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PASAJE: 1ª.

Corintios 9:24-26

TEXTOS: Filipenses 3:14, 1 Timoteo 6:12, Apocalipsis 3:21, Santiago 4:7

ASUNTO: Alcanzar

TEMA: Alcanzar una meta

TITULO: El atleta que alcanza la meta.

PROPOSICION: El esfuerzo de un atleta para lograr su meta.

DECLARACION: El esfuerzo de un atleta para lograr su meta.

Los que corren en el estadio

El que lucha de todo se abstiene

Los premios, corruptibles e incorruptibles

Correr no como a la aventura, pelear no como quien golpea al aire.

Poner el cuerpo en dura servidumbre.

INTRODUCCIÓN: La historia real de un deportista de nombre Terry Fox: Fue un niño como todos
común y corriente su deseo desde pequeño era ser jugador de Bísquet Ball, pero por su estatura no
pudo ya que era de mediana estatura. En la secundaria estando estudiando su profesor le dijo que era
apto para ser un atleta ya que tenía madera y efectivamente así lo demostró compitiendo en varios
eventos y obteniendo varios triunfos.

Resulta que al paso del tiempo siendo ya un adolescente al conducir su auto por un descuido sufre un
accidente automovilístico y pierde una pierna a lo que lo lleva a un hospital en estado muy crítico. Para
esto lo atendieron los médicos, pero Terry Fox no se dio por vencido pese a la pérdida de su pierna, le
tuvieron que poner una prótesis y así empezó una nueva etapa de su vida contando con el apoyo de sus
familiares, médicos y un amigo inseparable que tenía. Así comenzó a prepararse para llevar a cabo el
plan que tenía como atleta. Cual va siendo la sorpresa que empezó a recorrer varios estados de Canadá
llegando a un promedio de 8300 kilómetros en un tiempo aproximado de seis meses , al mismo tiempo
que recorrería cada estado se fue haciendo popular y lo empezó a seguir mucha gente por diferentes
medios, fue haciendo campaña obteniendo apoyo económico de mucha gente y sumándose
personalidades como el presidente de Estados unidos en ese entonces el Papa de aquella época y
empresarios de toda clase , porque a pesar de su incapacidad ya venía padeciendo de cáncer, más sin
embargo no se dio por vencido y todo el dinero que se empezó a recabar que fueron millones de dólares
fue para crear asociaciones para atender temas de cáncer y ayudar a la gente que necesitaría de apoyo
económico para sus tratamientos.

Desafortunadamente este joven murió por varias complicaciones que le resultaron, pero dejó una huella
que queda como ejemplo para a todas aquellas personas que estamos completas más sin en embargo
ponemos obstáculos y miles de pretextos para no salir adelante. Este atleta cumplido su META que tenía
en mente y pese a todo lo logro, no cabe duda que este joven tenía un propósito y estaba sustentado
por DIOS.
ORACIÓN DE TRANSICIÓN: Analicemos, así como un atleta se prepara para lograr sus metas, los
creyentes debemos seguir ese ejemplo.

CUERPO:

I.- Los que corren en el estadio

a) En los maratones los participantes corren por un premio

b) Todo competidor sabe que estar en la carrera no es la garantía de que valla a ganar.

II.- El que lucha de todo se abstiene

a) Cuando se quiere bajar de peso, se abstiene de azúcar, grasas, etc.

b) Pelea la buena batalla de la fe, echa mano de la vida eterna, a la cual asimismo fuiste llamado,
habiendo hecho la buena profesión delante de muchos testigos 1 Timoteo 6:12.

c) Hay competencias que se llevan a cabo por etapas, es por ello que los competidores deben
enfrentarse día a día hasta ganar y vencer los obstáculos.

III.- Los premios, corruptibles e incorruptibles

a) Ganar un trofeo, con el paso de los años se irá deteriorando

b) Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he
sentado con mi Padre en su trono, Apocalipsis 3:21

IV.- Correr no como a la aventura, pelear no como quien golpea al aire

a) Si una persona se mete a un maratón sin entrenamiento, no lo va a lograr

b) Un ciego que trata de encontrar una con su bastón, da golpes al aire

V.- Poner el cuerpo en dura servidumbre

a) Un competidor se prepara de antemano para la carrera porque sabe que si no lo hace difícilmente
podrá ganar el premio.

b) Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros, Santiago 4:7

c) La servidumbre sobre un inmueble en beneficio de otro perteneciente a distinto dueño. El inmueble


a cuyo favor está constituida la servidumbre, se llama predio dominante; el que la sufre, predio
sirviente.

Conclusión: Nuestro entrenamiento espiritual debe ser constante. La oración, el ayuno, la meditación
de la Palabra son nuestros ejercicios espirituales. La competencia la enfrentamos día a día en el
mundo, los obstáculos se presentan a diario, pero mantenemos bien ejercitados es lo que nos va a
garantizar la victoria.

Aplicación: Correr la carrera se trata de volverse más como Jesús y crecer en la fe. Es un camino que
requiere compromiso, perseverancia y confianza en Dios

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