 de “policía de
proximidad”, es decir, un cuerpo de agentes que no vigila a la comunidad, sino que
forma parte de ella. Se involucra en sus problemas mucho más allá de la seguridad
reactiva, sino con seguridad activa, como los proyectos de basketball con la policía
en Estados Unidos, o los grupos de scouts de la policía en algunos países
latinoamericanos.

En el caso de Europa este problema puede darse menos en las comunidades debido
al estado de bienestar del que goza gran parte del continente, sin embargo, la
disminución de presupuesto para actividades sociales en los barrios, el aumento de
parados de larga duración y la falta de instrumentos para incluir a la población
migrante, son factores de riesgo de crear bolsas de personas con reducida vinculación
social que aumenta el riesgo de delinquir.

2.1.5. Elección racional

Existe una confusión en considerar la teoría de elección racional aplicada a la


delincuencia como una teoría psicológica del delito. Esta teoría, también conocida
como teoría racional de la criminalidad, no es una teoría psicológica, sino
económica. Fue planteada por el Nobel de economía Gary Becker, quien obtuvo
mucha fama en los años 60 por aplicar la elección racional a la economía de mercado,
por lo que fue galardonado con el premio nobel de economía en 1992. Esta teoría
plantea que la criminalidad es una actividad racional sujeta a un factor de aversión
al riesgo, tal como lo describiera Becker (1968). Los delincuentes son agentes que
valoran racionalmente los beneficios y costos de cometer una acción. Según las
estimaciones que estos realizan, se cometen diferentes tipos de delitos, lo que lleva
a considerar que existe un mercado de actividades delictivas. Y como todo
mecanismo de mercado, posee formas de asignación de recursos y recompensas por
ser más productivo en la actividad que se desempeña.

16
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

La consecuencia de esta teoría es el aumento de las penas a los delitos como


consecuencia del análisis de coste/beneficio, al aumentar el coste se reducirían los
delitos. Esta predicción de la teoría ha fracasado, ya que países como Estados Unidos
que ha subido enormemente las penas desde 1980, no ha logrado reducciones
significativas del delito en proporción a sus aumentos de penas. En cambio, países
como los europeos, que han aumentado mucho menos las penas, y en algunos casos
las han reducido, han logrado mantener y disminuir los delitos desde los años 80 a la
fecha.

2.2. La carrera delictiva

La investigación sobre carreras delictivas, también conocida como criminología del


desarrollo, es otra de las áreas en que la psicología ha aportado importantes
perspectivas. Desde este enfoque se concibe la delincuencia en conexión con el
“ciclo vital” del individuo, especialmente durante los periodos de su infancia,
adolescencia y juventud (Farrington, 1992). Esta perspectiva propone una diferencia
relevante entre una gran cantidad de adolescentes y jóvenes que realizan alguna
actividad delictiva en estas etapas de la vida como una situación puntual, pero dichas
conductas remiten con el desarrollo y la madurez. La preocupación debiera recaer,
según esta visión, sobre la porción de jóvenes que persiste en los comportamientos
delictivos, aprender a reconocer los perfiles de estos jóvenes y crear sistemas que
impidan o, al menos no estimulen, dicha persistencia.

En los estudios sobre carreras delictivas se analiza la secuencia de delitos cometidos


por un individuo y los “factores” que se vinculan al inicio, mantenimiento y
finalización de la actividad delictiva. Así pues, su principal foco de atención son los
“factores de riesgo” de la delincuencia. Se efectúa una diferenciación entre factores
estáticos (como la precocidad delictiva de un sujeto, su impulsividad o su
psicopatía), que contribuyen al riesgo actual pero que no pueden generalmente
modificarse, y factores dinámicos, o sustancialmente modificables (como sus

17
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

cogniciones, tener amigos delincuentes, o el consumo de drogas) (Redondo y Andrés-


Pueyo, 2007).

Farrington (1996) formuló una teoría psicológica que integra el conocimiento sobre
carreras delictivas, en la que plantea una distinción entre tendencia antisocial de un
sujeto y decisión de cometer un delito. La “tendencia antisocial” dependería de tres
tipos de factores:

i. Los procesos energizantes: aquí se encuentran los motivadores de frustración


que ya planteó la teoría general de la tensión (Agnew), como los niveles de
deseo de bienes materiales, el prestigio social (deseos más intensos y
conflictivos en jóvenes marginales debido a sus mayores privaciones), en
relación con la frustración y el estrés, y el posible consumo de alcohol.

ii. La carencia de habilidades prosociales: los procesos que imprimen al


comportamiento una direccionalidad antisocial se vinculan con la capacidad
para obtener dichas metas, especialmente si un joven carece de estas
capacidades, es más probable que opte por métodos ilícitos de obtención de
gratificaciones.

iii. Las inhibiciones: el aprendizaje de diversas creencias, actitudes y


representaciones sociales compartidas que alejen al joven del
comportamiento delictivo, debido a la empatía y el aprendizaje social
proveniente de la familia y entorno cercano. Si en este entorno existen
factores de riesgo (referentes negativos), aumenta la probabilidad de la
carrera delictiva.

Por otro lado, la decisión de cometer un delito se produciría en la interacción del


individuo con la situación concreta, es decir, con la oportunidad, el coste y el
beneficio obtenido en el momento. Cuando están presentes las tendencias
antisociales aludidas, el delito será más probable en función de las oportunidades
que se le presenten y de su valoración favorable de costes y beneficios anticipados
del delito (p. ej., materiales, castigos penales, etc.).

18
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

Siguiendo la perspectiva propuesta por Farrington, la carrera delictiva podría


dividirse en tres momentos esenciales o claves:

Inicio Persistencia Desistimiento

• Adolescencia • Adolescencia tardía • Juventud (20 o más)


temprana (11 a 14 (15 a 19 años) • Dependerá de la
años) • Dependen del capacidad de
• Dependiente del mantenimiento de las desarrollar
entorno de pares conductas (refuerzos y habilidades lícitas, de
• Tendencia a castigos) obtención de metas
interesarse por metas • Aparición de nuevos (educación,
materiales como intereses formación, empleo)
objetos y dinero • Aumento de la • Estabilización, pareja
• Necesidad de adquirir capcidad de estable,
bienes de autocontrol distanciamiento de
identificación y adicciones
conductas de • Aparición de
pertenencia referentes y metas
dentro de la norma
.

Esta aproximación propuesta por Farrington tiene principalmente aplicaciones de


tipo preventivo, y ha dado lugar, al desarrollo de múltiples modelos de intervención
en zonas deprimidas y marginalizadas de la sociedad en distintos países con
diferentes énfasis según cada realidad.

2.3. Prevención y tratamiento

En una de las áreas que la psicología ha realizado grandes aportes al trabajo


antidelictivo es en la prevención. Tanto en los modelos explicativos del
comportamiento delictivo como en el estudio de carreras delictivas se encuentran
los factores que podrían incidir en disminuir las conductas delictivas y antinormativas
de la población general y de los jóvenes en particular, si son controlados e
intervenidos a tiempo.

19
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

La prevención de la actividad delictiva es un campo eminentemente multidisciplinar


y puede entenderse con el mismo patrón que se utiliza para la prevención en salud
pública:

• Prevención primaria:

Se toman medidas genéricas, a toda la población o hacia amplios


sectores de ella, promoviendo conductas que evitan la aparición de
problemas. Aquí se encuentran todo tipo de acciones generalistas
como: educación general, promoción del deporte, apertura de centros
sociales, comunitarios y juveniles, mejora de áreas verdes, limpieza y
hermoseamiento de áreas urbanas, etc.

• Prevención secundaria:

Acciones dirigidas a la población de riesgo, que ya presenta algunos


factores problemáticos y la acción va destinada a atender los casos que
presentan dichos factores de riesgo. Aquí se contemplan acciones como
la detección precoz de las tendencias delictivas, la sensibilización
sobre los costes personales de las conductas delictivas, los tratamientos
de problemas y los trastornos vinculados (p. ej., trastorno por déficit
de atención e hiperactividad (TDAH), depresión, trastorno bipolar), y
en último caso, la reducción del daño.

• Prevención terciaria:

Este es el tratamiento a personas que ya han delinquido e incluso que


han estado en la cárcel. Se trata de evitar la reproducción del problema
o la persistencia familiar. Aquí se encuentran los talleres para
agresores, las terapias a familias de delincuentes, las terapias
obligatorias, los programas de reinserción, etc.

Como se aprecia, los tratamientos, o al menos algunos de ellos, se consideran, según


el programa tradicional de prevención, como parte de la prevención terciaria, ya
que al tratar a los delincuentes se evitan delitos posteriores y se reduce la posibilidad

20
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

de que estos sirvan como referentes a nuevas generaciones. Sin embargo, el


tratamiento es un área que tiene vida propia dentro de todos los sistemas de atención
social (sean delictivos o no).

Así, la finalidad del tratamiento es entrenar a los sujetos en todas las competencias
sociales de las que carece, y que son imprescindibles para la vida integrada en
sociedad. Este modelo se ha concretado en el entrenamiento en los siguientes grupos
de habilidades (Redondo, 2007):

a) Desarrollo de nuevas habilidades.

Muchos delincuentes requieren aprender nuevas habilidades y hábitos de


comunicación no violenta, de responsabilidad familiar y laboral, de motivación
de logro personal, etc. Otra de las grandes estrategias de desarrollo de
comportamientos prosociales en los delincuentes, es el modelado de dichos
comportamientos por parte de otros sujetos, lo que facilita la imitación y la
adquisición de la conducta en los aprendices.

b) Desarrollo del pensamiento.

Al igual que sucedió con la terapia psicológica en general, en el tratamiento de


los delincuentes también se descubrió en la década de los setenta, la relevancia
de intervenir sobre el pensamiento y la cognición. En el marco de la psicología
criminal, el trabajo científico decisivo para ello fue el desarrollado por Ross y sus
colegas en Canadá, quienes revisaron numerosos programas de tratamiento
aplicados en años anteriores, y concluyeron, que los más efectivos habían sido
los que habían incluido componentes de cambio del pensamiento de los
delincuentes (Ross y Fabiano, 1985).

c) Regulación emocional y control de la ira.

Según ya se ha comentado, la ira puede jugar un papel destacado en la génesis


del comportamiento violento y delictivo. Las técnicas de regulación emocional
parten del supuesto de que muchos delincuentes tienen dificultades para el
manejo de situaciones conflictivas de la vida diaria, lo que puede llevarlos al

21
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

descontrol emocional, y a la agresión tanto verbal como física a otras personas.


En ello suele implicarse una secuencia que incluye generalmente tres elementos:
a) carencia de habilidades de manejo de la situación, b) interpretación
inadecuada de las interacciones sociales (por ej., atribuyendo mala intención) y
c) exasperación emotiva.

La eficacia de los tratamientos psicológicos de los delincuentes es un debate abierto,


sin embargo, hay importantes investigaciones que aportan datos positivos sobre estos
resultados. Los metaanálisis que se han realizado sobre los resultados de
tratamientos psicológicos señalan que estos tienen un efecto parcial pero
significativo en la reducción de las tasas de reincidencia: logran en promedio una
reducción de la reincidencia delictiva de alrededor de 10 puntos, para tasas base de
reincidencia del 50%, y los mejores tratamientos llegan a obtener reducciones
superiores a 15 puntos y hasta 25 puntos en casos excepcionales. En otras palabras,
el tratamiento puede reducir la reincidencia esperada en proporciones de alrededor
de 1/3 (y, dependiendo de la calidad de las intervenciones, de entre 1/5 y 1/2)
(Redondo y Andrés-Pueyo, 2007).

2.4. Predicción del riesgo de conducta antisocial

La predicción en ciencias sociales, normalmente, es una tendencia de población y


probabilidad de ocurrencia de un hecho en poblaciones extensas, no en individuos
concretos. Por ello, la psicología hace propuestas de predicción basadas en
experimentación y modelos teóricos que no son una certeza, sino una probabilidad
de ocurrencia. Aplicar esto a un sujeto concreto es mucho más complejo y requiere
de múltiples observaciones.

Sin embargo, el sistema judicial, ha mirado a la psicología buscando caminos más


certeros que la mera opinión cuando se trata de jugar lo que se ha denominado
“peligrosidad social”, es decir, la existencia de un estado peligroso para la sociedad

22
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

en “ciertos individuos, de los cuales, queda demostrada básicamente por la acción


anterior de algún delito o por la conducta que siguen, siendo la calificación de
peligrosidad un hecho reservado por el juez” (Barcia, Pozo y Ruiz, 1994). En la
actualidad esta valoración se realiza especialmente sobre quienes evidencian algún
trastorno mental, por lo cual entran en la situación compleja del sistema de ser
penalizado o no, según la gravedad de su trastorno. Si no pueden ser imputados,
entonces, se evalúa qué debe suceder con ellos; ser tratados, dejados en libertad o
recluidos en otro sistema, para su protección y la de la sociedad.

La valoración de riesgo de un sujeto se basa en un análisis detallado de varios


aspectos de su relación con el entorno y sus motivaciones (Tiffon Noni, 2008) que
pueden resumirse en los siguientes:

1. Rasgos de personalidad del sujeto.

2. Motivaciones que impulsan a la conducta.

3. Características de la enfermedad mental que deben ser especialmente tenidas


en cuenta.

4. Un análisis de la relación del individuo con el entorno social.

Uno de los estudios más aceptados en la actualidad para la valoración del riesgo es
el de los resultados generales del estudio de McArthur (1996, citado por: Esbec,
2003). Señalaron como predictor más significativo de violencia, el diagnóstico de
psicopatía, y en segundo lugar la historia de malos tratos en la infancia. La
combinación de ambos elementos explicaba el 41% de la violencia (ver datos del
cuadro anteriormente definido). Otros datos de relevancia que obtiene este estudio
analizando los diferentes trastornos es que:

• Un trastorno de abuso de sustancias comparado con otro trastorno mental


doblaba el riesgo de violencia.

• Aquellos sujetos con esquizofrenia tuvieron la frecuencia más baja de


violencia durante el periodo de un año (14.8%)

23
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

• comparados con el trastorno bipolar (22.0%) o depresión mayor (28.5%).

Encontraron, además, un amplio número de relaciones bivariadas (correlaciones


estadísticamente significativas) entre algunos de estos factores de riesgo específicos
y la violencia, entre los que cabe mencionar:

• Ser varón

• Historia de violencia anterior

• Experiencias infantiles de malos tratos (presenciados o sufridos)

• Psicopatía

• Suspicacia

• Ira

• Pensamientos intrusivos persistentes de violencia

Estos factores se pueden evaluar de muchos modos (p. ej., entrevistas,


cuestionarios, test), pero el modo más utilizado internacionalmente (además de
entrevistas en profundidad o en complementariedad con éstas, es el “Árbol de
Decisiones” derivado del método que desarrolló MacArthur de Evaluación de riesgo
de violencia.

3. Disciplinas psicológicas que apoyan la investigación criminal

El último apartado de esta asignatura se ha reservado a la conexión con las


asignaturas posteriores de la rama de psicología. Hay muchos términos asociados a
la psicología dentro del ámbito de la criminología: psicología criminal, del delito,
jurídica, legal y forense, como los más usados en España. El objetivo de este ítem
es intentar dejar clara la diferencia, en la medida de lo posible, entre todos ellos.

24
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

3.1. Psicología criminológica

Psicología criminal o criminológica, es un término amplio para definir el campo


científico del estudio de las causas del comportamiento delictivo. Su ámbito es tanto
teórico conceptual, como académico y experimental. Su apoyo a los sistemas de
control de la criminalidad se da, especialmente, a través del apoyo a la ciencia
criminológica, en formación e investigación, no necesariamente se da dentro de los
sistemas judiciales.

Además de las causas, una de sus principales preocupaciones es la prevención del


delito, y el tratamiento de delincuentes y víctimas.

3.2. Psicología forense

La psicología forense es el campo de la psicología que se refiere específicamente al


actuar del sistema judicial frente al delito en particular, y específicamente en
cuanto a los elementos a utilizar en un proceso judicial. Para esto utiliza los
conocimientos, las teorías y los conceptos planteados por la psicología criminológica,
pero de una forma más específica a casos individuales.

La principal preocupación de la psicología forense será la evaluación de víctimas y


victimarios, para conocer el estado de estas antes y después del delito.

3.3. Psicología Jurídica

La psicología jurídica o psicología legal, aborda el sistema judicial como objeto de


estudio, aplicando todos los conocimientos de la psicología a la organización e
impartición de justicia, sus modos de producción y estructuración, sus usos internos,
sus problemas y su legitimidad.

Su principal preocupación es de tipo social y organizacional, apoyando la solución de


problemas legales de origen psicológico, como los efectos de las discriminaciones en

25
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

los juicios y condenas, las ideologías de los jueces, los fiscales y abogados frente a
la aplicación de la ley y otras cuestiones de este tipo.

Como es habitual en el ámbito de las ciencias sociales, hay límites muy permeables
entre estos distintos ámbitos de desarrollo de las disciplinas, además de la falta de
acuerdo en algunas definiciones, por lo que no es raro encontrar definiciones
contradictorias en distintos espacios o países, en que se definan los campos de forma
distinta a la descrita. Esta descripción se guía por los usos españoles, pero aun así
puede haber diferencias con otros autores. Lo relevante de estas definiciones es
comprender que existen distintos ámbitos de acción y distintos enfoques para
abordar el quehacer de la justicia.

26
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

VI. GLOSARIO

Conducta
Es una conducta que transgrede las normas de una sociedad.
delictual

Perspectiva de Enfoque teórico de la explicación de la conducta delictiva


“refuerzo de que adopta factores sociales, no sociales y culturales que
asociación intervienen tanto para motivar y controlar la conducta
diferencial” delictiva, como para fomentar y socavar la conformidad.

Referida a la comunicación y frecuencia de interacción e


identificación con grupos primarios (familia y pares,
Asociación
principalmente) o de referencia (modas, grupos organizados,
diferencial
etc.) que controlan las fuentes de refuerzo que las personas
valoran en su vida cotidiana.

Diferencia entre ciertas conductas que pueden tener


Reforzamiento
refuerzos claros, concretos e inmediatos, frente a otros
diferencial de los
comportamientos, que pueden tener un refuerzo más vago,
comportamientos
abstracto y que obtiene una recompensa placentera a más
delictivos
largo plazo.

Este modelo plantea una interacción de factores


Modelo
psicosociales y biológicos para la tendencia a la conducta de
Psicobiológico de
las personas. El modelo plantea la existencia de tres
Personalidad de
continuos temperamentales en interacción (P-E-N):
Hans Eysenck
psicoticismo, extraversión y neuroticismo.

27
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

Es el estado dependiente del equilibrio de dopamina y


serotonina en el sistema. Si es alto, la tendencia es a un
Psicoticismo comportamiento agresivo, hostil, frío, egocéntrico,
impersonal, impulsivo, antisocial, creativo, rígido y poco
empático.

Estado de menor activación reticular en el cerebro, con


tendencia a centrar su gratificación en el exterior. Si es alto
Extraversión tiende a comportamientos: sociable, vivaz, activo, asertivo,
buscador de sensaciones socializadas, despreocupado,
dominante, espontáneo y aventurero.

Estado dependiente del Cerebro emocional. Si es alto la


tendencia en el comportamiento es: ansioso, deprimido,
Neuroticismo
tenso, irracional, tímido, triste, emotivo, con baja
autoestima y sentimientos de culpa.

Término amplio para definir el campo científico del estudio


Psicología
de las causas del comportamiento delictivo. Su ámbito es
criminológica
tanto teórico conceptual, como académico y experimental.

Campo de la psicología que se refiere específicamente al


Psicología actuar del sistema judicial frente al delito en particular, y
Forense específicamente en cuanto a los elementos a utilizar en un
proceso judicial.

Aborda el sistema judicial como objeto de estudio, aplicando


todos los conocimientos de la psicología a la organización e
Psicología
impartición de justicia, sus modos de producción y
jurídica
estructuración, sus usos internos, sus problemas y su
legitimidad.

28
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

VII. BIBLIOGRAFIA

Akers, R. (2007). Aplicaciones de los principios del aprendizaje social. Algunos


programas del tratamiento y prevención de la delincuencia. Academy of
Criminal Justice Sciences, 20, 127–152.
https://doi.org/papers2://publication/uuid/390F8675-1861-4C4B-A83D-
D902C873BBE0

Akers, R. (2009). Social learning and social structure: A general theory of crime
and deviance. London: Transaction Publishers. Retrieved from
https://books.google.es/books?hl=es&lr=&id=zjBDZ-
T0WMgC&oi=fnd&pg=PR9&dq=Social+Learning+Theory+and+the+Explanatio
n+of+Crime:+A+Guide+for+the+New+Century,+Advances+in+Criminological
+Theory,&ots=GgRHvO9kvO&sig=QFwhiq2oOf6dPjEae7Nhk2uPjxM#v=onepa
ge&q=Social

Becerra-García, J. A., & García-León, A. (2013). Trastorno mental en los


agresores sexuales: estudio descriptivo de una muestra española. Revista
Española de Medicina Legal, 39(1), 3–6.
https://doi.org/10.1016/J.REML.2012.10.007

Cullen, F. T., Wright, J. P., & Blevins, K. R. (2006). Taking stock : the status of
criminological theory. London: Transaction Publishers. Retrieved from
https://books.google.es/books?hl=es&lr=&id=4Apx0EeqCJEC&oi=fnd&pg=PA
101&dq=agnew+2006+general+strain+theory&ots=iHYOc2D6OC&sig=zkZfoK
LiODDSYMWJrxfVEF-Ph1E#v=onepage&q=agnew 2006 general strain
theory&f=false

Esbec, E. (2003). Valoración De La Peligrosidad Criminal ( Riesgo- Violencia ) En


Psicología Forense . Aproximación Conceptual E Histórica . Psicopatología
Clínica Legal Y Forense, 3(2), 45–64. Retrieved from

29
TEMA 5
Psicología de la delincuencia

http://masterforense.com/pdf/2003/2003art10.pdf

Eysenck, H. J., & Eysenck, M. (1985). Personality and Individual Differences,.


New York: Plenum Press.

Farrington, D. (1992). Implicaciones de la investigación sobre carreras delictivas


para la prevención de la delincuencia. (V. Garrido & L. Montoro, Eds.), La
Reeducación Del Delincuente Juvenil : Los Programas Del Éxito. Madrid:
Tirant lo Blanch. Retrieved from
https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=578531

Moya Albiol, L. (2015). Neurocriminología. Psicobiología de la violencia.


Valencia: Pirámide. Retrieved from
https://ebookcentral.proquest.com/lib/univcomplutensesp/detail.action?do
cID=4945586

Redondo, S., & Andrés-Pueyo, A. (2007). La psicología de la delincuencia. Papeles


Del Psicólogo, 28(3), 147–156. Retrieved from
http://www.redalyc.org/html/778/77828302/

Schmidt, V., Firpo, L., Vion, D., De Costa Oliván, M., Casela, L., Cuenya, L., …
Pedrón, V. (2010). Modelo Psicobiológico de Personalidad de Eysenck: una
historia proyectada hacia el futuro. Revista Internacional de Psicología,
11(2), 1–21. Retrieved from
http://www.revistapsicologia.org/index.php/revista/article/view/63

Tiffon Noni, B. N. (2008). Manual de Consultoria en Psicología y Psicopatología


clínica, legal, jurídica, criminal y forense. Barceloan: J.M. Bosch Editor.
Retrieved from https://0-app.vlex.com.cisne.sim.ucm.es/#/sources/2165

Soria Verde, M. y Sáiz Roca, D. (2012) Psicología criminal. Madrid: Pearson-


Prentice Hall.

30

También podría gustarte