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Relaciones Rusia-Unión Europea desde 2012

Putin en las conversaciones del formato de Normandía en


Minsk para encontrar una solución a la situación en Ucrania en febrero de 2015.
Estos párrafos son un extracto de Relaciones Rusia-Unión Europea desde 2012.[editar]

Las relaciones Rusia-Unión Europea desde 2012 es un término que hace referencia a las
relaciones entre ambas partes a partir del tercer mandato presidencial de Vladímir Putin en
Rusia. Durante este periodo, iniciado en mayo de 2012, las relaciones bilaterales se han
visto afectadas principalmente por la guerra ruso-ucraniana iniciada en 2014, con sanciones
internacionales de la UE hacia Rusia, siendo un conflicto desarrollado en medio de una
asociación económica en la que el sector energetico representaba un factor de vital
importancia al ser Rusia el mayor proveedor para la Unión Europea (hasta agosto de 2023
fecha en que la UE dejó dicha dependecia atrás).64 Hasta la actualidad, donde las sanciones
masivas impuestas por la UE en respuesta a la Invasión rusa de Ucrania provocaron un
cambio total en la actitud de Putin, donde la UE pasó de ser el principal mercado para sus
exportaciones energéticas a estar en la lista de países/territorios hostiles hacia Rusia que
amenazan la seguridad del país.

El principal punto de conflicto entre la UE y Rusia es la influencia que puede ejercer cada
parte sobre diversos países de la Europa Oriental (Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia,
Georgia, Moldavia y Ucrania). Es así que mientras Rusia recurre a dispositivos
económicos, militares y no militares, para mantener a estos países en su esfera de
influencia, la UE apoya ocasionalmente la integración de los mismos en las actividades
“occidentales”, apostando por la cooperación dentro del marco de la Política Europea de
Vecindad.65

La primera fase de la guerra ruso-ucraniana —entre 2014 y 2015— se originó en la


cuestión sobre el Acuerdo de Asociación entre Ucrania y la Unión Europea que llevó a los
disturbios heterogéneos de índole europeísta y nacionalista del Euromaidán.
Posteriormente, la UE condenó la intervención rusa en Ucrania —adhesión de Crimea a
Rusia y guerra del Dombás— y suspendió el diálogo sobre las cuestiones relativas a la
política de visados y las negociaciones sobre un nuevo acuerdo bilateral. Desde entonces la
Unión aplica un enfoque de doble vía que combina sanciones con intentos de encontrar una
solución al conflicto en Ucrania.66

Por otra parte, el trato reservado por el gobierno ruso a la disidencia —en el caso Skripal la
UE expulsó diplomáticos rusos— y a la oposición en su país —caso de Alekséi Navalni—67
también ha provocado tensiones entre las partes. No obstante, la participación rusa en la
labor del grupo de países para celebrar un acuerdo nuclear con Irán permitió albergar
esperanzas respecto a una mayor cooperación a escala internacional. No obstante, la
intervención militar rusa en la guerra civil siria desde septiembre de 2016, en apoyo al
presidente Bashar al-Ásad, finalmente agravó las tensiones con la UE.66 Sin embargo, la
negativa tanto de Rusia como de la UE de ceder a la presión estadounidense por romper las
relaciones con Irán permitió al gobierno de Putin eludir parcialmente las sanciones
impuestas.68

Preludio de la invasión

El Presidente de Ucrania, Volodímyr Zelensky, y el


Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg. Bruselas, 16 de diciembre de 2021.
El presidente ruso, Vladímir Putin, junto con Denis Pushilin y Leonid Pasechnik, firmando
los decretos que reconocen la independencia de las autoproclamadas repúblicas populares
de Donetsk y Lugansk, 21 de febrero de 2022.
Estos párrafos son un extracto de Preludio de la invasión rusa de Ucrania.[editar]

El preludio de la invasión rusa de Ucrania refiere a los acontecimientos desarrollados a


partir de marzo de 2021 en el marco de la guerra ruso-ucraniana y que desembocaron en la
entrada de las fuerzas armadas rusas en el territorio la vecina Ucrania en febrero de 2022.

Entre marzo y abril de 2021 Rusia reunió alrededor de 100 000 soldados, misiles y otras
armas pesadas cerca de su frontera con Ucrania, lo que representó la mayor movilización de
fuerzas desde la anexión de Crimea por parte de ese país en 2014. Esto generó
preocupaciones sobre una posible invasión, si bien las tropas se retiraron parcialmente en
junio siguiente.69 La crisis se renovó a partir de octubre con el paulatino aumento en la
movilización de soldados rusos que sumaron más de 100 000 tanto en Rusia como en
Bielorrusia.70

Entonces, Rusia presentó dos borradores de tratados que contenían solicitudes de lo que
denominó "garantías de seguridad", incluida una promesa jurídicamente vinculante de que
Ucrania no se uniría a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y una
reducción de las tropas y del equipo militar de la OTAN estacionados en Europa del Este, y
amenazó con una respuesta militar no especificada si esas demandas no se cumplían en su
totalidad. La OTAN rechazó estas solicitudes y Estados Unidos advirtió a Rusia de
sanciones económicas "rápidas y severas" en caso de que siguiera introduciéndose en
Ucrania.71
Entretanto, Estados Unidos publicó información de inteligencia sobre los planes de
invasión rusos, incluidas fotografías satelitales que mostraban tropas y equipos rusos cerca
de la frontera con Ucrania.72 Estados Unidos continuó publicando informes que predijeron
los planes de invasión. Durante estos acontecimientos, el gobierno ruso negó repetidamente
que tuviera planes para invadir o atacar Ucrania; quienes emitieron las negativas incluían al
portavoz de Putin, Dmitri Peskov, en noviembre de 2021, al viceministro de Relaciones
Exteriores, Serguéi Riabkov, en enero de 2022,73 al embajador ruso en los Estados Unidos,
Anatoly Antonov, el 20 de febrero de 2022, y al embajador ruso en la República Checa,
Aleksandr Zmeyevski, el 23 de febrero de 2022.74

El 21 de febrero de 2022, Rusia reconoció oficialmente las dos regiones separatistas en el


este de Ucrania, la República Popular de Donetsk y la República Popular de Lugansk, como
estados independientes y desplegó tropas en el Dombás en un movimiento interpretado
como la retirada efectiva de Rusia del Protocolo de Minsk.7576 Las repúblicas disidentes
fueron reconocidas en los límites de sus respectivos oblasts de Ucrania, que se extienden
mucho más allá de la línea de contacto.77 El 22 de febrero Putin dijo que los acuerdos de
Minsk ya no eran válidos.78 El mismo día, el Consejo de la Federación autorizó por
unanimidad el uso de la fuerza militar en el exterior.79

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