Como Operar en Lo Sobrenatural - Manual

CÓMO OPERAR EN LO
SOBRENATURAL
Por la Dra. Candy de Maa
Universidad de Arquitectura Social
©Copyright Dres. Kees-Jan y Candy de Maa - Destiny Enterprises Int. LLC.

Para más información: info@uasuniv.com
www.uasuniv.com
Cómo operar en lo sobrenatural - Universidad de Arquitectura Social
CONTENIDO
1. Introducción a los dones del Espíritu Santo.

2. Los Dones de Revelación: Palabra de sabiduría.
3. Palabra de ciencia y conocimiento.
4. El don de discernimiento de Espíritus.
5. Los Dones de poder: Fe, sanidades y milagros.
6. Los Dones de inspiración: Profecía, dones de
lenguas y de interpretación de lenguas.
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1. INTRODUCCIÓN A LOS DONES

DEL ESPÍRITU SANTO
Introducción
El propósito de esta clase es conocer lo que son los dones del Espíritu Santo y proveer la
oportunidad a los estudiantes para operar en ellos.
Jesús anuncia la venida del Espíritu Santo, el Paracleto, quien estaría con nosotros, Jn. 14 -16.
El creyente necesitaría el Espíritu Santo para poder dar testimonio de Jesús, Hechos 1:8.
El Espíritu Santo capacita con dones espirituales a los creyentes para que ministre en lo
sobrenatural.
Podemos decir que los dones son herramientas sobrenaturales, para primeramente ser testigos
de Jesús y luego, para poder funcionar con eficacia en el llamado ministerial.
En ciertos círculos cristianos hay un rechazo a la manifestación de los dones del Espíritu Santo,
por el abuso y la mala ejecución de los mismos. En 1 Corintios hubo problemas en la manera
que la gente participaba en la Santa Cena, como también ocurrió con los dones del Espíritu
Santo, y no hemos dejado de celebrarla.
Es un mandato el hacerlo: hágase todo.... decentemente y con orden, 1 Cor. 14:39-40
1. Los Dones del Espíritu Santo.
Los dones del Espíritu Santo son mencionados en 1 Cor. 12. Son los “charismas” que el Espíritu
Santo operaría a través de los creyentes, conocidos como los dones o manifestaciones.
En Heb. 2:4 la palabra usada en el original para los dones del Espíritu Santo es “merismos” que
significa distribuciones del Espíritu Santo.
Un don es la habilidad divina que Dios da al creyente para moverse en lo sobrenatural. Los
dones del Espíritu Santo son dados por el mismo Espíritu Santo, 1 Cor. 12:11. El los reparte como
él quiere.
Los dones son recibidos por “gracia.” Rom. 12:3-6 y los debemos ministrar por gracia, Mat. 10:8
¨De gracia los habéis recibido, dad por gracia.¨ Son capacitaciones divinas e inmerecidas por
nuestra parte. Son habilidades gratuitas que Dios ha dado a los creyentes para que puedan
recibir y demostrar lo sobrenatural, aún teniendo debilidades y fracasos humanos.
2.Tipos de dones del Espíritu Santo.
1. Dones de revelación:
a. Palabra de sabiduría
b. Palabra de Ciencia o conocimiento.
c. Discernimiento de espíritus.
2. Dones de poder:
a. Don de fe.
b. Dones de sanidades.
c. El hacer milagros.
3. Dones de inspiración:
a. Profecía
b. Dones de lenguas.
c. Interpretación de lenguas.
C. Propósito de los dones del Espíritu Santo
Son muchos los motivos por los que la gente busca ser usada en lo sobrenatural: por la novedad
de recibir revelación, o ver el poder fluir a través de ellos, por fama, para beneficio personal, etc.
Necesitamos cuidar nuestro corazón para guardar la motivación correcta al querer ser usado por
Dios.
3. La motivación correcta.
1. Glorificar a Cristo
Jesús dijo que necesitábamos recibir el Espíritu Santo para ser sus testigos. Se trata de ser sus
testigos en esta tierra. Se trata de que la gente le vea a Él. Damos testimonio de su bondad, su
interés y cuidado por la gente. Jesús sigue operando en la tierra por medio de su Cuerpo.
Cuando la gente vea las obras que Dios hace por medio nuestro, glorificarán a Dios por ello. El
padre se goza cuando ve el fruto de lo que Jesús realizó en la cruz. Valió la pena el sacrificio de
Jesús, porque es de bendición. Pero, la gente no lo va a saber hasta que nosotros se lo
demostremos. Las señales que realicemos señalan a Jesús, quien ha hecho todo posible por
medio de su sacrificio.
Jesús iba a los lugares y ocurrían cosas. Los que viven en el espíritu ven ocurrir cosas por medio
de ellos. Las multitudes eran atraídas por las señales que Jesús hacía. Hoy en día ocurre lo
mismo. Necesitamos seguir con el ministerio de Jesús. El dijo: “Así como el Padre me envió a mí,
yo os envío a vosotros.”
El enemigo intentará hacernos desviar del propósito de dar gloria a Dios, ya que él mismo busca
el recibir gloria. Nos tentará a que hagamos lo mismo que le hizo a él caer de su posición con
Dios.
La gente sigue lo que ve, y si no nos cuidamos, podemos hacer mucho daño a los que nos
sigan. Pero si somos conscientes de que somos acaso quisieron poner representantes?de Cristo
y estamos para servirle a él, Dios no tiene ningún problema en darnos la unción que
necesitemos.
Ej. A Jesús en Jn. 6 lo quisieron hacer rey por los milagros que veían que hacía. Pero Jesús no lo
consintió.
Jesús nos advierte que muchos dirán que han echado fuera demonios, han hecho milagros, etc.
y Él les dirá “no os conozco.” No os conozco detrás del velo, en la intimidad. Pablo en 1 Cor. 3
dice que muchos edifican, pero que miremos cómo sobreedificamos. Podemos hacer cosas,
pero no quiere decir que lo hagamos con la motivación y actitud correcta.
Ej. Jesús nos enseña que cuando el siervo vuelve a casa, vuelve a servir a su maestro. ¡No nos
olvidemos de que se trata de servir a nuestro maestro!
Hechos 17: 28. En él vivimos. Nuestra identidad no está en todo lo que hayamos hecho, sino en
Cristo quien es la fuente de todo. En ´Él nos movemos y somos. Estamos escondidos en Cristo
(como en el escondite... buscamos a la persona y no la vemos). Nuestro deseo debe ser que la
gente vea a Cristo. Hacemos publicidad de Cristo.
2. Servir a los demás
Los dones son ministrados para el beneficio de los demás, 1 Cor. 12:7.
Jesús iba haciendo bienes por donde quiera que iba. Dios quiere que usted haga cosas de
provecho. Por eso, nosotros anhelamos los dones, no para tener una experiencia más para
nosotros, sino por el bien de la persona que va a sacar provecho de la intervención divina que
Dios estará realizando por medio nuestro.
Los dones del Espíritu no son para nuestro propio beneficio primeramente, sino para el
beneficio de los demás. Por lo que es esencial que tengamos actitudes y motivaciones de
humildad y servicio.
Eje.: El hablar en lenguas es para edificación, pero el profetizar (como los demás dones) son para
el beneficio de los demás, 1 Cor. 14:4.
Ej. Pedro lo dijo claro, ”lo que tengo, te doy.” Tenemos que dar lo que hemos recibido, Mt. 10:8.
Ej. Para ser de ayuda en un problema y poder traer consejo de Dios, necesitaremos la palabra de
sabiduría para que Dios revele la salida del problema.
No se trata de los shows, sino de que seamos conocidos por nuestro amor y servicio para con
los demás, 1 Cor.13. Por eso, Pablo escribió el capítulo 13 que habla del amor en el medio de los
capítulos 12 y 14.
¡Qué rico saber que Dios está con usted y que tiene influencia en Él! Sabemos mover hilos con
personas para conseguir cosas. De la misma manera, tenemos que saber que tenemos
privilegios con Dios y Él puede actuar por medio nuestro a favor de la gente, Heb. 11:6. El puede
cambiar toda circunstancia.
Oración: Cuida mi corazón Dios, que sea para que tú te lleves la gloria. Dame gracia para servir,
para hacerlo por amor a la gente.
3. ¿Qué puedo hacer para ser usado en los dones del Espíritu Santo?
Desearlos con pasión

Pedírselos a Dios.
Aprender lo que son, cómo se manifiestan y cómo crecer en ellos.
Mantenerlos vivos siendo conscientes de cómo pueden bendecir a otros.
Aprovechar las ocasiones que se nos presentan y usarlos en fe.
4. Mandatos acerca de los dones del Espíritu Santo:
1. No podemos ignorarlos, 1 Cor. 12:1.
Por no entenderlos, no estar informados, no haberlos visto operar, por no tener la experiencia.
Pablo da directrices de cómo operar en ellos, como lo hizo también con respecto a la santa
cena.
2. Tenemos que anhelarlos con deseo ardiente.
Celo: tener un gran deseo, ser celoso y pasión por tener posesión de algo.
1 Cor. 12: 31 “procurad, pues, los dones mejores.”

1 Cor. 14: 1 “procurad los dones mejores”
1 Cor. 14:5 “quisiera que todos profeticéis... porque....”
“ Procurad” en el original es con “celo”, es un gran deseo, tener celos de tenerlo, deseo ferviente,
no poder estar sin él. Es un celo sano, santificado.
“Yo quiero tenerlo, y no me quites los que Dios me ha dado. Tengo que tenerlo.”
Ej. Eliseo quería la unción de Elías.
No es la manifestación soberana del Espíritu Santo que de repente viene sobre nosotros. Eso
puede pasar y Dios es soberano. Sino que Dios desea que lo anhelemos, deseemos y que
tengamos pasión por la manifestación sobrenatural de Dios en nuestras vidas para ser sus
testigos. Dios desea ver nuestra cooperación y sentido de responsabilidad hacia Él y los demás.
Ej. No queremos que Dios nos use como usó al asno con el profeta, solamente como un objeto
para hacer su voluntad.
La persona debe desear el mover del Espíritu Santo en su vida.

Ej. Una vez recibido el poder hablar en lenguas lo ejercitamos cada vez que lo deseemos hacer.
De la misma manera ocurre al ejercitar los dones del Espíritu Santo.
Tenemos que desear con pasión los dones, los necesitamos para ser capaces de funcionar
sobrenaturalmente en este mundo natural. Así podremos ser testigos de Jesús, haciendo lo que
Él haría si estuviera presente. El deseo es una clave espiritual para recibir cualquier cosa de Dios
(Mr. 11:24).
4. Tenemos que mantener los dones activos.
“Te aconsejo que avives el don que hay en ti” 2 Tim. 1:6.
“Avivar” es el volver a encender o levantar del sueño. El avivar está basado en la voluntad propia
del individuo y no de la de Dios. La voluntad de Dios ya ha sido establecida en Su Palabra.
Pablo ya le había dicho antes:
“No descuides el don que hay en ti….”1 Tim. 4:14.
1 Tes. 5:19-20. “No apaguéis el Espíritu.”
Depende de la voluntad del individuo, no en la de Dios.
“No menospreciéis las profecías.”
El menospreciar en el griego significa hacerlo “nada.” El hecho que lo sabemos, pero no lo vamos
a hacer.” Entristecemos al Espíritu Santo cuando menospreciamos los dones y la profecía.
Tenemos que darle el lugar que se merece.
No debemos dar lugar al desaliento por los fracasos que tengamos, ni a la ofensa contra Dios
porque no hace las cosas cómo y cuando nosotros quisiéramos que las hiciera.
5. Tenemos que ejercitar los dones. Heb. 5:14.
Ejercitar: es hacer ejercicio. Poner en práctica los dones por repetición, haciéndolo vez tras vez.
Debemos aprender acerca de los dones y aprender de otras personas que se mueven en ellos.
Hay imparticiones de dones, Rom. 1:11.
Procuremos estar en ambientes donde los dones se manifiestan y son activados.
Activación: es un ejercicio práctico donde se le da la oportunidad al creyente de ejercitar los

dones en un ambiente de confianza. Es una manera de despertar, levantar, provocar y desatar
las habilidades divinas en los creyentes.
Los creyentes pueden ser activados en profecía, en ministrar sanidad, liberación, etc.Los dones
son dados por el Espíritu Santo pero son activados por la fe del creyente. Cuando se presente la
ocasión, la persona debe estar lista. la oportunidad se puede presentar en una cafetería, una
visita, cuando alguien llama por teléfono, etc.
Ej. La salvación es dada gratuitamente por Dios, pero no es activada hasta que la persona cree
en su corazón y confiesa que Jesús es Señor, Rom. 10:9-10.
Debemos buscar los dones, activarlos y perfeccionarlos.
Los creyentes deben ser enseñados también en el protocolo de la manifestación de los dones.
Debe existir libertad para poner en práctica los dones. Las personas deben compartir cuando
reciben algo.
Debe haber libertad para corregirles, tienen que ser maduros y no sentirse ofendidos.
6. Tenemos que usarlos en fe.
Debemos estar convencidos de su voluntad. Tenemos que usar los dones por la fe. Hay poder en
el nombre de Jesús, no es un nombre normal, sino que tiene autoridad y poder en Él.
Sin fe es imposible agradar a Dios. Para que ocurra algo, tenemos que hacer algo. ¡Láncese en
fe!
Heb. 2:3-4. Dios da confirmación por medio de las manifestaciones del Espíritu Santo.
Obstáculos más comunes:
a. Por temor de que Dios no vaya a confirmar lo que vamos a hacer. Muchas veces existe el
temor de cómo la gente vaya a reaccionar. Necesitamos admitir que somos vasos de barro, de
polvo y volveremos al polvo. Dentro está la gloria y podemos esconderla dentro del vaso. No
saldrá de éste hasta que hagamos algo. Nunca verás nada hasta que no estés dispuesto a morir
(perder el miedo a fallar) y tomar el riesgo.
b. Nuestras insuficiencias, debilidades y fracasos. Todos estamos en el proceso de perfección.

Dios no está limitado por nuestras imperfecciones. Él terminará la buena obra que ha
comenzado en nosotros. Lo que busca en nosotros es la voluntad y la diligencia para intentar
agradarle en todo lo que hablamos y hacemos.
7. Responsabilidad.
Somos responsables de ser testigos de Jesús. No podemos menospreciar, ignorar, descuidar….

los dones.
Tendremos que rendir cuentas de todo lo que hayamos recibido de Dios.

Eje.: Parábola de las minas y talentos, Mat. 25:14-30 y Luc. 19. Al que mucho se le ha dado
mucho se le demandará.
“Somos responsables del buen uso de los dones. “Cada uno según el don que ha recibido,
minístrelo a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios.”
1 Ped. 4:10
1 Cor. 14:32. “El espíritu del profeta está sujeto al profeta.¨ La operación del don está claramente
sujeto al profeta. Mucho depende del profeta en la manera que el don es manifestado, del
momento en el que se opere en él y de lo apropiada que sea su ejecución. No podemos hacer
lo que bien nos parezca con el don, sino que debe ser la colaboración del hombre con Dios.
Dios provee el don y el hombre lo ejecuta. El hombre es el mayordomo del don, y tendrá que
rendir cuentas a Dios por ello.
Por lo que, los dones no deben ser usados o no usados según bien nos parezca a nosotros, sino
que tenemos que seguir la guía del Espíritu Santo, quien nos da el don para beneficio de otros.
Tampoco lo podemos usar para nuestra propia ganancia.
Ej. Moisés y Aarón no santificaron a Dios. Num. 20:11,12.

Ej. Los discípulos quisieron hacer bajar fuego del cielo para destruir la ciudad, Luc. 9:51-55.
Ej. Pablo advierte de usar el don en el momento correcto, 1 Cor. 14:23, 29-32.
Conclusión:
Es nuestra responsabilidad tener el fuego y la fe avivada para operar en los dones del Espíritu.
Tenemos que ser conscientes de que tenemos el mismo. Espíritu que operaba en Cristo, Rom.
8:11. No tenemos una calidad más baja del Espíritu Santo, sino es el mismo Espíritu. Pero
necesitamos tener la misma pasión que Él tenía. Cuando le buscamos, le hallamos, pero cuando
somos pasivos, no experimentaremos nada de lo que él tiene para nosotros.
2. LOS DONES DE REVELACIÓN
1. Los dones de revelación.
1 Co. 12:8, 10. Por medio de la revelación divina podemos percibir, discernir, ver, entender,
escuchar, saber cómo Dios ve las cosas.
Los dones de revelación operan dando parte de la revelación de todo lo que Dios sabe. Él nos
revela en momentos determinados parte de todo su conocimiento. Al inicio no lo sabíamos
pero de repente ya lo sabemos. Dios revela lo que está oculto para nosotros, lo que nosotros no
sabíamos antes de que Él nos lo revelara.
Dios siempre habla, sólo tenemos que reconocerlo. Dios nos habla, solamente que tenemos que
estar sintonizados con Él.
Ej. Era tan normal que Samuel pensó que Elí era quien le llamaba.
Además de la revelación, la interpretación, la aplicación y el tiempo del cumplimiento de una

revelación son esenciales. Siempre debemos preguntar, ¿qué significa? Tenemos que crecer en
saber lo que significa la revelación recibida.
La revelación se manifiesta en distintas áreas: a nivel personal, en la intercesión, en la alabanza,

en la predicación, etc.
NOTA: Es muy importante entender que el uso de los dones de revelación no es para
impresionar a las personas con cosas que sabemos cosas de sus vidas sino para servirles, para el
beneficio de ellos. 1 Co. 12:7.
La revelación divina compartida a una persona va a resultar en que la persona sea consciente de
que Dios le conoce, se interesa por ella y está a favor de ella. La fe en Dios y apreciación por Él
aumentará en la persona que es ministrada con revelación divina.
2. Dios nos revela “parte” de todo el conocimiento que Él tiene.
Es importante resaltar que Pablo nos enseña que todo don de revelación, es parte de la
revelación de todo el conocimiento que Dios tiene, 1 Co. 13:9. La revelación recibida por
nosotros será solamente una parte de toda la información con relación a la persona o el asunto.
Una persona sólo no recibe toda la revelación completa. Esa es una de las razones por las cuales
es importante trabajar en equipo. Cada uno compartirá una parte y todos juntos harán que la
revelación sea más completa.
3. Dios sabe qué información y cuándo necesitamos recibirla.
Dios no siempre nos va a dar revelación sobre una persona o situación.
1. Puede ser que nosotros no estemos preparados para saberlo.
Ej. “Tengo mucho que deciros pero no podéis sobrellevarlo.” Jn. 16:12.
2. Puede ser que la gente con quienes la palabra está relacionada todavía no esté lista
para recibir la revelación.
¡No toda revelación que recibamos es para compartirla! Muchas veces, Dios nos da revelación
simplemente para que oremos, velemos, o para advertirnos de que tengamos cuidado. Es
importante saber que para poder llegar a ser amigo de Dios necesitamos aprender a guardar
Sus secretos.
¡No todo lo que recibimos, lo decimos! Existe un protocolo que hay que respetar para ministrar
con sabiduría, honor y respeto.
Ej. No podemos decir “Usted tiene cáncer”. Eso no se puede decir así porque le asustaría a la
persona. Quizás ella no lo sabe, le puede entrar temor y así, abrir una puerta al enemigo. Si
obráramos de esta manera, crearíamos un problema en lugar de ser de bendición.
Dios da revelación para animar, construir, impartir fe, ayudar... No se dice todo lo que nos viene a
la cabeza porque podemos destrozar algo o a alguien aunque lo que tengamos que decir sea
verdad. Siempre tenemos que obrar en un espíritu de levantar y edificar a la persona.
4. Cómo crecer en los dones de revelación.
No existe un sistema determinado para recibir revelación. Pero podemos hacer lo siguiente:
1. Desear recibir revelación divina

2. Pidiéndosela a Dios
3. Aprendiendo acerca de los dones
4. Estando en ambientes donde se manifiestan
5. Siendo activados en ellos (esto es para todos los dones).
6. Buscando el consejo de Dios, Is. 45:11. Tenemos que apartarnos para buscarlo, estar en
intimidad con Él para aprender a reconocer cuándo y cómo se comunica con nosotros, Sal. 27:4.
La gente profética esperará en el Señor y Él le hablará.
A Dios no le gustó que Su pueblo no le consultara y que fueran a otros dioses. Buscaban ayuda
en trozos de madera cuando Él es el único que sabe todas las cosas y todas las cosas por venir.
Jesús nos enseña que el Espíritu Santo es el espíritu de verdad y que nos guiará a toda verdad
(Jn. 16:12). Él nos hará saber las cosas que habrán de venir (Jn. 16:13), como el Padre le hacía
saber a Jesús todas las cosas (Jn. 15:15). El Padre, por medio del Espíritu Santo, tomará de lo de
Jesús y nos lo hará saber (Jn. 16:14).
7. Preguntando al Señor. ¿Qué opinas de eso? ¿Qué significa eso? Tenemos que aprender a
escuchar y consultar con Dios.
8. Fijándonos en cómo recibimos revelación. Es bueno meditar en cómo solemos recibir Palabra
de Ciencia, la Palabra de Sabiduría o el Discernimiento. Muchas veces el Espíritu Santo nos da
cierta revelación, de cierta manera. Piense, ¿Cómo se me suelen manifestar los dones? Por
medio de los sentidos, por medio de impresiones, por medio del fluir profético, al escuchar la
voz del Espíritu... Cuando sepamos identificarlo, sabremos reconocerlo más rápidamente.
9. Aprendiendo a recibir con la revelación, la interpretación y la aplicación. Muchas veces

veremos la Palabra de Ciencia y la de Sabiduría operando juntas. Es muy importante reconocer
que necesitamos saber qué hacer con la información recibida por medio de la Palabra de
Ciencia. La Palabra de Sabiduría nos ayuda a aplicar tal conocimiento correctamente.
10. Al buscar oportunidades para fluir con regularidad en los dones, Heb. 5:14.
5. ¿Cómo recibimos revelación?
Dios se comunica con nosotros de maneras muy distintas. Depende de nuestra intimidad con Él,
de nuestro carácter, trasfondo, el que busquemos oportunidades para buscar revelación, etc
Muchas personas piensan que han recibido algo de Dios, pero no están seguros que era Dios
dándoles revelación.
La gente experimenta que sabe algo, pero no pueden explicar cómo lo saben. Muchas veces lo
niegan por el hecho de que no saben cómo lo saben. Cuando es de Dios, no podemos explicar
cómo lo sabemos. Dios de repente da la revelación y en ese momento sabemos algo que no
sabíamos antes.
Tenemos que aprender las diferentes maneras en las que Dios nos habla. Incluso para profetizar
hay que cultivar y perfeccionar el don.
Maneras en las que Dios nos habla:
1. Por medio de una impresión: A veces, vemos a gente y nos vienen sensaciones, experiencias,
palabras, pensamientos, recuerdos de otras personas o situaciones. Eso ocurre porque hay algo
en esa persona que es similar, o está atravesando la misma situación o tiene las mismas luchas o
el mismo tipo de carácter, unciones, etc. Tiene algo como la otra persona, y por eso la
recordamos.
A veces son sensaciones físicas con un sentido físico o emocional.
2. Por medio de imágenes visuales: Algunas veces, podemos ver una imagen por medio de la
cual Dios nos quiere revelar algo.
3. Visiones: Es como si estuviera uno en un sueño, pero no está dormido.
- Visión interna: cuando alguien recibe una visión en su hombre interior.

- Visión externa: cuando alguien ve con los ojos abiertos, una escena de una película que la
tiene enfrente.
- Trance: Cuando los sentidos físicos de la persona se congelan y ésta recibe revelación de Dios.
Pedro entró en un estado de éxtasis, y luego recibió la visión, Hechos 10:10, 10-20. A Pablo le
pasó lo mismo en Hechos 22:17-22.
4. Por medio de los sueños. También se llaman visiones nocturnas. Dios puede dar revelación
por medio de un sueño. Debemos escribir la revelación antes de que se nos olviden los detalles.
Es bueno tener una libreta al lado de la cama para escribir los detalles del sueño.
5. Escuchando Su voz. La mayoría de las veces es como un susurro. En 1 S. 9:15-16 dice que Dios
habló al oído de Samuel diciéndole que Saúl iba a ser rey. A veces, Dios habla de forma audible.
Dios también nos puede permitir el escuchar a gente hablando dándonos revelación de lo que
están planeando. Ej. Eliseo sabía lo que el rey enemigo planeaba.
6. Por medio de los recuerdos. Dios nos puede hacer recordar algo que hayamos leído en la
Palabra, experiencias nuestras o de otras personas, con la cual identificamos lo que Dios quiere
decir o ministrar en una situación determinada. Dios también puede usar el recuerdo de
palabras proféticas o milagros del pasado, para identificar la similitud del caso y de lo que Dios
quiere realizar en ese momento.
7. Por medio de ángeles. Los ángeles son mensajeros de Dios. La Biblia está llena de ejemplos de
apariciones de ángeles dando información a las personas, Hechos 10:30. Los ángeles son
espíritus ministradores, Heb. 1:14.
8. Por medio de detalles cotidianos. Necesitamos fijarnos en los pequeños detalles que nos
ocurren. Nos perdemos de mucha información porque no estamos pendientes de lo que Dios
nos está mostrando por medio de la vida cotidiana.
Ej. Moisés y la zarza.
Ej. Chuck Pierce y Dutch, con lo de las llaves.
9. Estudiando la palabra escrita, la cual Dios puede usar como palabra Rhema.
6. Preguntas que debemos hacernos cuando recibimos revelación.
1. ¿Esta revelación es para mí, para otra persona o para el grupo?

2. ¿Esta revelación es sólo para que ore?
3. ¿Es información privada o pública?
4. ¿Debería compartir esta revelación primeramente con mis líderes?
5. ¿Esta revelación trae edificación y ánimo?
6. En caso de pecado, traición, engaño, etc. ¿Lo está haciendo la persona misma o se lo están
haciendo a ella? ¡Cuidado con sacar conclusión rápidas!
7. Palabra de sabiduría.
Definición:
Es la habilidad sobrenatural de recibir una iluminación específica de guía o consejo en un

momento determinado. La Palabra de Sabiduría es la palabra dada por Dios que puede tener
una aplicación presente o futura. No es un razonamiento humano sino de inspiración divina. Es
la revelación de los propósitos de Dios en cuanto a personas, situaciones, cosas o eventos.
No proviene de la sabiduría adquirida por las experiencias o conocimientos de la vida, tampoco

es la sabiduría adquirida por medio de la madurez cristiana. La Palabra de Sabiduría es una
palabra específica que no sabíamos antes de que la recibiéramos, ni podíamos haberla sabido
antes de que la recibiéramos.
La Palabra de Sabiduría da la salida o solución a un problema, da dirección, aviso de peligro,

advertencia, etc.
Cuando la Palabra de Sabiduría opera en relación a la Palabra de Conocimiento, traerá la

aplicación al conocimiento dado por Dios.
Nota: El don de Palabra de Sabiduría se recibe directamente de Dios en un momento

determinado, mientras que la sabiduría cristiana se cultiva a lo largo de los años. Por lo tanto,
una persona puede ser usada por Dios con en el don de Palabra de Sabiduría en un momento
específico y quizás no tiene la sabiduría de un caminar cristiano maduro. Los dones son distintos
al fruto. Los dones son regalos-dones dados por Dios, mientras que el fruto es cultivado
diariamente. Una persona debe ser aprobada en su fruto para que pueda ministrar
públicamente en los dones.
8. Tipos de Palabra de Sabiduría.
1. Palabra para dar dirección divina.
Únicamente los que tienen un reconocimiento en el oficio de profeta pueden dar dirección
divina cuando ministran.
Ej. Ananías recibió revelación exacta a donde ir, con quién hablar y qué decir, Hechos 9:10-11.
Esta es una de las revelaciones con más detalles que vemos en la Biblia.
2. Revelación de qué hacer ante una situación determinada, para dar la solución o salida a problemas o
situaciones.
Ej. José recibió la solución al problema de la hambruna que vendría, Gn. 41.
Ej. Dios le dio a Salomón la solución al problema de no saber quién era la madre verdadera, 1 R.
3:16-28.
3. Palabra de advertencia de un peligro inminente.
Ej. Pablo fue advertido por el Espíritu de que no recibirían su palabra y que debería salir de la
ciudad de inmediato. Hechos 22:17.
Ej. Dios advirtió a Abraham y a Lot de la destrucción de Sodoma.
Ej. Dios le dijo a Pablo que sobrevivirían la tormenta y que ninguno padecería, Hechos 27:21-25.
4. Para hacer saber el propósito de Dios a una persona o lugar, o confirmar un llamado divino.
Ej. Dios le dijo a Samuel que Saúl vendría y que le dijera que sería rey.
5. Para dar seguridad de un evento del futuro.
Ej. Jesucristo profetizó que resucitaría al tercer día.
6. Revelación de cómo encontrar la provisión que Dios tiene planeada.
Ej. Dios le dijo a Elías cómo sería mantenido durante la hambruna.

Ej. Jesús les dijo a sus discípulos dónde encontrar al asno en el cual Él iba a ir montado al entrar
en Jerusalén, Lc. 19:30-31.
Ej. Jesús le dijo a Pedro dónde podía encontrar el dinero para pagar los impuestos, Mt. 17:27.
Ej. Jesús le dijo a sus discípulos que echaran las redes a la derecha de la barca, Jn. 21.
7. Revelación de invenciones creativas y descubrimientos, Is. 45:3.
Ej. Noé recibió revelación de cómo construir el arca. Dios le dio todas las medidas y los
materiales con los que tenía que construirla, Gn. 9:24.
8. Revelación sobre los sucesores que ocuparán un cargo.
Ej. Dios le dijo a Elías quien iba a ser su sucesor, quien ocuparía su lugar como profeta, y quién
sería el siguiente rey, 1 R. 19:1-16.
Ej. Dios reveló a Samuel que Saúl había sido escogido como Rey en Israel. También le reveló
quién tomaría el lugar de Saúl cuando desobedeció a Dios (David).
3. PALABRA DE CIENCIA O
CONOCIMIENTO
1. Definición.
La Palabra de Ciencia es una revelación sobrenatural que Dios da a una persona por medio del
Espíritu Santo. Es un don del Espíritu Santo para recibir parte de la revelación de la mente del
Señor.
Es una revelación divina, instantánea, de solamente una porción de información de todo el

conocimiento que Dios tiene y de lo que él desea revelar en ese momento. Es la habilidad
sobrenatural de recibir revelación sobrenatural, de información verdadera, directamente de Dios,
y no por medio de medios naturales.
La persona que recibe esta revelación no puede haber sabido este conocimiento, lo hace
únicamente por revelación divina.
“Es la revelación sobrenatural de una realidad acerca de una persona o situación que no puede ser
sabida por medio de ningún esfuerzo de la mente natural, sino que es un fragmento del conocimiento
que Dios desea revelar por gracia concerniente a una persona o situación en particular”. (John
Wimber, Vineyard Fellowship, USA.)
La Palabra de Ciencia revela el pasado, el presente y situaciones escondidas u olvidadas. La

Palabra de Ciencia tiene la capacidad de atravesar apariencias humanas, falsedades,
simulaciones, engaños, etc. Es la revelación de la verdad. La Palabra de Ciencia da testimonio a
las personas de que Dios sabe todas las cosas, 1 Co. 14:24-25.
Muchas veces, Dios nos da revelación específica de una persona o situación para levantar la fe
para que se crea en él. Dios está demostrando que Él conoce la situación en la que se
encuentran, se interesa por ellos y quiere actuar para producir un cambio a favor de ellos. La
Palabra de Ciencia puede ser usada para traer salvación, sanidad, liberación, restauración,
necesidad de un milagro, etc.
2. ¿Cómo opera la palabra de ciencia?
El Espíritu Santo muestra en un momento dado, de manera instantánea, algo que no se sabía
anteriormente a la revelación divina. Puede ser algo que de repente sabemos, o que sentimos.
Sabemos que no tiene que ver con nosotros, sino que alguien está sintiendo o padeciendo esa
condición o situación.
La revelación de la Palabra de Ciencia puede ser recibida por medio de escuchar la voz de Dios,
una convicción definida, una impresión, un pensamiento, una visión, una imagen, un sueño, una
sensación en el cuerpo, etc. A veces, la Palabra de Ciencia hace que traigamos revelación a
gente en una congregación que están relacionadas por medio de algo común, por su oficio,
responsabilidad en la iglesia, negocios, hobbies, situaciones de relaciones, personas en conflicto
que Dios quiere sanar, personas con el mismo tipo de llamado, etc.
Uno sabe que sabe, aunque no sabe muchas veces cómo lo sabe, pero lo sabe, y sabe en ese
momento que ese conocimiento es por revelación divina.
La Palabra de Ciencia es inspirada por el Espíritu Santo (1 Co. 12) y activada por el creyente por
medio de la fe cuando se busca a Dios para recibir revelación, Ro. 12:6.
3. Tipos de palabra de ciencia.
• La Palabra de Conocimiento puede ser información concerniente a personas:
- Dios puede mostrarnos cosas del pasado o del presente de una persona. Dios puede mostrar
el porqué de las cosas, mostrando los detalles. Por medio de la Palabra de Ciencia, Dios nos
puede revelar las entradas de espíritus demoníacos, la causa y la raíz de las enfermedades, etc.
Dios puede dar revelación para traer sanidad del alma, liberación, tranquilidad a una persona o a
un grupo de personas.
- Dios puede revelar información en detalle sobre una persona, grupo, objeto o lugar.
Ej. A veces la revelación es tan aguda, que revela de una persona su nombre, donde vive, el
teléfono, el número de identidad, etc., como señal, para que la gente crea que lo que está
ocurriendo en ese lugar es sobrenatural. Él lo sabe todo y Él nos lo puede revelar.
- Dios puede revelar los secretos de los corazones de las personas, sus sentimientos, temores,
ambiciones, deseos, sueños, pasiones, pecados, etc.
• La Palabra de Ciencia Dios puede revelar pecado y engaño.
• La Palabra de Ciencia puede revelar el pecado cometido en secreto.

En este caso, es muy importante lo que se hace con tal información, a quién se le da y cómo se
da.
Únicamente personas con el oficio de profeta o apóstol muy reconocidos pueden traer
públicamente tal revelación. Cuando la revelación de pecado oculto es de una persona en
liderazgo, esa revelación deberá ser dada en privado. Las palabras que son compartidas deben
ser siempre para edificación y ánimo. Primeramente, deberá ser compartida con la persona, con
el propósito de la redención de la persona. Si la persona no tiene la actitud de cambiar y
restaurarse, tal información deberá ser compartida con su cobertura. Se necesita mucha
sabiduría para tratar estos casos.
Ej. Eliseo supo que Giezi le mintió, ocultando que se había apropiado de la ofrenda de Naamán,
2 R. 5:20-27.
Ej. Pedro recibió revelación de la mentira de Ananías y Safira, Hechos 5:1-11. Este suceso trajo el
temor de Dios en la iglesia primitiva.
Ej. Ahías recibió revelación del disfraz de la esposa del rey Jeroboam, 1 R. 14:2-3.
• Dios puede revelar detalles de circunstancias y problemas.
• Dios puede revelar la raíz de problemas y situaciones.

Ej. Dios reveló a Eliseo las estrategias del enemigo cuando lo hablaban ellos en secreto en la
tienda. El rey de Siria estaba furioso por tal revelación, 2 R. 6:8-12
• Dios puede traer Palabra de Ciencia para evangelizar. El puede mostrar que Dios sabe todas las cosas y se
interesa por la persona.
Ej. Jesús tuvo palabra de ciencia a la mujer samaritana, Jn. 4:18,19,29. La Palabra de Ciencia es
una herramienta poderosa para ver la misericordia de Dios que no viene a condenar, sino a
salvar el mundo. En este caso fue una herramienta de salvación para toda una ciudad.
Ej. Pedro recibió revelación de que 3 hombres le estaban buscando con un propósito. Hechos
10:19.
• Dios puede dar revelación acerca de lugares:
-Dios puede mostrar un lugar donde ha habido pecado o bendición. Se necesita esta revelación
para la cartografía, a la hora de sanar la tierra y hacer guerra espiritual.
-Dios puede mostrar cosas escondidas en lugares: tesoros escondidos, Is. 45:3.
-Dios puede mostrar el lugar donde encontrar algo o alguien perdido, escondido o robado. Dios
puede mostrar el hombre fuerte de un lugar, personas secuestradas, el lugar donde se ocultan
personas que hacen maldad, etc.
Ej. Dios le reveló a Samuel donde estaban las asnas perdidas del padre de Saúl, 1 S. 9.
Ej. Samuel supo donde se había escondido Saúl cuando Dios quería revelar quién iba a ser el
futuro rey de Israel, 1 S. 10:21,22.
Ej. Podemos preguntar, ¿dónde dejé el bolso que perdí?
• Dios puede mostrar lo que ha hecho, está haciendo o está a punto de hacer:
Por ejemplo, Dios puede dar detalles de la persona a la que acaba de sanar, está sanando o va a
sanar, liberar, salvar, restaurar, etc.
4. 5 Facetas en la Palabra de Ciencia que tenemos que considerar.
1. La pureza de la revelación.
La pureza de la fuente de conocimiento es muy importante. Tenemos que asegurarnos de que

la revelación que recibimos es de Dios y no del diablo, ni de la deducción o imaginación de la
persona que da la información. No todo lo que recibimos tiene que ser de Dios. Entonces, ¿de
dónde viene esa información?
En el mundo espiritual hay mucha actividad, el diablo conoce la vida de las personas también,
hay espíritus que les acompañan donde quiera que van. No toda revelación proviene de Dios. Es
muy importante estar alertas en el discernimiento para saber si una palabra proviene de Dios o
no. Hay que asegurarse de que la persona que trae revelación no opere por medio de un
espíritu de adivinación.
Las personas que operan en lo profético tienen que haber sido liberadas de todo tipo de
secuelas del mundo de las tinieblas: de ocultismo, adivinación, etc.
2. La interpretación de la revelación.
Las interpretaciones de revelación no se pueden hacer por medio de nuestras propias

conclusiones humanas. La interpretación tiene que ser hecha de manera sobrenatural para
entender lo que Dios está revelando.
3. La manera en la que exponemos tal revelación.
No se trata únicamente de decir una revelación que es verdad. Se trata de cómo decirla para
que la persona la reciba con un corazón abierto y buena disposición. Mucha de la aceptación de
la palabra de revelación dependerá de cómo la digamos, del tono de voz, de qué manera la
expresamos, delante de quien la decimos, en qué momento, etc. Se trata de edificar siempre a la
persona o a las personas que reciben la revelación. Somos llamados a traer vida en todo lo que
hacemos y decimos. La meta de la revelación es llevar a la persona más cerca del propósito de
Dios en su vida.
La revelación es para ayudar, para exhortar y no para hundir, ni humillar, Jn. 1:17. La revelación
divina opera en la dimensión de la verdad y la gracia. La revelación es en el espíritu de Cristo,
para redención.
4. Hay que esperar el OK de Dios para dar la información que Dios nos ha revelado.
Es importante considerar el momento en la vida de la persona para darle la revelación recibida.

A veces, recibimos revelación simplemente para que oremos, para que estemos alerta o velando
por la persona. No toda revelación debe ser comunicada. Tendrá que ser comunicada cuando
Dios nos dé la libertad de hacerlo ya que la persona estará abierta para recibirla.
5. El tiempo correcto y la manera adecuada de llevar a cabo la revelación.
No sólo basta recibir revelación aguda y la interpretación. Necesitamos la aplicación de la

revelación para poder ejecutarla con sabiduría y en el momento adecuado.
5. Combinación de la Palabra de Ciencia y los otros dones.
La Palabra de Ciencia y el Don de Fe:
Cuando la Palabra de Ciencia está en operación, la fe de la gente se levanta y tanto las sanidades
como los milagros comienzan a operar. Cuando nosotros recibimos revelación divina muy
certera, se levanta la fe y el don de fe se pone en operación. En ese momento somos
conscientes de que cuando digamos la palabra de revelación (Rhema), Dios hará el milagro. En
ese momento, sabemos que Él está totalmente involucrado a favor de la persona o situación, y
que Dios realizará el milagro. Es la palabra Rhema que se convierte en dynamis, cuando ésta es
pronunciada, Heb. 1:3.
La Palabra de Ciencia y el Don de Profecía:
La mayoría de las veces vemos que la profecía comienza con cierta revelación que Dios nos da
acerca de una persona o situación por medio de la Palabra de Ciencia. En muchas ocasiones
Dios nos revela el pasado o presente de la persona y luego, nos trae revelación del futuro,
haciendo que entremos en el Don de Profecía. Estos dos dones suelen operar juntos y se
complementan uno con el otro.
Muchas veces la palabra profética comienza con una visión, una palabra de revelación, una
visión, etc. Y luego, Dios añade más revelación por medio de otros dones o puramente por el
don de profecía.
La Palabra de Ciencia y Los Dones de Sanidades:
Dios puede dar revelación de las personas que van a ser sanadas y de qué condición. A eso se le
llama visiones de sanidades o Palabra de Ciencia para sanidad.
Dios puede decir por ejemplo, voy a sanar a las personas que tienen problemas en el hígado.
Entonces, nosotros decimos, ¿hay alguien que tiene problemas en el hígado? Dios nos puede
incluso dar detalles de esta persona o personas.
Dios lo revela con palabras, visiones o puede hacernos sentir el problema en el mismo lugar en
nuestro propio cuerpo.
Ej. Hay que ser obedientes cuando Dios llama una condición en específico. No hay que pasar la
oportunidad, si Dios da la invitación para sanidad no hay que dejarlo para después.
6. ¿Cómo podemos crecer en Palabra de Ciencia?
Le podemos preguntar cosas a Dios como: ¿Qué vas a hacer hoy? ¿Qué persona está lista para
recibirte en su corazón? ¿Qué personas vas a sanar hoy y de qué? ¿A quién vas a hablar hoy?
Dios nos lo puede mostrar de antemano. Podemos escribir la revelación en un papel para que
no se nos olvide. Cuando llegamos al lugar, veremos a las personas o mencionaremos lo que
Dios nos haya mostrado. Será confirmado y sabremos que Dios hará lo que nos mostró.
Por medio de la fe debemos subir el nivel en la recepción de revelación. Si queremos crecer en

agudeza, debemos hacer preguntas específicas al respecto. Podemos crecer en la certeza de la
revelación recibiendo información de nombres, condiciones, género, edad, la forma que están
vestidos, la apariencia, donde están sentados en la sala de reunión. Si estamos ministrando por
televisión, Dios nos puede mostrar dónde se encuentran en ese momento, (Ro. 12 , Mt. 9:29).
4. EL DON DE DISCERNIMIENTO DE
ESPÍRITUS
Es el conocimiento sobrenatural del origen o fuente de lo que vemos, escuchamos, sentimos,
olemos, percibimos. Es la habilidad de saber, qué espíritu está inspirando las palabras o acciones
de una persona o las que operan en un lugar. Es la revelación del espíritu o espíritus que estén
operando.
Discernimiento de Espíritus, 1 Co. 12:3. Pertenece al grupo de los Dones de Revelación del
Espíritu Santo, quien es el Espíritu de Verdad, Jn 16.
Discernimiento en el griego es diakrisis, que significa ¨juzgar.¨ Es el poder penetrar lo de afuera

para llegar al interior, y poder ver lo que hay dentro.
Podemos percibir que algo es bueno o malo, o podemos exactamente saber qué espíritu está
obrando.
No se trata de la percepción humana que podamos tener con la gente, o de la psicología que
hayamos podido estudiar, o nuestras experiencias del pasado, o de lo que podamos ver en el
exterior de la gente, etc. Se trata de la revelación divina que nos muestra el origen de la cosas o
personas, algo que nunca podríamos saberlo por nosotros mismos.
1. Existen diferentes tipos de espíritus.
Existen tres tipos de espíritus: el humano, el satánico y el divino.

En la Biblia se menciona la doctrina de Dios, la de los hombres y la de los demonios. Habla del
consejo de Dios y del consejo de los impíos. Necesitamos saber la fuente de las cosas para saber
qué recibir y qué rechazar. El enemigo es Padre de Mentira, él nos puede dar algo que parezca
bueno e incluso sea verdad, para que comencemos a creerle y luego, cuando estemos
confiados, intentará engañarnos introduciendo la mentira. También puede decir algo que es
verdad, pero con malas intenciones para llevarnos a acciones erróneas.
Ej. La tentación de Jesús en el desierto. Mateo 4.
Necesitamos el Discernimiento de Espíritus para saber aún cuando se hablan cosas que
parezcan verdad, la fuente y la intención con la que se digan. El discernimiento nos ayuda a
prevenir tales engaños.
2. ¿Cómo opera el don de Discernimiento de Espíritus?
Por medio del Discernimiento sabremos si algo es puro o no, y de quien procede. Si no viene de
Dios, nos dará un mal sabor de boca, una mala impresión, falta de paz, etc., e incluso nos pondrá
incómodos en nuestro interior, con una inquietud de que sabemos que algo no está bien,
aunque suene bien y parezca bueno.
Por medio del Discernimiento de Espíritus podemos saber si algo es de Dios, de la persona o del
diablo. Podremos saber la fuente de inspiración de una doctrina, pensamiento, actividad,
actitud, reacción, motivación, acto, inspiración, etc.
El Discernimiento de Espíritus es como si Dios nos dejara ver detrás de lo oculto, o de las
máscaras que la gente intente ponerse. Es como si Dios corriera una cortina invisible y
pudiéramos ver lo que hay detrás. Es como ver con los ojos de Dios y poder diferenciar la
atmósfera de Dios, la del diablo y la humana.
Ej. Jesús mostraba la diferencia cuando sus discípulos hablaban bajo distintas influencias. Lo
hizo con Pedro y con los dos discípulos a los que llamó Hijos del Trueno (uno era Juan). El les
dijo que no sabían de qué espíritu eran.
El discernimiento opera en momentos determinados. Si la persona supiera todos los orígenes

de todos los espíritus en el mundo viviría súper cargada. Gracias a Dios, Él no nos deja saber
todas las cosas para no sobrecargarnos. ¡Es suficiente con lo que nos deja saber!
3. La dificultad de operar en Discernimiento de Espíritus.
El discernimiento nos ayuda a percibir cosas que todavía no están manifestadas en lo visible. El
operar en Discernimiento no es fácil ya que Dios muestra que el fruto no es bueno cuando aún
no está maduro. Es difícil cuando todos los de alrededor aplauden a algo o a alguien, y la
persona percibe que no es de Dios y que hay un espíritu que no es puro operando. Le será difícil
el poder demostrarlo porque todavía no es visible.
Cosas para tener en cuenta:
Las personas que operan en discernimiento necesitan mucha sabiduría para saber qué hacer
con la información que están recibiendo. Necesitan paciencia para llegar a ver en lo natural lo
que está oculto o escondido.
La persona con Discernimiento de Espíritus puede parecer que tiene un espíritu crítico cuando
en realidad no lo es, sino que lo que está ocurriendo es que la persona está percibiendo algo
que está oculto todavía.
La persona que opera en Discernimiento de Espíritus puede sufrir rechazo de aquellos que no
quieren tratar su temas ocultos, Jn. 15:18-20. Las personas que no andan según la voluntad de
Dios, quienes no tienen buenas intenciones, o les gusta hacer cosas escondidas, que no andan
en pureza de pensamiento y acciones, o quienes tienen pecados ocultos, detectan quienes
pueden descubrirles. Ellos presienten que la persona que opera en discernimiento sabe de su
pecado, e intentan evitarla. No siempre la persona que opera en discernimiento de espíritus
sabe todas las cosas. La persona que opera en el discernimiento de espíritus tiene que estar
dispuesto a vivir con tal rechazo.
4. Hay diversas razones por las que las personas rechazan la verdad.
1. Por no ser descubiertos: hay gente que no quiere cambiar y dejar sus pecados,
sentimientos, pensamientos.
2. Por temor: hay gente que ha sufrido y no quiere dejar a nadie que destape el pasado que le
atribula en el interior. Ellos piensan que si lo sacan a la luz, les va a hacer daño.
3. Por vergüenza: cosas del pasado y del presente que les avergüenza, y creen que uno lo sabe
por revelación.
4. Por inseguridades personales.
PERO: cuando quieren salir de ello, saben que uno le puede ayudar. Esa es la tranquilidad que
podemos tener. El mismo espíritu que les habla de que uno ve esas cosas, es el mismo espíritu
que les muestra que pueden ser ayudados. El rechazo es cuando no quieren tratar con ello.
Cuando desean hacerlo, la actitud cambia porque tienen esperanza de que sí pueden ser
ayudados.
La persona que opera en el Discernimiento de Espíritus debe aprender a no cargarse con lo que
percibe. Tiene que aprender a separar las cosas, las cosas por las que debe interceder, las cosas
en las que tiene que tomar acción o no. Según la responsabilidad que Dios le dé o no al
respecto.
CUIDADO: Una de las tentaciones del enemigo, con una persona que es usada por Dios en el
Discernimiento de Espíritus es el tentarle para que opere en la carne con un espíritu crítico. La
persona que opera en el discernimiento tiene que cuidarse de esta tentación, para que pueda
operar en la pureza del don y no en las apariencias.
Debe evitar el caer en el juicio humano y las apariencias externas. Jesús nos dice que no
juzguemos según las apariencias. No debemos tomar la función de policía, porque ese no es el
espíritu de Jesús, Jn 1:17.
Cuando el don opera con pureza, veremos operando el espíritu de “verdad y gracia” de Cristo,
trayendo convicción, redención, motivación y esperanza, Jn. 1:17.
5. Diversidad de Discernimiento de Espíritus.
Hay diversidad de Discernimiento de Espíritus y no todas las personas que operan en el Don de
Discernimiento operan en agudeza en todas las áreas de discernimiento.
Veamos los distintos tipos:
1. Discernimiento de lo que hay en el corazón de los hombres, sus motivaciones, pensamientos, actitudes,
disposiciones de sus corazones, intenciones, engaños, etc.
Ej. Jesús sabía lo que había en el corazón de los hombres, Jn. 2.

Ej. Jesús le dijo a Natanael donde estaba sentado y cómo era su corazón, Jn. 1:47-48.
Ej. Pedro discernió los motivos erróneos de Simón en Samaria para recibir el bautismo del
Espíritu Santo, Hechos 8:23.
Ej. Hay una tribu que no deja pasar a nadie a su zona geográfica, si dicen que son cristianos y no
lo son, los matan. Lo averiguan por el discernimiento. ¡Vaya responsabilidad!
2. Discernimiento del sufrimiento y dolor en las personas. Is. 61.
3. Discernimiento de llamados y unciones en una persona, organización, grupo de gente o en lugares.
Discernimiento para percibir los dones redentivos.
Ej. De Josué se dice que tenía otro espíritu....
4. Discernimiento de una actividad espiritual del mundo de las tinieblas
Hechos 16:16-18. Alguien puede ser usado por Dios, y querer servir a Dios bien, pero, ¿de donde
se reciben las inspiraciones? ¿De Dios, del diablo, de una mente humanística, o egoísta?
Hay personas que en el pasado han estado involucradas en lo oculto, en adivinación. Quienes
todavía pueden estar en proceso de liberación y quizá sus inspiraciones no son del todo puras.
Hay que prestar atención a la pureza de la revelación, interpretación y aplicación de una

revelación.
Ej. Jesús reprendió a Pedro diciéndole, ¨apártate de mí Satanás...¨ Mt. 16:15-23. Jesús sabía que lo
que decía Pedro era inspirado por el diablo.
Ej. Pedro discernió que el espíritu que le estaba reconociendo era del diablo, Hechos 16:16-18.
5. Discernimiento de una actividad divina.
Cuando Dios está obrando.
6. Discernimiento de actividad angelical.
7. Discernimiento de los moveres de Dios.
El saber presentir, diferenciar, y aprovechar lo que el Espíritu está haciendo o a punto de hacer
en cierto momento.
8. Discernimiento de los tiempos de Dios. Lo que se llama la unción de Isacar.
9. Discernimiento de la dirección correcta o incorrecta.
10. Discernimiento para saber si algo que se haya dicho, va a ocurrir o no.
Ej. Una catástrofe, una alerta, un aviso.
11. Discernimiento de los espíritus que están obrando en una persona para liberarla.
Ej. Jesús discernió el espíritu que estaba obrando en el niño: espíritu sordo y mudo, Mc. 9.
12. Discernimiento de espíritus que operan en un cierto lugar, región, nación, etc.
Discernimiento de la operación de principados en áreas geográficas.
13. Discernimiento cuando alguien habla con inspiración y revelación divina.
Ej. Jesús supo que Pedro estaba hablando bajo la inspiración divina cuando dijo que Jesús era el
Cristo.
14. Discernimiento de espíritus en objetos.
Hay persona que perciben que un objeto ha sido usado por alguien que opera en lo oculto. Ej.
Regalos, souvenirs, ropa, etc.
5. LOS DONES DE PODER

1. Introducción a los Dones de Poder, 1 Co. 12:9,10.
Pablo agrupa 3 dones de poder en su lista de los charismas del Espíritu Santo de 1 Co. 12: el Don
de Fe, los Dones de Sanidades y el Hacer Milagros.
En toda la escritura vemos que Dios se manifiesta con poder para atender y cuidar a su pueblo.
En esta lista vemos 3 tipos de manifestación de poder con los cuales Dios desea usar a los
creyentes:
1. El don de Fe. Es cuando Dios nos da una palabra Rhema, una palabra para ahora, para este
momento y para este lugar. Esa palabra Rhema cuando es declarada se convierte en Dynamis,
que es poder, Heb. 1:3.
Por medio del Don de Fe Dios nos da un alto grado de fe, tal certeza en nuestro interior en un
momento determinado, que sabemos que cuando digamos la palabra Rhema, en ese momento
será hecha.
2. Dones de Sanidades. Dios tiene el poder de devolver la salud a las personas. Dios puede
sanar cualquier enfermedad declarada como incurable por los médicos. No hay imposibles para
Dios. Is. 53:4, Jesús murió por las enfermedades de todo tipo “por sus llagas fuimos curados.”
3. Operación de milagros. Es la operación del poder de Dios haciendo posible lo que es

imposible. Dios se involucra en el acelerar las leyes de la naturaleza, las sobrepasa, las deja a un
lado, o las anula. Este acto es reconocido como un acto sobrenatural. No hay limitaciones para
Dios. Dios es el Dios de los milagros. Lo vemos en toda la Biblia. Jesús y los discípulos iban por
todos lados haciendo milagros, prodigios y maravillas, Hechos 4:30, Heb. 2:4. Dios también
puede hacer todo tipo de milagros por medio nuestro.
Este término se deriva de dos palabras griegas: energía y potencia (que vienen de Dios). Este
don es literalmente, operando de poderes.
Ej. El hacha que Eliseo recuperó del agua.

Ej. El potaje que estaba contaminado.
Ej. Jesucristo convirtió el agua en vino.
Ej. Jesús y Pedro caminaron sobre el agua.
2. Dios puede realizar milagros en las personas.
-Dios puede hacer que una persona sea totalmente sana en un instante, sería un milagro de
sanidad.
Dios puede hacer que un drogadicto sea totalmente restaurado en un instante sin sufrir
ninguna secuela de su adicción.
-Dios puede realizar operaciones creativas en las personas dándoles órganos nuevos, piel nueva,
huesos nuevos, Dios puede convertir ojos de cristal en ojos verdaderos, etc.
-Dios puede hacer milagros de recreación. Dios puede hacer que piernas de inválidos que han
sido cortadas crezcan en un instante. Algunos considerarían este milagro como un milagro
extraordinario.
-Debemos desear y activar todos los dones por medio de la fe, al igual que los demás dones.
Estos dones de poder también operan muchas veces en combinación con los otros dones.
3. Fundamento bíblico.
Dios se revela a su pueblo como el Dios que interviene a favor de su pueblo. Él es el Sanador.
“Jesús llevó nuestras enfermedades y nuestras dolencias,” Is. 53:4.
Ya no estamos bajo la ley del pecado y de la muerte, Ro. 8:1,2. La enfermedad es operación de la
muerte en el cuerpo. ¿Queremos conocer la voluntad de Dios al respecto? Jesús iba sanando a
todos, Hechos 10:38. “El que me ha visto a mí a visto al Padre” Jn.14:6. No hay mayor revelación
del Padre que la que ha sido mostrada por medio de Jesucristo, Heb.1:1-3.
Ej. En Mateo 15:24-28 Jesús dice que estas bendiciones son el “pan de los hijos”. Es el derecho del
creyente porque Dios ha suplido esto en la plenitud de la salvación. “Por sus llagas fuimos
curados” (Is. 53:3). Esto ocurrió hace 2.000 años atrás y sólo tenemos que apropiarnos de lo que
es nuestro derecho. Es como cuando tomamos del pan de la mesa en casa. Es parte de la casa y
de lo normal. Para que un hijo tome pan, no se necesita pedir permiso. Es parte de lo básico del
hogar a lo que todos tienen acceso.
Nota: Que no nos ocurra como en el caso del hermano mayor del hijo pródigo, que se quejó
cuando su padre mató el mejor de sus animales para celebrar la vuelta de su hijo. El padre le
dijo, “¿no has tenido todo esto a tu acceso y podías haberlo hecho en cualquier momento?”
1. Jesús es nuestro ejemplo a seguir.
Mt. 9:35. Jesús iba por todos lados sanando a los enfermos. Jesucristo iba haciendo bienes a
todos los hombres, liberando y sanando a todos los oprimidos por el diablo, Hechos 10:38. La
enfermedad es una opresión del diablo y tenemos que tomar autoridad sobre ella; sobre todo
tipo de enfermedad y aflicción. Nosotros tenemos que hacer lo mismo que Jesús hacía, Él iba
haciendo bienes a los hombres.
2. Jesús ordenó a sus discípulos a que sanaran a los enfermos.
Jesús no sugirió a sus discípulos orar por los enfermos. Jesús les ordenó que lo hicieran. Les
enseñó a usar su autoridad para sanar. No vemos que los discípulos oraran para que Dios sanara
a la gente, sino que operaban en la autoridad que Jesús les había delegado:
a. Cuando Jesús envió a los 12 discípulos. Mt. 10:1 Les doy autoridad sobre los espíritus
inmundos y echar toda enfermedad y dolencia, vrs. 8. “Sanad, limpiad, resucitad, echad, dad”.
Jesús les dio la orden de que lo hicieran. El verbo está en imperativo, no es una sugerencia, es
una orden. ¡Haced algo por la gente!
b. Cuando Jesús envió a los 70 discípulos. Lc. 10:8,9. Jesús dice, donde entréis...sanad a
los enfermos y decidles: El Reino de Dios se ha acercado.
c. Cuando Jesús se dirigió a todos los discípulos en la Gran Comisión. Mc. 16: 17,18. Estas
señales les seguirán.....echarán a los demonios, pondrán las manos y sanarán.
Nosotros oramos a Dios para que Él lo haga, pero no vemos que Jesucristo o sus discípulos que
lo hicieran. Es nuestro deber el activar y operar en la autoridad que Dios nos ha dado para
hacerlo. Tenemos que buscar a Dios en secreto, pero en el momento de la necesidad, somos
nosotros los que necesitamos tomar dominio y autoridad sobre la situación, y operar en el
poder que Él nos ha delegado en su nombre.
Mr. 16:16,17. Id, predicad el evangelio, y sanad a los enfermos... Jesús lo pone en el mismo
paquete. Tiene que ser parte de nuestra vida diaria. “Id” significa: mientras que vas yendo… Éstas
son las señales del Reino.
Ej. Cuando Juan el Bautista preguntó si Jesús era el que tenía que venir, Jesús no le dijo ni sí ni
no, Él le contestó con las señales que habían sido profetizadas en Is. 61, las señales del Reino.
La gente vive con muchas necesidades de todo tipo, y muchos sufren de enfermedades, como
en los tiempos de Jesús. A los creyentes se les llamó cristianos por primera vez en Antioquía
porque se comportaban como Cristo. Como cristianos tenemos que reflejar el ministerio de
Jesús en la vida cotidiana.
3. Dones de sanidades, 1 Co. 12:9. Mt. 10:1; Is. 53:4.
Pablo habla de dones, en forma plural. Hay diversidad de enfermedades y diversidad de

unciones para sanar la diversidad de enfermedades y dolencias.
- Enfermedades y dolencias en el cuerpo.

Algunas personas tienen mejores resultados en las sanidades cuando oran por ciertas
enfermedades en vez de por otras, como el cáncer, enfermedades de los huesos, de los nervios,
etc. Aunque todos debemos buscar el crecer en gracia y en una fe pura, para ver sanidades de
todo tipo.
- Enfermedades y dolencias del alma, Is. 61:1-3.

Hay personas que son muy usadas por Dios en la sanidad del alma pudiendo liberar a la gente
del dolor, la aflicción interna. Estas personas también suelen fluir en Discernimiento de Espíritus
y Palabra de Ciencia.
Lc. 4:18-19. Jesús describe su ministerio al alma en este pasaje.
Hay dolor en el alma cuando hay una herida que se ha quedado abierta en las emociones, y
sigue sensible. Jesús desea sanar las heridas del alma. Podemos aprender mecanismos de
defensa para protegernos y defendernos para que no nos hagan más daño. Pero, lo que uno
puede vivir por dentro puede ser algo totalmente diferente. Jesús es el mismo ayer, hoy y por los
siglos. Él estaba en el ayer y sabe lo que ha ocurrido. Cuando Dios sana a una persona del alma,
a la persona ya no le duele más ese recuerdo. La gente sana suele decir: me acuerdo de lo que
me pasó, pero no me duele.
NOTA: Dios desea que seas una persona libre y no una persona sometida a los resultados de lo
que el enemigo haya traído a tu vida. Dios puede llegar a lo más profundo y sanar ese dolor para
que no sufras más. Dios luego, usará esas experiencias para ayudar a otras personas. Con el
consuelo que tú hayas recibido, podrás consolar a otros también.
- Sanidades milagrosas o milagros de sanidades. Hay sanidades que no son progresivas

sino que ocurren en un instante, delante de nuestros ojos.
- La sanidad puede ser un proceso. En una sanidad, Dios está reinvirtiendo el proceso de
la enfermedad y la persona queda sana. No necesariamente tiene que ocurrir instantáneamente.
Ej. Los 10 leprosos que se sanaron de camino a los sacerdotes.
Ej. El ciego que Jesús sanó, comenzó a ver a los hombres como árboles y luego, fue viendo
mejor.
4. Cómo operar en sanidades y milagros.
1. Tenemos que ser conscientes del poder que hemos recibido de Dios para sanar a los
enfermos y hacer milagros en su nombre.
2. Tenemos que atrevernos para que Dios pueda actuar con poder. Que no te paralice la
vergüenza o el temor de que ores y nada ocurra. Tu responsabilidad es operar en su nombre con
fe. Él hace los milagros. Nuestra parte es crecer en una fe más pura, mientras que vamos
obedeciendo en el mandato de hacer algo por la gente.
3. Tenemos que aprovechar las oportunidades que se presenten. Cuando la gente vea sus obras
le glorificará a Jesús. Dios obra por medio de sus hijos, a quienes Él ha puesto como testigos de
Él aquí en la tierra. Dios desea usar a sus hijos para mostrar su gloria.
4. Tenemos que tomar acción con fe. Pongamos las manos sobre los enfermos, reprendamos a
la enfermedad, o demos la orden de sanidad. Tengamos expectación de que algo va a ocurrir,
“pondrás las manos sobre los enfermos y sanarán.” El Espíritu Santo que está en nosotros es el
que hace la obra, Jn. 14:10. Según la potencia de Él, según la potencia de su poder.
Tenemos que reprender la enfermedad.
Tenemos que dar la orden al cuerpo para que sea sanado.
Tenemos que invitar al Espíritu Santo para que haga la obra.
5. Tenemos que dar la orden de sanidad en Intercesión si es un caso a distancia. Dios no está
limitado por la distancia.
Ej. Jesús oró a distancia por el siervo del centurión.
Ej. Jesús declaró la sanidad de la hija de la señora cananea, Mt. 15.
6. Demos siempre las gracias y la gloria a Dios.
7. No podemos medicar a la gente. Oramos por los enfermos, pero no medicamos a la gente.
No decimos, deja las pastillas. Si tú no eres médico, no tienes autoridad para medicar a la gente.
¿Qué pasa si la persona pierde su fe o da lugar al diablo y deja su medicación porque tú se lo
dijiste? Te harán a ti culpable de su situación.
5. Causas de enfermedades.
1. Por causa natural de desgaste.
2. Por el mal cuidado del cuerpo, por la mala nutrición, por abusar del esfuerzo físico, por la falta de
descanso, por no dormir lo suficiente, por estrés, etc.
3. Por espíritus de enfermedad.
Por espíritus de enfermedad y de aflicción, quizás por maldición, por idolatría, etc.
4. Por falta de perdón, por rencores, amarguras, etc.
Los médicos dicen que un 80% de las enfermedades son causadas por cuestiones del alma que
afectan al cuerpo. En estos casos, necesitamos discernir la causa de la enfermedad. La raíz de la
enfermedad se tiene que quitar para que no vuelva a aparecer la enfermedad. Por la falta de
perdón, perdemos los beneficios del Reino.
Ej. Muchas veces las úlceras son por falta de perdón.
5. Enfermedades generacionales.
Los espíritus de enfermedad pueden operar en una familia hasta la 3a y 4a generación.
6. Por medio del pecado, maldiciones, idolatría, etc.
7. Por temor a la enfermedad.
El temor a las enfermedades les abre puertas a las mismas. Tenemos que creer la Palabra que
dice que la salud es un derecho de hijo. La enfermedad es una enemigo y hay que tratarlo como
tal. Tenemos que ejercer autoridad y dominio sobre las enfermedades. Tenemos que conquistar
y no ser conquistado por el enemigo. Tenemos que buscar la sanidad y creer en los milagros.
NOTA: La sanidad o la liberación se puede perder cuando la persona abre las puertas al enemigo
por medio del pecado, del temor a ponerse enfermo de nuevo, por dejarse llevar por los
síntomas que le vengan, por confesar con su boca la enfermedad, por no cuidar su cuerpo, etc.
Jesús dijo en una ocasión: no peques más para que no te venga algo peor, Jn 5:14. Hay que
mantener la liberación y la sanidad.
8. Otras causas.
6. LOS DONES DE INSPIRACIÓN

En la lista de dones de 1 Co. 12 encontramos los 3 dones inspiracionales: el don de profecía, los
diversos géneros de lenguas y el de interpretación de lenguas.
1. El don de profecía
El don de profecía es uno de los 9 charismas (dones) mencionados en 1 Co. 12:10. El Espíritu
Santo es quien reparte este don, 1 Co. 12:10. Este don es como todos los demás, para provecho,
verso 7.
1. Definición:
El don de profecía es cuando Dios de forma regular revela su voluntad a una persona y ésta se la
comunica a otras. La profecía será una revelación del presente-futuro o futuro.
El espíritu de profecía es el espíritu de Jesús, Ap. 19:10. Jesús siempre intervino en las vidas de las
personas para mostrar el camino a seguir, la verdad que tenían que saber y la vida que podían
recibir, Jn. 14:6. La profecía revela el camino y la verdad, y produce vida en las personas cuando
la escuchan. La profecía es para edificación, consuelo y exhortación, 1 Co. 14:3.
2. Características de la profecía:
- La profecía es considerada por Pablo como el mejor don, 1 Co. 14:1.

- La profecía es para edificación, consolación y exhortación, 1 Co. 14:3.
- La profecía puede ministrar a muchas personas a la vez.
- La profecía puede producir una convicción profunda en los inconversos, 1 Co. 14:24.
- La profecía abre las puertas de los corazones de las personas al mostrarles que Dios les conoce
y se interesa por ellos.
3. Consejos de Pablo acerca de la profecía:
- Debemos procurar el profetizar, 1 Co. 14:1.

- No menospreciar las profecías, 1 Ts. 5:20.
- Profetizar conforme a la medida de la fe de cada uno, Ro. 12:6.
Aunque no todos tengan el don de profecía o son profetas, Pablo dice:
- Todos pueden profetizar, 1 Co. 14:31.

- Profeticen, pero en orden, 1 Co. 14:31.
4. La manifestación de la profecía:
a. Es cuando Dios mismo inicia la manifestación de Su revelación.

Dios de repente nos puede dar revelación de alguien o algo.
Cuando estamos en un ambiente de unción profética, es más fácil recibir revelación.
Podemos experimentar la unción profética cuando nos encontramos en la compañía de
profetas. Ej. Le pasó a Saúl cuando se encontraba con la compañía de profetas.
b. Cuando es iniciada por nosotros, al buscar revelación por medio de la fe, Ro. 12:6.
A veces, nosotros somos los que buscamos revelación de Dios preguntándole a Él para que nos
de revelación, y Él le hable a una persona.
Las personas comienzan a dar pasos de fe en la profecía al ser enseñados y activados por un
profeta, Ro. 12:6.
A veces, un profeta puede llamar a una persona del público que tenga unción profética para
que profetice por medio de la fe con el fin de lanzarlo en la activación profética, Ro. 12:6.
5. El don de profecía y el oficio de profeta:
El don de profecía es un don del Espíritu Santo y el oficio de profeta es un don ministerial
concedido por Jesús. Por medio del don de profecía Dios nos da información. Por medio del
profeta Dios no sólo da información más detallada sino también, da impartición de poder divino
para que esa palabra se haga realidad. La palabra del profeta es acompañada de poder. La
palabra profética del profeta puede dar dirección y corrección.
Muchas veces vemos la profecía en combinación con otros dones de revelación, como los
dones de Palabra de Ciencia y Sabiduría.
6. El cumplimiento de las profecías:
Dios revela por medio de profecías su voluntad para nuestras vidas. Pero nosotros tenemos
nuestra parte para que éstas ocurran:
- Al no menospreciarlas.
- Al prepararnos en esa dirección
- Al hacer guerra espiritual con ellas
- Al declararlas
- Al dar gracias y alabar a Dios por ellas
- Al interceder por ellas
- Al creerle a Dios, etc.
2. El don de diversos géneros de lenguas.
1. Definición:
El don de diversidad de géneros de lenguas es un mensaje inspirado por Dios para hablar a su
pueblo el cual se manifiesta por medio de lenguas. El mensaje en lenguas necesitará ser
interpretado para ser entendido por todos, 1 Co. 14:5.
El don de lenguas de 1 Co.12 no es para edificación personal sino para la edificación del cuerpo,
cuando hay interpretación, 1 Co. 14:5.
2. El hablar las lenguas del Bautismo en el Espíritu Santo.
El hablar en lenguas cuando recibimos el Bautismo del Espíritu Santo, es para todos los que
creen.
El Bautismo en el Espíritu Santo es un don que el Padre y Jesús dan: Jn. 14:16; Lc. 24:49. El
Bautismo en el Espíritu Santo es la Promesa del Padre, Lc. 24:49. El Bautismo del Espíritu Santo es
la promesa de Jesús, de que vendría Otro Consolador como Él, Jn. 14:1, 16.
El Bautismo en el Espíritu Santo es un revestimiento de poder, Hechos 1:8; Lc. 24:49. Dios añade
una dimensión de poder espiritual.
Fue dado a todos los discípulos por igual, Hechos 2. Los creyentes recibían el Bautismo en el
Espíritu Santo, tanto los gentiles como los judíos. Todos los recibían en la iglesia, Hechos
10:45,46.
En el día de Pentecostés Pedro explica que el Bautismo del Espíritu Santo es una promesa
ofrecida a todos los que creen, y a todos los que llegarían a creer, Hechos 2:39.
Cuando un cristiano recibe el Bautismo en el Espíritu Santo, comienza a hablar en nuevas

lenguas. Por medio de estas lenguas el creyente habla a Dios. Es edificado en su espíritu al
hablarlas, aunque no entiende lo que dice, 1 Co. 14:2,4. Estas lenguas pueden ser angelicales o
humanas, 1 Co. 13:1.
Cuando la gente hablaba en lenguas, los discípulos reconocían que habían recibido el Bautismo
en el Espíritu Santo:
Ej. Eso ocurrió en Pentecostés, Hechos 2., en la casa de Cornelio, Hechos 10:45,46, en Samaria,
Hechos 8:18,19.
El Bautismo del Espíritu Santo es un experiencia diferente al don de la salvación.

Los discípulos recibieron el Bautismo en el Espíritu Santo cuando ya eran creyentes:
-Jesús ya les había dicho que sus nombres estaban escritos en los cielos por creer en Él, Lc. 10:20.
-Ellos ya estaban limpios por la palabra. Jn. 15:3.
-Jesús ya les había dado el Espíritu Santo, Jn. 20:22.
-Cuando alguien recibe a Jesús como su Salvador, el Espíritu Santo entra en él y le da testimonio
de que es un hijo de Dios. Todos los creyentes tienen el Espíritu Santo en su interior, Ro. 8:16.
Pero, los discípulos tuvieron que esperar en Jerusalén hasta ser revestidos del poder de lo alto,
Lc. 24:49. Lo que ocurrió en el día de Pentecostés, Hechos 2.
3. El don de diversos géneros de lenguas de 1 Co. 12.
El don de diversidad de lenguas como don del Espíritu Santo es un don que no es dado a todos
los creyentes en general, sino que es repartido por el Espíritu Santo como Él quiere, 1 Co. 12:11.
1. El don de diversidad de género de lenguas es un mensaje inspirado por Dios para

hablar a su pueblo que se manifiesta por medio de las lenguas. El mensaje en lenguas
necesitará ser interpretado para saber su contenido, 1 Co. 14:5. No son lenguas que para la
edificación personal, 1 Co. 14:4 sino para la edificación del cuerpo.
El don de lenguas es una señal al inconverso, 1 Co. 14:22. Como señal sobrenatural de Dios al
usar a personas corrientes en un idioma que no conocen para hablar al pueblo. Por eso, es
necesario la Interpretación de lenguas para que puedan escuchar a continuación el mensaje en
la lengua conocida por todos.
El don de lenguas llama la atención de la congregación dejando saber que Dios va a dar un
mensaje, prepara a la congregación con expectación para la interpretación.
El don de lenguas y la interpretación es una demostración de los diferentes miembros de la

congregación trabajando juntos de manera sobrenatural. Es una combinación y colaboración
de dos dones diferentes manifestados públicamente.
2. El don de diversidad de géneros de lenguas se manifiesta a veces capacitando a una

persona para hablar en un idioma que nunca ha aprendido. Hay personas que han sido
capacitadas sobrenaturalmente para predicar el evangelio en lugares donde no había un
intérprete. Ellos comienzan a predicar por inspiración divina.
3. El don de diversidad de géneros de lenguas se manifiesta a veces capacitando a

personas para hablar en un idioma distinto con otras personas que también tienen este don. Ej.
En Argentina, en la iglesia de Roberto Scataglini.
4. Mandatos de Pablo en cuanto a la manifestación del don de diversidad de géneros de

lenguas:
El mensaje en lenguas debe ser interpretado para que la gente que lo escuche reciba
entendimiento. Si no hay interpretación no hay edificación, 1 Co. 14:5-20.
Cuando alguien da un mensaje en lenguas debe asesorarse de que haya alguien que interprete
las lenguas o él mismo debe traer la interpretación para que sea de provecho para todos, 1 Co.
12:7 y de beneficio para el cuerpo, 1 Co. 14:13.
3. El don de interpretación de lenguas
Es un don del Espíritu Santo y se encuentra en la lista de charismas (dones) del Espíritu en 1 Co.
12.
El Don de Interpretación es una inspiración divina para traer entendimiento a un mensaje divino
dado por medio del don de diversos géneros de lenguas. El don de Interpretación de lenguas
trae edificación al cuerpo.
El don de Interpretación no es traducción por haber aprendido un idioma, es un don de

inspiración por el cual Dios da la revelación de la interpretación del mensaje que se acaba de
dar. El don de lenguas siempre precederá a la manifestación de la interpretación de lenguas.
Las lenguas para el inconverso es una señal del cielo. Pero, sólo va a tener efecto en las personas
si la revelación divina se manifiesta con entendimiento. Este entendimiento es dado por la
interpretación de las lenguas, 1 Co. 14:21-25.
El capítulo 14 de 1 Corintios habla extensamente acerca de la necesidad de la importancia del

don de interpretación de lenguas.
Pablo explica claramente que debe haber un protocolo en la manifestación de los dones. Debe
haber orden, debe haber respeto por las normas del lugar donde se desea operar en los dones.
El espíritu del profeta está sujeto al profeta, 1 Co. 14:32.

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1. Introducción a los dones del Espíritu Santo.

1. INTRODUCCIÓN A LOS DONES

Es un mandato el hacerlo: hágase todo.... decentemente y con orden, 1 Cor. 14:39-40

1. Los Dones del Espíritu Santo.

2.Tipos de dones del Espíritu Santo.

C. Propósito de los dones del Espíritu Santo

2. Servir a los demás

Desearlos con pasión

4. Mandatos acerca de los dones del Espíritu Santo:

1. No podemos ignorarlos, 1 Cor. 12:1.

2. Tenemos que anhelarlos con deseo ardiente.

1 Cor. 12: 31 “procurad, pues, los dones mejores.”

Ej. Eliseo quería la unción de Elías.

La persona debe desear el mover del Espíritu Santo en su vida.

4. Tenemos que mantener los dones activos.

Pablo ya le había dicho antes:

“No descuides el don que hay en ti….”1 Tim. 4:14.

1 Tes. 5:19-20. “No apaguéis el Espíritu.”

Depende de la voluntad del individuo, no en la de Dios.

“No menospreciéis las profecías.”

5. Tenemos que ejercitar los dones. Heb. 5:14.

Hay imparticiones de dones, Rom. 1:11.

Procuremos estar en ambientes donde los dones se manifiestan y son activados.

Activación: es un ejercicio práctico donde se le da la oportunidad al creyente de ejercitar los

Debemos buscar los dones, activarlos y perfeccionarlos.

6. Tenemos que usarlos en fe.

Obstáculos más comunes:

b. Nuestras insuficiencias, debilidades y fracasos. Todos estamos en el proceso de perfección.

Somos responsables de ser testigos de Jesús. No podemos menospreciar, ignorar, descuidar….

Tendremos que rendir cuentas de todo lo que hayamos recibido de Dios.

Ej. Moisés y Aarón no santificaron a Dios. Num. 20:11,12.

2. LOS DONES DE REVELACIÓN

1. Los dones de revelación.

Además de la revelación, la interpretación, la aplicación y el tiempo del cumplimiento de una

La revelación se manifiesta en distintas áreas: a nivel personal, en la intercesión, en la alabanza,

2. Dios nos revela “parte” de todo el conocimiento que Él tiene.

3. Dios sabe qué información y cuándo necesitamos recibirla.

Dios no siempre nos va a dar revelación sobre una persona o situación.

1. Puede ser que nosotros no estemos preparados para saberlo.

4. Cómo crecer en los dones de revelación.

1. Desear recibir revelación divina

9. Aprendiendo a recibir con la revelación, la interpretación y la aplicación. Muchas veces

5. ¿Cómo recibimos revelación?

Maneras en las que Dios nos habla:

3. Visiones: Es como si estuviera uno en un sueño, pero no está dormido.

- Visión interna: cuando alguien recibe una visión en su hombre interior.

6. Preguntas que debemos hacernos cuando recibimos revelación.

1. ¿Esta revelación es para mí, para otra persona o para el grupo?

Es la habilidad sobrenatural de recibir una iluminación específica de guía o consejo en un

No proviene de la sabiduría adquirida por las experiencias o conocimientos de la vida, tampoco

La Palabra de Sabiduría da la salida o solución a un problema, da dirección, aviso de peligro,

Cuando la Palabra de Sabiduría opera en relación a la Palabra de Conocimiento, traerá la

Nota: El don de Palabra de Sabiduría se recibe directamente de Dios en un momento

8. Tipos de Palabra de Sabiduría.

1. Palabra para dar dirección divina.

3. Palabra de advertencia de un peligro inminente.

5. Para dar seguridad de un evento del futuro.

Ej. Jesucristo profetizó que resucitaría al tercer día.

6. Revelación de cómo encontrar la provisión que Dios tiene planeada.

Ej. Dios le dijo a Elías cómo sería mantenido durante la hambruna.