Resumen sobre la situación actual, proyectada y análisis crítico
respecto a la lectura.
La situación actual de la gestión ambiental en Perú se centra en cuatro
elementos fundamentales: biodiversidad, cambio climático, recursos hídricos y gestión del riesgo de desastres. Estos aspectos son esenciales para evaluar la efectividad de las políticas y acciones ambientales en el país.
La Política Nacional del Ambiente (PNA) es un pilar crucial en la gestión
ambiental peruana, estableciendo un marco para la conservación y el uso sostenible de los recursos naturales. Se enfoca en garantizar un ambiente saludable y equilibrado, promoviendo la ética y la responsabilidad en la gestión de estos recursos.
La gestión ambiental en Perú se basa en derechos fundamentales, como el
derecho a un entorno saludable y a la participación ciudadana en asuntos ambientales, así como en principios de sostenibilidad y responsabilidad ambiental.
El objetivo general de la PNA es mejorar la calidad de vida de la población a
través de la protección y restauración del ambiente y la biodiversidad. Para lograrlo, se establecen objetivos específicos, como la conservación de la diversidad biológica, la mejora de la calidad ambiental y el fomento de la conciencia ambiental.
En cuanto a la biodiversidad, Perú es uno de los países más ricos en
diversidad de especies y ecosistemas. Se han logrado avances desde la creación del Ministerio del Ambiente en 2008, como el control de la extracción de caoba y el fortalecimiento de capacidades científicas relacionadas con la biodiversidad. Las perspectivas incluyen abordar las causas de la pérdida de biodiversidad, promover la restauración de ecosistemas y desarrollar la biotecnología de recursos genéticos.
Las prioridades nacionales en biodiversidad abarcan desde la conservación y
el uso sostenible de la diversidad biológica hasta el apoyo a iniciativas de conservación en comunidades rurales y el fomento de prácticas sostenibles en la pesca y la acuicultura.
En cuanto al cambio climático, Perú se enfrenta a sus efectos, como la
reducción de glaciares, el aumento de temperaturas y la intensificación de eventos climáticos extremos. A pesar de que el país emite una pequeña cantidad de gases de efecto invernadero en comparación con otros, el crecimiento económico y la deforestación son fuentes importantes de emisiones. El Ministerio del Ambiente lidera esfuerzos para abordar el cambio climático, incluyendo estrategias de adaptación y mitigación. Se promueven políticas para reducir las emisiones y fortalecer la resiliencia de las comunidades.
En resumen, Perú ha establecido políticas y estrategias sólidas para abordar
la gestión ambiental, centrándose en la conservación de la biodiversidad y la lucha contra el cambio climático. Sin embargo, enfrenta desafíos significativos, como la deforestación y la necesidad de concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de estas cuestiones.