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Sor Juana Inés de la (La décima Musa )

Escritora y exponente del siglo de oro de la literatura en español. (nació


en Nueva España en la época del virreinato)
*Aprendiendo náhuatl con los esclavos de la Hacienda de su abuelo
*Aprendió a leer y escribir a los 3 años al tomar las lecciones con su
hermana a escondidas de su padre
*Descubrió la biblioteca de su abuelo y se enamoró de la lectura

Estudios universitarios e inicio de su vida religiosa


Cuándo quiso entrar a la universidad se disfrazó de hombre para poder
entrar a la escuela

1664 y 1665 entró a la corte del virrey Antonio Sebastián de Toledo


La virreina Leonor de Carreto se volvió una de sus más importantes
mecenas

Religión
En cuanto a su entrada a la religión dicen sus principales historiadores qué
ella no se hizo monja por que fuera muy creyente sino para escapar del
matrimonio qué la alejaría de la literatura y la haría servir a su esposo y a
sus hijos
Primero entró en la orden de Las Carmelitas pero la rigidez con la que se
manejaban la llevó a enfermar. Después entró a la orden de San Jerónimo
dónde la disciplina era más relajada
Tenía una celda llena con más de 4000 libros y dos sirvienta(s vivió toda su
vida ahí)
Estudiar
Escribir
Celebrar bertulias
Recibir visitas
Llegada del virrey Tomás de la cerda y Aragón
Recibió su amistad y protección
En especial de la virreina María Luisa Manrique de Lara

La forma de Sor Juana había llegado a oídos antes de conocerla


Intercambiaban correspondencia
La visitaba constantemente

En sus poemas se refiere a ella como Lisi


Hay más de 50 poemas dedicados a María Luisa

Yo adoro a Lisi pero no prometo qué Lisi responda mi finesa pues y juzgo
posible su belleza Asu decoro y mi aprehensión ofendo

Divina Lizzy mía, si me atrevo a llamarte así, cuando aún de ser tuya el
nombre no merezco, a esto no sabía es llamarte así, puesto que a ti te
sobran rayos Sí en mi pudiera haber atrevimientos, errores de la lengua
qué es lo que dicen imperio del dueño en El dominio parezcan posesiones
en el ciervo

Mi rey dice el vasallo


Mi cárcel dice El preso
Y el más humilde esclavo sin agraviar lo llama suyo al dueño

Cuando yo mía Te llamo


No pretendo que juzgues que eres mía sino
Sólo que ser tuya quiero

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