Está en la página 1de 1

CAPITULO 3 “LOS PLANES DE UN LIDER”

Cuando un líder se enfrenta a un reto, lo primero que hace es orar; después planificar.
Dios hace planes, cuando imitamos a Dios, reconocemos su grandeza; para ser como el
necesitamos hacer planes; ser obedientes; Dios bendice la obediencia; debemos ser buenos
mayordomos de los recursos de Dios
Cuando te decidas permite que sea Dios El que se ocupe de los resultados; los lideres necesitan
tiempo para pensar, un tiempo para alejarse de todo, piensa en hacer un breve retiro., buscar un
lugar donde te puedas concentrar, tomate tiempo para pensarlo y para planificar.; cuando oramos
y planificamos, le estamos abriendo la mente y el corazón a Dios, entonces es cuando oímos su
voz.
Cuando la oportunidad toque a tu puerta, tienes que estar listo para abrir esa puerta., asegúrate de
buscar a Dios todos los días y de pedirle que te muestre las oportunidades que te tiene preparadas.
El paso siguiente en la planeación es la fijación de una meta; la mayoría de nosotros nos fijamos
unas metas demasiado bajas y tratamos de llegar a ellas con demasiada rapidez, Dios nos pide
que soñemos engrande y vallamos despacio.
El establecimiento de fecha límite es la parte de la planificación.
El líder prudente reconoce que, si hay algo que puede ir mal, lo más probables que así suceda:
planifica para la posibilidad de un desastre. El líder piensa mucho más allá que todos los demás.
la previsión de los problemas y la anticipación para resolverlos forman parte de una planificación
eficaz.
Jesús nos dice a nosotros que calculemos el precio.
Los líderes reconocen que necesitan la ayuda de otros para lograr sus metas, ningún líder puede
realizar grandes tareas solo; el líder necesita la ayuda de Dios y la ayuda de otros.
Si tus planes proceden del Señor, van a ser lo suficientemente grandes para que el quepa en ellos.

También podría gustarte