Está en la página 1de 2

UNIVERSIDAD PANAMERICANA DE El SALVADOR, C.A.

FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS


GUIA DE ACTIVIDADES
Asignatura: Principios Generales de Economía 1

ALUMNA/O : Raymundo Ernesto Guzmán Cruz NOTA


OBTENIDA
CARNET : CJSS230056
CARRERA : Licenciatura en Ciencias Jurídicas
DOCENTE: Licda. Geraldina Torres Alas

ENSAYO: ¿Cuál es la diferencia entre un bien y un servicio?

El principal propósito de este ensayo es desentrañar una de las interrogantes cumbres


en el entendimiento básico de la economía moderna ¿Cuál es la diferencia entre un bien
y un servicio?, dos conceptos fundamentales. Nuestro objetivo es ir más allá de las
definiciones superficiales y explorar cómo esta distinción se ha vuelto borrosa en la
economía moderna. Utilizaremos el libro "Principios de Economía" de N. Gregory
Mankiw como guía para entender estos conceptos y su interconexión.
Históricamente, se ha considerado que un bien es un producto tangible, como un
automóvil, algo físico, mientras que un servicio es una actividad, como la atención
médica o la educación, que implica una acción realizada por otra persona. Esta
distinción tradicional se ha vuelto cada vez más ambigua, debido a la creciente
digitalización y a la convergencia de bienes y servicios en productos híbridos.
Este ensayo se estructura en tres secciones. En la primera, definiremos los bienes y
servicios según su disponibilidad, tangibilidad y uso. En la segunda, exploraremos cómo
estos dos conceptos se superponen y complementan. Finalmente, en la tercera sección,
presentaremos una perspectiva innovadora que considera bienes y servicios como dos
caras de una misma moneda.
Definición: Tradicionalmente, los bienes son productos palpables como alimentos, ropa
o electrodomésticos, que pueden ser transferidos físicamente. Los servicios, por otro
lado, son actividades proporcionadas por otros, como la asesoría legal o la reparación
de automóviles. Esta distinción se basa en la disponibilidad de un producto o la
realización de una acción. Mankiw (2020).
Superposición y Complemento: La digitalización y la economía basada en la información
han difuminado estas líneas divisorias. Por ejemplo, la compra de un libro electrónico
combina la posesión de un bien (el dispositivo de lectura) con el acceso a un servicio (la
descarga del libro). Además, servicios como la transmisión de música en línea se basan
en la posesión de bienes físicos (servidores y equipos de transmisión). Esta
interconexión muestra cómo bienes y servicios pueden converger.
Una Idea Innovadora: En lugar de verlos como entidades separadas, deberíamos
enfocarnos en cómo se complementan. Los bienes pueden actuar como medios para la
entrega de servicios y viceversa. Por ejemplo, un automóvil (bien) puede ofrecer
servicios de transporte mediante aplicaciones de viajes compartidos.
En resumen, la distinción entre bienes y servicios es más compleja de lo que parece.
En la economía moderna, la interdependencia entre ambos es evidente, y su
convergencia en productos híbridos es cada vez más común.
Este análisis revela que la economía contemporánea nos exige adoptar una perspectiva
más amplia. En lugar de enfocarnos en separar los bienes y servicios, debemos apreciar
cómo se entrelazan y se complementan para crear valor económico (Mankiw, 2020).
Reconocer que los bienes y servicios son dos caras de una misma moneda económica
nos lleva a la conclusión de que la economía es un sistema interconectado en constante
evolución. La adaptabilidad y la innovación se convierten en herramientas esenciales
para navegar en este paisaje en cambio perpetuo.
Referencia:
Mankiw, N. G. (2020). Principios de Economía. Cengage Learning.

También podría gustarte